Vuelta a la normalidad... o eso pensaba. [Privado Shou Kudirickimon]

Después de lo que parecía haber sido una incursión a una especie de mundo totalmente increible, con un monton de seres, me desperté de nuevo en mi cama. Me levanté de ella, y me encontré en la mesilla de noche que tenía el Digivice, ese extraño aparato. No sabía que era todavía, ya que me había desmayado mientras iba con... ¿Monodramon era? a algun sitio. Todo era bastante raro, y definitivamente seguramente no fuese nada, por lo que miré la hora, y vi que tenía que prepararme para ir al instituto. Salí de mi habitación, y como siempre, mis padres no estaban. No sintió nada en ese momento, ni un ápice de soledad, estaba acostumbrado a eso desde hacía años, desde aquel incidente en la escuela primaria. Desayuné, y me vestí con el uniforme de la escuela, que era de tonos oscuros uniformes, junto con una corbata. Era un fastidio eso, pero tenía que hacerlo. Cuando preparé toda mi maleta, salí fuera de mi casa, y cerré la puerta con llave.

Tardé algo menos de un cuarto de hora en llegar, y pronto las clases empezaron. La primera fue Historia, igual de aburrida que siempre. Estaba mirando por la ventana, cuando de repente vi como una especie de distorsion. Parpadeé varias veces ante aquello, pero no volvió a suceder, por lo cual pensé que tenía la vista nublada o algo por el estilo. Pronto tuve que volver a poner atencion en clase, y acabé olvidandome de eso.

Entonces llegó la hora de descanso, por lo que me fuí a la cafetería del instituto, y me compré un bocadillo. Poco después, salí a los patios interiores, donde me senté y empecé a comerlo. Pero pronto empezó a pitar algo en mi maleta, y cuando fuí a ver que era, resultó que estaba dentro aquel Digivice, y pitaba como una demoniaca bestia. Traté de amortiguar el sonido, y lo logré, pero parecía que había alarmado a un par de personas.

- Menudo dia tengo. - Murmuré para mi mismo, mientras volvía a meter aquel Digivice en mi maleta. Sin embargo, eso me hizo plantearme si aquel sueño en realidad no era un sueño, o algo así.

- ¿Habrá sido real? - Me pregunté, apoyándome en una pared y dejándome caer, para sentarme. Estaba claro que no era uno de mis mejores días.

No tenia nada que hacer el dia de hoy, simplemente me levante temprano cosa que era rara en mi y me vesti como siempre con las mismas ropas, realmente deberia tener como unos veinte pares de cada prenda, ya que aunque era algo desosdenado y no solia darseme bien poner la ropa a lavar nunca olia mal, mi pequeño apartamento se encontraba vacio y oscuro, como siempre estaba mientras dormia o no me encontraba alli, era lo que tenia vivir solo con todos los gastos diarios normales pagados, aun asi, un poco del sentimiento de soledad me golpeo mientras miraba mi dispositivo, ese aparato me habia hecho ver cosas que nunca habria podido siquiera soñar en muy poco tiempo, y ademas los dos espiritus que hay residian eran casi como mi familia, hermanos del alma por asi decirlo, desayune unos cuantos cereales mientras miraba las noticias de la mañana que siempre eran lo mismo, y tras terminar me puse a jugar un poco a un videojuego de ediccion coleccionista que habia conseguido de salida hacia a lo sumo 3-4 dias, la verdad esque no estaba muy interesado en este, era el tipico juego de disparos de darle a todo lo que se movia antes de que acabaran con el protagonista, el cual por algun motivo siempre era el unico capaz de salvar el mundo, o incluso la dimension donde residia, la verdad esque si no ubiese sido porque se trataba de una segunda parte no lo habria comprado ya que si tenia que elegir entre jugar a videojuegos o pasar unos dias en el mundo digital preferia la segunda opcion de calle, jugue un rato mas y volvi a poner las noticias, estaban hechando el parte meteorologico de aquel dia, el cual realmente no solia ser comunmente muy exacto, ya que podian ocurrir mil cosas e chafar el pronostico, en cualquier caso se comento que durante todo el dia habria sol con algunas nuves sin peligro de precipitaciones y asi era, solo hacia falta asomarse por la ventana un poco para darse cuenta de aquello, era un buen clima, bastante agradable, por lo que parecia que hoy seria ideal pasear un poco por la ciudad e aprovechar el tiempo.

