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El descubrimiento de las ruinas del Monasterio Draco, tallado en lo alto de una desolada montaña en el valle de los dragones, ha despertado un gran interés por todo el Digimundo. Principalmente porque según los tallados de la pared exterior dentro de las ruinas se encuentra un obre mágico que contiene en su interior la data y poder del treceavo Royal Kinght, la cual sera dada a quien reclame dicho objeto. Según la historia grabada en los murales, el obre fue dejado allí por el mismo Royal Kinght en caso de que su poder sea necesario para derrotar al mal que se alce en el futuro...por desgracia semejante premio también a llamado la atención de quienes usarían el poder para sus propias metas egoístas. Por lo que esta aventura ahora se a vuelto una carrera por ver quien consigue el gran premio.
6 meses despues de la ultima carrera, un BanchoLeomon reune al viejo equipo de organizacion para dar un nuevo espectaculo, pero en esta carrera, el misterioso patrocinador ha enviado a un "Aspirante a Campeon" con un extraño y unico Digivice. ¿Que es lo que sucedera a lo largo del evento y como funciona este nuevo digivice?.
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-Imagenes realizadas por Runari Wildy
y Sigrun Vinter
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y Sigrun Vinter
Domando a las Bestias [Misión]
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Domando a las Bestias [Misión]
Lo sabía, lo sabía, desde hace unos minutos había tenido la extraña sensación de estar siendo observada, por supuesto que no me gusta nada en lo absoluto, pero no había nada que me lo confirmara; cuando se lo preguntaba a mi distraído compañero el solamente contestaba que no sabía a que me refería, claro, el seguro estaba pensando en algo como comida o en ‘’lo asombroso que es’’ Tsk… ¿Por qué siempre me tiene que pasar este tipo de cosas a mi? Siempre pienso que estas cosas son ilusiones provocadas por mi cerebro ante el cansancio o cosas así pero… ¡Esta vez no, esta vez estaré segura de que alguien me seguía!- ¡Muéstrate! ¡No querrás verme enojado! –exclamé, observando a un punto en especial ignorando la miradas de, no solo mi compañero confundido, sino tambien de otros digimon que pasaban a mi lado y se quedaban viéndome como si fuese una clase de persona desquiciada o con un problema grave de esquizofrenia- …Hey Kuro… ¿Te encuentras bien? –me preguntó mi compañero, colocándose a un lado mío y posando su mano sobre mi frente- …Si… si estoy bien, lo siento… -reaccioné y me quité su mano de mi frente- ¡No! ¡Si, Estoy bien! No quiero que me mires de esa forma Drac, te digo que hay alguien siguiéndonos ¡Lo juro! –decía alerta, no me agradaba ser considerada loca, pero tampoco quería meterme en otros problemas solo por querer ‘’ignorar la situación haciéndola creer como si fuese una ilusión de mi pobre mente’’.
- Kuro, te he dicho que nadie nos está siguiendo, es solo tu… -mientras Kuro decía esto, se escuchaba como unas vasijas que estaban ubicadas en una especie de mesa que era utilizada para vender esos productos caían al suelo por culpa de una sombra extraña, que con tan solo ver que yo volteaba a verlo, huyó como si hubiese hecho algo realmente malo y la policía era yo- ¿Será el…? –pensé en mis adentros, enseñando los colmillos y gruñendo por la mala imagen que me había hecho pasar… ¡Yo podré ser muchas cosas, pero puedo asegurar que no estoy loca!- ¡Drac, ahí está, vamos tras el! –con decir esto salí corriendo en dirección hacia donde se había ido corriendo dicha sombra, viendo como ella se trepaba por unos botes de basura con intención de escapar por el techo- ¡Oye tu, no huyas, cobarde! –corrí hasta los botes de basura y, antes de que el se lograra subir completo, le tomé de su pierna y lo obligué a bajar, cayéndonos ambos al suelo- Ugh… estas pesadito… -lo tomé de la ropa y lo miré a los ojos con ira- ¿¡Por que me has estado siguiendo!? –formé en mi mano un puño dispuesta entonces a partirle la cara, pero el la tomó sin problema, pudiendo ver sus ojos detrás de esa esa venda color blanco, eran de color azul, azul como el mar…- Tsk… -intenté zafar mi mano de su agarre pero el en realidad tenía mucha fuerza, pero el simple hecho de que no me golpeó la cara pese a mi desventaja- Deja esa terquedad, ¿Quieres? –me dijo, su voz era gruesa y algo ronca, lo que me mostraba que era de un hombre de edad madura; apenas vio que me calmé por la sorpresa, se sacó esas vendas; su cara estaba completamente desfigurada por millones de cicatrices de pelea- Q…¿Quien es el..? –el me soltó, teniendo que sobar mi muñeca algo adolorida por tan potente agarre- Lamento haber tenido que seguirte, mis ordenes eran tener que atraparte en un lugar no muy poblado para poder darte esto… -al decir esto, de una bolsa en la lateral de su cadera, sacó una especie de carta un tanto maltratada en forma de pergamino y sujeta por un lazo de color rojo sangre; llevaba impresa la imagen de un sello demoniaco… ¿Cómo se llamaba?... Ese en forma de estrella… ah, bueno, como sea- ¿Y esto para que me sirve? –dije con mi usual hostilidad, el se levantó como si nada- Deberías leerlo, lleva tu nombre en el –con decir esto, el tipo volvió a ponerse la venda que, al parecer, solo se la quitaba para poder hablar formalmente con la persona a quien buscaba.
Yo me encontraba viendo en estos momentos el sobre de la carta que yacía en mis manos, mirándola por delante y por detrás, incluso por dentro… por ese orificio que se encuentra a ambos laterales del pergamino- …¿Y quien lo man…? –cuando volteé de nuevo a ver hacia enfrente donde se supone que se encontraría ese señor, me llevé la sorpresa de que el ya había desaparecido- …Ni siquiera me dejó despedirme… -suspiré, le quité el lazo y me dispuse a leer lo que había en su interior.
Tal y como ese tipo extraño había dicho, la carta iba dirigida hacia mi, y no era eso solo lo que me sorprendía… si no que la carta estaba dirigida hacia ‘’Haruka Aizawa’’ Un nombre del cual no había vuelto a escuchar hasta hace mucho tiempo, ¿Cinco años tal vez?- Tsk… que malos recuerdos me ha traído esta estúpida cartita… -suspiré resignada, y seguí leyendo. Al parecer, esta carta era para encargarme una misión, algo había sucedido en una zona llamada ‘’Zona Prehistorica’’ habitada por mayoría de digimon del tipo dragón o dinosaurio, según porque unos digimon fugitivos habían escapado y debían encontrarlos. Entiendo, me quieren a mi porque, al ser fugitiva en el mundo humano, seguramente pueda pensar de igual manera que esos digimon y, de esa manera, sería mas sencillo atraparlos- Ja, le han pedido este favorsito a la persona equivocada –dicho esto, doblé el pergamino en una bola de papel y lo tiré al suelo, colocando indiferentemente mis manos en los bolsillos y caminando nuevamente hacia donde me encontraba antes con Dracmon, pero me sorprendí al ver que mi compañero ya no se encontraba en donde antes lo había avistado: mirando las vasijas que se habían mantenido intactas como idiota.
- Draaac... ¿Dónde estás? –me encontraba caminando, buscando y buscando a mi compañero, pero no lograba encontrarlo por ningún lado- ¡Kuuuuuuro…! –escuché una voz que se acercaba mas y mas a mi, hasta el punto de llegar a chocar conmigo después de hacer carreras hacia mi- Agh… ¿Dónde estabas? –dije después de un agobiante suspiro, volteando a verlo e impresionándome al ver lo que tenía en las manos…- Jajajaja! Kuro, ¿¡Porque no me dijiste que te habían dado una misión!? –el se levantó como si nada, sentándose en el suelo con las piernas cruzadas mientras releía lo que la carta decía- Aunque es extraño, aquí viene que la carta es para una tal ‘’Haruka Aizawa’’ Supongo que esta misión no es para nosotros… -dijo sin quitar esa sonrisa burlona del rostro- Así es, por eso mismo no deberíamos tomarla –debo admitir que me había alterado un poco cuando escuché eso, pero por suerte el es demasiado tonto como para sacar conclusiones tan acertadas- ¿¡Pero que dices!? Jajajaja… ¡Este es el boleto perfecto para desaburrirnos un poco y para poder explorar un lugar mas en el digimundo! –mi compañero se levantó y comenzó a caminar hacia cierta dirección- ¡Vamos Kuro! ¡Rumbo a Zona Prehistorica! –me crucé de brazos y lo observé- ¿Tienes al menos una idea de por donde es? –el se quedó en silencio un momento y se detuvo- …Eh... ¡Claro…! Pero… ehm… Ahora que lo dices, hace unos momentos me tropecé y me di un fuerte golpe en la cabeza, temo que ya no recuerdo a donde ir ¡Jajajaja… jajaja…. Ja…! –éste Dracmon, enserio me cree estúpida…- Como sea, si no hay como saberlo, no hay forma de ir a la dichosa misión, vámonos de aquí… -en lo que quise darme la vuelta me topé con un digimon de alta estatura, tanta, que incluso me había llegado a cubrir su sombra por completo- ¿Quién eres tu? –le pregunté algo fastidiada, ese digimon poseía un par de enormes alas y un sombrero de paja, además de un par de espadas samurái, además de un extraño traje de color rojo con amarillo- Veo que necesitan ayuda para ir a la Zona Prehistórica, ¿O me equivoco? -¿Cómo diablos sabía de eso?... Me di cuenta entonces, que en su brazo derecho, llevaba un extraño tatuaje… ¡Era el mismo que en el pergamino!- Me llamo Buraimon, mi deber es llevarlos a la Zona Prehistorica, si no les molesta… me los llevaré ya sea por las buenas o por las malas –dicho esto desenvainó una de sus espadas- Espero que me den una buena respuesta, ¿Qué dicen? –Tsk… era como si el ya supiese cual era la respuesta que tenía en mente, en cambio Dracmon no se molestó en lo absoluto- ¡Guarda esa espadita pajarraco! Nosotros vamos a ir, ¿¡Cierto Kuro!? –ugh… ahora es, como dicen por ahí, que me encontraba ‘’Entre la espada y la pared’’, es curioso, hasta ahora no le había hallado un buen significado a eso- Entonces ya está decidido –Buraimon sonrió de lado y guardó su espada, tomándome a mi y a Dracmon entre sus brazos- Sujetense bien, el viaje desde aquí hasta la Zona Prehistorica es algo… largo –extendió sus grandes alas y emprendió el vuelo.
Odiaba la situación en la que me encontraba, estaba siendo llevada a un lugar que desconozco por completo contra mi voluntad, aunque… debo admitir que la vista desde el cielo era realmente hermosa… como me gustaría poder disfrutar de esta vista mas seguido… ¿Q…Que estoy diciendo? ¡Debo estar mareada por las alturas…! Si, eso debe ser, eso… debe ser… ugh…- ¿Cuánto falta para llegar? –pregunté, intentando disimular mi emoción con una de mis típicas expresiones serias e indiferentes- No falta poco, estate tranquila… como tu compañero –al decir esto volteé a ver a Dracmon, quien yacía dormido en el brazo izquierdo de Buraimon con la lengua de fuera y babeando un poco- Comida… ñamñam… -ugh, a veces me da pena tenerlo de compañero, pero bueno… tampoco es un mal chico.
Unas horas mas tardes, finalmente parecimos llegar ‘’a tierra’’ puesto que Buraimon dio la señal y nos hizo aterrizar, acomodándose el sombrero de paja- Hemos llegado, despídete de tu compañero de mi parte –estiró sus alas nuevamente, mientras yo intentaba cargar a Dracmon con mucha dificultad- Ugh… C-Claro… Ten un buen viaje… -el acomodó su sombrero, evitando que le viese los ojos, y volvió a alzar el vuelo a una mayor velocidad con la que antes volaba, supongo que nuestro peso le impedía volar con normalidad- Increíble… -eso me emocionaba enserio. Suspiré y dejé caer a Dracmon al suelo- Vamos, no voy a estar cargándote, levántate –el se quejó por la caída, pero se levantó algo mareado por la inesperada caída- Auch… no era forma de despertarme, que malvado… -tosió un poco de arena, realmente no me importaba como lo tenía que levantar, solo no iba a estar dispuesta a cargarlo mas tiempo, esta pesado...
Dracmon y yo comenzamos a caminar por todo el lugar, contemplando las mesetas y la vista de entre todos los digimon dinosaurios que habían; podíamos ver de vez en cuando a algunos Greymon peleando entre ellos mismos a cornadas, y el mas fuerte, devoraba los datos del otro- ¿Así que esto de devorar los datos del mas débil, sería la ‘’cadena alimenticia’’ de aquí en el digimundo? –eso era interesante, si… bastante interesante; ¿A dónde iríamos primero? No conocíamos este lugar en lo absoluto, así que solo esperaba que, por arte de magia, nos encontraramos con otro digimon que tenga ese extraño símbolo tatuado en el brazo.
- Kuro, te he dicho que nadie nos está siguiendo, es solo tu… -mientras Kuro decía esto, se escuchaba como unas vasijas que estaban ubicadas en una especie de mesa que era utilizada para vender esos productos caían al suelo por culpa de una sombra extraña, que con tan solo ver que yo volteaba a verlo, huyó como si hubiese hecho algo realmente malo y la policía era yo- ¿Será el…? –pensé en mis adentros, enseñando los colmillos y gruñendo por la mala imagen que me había hecho pasar… ¡Yo podré ser muchas cosas, pero puedo asegurar que no estoy loca!- ¡Drac, ahí está, vamos tras el! –con decir esto salí corriendo en dirección hacia donde se había ido corriendo dicha sombra, viendo como ella se trepaba por unos botes de basura con intención de escapar por el techo- ¡Oye tu, no huyas, cobarde! –corrí hasta los botes de basura y, antes de que el se lograra subir completo, le tomé de su pierna y lo obligué a bajar, cayéndonos ambos al suelo- Ugh… estas pesadito… -lo tomé de la ropa y lo miré a los ojos con ira- ¿¡Por que me has estado siguiendo!? –formé en mi mano un puño dispuesta entonces a partirle la cara, pero el la tomó sin problema, pudiendo ver sus ojos detrás de esa esa venda color blanco, eran de color azul, azul como el mar…- Tsk… -intenté zafar mi mano de su agarre pero el en realidad tenía mucha fuerza, pero el simple hecho de que no me golpeó la cara pese a mi desventaja- Deja esa terquedad, ¿Quieres? –me dijo, su voz era gruesa y algo ronca, lo que me mostraba que era de un hombre de edad madura; apenas vio que me calmé por la sorpresa, se sacó esas vendas; su cara estaba completamente desfigurada por millones de cicatrices de pelea- Q…¿Quien es el..? –el me soltó, teniendo que sobar mi muñeca algo adolorida por tan potente agarre- Lamento haber tenido que seguirte, mis ordenes eran tener que atraparte en un lugar no muy poblado para poder darte esto… -al decir esto, de una bolsa en la lateral de su cadera, sacó una especie de carta un tanto maltratada en forma de pergamino y sujeta por un lazo de color rojo sangre; llevaba impresa la imagen de un sello demoniaco… ¿Cómo se llamaba?... Ese en forma de estrella… ah, bueno, como sea- ¿Y esto para que me sirve? –dije con mi usual hostilidad, el se levantó como si nada- Deberías leerlo, lleva tu nombre en el –con decir esto, el tipo volvió a ponerse la venda que, al parecer, solo se la quitaba para poder hablar formalmente con la persona a quien buscaba.
Yo me encontraba viendo en estos momentos el sobre de la carta que yacía en mis manos, mirándola por delante y por detrás, incluso por dentro… por ese orificio que se encuentra a ambos laterales del pergamino- …¿Y quien lo man…? –cuando volteé de nuevo a ver hacia enfrente donde se supone que se encontraría ese señor, me llevé la sorpresa de que el ya había desaparecido- …Ni siquiera me dejó despedirme… -suspiré, le quité el lazo y me dispuse a leer lo que había en su interior.
Tal y como ese tipo extraño había dicho, la carta iba dirigida hacia mi, y no era eso solo lo que me sorprendía… si no que la carta estaba dirigida hacia ‘’Haruka Aizawa’’ Un nombre del cual no había vuelto a escuchar hasta hace mucho tiempo, ¿Cinco años tal vez?- Tsk… que malos recuerdos me ha traído esta estúpida cartita… -suspiré resignada, y seguí leyendo. Al parecer, esta carta era para encargarme una misión, algo había sucedido en una zona llamada ‘’Zona Prehistorica’’ habitada por mayoría de digimon del tipo dragón o dinosaurio, según porque unos digimon fugitivos habían escapado y debían encontrarlos. Entiendo, me quieren a mi porque, al ser fugitiva en el mundo humano, seguramente pueda pensar de igual manera que esos digimon y, de esa manera, sería mas sencillo atraparlos- Ja, le han pedido este favorsito a la persona equivocada –dicho esto, doblé el pergamino en una bola de papel y lo tiré al suelo, colocando indiferentemente mis manos en los bolsillos y caminando nuevamente hacia donde me encontraba antes con Dracmon, pero me sorprendí al ver que mi compañero ya no se encontraba en donde antes lo había avistado: mirando las vasijas que se habían mantenido intactas como idiota.
- Draaac... ¿Dónde estás? –me encontraba caminando, buscando y buscando a mi compañero, pero no lograba encontrarlo por ningún lado- ¡Kuuuuuuro…! –escuché una voz que se acercaba mas y mas a mi, hasta el punto de llegar a chocar conmigo después de hacer carreras hacia mi- Agh… ¿Dónde estabas? –dije después de un agobiante suspiro, volteando a verlo e impresionándome al ver lo que tenía en las manos…- Jajajaja! Kuro, ¿¡Porque no me dijiste que te habían dado una misión!? –el se levantó como si nada, sentándose en el suelo con las piernas cruzadas mientras releía lo que la carta decía- Aunque es extraño, aquí viene que la carta es para una tal ‘’Haruka Aizawa’’ Supongo que esta misión no es para nosotros… -dijo sin quitar esa sonrisa burlona del rostro- Así es, por eso mismo no deberíamos tomarla –debo admitir que me había alterado un poco cuando escuché eso, pero por suerte el es demasiado tonto como para sacar conclusiones tan acertadas- ¿¡Pero que dices!? Jajajaja… ¡Este es el boleto perfecto para desaburrirnos un poco y para poder explorar un lugar mas en el digimundo! –mi compañero se levantó y comenzó a caminar hacia cierta dirección- ¡Vamos Kuro! ¡Rumbo a Zona Prehistorica! –me crucé de brazos y lo observé- ¿Tienes al menos una idea de por donde es? –el se quedó en silencio un momento y se detuvo- …Eh... ¡Claro…! Pero… ehm… Ahora que lo dices, hace unos momentos me tropecé y me di un fuerte golpe en la cabeza, temo que ya no recuerdo a donde ir ¡Jajajaja… jajaja…. Ja…! –éste Dracmon, enserio me cree estúpida…- Como sea, si no hay como saberlo, no hay forma de ir a la dichosa misión, vámonos de aquí… -en lo que quise darme la vuelta me topé con un digimon de alta estatura, tanta, que incluso me había llegado a cubrir su sombra por completo- ¿Quién eres tu? –le pregunté algo fastidiada, ese digimon poseía un par de enormes alas y un sombrero de paja, además de un par de espadas samurái, además de un extraño traje de color rojo con amarillo- Veo que necesitan ayuda para ir a la Zona Prehistórica, ¿O me equivoco? -¿Cómo diablos sabía de eso?... Me di cuenta entonces, que en su brazo derecho, llevaba un extraño tatuaje… ¡Era el mismo que en el pergamino!- Me llamo Buraimon, mi deber es llevarlos a la Zona Prehistorica, si no les molesta… me los llevaré ya sea por las buenas o por las malas –dicho esto desenvainó una de sus espadas- Espero que me den una buena respuesta, ¿Qué dicen? –Tsk… era como si el ya supiese cual era la respuesta que tenía en mente, en cambio Dracmon no se molestó en lo absoluto- ¡Guarda esa espadita pajarraco! Nosotros vamos a ir, ¿¡Cierto Kuro!? –ugh… ahora es, como dicen por ahí, que me encontraba ‘’Entre la espada y la pared’’, es curioso, hasta ahora no le había hallado un buen significado a eso- Entonces ya está decidido –Buraimon sonrió de lado y guardó su espada, tomándome a mi y a Dracmon entre sus brazos- Sujetense bien, el viaje desde aquí hasta la Zona Prehistorica es algo… largo –extendió sus grandes alas y emprendió el vuelo.
Odiaba la situación en la que me encontraba, estaba siendo llevada a un lugar que desconozco por completo contra mi voluntad, aunque… debo admitir que la vista desde el cielo era realmente hermosa… como me gustaría poder disfrutar de esta vista mas seguido… ¿Q…Que estoy diciendo? ¡Debo estar mareada por las alturas…! Si, eso debe ser, eso… debe ser… ugh…- ¿Cuánto falta para llegar? –pregunté, intentando disimular mi emoción con una de mis típicas expresiones serias e indiferentes- No falta poco, estate tranquila… como tu compañero –al decir esto volteé a ver a Dracmon, quien yacía dormido en el brazo izquierdo de Buraimon con la lengua de fuera y babeando un poco- Comida… ñamñam… -ugh, a veces me da pena tenerlo de compañero, pero bueno… tampoco es un mal chico.
Unas horas mas tardes, finalmente parecimos llegar ‘’a tierra’’ puesto que Buraimon dio la señal y nos hizo aterrizar, acomodándose el sombrero de paja- Hemos llegado, despídete de tu compañero de mi parte –estiró sus alas nuevamente, mientras yo intentaba cargar a Dracmon con mucha dificultad- Ugh… C-Claro… Ten un buen viaje… -el acomodó su sombrero, evitando que le viese los ojos, y volvió a alzar el vuelo a una mayor velocidad con la que antes volaba, supongo que nuestro peso le impedía volar con normalidad- Increíble… -eso me emocionaba enserio. Suspiré y dejé caer a Dracmon al suelo- Vamos, no voy a estar cargándote, levántate –el se quejó por la caída, pero se levantó algo mareado por la inesperada caída- Auch… no era forma de despertarme, que malvado… -tosió un poco de arena, realmente no me importaba como lo tenía que levantar, solo no iba a estar dispuesta a cargarlo mas tiempo, esta pesado...
Dracmon y yo comenzamos a caminar por todo el lugar, contemplando las mesetas y la vista de entre todos los digimon dinosaurios que habían; podíamos ver de vez en cuando a algunos Greymon peleando entre ellos mismos a cornadas, y el mas fuerte, devoraba los datos del otro- ¿Así que esto de devorar los datos del mas débil, sería la ‘’cadena alimenticia’’ de aquí en el digimundo? –eso era interesante, si… bastante interesante; ¿A dónde iríamos primero? No conocíamos este lugar en lo absoluto, así que solo esperaba que, por arte de magia, nos encontraramos con otro digimon que tenga ese extraño símbolo tatuado en el brazo.
- Tamer & Digimon
- Prueba de Rol :ADigi Puntos :354Cuentas :Ficha :Cronologia :NPCs :Nivel On Rol :MegaNivel On Rol de los Digi Aliados :UltimateIcono :Rango y Unidad :Haruka Aizawa
Rango: Holy Knight
Unidad: Dragon Spirit
Dracmon
Rango: Holy Knight
Unidad: Dragon SpiritRango y Unidad Digi Aliado :Gaomon
Rango: Knight
Unidad: Dragon SpiritInventario :
Haruka Aizawa
Re: Domando a las Bestias [Misión]
Una vez en la Zona Prehistórica, al ver la ley de ese peligroso lugar, donde el más fuerte devoraba al más débil, viste a muchos digimons reuniéndose, todos eran nivel Rookie, por lo más curioso, parecían entretenidos con algo, aunque tú no le diste mucha importancia y seguiste tu camino, aunque tu compañero insistía en ir a observar lo que entretenía tanto a los digimons, decidiste negarlo, después de todo, ¿Por qué había que ir?, eran asuntos de los digimons residentes, ni tu ni tu compañero tenían por qué preocuparse por nada de lo que ellos hicieran, o vieran.
Luego de unos 20 minutos caminando, te diste cuenta de algo completamente increíble, algo que te hiso dudar mucho de tu propio sentido de la orientación, habías vuelto al punto de partida donde Buraimon te había dejado junto a Dracmon. Por un momento quisiste tomar una piedra y romperla con la mano, pero en lugar de eso, la lanzaste lejos, y pronto viste como tu compañero había desaparecido, entonces fue el colmo para ti, aunque ya sabias a donde se había dirigido.
Tras caminar un poco, llegaste al embotellamiento de digimons dinosaurio, y en cuestión de segundos encontraste a Dracmon, que estaba observando detenidamente lo que parecía una batalla, lo más raro de todo es que estaba completamente centrado, cosa que te pareció extraña y quisiste ver qué era lo que le llamaba la atención, y al ver, lograste observar el enorme circulo formado con tantos digimons, y en medio, un montón de pequeños dinosaurios peleando contra una especie de Renamon, aunque esta tenía algo distintos… ¿su pelaje era negro?, si, con solo verla detenidamente notaste que no tenía un pelaje amarillo, si no negro, lo que era más raro, por lo que te acercaste a ver, moviendo a todos los digimons que había en el paso para verla más de cerca.
¡VEE CABEZAZO! –grito un pequeño Veemon dándole un potente cabezazo al estomago a la digimon zorro oscuro- ¡VEE PUÑETAZO! –Al ver la oportunidad le dio un puñetazo en la cara- ¡Vas a perder! ¡Novata!
¡ROMPEDOR DE ROCA ARDIENTE! –Grito un Guilmon saltando y dándole un fuerte golpe en la cabeza con sus garras en llamas- ¡JA! ¡Débil! –Se dio media vuelta haciendo caer a la digimon lupina con la cola-
Tsk… -se levanto como si nada- me dan asco los perdedores como ustedes… no tengo tiempo para esto… -dio un gran salto y al llegar a la altura máxima de su salto extendió los brazos- ¡KOYOTETSU! -varios cristales brillantes como los diamantes se formaron frente a ella y con un solo movimiento los lanzo hacia los dos digimons volviéndolos puros datos-
Halla van otros dos… -dijo un BlackGuilmon observando como la digimon absorbía todos los datos- ¿Cuándo se detendrá?...
¿Nadie más tiene las agallas de enfrentarme?... vamos… -sonríe de una forma extraña, casi malévola, pero gentil,o que confundía sus intenciones, si eran pelear y matar, o simplemente entretener al público- vamos… creí que en este lugar habían digimons rudos…
Por un momento sonreíste, esa digimon era realmente ruda, mas por su tono de voz, aunque era extraño, una digimon como ella en una zona así, ¿Qué buscaría además de una pelea?, porque algo tenía que buscar, ¿no?, aunque la duda era… ¿Qué exactamente?.
Pronto sentiste pasos muy grandes, y viste a uno de los Greymons de antes, era el ganador de la batalla de supervivencia, entonces escuchaste un gran rugido de su parte y se paro frente a la digimon lupina y comenzó a gruñir, ya sabias lo que sucedería, y cada célula de tu cuerpo gritaba que te quedaras a ver la batalla que estaba por librarse, aunque tu cerebro te gritaba que te alejaras, no era tu problema, pero aun así querías verlo todo.
GRRRRR… ¡MEGA FLAMA! –Grito de pronto el enorme digimon dinosaurio atigrado lanzando una enorme bola de fuego hacia la Renamon oscura-
¿Ah?, ¿con que esas tenemos? –sonrió y dio un gran salto, aunque se quemo parte de los pies- tsk… ¡KOYOTETSU! –Repitió el mismo ataque lanzándolo esta vez los cristales a los ojos de su enemigo- je… ¡¿Ah?!
