La Peligrosa Travesia del Pequod (Libre)

Ciudad central, era el nombre de la megapolis que Renamon escucho y que quería visitar a ver si había algo interesante que realizar. Quería recorrer el mar con ferry que hacia allí llevaba pero no tenía dinero para pagar el viaje. Recorriendo las playas una enorme fragata del siglo 18 con casi cuarenta metros de eslora estaba atracada en un puerto solitario, en el muelle numerosos Digimon ninguno más allá del nivel adulto parecían esperar por querer subirse a bordo de la nave. Se aproximó a mirar, en la proa del barco se podía leer el nombre del navío, se llamaba: Pequod. Le resulto familiar el nombre del buque pero no recordaba el motivo
-¡eh tú, el Renamon!-grito una voz grave y profunda. Renamon miro a la cubierta del barco, un Hookmon era el que le estaba llamando -¿Te interesaría ganar una buena cantidad de dinero a cambio de hacer un trabajito para mí?
-¿Qué trabajo es ese?-pregunto Renamon
-veras, hace muchos años un Whamon blanco me hizo muchos daños, anhelo con ansias darle caza para vengarme de una vez por todas-Respondió Hookmon. “no tengo muchas elecciones, si ese Whamon blanco resulta ser bueno, no puedo permitir que lo caze sin que yo haga nada para impedírselo “pensó Renamon
-trato echo, tienes a un nuevo tripulante-dijo Renamon subiendo de un salto al barco. Vio muchos cañones preparados para disparar, viro su mirada, docenas de enormes arpones parecían tener una afilada punta que podría atravesar las más duras carnes.
-¡estupendo, bienvenido a bordo del pequod camarada Renamon!-grito Hookmon riéndose profundamente.
-¿Cuándo zarpamos?-pregunto Renamon dándole la mano a Hookmon que ofreció su garfio para imitar una toma de manos.
-ahora mismo, me gusta lo interesado que estas por cazar a ese Whamon, o que sea por el dinero no me importa-dijo Hookmon terminando de darle la mano. Con una señal, las anclas fueron alzadas y los altos mástiles se cubrieron de velas, el barco impulsado por el viento en poco estaba ya en pleno mar.
Las aguas estaban tranquilas sin ninguna tormenta a la vista que pusiese al barco en alerta. Renamon estaba en proa mirando al horizonte, Hookmon le dio la orden de limpiar la nave, Renamon cogió un cubo lleno de agua y se puso a limpiar el suelo con una esponja, estuvo horas sacando brillo al suelo y puliendo los cañones de medio barco. A pesar de esto, mantuvo la calma y la esperanza de poder evitar la muerte de ese Whamon blanco. Por la noche, había dejado las cubiertas y todas las armas relucientes.
-termine-dijo Renamon cayendo agotado al suelo de la cubierta superior de la nave. Pensaba en echarse a dormir pero se percató de que el capitán Hookmon estaba en lo alto del castillo de proa, se acercó a él sin que se enterara de su presencia
-¿no se ha ido a dormir capitán?-pregunto Renamon
-¡No!, ¡tengo que darle caza a ese Whamon blanco en esta travesía, no puedo hacer nada más que eso!-grito Hookmon
-tanto rencor no es bueno-dijo Renamon
-no te preocupes tripulante, cuando ese demonio blanco de los mares haya muerto, yo podre deshacerme de todo este rencor que tantas noches me ha impedido dormir-dijo Hookmon –la primera vez que me enfrente a él, hundió mi barco y me causo estas heridas tan graves. Hookmon estaba paranoico y Renamon se alejó para poder dormir en la bodega del barco a la espera de que el Whamon blanco apareciera para poder salvarle

Yo me hallaba fregando platos en las cocinas del navío maldiciendo mi mala suerte.

-¡Maldita sea mi estampa! Y yo que juraba que había matado a ese hookmon... y encima me tiene aquí de chacha hasta que recaude el dinero necesario para pagar el barco que le estrellé... ¡Si lo estrellé fue porque el me atacó, viejo loco! No recuerda ni a quien presta sus barcos solo tiene ojos para esa ballena blanca... ni que esto fuera Moby Dick...-protesté yo mientras frotaba tanto un plato con la rabia que podía verle los circuitos internos, y pensar que en el Digimundo hasta los platos son electrónicos....

-Venga niñata, menos maldecir y más trabajar!! aun te quedan dos pilas de platos por lavar!- Me decía un orcamon.