No se, no se, creo que voy a merodear un poco por hay, si voy al parque tal vez lo poco nublado se despeje y haga mucho calor, por lo que mejor tener algo de sombra cerca. Apage todo bien, limpie lo que habia usado para desañunar dejandolo secar y me dirigi a la puerta, cerrandola levemente con la llave dando solo una vuelta envez de dos, la verdad nunca veia de mas aquel segundo giro que tenian muchas puertas de llave, aun no habia descubierto su verdadera funcionalidad, en cualquier caso me asegure de llevabar conmigo el dispositivo siempre asegurado para no perderlo y tenerlo a mano para usarlo por si era necesario e me marche hacia la calle, la gente pronto se mostro ante mi, o mas bien yo me mostre ante ellos, habia como siempre de todas clases, pero no habia muchas, lo que mas eran algunos estudiantes que al parecer para la hora que era habia hecho novillos riendo sobre temas que no me importaron lo mas minimo, pero no porque pasaba de ellos, sino porque no era quien para menterme en los asuntos personales de los demas, segui andando un rato mas sin rumbo fijo, la verdad, no sabia realmente a donde ir, solo estaba moviendome solo una serpiente, en zig-zag por las calles de aquel lugar.

Mientras reposaba en el suelo, miré la hora: Pronto tenía que ir a clase de nuevo, pero no me apetecía en absoluto. Era una clase que ya había aprobado, por lo que mi presencia allí era opcional, lo cual me dejaba con espacio a irme a casa, a estar solo de nuevo. Suspiré, y me levanté, para después salir de la escuela a las calles cercanas a esta. Mientras caminaba, vi a unos alumnos haciendo pellas, pero no me importó, ellos ya sabrían las consecuencias. Lo que si me extrañó fue ver a una persona con el pelo rojo, camiseta blanca y pantalones vaqueros recortados, que nunca había visto pasar por aquella zona. Pensó que no era nada, tan solo alguien que se acabaría de mudar o algo por el estilo, antes de notar algo... Era extraño, como si hubiese una presencia. Empezó a observar a su alrededor, y su digivice volvió a pitar de manera descontrolada.

- Esto es raro... - Dije para mi mismo, olvidándome de que había otra persona al lado que podía oirme. Entonces vi algo moverse por un callejon. Era una especie de casco antiguo, pero que se movía. Me dirigí hacia allí, y el casco se movió, como si supiese que iba tras él.

- ¡Espera! - Grité a aquella cosa, mientras seguía corriendo detrás de ella. Era rápido, pero no conocía las calles tanto como yo, que salté un par de barriles con los que pretendió aquella cosa colarse para seguir huyendo. Una persecución había empezado, y no iba a parar hasta que cogiese a aquella cosa.

Interesante, al parecer habia conseguido llegar asta almenos una localizacion conocida, era cerca de un instituto donde habia estado ya una vez, pero como habia dicho habia sido solo una vez y ya ni recordaba para que, aunque, realmente lo unico que me habia motivado a ir a los sitios durante el ultimo medio año era los casos realcionados con fenomenos paranormales que normalmente era siempre algo relacionado con digimon, por algun motivo. En cualquier caso el lugar realmente no estaba justo al lado mia, sino mas bien cerca, pero se podia ver mas o menos desde donde estaba, en cualquier motivo el lugar en poco se lleno de gente vestida de uniforme, mas de lo que ya estaba, sabia de buena gana que no era normal, ya que si ubiesen salido los que debian cuando realmente les tocaba salir se ubiesen llenado las calles de gente de uniforme mostrando un buen espectaculo, pero realmente solo habian unos pocos mas, pero uno me llamo la atencion, aunque iba vestido como los demas pero no era tan comun ver a alguien de un color de pelo tan rojo asi vestido, principalmente porque pegava mas el rojo oscuro que ese rojo tan natural, en cualquier caso si me di cuenta que me hecho una mirada, cosa ha la que realmente ya estaba acostumbrado, puesto que si eso me molestese no iria asi vestido, pero me daba igual la verdad, pero cuando el chico aquel miro hacia los lados como buscando algo y luego dijo algo que no llege ha escuchar bien por la combinacion del trafico y las voces de las otras personas, que estaban en una frecuencia un poco mas alta de lo normal para que se les pudiese escuchar bien, logico, no esque fuera una zona muy tranquila, y sin hablar un poco alto era casi imposible escuchar nada, pero vamos, ya cuando el estudiante aquel solto un grito y salio corriendo fue cuando me preocupe de verdad, principalmente porque en un primer momento pense que llamaba algun compañero de clases o alguna amiga, pero cuando se colo por un callejon por el que normalmente no se meteria nadie ni de dia fue cuando me preocupe, ademas, por algun motivo me vi forzado a seguirlo, con paso ligero si, pero no tan rapido, aunque cuando entre en el callejon e vi aquellos barriles y al tipo aquel correr hize lo mismo, los pase tranquilamente y ya al otro lado corri un poco detras suya pero si ir muy deprisa como para que aquel tipo viese que lo estaba siguiendo. Genial, esto es mas interesante que ir sin rumbo por las calles, aunque que raro, juraria haber notado una presencia conocida antes, enfin, sera mi imaginacion.

