Unsui ID

por **Unsui Rikiya** Vie Jun 16, 2017 8:09 pm

Tamer

-Nombre: Unsui Rikiya
-Sexo: Masculino
-Edad: 22 años
-Digivice: D-Arc

-Apriencia: Unsui es un chico de considerable altura, estando muy cerca del metro noventa centímetros (1.87 cm de altura) siendo de contextura musculosa pesando alrededor de noventa y tres kilogramos, con pelo rojo y ojos color ámbar. Su cabello rojizo lo mantiene ligeramente corto, con volantes y con dos mechones de pelo cerca de los lados opuestos de la cabeza cayendo sobre su rostro, así como patillas algo largas. Sus extremidades son largas, asi como los dedos de ambas manos, pudiendo coger en estas con facilidad aquello que desea. De tez clara y sin cicatrices, no es vanidoso sin embargo cuida bien de su cuerpo pues es lo único que realmente es solo suyo. Debido a su casi permanente ceño fruncido se han comenzado a manifestar pequeñas arrugas en su frente aun cuando trata de relajar el rostro, dándole un aire de estar molesto por algún motivo en todo momento pese a que no es de esa manera
Suele vestir la mayor parte del tiempo con una chaqueta negra de cuero con cuello y una camiseta blanca por debajo, llegando en ocasiones a colocarse una camiseta extra debajo de la blanca. Lleva pantalones vaqueros de dril de algodón azul oscuro sostenidos por un simple cinturón marrón, con una cadena de plata atada de la correa de su bolsillo, sus zapatos son de color negro. Unsui lleva otras piezas de joyería con su ropa, principalmente un anillo de plata y un collar en forma de estrella. También tiene un piercing en la oreja izquierda. Suele llevar consigo un cigarrillo electrónico asi como un paquete completo de “recargas” para el mismo pues sabe que fumar tabaco normal acabaría con su salud en algún tiempo pero no puede dejarlo tan de la nada. Cuenta con un celular ligeramente moderno, usando este principalmente como reproductor de música pues, dado que no le gusta rodearse de gente que no significa nada para el, rara vez lo usa para llamar o mensajear a alguien, usando este mismo en conjunto con unos audífonos de diadema que cubren sus oídos para evitarle el tener que escuchar a las personas cuando desea algo de tiempo “a solas”.
Spoiler:

-Personalidad: Unsui se muestra generalmente con una expresión de pereza y aburrimiento en el rostro y esto es porque pocas cosas le llegan a sorprender y/o emocionar en la actualidad, y si es que algo le impresiona lo mas que sacaran de él es un seco “ohh” pues no es la persona mas expresiva del mundo, serán pocas las veces que se le oiga hablar mas de la cuenta y exponer su punto de vista, sin embargo si es que llega a hacerlo lo hará de forma tal que su punto de vista sea comprendido lo mejor posible con una sola vez pues odia sobremanera tener que repetir las cosas. Suele mostrarse indiferente a las cosas que pasen a su alrededor, sin embargo la realidad es que presta atención a los mas pequeños detalles por lo que rara vez habrá que repetirle las cosas a menos que realmente este pensando en algo mas y eso solo pasara si algo le preocupa.
Aunque no lo parezca se preocupa bastante por aquellos que considera importantes para él, por lo que si llega a ver a alguno ser lastimado o herido, incluso una simple broma esto le llevara a molestarse y actuar de forma algo impulsiva siendo estas las pocas ocasiones en que dejara de lado su usual modo perezoso y tranquilo de ser para dar paso a su naturaleza mas honesta, un ser cruel y violento, incluso algo sádico sin temor a lo que pueda pasarle. Rara vez ofrece alguna disculpa, por lo que si lo hace aquel afortunado deberá sentirse bastante especial y muy agradecido de no haber sido golpeado por las molestias que a Unsui le causan el tener que admitir un error. Disfruta enormemente de los cigarrillos, sin embargo esta tratando de dejarlos. Pese a su forma mas honesta de ser, Unsui tiene un fuerte sentido de lealtad por lo que jamás traicionara a nadie cercano a el o a un superior, por esto mismo, si llega a saber de algún traidor o desleal dentro de su grupo no dudara en tomar cartas en el asunto, así como una traición jamás la olvidara.