-Vale, vale, ya voy!-dije yo mientras decía para mis adentros, -"Ya me vengaré ya... en cuanto regrese Gatomon, que por cierto... ¿dónde narices se había metido?"-pensé mientras seguía frega que te frega.

Gatomon disfrutaba sentada, en una de las vallas que recubrían  la cubierta y unían la estructura del barco a la quilla no muy lejos del castillo de proa pero si lo suficientemente alejada de los digimon que allí habían, de la brisa nocturna del mar. Descansando un poco del trabajo de cocinas donde seguía su compañera, lo que le permitió oir hablar al capitán con un Renamon que no había visto antes, quizá un nuevo recluta.

Gatomon le observó irse cuando dejó a Hookmon con sus pensamientos y decidió seguirle sin que el capitán se percatara de su presencia, pues podría mandarla de nuevo a cocinas o hacerle algo peor. Por suerte era una gata y sigilosa, lo que le permitió seguirle sin problemas aunque no se demoraría mucho, pues Ashe la estaba esperando y no iba a dejarle todo el marrón de los platos a ella sola.
La digimon esperó a que se acostara el renamon para presentarse ante él mirándole fijamente a la cara, como si estuviera en una pesadilla.

-Hola, me llamo Gatomon, también soy recluta de este barco junto a mi tamer, Ashely que sirve en cocinas para pagar una deuda con ese pirata. Solo he venido, a parte de por que eres muy guapo,- se sonrojó al decir esto- Es para prevenirte del capitán, debemos impedir que dañe a un digimon mítico por que sí, me ayudarás a impedirselo?-dijo Gatomon tendiéndole su zarpa en señal de acuerdo.

Renamon estirando sus agotadas articulaciones por el duro día en el que había tenido que hacer de señor de la limpieza por todo el barco, bajo por las escaleras descendió las cubiertas hasta la bodega de la fragata en la que no había ningún Digimon durmiendo que pudiese molestarle pues estando solo se encontraba todavía más cómodo.
Se acostó sobre unos sacos de arena con las manos sobre la cabeza, además de la incomodidad tenía que aguantar el balanceo del barco sobre las olas, se podría asegurar con completa certeza que no era el lugar más cómodo que durmió pero en peores condiciones había tenido que descansar desde su llegada al Digimundo y no le costó mucho conciliar el sueño usando el barco como si fuera una hamaca balanceada suavemente, echo un bostezo y se puso a dormir esperando tener un sueño tranquilo o eso esperaba hasta que un Gatomon le despertó “lo que me faltaba para rematar esta jornada” pensó Renamon algo molesto por haber sido despertado tan inesperadamente pero mostrándose completamente serio.
El Gatomon hablaba mucho y ni se inmuto cuando comento que le parecía algo guapo ni cuando escucho que tenía una tamer que estaba trabajando en las cocinas limpiando platos tratando de saldar deudas con el capitán Hookmon llegaba a poder hacer que su tranquilidad se viera quebrada teniendo el Digimon zorro una única cosa en mente “por favor que me deje echarme una cabezadita de una vez”.
-me uní a la tripulación de Hookmon para evitar que ese paranoico acabara con el Whamon blanco en caso de que su presa sea un Digimon que no merezca ser cazado-dijo Renamon poniéndose de pie viendo que Gatomon amablemente le estaba ofreciendo la mano, el zorro miro fijamente sin parpadear recordando que cuando hubiera sido humano habría dado la mano para unir fuerzas pero convertido en Renamon su personalidad había sufrido bastantes cambios dejando poco ya de la personalidad de Koga“yo ya no soy el débil humano llamado Koga, yo ahora soy el Digimon Renamon”.
-si quieres que me alié contigo y a esa humana conocida por el nombre de Ashley para ayudaros para evitar la muerte del mítico Whamon Blanco a manos de ese psicópata de capitán que está en lo alto del castillo de proa de este buque solo diré una cosa, quizás en el pasado hubiera aceptado la ayuda pero ahora yo trabajo solo-dijo Renamon mientras pasaba a la Gatomon de largo dejándola con la mano tendida en vano –yo me ocupare a mi manera de ocuparme de Hookmon para que el Whamon blanco no acabe muriendo arponeado, no me importa si tengo que acabar con la vida del paranoico capitán y hundir el Pequod obligando a su tripulación a usar los botes que he visto en la cubierta superior de estribor y babor para marchar hacia la costa más cercana
Renamon con paso firme y sin voltear la cabeza se marchó de la bodega, subiendo por barco hacia el castillo de popa