¡MURO DE FUEGO! –lanzo fuego hacia el suelo creando un muro de fuego que impidió el ataque- ¡GRAN CUERNO! –corrió a toda velocidad embistiendo a la digimon contra un árbol aprovechando que se encontraba en el aire- ¡MEGA FLAMA! –Lanzo otra bola de fuego aunque fallo por poco-
Al ver semejante golpiza, sentiste que debías correr, pero tus ojos se abrieron con mucho impacto al ver que la digimon se levantaba, tenía muchos raspones, pero seguía de pie, entonces volvió a ocurrir lo mismo, muro de fuego, gran cuerno, mega flama, el mismo resultado, aunque cada vez se repetía más rápido, después de todo era una simple nivel Rookie, lo que te hiso sentir que debías ayudarla, aunque en un momento, todo dio un gran giro.
Cuando la Renamon oscura dio el salto, obviamente el Greymon uso el muro de fuego, pero esta vez, en vez de usar el Koyotetsu, la Renamon dijo otra palabra, “Konekyo”, entonces en un abrir y cerrar de ojos, desapareció y apareció detrás de Greymon, que estando desprevenido, no pudo ver el ataque y por tanto no pudo esquivarlo. Apenas tuvo la oportunidad, la Renamon comenzó a correr, apenas toco el suelo, por el cuerpo de Greymon y sus puños se envolvieron en fuego y comenzó a golpear repetidas veces en varios puntos, aunque Greymon comenzó a rugir de rabia, la Renamon de pelaje negro seguía atacando sin parar, comenzando a dañar la poderosa piel de Greymon.
Cuando el Greymon se canso de ser golpeado, comenzó a moverse con mucha fuerza, logrando lanzar a la Renamon como si nada, pero apenas se preparo Greymon para usar una mega flama, Renamon aprovecho el momento y lanzo un Koyotetsu hacia la boca de Greymon, dejándolo herido, y aunque la caída que aguanto la digimon lupina negra fue dura, logro levantarse una última vez y comenzó a correr para dar el golpe final, por lo que hiso un Konekyo para apecer mas cerca de Greymon, y cuando este logro verla a su espalda, ya que conocía el movimiento, pero no pudo evitar lo siguiente.
¡KOSENGEK! –se paro en la espalda del digimon y dio un pequeño salto, entonces le dio una patada en el rostro lanzándolo contra el suelo- ¡KOYOTETSU! –grito lanzando sus cristales perforando el cuerpo del digimon haciéndolo datos-
¡AAAAHHH! ¡DESGRACIADA! –Fueron las últimas palabras del gran digimon dinosaurio anaranjado de rayas azules-
Je… ah… hack… -sonrió ligeramente mientras caía al suelo levantando una gran cantidad de polvo- hack… necesito… ayuda… -intento levantarse pero lo único que consiguió fue desmayarse en medio de un campo de batalla-
Al ver a la digimon vencer a un digimon tan grande y feroz, además de un nivel mas fuerte, no sabías que hacer, podría ser de ayuda, aunque estaba herida y no tenias por que meterte en sus asuntos. Fuera como fuera, si nadie la ayudaba, seguramente sería aplastada por algún otro digimon hambriento.
Luego de unos 20 minutos caminando, te diste cuenta de algo completamente increíble, algo que te hiso dudar mucho de tu propio sentido de la orientación, habías vuelto al punto de partida donde Buraimon te había dejado junto a Dracmon. Por un momento quisiste tomar una piedra y romperla con la mano, pero en lugar de eso, la lanzaste lejos, y pronto viste como tu compañero había desaparecido, entonces fue el colmo para ti, aunque ya sabias a donde se había dirigido.
Tras caminar un poco, llegaste al embotellamiento de digimons dinosaurio, y en cuestión de segundos encontraste a Dracmon, que estaba observando detenidamente lo que parecía una batalla, lo más raro de todo es que estaba completamente centrado, cosa que te pareció extraña y quisiste ver qué era lo que le llamaba la atención, y al ver, lograste observar el enorme circulo formado con tantos digimons, y en medio, un montón de pequeños dinosaurios peleando contra una especie de Renamon, aunque esta tenía algo distintos… ¿su pelaje era negro?, si, con solo verla detenidamente notaste que no tenía un pelaje amarillo, si no negro, lo que era más raro, por lo que te acercaste a ver, moviendo a todos los digimons que había en el paso para verla más de cerca.
¡VEE CABEZAZO! –grito un pequeño Veemon dándole un potente cabezazo al estomago a la digimon zorro oscuro- ¡VEE PUÑETAZO! –Al ver la oportunidad le dio un puñetazo en la cara- ¡Vas a perder! ¡Novata!
¡ROMPEDOR DE ROCA ARDIENTE! –Grito un Guilmon saltando y dándole un fuerte golpe en la cabeza con sus garras en llamas- ¡JA! ¡Débil! –Se dio media vuelta haciendo caer a la digimon lupina con la cola-
Tsk… -se levanto como si nada- me dan asco los perdedores como ustedes… no tengo tiempo para esto… -dio un gran salto y al llegar a la altura máxima de su salto extendió los brazos- ¡KOYOTETSU! -varios cristales brillantes como los diamantes se formaron frente a ella y con un solo movimiento los lanzo hacia los dos digimons volviéndolos puros datos-
Halla van otros dos… -dijo un BlackGuilmon observando como la digimon absorbía todos los datos- ¿Cuándo se detendrá?...
¿Nadie más tiene las agallas de enfrentarme?... vamos… -sonríe de una forma extraña, casi malévola, pero gentil,o que confundía sus intenciones, si eran pelear y matar, o simplemente entretener al público- vamos… creí que en este lugar habían digimons rudos…
Por un momento sonreíste, esa digimon era realmente ruda, mas por su tono de voz, aunque era extraño, una digimon como ella en una zona así, ¿Qué buscaría además de una pelea?, porque algo tenía que buscar, ¿no?, aunque la duda era… ¿Qué exactamente?.
Pronto sentiste pasos muy grandes, y viste a uno de los Greymons de antes, era el ganador de la batalla de supervivencia, entonces escuchaste un gran rugido de su parte y se paro frente a la digimon lupina y comenzó a gruñir, ya sabias lo que sucedería, y cada célula de tu cuerpo gritaba que te quedaras a ver la batalla que estaba por librarse, aunque tu cerebro te gritaba que te alejaras, no era tu problema, pero aun así querías verlo todo.
GRRRRR… ¡MEGA FLAMA! –Grito de pronto el enorme digimon dinosaurio atigrado lanzando una enorme bola de fuego hacia la Renamon oscura-
¿Ah?, ¿con que esas tenemos? –sonrió y dio un gran salto, aunque se quemo parte de los pies- tsk… ¡KOYOTETSU! –Repitió el mismo ataque lanzándolo esta vez los cristales a los ojos de su enemigo- je… ¡¿Ah?!
¡MURO DE FUEGO! –lanzo fuego hacia el suelo creando un muro de fuego que impidió el ataque- ¡GRAN CUERNO! –corrió a toda velocidad embistiendo a la digimon contra un árbol aprovechando que se encontraba en el aire- ¡MEGA FLAMA! –Lanzo otra bola de fuego aunque fallo por poco-
Al ver semejante golpiza, sentiste que debías correr, pero tus ojos se abrieron con mucho impacto al ver que la digimon se levantaba, tenía muchos raspones, pero seguía de pie, entonces volvió a ocurrir lo mismo, muro de fuego, gran cuerno, mega flama, el mismo resultado, aunque cada vez se repetía más rápido, después de todo era una simple nivel Rookie, lo que te hiso sentir que debías ayudarla, aunque en un momento, todo dio un gran giro.
Cuando la Renamon oscura dio el salto, obviamente el Greymon uso el muro de fuego, pero esta vez, en vez de usar el Koyotetsu, la Renamon dijo otra palabra, “Konekyo”, entonces en un abrir y cerrar de ojos, desapareció y apareció detrás de Greymon, que estando desprevenido, no pudo ver el ataque y por tanto no pudo esquivarlo. Apenas tuvo la oportunidad, la Renamon comenzó a correr, apenas toco el suelo, por el cuerpo de Greymon y sus puños se envolvieron en fuego y comenzó a golpear repetidas veces en varios puntos, aunque Greymon comenzó a rugir de rabia, la Renamon de pelaje negro seguía atacando sin parar, comenzando a dañar la poderosa piel de Greymon.
Cuando el Greymon se canso de ser golpeado, comenzó a moverse con mucha fuerza, logrando lanzar a la Renamon como si nada, pero apenas se preparo Greymon para usar una mega flama, Renamon aprovecho el momento y lanzo un Koyotetsu hacia la boca de Greymon, dejándolo herido, y aunque la caída que aguanto la digimon lupina negra fue dura, logro levantarse una última vez y comenzó a correr para dar el golpe final, por lo que hiso un Konekyo para apecer mas cerca de Greymon, y cuando este logro verla a su espalda, ya que conocía el movimiento, pero no pudo evitar lo siguiente.
¡KOSENGEK! –se paro en la espalda del digimon y dio un pequeño salto, entonces le dio una patada en el rostro lanzándolo contra el suelo- ¡KOYOTETSU! –grito lanzando sus cristales perforando el cuerpo del digimon haciéndolo datos-
¡AAAAHHH! ¡DESGRACIADA! –Fueron las últimas palabras del gran digimon dinosaurio anaranjado de rayas azules-
Je… ah… hack… -sonrió ligeramente mientras caía al suelo levantando una gran cantidad de polvo- hack… necesito… ayuda… -intento levantarse pero lo único que consiguió fue desmayarse en medio de un campo de batalla-
Al ver a la digimon vencer a un digimon tan grande y feroz, además de un nivel mas fuerte, no sabías que hacer, podría ser de ayuda, aunque estaba herida y no tenias por que meterte en sus asuntos. Fuera como fuera, si nadie la ayudaba, seguramente sería aplastada por algún otro digimon hambriento.
- Off:
- Ahora en tu siguiente post tienes las siguientes opciones, dejar atras a la misteriosa renamon de pelaje oscuro y seguir tu camino sin rumbo, o ayudarla para saber verificar que se encuentre bien y de paso interrogarla para saber como es que logro una asaña tecnicamente imposible.
- Tamer & Digimon
- Prueba de Rol :ADigi Puntos :707Cuentas :Ficha :Relaciones :Cronologia :NPCs :Nivel On Rol :DNA Evolution (Super Ultimate)Nivel On Rol de los Digi Aliados :Nova: Mega
BR: MegaIcono :Rango y Unidad :Scott Shadowest Musahrahjy
Rango: Hades Knight
División: Hades Titans
Unidad/Sub-division: Titans
Labramon
Rango: Hades Knight
División: Hades Titans
Unidad/Sub-division: TitansRango y Unidad Digi Aliado :Nova (BlackWarGreymon)
Rango: Hades Knight
División: Hades Titans
Unidad/Sub-division: Titans
BR (Renamon)
Rango: Soldado
División: D-Brigade
Unidad/Sub-division: Shadow LizardInventario :
Scott Desaster
Re: Domando a las Bestias [Misión]
Dracmon y yo nos encontrabamos buscando y buscando a algún digimon que tuviese un tatuaje en el brazo, así creo yo que distinguiría con mayor rapidez a los que son mis ‘’aliados’’, por así decirlo, en esta misión- Aunque no sé para que me esfuerzo, ni siquiera me interesa… -pensé en mis adentros, llevando mis manos a los bolsillos mientras caminaba tranquilamente mirando hacia delante, disfrutando del silencio que a veces era semi opacado por los rugidos de alguno que otro digimon dinosaurio- Heh… muy buena vista, y muy buena calma, ¿No lo crees, Drac? –mi compañero se mostraba algo molesto, o mas bien, aburrido… pues en su rostro no se encontraba su característica sonrisa burlona- Huh… si tu lo dices, pero yo creo que es muy aburrido, no encuentro a alguien con quien divertirme… tu eres el único y te encuentras callado, ¿Cómo puedo molestarte de esa forma? –Jajaja… ver a Dracmon en ese estado me causaba diversión y algo de gracia, emoción que mostraba con una media sonrisa, la cual se deshizo al momento en que el silencio era, ya no solo parte, si no totalmente opacado por mucho ruido no muy lejos de nuestra posición- ¿Qué se oye…? –Dracmon colocó sus manos a los costados, abriendo los ojos que yacían en sus palmas, y los entrecerró un poco con tal de ver mas lejos de su alta capacidad- Hmmm…. ¡Oh! ¡Hay pelea, hay pelea! –exclamó totalmente emocionado, con su sonrisa comúnmente grande- ¡Vamos Kuro, hay que ver que sucede! –inmediatamente me negué, pero mi compañero ni siquiera se detuvo a escuchar eso, ya que sin pensarlo corrió lo mas rápido que pudo- Ugh… -suspiré resignada y lo seguí.
Para cuando llegamos donde se estaba armando el barullo, logramos ver una gran cantidad digimon que habían formado una enorme multitud, todos gritando cosas como ‘’¡Vamos Agumon, ganale a ese zorro!’’ o ‘’¡Tu puedes, Monodramon!’’ Si, definitivamente, había una pelea ahí; y ahora mi compañero se encontraba tan emocionado que hasta temblaba de dicha euforia- ¡Que genial, esto parece una batalla en grande! Kuro, Kuro, ¿Podemos verla? –dicho esto comenzó a repetir miles de veces ‘’Por favor, por favor…’’ pero yo solo lo miraba cruzada de brazos- Estás loco… -‘’No voy a ceder esta vez ante su capricho’’ pensé de inmediato, pero el seguía molestando con su ‘’Por favor, por favor…’’ mientras jalaba mi sudadera- Ugh… eres como un niño, un sucio y mimado niño… -el se rió en sus adentros- ¡Pero te agrada que sea así, lo sé! –yo lo miré fijamente- ¿Quién ha dicho tremenda mentira?... –suspiré- Vamonos Drac, no voy a permitirte ver cosas que te machucaran mas el cerebro, jajaja… si es que tienes… -reí ante mi ultimo comentario, el hizo una mueca de disgusto y siguió mi caminar.
Seguimos caminando sin rumbo por varios minutos, mis piernas ya estaban comenzando a cansarse y mi garganta a secarse, pero no era nada que no pudiera soportar… estoy acostumbrada a este tipo de situaciones, después de todo- Kuro, estamos perdidos –afirmó mi compañero que no dejaba de seguirme, con esa mueca de disgusto aun presente en su rostro- ¿Por qué tan pesimista, amigo mío? Aun no hemos recorrido ni media zona… -el chasqueó la lengua y continuó- Claro, ¿Cómo podríamos recorrer siquiera media zona si no podemos dejar de caminar en círculos? –detuve mi caminar al momento de escuchar ese comentario, volteando a verlo mostrando mi hiperactiva frustración- ¿Cómo que estamos caminando en círculos? ¿Por qué lo dices? D…Drac… no digas estupideces, ¿Es mentira verdad? ¿¡VERDAD!? –el solo se mantuvo en silencio por unos instantes esperando a que me calmara, algo que no pasó realmente, solo fingí calmarme- …No, no es mentira, ¿Ves ese cactus allá? –lo señaló- Tiene una forma que me recuerda a una albóndiga y me da hambre, es el mismo que se encontraba en la zona en la que Buraimon nos dejó –no puede ser, no puede ser…- ¡Hay muchos cactus en forma de albóndiga! ¡No puede ser el mismo, no tiene que ser el mismo! –exclamaba completamente alterada, el nuevamente añadió- No, si es el mismo, tiene aún la forma de la mordida que le dejé y… -sacó su lengua, la cual estaba aún con algunas espinas- Edhta ez la prueba… -¡No, no, no!- ¿¡HEMOS ESTADO CAMINANDO EN CIRCULOS TODO ESTE TIEMPO!? ¡NO PUEDE SER, NO PUEDE SER, AGH…! –comencé a renegar muchas veces, camiando de un lado a otro mostrando mi alteración- ...¡No importa! Caminaré de nuevo siguiendo otro camino… seguro que encontraremos a alguien que nos pueda ayudar, si… si… -comencé a reír de forma alterada, volteando a ver en donde se encontraba ubicado Dracmon- ¿¡No es así, Drac!? –para mi extrañeza, el ya no se encontraba ahí- …¿Dracmon? –no, definitivamente no estaba, no escuchaba su ruidoso respirar. Comencé a buscarlo al principio entre los alrededores, pero después supuse bien en donde se encontraría, además de que en la arena se encontraban aún sus pisadas- …Ese Dracmon… es demasiado predecible –suspiré y seguí sus pisadas.
Para cuando llegué hacia donde se encontraba nuevamente toda la bola de digimon fácilmente, después de buscar un momento con la mirada, pude observar al pequeño vampiro con cola de demonio que se encontraba dando saltos intentando lograr observar pero no podía por culpa de la altura de los demás digimon que tambien miraban ansiosos la pelea- Así te quería ver… -dije con un tono bastante furioso pero a la vez reprimido, mientras me acercaba a mi compañero que no mostraba ni pizca de culpa- ¡Mira Kuro, la pelea sigue! Y ahora los competidores son un Veemon y un Guilmon contra una Renamon -¿Una Renamon? Conocía a los anteriores dos digimon, pero no a la tercera que mencionó; me guardé mis comentarios por un principio y comencé a caminar entre la multitud de digimon reunidos, permitiéndole tambien el paso a mi compañero que ya podía disfrutar mejor de la batalla estando en ‘’primera fila’’. Pude observar como un zorro con apariencia humanoide y de pelaje negro como la noche peleaba contra un Guilmon y un Veemon, tal y como lo había relatado Dracmon- ¿Esa es Renamon? –le pregunté, el ladeó la cabeza extrañado- No... es similar, pero no es Renamon… -¿Ah? ¿Dracmon no sabía de quien se trataba? Inmediatamente saqué mi digivice, intentando buscar información sobre el digimon ahora delante nuestro; pero por mas que buscaba no podía encontrar información alguna- ¿’’No Data’’? –eso era lo que marcaba el digivice mientras mostraba la imagen de ese digimon zorro, que extraño.
Ahora le pelea realmente me había interesado, quería conocer a ese digimon, por lo que tuve que admitir que me entretuve un poco viendo como ese zorro acababa con el Veemon y el Guilmon de un solo ataque, un ataque muy llamativo a mi parecer- Que interesante… -sonreí de lado; ella parecía estar buscando oponente, por un momento sentí temor… llegué a pensar que Dracmon de inmediato levantaría la mano exclamando ‘’¡Yo quiero! ¡Yo quiero! ¡Te mostraré quien es el maestro de las batallas!’’ Seguido de su molesta risa, pero el permaneció callado. En cambio, un digimon mas grande se interpuso empujando bruscamente a algunos de los digimon que se encontraban reunidos, rugiendo con fiereza- Es el Greymon de hace unos momentos, el que devoró los datos del otro… -dije enseguida, pues tenía una marca en el ojo que lo distinguía. El digimon parecía estar dispuesto a derrotar al zorro de colores oscuros, lanzando una extenuante y poderosa bola de fuego que por un momento casi impactaba al digimon, pero logró esquivarlo quemándose solo parte del pie- Vaya, eso estuvo fuerte… -un poco más y seguro no la contaba.
La batalla entre el zorro y el Greymon duro mas de lo que esperaba, el digimon dinosaurio mostraba mucha seguridad sobre si mismo pero, más que de eso, mostraba su alma salvaje como todo digimon de la categoría reptil. En cambio, el zorro se mantenía en total calma, o al menos eso parecía debido a la expresión de su rostro, era algo admirable. El Greymon era fuerte, eso es cierto, no hay mas que esperar de un digimon que se encuentra en su etapa adulta pero… no tenía sesos, defintivamente, sus ataques por muy planeados que estén eran muy repititivos… usaba siempre la misma técnica y eso le dio gran ventaja al digimon zorro que tomaba titulo de ser su oponente. Finalmente ocurrió lo que esperaba, ese digimon de pelaje oscuro logró derrotar con un poderoso ‘’Koyousetsu’’ al Greymon enemigo, volviéndolo no mas que simples datos que regresaron a su forma de digitama y se alejaron- Eso ha sido genial, creo que me he emocionado un poco… ¿Tu que dices, Drac? –para mi sorpresa, mi digimon seguía callado, puede que más callado de lo normal…- …¿Dracmon? –volteé a verlo, el se encontraba mas embobado de lo cual suele estar siempre- ¡Despierta, tonto! –le di un golpe en la cabeza, que lo hizo reaccionar y agitar su cabeza un par de veces- ¿Ah? ¿Qué? ¿Qué pasa? –quizá se había quedado dormido despierto…- ¿Qué te pasó? –el se sobó la mejilla, que fue donde recibió el golpe- No lo sé… me sentí extraño por unos momentos –sonrió abobado- …pero me sentí feliz… -¿Le habrá dado fiebre? Si que actuaba raro… aunque bueno, discutiré eso con el después, ahora la chica zorro se encontraba pidiendo ayuda casi suplicante pero la mayoría de los digimon reunidos solo la miraban con pena y algunos con malicia- Tsk… cobardes, todos son unos inútiles… -pasé de la línea imaginaria que marcaba limite entre la pelea y el publico, y me encontré frente a la chica zorro quien yacía completamente noqueada, ni siquiera se inmutaba un poco con mi presencia, sus ojos yacían cerrados- Esta desmayada… -suspiré, y volteé a ver a Dracmon- Hey, ayúdame con ella, llevémosla a un lugar seguro –Dracmon parecía haberse quedado nuevamente en ese extraño trance, pero en cuanto le volví a llamar reaccionó- ¿Ah…? ¡Ah, si! ¡Voy en un segundo! –corrió hacia mi y tomó al zorro oscuro de su brazo mientras yo le tomaba del otro y me lo colocaba por detrás del cuello.
Comenzamos a caminar por el mismo camino que habíamos tomado hace unos momentos, pues recordaba que no muy lejos de ese lugar había avistado antes una especie de cueva o caverna, a la cual me acerqué con el digimon herido cargado y lo colocamos tanto Dracmon y yo a recostar contra la pared- Realmente se ve que está en graves condiciones… -mencioné con un tono serio pero con leve preocupación en mi voz, volteando a ver después a mi compañero- Hey Drac, ve a buscar un poco de agua, ella lo necesitará –nuevamente, Dracmon se había quedado en el mismo trance que antes, mirando sonriente al digimon a quien intentábamos socorrer- …¡Dracmon! –le llamé su atención, el reaccionó con un salto- ¿Ah? ¿Agua? ¡Si, ya voy, traeré agua para la dama! Digo... para ella... si, si… -corrió fuera de la cueva- Definitivamente, está raro… -suspiré.
Para cuando llegamos donde se estaba armando el barullo, logramos ver una gran cantidad digimon que habían formado una enorme multitud, todos gritando cosas como ‘’¡Vamos Agumon, ganale a ese zorro!’’ o ‘’¡Tu puedes, Monodramon!’’ Si, definitivamente, había una pelea ahí; y ahora mi compañero se encontraba tan emocionado que hasta temblaba de dicha euforia- ¡Que genial, esto parece una batalla en grande! Kuro, Kuro, ¿Podemos verla? –dicho esto comenzó a repetir miles de veces ‘’Por favor, por favor…’’ pero yo solo lo miraba cruzada de brazos- Estás loco… -‘’No voy a ceder esta vez ante su capricho’’ pensé de inmediato, pero el seguía molestando con su ‘’Por favor, por favor…’’ mientras jalaba mi sudadera- Ugh… eres como un niño, un sucio y mimado niño… -el se rió en sus adentros- ¡Pero te agrada que sea así, lo sé! –yo lo miré fijamente- ¿Quién ha dicho tremenda mentira?... –suspiré- Vamonos Drac, no voy a permitirte ver cosas que te machucaran mas el cerebro, jajaja… si es que tienes… -reí ante mi ultimo comentario, el hizo una mueca de disgusto y siguió mi caminar.
Seguimos caminando sin rumbo por varios minutos, mis piernas ya estaban comenzando a cansarse y mi garganta a secarse, pero no era nada que no pudiera soportar… estoy acostumbrada a este tipo de situaciones, después de todo- Kuro, estamos perdidos –afirmó mi compañero que no dejaba de seguirme, con esa mueca de disgusto aun presente en su rostro- ¿Por qué tan pesimista, amigo mío? Aun no hemos recorrido ni media zona… -el chasqueó la lengua y continuó- Claro, ¿Cómo podríamos recorrer siquiera media zona si no podemos dejar de caminar en círculos? –detuve mi caminar al momento de escuchar ese comentario, volteando a verlo mostrando mi hiperactiva frustración- ¿Cómo que estamos caminando en círculos? ¿Por qué lo dices? D…Drac… no digas estupideces, ¿Es mentira verdad? ¿¡VERDAD!? –el solo se mantuvo en silencio por unos instantes esperando a que me calmara, algo que no pasó realmente, solo fingí calmarme- …No, no es mentira, ¿Ves ese cactus allá? –lo señaló- Tiene una forma que me recuerda a una albóndiga y me da hambre, es el mismo que se encontraba en la zona en la que Buraimon nos dejó –no puede ser, no puede ser…- ¡Hay muchos cactus en forma de albóndiga! ¡No puede ser el mismo, no tiene que ser el mismo! –exclamaba completamente alterada, el nuevamente añadió- No, si es el mismo, tiene aún la forma de la mordida que le dejé y… -sacó su lengua, la cual estaba aún con algunas espinas- Edhta ez la prueba… -¡No, no, no!- ¿¡HEMOS ESTADO CAMINANDO EN CIRCULOS TODO ESTE TIEMPO!? ¡NO PUEDE SER, NO PUEDE SER, AGH…! –comencé a renegar muchas veces, camiando de un lado a otro mostrando mi alteración- ...¡No importa! Caminaré de nuevo siguiendo otro camino… seguro que encontraremos a alguien que nos pueda ayudar, si… si… -comencé a reír de forma alterada, volteando a ver en donde se encontraba ubicado Dracmon- ¿¡No es así, Drac!? –para mi extrañeza, el ya no se encontraba ahí- …¿Dracmon? –no, definitivamente no estaba, no escuchaba su ruidoso respirar. Comencé a buscarlo al principio entre los alrededores, pero después supuse bien en donde se encontraría, además de que en la arena se encontraban aún sus pisadas- …Ese Dracmon… es demasiado predecible –suspiré y seguí sus pisadas.
Para cuando llegué hacia donde se encontraba nuevamente toda la bola de digimon fácilmente, después de buscar un momento con la mirada, pude observar al pequeño vampiro con cola de demonio que se encontraba dando saltos intentando lograr observar pero no podía por culpa de la altura de los demás digimon que tambien miraban ansiosos la pelea- Así te quería ver… -dije con un tono bastante furioso pero a la vez reprimido, mientras me acercaba a mi compañero que no mostraba ni pizca de culpa- ¡Mira Kuro, la pelea sigue! Y ahora los competidores son un Veemon y un Guilmon contra una Renamon -¿Una Renamon? Conocía a los anteriores dos digimon, pero no a la tercera que mencionó; me guardé mis comentarios por un principio y comencé a caminar entre la multitud de digimon reunidos, permitiéndole tambien el paso a mi compañero que ya podía disfrutar mejor de la batalla estando en ‘’primera fila’’. Pude observar como un zorro con apariencia humanoide y de pelaje negro como la noche peleaba contra un Guilmon y un Veemon, tal y como lo había relatado Dracmon- ¿Esa es Renamon? –le pregunté, el ladeó la cabeza extrañado- No... es similar, pero no es Renamon… -¿Ah? ¿Dracmon no sabía de quien se trataba? Inmediatamente saqué mi digivice, intentando buscar información sobre el digimon ahora delante nuestro; pero por mas que buscaba no podía encontrar información alguna- ¿’’No Data’’? –eso era lo que marcaba el digivice mientras mostraba la imagen de ese digimon zorro, que extraño.