Seguí corriendo tras aquella cosa, pero de repente oí mas pasos, aunque no me di la vuelta por si perdía a aquella cosa, que según el digivice que pitaba como mil demonios, bien podría ser un digimon. Sin embargo, no sabía porque huía, quizas tenía miedo o algo parecido. Al final llegué a un callejón sin salida, donde parecía que no estaba aquella cosa, pero vi entonces parte de su casco sobresaliendo de unos cubos. Me acerqué poco a poco, y cuando estuve cerca, lo cogí con las manos.

- ¡Aaah! - Gritó aquella cosa, que parecía ser una especie de miniperrito con vestido de samurai encima. Sin embargo, cuando este abrió los ojos y me vió, extrañado por su reacción, se le iluminó la cara, para abalanzarse hacia mi y hacerme caer.

- Siiii, eres mi tameeer. - Dijo aquella cosa, mientras parecía que me abrazaba. Yo le di unas palmadas sin saber que hacer. Entonces giré mi cabeza y vi a aquel muchacho de antes, claramente este viendo una escenita bastante rara, y sobre todo que causaria un pánico bastante grande si se alarmaba.

- Esto... es solo una ilusión. - Dije intentando hacer que colase, aunque sabía que no colaría, ya que esa criatura se movia a mas no poder encima mia.

- Soy Ryudamon, encantado de conocerte, Caradryan. - Dijo Ryudamon, dando botecitos en mi pecho, lo cual me estaba sentando bastante mal. Yo estaba rezando para que se calmase y viese la situación, aunque parecía que el plan no iba a ser ese...

Cuando al final la persecucion se termino en el limite de una calle que no tenia mas salidas me quede mirando la situacion un poco a lo lejos y apoyado en una pared, el tipo ese se puso a mirar por el lugar, asta que casi por arte de magia de detras saco un peluche algo grande, que repidamente reconoci, era un digimon estaba claro, ademas ya lo habia visto algunas veces pero no sabia su nombre, pero la verdad esque me hizo gracia, todos los digimon parecian peluches mas o menos grandes en esa etapa o las anteriores, y por su apariencia e lo que sabia podia sospechar que era un rookie, aunque tal vez con esa armadura era un champion, en cualquier caso lo digimon normalmente al tener tantas formas y etapas de un solo digimon podia ser cualquier cosa. Jajajajaja, asique era eso lo que habia notado, genial, haber que sucede, tal vez este sujeto sea un tamer o.... haber. La situacion fue desarrollandose muy comicamente, primero el digimon solto un pequeño grito cuando este lo saco de entre detras de los cubos de basura que alli habian, para luego trasmitirme aunque no directamente, que era lo que estaba sospechando, me posicione normalmente y me acerque un poco a la vez que el tipo ese que parecia no haberse alarmado tanto por ver un digimon me decia que era una ilusion, la verdad esque me dejo sin palabras, comunmente la gente cuando veia por primera vez a un digimon se asustaba o tenia reacciones bastantes curiosas, pero tanto como para intentar que otras pensaran que eran fantasias, no encontraba las palabras para decir nada en ese momento, pero por suerte aquel digimon que se presento a su tamer como Ryudamon dijo el nombre de este, Caradryan, la verdad esque no queria ser descortes ni nada pero ya que tenia un dato importante recibido de forma indirecta tenia que confirmarlo, ademas de saber el porque de que este habia actuado asi, parecia ser solo dos posibilidades, o que conocida de antes a los digimon, o que simplemente no era alguien que se impresionese asi como asi. Bueno bueno, conmovedor encuentro, enfin ya puestos, Caradryan no veo tengas la necesidad de preocuparte, se lo que son los digimon. Saque mi dispositivo y se lo enseñe dandole un par de vueltas en el aire lanzandolo con una mano, quizas mis palabras no habian sido, ni de lejos las mejores que se podian haber usado, pero la verdad esque lo dije todo sin pensar, solo esperaba que Ryudamon o Caradryan no se molestaran por eso, igualmente tampoco era para tanto, igual ya habia conocido a mucha gente distinta asique era un poco dificil que me sorprendiera con cualquier acto, aunque si todos eran como el anterior, si que seria algo nuevo.