-Tú mismo, aunque dudo que un digimon de tu nivel pueda derrotar si quiera a hookmon... En fin si necesitas nuestra ayuda avisa-Dicho esto Gatomon se marchó pensando para sí misma, -" Ese digimon solo es guapo físicamente, pero es un engreído y un "revenío"-Pensó utilizando la jerga coloquial que solía usar su tamer, haciendo honor a sus orígenes españoles. Hechó una mala mirada al Renamon sin que él se diera cuenta por desperdiciar su ayuda y volvió a las cocinas donde encontró a su tamer tan cansada limpiando los últimos platos que casi se dormía de pie.

-Ashe, venga espabila que te quedan solo dos platos y nos vamos a dormir!-Gatomon los lavó por mí

-Dón... donde narices estuviste Gatomon?-dije entre un gran bostezo mientras mi digimon recogía mi chaqueta negra con el emblema de los US en el pecho, que había dejado yo por allí porque me daba calor y me la puso.

-Me retrasé demasiado, lo siento. Mañana te lo contaré ahora lo que más necesitas es dormir.... uaaahh! y yo también-dijo Gato sin poder evitar un bostezo.
Seguidamente tiró de mi mano como mero perro lazarillo y me llevó a un viejo camarote que me servía de habitación.

Dormimos mucho y despreocupadamente esa noche. Nos levantamos y nos dedicamos a deambular por el barco tras desayunar aprovechando que aun no nos pusieron tarea. Gatomon me contó todo lo que escuchó y su conversación con el renamon anoche.

-Vaya, y pensar que a mi me parecían tipos majos los renamon... Ese Hookmon y sus obsesiones... que te parece si inutilizamos sus arpones, Gato?-dije yo animada

-Mmm suena bien, asi al menos no dañaría al whamon blanco...-dijo Gato.

Sin que nos descubrieran nos bajamos a un almacén cercano a la sala de control, donde tenían  el arsenal de munición, allí estaban los arpones.

-¿Cómo los inutilizaremos, Gato?-pregunté yo.

-No te preocupes, mi primo Betsumon me enseñó unos trucos muy buenos jaja-dicho esto serró con unos arañazos la punta de los arpones y en su lugar puso un artilugio de madera sin punta que mantenía la forma de lanza y a su lado unos cachivaches como de broma, lo unió todo en una tela metalizada y cuando acabó parecía que los arpones no habían sido manipulados.

-Jajajja! cuando disparen los arpones ya verás que sorpresa se llevarán, nos echaremos unas risas!-dijo Gato mientras acababa de sabotear todos los arpones.

-Buen trabajo, Gato!-le dije yo

-Quién anda ahí!?- Al otro lado de la puerta unos divermon parecían haber llegado de su travesía submarina en busca de comida, y parecían chocantes al ver la puerta del almacén de munición abierta.

Gatomon y yo nos escondimos asustadas tras unas cajas de  balas de cañón, mientras el divermon entraba en la sala. Nos apretamos las manos y rezábamos porque no nos viera.