-Historia: Seis años, esa edad tenía el pequeño pelirrojo cuando le fue dado su primer videojuego, quizás un momento que marcaría su vida para siempre y, si bien no era el juego más moderno ni el mejor, aquel tamagochi fue de las mejores cosas que tuvo en ese tiempo pues ¿a quién no le gustaba ver como crecía una criatura que criaba por su cuenta? Aunque fuese un ser digital que podría reiniciar una y otra vez Unsui paso semanas, meses jugando con aquel pequeño objeto entre sus manos hasta que este se descompuso, comprando por su cuenta algunos más para poder jugar con estos, al menos hasta descubrir en el internet un mundo completamente nuevo, miles y miles de juegos similares e incluso mejores que aquel primer tamagochi le fue mostrado por un par de amigos de la escuela primaria cuando tenía nueve años de edad, hasta ese momento había sido tal su obsesión con aquel objeto que sus padres habían comenzado a pensar en tomar acción en contra de dichas cosas, sin embargo el chico se dio cuenta de ello y puso un fin a su conducta, o al menos eso pareció en el exterior pues, por las tardes dedicaba gran parte de su tiempo libre a aquellos juegos, o al menos así fue hasta sus quince años en que dio el estirón más grande hasta el momento, alcanzando el metro setenta y nueve centímetros, siendo entre los alumnos de nuevo ingreso a la preparatoria algo similar a un fenómeno, y esto lo descubrió muy pronto pues ni bien comenzaron las clases una invitación a unirse con el equipo de baloncesto le fue dada, al principio el pelirrojo dudo un poco pues, hasta el momento, no había sido alguien muy atlético que digamos, sin embargo no podría negar que la idea era tentadora pues deseaba tener amigos, amigos reales, por lo que tras unos días el chico acepto, uniéndose a los entrenamientos del equipo aquella misma semana, dejando poco a poco de lado los videojuegos que hasta el momento le habían acompañado pues, desde entonces, ya no los necesitaría. Conforme su primer año de preparatoria pasaba su personalidad alegre se iba perdiendo, dando paso a una arrogancia propia de aquellos que se ven descubiertos por habilidades que desconocían, sin embargo esto mismo le fue alejando de la mayoría de amigos que conservaba de la primaria y secundaria, alejando también a la mayoría de los que tuviera en aquella escuela, siendo echado del equipo para su tercer año, comenzó a frecuentar zonas de la ciudad que nunca antes había visitado, reuniéndose con algunos alumnos problemáticos de la escuela, cerrándose a las personas al haberse estas cerrado ante él, adoptando costumbres y vicios que viera en otros sujetos que, como el, habían sido dejados de lado por sus amigos, comenzando a fumar a los 17 años, bebiendo de manera ocasional, aunque jamás llego a drogarse, siendo esa una línea que nunca cruzaría. Aquel cambio para mal de su hijo no pasó desapercibido por sus padres, quienes preocupados por él no tuvieron mejor idea que la de confrontarle, subiendo la voz, llegando a realizar amenazas que el pelirrojo no supo ver eran en pos de su bienestar, saliendo de casa, buscando vivir por su cuenta habiendo abandonado la escuela, “trabajando” como un simple pandillero con aquellos a quienes pensaba sus amigos. Por entonces su vicio por el cigarro había crecido bastante, tanto que un par de cajetillas desaparecían entre sus dedos cada semana. Sus padres habían estado buscándole por bastante tiempo y, cuando su padre por fin dio con él en lugar de una abrazo una cachetada le fue dada, misma que hizo enojar al pelirrojo, teniendo el impulso de regresarla como un puñetazo, sin embargo la expresión de su padre le detuvo, una expresión de dolor que jamás creyó ver en su rostro, ni bien pudo preguntarle qué pasaba cuando le vio desplomarse en el suelo pues uno de sus “amigos” había acuchillado a su padre por la espalda, en cuanto Unsui se dio cuenta de ello cayo de rodillas a un lado de su viejo pues si bien no tenían la mejor de las relaciones, él era su padre después de todo. Su padre se encontraba sumamente herido, perdía mucha sangre y estaban bastante alejados de cualquier hospital de la ciudad por lo que sabía que su hora estaba muy cerca, tomo del cuello de la camisa a su hijo y lo acerco para poder susurrarle al oído, lo que le dijo lo marco para siempre “No traiciones a la familia de nuevo, pues ella nunca te traicionara” eso y un par de palmadas en el rostro fue lo último que su viejo hizo antes de dejar caer su mano ya sin fuerzas, cerrando los ojos para siempre. Aquel fue el día en que perdió a su padre y en que gano algo que jamás perdería ya, la determinación de hacer las cosas de la forma correcta, por muy difícil que se vieran las cosas, por muy duro que todo pareciera, por muy solo que estuviera ya no sucumbiría, ya no sería débil ante la presión de las personas que solo buscaban aprovecharse de los demás, y lo más importante, no dejaría que nadie entrara tan fácil otra vez en su vida y, si es que alguien lograba entrar, estaría atento a cualquier indicio de traición de su parte, preferiría matar antes de dejarles aprovecharse de él. Tras el funeral de su padre el chico llevaba ya unos días viviendo nuevamente en su hogar, cuidando de su madre las primeras semanas para después reanudar sus estudios, o al menos entrar en ciertos cursos que le servirían para lo que deseaba hacer, para lo que de joven había tenido esperanza en convertirse algún día y, dado que no era estúpido sino solo había tomado malas decisiones, pronto pudo aprender lo básico en programación únicamente con pequeños tutoriales y lecturas que encontraba por internet, complementando esto con los cursos que estaba tomando, le tomaría un par de años para que pudiese terminar pues si bien no era ningún súper dotado, aquello se le daba fácil, habiendo dejado los estudios por el baloncesto y este por su propia idiotez, demostrando ahora que realmente tenia cierto talento para la informática, sobrepasando a aquellos que recientemente egresaban de sus escuelas para dedicarse a ello, ganándose algunas cuantas enemistades en el proceso, sin embargo esto para él no tenía importancia pues únicamente tenia algo en mente, cumplir su objetivo el cual no era otro sino hacer lo que aquellos a cargo de la creación del tamagochi lograron con él, cautivar mentes jóvenes, darles entretenimiento y una manera de pasar el tiempo sin perder lo que mas amaran pues, si hubiese mantenido su sendero tal y como iba algunos años atrás era sumamente probable que su padre aun estuviese con vida. En aquellos años comenzó a dejar el cigarrillo no solo por decisión propia al ver a tanto enfermo por la calle a causa de lo mismo, viendo un posible futuro suyo en ellos, sino también por petición de su madre pues está no deseaba sepultar a otro miembro de su ya muy reducida familia, razón por la cual el pelirrojo comenzó a dejarlo de lado, primero un par de cigarrillos, poco después una cajetilla entera hasta que comenzó a sustituirlos con aquel cigarrillo electrónico que le acompañaba ya a todos lados así como esas pequeñas recargas que, si bien eran algo costosas, contenían mucha menos nicotina reduciendo la dosis de aquella toxina que entraba en su cuerpo. Un par de años mas tarde cuando finalmente había comenzó un proyecto propio, presento una idea pequeña del mismo a cierta empresa, un proyecto en que mezclaba todo lo que había adorado de chico, el único tiempo en que fue feliz realmente. El proyecto era simple y a la vez algo complejo, partiendo de la idea original del tamagochi, incorporando al mismo detalles y situaciones que había experimentado en diversos videojuegos. La idea original pareció gustar y se le dio luz verde a dicho proyecto, comenzando a trabajar al instante en el mismo, ocupando la mayor parte de su tiempo en este, hasta aquella noche, noche en la que, revisando datos, códigos del programa y la aplicación en sí misma un mensaje un tanto extraño apareció en su pantalla, un mensaje enigmático que no daba mucha información sobre lo que trataba “¿Deseas entrar?”, por unos segundos se quedó observando el cuadro de mensaje ¿Cómo se había abierto? Salvo su cuadro de trabajo no tenía ninguna aplicación activa en ese instante. Busco la forma de cerrar aquel cuadro pero nada encontró, tras unos minutos desistió de tratar de cerrarlo y lo observo detenidamente ¿Acaso se trataba de alguna broma de parte de los demás trabajadores? Era una posibilidad. Se dibujó una muy pequeña sonrisa en sus labios y acerco el cursor a una de las dos únicas opciones, clickeo el “Si” y un segundo mensaje apareció “¿Estas seguro?”. Si aquello era alguna broma no estaba seguro de que buscaban lograr, una vez más respondió afirmativamente con el mouse y un último mensaje apareció en pantalla “Bienvenido al mundo digital” - ¿Qué demo… - no termino aquella frase, las letras en aquel último cuadro de dialogo se borraron y en su lugar una puerta apareció en el mismo, esta comenzó a abrirse lentamente y, cuando se abrió por completo, el pelirrojo fue succionado al interior de aquella ventana junto con todo lo que llevaba, un par de teléfonos [uno para el trabajo exclusivamente y otro para su familia y pocos amigos], su cigarrillo electrónico y un paquete de soluciones para el mismo, y claro su ropa, aterrizando poco después en lo que parecía ser una playa, quedando inconsciente por aquel “viaje”, ignorante ante el hecho de que había caído muy cerca de lo que parecía ser un huevo de tamaño mucho mayor a los que estaba acostumbrado a ver.