Al parecer ese chico si que sabía lo que eran los digimon, lo cual alivió enormemente mi tensión en ese momento, pero pronto tuve que levantarme, ya que los botes de Ryudamon estaban empezando a hartarme un poco. Me levanté, y me sacudí un poco el polvo del suelo, para entonces ver el digivice que tenía aquel chico. Era distinto al que tenía yo, que lo saqué y lo enseñé, sin saber muy bien que hacer.

- Me alegro de que alguien lo sepa. Uno estaba empezando a pensar que lo que tuve anoche era solo un sueño. Acabé en una especie de ciudad volcánica o algo asi, tuve que escapar de una hamburguesa gigante con una especie de... ¿digimon dijiste? dragon y una especie de liquido amarillo llamados Monodramon y Nunemon, y tuve que mandar para abajo de una cuesta a otro par de digimon. Y cuando ibamos a algun sitio Monodramon y yo, me desmaye y volví a mi cuarto, pero con este aparato llamado Digivice. Por cierto, ¿como te llamas? - Dije todo eso de forma seria, aunque mi cara era todo un poema a todo lo que me estaba pasando. Mientras tanto, Ryudamon empezó a dar vueltas alrededor de aquel chico de pelo rojizo, olfateandole, pareciendo buscar algo.

- ¿Donde esta tu digimon? - Preguntó Ryudamon, curioso. Entonces me di cuenta de eso, él no tenía digimon. ¿Estaría oculto o no estaría con el ahora mismo? Eso era raro, y no sabía exactamente en que. Definitivamente, tenía el cacao en mi cabeza mas grande de la historia.

El tipo aquel llamado Caradryan al final abandono su postura, incorporandose y sus pirando a la vez, mientras que se espolsaba para al fin mirar seguramente al dispositivo se que se encontraba en mi mano, parecia que sabia lo que era ya que casi a la vez que miro saco el suyo, un modelo IC que permitia usar digisoul, la verdad esque menos por el modelo del mio no entendia mucho los demas, la mayoria servian para hacer algo muy especifico, pero realmente todos podrian tener la misma funcionalidad al mismo tiempo, ya puestos era lo mas logico, todos tenian la forma de hacer evolucionar al digimon de una manera u otra, y menos el que se usaba para pasar cartas, los demas permitian poca cosa mas que eso de evolucionar, como el mio hacia sacar los spirit y pelear como un digimon a una persona era algo completamente aparte. En cualquier caso Caradryan empezo a hablar y ha decir que se alegraba de que lo supiera ya que al parecer habia estado en el mundo digital y que pensaba que era un sueño para finalizar en la pregunta de mi nombre, el cual realmente tenia que haber dicho desde un principio como acostumbraba, pero se me olvido por las escenas de la situacion, igualmente la verdad esque era bastante obvio que la historia que comento era muy increible, casi un sueño, pero era en si una historia mas de las impresionantes historias que tenian dia a dia los tamers del mundo, y quien sabe, quizas en este momento alguien este en una situacion parecida, luchando ferozmente contra impresionante e desconocidos peligros en ese mundo, pero eso era cosa de cada uno, y yo estaba en este lugar, no en el otro, por lo que debia centrarme en Caradryan ya que su forma de expresarse no dejo mucho al azar, realmente era imposible juntando todas las piezas que se lo ubiese inventado, amenos que fuera alguien con gran habilidad para ello claro esta, mientras tanto, el digimon llamado Ryudamon se hacerco donde estaba mirando y girando sobre mi un par de veces para posteriormente preguntar donde estaba mi digimon, eso me hizo mucha gracia y no intente ocultar nada, sinceramente si lo decia podria extropear el factor sorpresa que tanto me gustaba, y una mentirigilla piadosa no iba a cambiar nada en absolutio de esa escena, asique ¿porque no? Me llamo Shou, Shou Kudirickimon, encantados Ryudamon y..... Caradryan, por otro lado a la pregunta de mi digimon no, no esta aqui, aunque siempre esta muy cerca mia. Realmente si se miraba desde un punto tecnico habia dicho la verdad, pero ocultando informacion, quizas era realmente lo que buscaba decir, en cualquier caso tampoco era mucho, si preguntaba sobre algo mas concreto ya sabia que decirle sin hablar sobre los digispirit, sobre todo si Caradryan era un tamer nuevo ya que quizas me tocaria explicarle algo si salia alguna duda, aunque si habia dicho la verdad, no veo que fuera necesario.