Renamon paso la noche durmiendo de pie en el castillo de popa, el fresco de la noche pudo soportarlo gracias a su pelaje que le mantenía caliente. Por el día no tenía trabajo que hacer y se mantuvo mirando el mar notando que el aire.
-¡bienvenidos a bordo!-grito el capitán a unos divermon que subieron al pequod –espero que hayáis encontrado pistas sobre la ubicación del Whamon blanco.
Los divermon susurraron al oído del Hookmon que pareció alegrarse bastante, Renamon no llego oír lo que dijeron. Hookmon agradecido pareció que les permitió bajar a por comida. De repente el cielo se nublo oscureciendo el día, las aguas del mar poco a poco se picaban todavía más balanceando violentamente la nave con grandes olas que iban creciendo poco a poco con fuertes truenos iluminando las nubes y fieros relámpagos cayendo cerca de la nave con la lluvia y grandes olas cayendo en el barco. Sujetándose a la barandilla, Renamon le pareció ver algo blanco a la distancia llegando desde ahí.
-¡que alguien coja el dichoso timón antes de que esta tormenta lleve a pique el pequod, el primero que logre llegar al timón y mantenernos a flote le doblo la recompensa!-grito Hookmon. Por las olas ningún Digimon conseguía subir al castillo de popa donde solamente estaba Renamon que a duras penas logro aferrarse al gran timón circular
-¡yo me ocupo!-grito Renamon girando el timón consiguiendo tomar el control del Pequod y que así resistiera el poder que el mar echaba sobre ellos. A pesar de ello las olas en vez de reducir su fuerza y tamaño hacían todo lo contrario, los impactos eran cada vez más grandes. Con un golpe de timón giro el barco hacia estribor para cabalgar las enormes olas que parecían venir más desde esa dirección
-¡cuidado camarada Renamon con esa ola que viene desde babor!-grito Hookmon. Una ola gigantesca, más alta que el barco se dirigía hacia ellos, si no se hacía nada rápidamente, se abalanzaría sobre el pequod destrozándolo. “espero que lo que voy a hacer funcione” pensó Renamon virando el buque a babor directamente contra la enorme ola que se abalanzaba hacia ellos
-¡estás loco!-grito Hookmon a Renamon que fuertemente mantenía el timón sin moverlo mientras se aproximaban a la ola que elevaba la proa del barco en cuanto estaban al pie de ella. El grado de elevación del barco acabo llegando a ser de más de 80 grados rozando los 90 grados de inclinación. Cañones, balas y todo lo que había en cubierta caía al igual que estaría pasando dentro del pequod, cayéndose todo lo que no estaría unido al buque. Ya en la cresta de la ola, la afilada proa pudo atravesarla, el agua se abalanzaba por toda la cubierta mientras pasaban a través de ella. Llego a Renamon sintiendo la enorme fuerza que esta tenia resultándole complicado mantenerse agarrado al timón. Se rompió el pomo que sujetaba siendo arrastrado por la borda mientras todo el barco estaba ya descendiendo la enorme ola. Se desconoce el tiempo que paso hasta que despertó flotando boca arriba en el agua con el tiempo calmado, el pequod no estaba por ninguna parte por lo que dedujo que estaría a varias millas de distancia. A su alrededor solo había lo que cayó por la borda del pequod como tablones de madera y algunos bidones. Inesperadamente ascendió, bajo el un enorme cachalote blanco le estaba sacando del agua estando sobre su espalda cubierta de cicatrices y arpones clavados, era el mítico Whamon blanco que tenía un tamaño bastante mayor al de un Whamon normal
-sobrevivir después de lo que le he lanzado al pequod es admirable-dijo el Whamon Blanco
-¿tu lanzaste esa ola?-pregunto Renamon
-así es, sentí que debía sacarte del agua y es lo que he hecho-dijo Whamon blanco –por favor entra en mi interior y para que podamos hablar mejor.
Renamon a rastras entro por el gran agujero por el que el Whamon respiraba para ir a su interior. Una vez dentro el gran cachalote blanco se sumergió hacia las profundidades

Gatomon y yo respiramos aliviadas puesto que por suerte el divermon no nos había descubierto. Pero antes de que pudieramos movernos de aquel almacén, el barco se empezó a bambolear.

-¿Qué es lo que pasa?-me asusté.

-No se pero, parece que nos atacan, subamos a cubierta, Ashe!-me dijo Gatomon

Cuando llegamos el barco se bamboleaba más y más yo no pude evitar echar el desayuno ante tanto meneo.

-Ash, serénate, no es momento para mareos mira!-Gatomon me señaló una ola gigantesca que parecía ir a sepultar el barco y el renamon manejando con todas sus fuerzas el timón para evitarla.

-Waaghh! esa ola nos va a comer! Gatomon saltemos del barco!-dije yo asustada sacando una de mis cartas.

-¿Estás loca? Sabes que soy un digimon de secano!-protestó Gatomon.

-No hay tiempo! CARD SLASH! Carta digimon! SWIMMON, ATAQUE C- PROTECCIÓN!!-Las patas de Gatomon se volvieron aletas al igual que su cola y la boca se le volvió igual que la de swimmon. Su piel se endureció y de su espalda salió otra aleta igual a la de swimmon a la cual me aferré y nos lanzamos al agua en el momento en que el barco se hizo pedazos.

Conseguimos ponernos relativamente a salvo agarradas a unas maderas puesto que el poder natatorio de gatomon no duraría demasiado. Para nuestra sorpresa el famoso Whamon blanco apareció ante nosotras.

-Impresionante...!-dije yo mientras gatomon nadaba a mi alrededor.-Ese es el renamon que me decías, Gatomon?-dije yo al ver al renamon flotando sobre la chatarra que quedaba del barco.