Ahora le pelea realmente me había interesado, quería conocer a ese digimon, por lo que tuve que admitir que me entretuve un poco viendo como ese zorro acababa con el Veemon y el Guilmon de un solo ataque, un ataque muy llamativo a mi parecer- Que interesante… -sonreí de lado; ella parecía estar buscando oponente, por un momento sentí temor… llegué a pensar que Dracmon de inmediato levantaría la mano exclamando ‘’¡Yo quiero! ¡Yo quiero! ¡Te mostraré quien es el maestro de las batallas!’’ Seguido de su molesta risa, pero el permaneció callado. En cambio, un digimon mas grande se interpuso empujando bruscamente a algunos de los digimon que se encontraban reunidos, rugiendo con fiereza- Es el Greymon de hace unos momentos, el que devoró los datos del otro… -dije enseguida, pues tenía una marca en el ojo que lo distinguía. El digimon parecía estar dispuesto a derrotar al zorro de colores oscuros, lanzando una extenuante y poderosa bola de fuego que por un momento casi impactaba al digimon, pero logró esquivarlo quemándose solo parte del pie- Vaya, eso estuvo fuerte… -un poco más y seguro no la contaba.
La batalla entre el zorro y el Greymon duro mas de lo que esperaba, el digimon dinosaurio mostraba mucha seguridad sobre si mismo pero, más que de eso, mostraba su alma salvaje como todo digimon de la categoría reptil. En cambio, el zorro se mantenía en total calma, o al menos eso parecía debido a la expresión de su rostro, era algo admirable. El Greymon era fuerte, eso es cierto, no hay mas que esperar de un digimon que se encuentra en su etapa adulta pero… no tenía sesos, defintivamente, sus ataques por muy planeados que estén eran muy repititivos… usaba siempre la misma técnica y eso le dio gran ventaja al digimon zorro que tomaba titulo de ser su oponente. Finalmente ocurrió lo que esperaba, ese digimon de pelaje oscuro logró derrotar con un poderoso ‘’Koyousetsu’’ al Greymon enemigo, volviéndolo no mas que simples datos que regresaron a su forma de digitama y se alejaron- Eso ha sido genial, creo que me he emocionado un poco… ¿Tu que dices, Drac? –para mi sorpresa, mi digimon seguía callado, puede que más callado de lo normal…- …¿Dracmon? –volteé a verlo, el se encontraba mas embobado de lo cual suele estar siempre- ¡Despierta, tonto! –le di un golpe en la cabeza, que lo hizo reaccionar y agitar su cabeza un par de veces- ¿Ah? ¿Qué? ¿Qué pasa? –quizá se había quedado dormido despierto…- ¿Qué te pasó? –el se sobó la mejilla, que fue donde recibió el golpe- No lo sé… me sentí extraño por unos momentos –sonrió abobado- …pero me sentí feliz… -¿Le habrá dado fiebre? Si que actuaba raro… aunque bueno, discutiré eso con el después, ahora la chica zorro se encontraba pidiendo ayuda casi suplicante pero la mayoría de los digimon reunidos solo la miraban con pena y algunos con malicia- Tsk… cobardes, todos son unos inútiles… -pasé de la línea imaginaria que marcaba limite entre la pelea y el publico, y me encontré frente a la chica zorro quien yacía completamente noqueada, ni siquiera se inmutaba un poco con mi presencia, sus ojos yacían cerrados- Esta desmayada… -suspiré, y volteé a ver a Dracmon- Hey, ayúdame con ella, llevémosla a un lugar seguro –Dracmon parecía haberse quedado nuevamente en ese extraño trance, pero en cuanto le volví a llamar reaccionó- ¿Ah…? ¡Ah, si! ¡Voy en un segundo! –corrió hacia mi y tomó al zorro oscuro de su brazo mientras yo le tomaba del otro y me lo colocaba por detrás del cuello.
Comenzamos a caminar por el mismo camino que habíamos tomado hace unos momentos, pues recordaba que no muy lejos de ese lugar había avistado antes una especie de cueva o caverna, a la cual me acerqué con el digimon herido cargado y lo colocamos tanto Dracmon y yo a recostar contra la pared- Realmente se ve que está en graves condiciones… -mencioné con un tono serio pero con leve preocupación en mi voz, volteando a ver después a mi compañero- Hey Drac, ve a buscar un poco de agua, ella lo necesitará –nuevamente, Dracmon se había quedado en el mismo trance que antes, mirando sonriente al digimon a quien intentábamos socorrer- …¡Dracmon! –le llamé su atención, el reaccionó con un salto- ¿Ah? ¿Agua? ¡Si, ya voy, traeré agua para la dama! Digo... para ella... si, si… -corrió fuera de la cueva- Definitivamente, está raro… -suspiré.
- Tamer & Digimon
- Prueba de Rol :ADigi Puntos :354Cuentas :Ficha :Cronologia :NPCs :Nivel On Rol :MegaNivel On Rol de los Digi Aliados :UltimateIcono :Rango y Unidad :Haruka Aizawa
Rango: Holy Knight
Unidad: Dragon Spirit
Dracmon
Rango: Holy Knight
Unidad: Dragon SpiritRango y Unidad Digi Aliado :Gaomon
Rango: Knight
Unidad: Dragon SpiritInventario :
Haruka Aizawa
Re: Domando a las Bestias [Misión]
Mientras tu compañero había salido a buscar agua para la digimon zorro, no pudiste evitar tratar de encontrar un tatuaje en su cuerpo para saber si no era una especie de aliada, pero no encontraste nada, hasta que viste sus guantes purpuras, rasgados y llenos de polvo, ¿podría encontrarse el tatuaje allí?, eso era muy posible, aunque era difícil averiguarlo ya que sus guantes cubrían la mayor parte de sus brazos, y están bien atados a sus manos, por lo que quitárselos seria una tarea muy complicada.
Por un momento consideraste la idea de quitarle los guantes por lo que tomaste su brazo y lo volteaste para verle la palma. Tenía un solo nudo en la segunda garra de las tres que ocupaban su mano, que sería la del medio, aunque se veía flojo y sería fácil quitarle los guantes aunque sea unos minutos para examinarla, la digimon comenzó a moverse, temblaba adolorida por tantos golpes, realmente debió costarle haber vencido a ese digimon, mas formar una estrategia sobre la marcha de la batalla, ¿acaso no tenía todo planeado?, quizás no, pensaste, tal vez solo era una simple viajera sin rumbo que se enfrento al oponente menos indicado.
Cuando finalmente lo decidiste, desataste el nudo del brazo que habías levantado, pero al tratar de bajarle el brazo, un garra te sujeto con fuerza, y al levantar la mirada, viste los ojos de la digimon, aun seguía débil, pero en su mirada se notaba la desesperación por detenerte, no tenía fuerzas para luchar, pero si las tenia para intentar defender lo que tal vez fuera su intimidad, al igual que la máscara de Dracmon era importante para él, seguramente los guantes de ella lo eran para ella.
En cuestión de segundos, al verla a los ojos, escuchaste la voz de Dracmon, quien llego con una gran hoja semi-seca llena de agua, aunque pareció entrar en su trance nuevamente al ver a la digimon lupina despierta, aunque a ella le confundió la actitud de Dracmon, regreso su mirada hacia ti, entonces te soltó el brazo y comenzó a respirar lentamente. Por unos segundos sentiste lastima por aquella digimon, en verdad se veía herida y desesperada.
¿Quién… quien eres?... –te dijo con una voz débil y suave, totalmente diferente a cuando estaba peleando- ¿Dónde… dónde estoy?... ¿Qué… ocurrió?... –observo a Dracmon unos segundos- ¿Quién es él?... y… ¿Por qué no deja de mirarme?
Al decir eso observaste a Dracmon, quien seguía en su trance, y decidiste hacerle un favor lanzándole algo de agua a la cara para despertarlo, entonces el acerco el agua a la digimon, que parecía centrada en eso… aunque igual se veía confundida, tal vez no esperaba que la ayudaran, ¿habría estado provocando a los digimons para terminar así?, no, eso no podía ser, una digimon tan fuerte no podía ser masoquista, ¿o sí?, realmente no te importaba tanto, solo querías verla pararse de pie.
Por un momento te quedaste pensando si en verdad había hecho todo para terminar en ese estado, pero tus pensamientos fueron interrumpidos cuando la digimon se levanto, tomo la hoja con agua y se la lanzo encima. Realmente no te esperabas algo así, prácticamente se había dado un baño con toda esa agua, y después se quito los guantes y los exprimió, dejando caer el agua nuevamente en la hoja, para finalmente beberla.
Esta digimon era todo un enigma, aunque el enigma más grande ahora era el de lo que le ocurría a Dracmon, parecía fuera de este mundo, y quizás fuera de otros, aunque es difícil saberlo, tal vez ya lo estaba desde antes. Luego de unos momentos de silencio mientras la digimon se volvía a colocar los guantes y se acomodaba la pequeña melena que le cubría el pecho, te observo detenidamente e hiso una reverencia, para después arrodillarse, en serio, era todo un misterio para ti la actitud de esta digimon.
… muchas gracias… realmente les agradezco por haberme salvado la vida… -suspiro levemente para después ver la salida de la cueva, observando el paisaje- esta zona… es demasiado para mi… pero yo misma eh buscado mi destino… debí morir… pero ustedes… ustedes… -apretó los puños y volvió a suspirar- me han salvado… cambiaron mi destino… por eso les ayudare a cambiar su destino si llega a cambiar de forma negativa
Al escuchar eso, no sabías que responder, realmente no habías entendido casi nada, y preguntarle a Dracmon era una opción, aunque no era muy útil, puesto que parecía haber regresado a su trance, lo más raro, ahora parecía estar babeando, lo que sello la puerta, Dracmon estaba total y completamente enfermo para ti, ya que su comportamiento estaba realmente lejos de su comportamiento habitual.
Luego de unos minutos de silencio puro, la digimon se levanto y se paro frente a los dos, aunque Dracmon estaba más que centrado en ella, por lo que era más necesario que ella se parara frente a ti, al menos eso creías. Cuando se coloco en posición, hiso otra reverencia llevando su brazo izquierdo bajo las costillas e inclinado su cuerpo levemente hacia delante, extrañamente como si fuera una especie de caballero, aunque era claro que era una chica por su tono de voz y por su figura, que, estaba aun herida pero no tanto, en unos minutos había vuelto a tener la apariencia de una simple batalla.
Mi nombre es… BlackRenamon… -volvió a pasarse firmemente y se sonrojo de una forma leve, lo que te pareció extremadamente raro- no te molestes en buscar datos de mi… no existen… soy considerara un error… datos viejos de Renamons caídas en batalla… no soy más que basura para casi todos los digimons que existen en este mundo… -sentiste algo de lastima por la digimon, se veía avergonzada de su nombre, pero después levanto la mirada decidida- pero eso jamás me ah hecho daño… aunque me crean basura… no lo soy… por eso formo parte de algo bueno… aunque… supongo que mis salvadores no tienen por qué escuchar eso… supongo… -dijo riéndose levemente, con un tono casi minúsculo- creo que solo debes saber que mis ataques son los mismos que de una Renamon común… solo que los míos los uso con mayor eficacia… ¿y bien?... ¿Cuál es el nombre del joven que me salvo la vida?... ¿o debo decir jóvenes?... ya que eh notado que tu compañero es un Dracmon…
Al escuchar eso, observaste a Dracmon, quien ahora si había superado los límites de su comportamiento, ya que ahora poseía un gran sonrojo en su rostro, lo cual también confundió a la digimon, ahora identificada como “BlackRenamon”.
Por un momento consideraste la idea de quitarle los guantes por lo que tomaste su brazo y lo volteaste para verle la palma. Tenía un solo nudo en la segunda garra de las tres que ocupaban su mano, que sería la del medio, aunque se veía flojo y sería fácil quitarle los guantes aunque sea unos minutos para examinarla, la digimon comenzó a moverse, temblaba adolorida por tantos golpes, realmente debió costarle haber vencido a ese digimon, mas formar una estrategia sobre la marcha de la batalla, ¿acaso no tenía todo planeado?, quizás no, pensaste, tal vez solo era una simple viajera sin rumbo que se enfrento al oponente menos indicado.
Cuando finalmente lo decidiste, desataste el nudo del brazo que habías levantado, pero al tratar de bajarle el brazo, un garra te sujeto con fuerza, y al levantar la mirada, viste los ojos de la digimon, aun seguía débil, pero en su mirada se notaba la desesperación por detenerte, no tenía fuerzas para luchar, pero si las tenia para intentar defender lo que tal vez fuera su intimidad, al igual que la máscara de Dracmon era importante para él, seguramente los guantes de ella lo eran para ella.
En cuestión de segundos, al verla a los ojos, escuchaste la voz de Dracmon, quien llego con una gran hoja semi-seca llena de agua, aunque pareció entrar en su trance nuevamente al ver a la digimon lupina despierta, aunque a ella le confundió la actitud de Dracmon, regreso su mirada hacia ti, entonces te soltó el brazo y comenzó a respirar lentamente. Por unos segundos sentiste lastima por aquella digimon, en verdad se veía herida y desesperada.
¿Quién… quien eres?... –te dijo con una voz débil y suave, totalmente diferente a cuando estaba peleando- ¿Dónde… dónde estoy?... ¿Qué… ocurrió?... –observo a Dracmon unos segundos- ¿Quién es él?... y… ¿Por qué no deja de mirarme?
Al decir eso observaste a Dracmon, quien seguía en su trance, y decidiste hacerle un favor lanzándole algo de agua a la cara para despertarlo, entonces el acerco el agua a la digimon, que parecía centrada en eso… aunque igual se veía confundida, tal vez no esperaba que la ayudaran, ¿habría estado provocando a los digimons para terminar así?, no, eso no podía ser, una digimon tan fuerte no podía ser masoquista, ¿o sí?, realmente no te importaba tanto, solo querías verla pararse de pie.
Por un momento te quedaste pensando si en verdad había hecho todo para terminar en ese estado, pero tus pensamientos fueron interrumpidos cuando la digimon se levanto, tomo la hoja con agua y se la lanzo encima. Realmente no te esperabas algo así, prácticamente se había dado un baño con toda esa agua, y después se quito los guantes y los exprimió, dejando caer el agua nuevamente en la hoja, para finalmente beberla.
Esta digimon era todo un enigma, aunque el enigma más grande ahora era el de lo que le ocurría a Dracmon, parecía fuera de este mundo, y quizás fuera de otros, aunque es difícil saberlo, tal vez ya lo estaba desde antes. Luego de unos momentos de silencio mientras la digimon se volvía a colocar los guantes y se acomodaba la pequeña melena que le cubría el pecho, te observo detenidamente e hiso una reverencia, para después arrodillarse, en serio, era todo un misterio para ti la actitud de esta digimon.
… muchas gracias… realmente les agradezco por haberme salvado la vida… -suspiro levemente para después ver la salida de la cueva, observando el paisaje- esta zona… es demasiado para mi… pero yo misma eh buscado mi destino… debí morir… pero ustedes… ustedes… -apretó los puños y volvió a suspirar- me han salvado… cambiaron mi destino… por eso les ayudare a cambiar su destino si llega a cambiar de forma negativa
Al escuchar eso, no sabías que responder, realmente no habías entendido casi nada, y preguntarle a Dracmon era una opción, aunque no era muy útil, puesto que parecía haber regresado a su trance, lo más raro, ahora parecía estar babeando, lo que sello la puerta, Dracmon estaba total y completamente enfermo para ti, ya que su comportamiento estaba realmente lejos de su comportamiento habitual.
Luego de unos minutos de silencio puro, la digimon se levanto y se paro frente a los dos, aunque Dracmon estaba más que centrado en ella, por lo que era más necesario que ella se parara frente a ti, al menos eso creías. Cuando se coloco en posición, hiso otra reverencia llevando su brazo izquierdo bajo las costillas e inclinado su cuerpo levemente hacia delante, extrañamente como si fuera una especie de caballero, aunque era claro que era una chica por su tono de voz y por su figura, que, estaba aun herida pero no tanto, en unos minutos había vuelto a tener la apariencia de una simple batalla.
Mi nombre es… BlackRenamon… -volvió a pasarse firmemente y se sonrojo de una forma leve, lo que te pareció extremadamente raro- no te molestes en buscar datos de mi… no existen… soy considerara un error… datos viejos de Renamons caídas en batalla… no soy más que basura para casi todos los digimons que existen en este mundo… -sentiste algo de lastima por la digimon, se veía avergonzada de su nombre, pero después levanto la mirada decidida- pero eso jamás me ah hecho daño… aunque me crean basura… no lo soy… por eso formo parte de algo bueno… aunque… supongo que mis salvadores no tienen por qué escuchar eso… supongo… -dijo riéndose levemente, con un tono casi minúsculo- creo que solo debes saber que mis ataques son los mismos que de una Renamon común… solo que los míos los uso con mayor eficacia… ¿y bien?... ¿Cuál es el nombre del joven que me salvo la vida?... ¿o debo decir jóvenes?... ya que eh notado que tu compañero es un Dracmon…
Al escuchar eso, observaste a Dracmon, quien ahora si había superado los límites de su comportamiento, ya que ahora poseía un gran sonrojo en su rostro, lo cual también confundió a la digimon, ahora identificada como “BlackRenamon”.
- Tamer & Digimon
- Prueba de Rol :ADigi Puntos :707Cuentas :Ficha :Relaciones :Cronologia :NPCs :Nivel On Rol :DNA Evolution (Super Ultimate)Nivel On Rol de los Digi Aliados :Nova: Mega
BR: MegaIcono :Rango y Unidad :Scott Shadowest Musahrahjy
Rango: Hades Knight
División: Hades Titans
Unidad/Sub-division: Titans
Labramon
Rango: Hades Knight
División: Hades Titans
Unidad/Sub-division: TitansRango y Unidad Digi Aliado :Nova (BlackWarGreymon)
Rango: Hades Knight
División: Hades Titans
Unidad/Sub-division: Titans
BR (Renamon)
Rango: Soldado
División: D-Brigade
Unidad/Sub-division: Shadow LizardInventario :
Scott Desaster
Re: Domando a las Bestias [Misión]
Me encontraba observando detenidamente la figura de ese digimon zorro que se encontraba aún frente a mis ojos- Se ve bastante lastimada… ¿Por qué me siento así…? –No era de las personas que suelen preocuparse por otras, mucho menos de los digimon, pero… no lo sé, creo que veo algo en ella, algo que me hace sentir nostalgia; recuerdo que la primera vez que vi a Dracmon sentí esa misma sensación nostálgica, él me recordaba a mi cuando apenas era una pequeña niña desprotegida de la vida que deseaba con todas sus fuerzas hacerse mas fuerte, y para eso, necesitaba ayuda, alguien que la apoyara… y fue la misma razón de que esas personas me concedieron estar con ellos la razón por la cual acepté a Dracmon a mi lado pese a que me haga la vida imposible de vez en cuando. En cambio, este digimon del cual mi digivice sigue sin tener reacción alguna me recordaba a mi un par de años después de… ¿Cómo llamarle?... Bueno, yo siempre he dicho que ‘’evolucioné’’ así que así le llamaré: Evolución.
En esos tiempos, seguía bastante herida por lo que le ocurrió a mi banda, resentida por la vida por como me había tratado, sé que la vida suele darte lecciones para que aprendas pero… ¿Por qué tenía que restregármelo en la cara tantas veces?... Eso es algo que no podía comprender, odiaba la vida por eso, odiaba a las personas que yacían a mi alrededor… sentía como si todos fueran mis enemigos y, por lo tanto, me volví hostil desde aquel entonces, como si yo fuera solo una basura de la vida, alguien que debía ser rechazada por el resto de las personas. Aprendí entonces a adaptarme a la soledad, a ser fuerte por mi misma, y por fuerza… hacía lo que sea; recuerdo que mi mayor ocio en esos momentos era ir a uno de los callejones mas peligrosos donde dormitan las ‘’bestias’’ de la calle, unos de los bandidos mas peligrosos que son perseguidos por la policía, ¿Y que hacía yo? ¿A charlar un momento con ellos? Jajajaja… No, para nada, iba a provocarles, a molestarlos; tenía toda la intención de hacerlos rabiar hasta el punto de querer acabar conmigo para siempre, pero yo veía eso como un juego de la vida, como la vida me odia… yo tambien la odiaré, y rechazaré sus llamados a la muerte de esa forma- Me reiré y burlaré de la vida, así como ella ha hecho eso conmigo –era lo que pensaba en esos momentos. Por supuesto, había veces en las que terminaba bastante lastimada, pero siempre me salía con la mía… esa era la vida de la calle, solamente gana quien es mas fuerte, esa era nuestra ‘’cadena alimenticia’’.
- ¿Por qué razón habrás hecho todas esas cosas? ¿Lo hiciste al mismo plan que yo, o por algo incluso mas complicado…? –le pregunté en mis adentros, mientras la miraba inmóvil pero haciendo de vez en cuando gestos de dolor- Ahora que lo pienso… ¿Ella tendrá ese extraño tatuaje? –alcé mi ceja, y me arrodillé dudosa frente a ella, viendo como aún permanecía inmóvil pese a mi antiguo movimiento que podía llamar la atención de cualquier despierto- Esta inconsciente… creo que debería comenzar a buscar esa marca… -suspiré, intentando hacer uso de mis ‘’nervios de acero’’. Primero que nada intenté buscar por sus piernas, hombros, entre otras partes visibles del cuerpo pero…- No hay nada… -sentí decepción, suspirando con degano, pero después algo llamó mi atención- Esos guantes… -los miré detenidamente, los únicos símbolos que tenían esos guantes eran el signo del balance, del ‘’Yin y el Yang’’, pero no había ningún signo demoniaco ahí…- No está… pero… -¿Qué habría detrás de esos guantes?... Para un tatuaje tan feo, hasta yo intentaría ocultarlo, quizá ella igual lo intenta ocultar con esos extravagantes guantes que tiene.
Dudé un poco al principio, es cierto, pero después me decidí e intenté quitarle los guantes, no sin antes observar como es que se desprendía una prenda tan bien sujeta, por suerte había cierta parte que parecía algo desgastada y me permitiría que pudiese ver aunque sea una parte de su brazo descubierto antes de volvérselo a poner- Bien, aquí vamos… -suspiré, intentando controlar mis nervios, y tocando ese delgado hilo desgastado, pero al momento en que quise jalarlo inmediatamente me tomó la mano con fuerza- Tsk… -cerré los ojos por el dolor que me provocaba esa fuerza, pero no grité ni nada por el estilo, en cambio… abri los ojos y miré los ojos nuevamente abiertos de esa chica zorro frente a mi; sentí un golpe en el pecho al ver esos ojos tan… tristes, si, tristes, conozco bien una mirada que representa tristeza y sufrimiento, pero esa ‘’desesperación’’ la ocultaba perfectamente detrás de un rostro calmado e indiferente- Otra vez esa sensación de nostalgia… -fruncí levemente el ceño.
Algo llamó nuestra atención, provocando que la chica zorro frente a mi dejara de apretar con tanta fuerza mi mano y me soltara, volteamos a ver al mismo tiempo a quien había llegado- ¡Kuro, mira! ¡Traje el a…! –cortó su frase de inmediato al intercambiar miradas con el zorro que ya había finalmente despertado, pero ella desvió la mirada de inmediato a pesar de que mi compañero seguía con una cara de bobo que, esta vez, mostraba una sonrisa- Ugh, no de nuevo… -me levanté y caminé hacia mi compañero, mojando su rostro con un poco de esa agua que había traído en una hoja como recipiente- Vamos amigo, despierta, estás quedando en ridículo… -el agitó su cabeza un par de veces y rió leve- Ajaja… Si, lo siento… -suspiró, y fue hacia la digimon zorro y le dejó la hoja con agua a un lado mientras ella se encontraba aún con la mirada desviada; poco después abrió por primera vez su boca, aunque a simple vista no parecía que la abriese, pues su forma impedía que viera… llegaba a parecer que hablaba telepáticamente- Ignora al digimon a un lado tuyo, el es mi compañero, pero no tiene cabeza en estos momentos… creo que está enfermo o algo así –suspiré, acercándome a ella y tocando su frente para comprobar que al menos, en su estado, no tuviese temperatura o algo por el estilo- Yo me llamo Kuro; Dracmon y yo veíamos lo ocurrido mientras peleabas contra Greymon y los otros… ¿Qué fue lo que te pasó? –suspiré, a pesar de que yo comprendía esa manía por pelear con otros seres mas fuertes, ahora mismo sentía como si me hubiese vuelto mas consecuente con mis actos… y por lo mismo ya no comprendía del todo bien esa sensación, además, tambien quería saber la razón del porque había hecho eso- Ahora mismo estás en una caverna que mi compañero y yo avistamos no hace mucho, era la mas cercana a nuestra antigua posición, y debías reposar de inmediato… así que… -volteé a ver a Dracmon quien había vuelto en ese trance, pero está vez reaccionó antes de que yo hiciese algo para llamar su atención- A..Ah… -suspiró- Te traje agua, puedes beber un poco… o todo… si quieres… jejejeje… -¿Cómo? ¿Desde cuando Dracmon habla de esa forma? Yo conozco a mi compañero, el usualmente diría ‘’Toma tu agua, trágatela toda o haz lo que quieras con ella… ¡Jajaja..! ¡La necesitarás!’’- Hey Drac, ¿Tienes fiebre, o algo así? –el me miró confundido- ¿Fiebre? No, para nada, ¿Por? –‘’¿Por?’’ ¿Cómo que ‘’¿Por?’’? Dracmon idiota, no se ha dado cuenta de su extraña conducta, pero bueno, no puedo pedir mucho de él en cuanto a intelecto se refiere.
La digimon miraba con atención el agua que le ofrecía mi compañero, y sin pensárselo mucho la tomó y se la echó encima como si estuviese tomando un baño con ella- Vaya, eso no me lo esperaba –sonreí un poco por gracia, pude notar que ante esto Dracmon sonrió a tal manera de que abría un poco la boca y soltaba algo de baba- Ugh, amigo, límpiate esa cosa… -dije con repulsión pero el estaba completamente en trance, ni siquiera escuchó lo que dije, pero eso no importó mucho… puesto que el digimon volvió a hablar, agradeciendo por el trato que le habíamos dado- ¿Destino?... –jajaja… así que ella es de los seres que creen en el destino, que interesante, yo debo admitir que hay veces que me pongo a pensar en el destino como si en realidad estuviese escrito pero… eso no es cierto, el destino se escribe por medio de nuestros actos, y como ella lo ha dicho… un pequeño cambio lograría cambiar lo que el destino nos tiene preparado- Tu destino no es morir, no aquí, no ahora, de eso puedes estar segura –nuevamente con mi manía de decir cosas como si estuviese completamente segura de eso, pero era una especie de reacción involuntaria mía para calmar a las personas que yacen a mi alrededor o inclusive a mi misma, una especie de ‘’auto-engaño’’ que, bien, aunque no sea cierto… a veces nos puede salvar de muchas cosas, del pesimismo quizá.