El joven se presentó como Shou Kudirickimon, junto con que su digimon estaba cerca... quizás fuese algún fantasma o algun digimon con capacidad de ocultación. Habría que investigarlo, pero no en ese lugar, era demasiado cerrado, y si alguien quisiese, podría descubrirnos. Mejor hacerlo en un sitio totalmente seguro.

- Sera mejor que nos movamos, por si acaso. - Empecé a decir, pero pronto mi visión se nubló de nuevo, antes de recibir un golpe fuerte por la espalda, que me echó hacia delante para quedar en el suelo delante de Shou.

- ¿Me recuerdas, maldito humano? - Dijo una voz, a la cual indentifiqué como aquel Dinohumon que tiré calle abajo por la central volcánica. Me levanté, pero algo dificil, mientras Ryudamon se colocaba delante de mí y Shou para protegernos si hacía falta.

- Como para no recordar tu fea cara. ¿Quieres otra dosis? - Dije mientras cogía dos tapas de las cajas de basura, dispuesto a darle su merecido a aquel Dinohumon.

- Vas a pagar... ¡con tu vida! - Dijo Dinohumon, antes de lanzarse hacia mi, pero yo reaccioné, esquivando su puñetazo deslizándome hacia atrás, para después ponerme en equilibrio con mis dos manos, y emplear mis piernas para impulsarle hacia arriba, mandandolo por los aires.

- ¡Shou, manda a tu digimon para que lo derrote de una vez! - Le dije a Shou, mientras volvía a ponerme de pie. Ryudamon se quedó estupefacto al verme actuar, por lo que no dijo ni hizo nada. Esperaba que Shou pudiese hacer algo antes de que Dinohumon volviese al suelo.

OFF: Siento la tardanza.

Al parecer mis ultimas palabras habian dejado algo pensativo a Caradryan, aunque quizas solo fue mi imaginacion puesto que este rapidamente tras unos segundos comento que lo mejor seria marcharnos de aquel lugar por si acaso, la verdad esque tambien me parecia lo mas sensato, los maleantes no eran lo unico que uno se podia encontrar en aquellos callejones, pero lo que realmente aparecio no me lo habia ni podido imaginar, un digimon, bastante mas grande que un humano normal aparecio detras de Caradryan en un instante y golpeo a este con fuerza antes de que pudiera reaccionar, solo pude levantar mi brazo derecho, pero para cuando me di cuenta este se encontraba tirado en el suelo con la marca del golpe en su espalda, habia sido un golpe impresionante, pero lo realmente impresionante fue como Caradryan al parecer no habia recibido tanto daño como parecia, quizas era alguien resiste por naturaleza, pero mirando a ese digimon podia sacar en claro que su fuerza era minimo la de un champion, aunque quizas era mas provable que se tratese de un ultra, aun asi, para que un humano resistiera un golpe semejante de cualquiera de los dos tipos era algo envidiable, asi rapidamente agache poniendo una rodilla en el suelo simplemente puesto que Caradryan habia caido delante mia, asi el digimon aquel empezo ha hablar dirigiendose a este preguntado si lo recordaba, parecia que Caradryan se habia ganado algun enemigo, por lo que mi teoria de su experiencia anterior con digimon quedo demostrada de golpe, en ese momento Ryudamon se coloco delante haciendo una linea perfecta entre aquel digimon agresivo y yo dejando en medio a Ryudamon e Caradryan, parecia una formacion de combate o algo parecido, aun asi ni lo era de lejos, sobre todo porque con bastantes dificultades Caradryan se levanto demostrando que el golpe si le habia surtido efecto, aun asi, se podia poner de pie, que ya era bastante asi este cogio dos tapas de basura como su fueran escudos, mas o menos, y el digimon aquel se altero muchisimo diciendo que acabaria con Caradryan y lanzadose directamente contra el, hay fue cuando definitivamente pense que Caradryan no era normal, usando una tecnica de lucha bastante simple pero potente consitio tirar hacia arriba al digimon bastante lejos, ¿como era posible eso si el era un humano?.