-Si, parece que al whamon le cayó simpático.-dijo Gatomon extrañada.

Poco después el Renamon entró por el agujero respiratorio del digimon justo antes de sumergirse.

-Nosotras también iremos. ¿Gatomon todavía puedes mantener la forma de swimmon un poco mas?-dije yo

-Si, supongo que lo justo para alcanzar a whamon, aguanta la respiración!-dijo ella tendiéndome la aleta  de la espalda para que me sujetara.

Tras agarrarme a ella nos sumergimos tras el whamon, esquivando los embates de su cola conseguimos colocarnos sobre su espalda y entrar al orificio de allí como había hecho renamon. Al menos allí estaremos a salvo tras ese naufragio que acabábamos de pasar.



Off: en el proximo post ya no seré tan rápida contestando puesto que no volvere hasta que estrene el ultimate en otro tema. Pero luego sigo va?

Renamon estaba en la tripa del gran Whamon blanco que se había sumergido a las profundidades del mar.
-¿sabes lo que le ha pasado al Pequod?-pregunto Renamon
-el Pequod, tras saltar la ola continuo hacia delante, actualmente está a pocas millas manteniéndose duramente a flote, seguramente antes de que llegue el día de mañana se terminara por hundir-dijo el Whamon
-tienes un gran aversión hacia ese buque por lo que veo-dijo Renamon
-su capitán, Hookmon quiso cazarme hace años por lo que hundí su barco en defensa propia, desde entonces ha pasado cada día buscándome, tratando de eliminarme en cada uno de mis encuentros, pero no ha podido lograrlo en ningún momento-dijo el Whamon
-¿quieres acabar con la vida de Hookmon?-pregunto Renamon
-no, yo intento hacer que claudique atacando su barco, pero insistentemente sigue yendo contra mí y por lo tanto veo inevitable que esto acabe con uno de los dos muerto-dijo Whamon
-el rencor de su interior hacia tu persona, a cubierto por completo su juicio inhabilitando por completo que pueda ver que otros Digimon están también sufriendo a causa de ello-dijo Renamon
-¿y que me puedes decir de ti pequeño, cuál es tu nombre?-pregunto Whamon
-mi nombre es Renamon, supongo que un Digimon de mar como tú no habrá llegado a ver nunca uno-dijo el Digimon Zorro
-ese nombre no pequeño Digimon, mi instinto me dice, que estas ocultando tu verdadero nombre-dijo Whamon
-ese nombre que lleve durante más de una década y media ya es cosa del pasado, un nombre no me importa, se nos conoce por nuestros actos-dijo Renamon
-tu quedras intentar hacer que ese nombre sea olvidado, pero nunca podrás olvidar lo que una vez fuiste en el pasado-dijo Whamon
-quizás-dijo Renamon respirando profundamente recorando cuando era Koga Savarin–ahora, lo mejor sería que fueras a por el pequod, es el mejor momento para poner punto y final de tu enemistad con Hookmon
-veras Renamon, durante el tiempo que hemos estado hablando, nade hacia el pequod y ahora lo tenemos justo enfrente a unos trescientos metros por encima de nosotros-dijo el gran cachalote
-¡pues venga, asciende a la superficie y acabemos con esto!-grito Renamon
-esta no es tu lucha Renamon, no entiendo el motivo que te empuja tanto a involucrarte en esto-dijo Whamon
-la muerte y la destrucción se han presentado ante mí en numerosas ocasiones Whamon, he perdido a muchos seres queridos por los que yo llore su perdida, al final acabe volviéndome alguien solitario y de frio corazón que rechaza la ayuda y la amistad de los demás por temor de perderles, por eso trabajo solo-dijo Renamon
-si echarte atrás será algo que no aras en esta situación, tuya será pues la decisión pequeño Digimon-dijo Whamon -¿subo para que dejes que este asunto entre Hookmon y yo finalice o te llevo a la costa?
-si vuestras contiendas no acaban hoy y ahora, Hookmon conseguirá otro barco mayor que tendrá el mismo destino que el pequod y reclutara a más Digimon que morirán siguiéndole a cazarte como ha pasado asta ahora y eso es algo que yo no puedo permitir que siga sucediendo-dijo Renamon
-tomare eso como que quieres que emerja del agua para que años de combates finalicen-dijo Whamon
-cuando este frente al capitán deja que hable con él para conseguir que tire la toalla permanentemente, me gustaría que esto no acabe con su muerte-dijo Renamon