El digimon se levantó, y con una suave reverencia como si de un caballero se tratase, se presentó como ‘’BlackRenamon’’- Vaya, ¿Así que si es una ‘’Renamon’’ después de todo? Solo que de diferente color… -eso era interesante, no pude evitar sonreír de lado como era costumbre mía- Un momento, ¿Qué es eso en sus mejillas? ¿’’Sonrojo’’? –mostré una mueca rara, como de disgusto- Espero que Dracmon no esté babeando a montones ahora mismo, evitaré mirarlo para ahorrarme disgustos –al parecer ella estaba consciente de que mi digivice no podía leer su información como podía hacerlo con otros digimon; según ella, se consideraba como una ‘’basura’’- Tsk… ¿Enserio se traga lo que los demás piensen de ella? –mostré cierta extraña furia que bien pude controlar, pero en mi expresión se mostraba ese resentimiento, una mueca que se desvaneció y pasó a ser sorpresa ante su siguente comentario- Admirable, ciertamente admirable… -fue lo primero que pasó por mi mente ante escuchar eso- Ah… -reaccioné, un poco tarde, pues estaba envuelta en mis pensamientos- …Creo habértelo ya dicho antes, pero creo que no has escuchado, mi nombre es Kuro… es un placer conocerte, ‘’BlackRenamon’’ –volteé a ver a Dracmon, quien de inmediato se limpió la saliva que aún resbalaba por su boca y tomó con euforia la mano de ella, agitándola con ambas manos como si fuese una clase de saludo desesperado- ¡Te sabes mi nombre, es increíble! D…Digo… Si, yo me llamo Dracmon, aunque a veces me llaman ‘’Drac’’ como disminutivo… -se dio cuenta de que mientras decía esto seguía agitando con desesperación la mano de la chica zorro, por lo que la soltó algo apenado- Ajajaja… jajaja… lo siento… -¿Cómo? ¿Dracmon se ha disculpado? Pero que diablos le pasa…- Perdonalo, el no es así usualmente, creo que le hizo mal haber mordido un cactus hace unos momentos… puesto que desde ese entonces no ha parado de quedarse abobado de repente –le dije mi deducción ante el extraño comportamiento de mi compañero, pero después suspiré y la miré mas tranquila- Y bien ‘’BlackRenamon’’, si has dicho que esta zona es demasiado para ti… ¿Significa que no eres de aquí? –normalmente, si uno viviera en una zona, se acostumbra a esta y no tiene porque ‘’serle dificil’’, aunque lo mas probable es que esta enigmática digimon era de la clase ‘’nomada’’- ¿Y porque retabas a esos digimon pese a ser algunos mas fuertes que tu? ¿Enserio no le temes a la muerte?
En esos tiempos, seguía bastante herida por lo que le ocurrió a mi banda, resentida por la vida por como me había tratado, sé que la vida suele darte lecciones para que aprendas pero… ¿Por qué tenía que restregármelo en la cara tantas veces?... Eso es algo que no podía comprender, odiaba la vida por eso, odiaba a las personas que yacían a mi alrededor… sentía como si todos fueran mis enemigos y, por lo tanto, me volví hostil desde aquel entonces, como si yo fuera solo una basura de la vida, alguien que debía ser rechazada por el resto de las personas. Aprendí entonces a adaptarme a la soledad, a ser fuerte por mi misma, y por fuerza… hacía lo que sea; recuerdo que mi mayor ocio en esos momentos era ir a uno de los callejones mas peligrosos donde dormitan las ‘’bestias’’ de la calle, unos de los bandidos mas peligrosos que son perseguidos por la policía, ¿Y que hacía yo? ¿A charlar un momento con ellos? Jajajaja… No, para nada, iba a provocarles, a molestarlos; tenía toda la intención de hacerlos rabiar hasta el punto de querer acabar conmigo para siempre, pero yo veía eso como un juego de la vida, como la vida me odia… yo tambien la odiaré, y rechazaré sus llamados a la muerte de esa forma- Me reiré y burlaré de la vida, así como ella ha hecho eso conmigo –era lo que pensaba en esos momentos. Por supuesto, había veces en las que terminaba bastante lastimada, pero siempre me salía con la mía… esa era la vida de la calle, solamente gana quien es mas fuerte, esa era nuestra ‘’cadena alimenticia’’.
- ¿Por qué razón habrás hecho todas esas cosas? ¿Lo hiciste al mismo plan que yo, o por algo incluso mas complicado…? –le pregunté en mis adentros, mientras la miraba inmóvil pero haciendo de vez en cuando gestos de dolor- Ahora que lo pienso… ¿Ella tendrá ese extraño tatuaje? –alcé mi ceja, y me arrodillé dudosa frente a ella, viendo como aún permanecía inmóvil pese a mi antiguo movimiento que podía llamar la atención de cualquier despierto- Esta inconsciente… creo que debería comenzar a buscar esa marca… -suspiré, intentando hacer uso de mis ‘’nervios de acero’’. Primero que nada intenté buscar por sus piernas, hombros, entre otras partes visibles del cuerpo pero…- No hay nada… -sentí decepción, suspirando con degano, pero después algo llamó mi atención- Esos guantes… -los miré detenidamente, los únicos símbolos que tenían esos guantes eran el signo del balance, del ‘’Yin y el Yang’’, pero no había ningún signo demoniaco ahí…- No está… pero… -¿Qué habría detrás de esos guantes?... Para un tatuaje tan feo, hasta yo intentaría ocultarlo, quizá ella igual lo intenta ocultar con esos extravagantes guantes que tiene.
Dudé un poco al principio, es cierto, pero después me decidí e intenté quitarle los guantes, no sin antes observar como es que se desprendía una prenda tan bien sujeta, por suerte había cierta parte que parecía algo desgastada y me permitiría que pudiese ver aunque sea una parte de su brazo descubierto antes de volvérselo a poner- Bien, aquí vamos… -suspiré, intentando controlar mis nervios, y tocando ese delgado hilo desgastado, pero al momento en que quise jalarlo inmediatamente me tomó la mano con fuerza- Tsk… -cerré los ojos por el dolor que me provocaba esa fuerza, pero no grité ni nada por el estilo, en cambio… abri los ojos y miré los ojos nuevamente abiertos de esa chica zorro frente a mi; sentí un golpe en el pecho al ver esos ojos tan… tristes, si, tristes, conozco bien una mirada que representa tristeza y sufrimiento, pero esa ‘’desesperación’’ la ocultaba perfectamente detrás de un rostro calmado e indiferente- Otra vez esa sensación de nostalgia… -fruncí levemente el ceño.
Algo llamó nuestra atención, provocando que la chica zorro frente a mi dejara de apretar con tanta fuerza mi mano y me soltara, volteamos a ver al mismo tiempo a quien había llegado- ¡Kuro, mira! ¡Traje el a…! –cortó su frase de inmediato al intercambiar miradas con el zorro que ya había finalmente despertado, pero ella desvió la mirada de inmediato a pesar de que mi compañero seguía con una cara de bobo que, esta vez, mostraba una sonrisa- Ugh, no de nuevo… -me levanté y caminé hacia mi compañero, mojando su rostro con un poco de esa agua que había traído en una hoja como recipiente- Vamos amigo, despierta, estás quedando en ridículo… -el agitó su cabeza un par de veces y rió leve- Ajaja… Si, lo siento… -suspiró, y fue hacia la digimon zorro y le dejó la hoja con agua a un lado mientras ella se encontraba aún con la mirada desviada; poco después abrió por primera vez su boca, aunque a simple vista no parecía que la abriese, pues su forma impedía que viera… llegaba a parecer que hablaba telepáticamente- Ignora al digimon a un lado tuyo, el es mi compañero, pero no tiene cabeza en estos momentos… creo que está enfermo o algo así –suspiré, acercándome a ella y tocando su frente para comprobar que al menos, en su estado, no tuviese temperatura o algo por el estilo- Yo me llamo Kuro; Dracmon y yo veíamos lo ocurrido mientras peleabas contra Greymon y los otros… ¿Qué fue lo que te pasó? –suspiré, a pesar de que yo comprendía esa manía por pelear con otros seres mas fuertes, ahora mismo sentía como si me hubiese vuelto mas consecuente con mis actos… y por lo mismo ya no comprendía del todo bien esa sensación, además, tambien quería saber la razón del porque había hecho eso- Ahora mismo estás en una caverna que mi compañero y yo avistamos no hace mucho, era la mas cercana a nuestra antigua posición, y debías reposar de inmediato… así que… -volteé a ver a Dracmon quien había vuelto en ese trance, pero está vez reaccionó antes de que yo hiciese algo para llamar su atención- A..Ah… -suspiró- Te traje agua, puedes beber un poco… o todo… si quieres… jejejeje… -¿Cómo? ¿Desde cuando Dracmon habla de esa forma? Yo conozco a mi compañero, el usualmente diría ‘’Toma tu agua, trágatela toda o haz lo que quieras con ella… ¡Jajaja..! ¡La necesitarás!’’- Hey Drac, ¿Tienes fiebre, o algo así? –el me miró confundido- ¿Fiebre? No, para nada, ¿Por? –‘’¿Por?’’ ¿Cómo que ‘’¿Por?’’? Dracmon idiota, no se ha dado cuenta de su extraña conducta, pero bueno, no puedo pedir mucho de él en cuanto a intelecto se refiere.
La digimon miraba con atención el agua que le ofrecía mi compañero, y sin pensárselo mucho la tomó y se la echó encima como si estuviese tomando un baño con ella- Vaya, eso no me lo esperaba –sonreí un poco por gracia, pude notar que ante esto Dracmon sonrió a tal manera de que abría un poco la boca y soltaba algo de baba- Ugh, amigo, límpiate esa cosa… -dije con repulsión pero el estaba completamente en trance, ni siquiera escuchó lo que dije, pero eso no importó mucho… puesto que el digimon volvió a hablar, agradeciendo por el trato que le habíamos dado- ¿Destino?... –jajaja… así que ella es de los seres que creen en el destino, que interesante, yo debo admitir que hay veces que me pongo a pensar en el destino como si en realidad estuviese escrito pero… eso no es cierto, el destino se escribe por medio de nuestros actos, y como ella lo ha dicho… un pequeño cambio lograría cambiar lo que el destino nos tiene preparado- Tu destino no es morir, no aquí, no ahora, de eso puedes estar segura –nuevamente con mi manía de decir cosas como si estuviese completamente segura de eso, pero era una especie de reacción involuntaria mía para calmar a las personas que yacen a mi alrededor o inclusive a mi misma, una especie de ‘’auto-engaño’’ que, bien, aunque no sea cierto… a veces nos puede salvar de muchas cosas, del pesimismo quizá.
El digimon se levantó, y con una suave reverencia como si de un caballero se tratase, se presentó como ‘’BlackRenamon’’- Vaya, ¿Así que si es una ‘’Renamon’’ después de todo? Solo que de diferente color… -eso era interesante, no pude evitar sonreír de lado como era costumbre mía- Un momento, ¿Qué es eso en sus mejillas? ¿’’Sonrojo’’? –mostré una mueca rara, como de disgusto- Espero que Dracmon no esté babeando a montones ahora mismo, evitaré mirarlo para ahorrarme disgustos –al parecer ella estaba consciente de que mi digivice no podía leer su información como podía hacerlo con otros digimon; según ella, se consideraba como una ‘’basura’’- Tsk… ¿Enserio se traga lo que los demás piensen de ella? –mostré cierta extraña furia que bien pude controlar, pero en mi expresión se mostraba ese resentimiento, una mueca que se desvaneció y pasó a ser sorpresa ante su siguente comentario- Admirable, ciertamente admirable… -fue lo primero que pasó por mi mente ante escuchar eso- Ah… -reaccioné, un poco tarde, pues estaba envuelta en mis pensamientos- …Creo habértelo ya dicho antes, pero creo que no has escuchado, mi nombre es Kuro… es un placer conocerte, ‘’BlackRenamon’’ –volteé a ver a Dracmon, quien de inmediato se limpió la saliva que aún resbalaba por su boca y tomó con euforia la mano de ella, agitándola con ambas manos como si fuese una clase de saludo desesperado- ¡Te sabes mi nombre, es increíble! D…Digo… Si, yo me llamo Dracmon, aunque a veces me llaman ‘’Drac’’ como disminutivo… -se dio cuenta de que mientras decía esto seguía agitando con desesperación la mano de la chica zorro, por lo que la soltó algo apenado- Ajajaja… jajaja… lo siento… -¿Cómo? ¿Dracmon se ha disculpado? Pero que diablos le pasa…- Perdonalo, el no es así usualmente, creo que le hizo mal haber mordido un cactus hace unos momentos… puesto que desde ese entonces no ha parado de quedarse abobado de repente –le dije mi deducción ante el extraño comportamiento de mi compañero, pero después suspiré y la miré mas tranquila- Y bien ‘’BlackRenamon’’, si has dicho que esta zona es demasiado para ti… ¿Significa que no eres de aquí? –normalmente, si uno viviera en una zona, se acostumbra a esta y no tiene porque ‘’serle dificil’’, aunque lo mas probable es que esta enigmática digimon era de la clase ‘’nomada’’- ¿Y porque retabas a esos digimon pese a ser algunos mas fuertes que tu? ¿Enserio no le temes a la muerte?
- Tamer & Digimon
- Prueba de Rol :ADigi Puntos :354Cuentas :Ficha :Cronologia :NPCs :Nivel On Rol :MegaNivel On Rol de los Digi Aliados :UltimateIcono :Rango y Unidad :Haruka Aizawa
Rango: Holy Knight
Unidad: Dragon Spirit
Dracmon
Rango: Holy Knight
Unidad: Dragon SpiritRango y Unidad Digi Aliado :Gaomon
Rango: Knight
Unidad: Dragon SpiritInventario :
Haruka Aizawa
Re: Domando a las Bestias [Misión]
La digimon se quedo callada unos momentos, en primer lugar se sujetaba la mano y se la frotaba, tal vez había sido por el saludo de Dracmon, si ella se encontraba aun herida, era muy posible que ese saludo solo le hiciera doler aun mas. Luego de un momento suspiro y dirigió su mirada hacia ti y hacia Dracmon, por un momento en sus ojos parecía molesta, seguramente era así, ¿a quién le gustaría que le hiciera doler mas después de un momento al borde de la muerte?, la respuesta es clara, a nadie, menos.
En un instante la digimon conocida como BlackRenamon desapareció, al principio pensaste que se había ido por las cuestiones de lo que le ocurría a Dracmon, y al voltear para regañarlo, visto que la digimon estaba detrás de él, y que con un rápido movimiento de manos, logro sujetar la mano del digimon y comenzó a apretar hasta el punto en que sonó un hueso, después, la digimon soltó la mano de Dracmon y sonrió ligeramente, algo poco usual en las Renamons de cualquier tipo, aunque ella no era una Renamon ordinaria según lo que había revelado antes.
Al ver eso no pudiste evitar reír, menos con la expresión del rostro en Dracmon, no parecía adolorido, pero igual era graciosa, después observaste a la digimon quien rápidamente dirigió su mirada hacia ti, no parecía querer hacerte lo mismo que a Dracmon, pero si parecía hacer algo, aunque no sabías que, hasta que abrió la boca, o hablo de forma telepática, aun era confusa su forma de comunicarse.
Yo… no soy una nómada… pero tampoco tengo un hogar fijo… -respondió con un poco de desahogo mientas se sentaba en el suelo- realmente… mi único hogar es con mi familia… la cual no se encuentra aquí… está trabajando lejos y trato de encontrarlos… no soy alguien paciente… me gusta salir y viajar con el viento y enfrentarme al lugar donde me lleve… por eso viene aquí… sentí que mi familia estaría por aquí… aunque me eh equivocado… estoy sola en este lugar –se sentó de manera en que pudiera sujetar sus rodillas, como si fuera una niña pequeña-
Al escuchar eso realmente sentiste lastima, la forma en la que actuaba, era algo diferente a como peleaba, pero igual seguía mostrando esa expresión de calma y control, parecía que era algo natural en ella, aunque igualmente se notaba la tristeza en su rostro, aunque buscaba a su familia, la cual seguramente no era formada por digimons como ella, ella los buscaba para estar en su hogar, el cual con anterioridad dijo que era con su familia.
Por un momento quisiste decirle que podrías ayudarla, después recordaste la misión, aunque no deseabas hacerla, tampoco deseabas dejar a la digimon sola, parecía extraño, pero era como si te hubieras encariñado con ella, aun si no la conocías ni siquiera más de 15 minutos.
Finalmente decidiste acercarte a ella para subirle el ánimo, aunque ella se levanto rápidamente, y te observo junto a Dracmon, quien parecía haber vuelto al trance y a la baba, aunque parecía que esta vez respondería antes, aunque eso aun estaba por verse desde tu punto de vista, el cual quería darle un puñetazo para despertarlo, aunque no querías quedar mal frente a una digimon como BlackRenamon.
Yo… no creo en la muerte… aun si existe… no le temo… realmente me parece ridículo… nadie muere… lo que sucede en la supuesta muerte es que… “perdemos nuestros cuerpos”… pero el espíritu y el alma siempre duran… así es… el cuerpo es algo que podemos recuperar en alguna nueva vida… pero la muerte no existe –sonrió con un toque de confianza y seriedad a la vez, casi como tu cuanto te enfrentabas a tipos que se metían contigo- yo desafié a esos digimons porque quería saber si este lugar en verdad albergaba a los digimons mas fuertes en cuerpo… aunque me equivoque… todos los Rookie de por aquí son tan fuertes como Gomamon… nada que no pueda resolver con unos pocos puñetazos
Al escuchar eso, realmente te sentiste identificada con esta digimon, su forma de actuar, de ser, de hablar, era casi como tú, ella parecía tener un estilo de vida no muy bueno, pero si tenía un sentido de la vida firme, algo poco usual en varios digimons, aunque realmente era la primera vez que pudieras escuchar algo así de un digimon.
En cuanto a lo que me ocurrió… pues ah sido todo mi culpa… mis provisiones se agotaron hace una semana… y no eh dejado de batallar contra esos pequeños debiluchos… eh tratado de sacarles algo de comida… apostando mis cosas… vendas… guantes… pelaje… ¿espera?... –se quedo tildada un segundo- ¡¿mis vendas?! ¡¿Dónde están mis vendas?! –Se quito rápidamente los guantes y se levanto la melena- haaa… no las tengo… significa que las perdí… haaa… -se dejo caer en el suelo y se puso los guantes de nuevo- juro que matare al digimon que me las haya arrebatado…
Por un momento te sentiste confundida, ¿a qué vendas se refería?, cuando estaba peleando no tenía ninguna especie de vendaje para evitar heridas, solo tenía sus guantes, aunque seguro las habría perdido antes y se había olvidado, ¿Quién no se olvidaría de algo si cae noqueado después de una batalla en medio de una zona donde la temperatura es muy elevada?, la respuesta es fácil, nadie, nadie no se olvidaría de algo en ese tipo de circunstancias.
Pronto viste que la digimon se levanto algo resignada, evidentemente esas “vendas”, eran de mucho valor para ella, por lo que decidiste mejor no preguntar para evitar darle un mal rato. Luego de un momento de silencio, BlackRenamon se acerco a Dracmon y le hiso sacarla lengua, al principio no entendiste nada, pero después viste como le quitaba las espinas de la boca, entonces le viste el sentido, ella quería ayudar a Dracmon a dejar de estar enfermo, lo que por un momento te dio algo de risa y algo de vergüenza, tener que ver como tu compañero era revisado para quitarle unas espinas, ¿no es algo muy… decente?, no, definitivamente daba algo de pena ver como Dracmon estaba más que quieto observando como la digimon lupina de pelaje oscuro le quitaba las espinas.
Y bien… ¿Qué hacen aquí? –Pregunto sin dejar de sacar las espinas de la boda de Dracmon- tengo entendido que pocos Tamers vienen aquí… y menos cuando sus digimons no son del tipo reptil… cosa que “Drac”, no es… después de todo se reconocer a un tipo vampiro y estoy totalmente segura que Drac es de ese tipo –al decir eso termino de sacarle las espinas de la boca y se levanto para observarte- díganme… tal vez les pueda ser de ayuda… llevo 2 meses viviendo por aquí… conozco casi toda la zona…
¿2 meses?, la única palabra que se formo en tu mente cuando escuchas eso, fue “increíble…”.
En un instante la digimon conocida como BlackRenamon desapareció, al principio pensaste que se había ido por las cuestiones de lo que le ocurría a Dracmon, y al voltear para regañarlo, visto que la digimon estaba detrás de él, y que con un rápido movimiento de manos, logro sujetar la mano del digimon y comenzó a apretar hasta el punto en que sonó un hueso, después, la digimon soltó la mano de Dracmon y sonrió ligeramente, algo poco usual en las Renamons de cualquier tipo, aunque ella no era una Renamon ordinaria según lo que había revelado antes.
Al ver eso no pudiste evitar reír, menos con la expresión del rostro en Dracmon, no parecía adolorido, pero igual era graciosa, después observaste a la digimon quien rápidamente dirigió su mirada hacia ti, no parecía querer hacerte lo mismo que a Dracmon, pero si parecía hacer algo, aunque no sabías que, hasta que abrió la boca, o hablo de forma telepática, aun era confusa su forma de comunicarse.
Yo… no soy una nómada… pero tampoco tengo un hogar fijo… -respondió con un poco de desahogo mientas se sentaba en el suelo- realmente… mi único hogar es con mi familia… la cual no se encuentra aquí… está trabajando lejos y trato de encontrarlos… no soy alguien paciente… me gusta salir y viajar con el viento y enfrentarme al lugar donde me lleve… por eso viene aquí… sentí que mi familia estaría por aquí… aunque me eh equivocado… estoy sola en este lugar –se sentó de manera en que pudiera sujetar sus rodillas, como si fuera una niña pequeña-
Al escuchar eso realmente sentiste lastima, la forma en la que actuaba, era algo diferente a como peleaba, pero igual seguía mostrando esa expresión de calma y control, parecía que era algo natural en ella, aunque igualmente se notaba la tristeza en su rostro, aunque buscaba a su familia, la cual seguramente no era formada por digimons como ella, ella los buscaba para estar en su hogar, el cual con anterioridad dijo que era con su familia.
Por un momento quisiste decirle que podrías ayudarla, después recordaste la misión, aunque no deseabas hacerla, tampoco deseabas dejar a la digimon sola, parecía extraño, pero era como si te hubieras encariñado con ella, aun si no la conocías ni siquiera más de 15 minutos.
Finalmente decidiste acercarte a ella para subirle el ánimo, aunque ella se levanto rápidamente, y te observo junto a Dracmon, quien parecía haber vuelto al trance y a la baba, aunque parecía que esta vez respondería antes, aunque eso aun estaba por verse desde tu punto de vista, el cual quería darle un puñetazo para despertarlo, aunque no querías quedar mal frente a una digimon como BlackRenamon.
Yo… no creo en la muerte… aun si existe… no le temo… realmente me parece ridículo… nadie muere… lo que sucede en la supuesta muerte es que… “perdemos nuestros cuerpos”… pero el espíritu y el alma siempre duran… así es… el cuerpo es algo que podemos recuperar en alguna nueva vida… pero la muerte no existe –sonrió con un toque de confianza y seriedad a la vez, casi como tu cuanto te enfrentabas a tipos que se metían contigo- yo desafié a esos digimons porque quería saber si este lugar en verdad albergaba a los digimons mas fuertes en cuerpo… aunque me equivoque… todos los Rookie de por aquí son tan fuertes como Gomamon… nada que no pueda resolver con unos pocos puñetazos
Al escuchar eso, realmente te sentiste identificada con esta digimon, su forma de actuar, de ser, de hablar, era casi como tú, ella parecía tener un estilo de vida no muy bueno, pero si tenía un sentido de la vida firme, algo poco usual en varios digimons, aunque realmente era la primera vez que pudieras escuchar algo así de un digimon.
En cuanto a lo que me ocurrió… pues ah sido todo mi culpa… mis provisiones se agotaron hace una semana… y no eh dejado de batallar contra esos pequeños debiluchos… eh tratado de sacarles algo de comida… apostando mis cosas… vendas… guantes… pelaje… ¿espera?... –se quedo tildada un segundo- ¡¿mis vendas?! ¡¿Dónde están mis vendas?! –Se quito rápidamente los guantes y se levanto la melena- haaa… no las tengo… significa que las perdí… haaa… -se dejo caer en el suelo y se puso los guantes de nuevo- juro que matare al digimon que me las haya arrebatado…
Por un momento te sentiste confundida, ¿a qué vendas se refería?, cuando estaba peleando no tenía ninguna especie de vendaje para evitar heridas, solo tenía sus guantes, aunque seguro las habría perdido antes y se había olvidado, ¿Quién no se olvidaría de algo si cae noqueado después de una batalla en medio de una zona donde la temperatura es muy elevada?, la respuesta es fácil, nadie, nadie no se olvidaría de algo en ese tipo de circunstancias.
Pronto viste que la digimon se levanto algo resignada, evidentemente esas “vendas”, eran de mucho valor para ella, por lo que decidiste mejor no preguntar para evitar darle un mal rato. Luego de un momento de silencio, BlackRenamon se acerco a Dracmon y le hiso sacarla lengua, al principio no entendiste nada, pero después viste como le quitaba las espinas de la boca, entonces le viste el sentido, ella quería ayudar a Dracmon a dejar de estar enfermo, lo que por un momento te dio algo de risa y algo de vergüenza, tener que ver como tu compañero era revisado para quitarle unas espinas, ¿no es algo muy… decente?, no, definitivamente daba algo de pena ver como Dracmon estaba más que quieto observando como la digimon lupina de pelaje oscuro le quitaba las espinas.
Y bien… ¿Qué hacen aquí? –Pregunto sin dejar de sacar las espinas de la boda de Dracmon- tengo entendido que pocos Tamers vienen aquí… y menos cuando sus digimons no son del tipo reptil… cosa que “Drac”, no es… después de todo se reconocer a un tipo vampiro y estoy totalmente segura que Drac es de ese tipo –al decir eso termino de sacarle las espinas de la boca y se levanto para observarte- díganme… tal vez les pueda ser de ayuda… llevo 2 meses viviendo por aquí… conozco casi toda la zona…
¿2 meses?, la única palabra que se formo en tu mente cuando escuchas eso, fue “increíble…”.
- Off:
- Ahora tienes dos opciones, le cuentas de tu mision a BlackRenamon esperando que pueda ayudarte, o no, ya que ella habia venido para encontrar a su familia, que podria ser cualquier digimon, incluyendo los fugitivos, o cambias el tema esperando que ella se distraiga para averiguar mas de ella y de su "familia".
- Tamer & Digimon
- Prueba de Rol :ADigi Puntos :707Cuentas :Ficha :Relaciones :Cronologia :NPCs :Nivel On Rol :DNA Evolution (Super Ultimate)Nivel On Rol de los Digi Aliados :Nova: Mega
BR: MegaIcono :Rango y Unidad :Scott Shadowest Musahrahjy
Rango: Hades Knight
División: Hades Titans
Unidad/Sub-division: Titans
Labramon
Rango: Hades Knight
División: Hades Titans
Unidad/Sub-division: TitansRango y Unidad Digi Aliado :Nova (BlackWarGreymon)
Rango: Hades Knight
División: Hades Titans
Unidad/Sub-division: Titans
BR (Renamon)
Rango: Soldado
División: D-Brigade
Unidad/Sub-division: Shadow LizardInventario :
Scott Desaster
Re: Domando a las Bestias [Misión]
BlackRenamon no se veía para nada feliz, al contrario, podía verle con claridad el gesto que llevaba en el rostro que no marcaba otra cosa mas que un disgusto que bien puede ser confundido como ‘’enojo’’ Por un momento me quedé pensando- ¿Por qué estará molesta? –pero mi pregunta fue rápidamente contestada al momento en que vi como ella se sobaba con tanto afán su mano- Ugh, demonios… Dracmon la lastimó con su desmedida fuerza, enserio… ¿Qué le está ocurriendo a mi compañero? –Jamás había visto algo similar en ningún otro lado, ¿Será enserio que el cactus tenía una especie de veneno raro que hacía que el digimon afectado por sus espinas termine embobado a tal punto que… éste como Dracmon?