La sorpresa fue general ya que al parecer Ryudamon puso la misma expresion de asombro que yo al ver todo aquello, pero la mia se fue antes ya que Caradryan comento que lo mejor seria que llamese a mi digimon para terminar con todo aquello rapidamente, sinceramente si ese digimon era un ultra seria dificil, pero si solo era un champion seria una batalla de iguales con algo de ventaja ya que podria aprovechar el impulso de Caradryan para acabarlo, en cualquier caso me quede pensando unos sengundos y decidi preguntar. ¿No prefieres solucionarlo tu? al parecer es una disputa personal y no quiero entrometerme, jejejeje, en cualquier caso me voy apartar un poco, si desas que acabe con el rapido solo dilo, sino simplemente llamare a mi digimon cuando sea necesario, no quiero molestarle si no es obligatorio, pero claro, tampoco quiero quedarme sin hacer nada, aun asi tanto como aprovechar ahora.... no soy de la clase de gente que ataca a traicion, aunque atacar por la espada cuando ya se esta peleando no lo cuento. Me retire un poco de alli y espere a la respuesta de Caradryan, la verdad esque el digimon no habia acabado muy lejos en el aire asique era solo cuestion de poco tiempo el que nuevamente la batalla comencese, lo que me preguntaba era que clase de batalla iba a empezar.

Off: Claro, sin presiones.

En vez de atacar, Shou me dió un mini-discurso... ¿Es que no sabía que en combate, un discurso solo provocaba que te atacasen? Definitivamente, no era mi día de suerte después de todo. Un ruido me alertó de que ese Dinohumon había caido ya, y se estaba levantando. La cosa no iba a estar facil, ya que ese golpe me seguía doliendo, y si recibía otro, no esperaba buenos resultados.

- ¡Tu ataca de una maldita vez! - Grité, pero antes de que me diese cuenta, el Dinohumon se había lanzado hacia mi, con intención de cortarme con una de sus cuchillas. No iba a darme tiempo para esquivarlo, pero entonces vi como Ryudamon se interponía entre la cuchilla y yo, con su casco.

- ¡Ryudamon! - Grité, pero eso me costó un puñetazo en la barriga que me mandó a chocar contra una pared. Solté un poco de sangre por la boca, mientras caia al suelo, inmovil. Mi cuerpo no respondía, y seguramente me quedase poco tiempo antes de que ese Dinohumon me diese el golpe de gracia.

Un humano como yo no podía hacerles frente, a pesar de ser denominados Tamer, después de todo... pensé, mientras cerraba los ojos dispuesto a enfrentarme a mi destino.