Digimon

-Tipo de Digimon:Guilmon
-Personalidad: Es sumamente curioso pues jamas estuvo antes en el mundo humano, cualquier cosa que Unsui toma o lleva en las manos Guilmon desea tenerlo también asi como saber que es y para que sirve, esto mismo ha hecho que el pelirrojo se llegue a fastidiar en mas de una ocasión, sin embargo sabe que su compañero es como un bebe y debe educarle para que no represente un peligro para otros pues, pese a su naturaleza amable y tranquilidad que le rodea, Guilmon es exactamente igual que él, tras esa apariencia calmada se esconde una criatura fiera que adora el combate, deteniéndose solo cuando su compañero humano se lo ordena, aunque esto podría no ser siempre el caso pues su instinto podría ser mas fuerte que su respeto por Unsui. Le gustan las cosas dulces asi como el clima calido, denotando aun mas su similitud con los reptiles, la carne también es de su gusto, caso contrario con las verduras, aunque a las frutas al ser dulces algunas no les hace mala cara.
-Apariencia:
Spoiler:

por Roku Ginshô Lun Jun 19, 2017 6:45 pm

Ficha aceptada

Pero por la inexistencia de separaciones en la ficha, y atendiendo a las normas de puntuación, se deberá hacer prueba de rol para practicar el uso de estos.

Y recordar que el uso de la informática no permite el metarroleo.

Tras esto, registrar la apariencia y rellenar el perfil con el enlace a la presente ficha, añadir la línea evolutiva, etc, etc.

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