Vi de inmediato como, en un simple pestañear, la Renamon que antes se encontraba frente a nosotros ya no estaba… ¿Se habría ido? Volteé a ver hacia mis lados una y otra vez- ¡Dracmon, la asustaste! –exclamé furiosa, el tambien se preocupó a un punto extraño para su personalidad- ¿¡Desapareció!? –miró hacia sus lados extrañado- ¿¡Donde está, Donde está!? ¡Ni siquiera tuve tiempo de despedirme…! ¡¡KURO!! -…esta bien, esto ya es demasiado extraño hasta para mi, ¿Acaso Dracmon estaría a punto de llorar? Por desgracia nunca muestra los ojos que lleva en las palmas de sus manos, son muy raras las ocasiones, así que no podría ver si están húmedos o no, pero su forma de hablar no podía mostrar algo más que desesperación y tristeza, como cuando uno ha hecho algo terriblemente malo. Mientras Dracmon se lamentaba por lo que había hecho, vi como una sombra se formaba detrás de el, conocía esa forma, era ella.
De un ágil movimiento hizo que Dracmon volteara a verla y le tomó su mano, por un momento el sonrió cautivado pero su expresión fue bruscamente cambiada a una de dolor en cuanto se escucharon el crujir de los huesos de su mano- AHHH….!! Jajaja… ja… -se quedó abobado de nuevo, con la lengua de fuera y un poco de saliva colgando de esta. Está bien, sé que es malo esto pero…- Pffft… -cubrí mi boca con mi puño para evitar reírme, pero fue demasiado tarde, me comencé a reír a un volumen optimo, no tan alto como suele reírse Dracmon, pero tampoco era demasiado bajo. Mi risa terminó al ver como BlackRenamon volteaba a verme, sonreí de forma nerviosa- Ajaja… No me hagas lo mismo que a el, yo prefiero saludar de lejos –seguí riendo de forma nerviosa, pero ella no parecía tener intención alguna de hacerme daño, creo que le hizo eso a Dracmon porque se lo buscaba… aunque a el no le pareció importarle mucho, es mas, había vuelto a ese extraño trance.
Ella volvió a hablar, esta vez, para contestarme las preguntas que anteriormente le había hecho; su respuesta fue algo inesperada… pues involucró a su familia en ella- ¿Ella… tiene familia? –eso era algo que, bueno, debo admitir que jamás se me hubiese pasado por la mente; para empezar, no sabía que los digimon tenían ‘’familia’’ pues hace poco había entendido que nacían de unos huevos que, después de morir, se regeneraban y volvían a un pueblo conocido como ‘’La Ciudad del Comienzo’’, aunque en caso de que estos datos fuesen absorbidos el digimon moriría para siempre- Me pregunto si llegara el día en que los digimon ya no puedan regenerarse mas… al parecer ellos no pueden procrear, entonces, ¿Qué sucederá con el digimundo? –fue una pregunta fugaz que pasó por mi mente, pero poco después volví mi atención hacia la Renamon de distintos colores, quien a resumidas cuentas, se había perdido de su familia y ahora se encontraba viajando por todo el digimundo en busca de ese hogar al que fácilmente puede llamar ‘’familia’’, o al menos eso había entendido con su relato- Que historia mas… -suspiré- ...conmovedora… aunque es una lastima que mi fuerte no es ayudar a nadie que tenga esta clase de problemas emocionales, simplemente… no es mi fuerte –hace mucho, tuve que cerrar mi corazón a sentimientos extremos como el amor, el cariño, respeto, confianza… era mi forma de ‘’auto-engaño’’ para evitar sufrir más por cuestiones emocionales, Tsk… como odio ese tipo de emociones.
Intenté acercarme a ella, no soy buena dando palabras de aliento, normalmente mis frases de ‘’auto-engaño’’ como el que dije hace unos momentos sobre que ella no iba a morir aquí y ahora salen por si solas, y si no salen, no puedo obligarlas a ser dichas. En el momento en que me acerqué a ella, de inmediato se levantó del suelo y se alejó un poco de nosotros para darnos la espalda un momento mientras movía su cola de un lado a otro con elegancia como cualquier otro zorro común, pero después volteaba a vernos. Volteé a ver a Dracmon quien parecía un perro con esa lengua de fuera y salivosa, lo único que pude hacer para ayudarlo fue poner mis dedos debajo de su mandibula y obligarlo a cerrar su boca para evitar que salivara más y tuviera un poco de dignidad ante la BlackRenamon.
Sus palabras, esta vez, fueron para contestar mi segunda pregunta… sobre que opinaba ella de la muerte, y al mismo tiempo, que me dijera sus intenciones al retar tan frenéticamente a todos esos digimon en etapa infante y adulto. Su respuesta fue, ¿Cómo decirlo…? Muy madura en mi opinión, jamás se me hubiese ocurrido que un digimon, mucho menos que permanezca en etapa Infante, tuviese ese tipo de razonamientos e ideas, definitivamente, BlackRenamon era única en su especie. Su forma de hablar remarcaba la seriedad y afirmación, ella confiaba en sus palabras, algo que no muchos digimon e incluso muchas personas son incapaces de hacer… normalmente todos suelen ‘’seguir la corriente’’ y terminan haciendo y pensando todo lo que los demás digan, aunque sea de forma inconsciente, pero lo hacen… ella no, ella creía solo en sus ideales sin que los demás, sin que nadie mas, sea obstáculo…- Admirable… -me había sentido mas de una vez identificada con ella, era curioso, bastante curioso.
Después de eso la situación se puso un poco rara a mi punto de vista, ella seguía contestándome lo que había pasado con los retos de los digimon y la verdadera razón de esto, pero antes de que terminara de hablar comenzó a comportarse extraña, ansiosa y preocupada- ¿Vendas?... ¿De que vendas está hablando? –no recordaba haberle visto unas vendas, pero ciertamente le ponía mucha importancia a esas cosas, por lo que seguro eso era algo muy importante para ella… ¿Serán esas vendas lo mismo que para mi mi chaqueta, que sería capaz de matar a quien sea si me la llegasen a arrebatar?- Si es así, comprendo su angustia completamente… -fruncí mi ceño, mostrando una extraña determinación; tenía ganas de ayudarle a encontrarlas, pero en ese momento pasó algo fugazmente por mi mente- ¡La misión…! Lo había olvidado por completo –Tsk… ahora había otra situación mas que me hacía sentir en desagusto, y era que tenía que encontrar algo que me guiara hacia esa misión; ni siquiera sé con claridad que debía hacer, recuerdo que en la carta había leído algo sobre unos ‘’Digimon fugitivos’’, se me hace muy irónico que me hablen a mi que soy una fugitiva igual para que les ayude a atrapar a otros fugitivos… definitivamente no hago esto con gusto, si no porque estoy siendo ‘’obligada’’ por Dracmon y el antiguo Buraimon que ni siquiera se detuvo a decirnos aunque sea un poco de esta misión, solo nos dejó a nuestra suerte en medio de la nada.
El estar pensando en esto, hizo que no hubiese prestado mucha atención en lo que ahora BlackRenamon se encontraba haciéndole a mi compañero- …¿Qué demonios?... –no hallaba forma a lo que estaba haciendo, tuve que moverme a un diferente angulo para poder observar con mayor eficacia, al parecer le estaba quitando las espinas de la lengua- Oh vamos… esto no puede ser… -Dracmon tenía una cara de tonto mientras se dejaba hacer lo que BlackRenamon quisiera y desease, realmente es estúpido…- Pero bueno, aunque no creo que quitarle las espinas ayude a extraerle el veneno, aunque sea servirá para que el veneno no afecté mas a su pobre y casi innotable cerebro.
Volteé a ver hacia otro lado, para no ver como a mi compañero le estaban manoseando la lengua sin que el dijese algo al respecto, era humillante para mi que soy su Tamer- Estamos aquí para una misión –dije directamente, pues no en ningún momento vi que era una ‘’misión secreta’’ y aún si lo fuese no me importaría en lo absoluto- Me dieron una carta donde yace un extraño sello demoniaco, mira –me acerqué a ella y, del bolsillo de mi sudadera, saqué dicho pergamino-carta que se lo entregué- En esta misión dice algo sobre unos digimon fugitivos, pero no remarca muy bien de que digimon se tratan o a donde debo ir primero, solo dice que el problema a tratar era aquí, en la Zona Prehistorica –me comencé a rascar un poco la cabeza- Dices que has vivido dos meses aquí, seguramente debes saber aunque sea un poco sobre de que Digimon fugitivos habla la carta… -opiné, esperando lo mejor, al momento en que dije esto miré a mi compañero… y en mi se presentó un extraño sentimiento de preocupación, tragué saliva apenada, y sin mirar a los ojos a la digimon le dije- …Pero antes de eso… quisiera saber si de casualidad no conoces a algún chamán o cualquier tipo de digimon que pudiese ayudarme un poco con lo que le sucede a Dracmon… -suspiré- No es muy común de mi decir esto, pero en verdad me preocupa lo que le ocurre… a pesar de que las espinas hayan sido removidas sin problemas, algo que en verdad te agradezco, probablemente el veneno que poseen éstas ya hayan afectado el cerebro de mi compañero, y probablemente un medico chamán sepa como curarlo.
Vi de inmediato como, en un simple pestañear, la Renamon que antes se encontraba frente a nosotros ya no estaba… ¿Se habría ido? Volteé a ver hacia mis lados una y otra vez- ¡Dracmon, la asustaste! –exclamé furiosa, el tambien se preocupó a un punto extraño para su personalidad- ¿¡Desapareció!? –miró hacia sus lados extrañado- ¿¡Donde está, Donde está!? ¡Ni siquiera tuve tiempo de despedirme…! ¡¡KURO!! -…esta bien, esto ya es demasiado extraño hasta para mi, ¿Acaso Dracmon estaría a punto de llorar? Por desgracia nunca muestra los ojos que lleva en las palmas de sus manos, son muy raras las ocasiones, así que no podría ver si están húmedos o no, pero su forma de hablar no podía mostrar algo más que desesperación y tristeza, como cuando uno ha hecho algo terriblemente malo. Mientras Dracmon se lamentaba por lo que había hecho, vi como una sombra se formaba detrás de el, conocía esa forma, era ella.
De un ágil movimiento hizo que Dracmon volteara a verla y le tomó su mano, por un momento el sonrió cautivado pero su expresión fue bruscamente cambiada a una de dolor en cuanto se escucharon el crujir de los huesos de su mano- AHHH….!! Jajaja… ja… -se quedó abobado de nuevo, con la lengua de fuera y un poco de saliva colgando de esta. Está bien, sé que es malo esto pero…- Pffft… -cubrí mi boca con mi puño para evitar reírme, pero fue demasiado tarde, me comencé a reír a un volumen optimo, no tan alto como suele reírse Dracmon, pero tampoco era demasiado bajo. Mi risa terminó al ver como BlackRenamon volteaba a verme, sonreí de forma nerviosa- Ajaja… No me hagas lo mismo que a el, yo prefiero saludar de lejos –seguí riendo de forma nerviosa, pero ella no parecía tener intención alguna de hacerme daño, creo que le hizo eso a Dracmon porque se lo buscaba… aunque a el no le pareció importarle mucho, es mas, había vuelto a ese extraño trance.
Ella volvió a hablar, esta vez, para contestarme las preguntas que anteriormente le había hecho; su respuesta fue algo inesperada… pues involucró a su familia en ella- ¿Ella… tiene familia? –eso era algo que, bueno, debo admitir que jamás se me hubiese pasado por la mente; para empezar, no sabía que los digimon tenían ‘’familia’’ pues hace poco había entendido que nacían de unos huevos que, después de morir, se regeneraban y volvían a un pueblo conocido como ‘’La Ciudad del Comienzo’’, aunque en caso de que estos datos fuesen absorbidos el digimon moriría para siempre- Me pregunto si llegara el día en que los digimon ya no puedan regenerarse mas… al parecer ellos no pueden procrear, entonces, ¿Qué sucederá con el digimundo? –fue una pregunta fugaz que pasó por mi mente, pero poco después volví mi atención hacia la Renamon de distintos colores, quien a resumidas cuentas, se había perdido de su familia y ahora se encontraba viajando por todo el digimundo en busca de ese hogar al que fácilmente puede llamar ‘’familia’’, o al menos eso había entendido con su relato- Que historia mas… -suspiré- ...conmovedora… aunque es una lastima que mi fuerte no es ayudar a nadie que tenga esta clase de problemas emocionales, simplemente… no es mi fuerte –hace mucho, tuve que cerrar mi corazón a sentimientos extremos como el amor, el cariño, respeto, confianza… era mi forma de ‘’auto-engaño’’ para evitar sufrir más por cuestiones emocionales, Tsk… como odio ese tipo de emociones.
Intenté acercarme a ella, no soy buena dando palabras de aliento, normalmente mis frases de ‘’auto-engaño’’ como el que dije hace unos momentos sobre que ella no iba a morir aquí y ahora salen por si solas, y si no salen, no puedo obligarlas a ser dichas. En el momento en que me acerqué a ella, de inmediato se levantó del suelo y se alejó un poco de nosotros para darnos la espalda un momento mientras movía su cola de un lado a otro con elegancia como cualquier otro zorro común, pero después volteaba a vernos. Volteé a ver a Dracmon quien parecía un perro con esa lengua de fuera y salivosa, lo único que pude hacer para ayudarlo fue poner mis dedos debajo de su mandibula y obligarlo a cerrar su boca para evitar que salivara más y tuviera un poco de dignidad ante la BlackRenamon.
Sus palabras, esta vez, fueron para contestar mi segunda pregunta… sobre que opinaba ella de la muerte, y al mismo tiempo, que me dijera sus intenciones al retar tan frenéticamente a todos esos digimon en etapa infante y adulto. Su respuesta fue, ¿Cómo decirlo…? Muy madura en mi opinión, jamás se me hubiese ocurrido que un digimon, mucho menos que permanezca en etapa Infante, tuviese ese tipo de razonamientos e ideas, definitivamente, BlackRenamon era única en su especie. Su forma de hablar remarcaba la seriedad y afirmación, ella confiaba en sus palabras, algo que no muchos digimon e incluso muchas personas son incapaces de hacer… normalmente todos suelen ‘’seguir la corriente’’ y terminan haciendo y pensando todo lo que los demás digan, aunque sea de forma inconsciente, pero lo hacen… ella no, ella creía solo en sus ideales sin que los demás, sin que nadie mas, sea obstáculo…- Admirable… -me había sentido mas de una vez identificada con ella, era curioso, bastante curioso.
Después de eso la situación se puso un poco rara a mi punto de vista, ella seguía contestándome lo que había pasado con los retos de los digimon y la verdadera razón de esto, pero antes de que terminara de hablar comenzó a comportarse extraña, ansiosa y preocupada- ¿Vendas?... ¿De que vendas está hablando? –no recordaba haberle visto unas vendas, pero ciertamente le ponía mucha importancia a esas cosas, por lo que seguro eso era algo muy importante para ella… ¿Serán esas vendas lo mismo que para mi mi chaqueta, que sería capaz de matar a quien sea si me la llegasen a arrebatar?- Si es así, comprendo su angustia completamente… -fruncí mi ceño, mostrando una extraña determinación; tenía ganas de ayudarle a encontrarlas, pero en ese momento pasó algo fugazmente por mi mente- ¡La misión…! Lo había olvidado por completo –Tsk… ahora había otra situación mas que me hacía sentir en desagusto, y era que tenía que encontrar algo que me guiara hacia esa misión; ni siquiera sé con claridad que debía hacer, recuerdo que en la carta había leído algo sobre unos ‘’Digimon fugitivos’’, se me hace muy irónico que me hablen a mi que soy una fugitiva igual para que les ayude a atrapar a otros fugitivos… definitivamente no hago esto con gusto, si no porque estoy siendo ‘’obligada’’ por Dracmon y el antiguo Buraimon que ni siquiera se detuvo a decirnos aunque sea un poco de esta misión, solo nos dejó a nuestra suerte en medio de la nada.
El estar pensando en esto, hizo que no hubiese prestado mucha atención en lo que ahora BlackRenamon se encontraba haciéndole a mi compañero- …¿Qué demonios?... –no hallaba forma a lo que estaba haciendo, tuve que moverme a un diferente angulo para poder observar con mayor eficacia, al parecer le estaba quitando las espinas de la lengua- Oh vamos… esto no puede ser… -Dracmon tenía una cara de tonto mientras se dejaba hacer lo que BlackRenamon quisiera y desease, realmente es estúpido…- Pero bueno, aunque no creo que quitarle las espinas ayude a extraerle el veneno, aunque sea servirá para que el veneno no afecté mas a su pobre y casi innotable cerebro.
Volteé a ver hacia otro lado, para no ver como a mi compañero le estaban manoseando la lengua sin que el dijese algo al respecto, era humillante para mi que soy su Tamer- Estamos aquí para una misión –dije directamente, pues no en ningún momento vi que era una ‘’misión secreta’’ y aún si lo fuese no me importaría en lo absoluto- Me dieron una carta donde yace un extraño sello demoniaco, mira –me acerqué a ella y, del bolsillo de mi sudadera, saqué dicho pergamino-carta que se lo entregué- En esta misión dice algo sobre unos digimon fugitivos, pero no remarca muy bien de que digimon se tratan o a donde debo ir primero, solo dice que el problema a tratar era aquí, en la Zona Prehistorica –me comencé a rascar un poco la cabeza- Dices que has vivido dos meses aquí, seguramente debes saber aunque sea un poco sobre de que Digimon fugitivos habla la carta… -opiné, esperando lo mejor, al momento en que dije esto miré a mi compañero… y en mi se presentó un extraño sentimiento de preocupación, tragué saliva apenada, y sin mirar a los ojos a la digimon le dije- …Pero antes de eso… quisiera saber si de casualidad no conoces a algún chamán o cualquier tipo de digimon que pudiese ayudarme un poco con lo que le sucede a Dracmon… -suspiré- No es muy común de mi decir esto, pero en verdad me preocupa lo que le ocurre… a pesar de que las espinas hayan sido removidas sin problemas, algo que en verdad te agradezco, probablemente el veneno que poseen éstas ya hayan afectado el cerebro de mi compañero, y probablemente un medico chamán sepa como curarlo.
- Tamer & Digimon
- Prueba de Rol :ADigi Puntos :354Cuentas :Ficha :Cronologia :NPCs :Nivel On Rol :MegaNivel On Rol de los Digi Aliados :UltimateIcono :Rango y Unidad :Haruka Aizawa
Rango: Holy Knight
Unidad: Dragon Spirit
Dracmon
Rango: Holy Knight
Unidad: Dragon SpiritRango y Unidad Digi Aliado :Gaomon
Rango: Knight
Unidad: Dragon SpiritInventario :
Haruka Aizawa
Re: Domando a las Bestias [Misión]
Apenas le mencionaste a la digimon el tema de la “misión”, sentiste como una mano reposaba en tu hombro, y al voltear la viste observándote detenidamente, aunque su mirada parecía molesta, tenía una leve sonrisa en el rostro, algo muy extraño, y después suspiro levemente para responder a todas tus dudas, aunque con su tiempo. En definitiva, esta digimon sabe cómo hacer las cosas, con calma y sin prisas.
Aunque al principio dudaste de si había visto algo, el solo vivir dos meses en un lugar no puede indicar abiertamente que ella sabría algo, pero por su forma de actuar, era más que notorio que podría saberlo, aunque esto estaba por verse cuando te respondiera, pero antes de soltar todo lo que sabía, le cerró la boca a Dracmon que había comenzado a babear de nuevo y después se sentó con las piernas cruzadas como si estuviera meditando, aunque seguramente era normal, esta digimon lucia del tipo de gente que pelea con el cerebro y el espíritu, y lo prepara todo con una meditación simple y una respiración lenta.
Eh visto a muchos digimons en estos dos largos meses Kuro… pero te aseguro que no puedo decirte nada si no se ninguna característica de los enemigos… -levanto las “orejas” que tenía en la cabeza y sonrió levemente- pero te aseguro… que si tienes una misión… debes cumplirla y dar lo mejor de ti… las misiones dan una grata experiencia tanto en combate como en espíritu… cada batalla… cada confrontamiento… todo en una misión te puede brindar algo para hacerte más fuerte y así impedir que los seres a los que amas sean heridos…
Al escuchar esa frase, realmente querías decirle directamente que ella era madura, lo suficiente para no tener que preocuparse tanto por su familia, después de todo, a ese grado de madurez ella no tendría por qué preocuparse, si su familia estaba unida, no tendrían problemas, y ella podría tener una vida tranquila, lejos de las preocupaciones con ese grado de madurez tan grande.
Aunque antes de que pudieras abrir la boca, BlackRenamon se levanto y te devolvió el pergamino, aunque lo vio solo un momento y no había mencionado nada sobre el sello, que era una posible característica de los digimons, a lo cual ella dijo que no tenía nada, era posible que solo fuera un sello para decorar, aunque la forma en la que apretó los puños te hiso creer que algo la molestaba y mucho si después de un instante golpeo la pared dejando una marca de su puño en la misma, sin importarle el dolor de su mano.
Esos bastardos… subestimando a mi familia… creyéndola innecesaria… nada hace que mi sangre hierba mas de rabia que eso… -se observo el puño y se lo sujeto, no mostraba señales de dolor pero parecía desanimada- Kuro… déjame ayudarte en tu misión por favor… estoy segura que mi familia me diría que te ayude… asique por favor acepta a esta lupina “basura” como tu aliada contra estos criminales… -sonrió ligeramente con ese sentido de la confianza que tanto te recordaba a ti misma- después de todo… tú necesitas una guía por esta zona y yo a alguien que pueda ayudarme a pelear… odio admitirlo… pero nos necesitamos para esto –comenzó a reírse levemente, no se veía como si quisiera ayuda, por lo que sonreíste, era igual a ti también en el sentido de que no quería ayuda de extraños- en cuanto a lo del chaman… pues creo saber dónde encontrar uno… y si los cactus en verdad tienen veneno… será mejor llevar a Drac rápido con el chaman antes de que empeore su estado
Luego de decir eso, BlackRenamon se levanto y cargo a Dracmon en su espalda, cosa que te dio risa, el seguía en su extraño trance, pero ahora tenía una cara aun mas graciosa, aunque preferiste guardarte tus risas para no fastidiarlo más, después de todo parecía estar envenenado y el veneno afectaba mucho su sistema central, por lo que burlarse era un problema.
Luego de unos 30 minutos caminando por la gran zona desértica, tanto tu como BlackRenamon lograron visualizar una especie de choza hecha con ramas secas y con mantas para pasar la noche, básicamente, la típica chocita de chaman del desierto, hecha para tener sombra en el día y no tener frio en la noche, algo ingenioso, pero el punto era llegar rápido para que el chaman que viviera allí tratara a Dracmon rápidamente.
Cuando las dos llegaron a la choza, entraron sin preocupaciones, pero antes de que pudieran avanzar ni un paso, un digimon “babuino” usando una gran mascara y con una gran mascara con detalles aborígenes en el rostro las saco afuera rápidamente, y entonces comenzó a quejarse, haciendo movimientos extraños de mono enojado, lo que en un principio parecía gracioso, hasta que salió otro gran digimon. Este si tenía apariencia de mala persona que deseaba únicamente a los que seguramente creyera dignos, y a este punto, era más que obvio que las echaría a ambas. El gran digimon con rostro de jabalí y de gran túnica verde las observo unos instantes, y antes de que pudiera decir nada, otro digimon salió, una especie de Goblimon pero este era diferente, su piel era verde oscuro y su cabello verde claro, sus ropas eran azules. El “Goblimon”, a comparación de los otros dos digimons era más pequeño, pero se veía que él era el jefe allí.
Veo que has regresado… “error” –dijo seriamente observando a BlackRenamon- ¿a qué has venido?, además de buscar problemas en esta zona tan tranquila de este lugar tan caótico… -entrecerró los ojos para fijar bien la mirada- ¿y qué le has hecho a ese pobre e inocente digimon vampiro?
Shamanmon… yo no eh tenido nada que ver con lo que le sucede a este digimon… pero te ruego que… lo ayudes por favor… creemos que por morder un cactus, ah entrado una especie de veneno en su cuerpo… -dijo la digimon lupina con un tono igual de serio, pero más firme- por favor… se que a mi jamás me ayudarías por ser una basura digital… pero ayúdalo a él… un verdadero digimon que nació en todo derecho…
… bien… tienes un buen punto… -dio un suspiro y entro a la choza- Sepikmon, Baromon… háganlos entrar a los 3… y sean corteses… por esta vez el error será nuestra invitada…
Al escuchar eso, los dos digimons las observaron y abrieron las puertas, o mantas que eran como puertas, de la choza dejándolas pasar, aunque al principio no te había gustado el trato que te dieron, ahora no podías quejarte ya que este “Shamanmon”, era el único que podía ayudar a Dracmon y decirte lo que le ocurría.
Aunque al principio dudaste de si había visto algo, el solo vivir dos meses en un lugar no puede indicar abiertamente que ella sabría algo, pero por su forma de actuar, era más que notorio que podría saberlo, aunque esto estaba por verse cuando te respondiera, pero antes de soltar todo lo que sabía, le cerró la boca a Dracmon que había comenzado a babear de nuevo y después se sentó con las piernas cruzadas como si estuviera meditando, aunque seguramente era normal, esta digimon lucia del tipo de gente que pelea con el cerebro y el espíritu, y lo prepara todo con una meditación simple y una respiración lenta.
Eh visto a muchos digimons en estos dos largos meses Kuro… pero te aseguro que no puedo decirte nada si no se ninguna característica de los enemigos… -levanto las “orejas” que tenía en la cabeza y sonrió levemente- pero te aseguro… que si tienes una misión… debes cumplirla y dar lo mejor de ti… las misiones dan una grata experiencia tanto en combate como en espíritu… cada batalla… cada confrontamiento… todo en una misión te puede brindar algo para hacerte más fuerte y así impedir que los seres a los que amas sean heridos…
Al escuchar esa frase, realmente querías decirle directamente que ella era madura, lo suficiente para no tener que preocuparse tanto por su familia, después de todo, a ese grado de madurez ella no tendría por qué preocuparse, si su familia estaba unida, no tendrían problemas, y ella podría tener una vida tranquila, lejos de las preocupaciones con ese grado de madurez tan grande.
Aunque antes de que pudieras abrir la boca, BlackRenamon se levanto y te devolvió el pergamino, aunque lo vio solo un momento y no había mencionado nada sobre el sello, que era una posible característica de los digimons, a lo cual ella dijo que no tenía nada, era posible que solo fuera un sello para decorar, aunque la forma en la que apretó los puños te hiso creer que algo la molestaba y mucho si después de un instante golpeo la pared dejando una marca de su puño en la misma, sin importarle el dolor de su mano.
Esos bastardos… subestimando a mi familia… creyéndola innecesaria… nada hace que mi sangre hierba mas de rabia que eso… -se observo el puño y se lo sujeto, no mostraba señales de dolor pero parecía desanimada- Kuro… déjame ayudarte en tu misión por favor… estoy segura que mi familia me diría que te ayude… asique por favor acepta a esta lupina “basura” como tu aliada contra estos criminales… -sonrió ligeramente con ese sentido de la confianza que tanto te recordaba a ti misma- después de todo… tú necesitas una guía por esta zona y yo a alguien que pueda ayudarme a pelear… odio admitirlo… pero nos necesitamos para esto –comenzó a reírse levemente, no se veía como si quisiera ayuda, por lo que sonreíste, era igual a ti también en el sentido de que no quería ayuda de extraños- en cuanto a lo del chaman… pues creo saber dónde encontrar uno… y si los cactus en verdad tienen veneno… será mejor llevar a Drac rápido con el chaman antes de que empeore su estado
Luego de decir eso, BlackRenamon se levanto y cargo a Dracmon en su espalda, cosa que te dio risa, el seguía en su extraño trance, pero ahora tenía una cara aun mas graciosa, aunque preferiste guardarte tus risas para no fastidiarlo más, después de todo parecía estar envenenado y el veneno afectaba mucho su sistema central, por lo que burlarse era un problema.