La situacion rapidamente se fue de las manos, mi pequeño lapsus por intentar comprender mejor toda la situacion se gano unos sucesos que si ubiese actuado no ubiesen sucedido, como ese digimon porfin callo este rapidamente ataco de nuevo a Caradryan provocando que Ryudamon se coloquese delante para interceptar el golpe, obviamente no se vio bien ya que aunque su cabeza estaba protegida por aquel casco un golpe de ese digimon parecia ser bastante potente, sobre todo porque sus armas afiladas no eran ninguna broma, unos segundos despues Caradryan salio volando golpeandose fuertemente contra una pared, la escena fue rota cuando vi a este sangran, parecia que habia sufrido algun daño interno, pero almenos seguia vivo, aun asi todo esto era mi culpa. Lo siento, Caradryan, Ryudamon..... debia haber hecho esto desde el principio, pero, quizas fue la duda, o mas bien el hecho de no saber que intenciones habian aparecido en vosotros dos, pero tarde me he dado cuenta de que eso no importa, no soy asi, asique ahora vereis a mi autenico yo, aunque bueno, eso es una metafora jejejeje. Con un inicio de culpabilidad y un final un poco comico por lo que iba pasar respecto a mis palabras sostuve fuerte mi dispositivo mientras movia mis manos. Digispirit Evolution, ¡Ballistamon! Rapidamente me lance contra aquel digimon aprovechando que el lugar era bastante pequeño y no podria esquivar mi leve velocidad, este simplemente intento darme un golpe simple con uno de sus cuchillos, pero este se rompio al entrar en contacto con la piel-armadura robotica de Ballistamon, eso era lo que tenia bueno esta forma, era muy resistente al ser un digimon con la casi misma consistencia que un tanque. ¡Arm Bunker! ¡Akinakes! Mi brazo derecho empezo a brillar mientras se dirigia hacia el digimon el cual finalmente ondulo su gran espada la cual mando contra mi brazo, el choque fue brutal, y aunque no parecia haber ninguna cedida de fuerta, notaba a cada segundo como si aquella espada me abravesese de parte a parte, era posiblemente el dolor psicologico por el cual seria fisico si me dejaba vencer en aquel choque, pero era imposible, el estaba arriba en el aire usando su peso para potenciar el ataque, cosa que yo no podia hacer, aun asi habia que intentarlo asta el final. Esto va a ser muy pesado. Heavy Speaker Dos ataques a la vez era demasiado para mi, y claramente eso se demostro cuando el Heavy Speaker que lance simplemente molesto a aquel digimon un poco sin llegar a tirarlo para atras, pero eso era todo lo que necesitaba, presione al maximo y la espada de aquel digimon salio diparada clavandose en el segundo piso de un edificio el cual habia justo detras, la verdad esque me asuste, si ubiese sido mas para un lado ubiese entrado por alguna ventana montando una buena si habia suerte de que no diese a nadie, la verdad esque este digimon me habia forzado bastante, pero no era como un ultra, asique debia ser un champion, lo sabia bien, habia ya luchado antes contra los dos niveles almenos una vez, y no habria ganado tan facilmente contra un ultra yo solo, aun asi, ¿como estarian Caradryan y Ryudamon? no me dio mas tiempo que pensar en ello, porque aquel digimon parecia que aun no se habia rendido, igual solo acabava de perder temporalmente lo que parecia su arma principal, o almenos esperaba que fuera la principal.

Mientras estaba en casi media insconciencia, oí a Shou disculpándose sobre la situación, para después parecer que iba a entrar en acción, pero de repente solo veía a un digimon medio-robot, para después verlo luchar contra el Dinohumon. No sabía que ocurría, no veía a Shou... quizás a eso se refería con lo que estaba cerca, pero no veía a Shou, por lo que se habría ido a esconderse. No le reprochaba eso, pero sabía que estaba mal... Al menos podía permanecer medio-despierto, y casi podía andar, pero el dolor me invadía. Definitivamente, el golpe había sido peor de lo que esperaba...

- Maldita sea... - Dije mientras trataba de mover, pero sin éxito. Entonces vi que el Dinohumon había desaparecido de la vista, quedando solo aquel medio-robot de pie... Ryudamon se había movido hacia mi, al parecer el golpe le había dado en el casco y no le había dañado tanto como esperaba.

- ¡Hay que llevarle a alguien que lo cure! - Gritó Ryudamon, tratando de arrastrarme, pero sin éxito. Estaba desesperado, pero no había mucho que hacer. Solo quedaba que aquel medio-robot me llevase a algun sitio, o al menos que Shou apareciese y me llevase a un hospital. No era mi día precisamente...

OFF: Me llevas al hospital o a donde quieras para curarme. Por cierto, te agradeceria que separases los parrafos, el leerlo todo en uno cuesta mucho.

Aunque aquel digimon parecia estar preparado para seguir luchando simplemente hizo una rapida retirada usando la ahora clavada espada enorme en la pared, a la vez que la sacaba y daba un monumental salto hacia uno de los tejados desapareciendo de la vista, me quede unos segundos mirando hacia arriba y atento por si se trataba de alguna estratagema pero no parecia ser asi este simplemente no volvio y yo sali de mi guardia cuando escuche como Ryudamon grito que habia que llevar a alguien para curarlo, obviamente era Caradryan, pero fue un pequeño lapsus, en cualquier caso parecia que su esfuerzo era inutil no era capaz de arrastras ni un centimetro a Caradryan, asique menos llevarlo a un medico, en cualquier caso debia pensarlo bien, no me costaba nada llamar a una ambulancia y fingir que habia sido una caida desde algo, pero al parecer Ryudamon tambien necesitaba cuidados medicos, lo que era mas dificil, si solo estubiesemos en el mundo digital seria sencillo, pero no habia forma de que llegese alli desde donde estaba ni menos abrir un portal, ademas tampoco podia llevarlo a un medico y menos aun veterinario, encima si contabamos que habia mucha gente por las calles a esta hora.

Tras unos segundos se me ocurrio que hacer, habia escuchado un rumor entre los otros tamer de que en esta ciudad se ubicaban en sitios sencillos pero de forma clandestina algunos medicos especializados en digimon, los cuales ademas tambien sabia de calle medicina, eran por asi decirlo medicos privados digitales, yo ya conocia a uno, pero estaba demasiado lejos como para encontrarlo, por lo que quizas lo mejor seria encontrar a alguno que se ubiquese en las cercanias, aunque seria dificil encontrarlo asi derrepente pero tenia un plan, si usaba el amplificador de la barriga de Ballistamon y lanzaba unas ondas exactas podia saber donde se encuentra en maximo flujo de datos en un radio de no mas dos kilometros, aunque no era para nada muy exacto ya que seria mas util si fuera un digimon entero, en cualquier caso debia hacer acopio de esa habilidad para ayudar a Caradryan. Un momento.

Unos minutos despues tuve una posible localizacion asique agarre a Caradryan y Ryudamon, para asi subir a la azotea de la misma manera que aquel digimon, bueno mas o menos, solo esperaba que aquel agujero que habia formado en la pared para usarlo de punto de apoyo no fuera muy extremo para el edificio entero, en cualquier caso me dirigi rapidamente hacia aquel lugar llevando a los dos en mis hombros de la mejor manera que podia, un par de tropiezos y una ventana rota de un edificio abandonado desvelo al fin lo que estaba buscando, alli entre la suciedad y el oxido de todo lo que era metalico se encontraban una buena cantidad de digimon con vendas y parches de todo tipo, quizas no habia sido la apuesta mas inteligente la de entrar asi a aquel lugar, pero almenos solo fueron miradas de curiosidad y recelo lo que llego a mi, me dirigi rapido donde estaba el doctor y este se quedo sorprendido por mi presencia, o mas bien por el hecho de que un digimon ubiese traido un humano e otro digimon heridos ante el sin llamar a su puerta. Porfavor, debe curarlos, se que he entrado como un intruso, he pagare el crital roto, pero porfavor cureles es mi culpa que esten asi. Deje a los dos en el suelo y volvi a mi forma humana, el doctor los cogio sin decir una sola palabra e con una gran fuerza ya que levanto a los dos con cada brazo poniendo a cada uno en una especie de camilla improvisada, solo esperaba que no fuese grave de verdad.

Aquel digimon decidió ayudarnos, para después emitir hacer alguna cosa, seguramente para buscar ayuda o algo asi, para después cogerme a mi y a Ryudamon, para llevarnos a algun sitio. He de admitir que no recordé el camino, estaba medio-insconciente y solo notaba como me llevaban, todo estaba oscuro y los sonidos distorisionados, sin saber que decía o pasaba. Era una sesación extraña, y el dolor seguía fastidiandome, pero de repente paramos en un sitio oscuro, pero logre distinguir a varias criaturas vendadas, al parecer estabamos en un sitio de gabinete médico o algo asi, y ese digimon me pasó a las manos de alguien, que me dejó en algo como una camilla.

Al estar tumbado, me abandoné a la insconciencia. Ryudamon miraba hacia mi de vez en cuando, mientras era examinado y le colocaban una minima venda en el sitio. Después el médico me observó, y tanteó un poco la zona afectada. Frunció un poco el ceño, y hizo una seña para llamar a un digimon, un Ángemon. Este me observó, y empezó a mandar una especie de energia luminosa, parecía que era curativa.

- Tranquilo, se pondran bien. Principalmente los digimon que vienen tienen heridas leves y moderadas, pero para los casos que requieran mas atencion que un humano puede proporcionar, tengo la ayuda de este Angemon, que viendo que quería ayudar a todo el que pudiese, se ofreció a ayudar. La única pega es que no soy capaz de devolverles a su mundo, ya que no soy tamer. - Dijo mientras cogía vendas y cuando Angemon terminó su trabajo, se retiró a atender al resto de digimons de la zona. Entonces el doctor colocó unas vendas alrededor de mi cuerpo.

- No debe forzarse demasiado, pero se nota que sabe como defenderse. Sus musculos son resistentes, para haber sobrevivido a dos golpes de este calibre. Ha tenido suerte. - Dijo el doctor cuando terminó. Entonces me desperté, y miré el lugar y a Shou.

- ¿Donde estoy? - Dije mientras trataba de incorporarme, pero el doctor me lo impidió. Estaba claro que no estaba en aquel callejon...