Luego de unos 30 minutos caminando por la gran zona desértica, tanto tu como BlackRenamon lograron visualizar una especie de choza hecha con ramas secas y con mantas para pasar la noche, básicamente, la típica chocita de chaman del desierto, hecha para tener sombra en el día y no tener frio en la noche, algo ingenioso, pero el punto era llegar rápido para que el chaman que viviera allí tratara a Dracmon rápidamente.
Cuando las dos llegaron a la choza, entraron sin preocupaciones, pero antes de que pudieran avanzar ni un paso, un digimon “babuino” usando una gran mascara y con una gran mascara con detalles aborígenes en el rostro las saco afuera rápidamente, y entonces comenzó a quejarse, haciendo movimientos extraños de mono enojado, lo que en un principio parecía gracioso, hasta que salió otro gran digimon. Este si tenía apariencia de mala persona que deseaba únicamente a los que seguramente creyera dignos, y a este punto, era más que obvio que las echaría a ambas. El gran digimon con rostro de jabalí y de gran túnica verde las observo unos instantes, y antes de que pudiera decir nada, otro digimon salió, una especie de Goblimon pero este era diferente, su piel era verde oscuro y su cabello verde claro, sus ropas eran azules. El “Goblimon”, a comparación de los otros dos digimons era más pequeño, pero se veía que él era el jefe allí.
Veo que has regresado… “error” –dijo seriamente observando a BlackRenamon- ¿a qué has venido?, además de buscar problemas en esta zona tan tranquila de este lugar tan caótico… -entrecerró los ojos para fijar bien la mirada- ¿y qué le has hecho a ese pobre e inocente digimon vampiro?
Shamanmon… yo no eh tenido nada que ver con lo que le sucede a este digimon… pero te ruego que… lo ayudes por favor… creemos que por morder un cactus, ah entrado una especie de veneno en su cuerpo… -dijo la digimon lupina con un tono igual de serio, pero más firme- por favor… se que a mi jamás me ayudarías por ser una basura digital… pero ayúdalo a él… un verdadero digimon que nació en todo derecho…
… bien… tienes un buen punto… -dio un suspiro y entro a la choza- Sepikmon, Baromon… háganlos entrar a los 3… y sean corteses… por esta vez el error será nuestra invitada…
Al escuchar eso, los dos digimons las observaron y abrieron las puertas, o mantas que eran como puertas, de la choza dejándolas pasar, aunque al principio no te había gustado el trato que te dieron, ahora no podías quejarte ya que este “Shamanmon”, era el único que podía ayudar a Dracmon y decirte lo que le ocurría.
- Off:
- Ahora, en tu siguiente post puedes explicar lo que le ocurre a Dracmon y si lo deseas, puedes controlar a Sepikmon y a Baromon en cuanto a sus puntos de vista sobre ayudarte a ti, y a BlackRenamon que parece ser odiada por ambos digimons, tambien puedes controlar a Shamanmon, pero solo para explicar lo que le sucede a Dracmon.
- Tamer & Digimon
- Prueba de Rol :ADigi Puntos :707Cuentas :Ficha :Relaciones :Cronologia :NPCs :Nivel On Rol :DNA Evolution (Super Ultimate)Nivel On Rol de los Digi Aliados :Nova: Mega
BR: MegaIcono :Rango y Unidad :Scott Shadowest Musahrahjy
Rango: Hades Knight
División: Hades Titans
Unidad/Sub-division: Titans
Labramon
Rango: Hades Knight
División: Hades Titans
Unidad/Sub-division: TitansRango y Unidad Digi Aliado :Nova (BlackWarGreymon)
Rango: Hades Knight
División: Hades Titans
Unidad/Sub-division: Titans
BR (Renamon)
Rango: Soldado
División: D-Brigade
Unidad/Sub-division: Shadow LizardInventario :
Scott Desaster
Re: Domando a las Bestias [Misión]
Por alguna razón que no logro entender bien, la BlackRenamon se encontraba molesta, por algo, por alguien, no tenía idea de porque; pero ella sabía disimularlo, no muy bien… puesto que lo noté enseguida debido a ese semi-ceño fruncido que llevaba en el rostro, un gesto nada usual en ella, o al menos no lo había visto hasta ahora; ella hasta hace unos momentos había tenido una expresión calmada y sin emociones, que bien, a veces cortaba por alguna mueca de dolor o una leve sonrisa que apenas y se podía lograr notar por la forma en que estaba constituido su rostro, pero no le había notado ese extraño gesto- ¿En que estará pensando? –era algo enigmático, ciertamente, pero mi atención fue llamada nuevamente en cuanto vi como ella terminaba de curarle la lengua a mi compañero, a quien tuvo que ser esta vez ella la que le cerrara la boca a mi últimamente boquiabierto y baboso Dracmon.
Ella se volteó hacia mi, diciéndome en palabras resumidas que necesitaba mas descripción sobre esos ‘’fugitivos’’ que estaba buscando, algo que al igual que ella yo desconocía, ya que la carta no se encontraba tan bien explicita como uno esperaría. Sus siguientes palabras, sin embargo, fueron de aliento… o algo así, unas palabras sabias que ya no me eran muy de sorpresa proviniendo de alguien como ella, pues se notaba que era un digimon que mas que el cuerpo ejercitaba su mente a su manera, y digo a su manera porque no parecía ser de los seres que se quedan pegados a un libro para que algo de esas letras se le queden grabados en el cerebro… no, ella hacía lo que me explicó, aprendía por medio de la experiencia que las misiones le otorgaban, quizás no misiones que te otorga un completo extraño como a mi, pero a veces hay que ver la vida como un cuartel, y todos esos problemas que te da, en realidad son misiones que te pone para que obtengas experiencia de ella y te vuelvas mas fuerte, si tienes el corazón, espíritu y la voluntad para cumplirlas.
Al momento en que ella me trajo el pergamino de vuelta, pude notar en su expresión nuevamente el leve fruncir del ceño, algo que ya me estaba comenzando a preocupar… pues no era común de ella. Bajé un poco la mirada para ver el pergamino, el cual se encontraba algo maltratado, como si se le hubiese aplicado una fuerza al momento de ser entregado; me encontraba confusa ante lo que mis ojos veían, pero debo admitir que sentí un gran susto cuando escuché como si algo era golpeado… se trataba de BlackRenamon golpeando la pared de la caverna, algo que llamó mi atención y sacó de su trance a Dracmon- ¿Ah? ¿Qué? ¿Qué sucedió? –volteó a verme a mi y después a la BlackRenamon, volviendo de inmediato a su trance- ¡Oh, por favor…! –maldije en mis adentros ante tal acto, pero preferí ignorarlo y voltear de nuevo mi mirada hacia la BlackRenamon, quien se encontraba observando su puño lastimado mientras decía un par de cosas en un tono entre serio y molesto, como si intentara usar toda esa calma para controlar la increíble furia que yacía en su interior- ¿Qué habrá querido decir con eso…? –fue lo primero que pasó por mi mente al escuchar su comentario sobre ‘’los bastardos que subestimaban su familia’’ ¿A quienes se estará refiriendo? ¿Es que acaso me estoy perdiendo de algo? Mi rostro no podía expresar mas confusión de la que ahora expresaba, mirando con sorpresa como la BlackRenamon se salía de su contexto ‘’serio’’, pues prácticamente me estaba suplicando que le aceptara como una guía para mi misión, algo que realmente no necesitaba estar en discusión, puesto que eso era lo que quería… o mas bien lo que necesitaba; sé que puedo ser orgullosa, a veces demasiado, pero creo tener la habilidad de saber cuando hay que tragarse el orgullo y aceptar la verdad.
- Estoy de acuerdo con eso, por favor, tranquilízate –me alteraba por alguna razón ver a BlackRenamon de esa forma, quizá porque ya me había acostumbrado a su actitud seria como para verla tan internamente molesta y ‘’desesperada’’. Me alegraba en cierto aspecto que ahora nos habíamos ganado una aliada para esta misión, pero seguía sintiéndome en desagusto, puesto que aún pasaba por mi mente la situación de Dracmon, realmente me sentía preocupada… ¡Y odio sentirme así! Ugh… es irónico, hace unos momentos me estaba quejando de esta clase de sentimientos, y ahora mismo estoy sintiendo uno- Estúpido Dracmon, siempre metiéndome en problemas, realmente es un tonto… -me quejaba en mis adentros, me sorprendía que a pesar de verme muy identificada con BlackRenamon, en realidad carecía de esa increíble paciencia y madurez suya, pues no importa cuanto quiera serlo, carezco por completo de eso… y yo no puedo fingir algo que no soy, no soy muy buena mentirosa en cuestiones de mentir lo que soy yo, eso es lo que me ha traído tantos problemas, y esa fue de las principales razones que me llevaron a huir de casa.
Seguido de lo que ella había dicho, mencionó mi sugerencia sobre el chamán, y por suerte, parecía tener en mente a alguien; no pude evitar sonreír con esperanza ante esto, algo que me desconcertó un poco hasta a mi, e intenté volver a mi compostura indiferente- …Gracias… -murmuré, de una forma muy muy leve, puede que ni siquiera lo haya escuchado…- Una parte de mi, desea con ansias que no lo haya hecho, mientras que otra me pide que lo haga de nuevo y mas fuerte para poder ser escuchada y respondida… -de nuevo mi orgullo atacando, pero esta vez, creo que seguiré lo que mi orgullo dice y callaré.
BlackRenamon levantó a mi compañero sin problemas, esperaba internamente que el no le diese problemas, pues ahora se encontraba nuevamente babeando… y si yo estuviera en el lugar de la BlackRenamon me volvería loca saber que un vampirito esta babeando mi pelaje… aunque debo admitir, que al menos desde mi punto de vista, la visión que se me estaba dando era bastante graciosa, pero solo me limité a sonreír de lado para no incomodar a nuestra nueva aliada, y probablemente momentánea, puesto que si enserio piensa un poco como yo… no le gusta estar acompañada de personas que acaba de conocer por mucho tiempo, es increíble incluso que haya decidido ayudarnos a Dracmon y a mi olvidándose de su propia misión que se ha auto-dado para servirnos de ayuda… ¿O será que sus actos tienen una especie de doble intensión?... Quien sabe, quizá no deba bajar la guardia, pero con Dracmon en su condición actual estaría en problemas si la BlackRenamon terminara siendo una doble cara, algo que realmente dudaba… pero no debía descartar nunca esas opciones desventajosas.
Después de unos minutos recorriendo el panorama, a lo lejos, pude observar que había una especie de casa de madera; era una choza que bien daba su función para protegerse de los temibles rayos de sol que solo podrían ser soportados por los digimon del tipo dragón/dinosaurio que viven por aquí, ya que la mayoría suele ser de alta resistencia al fuego, en cambo digimon como Dracmon que se llevan mejor en las zonas oscuras… probablemente les pueda ir muy mal.
Parecía que a la BlackRenamon no le importaba en lo absoluto la educación típica de ‘’tocar la puerta antes de entrar’’ aun a pesar de que esta choza no sea suya, o al menos dudo que lo sea… no es de su estilo, aunque bueno… no he de quejarme puesto que yo tampoco tengo esa costumbre. Al poco tiempo de haber entrado y de relajarnos un poco de esos terribles rayos solares, una especie de chango, babuino, o lo que sea nos recibió… tenía la apariencia de un indio- ¿Es ese el chamán? –pregunté con extrañeza, el parecía uno, pero su apariencia era demasiado poco agradable, sobre todo por el comportamiento que comenzó a tomar. Saqué mi digivice y lo escaneé:
Vaya, pues a pesar de tener pinta de chamán, definitivamente hasta el digivice lo trataba de loco- No estoy segura si el es en realidad capaz de curar a Dracmon –fue lo primero que pensé al verlo, pero después se apareció otro digimon de extraña apariencia… parecía una especie de jabalí con apariencia humanoide, al igual que el Sepikmon, tenía una apariencia que le daba la pinta de ser chamán- Veamos que dice ‘’Mr. Digivice’’ de él… -lo escaneé.
En mi rostro se mostró una mueca de disgusto- Ehmm… no lo sé… a pesar de que tenga mayor apariencia de chamán que el otro, no me parece que sea capaz de hacerle efecto uno de sus riduculos bailesitos a mi compañero -Finalmente, apareció un tercer digimon cuya apariencia se me hacía conocida- …¿Un Goblimon? –ya lo conocía, era un digimon agresivo y sin cerebro que atacaba al primero que veía, ¿Qué hace un digimon como el entre un grupo de chamanes? Esto es ridículo de cualquier forma que se pueda ver- Un momento, su color es diferente… -eso me extrañó, mi digivice analizó por si solo al digimon.
- No me digan que este intento de Goblimon es el chamán que cuidará a Dracmon… -creo que Baromon se me hacía mas apropiado; pero por como le hablaba a BlackRenamon mientras los demás callaban, me dio a suponer que el era el verdadero chamán- ¿No habrá un cuarto intento de chamán? ¿No? ¿Enserio? –suspiré, parece que debía aceptarlo. Sin embargo, sus palabra son me gustaron en lo absoluto, puesto que trataba como una ‘’basura’’ a la BlackRenamon que con tanta gentileza nos había ofrecido su ayuda a Dracmon y a mi- Tsk… -estaba por dar un paso, dipuesta a arrebatarle su mazo a ese bueno para nada y darle en la cabeza con el, pero el Sepikmon colocó su boomerang frente a mi para detenerme- Yo que tu no hacía una estupidez, Shamamon no suele brindarle su ayuda a cualquiera que venga por aquí, solo le brinda su ayuda a quien logró adivinar que vendría -¿Cómo? ¿Qué quiso decir con eso?- Así es, Shamamon tiene la habilidad de ver el futuro mediante a su habilidad especial, pero solamente logra ver el futuro correcto, ya que existen muchos futuros alternos… solamente observa el futuro que debe suceder, si has tenido dudas hasta ahora, te recomendaría que las olvidaras… ya que has escogido un buen camino –No entiendo de que me estaban hablando… ¿Será que ellos saben mis dudas entre venir a hacer la misión? ¿He estado haciendo bien? ¡Que alguien me explique…!- Hmmm… -el Shamamon comenzó a inspeccionar a Dracmon, quien se encontraba tendido sobre una cama de paja mientras reía como bobo y un poco de saliva le brotaba de la boca- Este es un caso extraño… haré algo improvisado, espero que me perdonen –dicho esto, tomó su mazo y comenzó a hacer un ritual extraño bailando alrededor de mi compañero- …Que tonto… -pensé al ver el ridículo baile, terminando después con un- ¡Shama Hammer! –le dio un fuerte golpe con su mazo en la cabeza a Dracmon, quien de inmediato se despertó de su trance sobando su cabeza- ¡Ay, ay…! ¿¡Que pasó!? ¿Dónde estoy…? –el Shamamon comenzó a rascar su cabeza- Interesante… -Dracmon lo miró con ira- ¿¡Tu fuiste quien me pegó!? ¡Te juro que voy a…! –hizo su mano un puño, pero el Shamamon apuntó con su mazo a BlackRenamon que no yacía muy lejos de ahí, Dracmon volteó a verla y de inmediato cayó de nuevo en ese trance extraño- Tsk… ¡Mono tarado, no le ayudaste en nada…! –iba a decir más, pero Sepikmon me cubrió la boca evitando que hablara- Shhh, Shamamon está dando su deducción -me dijo, y señaló al Shamamon para que volteara a verlo- Este digimon mordió un cactus, ¿No es así? -¿Oh? ¿Cómo pudo saber eso?- Si… -asentí- Ya veo… he visto este tipo de síntomas antes, me parece que mordió uno de los tantos cactus venenosos que solo se encuentran en esta zona y en el Pantano, ese cactus en particular después de que el veneno es inyectado hace que el digimon o ser afectado se enamore del primer genero opuesto al que vea –que deducción mas pobre- Está bien chango, ¿Y tienes alguna idea de como podamos ayudarlo? –el ogro mostró una seña de disgusto y se acercó a mi, dándome un golpe con su maza en la cabeza- ¡Auch…! –me sobé, a lo que el me replicó- En primera, ¡No me llames ‘’chango’’!; en segunda, el antídoto es otro cactus que se encuentra tambien por esta zona del desierto pero… -se rascó la cabeza, dándose la vuelta- No recuerdo como se llamaba… ehhh… pero creo que la Herbolaria Palmon sabe un poco sobre esas cosas…
Ella se volteó hacia mi, diciéndome en palabras resumidas que necesitaba mas descripción sobre esos ‘’fugitivos’’ que estaba buscando, algo que al igual que ella yo desconocía, ya que la carta no se encontraba tan bien explicita como uno esperaría. Sus siguientes palabras, sin embargo, fueron de aliento… o algo así, unas palabras sabias que ya no me eran muy de sorpresa proviniendo de alguien como ella, pues se notaba que era un digimon que mas que el cuerpo ejercitaba su mente a su manera, y digo a su manera porque no parecía ser de los seres que se quedan pegados a un libro para que algo de esas letras se le queden grabados en el cerebro… no, ella hacía lo que me explicó, aprendía por medio de la experiencia que las misiones le otorgaban, quizás no misiones que te otorga un completo extraño como a mi, pero a veces hay que ver la vida como un cuartel, y todos esos problemas que te da, en realidad son misiones que te pone para que obtengas experiencia de ella y te vuelvas mas fuerte, si tienes el corazón, espíritu y la voluntad para cumplirlas.
Al momento en que ella me trajo el pergamino de vuelta, pude notar en su expresión nuevamente el leve fruncir del ceño, algo que ya me estaba comenzando a preocupar… pues no era común de ella. Bajé un poco la mirada para ver el pergamino, el cual se encontraba algo maltratado, como si se le hubiese aplicado una fuerza al momento de ser entregado; me encontraba confusa ante lo que mis ojos veían, pero debo admitir que sentí un gran susto cuando escuché como si algo era golpeado… se trataba de BlackRenamon golpeando la pared de la caverna, algo que llamó mi atención y sacó de su trance a Dracmon- ¿Ah? ¿Qué? ¿Qué sucedió? –volteó a verme a mi y después a la BlackRenamon, volviendo de inmediato a su trance- ¡Oh, por favor…! –maldije en mis adentros ante tal acto, pero preferí ignorarlo y voltear de nuevo mi mirada hacia la BlackRenamon, quien se encontraba observando su puño lastimado mientras decía un par de cosas en un tono entre serio y molesto, como si intentara usar toda esa calma para controlar la increíble furia que yacía en su interior- ¿Qué habrá querido decir con eso…? –fue lo primero que pasó por mi mente al escuchar su comentario sobre ‘’los bastardos que subestimaban su familia’’ ¿A quienes se estará refiriendo? ¿Es que acaso me estoy perdiendo de algo? Mi rostro no podía expresar mas confusión de la que ahora expresaba, mirando con sorpresa como la BlackRenamon se salía de su contexto ‘’serio’’, pues prácticamente me estaba suplicando que le aceptara como una guía para mi misión, algo que realmente no necesitaba estar en discusión, puesto que eso era lo que quería… o mas bien lo que necesitaba; sé que puedo ser orgullosa, a veces demasiado, pero creo tener la habilidad de saber cuando hay que tragarse el orgullo y aceptar la verdad.
- Estoy de acuerdo con eso, por favor, tranquilízate –me alteraba por alguna razón ver a BlackRenamon de esa forma, quizá porque ya me había acostumbrado a su actitud seria como para verla tan internamente molesta y ‘’desesperada’’. Me alegraba en cierto aspecto que ahora nos habíamos ganado una aliada para esta misión, pero seguía sintiéndome en desagusto, puesto que aún pasaba por mi mente la situación de Dracmon, realmente me sentía preocupada… ¡Y odio sentirme así! Ugh… es irónico, hace unos momentos me estaba quejando de esta clase de sentimientos, y ahora mismo estoy sintiendo uno- Estúpido Dracmon, siempre metiéndome en problemas, realmente es un tonto… -me quejaba en mis adentros, me sorprendía que a pesar de verme muy identificada con BlackRenamon, en realidad carecía de esa increíble paciencia y madurez suya, pues no importa cuanto quiera serlo, carezco por completo de eso… y yo no puedo fingir algo que no soy, no soy muy buena mentirosa en cuestiones de mentir lo que soy yo, eso es lo que me ha traído tantos problemas, y esa fue de las principales razones que me llevaron a huir de casa.
Seguido de lo que ella había dicho, mencionó mi sugerencia sobre el chamán, y por suerte, parecía tener en mente a alguien; no pude evitar sonreír con esperanza ante esto, algo que me desconcertó un poco hasta a mi, e intenté volver a mi compostura indiferente- …Gracias… -murmuré, de una forma muy muy leve, puede que ni siquiera lo haya escuchado…- Una parte de mi, desea con ansias que no lo haya hecho, mientras que otra me pide que lo haga de nuevo y mas fuerte para poder ser escuchada y respondida… -de nuevo mi orgullo atacando, pero esta vez, creo que seguiré lo que mi orgullo dice y callaré.
BlackRenamon levantó a mi compañero sin problemas, esperaba internamente que el no le diese problemas, pues ahora se encontraba nuevamente babeando… y si yo estuviera en el lugar de la BlackRenamon me volvería loca saber que un vampirito esta babeando mi pelaje… aunque debo admitir, que al menos desde mi punto de vista, la visión que se me estaba dando era bastante graciosa, pero solo me limité a sonreír de lado para no incomodar a nuestra nueva aliada, y probablemente momentánea, puesto que si enserio piensa un poco como yo… no le gusta estar acompañada de personas que acaba de conocer por mucho tiempo, es increíble incluso que haya decidido ayudarnos a Dracmon y a mi olvidándose de su propia misión que se ha auto-dado para servirnos de ayuda… ¿O será que sus actos tienen una especie de doble intensión?... Quien sabe, quizá no deba bajar la guardia, pero con Dracmon en su condición actual estaría en problemas si la BlackRenamon terminara siendo una doble cara, algo que realmente dudaba… pero no debía descartar nunca esas opciones desventajosas.
Después de unos minutos recorriendo el panorama, a lo lejos, pude observar que había una especie de casa de madera; era una choza que bien daba su función para protegerse de los temibles rayos de sol que solo podrían ser soportados por los digimon del tipo dragón/dinosaurio que viven por aquí, ya que la mayoría suele ser de alta resistencia al fuego, en cambo digimon como Dracmon que se llevan mejor en las zonas oscuras… probablemente les pueda ir muy mal.
Parecía que a la BlackRenamon no le importaba en lo absoluto la educación típica de ‘’tocar la puerta antes de entrar’’ aun a pesar de que esta choza no sea suya, o al menos dudo que lo sea… no es de su estilo, aunque bueno… no he de quejarme puesto que yo tampoco tengo esa costumbre. Al poco tiempo de haber entrado y de relajarnos un poco de esos terribles rayos solares, una especie de chango, babuino, o lo que sea nos recibió… tenía la apariencia de un indio- ¿Es ese el chamán? –pregunté con extrañeza, el parecía uno, pero su apariencia era demasiado poco agradable, sobre todo por el comportamiento que comenzó a tomar. Saqué mi digivice y lo escaneé:
- DigiDex:
Nombre: Sepikmon
Nivel: Armadura
Tipo: Datos
Sepikmon es un Digimo Tipo Hombre Demonio. Su nombre proviene del río Sepik, que pasa a través de Papua Nueva Guinea por la región habitada por los aborígenes. Sus ropas son lo que Sepikmon se ve usando. Es comúnmente conocido como un hombre sabio con muy pocos amigos, ya que sus amigos son los espíritus del Más Allá. A veces se lanza a si mismo su "Spirit Boomerang".
Vaya, pues a pesar de tener pinta de chamán, definitivamente hasta el digivice lo trataba de loco- No estoy segura si el es en realidad capaz de curar a Dracmon –fue lo primero que pensé al verlo, pero después se apareció otro digimon de extraña apariencia… parecía una especie de jabalí con apariencia humanoide, al igual que el Sepikmon, tenía una apariencia que le daba la pinta de ser chamán- Veamos que dice ‘’Mr. Digivice’’ de él… -lo escaneé.
- DigiDex:
Nombre: Baromon
Nivel: Armadura
Tipo: Virus
Baromon es un Digmon Tipo Hombre Demonio. Tiene el aspecto de un hombre vestido con una túnica verde y botas marrones, con cabeza de monstruo mitológico balinés con piel azul, orejas puntiagudas, colmillos de jabalí, nariz de cerdo y una joya roja incrustada en la frente. También lleva sobre la cabeza un gran tocado que imita una hoguera, con cuernos dorados a los lados y grandes cintas blancas por detrás; así como una capa roja a la espalda. Su ataque especial es el Meteor Dance, el cual consiste en dar un característico baile que invoca una lluvia de meteoritos flameantes desde el cielo.
En mi rostro se mostró una mueca de disgusto- Ehmm… no lo sé… a pesar de que tenga mayor apariencia de chamán que el otro, no me parece que sea capaz de hacerle efecto uno de sus riduculos bailesitos a mi compañero -Finalmente, apareció un tercer digimon cuya apariencia se me hacía conocida- …¿Un Goblimon? –ya lo conocía, era un digimon agresivo y sin cerebro que atacaba al primero que veía, ¿Qué hace un digimon como el entre un grupo de chamanes? Esto es ridículo de cualquier forma que se pueda ver- Un momento, su color es diferente… -eso me extrañó, mi digivice analizó por si solo al digimon.
- DigiDex:
Nombre: Shamamon
Nivel: Infante
Atributo: Virus
Shamamon es un Digimon Tipo Ogro. Su nombre deriva del chamanismo. Su trabajo es adivinar la voluntad divina. Dicen que baila una danza única moviendo su porra durante el proceso de adivinación. Su ataque especial es el Shama Hammer, con el cual corre hacia al oponente y lo golpea muchas veces con su mazo.
- No me digan que este intento de Goblimon es el chamán que cuidará a Dracmon… -creo que Baromon se me hacía mas apropiado; pero por como le hablaba a BlackRenamon mientras los demás callaban, me dio a suponer que el era el verdadero chamán- ¿No habrá un cuarto intento de chamán? ¿No? ¿Enserio? –suspiré, parece que debía aceptarlo. Sin embargo, sus palabra son me gustaron en lo absoluto, puesto que trataba como una ‘’basura’’ a la BlackRenamon que con tanta gentileza nos había ofrecido su ayuda a Dracmon y a mi- Tsk… -estaba por dar un paso, dipuesta a arrebatarle su mazo a ese bueno para nada y darle en la cabeza con el, pero el Sepikmon colocó su boomerang frente a mi para detenerme- Yo que tu no hacía una estupidez, Shamamon no suele brindarle su ayuda a cualquiera que venga por aquí, solo le brinda su ayuda a quien logró adivinar que vendría -¿Cómo? ¿Qué quiso decir con eso?- Así es, Shamamon tiene la habilidad de ver el futuro mediante a su habilidad especial, pero solamente logra ver el futuro correcto, ya que existen muchos futuros alternos… solamente observa el futuro que debe suceder, si has tenido dudas hasta ahora, te recomendaría que las olvidaras… ya que has escogido un buen camino –No entiendo de que me estaban hablando… ¿Será que ellos saben mis dudas entre venir a hacer la misión? ¿He estado haciendo bien? ¡Que alguien me explique…!- Hmmm… -el Shamamon comenzó a inspeccionar a Dracmon, quien se encontraba tendido sobre una cama de paja mientras reía como bobo y un poco de saliva le brotaba de la boca- Este es un caso extraño… haré algo improvisado, espero que me perdonen –dicho esto, tomó su mazo y comenzó a hacer un ritual extraño bailando alrededor de mi compañero- …Que tonto… -pensé al ver el ridículo baile, terminando después con un- ¡Shama Hammer! –le dio un fuerte golpe con su mazo en la cabeza a Dracmon, quien de inmediato se despertó de su trance sobando su cabeza- ¡Ay, ay…! ¿¡Que pasó!? ¿Dónde estoy…? –el Shamamon comenzó a rascar su cabeza- Interesante… -Dracmon lo miró con ira- ¿¡Tu fuiste quien me pegó!? ¡Te juro que voy a…! –hizo su mano un puño, pero el Shamamon apuntó con su mazo a BlackRenamon que no yacía muy lejos de ahí, Dracmon volteó a verla y de inmediato cayó de nuevo en ese trance extraño- Tsk… ¡Mono tarado, no le ayudaste en nada…! –iba a decir más, pero Sepikmon me cubrió la boca evitando que hablara- Shhh, Shamamon está dando su deducción -me dijo, y señaló al Shamamon para que volteara a verlo- Este digimon mordió un cactus, ¿No es así? -¿Oh? ¿Cómo pudo saber eso?- Si… -asentí- Ya veo… he visto este tipo de síntomas antes, me parece que mordió uno de los tantos cactus venenosos que solo se encuentran en esta zona y en el Pantano, ese cactus en particular después de que el veneno es inyectado hace que el digimon o ser afectado se enamore del primer genero opuesto al que vea –que deducción mas pobre- Está bien chango, ¿Y tienes alguna idea de como podamos ayudarlo? –el ogro mostró una seña de disgusto y se acercó a mi, dándome un golpe con su maza en la cabeza- ¡Auch…! –me sobé, a lo que el me replicó- En primera, ¡No me llames ‘’chango’’!; en segunda, el antídoto es otro cactus que se encuentra tambien por esta zona del desierto pero… -se rascó la cabeza, dándose la vuelta- No recuerdo como se llamaba… ehhh… pero creo que la Herbolaria Palmon sabe un poco sobre esas cosas…
- Tamer & Digimon
- Prueba de Rol :ADigi Puntos :354Cuentas :Ficha :Cronologia :NPCs :Nivel On Rol :MegaNivel On Rol de los Digi Aliados :UltimateIcono :Rango y Unidad :Haruka Aizawa
Rango: Holy Knight
Unidad: Dragon Spirit
Dracmon
Rango: Holy Knight
Unidad: Dragon SpiritRango y Unidad Digi Aliado :Gaomon
Rango: Knight
Unidad: Dragon SpiritInventario :
Haruka Aizawa
Re: Domando a las Bestias [Misión]
Al saber que tenias que ir con otra digimon de nombre Palmon, quisiste simplemente gritar, primero un tipo te da una misión contra tu voluntad, después te pierdes, tu compañero mordió un cactus que lo enamoro de una digimon zorro oscuro que cayó noqueada después de vencer a un Greymon, la misma digimon te recuerda a ti misma y puede que logre ayudarte, y para finalizar, llegar con el chaman que podría ayudar a Dracmon para luego enterarse de que no sabía nada de plantas por lo que hay que hacer otro viaje a quien sabe donde para hablar con una Palmon que tal vez sea la única que logre curar al digimon vampiro de su amor por la digimon lupina.
Por un momento te quedaste tildada sin saber si gritarle al “chango” esperando que te dijera otra forma de curar a Dracmon, aunque por el otro lado, tenia al chango más grande y al “cerdo” de su lado que estarían seguramente dispuestos a matarte a ti, a Dracmon y a BlackRenamon si Shamanmon llegara a ser amenazado de muerte.
¡JAJAJA! ¡Me da lástima este pobre e inocente digimon! ¡Tener que amar a una basura inútil y completamente fea como esta! –Comenzó a reírse Shamanmon como loco tapándose la cara de la risa- ¡JAJAJA! ¡En serio muchacho! ¡Espero que encuentres la cura y salves a tu amigo! ¡Por que no creo que exista nada peor que estar enamorado de esta!
… ¿enamorado de mí?...-un leve sonrojo se formo en su rostro, aunque no eran nervios, era más vergüenza, vergüenza causada por las palabras de Shamanmon, evidentemente BlackRenamon parecía molesta pero no podía expresarlo, tal vez creía que todo era verdad con respecto a su figura- Kuro… vamos… hay que curar a Dracmon… no queremos que este así mas tiempo…
¡Sí! ¡Eso es! ¡Cúrenlo rápido antes de que el pobre se le declare inconscientemente a una digimon basura! –al decir esto, te decidiste a enseñarle a ese engreído modales, porque estaba no solo metiendo el problema de Dracmon, si no que ya se estaba metiendo con la integridad de BlackRenamon y su existencia- ¡Espero que…! –antes de que te dieras vuelta para darle el puñetazo, sentiste una brisa y al ver, viste como Shamanmon era lanzado contra un mueble de madera rompiéndolo, y también viste a BlackRenamon con el puño al aire y el brazo extendido hacia delante-
… -suspiro y se dio la vuelta- metete con mi apariencia, integridad, figura, existencia y vida todo lo que quieras… pero no te burles de un digimon que siente cosas falsas por culpa de una planta… eso es poco profesional de tu parte –cargo a Dracmon y salió de la choza sin decir nada mas-
Al verla te sorprendiste poco, pero igual te sorprendiste, la forma en la que mantenía la calma ante todo, era algo digno de admirar, era como si supiera ignorar hasta al más desgraciado y molesto digimon, incluso a Dracmon que seguía babeando y hasta comenzó a balbucear cosas extrañas como halagos hacia BlackRenamon, que parecía centrada en el camino, aunque la inclinación de sus orejas indicaban que estaba deprimida, algo no andaba bien, ella no parecía importarle muchas cosas, pero en definitiva algo le molestaba y no podía decir que, tal vez eran las burlas de Shamanmon sobre su apariencia o sobre ella en general, un error.
Luego de un momento, en medio del desierto, escuchaste un ruido raro, entonces te volteaste a ver a Dracmon balbuceando, claro que ya lo habías ignorado totalmente, entonces notaste que el ruido provenía de BlackRenamon, estaba respirando agitada, y era obvio el por qué. El cargar a Dracmon todo el tiempo, aguantar sus balbuceos “románticos”, su baba, los pensamientos sobre ella misma en referencia a los insultos de Shamanmon, tenía bastante peso encima. Cuando quisiste hablar con ella para preguntarle si quería descansar, ella comenzó a hablar.
Kuro… dime algo… -seguía respirando agitada pero no le importaba- ¿es tan… malo querer a alguien… aun si es por error?… ¿o simplemente no tengo que… ser apreciada por mi fuerza?... –dio un suspiro pequeño- ¿tú crees… que si sea un error?... por que empiezo a creer… que solo traigo mala suerte… ahora Dracmon cree amarme… todo porque me vio…
Antes de que pudieras decir nada, BlackRenamon levanto las orejas y observo hacia el frente, y vio una especie de cartel en forma de flecha que indicaba a una caverna, entonces fijo la mirada y entrecerró los ojos, tal vez quería ver que decía, aunque tu dudabas fuertemente que consiguiera lograr ver las letras del cartel a una distancia tan larga y grande como esa.
Herbolario… prehistórico… “abierto” –dijo algo confundida pero con una voz segura de lo que decía, aun si no sabía que leía con claridad- vamos Kuro… quiero conocer al verdadero Dracmon… el que no cree amarme…
Por un momento te quedaste tildada sin saber si gritarle al “chango” esperando que te dijera otra forma de curar a Dracmon, aunque por el otro lado, tenia al chango más grande y al “cerdo” de su lado que estarían seguramente dispuestos a matarte a ti, a Dracmon y a BlackRenamon si Shamanmon llegara a ser amenazado de muerte.
¡JAJAJA! ¡Me da lástima este pobre e inocente digimon! ¡Tener que amar a una basura inútil y completamente fea como esta! –Comenzó a reírse Shamanmon como loco tapándose la cara de la risa- ¡JAJAJA! ¡En serio muchacho! ¡Espero que encuentres la cura y salves a tu amigo! ¡Por que no creo que exista nada peor que estar enamorado de esta!
… ¿enamorado de mí?...-un leve sonrojo se formo en su rostro, aunque no eran nervios, era más vergüenza, vergüenza causada por las palabras de Shamanmon, evidentemente BlackRenamon parecía molesta pero no podía expresarlo, tal vez creía que todo era verdad con respecto a su figura- Kuro… vamos… hay que curar a Dracmon… no queremos que este así mas tiempo…
¡Sí! ¡Eso es! ¡Cúrenlo rápido antes de que el pobre se le declare inconscientemente a una digimon basura! –al decir esto, te decidiste a enseñarle a ese engreído modales, porque estaba no solo metiendo el problema de Dracmon, si no que ya se estaba metiendo con la integridad de BlackRenamon y su existencia- ¡Espero que…! –antes de que te dieras vuelta para darle el puñetazo, sentiste una brisa y al ver, viste como Shamanmon era lanzado contra un mueble de madera rompiéndolo, y también viste a BlackRenamon con el puño al aire y el brazo extendido hacia delante-
… -suspiro y se dio la vuelta- metete con mi apariencia, integridad, figura, existencia y vida todo lo que quieras… pero no te burles de un digimon que siente cosas falsas por culpa de una planta… eso es poco profesional de tu parte –cargo a Dracmon y salió de la choza sin decir nada mas-
Al verla te sorprendiste poco, pero igual te sorprendiste, la forma en la que mantenía la calma ante todo, era algo digno de admirar, era como si supiera ignorar hasta al más desgraciado y molesto digimon, incluso a Dracmon que seguía babeando y hasta comenzó a balbucear cosas extrañas como halagos hacia BlackRenamon, que parecía centrada en el camino, aunque la inclinación de sus orejas indicaban que estaba deprimida, algo no andaba bien, ella no parecía importarle muchas cosas, pero en definitiva algo le molestaba y no podía decir que, tal vez eran las burlas de Shamanmon sobre su apariencia o sobre ella en general, un error.
Luego de un momento, en medio del desierto, escuchaste un ruido raro, entonces te volteaste a ver a Dracmon balbuceando, claro que ya lo habías ignorado totalmente, entonces notaste que el ruido provenía de BlackRenamon, estaba respirando agitada, y era obvio el por qué. El cargar a Dracmon todo el tiempo, aguantar sus balbuceos “románticos”, su baba, los pensamientos sobre ella misma en referencia a los insultos de Shamanmon, tenía bastante peso encima. Cuando quisiste hablar con ella para preguntarle si quería descansar, ella comenzó a hablar.
Kuro… dime algo… -seguía respirando agitada pero no le importaba- ¿es tan… malo querer a alguien… aun si es por error?… ¿o simplemente no tengo que… ser apreciada por mi fuerza?... –dio un suspiro pequeño- ¿tú crees… que si sea un error?... por que empiezo a creer… que solo traigo mala suerte… ahora Dracmon cree amarme… todo porque me vio…
Antes de que pudieras decir nada, BlackRenamon levanto las orejas y observo hacia el frente, y vio una especie de cartel en forma de flecha que indicaba a una caverna, entonces fijo la mirada y entrecerró los ojos, tal vez quería ver que decía, aunque tu dudabas fuertemente que consiguiera lograr ver las letras del cartel a una distancia tan larga y grande como esa.
Herbolario… prehistórico… “abierto” –dijo algo confundida pero con una voz segura de lo que decía, aun si no sabía que leía con claridad- vamos Kuro… quiero conocer al verdadero Dracmon… el que no cree amarme…
- Tamer & Digimon
- Prueba de Rol :ADigi Puntos :707Cuentas :Ficha :Relaciones :Cronologia :NPCs :Nivel On Rol :DNA Evolution (Super Ultimate)Nivel On Rol de los Digi Aliados :Nova: Mega
BR: MegaIcono :Rango y Unidad :Scott Shadowest Musahrahjy
Rango: Hades Knight
División: Hades Titans
Unidad/Sub-division: Titans
Labramon
Rango: Hades Knight
División: Hades Titans
Unidad/Sub-division: TitansRango y Unidad Digi Aliado :Nova (BlackWarGreymon)
Rango: Hades Knight
División: Hades Titans
Unidad/Sub-division: Titans
BR (Renamon)
Rango: Soldado
División: D-Brigade
Unidad/Sub-division: Shadow LizardInventario :
Scott Desaster
Re: Domando a las Bestias [Misión]
¡No puede ser…! Después de todo, este chango marango no tenía la respuesta a nuestros problemas, si no mas bien una pista de la verdadera respuesta- Tsk… que pésima es la suerte, ahora tendremos que ir a buscar a esa tal ‘’Palmon’’ y luego que ella nos diga donde esta ubicado el cactus ese… Ugh, estúpida suerte, estúpida y malvada suerte –me quejaba en mis adentros una y otra vez, apretando mis puños con fuerza con la intención de reprimir el enfado que ahora mismo sentía, pero al ver a los aliados de ese Shamanmon mirarme con cierta desconfianza o, mas bien, de una forma extrañamente amenazadora me tuve que contener- Si ellos llegaran a atacarme, no podría defenderme considerando que Dracmon esta ahora incapacitado para pelear o siquiera para razonar, y BlackRenamon sigue herida por sus antiguas peleas, no puedo cometer una estupidez tan grande que nos lleve a la ruina a los tres cuando solo queremos alcanzar la gloria… -suspiré, cerrando mis ojos en una especie de meditación momentánea.
Shamamon sacó su lado ‘’ogro’’ y perdió toda compostura que lo clasificaba como verdadero chamán, actuando de una forma irritante e iniciando nuevamente con sus burlas hacia el aspecto e integridad de BlackRenamon, clasificándola mas de una vez como una ‘’basura inutil’’- Grrrrrr… -gruñía apenas de forma audible mientras formaba mis puños dispuesta, esta vez, a hacer lo que sea para darle su merecido a ese estúpido Shamamon; sin embargo, BlackRenamon se encontraba bastante calmada al respecto, incluso pude ver un leve sonrojo en sus mejillas, algo que me provocó cierta lastima- ¿No piensa hacer nada al respecto…? No sé si debo admirar su paciencia, o maldecir por que no está dispuesta a darle su merecido al Shamamon –vi pasar a un lado de mi a BlackRenamon pues caminaba hacia la salida- …Si ella no va a defenderse, entonces yo me encargaré de hacer que ese mono estúpido se trague todas sus palabras –di unos pasos hacia el Shamamon, ignorando al Sepikmon y Baromon, pero cuando cargué mi puño… sentí como si algo pasara a un lado de mi a una velocidad inhumana, puesto que solo sentí mi cabello despeinarse un poco por la ráfaga de aire que pasó a mi derecha- ¿Qué fue…? –lo único que pudieron captar mis ojos al final, fue a BlackRenamon a unos pasos mas delante de mi y con su puño extendido poco después de que mis oídos hubiesen logrado captar el sonido de un poderoso golpe que había sido propinado a, ¿A quien más podría ser? Al único que se lo tenía muy bien merecido: Shamamon.
Pude sentir como, involuntariamente, una sonrisa se dibujaba en mi rostro; observaba como la BlackRenamon, después de decirle unas palabras al Shamamon, se dio la vuelta, tomo a mi compañero, y se largó. Yo solo me quedé ahí, viendo como el Shamamon apenas y podía levantarse, me di la vuelta, volteando a ver levemente hacia sus ayudantes que aun yacían a mis lados sorprendidos- Tranquilos, este era el camino correcto, era hora de que su ‘’maestro’’ recibiera una muy valiosa lección –sonreí de lado, riendo leve en mis adentros, y luego me dediqué a seguir el cansado caminar de BlackRenamon que, por mas cansado que se notase, no dejaba de ser calmado y elegante, era algo impresionante… como a pesar de todo daba el esfuerzo inhumano de mantenerse mental y espiritualmente estable- ¿De verdad lo estará…? –fue lo único que paso por mi mente, antes de calmar mi mente de igual forma y solo enfocarme en seguir a la digimon de pelaje oscuro.
Después de unos minutos caminando, a pesar del calor y que no había bebido o siquiera sentido una gota de agua sobre mi lengua o cuerpo, no me sentía tan deshidratada como una persona normal estaría, mas a parte llevaba mi sudadera puesta, siempre me he considerado una persona con gran resistencia al calor, pero por desgracia, mi resistencia es poca contra los climas fríos… espero nunca me toque una misión ahí, heh… estaría en desventaja sin duda alguna. Mis pensamientos fueron bruscamente silenciados al escuchar como el silencio susurrante era interrumpido constantemente por una especie de respiración agitada, jadeos mas bien, no sé si era por cansancio o frustración… pero estaba casi segura de que esos sonidos provenían de la BlackRenamon que yacía frente a mi aun cargando a Dracmon, el cada vez se ponía peor, antes solo bastaba en quedarse en trance o babear, pero ahora tambien se la pasa diciendo tonterías cursis como ‘’Que piel tan suave tienes BlackRenamon… eres la digimon mas hermosa que mis manos pueden observar’’- Ugh… se me revolverá el estomago… -no me gustaban para nada estas cursilerías, y la idea de que mi propio digimon las dijera, era algo…- Yo tambien quiero que Dracmon vuelva a la normalidad… -tosí un poco ante mi comentario- No me malentiendas, pero es que esto de temas amorosos nunca han ido conmigo… -así es, a pesar de mi edad, nunca he tenido siquiera un interés amoroso; yo, originalmente, soy una chica; el que me haga pasar por varón no significa que mis gustos hayan cambiado en lo absoluto en ese tipo de cosas, pero por eso mismo, mi propia auto-disciplina para permanecer en mi papel de ‘’masculino’’ hace que tanto mi mente como corazón evite hacer estupideces como ‘’enamorarse’’ y realmente lo agradezco, con solo ver a Dracmon así hace que mi estomago se revuelva a mas no poder, si tuviese algo en el… seguramente lo vomitaría aquí y ahora.
En cambio, mi actitud se calmó un poco al escuchar las palabras que BlackRenamon dijo con un tono tan… triste…- Así que… en realidad no se sentía bien –dije en mis adentros, apenada por la mirada decaída que apenas podía alcanzar a ver en los ojos de la chica zorro que se había detenido por unos momentos para decir esas palabras tan profundas- ¿Hm…? –esa pregunta que me había hecho me hizo pensar un poco… ¿Es que enserio las palabras de ese estúpido chango le habían afectado?- Ja… y yo que pensé que habías esa compostura era natural, pero veo que enserio te está costando –suspiré, al parecer este digimon no era tan perfecta como aparentaba, pero no me sorprende… nada puede ser perfecto, y a veces… eso es algo bueno, muy bueno; le sonreí de forma calmada y con una mirada relajada como era común en mi persona; estaba a punto de decirle algo, pero ella interrumpió al momento en que señaló hacia un letrero que indicaba la morada de esa dichosa Palmon; fruncí el ceño, no me agradaba ser interrumpida, así que solo corrí hacia ella y le tomé del hombro para que volteara a ver- Oye… no te estés de esa forma, no va contigo –acababa de concerla, y no sabía si eso era o no cierto, pero al menos por mi punto de vista… verla así no quedaba nada con la apariencia que ella ha estado armando con tanto esfuerzo- …¿Y que si eres un error? ¿Qué tiene de malo eso? –coloqué mis manos sobre mis bolsillos, e indiferentemente cerré los ojos para evitar ver esos ojos tan profundos que poseía por unos momentos- Escucha, no sé lo que es ‘’amar’’, no tengo idea de el concepto de ‘’amor’’ y la verdad es que no me interesa saberlo en lo absoluto, pero lo poco que sé, me da por claro que eso de ser un error o no, no tiene nada que ver en lo que es ser amado o siquiera querido, por tus amigos, por tu familia… o por cualquier otra persona cuyos sentimientos sean correspondidos a los tuyos –suspiré, demonios… realmente odiaba hablar de este tipo de cosas, pero tampoco me gusta guardarme nada, eso tampoco va conmigo- Estoy seguro de que lo sabes, pero por si no lo sabes, te lo diré… en el mundo humano tambien existen seres a los que son llamados ‘’errores’’ desde nacimiento… pero muchos viven en la ignorancia de esto, y eso no los impide crecer y evolucionar para ser mejores; hay otras personas que si lo saben, esas personas tienen la oportunidad de dar un paso adelante y avanzar… o retroceder y permanecer en ese mundo donde la única persona que te dice que eres una basura, algo que no debió existir, y que realmente te importe… eres tu –dicho esto me acerqué a ella, y le quité a Dracmon de la espalda, colocándolo ahora sobre la mía sin permitirle siquiera diferir ante esto- Sé que no te interesa saber esto, pero tu y yo tenemos mucho en común, una de ella es que ambos estamos conscientes… de que somos un error –le di la espalda, caminando en dirección al letrero- …pero… ¿Eso enserio es demasiado malo? –quizás nuestro concepto de error era diferente, ella había nacido de una recopilación ‘’anormal’’ de datos, mientras que yo… bueno, simplemente, mis padres nunca desearon que yo naciese, fui un ‘’error’’, algo que nunca debió haber ocurrido, pero eso no me importa.
Unos minutos después caminando a un paso igual, logré observar no muy a lo lejos una especie de caverna que tenía unas hojas de palmeras juntas amarradas dando la apariencia de ‘’cortina’’ o ‘’puerta’’, a sus lados, era la única zona de yacía extensa vegetación, puesto que los demás lares de la Zona Prehistorica eran como los del Desierto: con muy poca flora- ¿Hola?... –fue lo primero que pregunté al momento en que hice a un lado las cortinas que servían de puerta; Dracmon seguía balbuceando y babeando, lo cual se me dificultaba mucho cargarlo, pero debía permanecer fuerte para que la BlackRenamon no volviese a quitármelo- ¿¡Hay alguien!? –pregunté, esta vez, mas fuerte y con algo de desesperación- ¡Oh, disculpen, disculpen…! –se escuchó una voz de mujer madura, logrando observar como en otra cortina salía una especie de planta humanoide de estatura media-alta, llevaba una flor con diversos colores de petalos en la cabeza y una gran capa azul en su espalda- Perdonen, estaba tomando una siesta.. –rió un poco- ..que lastima, no tenía idea alguna de que este día tendría visitas, si hubiese sabido hubiera preparado unos momentos antes el té de hierba, pero no hace poco que lo acabo de poner a calentar, se tardará unos minutos –su aspecto me desconcertaba mucho… por lo que tomé el digivice de mi bolsillo y escaneé a la digimon frente a mi.
- ¡Oh, por favor! ¡Pasen, pasen…! Estan en su casa –dijo con un tono bastante amable, mientras traía unas pequeñas bancas y las colocaba cerca de una mesa de piedra bien tallada- Que no les engañe mi apariencia, el hecho de que esté sola todo el tiempo no significa que sea de personalidad hostil o huraña, pero es que suelo preferir la compañía de mis amigas las plantas antes que asistir a algún evento que ocurra en esta casi inhabitada Zona prehistórica, jeje… -se sentó en una de las cuatro bancas que había traído- Como dije hace unos momentos, pronto estará el té de hierbas, sí que si gustan pueden entrar y sentarse… -estiró su mano hacia las bancas vacías como invitación a que nos sentaramos- Ah… gracias… -normalmente no aceptaría esa hospitalidad de un extraño pero no aguantaba mas a Dracmon en mi espalda, y no quería pasárselo a BlackRenamon, así que en cuanto pude senté a Dracmon en la silla de en medio y yo me senté en una a su izquierda- Veo que han venido con un propósito, ¿No me equivoco? –rió en sus adentros con una agradable sonrisa- Cuentenmelo todo, o al menos lo que pueda saber, estaré dispuesta a ayudar en lo que sea que tenga en mis viejas manos –realmente no estaba acostumbrada a tanta hospitalidad, pero no percibía ningún sentimiento maligno de ella, así que me sentí mas relajada a la hora de hablar- De acuerdo, Dracmon y yo vinimos aquí para una misión, pero el verdadero tema por el que estamos aquí es porque mi compañero pareció haber mordido un cactus venenoso que lo ha dejado en un extraño trance del cual es muy difícil sacarlo, siempre que mira a la BlackRenamon que nos acompaña ahora, suele ponerse de esta forma tan… -miré a mi compañero, quien ahora parecía estar cantándole una canción muy vergonzosa a BlackRenamon, ¿Desde cuando se le ocurren ideas para canciones…? De todas formas, no se le da en lo absoluto…- …rara –la sonrisa que llevaba Palmon se había desaparecido, y comenzó a tornarse algo pensante- ¿De casualidad, el cactus era largo y llevaba un fruto rosado? –yo me extrañé por su descripción, solo lo negué- No, era redondo y bajo como una albóndiga, y llevaba un fruto rojo –la Palmon no pudo evitar sorprenderse ante esto- …¿Dices que actúa como enamorado desde que vio por primera vez a la Renamon que las acompaña, no es así? –dudé un poco, quizás algo le preocupaba, y eso me causaba extrañeza… pero solo asentí leve- …Ya veo… -suspiró, y volvió a su amable sonrisa- Para su fortuna, tengo el antídoto perfecto para esta situación, y enserio son suertudos… ya que es una planta muy extraña por estos lares, yo tengo una de las pocas muestras que se pueden encontrar por aquí –se levantó de su banca- Dejame ir por ella, ¿De acuerdo? –dicho esto, ella se alejó y entró por una de esas cortinas-puertas que tenía mientras nosotros la esperamos.
Shamamon sacó su lado ‘’ogro’’ y perdió toda compostura que lo clasificaba como verdadero chamán, actuando de una forma irritante e iniciando nuevamente con sus burlas hacia el aspecto e integridad de BlackRenamon, clasificándola mas de una vez como una ‘’basura inutil’’- Grrrrrr… -gruñía apenas de forma audible mientras formaba mis puños dispuesta, esta vez, a hacer lo que sea para darle su merecido a ese estúpido Shamamon; sin embargo, BlackRenamon se encontraba bastante calmada al respecto, incluso pude ver un leve sonrojo en sus mejillas, algo que me provocó cierta lastima- ¿No piensa hacer nada al respecto…? No sé si debo admirar su paciencia, o maldecir por que no está dispuesta a darle su merecido al Shamamon –vi pasar a un lado de mi a BlackRenamon pues caminaba hacia la salida- …Si ella no va a defenderse, entonces yo me encargaré de hacer que ese mono estúpido se trague todas sus palabras –di unos pasos hacia el Shamamon, ignorando al Sepikmon y Baromon, pero cuando cargué mi puño… sentí como si algo pasara a un lado de mi a una velocidad inhumana, puesto que solo sentí mi cabello despeinarse un poco por la ráfaga de aire que pasó a mi derecha- ¿Qué fue…? –lo único que pudieron captar mis ojos al final, fue a BlackRenamon a unos pasos mas delante de mi y con su puño extendido poco después de que mis oídos hubiesen logrado captar el sonido de un poderoso golpe que había sido propinado a, ¿A quien más podría ser? Al único que se lo tenía muy bien merecido: Shamamon.
Pude sentir como, involuntariamente, una sonrisa se dibujaba en mi rostro; observaba como la BlackRenamon, después de decirle unas palabras al Shamamon, se dio la vuelta, tomo a mi compañero, y se largó. Yo solo me quedé ahí, viendo como el Shamamon apenas y podía levantarse, me di la vuelta, volteando a ver levemente hacia sus ayudantes que aun yacían a mis lados sorprendidos- Tranquilos, este era el camino correcto, era hora de que su ‘’maestro’’ recibiera una muy valiosa lección –sonreí de lado, riendo leve en mis adentros, y luego me dediqué a seguir el cansado caminar de BlackRenamon que, por mas cansado que se notase, no dejaba de ser calmado y elegante, era algo impresionante… como a pesar de todo daba el esfuerzo inhumano de mantenerse mental y espiritualmente estable- ¿De verdad lo estará…? –fue lo único que paso por mi mente, antes de calmar mi mente de igual forma y solo enfocarme en seguir a la digimon de pelaje oscuro.
Después de unos minutos caminando, a pesar del calor y que no había bebido o siquiera sentido una gota de agua sobre mi lengua o cuerpo, no me sentía tan deshidratada como una persona normal estaría, mas a parte llevaba mi sudadera puesta, siempre me he considerado una persona con gran resistencia al calor, pero por desgracia, mi resistencia es poca contra los climas fríos… espero nunca me toque una misión ahí, heh… estaría en desventaja sin duda alguna. Mis pensamientos fueron bruscamente silenciados al escuchar como el silencio susurrante era interrumpido constantemente por una especie de respiración agitada, jadeos mas bien, no sé si era por cansancio o frustración… pero estaba casi segura de que esos sonidos provenían de la BlackRenamon que yacía frente a mi aun cargando a Dracmon, el cada vez se ponía peor, antes solo bastaba en quedarse en trance o babear, pero ahora tambien se la pasa diciendo tonterías cursis como ‘’Que piel tan suave tienes BlackRenamon… eres la digimon mas hermosa que mis manos pueden observar’’- Ugh… se me revolverá el estomago… -no me gustaban para nada estas cursilerías, y la idea de que mi propio digimon las dijera, era algo…- Yo tambien quiero que Dracmon vuelva a la normalidad… -tosí un poco ante mi comentario- No me malentiendas, pero es que esto de temas amorosos nunca han ido conmigo… -así es, a pesar de mi edad, nunca he tenido siquiera un interés amoroso; yo, originalmente, soy una chica; el que me haga pasar por varón no significa que mis gustos hayan cambiado en lo absoluto en ese tipo de cosas, pero por eso mismo, mi propia auto-disciplina para permanecer en mi papel de ‘’masculino’’ hace que tanto mi mente como corazón evite hacer estupideces como ‘’enamorarse’’ y realmente lo agradezco, con solo ver a Dracmon así hace que mi estomago se revuelva a mas no poder, si tuviese algo en el… seguramente lo vomitaría aquí y ahora.
En cambio, mi actitud se calmó un poco al escuchar las palabras que BlackRenamon dijo con un tono tan… triste…- Así que… en realidad no se sentía bien –dije en mis adentros, apenada por la mirada decaída que apenas podía alcanzar a ver en los ojos de la chica zorro que se había detenido por unos momentos para decir esas palabras tan profundas- ¿Hm…? –esa pregunta que me había hecho me hizo pensar un poco… ¿Es que enserio las palabras de ese estúpido chango le habían afectado?- Ja… y yo que pensé que habías esa compostura era natural, pero veo que enserio te está costando –suspiré, al parecer este digimon no era tan perfecta como aparentaba, pero no me sorprende… nada puede ser perfecto, y a veces… eso es algo bueno, muy bueno; le sonreí de forma calmada y con una mirada relajada como era común en mi persona; estaba a punto de decirle algo, pero ella interrumpió al momento en que señaló hacia un letrero que indicaba la morada de esa dichosa Palmon; fruncí el ceño, no me agradaba ser interrumpida, así que solo corrí hacia ella y le tomé del hombro para que volteara a ver- Oye… no te estés de esa forma, no va contigo –acababa de concerla, y no sabía si eso era o no cierto, pero al menos por mi punto de vista… verla así no quedaba nada con la apariencia que ella ha estado armando con tanto esfuerzo- …¿Y que si eres un error? ¿Qué tiene de malo eso? –coloqué mis manos sobre mis bolsillos, e indiferentemente cerré los ojos para evitar ver esos ojos tan profundos que poseía por unos momentos- Escucha, no sé lo que es ‘’amar’’, no tengo idea de el concepto de ‘’amor’’ y la verdad es que no me interesa saberlo en lo absoluto, pero lo poco que sé, me da por claro que eso de ser un error o no, no tiene nada que ver en lo que es ser amado o siquiera querido, por tus amigos, por tu familia… o por cualquier otra persona cuyos sentimientos sean correspondidos a los tuyos –suspiré, demonios… realmente odiaba hablar de este tipo de cosas, pero tampoco me gusta guardarme nada, eso tampoco va conmigo- Estoy seguro de que lo sabes, pero por si no lo sabes, te lo diré… en el mundo humano tambien existen seres a los que son llamados ‘’errores’’ desde nacimiento… pero muchos viven en la ignorancia de esto, y eso no los impide crecer y evolucionar para ser mejores; hay otras personas que si lo saben, esas personas tienen la oportunidad de dar un paso adelante y avanzar… o retroceder y permanecer en ese mundo donde la única persona que te dice que eres una basura, algo que no debió existir, y que realmente te importe… eres tu –dicho esto me acerqué a ella, y le quité a Dracmon de la espalda, colocándolo ahora sobre la mía sin permitirle siquiera diferir ante esto- Sé que no te interesa saber esto, pero tu y yo tenemos mucho en común, una de ella es que ambos estamos conscientes… de que somos un error –le di la espalda, caminando en dirección al letrero- …pero… ¿Eso enserio es demasiado malo? –quizás nuestro concepto de error era diferente, ella había nacido de una recopilación ‘’anormal’’ de datos, mientras que yo… bueno, simplemente, mis padres nunca desearon que yo naciese, fui un ‘’error’’, algo que nunca debió haber ocurrido, pero eso no me importa.
Unos minutos después caminando a un paso igual, logré observar no muy a lo lejos una especie de caverna que tenía unas hojas de palmeras juntas amarradas dando la apariencia de ‘’cortina’’ o ‘’puerta’’, a sus lados, era la única zona de yacía extensa vegetación, puesto que los demás lares de la Zona Prehistorica eran como los del Desierto: con muy poca flora- ¿Hola?... –fue lo primero que pregunté al momento en que hice a un lado las cortinas que servían de puerta; Dracmon seguía balbuceando y babeando, lo cual se me dificultaba mucho cargarlo, pero debía permanecer fuerte para que la BlackRenamon no volviese a quitármelo- ¿¡Hay alguien!? –pregunté, esta vez, mas fuerte y con algo de desesperación- ¡Oh, disculpen, disculpen…! –se escuchó una voz de mujer madura, logrando observar como en otra cortina salía una especie de planta humanoide de estatura media-alta, llevaba una flor con diversos colores de petalos en la cabeza y una gran capa azul en su espalda- Perdonen, estaba tomando una siesta.. –rió un poco- ..que lastima, no tenía idea alguna de que este día tendría visitas, si hubiese sabido hubiera preparado unos momentos antes el té de hierba, pero no hace poco que lo acabo de poner a calentar, se tardará unos minutos –su aspecto me desconcertaba mucho… por lo que tomé el digivice de mi bolsillo y escaneé a la digimon frente a mi.
- Spoiler:
Nombre: Palmon X
Nivel: Infante
Tipo: Datos
La flor tropical que posee en su cabeza ha florecido más allá y ha adquirido una belleza fascinante, y su color y fragancia han llegado a expresar visiblemente las emociones de Palmon. Ella descarga un olor tan fuerte como una droga de gran alcance de sus pétalos de color rojo cuando está enojada, un olor fresco de sus pétalos azules que silencia la fuerza de voluntad para luchar del enemigo cuando está triste y un olor de sus pétalos de color amarillo que sumerge al enemigo en unas alucinaciones que le hacen escapar de la realidad cuando ella está feliz. Ella mezclará estos olores producidos por su cuerpo para configurar su ataque RGB Herb. La mente de aquellos Digimon que rasga con las garras de sus brazos, que contienen veneno, quedan confusas temporalmente.
- ¡Oh, por favor! ¡Pasen, pasen…! Estan en su casa –dijo con un tono bastante amable, mientras traía unas pequeñas bancas y las colocaba cerca de una mesa de piedra bien tallada- Que no les engañe mi apariencia, el hecho de que esté sola todo el tiempo no significa que sea de personalidad hostil o huraña, pero es que suelo preferir la compañía de mis amigas las plantas antes que asistir a algún evento que ocurra en esta casi inhabitada Zona prehistórica, jeje… -se sentó en una de las cuatro bancas que había traído- Como dije hace unos momentos, pronto estará el té de hierbas, sí que si gustan pueden entrar y sentarse… -estiró su mano hacia las bancas vacías como invitación a que nos sentaramos- Ah… gracias… -normalmente no aceptaría esa hospitalidad de un extraño pero no aguantaba mas a Dracmon en mi espalda, y no quería pasárselo a BlackRenamon, así que en cuanto pude senté a Dracmon en la silla de en medio y yo me senté en una a su izquierda- Veo que han venido con un propósito, ¿No me equivoco? –rió en sus adentros con una agradable sonrisa- Cuentenmelo todo, o al menos lo que pueda saber, estaré dispuesta a ayudar en lo que sea que tenga en mis viejas manos –realmente no estaba acostumbrada a tanta hospitalidad, pero no percibía ningún sentimiento maligno de ella, así que me sentí mas relajada a la hora de hablar- De acuerdo, Dracmon y yo vinimos aquí para una misión, pero el verdadero tema por el que estamos aquí es porque mi compañero pareció haber mordido un cactus venenoso que lo ha dejado en un extraño trance del cual es muy difícil sacarlo, siempre que mira a la BlackRenamon que nos acompaña ahora, suele ponerse de esta forma tan… -miré a mi compañero, quien ahora parecía estar cantándole una canción muy vergonzosa a BlackRenamon, ¿Desde cuando se le ocurren ideas para canciones…? De todas formas, no se le da en lo absoluto…- …rara –la sonrisa que llevaba Palmon se había desaparecido, y comenzó a tornarse algo pensante- ¿De casualidad, el cactus era largo y llevaba un fruto rosado? –yo me extrañé por su descripción, solo lo negué- No, era redondo y bajo como una albóndiga, y llevaba un fruto rojo –la Palmon no pudo evitar sorprenderse ante esto- …¿Dices que actúa como enamorado desde que vio por primera vez a la Renamon que las acompaña, no es así? –dudé un poco, quizás algo le preocupaba, y eso me causaba extrañeza… pero solo asentí leve- …Ya veo… -suspiró, y volvió a su amable sonrisa- Para su fortuna, tengo el antídoto perfecto para esta situación, y enserio son suertudos… ya que es una planta muy extraña por estos lares, yo tengo una de las pocas muestras que se pueden encontrar por aquí –se levantó de su banca- Dejame ir por ella, ¿De acuerdo? –dicho esto, ella se alejó y entró por una de esas cortinas-puertas que tenía mientras nosotros la esperamos.
- Spoiler:
- Sé que yo no puedo poner condiciones ni nada, pero te pido el favor de que ese tema de la preocupación de Palmon me lo dejases a mi después de que Dracmon vuelva a la normalidad :3 Te daré una sorpresa (¿)
- Tamer & Digimon
- Prueba de Rol :ADigi Puntos :354Cuentas :Ficha :Cronologia :NPCs :Nivel On Rol :MegaNivel On Rol de los Digi Aliados :UltimateIcono :Rango y Unidad :Haruka Aizawa
Rango: Holy Knight
Unidad: Dragon Spirit
Dracmon
Rango: Holy Knight
Unidad: Dragon SpiritRango y Unidad Digi Aliado :Gaomon
Rango: Knight
Unidad: Dragon SpiritInventario :
Haruka Aizawa
Re: Domando a las Bestias [Misión]
Luego de que la Palmon se fuera a buscar la medicina, te quedaste observando la gran colección de plantas que tenia, era sorprendente, y además, esas plantas eran sus “amigas”, lo que resultaba curioso, incluso era posible que pudiera crear un bosque sin el menor de los problemas, aunque por otra parte, la Zona Prehistórica es eso, una zona de la prehistoria, seguramente deba mantenerse desértica y únicamente habitada por los digimons dinosaurios que vivan por los lugares.
Al cabo de unos segundos, sentiste una especie de golpe contra una superficie solida, por unos segundos creíste que sería BlackRenamon con la paciencia que tenía guardada seguramente perdida por las canciones de amor de Dracmon hacia ella, pero al ver, notaste que estaba golpeando la pared, dejando una marca de su puño, después de eso, medio la mano y dejo algo, no pudiste ver que por que estaba totalmente cubierto por la mano de la digimon lupina, quien parecía de mejor humor, aunque por su rostro frio e indiferente era algo difícil de asegurar, por una parte tenia las orejas levantadas y parecía tener leves movimientos en la cola, pero por el otro tenía una postura firme y una mirada de enojo, tal vez algo natural en ella, pero seguramente era mejor no averiguarlo.
Te preguntaste que ocurría, eh incluso lo preguntaste abiertamente, pero BlackRenamon solo volvió a darle otro puñetazo a la pared, nuevamente dejando la marca de sus puños, después se observo la mano que parecía sangrarle, aunque no mostraba expresión de dolor alguno, no se veía en sus ojos que le doliera, ¿sería posible que ya estaba acostumbrada?.
Realmente… solo planto algunas semillas sueltas… solo puedo pagar la ayuda que nos brinda Palmon X haciendo el trabajo de plantar algunas semillas de enredadera… -suspiro y se sentó en el suelo, apoyando la espalda contra la pared- sin mis vendas… dinero… y energías… será difícil pagar todos los problemas que te eh causado Kuro… también a Drac… pero les pagare de alguna forma… en mi familia no nos gusta quedar en deuda… lo vemos como un problema… por que las deudas pueden acumularse… y cuando finalmente estamos por pagarlas –te observo y suspiro- es demasiado como para pagarlo…
Al verla, notaste una expresión decidida, realmente ella estaba dispuesta a pagar todo lo que había causado, aunque te preguntaste en tus adentros, ¿Qué fue lo que hiso ella?, porque… esa era la verdad, ¿Qué había hecho BlackRenamon?, ¿fue su culpa que recibieras una misión que no querías hacer?, ¿ella tuvo la culpa de que Dracmon mordiera ese cactus, que no era el que supuso Shamanmon?, ¿ella tuvo la culpa de que Shamanmon no supiera la respuesta a lo que le sucedía a Dracmon?, no, esa era la respuesta a todas esas preguntas, y como la respuesta era no, ¿Qué había hecho BlackRenamon para tener una deuda contigo?, tal vez era por salvarle la vida, o no, aunque esa era la razón más lógica que había.
Luego de un segundo, viste algo de lo que no pudiste evitar reírte a todo volumen como tu compañero, y la causa de la risa era como Dracmon seguía rebajándose por culpa del veneno, ahora había dejado las canciones de amor para sobarle la mano a BlackRenamon, como si quisiera hacerla sentir mejor después de esos puñetazos que le había causado a la pared con las intenciones de pagarle a Palmon X su ayuda. Era simplemente gracioso, mas como BlackRenamon se dejaba sobar sin oponer resistencia alguna, tal vez era porque tenía pocas energías o por que le gustaba, aunque realmente, la primera opción era la que tenía más sentido, después de todo, ella no parece estar acostumbrada a tan buenos tratos de parte de extraños.
Haaa… dios… -dio un suspiro y extendió el brazo dejando que Dracmon lo tomara, abrazara y sobara- espero que Palmon regrese pronto… admito que es algo tierno en un raro sentido que me quiera tanto pero… quiero conocer al verdadero Dracmon… a tu verdadero compañero Kuro… este Dracmon… me trata muy… raro
Muy bien, aquí tengo la cura –notaste que Palmon regresaba con un frasco en las manos de entre la cortina-puerta por la que se había ido- pero tengan cuidado, solo puedo destilar la cura cuando el fruto de la planta crece, y solo crece una vez por año, asique deben usarla con precaución, ¿entienden?
¿Entonces esa medicina me permitirá conocer al verdadero Dracmon?... qué bueno… -pareció formarse una sonrisa en su rostro, que se borro rápidamente cuando Palmon comenzó a bromear sobre cosas que desconocías y que BlackRenamon solo se limito a decir- cállate… no tienes que meter cosas que no sabes de mi…
Jajaja, vamos, solo bromeaba –dijo la Palmon entregándote el antídoto para curar a Dracmon finalmente- te lo repito, ten mucho cuidado, solo tiene que beberlo, pero tiene un sabor… amargo… asique es difícil de tragar
Apenas recibiste el antídoto, sentiste que tenias un problema menos, pero en unos segundos, el antídoto había desaparecido en un instante, ni Palmon ni BlackRenamon, mucho menos Dracmon, sabían dónde se encontraba, pero luego todos escucharon una risa burlona, por lo que volteaste con rabia y viste a un digimon muy extraño, tenía la forma de un mono verde con ropa de cavernícola, lo que era sin duda lo más raro, además de que tenía una especie de honda como arma en la espalda.
El digimon mono tenía el antídoto en las manos, y también tenía a una guardaespaldas, curiosamente esta guardaespaldas era una Weedmon, una digimon maleza de las plantas que suele habitar casi todo tipo de ambientes, menos los fríos. Al ver al digimon mono comenzaste a apretar los puños con fuerza, ese mono tenia la única cura que podías usar para despertar a Dracmon de ese veneno que le afectaba tanto, y parecía ponerse peor a cada momento. Al ver al digimon sabias que tenías que quitarle el antídoto, pero al verlo detenidamente, notaste algo raro, tenía unas especies de telas en los brazos, ¿telas blancas?, eso era realmente extraño, aunque, pronto recordaste algo raro, BlackRenamon había perdido un par de vendajes, ¿serian esos?, quisiste preguntarle, pero al voltear para verla, viste que su rostro tranquilo y estable, era como el de una bestia salvaje, ahora si podías ver claramente su boca, que tenia los colmillos afilados y sus pupilas parecían haberse achicado para dejar espacio a sus instintos salvajes. Daba miedo verla así, aunque Dracmon estaba hundido en su “amor”, y Palmon estaba preocupada por el antídoto, asique seguramente eras la única que sentía miedo por el rostro de la digimon lupina.
Tu… tu eres el desgraciado… que se atrevió a robarme… ¡MIS VENDAJES! –Grito la digimon totalmente rabiosa por ver que sus vendas estaban en los brazos sudorosos del mono que seguía riéndose en tono de burla- ¡TE VOY A MATAR! ¡TE DESTRUIRE COMO MI MAESTRO DESTRUYO PUEBLOS DONDE ESCORIAS COMO TU ABUNDABAN!
¡JAJAJA! ¡Quisiera verlo! ¡Basura! ¡Error! ¡Estorbo! ¡Niña tonta que debió quedarse sin nacer! –Siguió riéndose como si nada mientras daba unos pasos hacia atrás- ¡Escúchame! ¡Este lindo frasco es mío ahora!!Igual que tus sucios vendajes! ¡Asique si lo quieren de nuevo tendrás que pelear por el!
Grrrr… bien… -se levanto y preparo sus garras mientras sus colmillos se afilaban mientras que parecía que sus heridas sanaban más rápido- ¡Si quieres pela te la daré!
Al cabo de unos segundos, sentiste una especie de golpe contra una superficie solida, por unos segundos creíste que sería BlackRenamon con la paciencia que tenía guardada seguramente perdida por las canciones de amor de Dracmon hacia ella, pero al ver, notaste que estaba golpeando la pared, dejando una marca de su puño, después de eso, medio la mano y dejo algo, no pudiste ver que por que estaba totalmente cubierto por la mano de la digimon lupina, quien parecía de mejor humor, aunque por su rostro frio e indiferente era algo difícil de asegurar, por una parte tenia las orejas levantadas y parecía tener leves movimientos en la cola, pero por el otro tenía una postura firme y una mirada de enojo, tal vez algo natural en ella, pero seguramente era mejor no averiguarlo.
Te preguntaste que ocurría, eh incluso lo preguntaste abiertamente, pero BlackRenamon solo volvió a darle otro puñetazo a la pared, nuevamente dejando la marca de sus puños, después se observo la mano que parecía sangrarle, aunque no mostraba expresión de dolor alguno, no se veía en sus ojos que le doliera, ¿sería posible que ya estaba acostumbrada?.
Realmente… solo planto algunas semillas sueltas… solo puedo pagar la ayuda que nos brinda Palmon X haciendo el trabajo de plantar algunas semillas de enredadera… -suspiro y se sentó en el suelo, apoyando la espalda contra la pared- sin mis vendas… dinero… y energías… será difícil pagar todos los problemas que te eh causado Kuro… también a Drac… pero les pagare de alguna forma… en mi familia no nos gusta quedar en deuda… lo vemos como un problema… por que las deudas pueden acumularse… y cuando finalmente estamos por pagarlas –te observo y suspiro- es demasiado como para pagarlo…
Al verla, notaste una expresión decidida, realmente ella estaba dispuesta a pagar todo lo que había causado, aunque te preguntaste en tus adentros, ¿Qué fue lo que hiso ella?, porque… esa era la verdad, ¿Qué había hecho BlackRenamon?, ¿fue su culpa que recibieras una misión que no querías hacer?, ¿ella tuvo la culpa de que Dracmon mordiera ese cactus, que no era el que supuso Shamanmon?, ¿ella tuvo la culpa de que Shamanmon no supiera la respuesta a lo que le sucedía a Dracmon?, no, esa era la respuesta a todas esas preguntas, y como la respuesta era no, ¿Qué había hecho BlackRenamon para tener una deuda contigo?, tal vez era por salvarle la vida, o no, aunque esa era la razón más lógica que había.
Luego de un segundo, viste algo de lo que no pudiste evitar reírte a todo volumen como tu compañero, y la causa de la risa era como Dracmon seguía rebajándose por culpa del veneno, ahora había dejado las canciones de amor para sobarle la mano a BlackRenamon, como si quisiera hacerla sentir mejor después de esos puñetazos que le había causado a la pared con las intenciones de pagarle a Palmon X su ayuda. Era simplemente gracioso, mas como BlackRenamon se dejaba sobar sin oponer resistencia alguna, tal vez era porque tenía pocas energías o por que le gustaba, aunque realmente, la primera opción era la que tenía más sentido, después de todo, ella no parece estar acostumbrada a tan buenos tratos de parte de extraños.
Haaa… dios… -dio un suspiro y extendió el brazo dejando que Dracmon lo tomara, abrazara y sobara- espero que Palmon regrese pronto… admito que es algo tierno en un raro sentido que me quiera tanto pero… quiero conocer al verdadero Dracmon… a tu verdadero compañero Kuro… este Dracmon… me trata muy… raro
Muy bien, aquí tengo la cura –notaste que Palmon regresaba con un frasco en las manos de entre la cortina-puerta por la que se había ido- pero tengan cuidado, solo puedo destilar la cura cuando el fruto de la planta crece, y solo crece una vez por año, asique deben usarla con precaución, ¿entienden?
¿Entonces esa medicina me permitirá conocer al verdadero Dracmon?... qué bueno… -pareció formarse una sonrisa en su rostro, que se borro rápidamente cuando Palmon comenzó a bromear sobre cosas que desconocías y que BlackRenamon solo se limito a decir- cállate… no tienes que meter cosas que no sabes de mi…
Jajaja, vamos, solo bromeaba –dijo la Palmon entregándote el antídoto para curar a Dracmon finalmente- te lo repito, ten mucho cuidado, solo tiene que beberlo, pero tiene un sabor… amargo… asique es difícil de tragar
Apenas recibiste el antídoto, sentiste que tenias un problema menos, pero en unos segundos, el antídoto había desaparecido en un instante, ni Palmon ni BlackRenamon, mucho menos Dracmon, sabían dónde se encontraba, pero luego todos escucharon una risa burlona, por lo que volteaste con rabia y viste a un digimon muy extraño, tenía la forma de un mono verde con ropa de cavernícola, lo que era sin duda lo más raro, además de que tenía una especie de honda como arma en la espalda.
El digimon mono tenía el antídoto en las manos, y también tenía a una guardaespaldas, curiosamente esta guardaespaldas era una Weedmon, una digimon maleza de las plantas que suele habitar casi todo tipo de ambientes, menos los fríos. Al ver al digimon mono comenzaste a apretar los puños con fuerza, ese mono tenia la única cura que podías usar para despertar a Dracmon de ese veneno que le afectaba tanto, y parecía ponerse peor a cada momento. Al ver al digimon sabias que tenías que quitarle el antídoto, pero al verlo detenidamente, notaste algo raro, tenía unas especies de telas en los brazos, ¿telas blancas?, eso era realmente extraño, aunque, pronto recordaste algo raro, BlackRenamon había perdido un par de vendajes, ¿serian esos?, quisiste preguntarle, pero al voltear para verla, viste que su rostro tranquilo y estable, era como el de una bestia salvaje, ahora si podías ver claramente su boca, que tenia los colmillos afilados y sus pupilas parecían haberse achicado para dejar espacio a sus instintos salvajes. Daba miedo verla así, aunque Dracmon estaba hundido en su “amor”, y Palmon estaba preocupada por el antídoto, asique seguramente eras la única que sentía miedo por el rostro de la digimon lupina.
Tu… tu eres el desgraciado… que se atrevió a robarme… ¡MIS VENDAJES! –Grito la digimon totalmente rabiosa por ver que sus vendas estaban en los brazos sudorosos del mono que seguía riéndose en tono de burla- ¡TE VOY A MATAR! ¡TE DESTRUIRE COMO MI MAESTRO DESTRUYO PUEBLOS DONDE ESCORIAS COMO TU ABUNDABAN!
¡JAJAJA! ¡Quisiera verlo! ¡Basura! ¡Error! ¡Estorbo! ¡Niña tonta que debió quedarse sin nacer! –Siguió riéndose como si nada mientras daba unos pasos hacia atrás- ¡Escúchame! ¡Este lindo frasco es mío ahora!!Igual que tus sucios vendajes! ¡Asique si lo quieren de nuevo tendrás que pelear por el!
Grrrr… bien… -se levanto y preparo sus garras mientras sus colmillos se afilaban mientras que parecía que sus heridas sanaban más rápido- ¡Si quieres pela te la daré!
- Off:
- Como Dracmon sigue afectado por el veneno y Palmon X no es una digimon de pelea, te concedere usar a BlackRenamon para librar esta batalla, pero unicamente en esta batalla, despues de eso, no la usaras a menos que haya otra batalla y Dracmon este indispuesto.
- Tamer & Digimon
- Prueba de Rol :ADigi Puntos :707Cuentas :Ficha :Relaciones :Cronologia :NPCs :Nivel On Rol :DNA Evolution (Super Ultimate)Nivel On Rol de los Digi Aliados :Nova: Mega
BR: MegaIcono :Rango y Unidad :Scott Shadowest Musahrahjy
Rango: Hades Knight
División: Hades Titans
Unidad/Sub-division: Titans
Labramon
Rango: Hades Knight
División: Hades Titans
Unidad/Sub-division: TitansRango y Unidad Digi Aliado :Nova (BlackWarGreymon)
Rango: Hades Knight
División: Hades Titans
Unidad/Sub-division: Titans
BR (Renamon)
Rango: Soldado
División: D-Brigade
Unidad/Sub-division: Shadow LizardInventario :
Scott Desaster
Re: Domando a las Bestias [Misión]
Me sentía algo impaciente, no me agradaba en lo absoluto la idea de tener a mi compañero de esta forma tan vergonzosa y que, no solo me avergüenza a mi, si no que estoy segura de que si el estuviera presente ahora y se viera hacer todo lo que esta haciendo… tambien se encontraría vuelto una furia- Estoy ansiosa por ver cuando regrese a la normalidad… -sonreí de lado y reí en mis adentros con cierta maldad, era cierto que odiaba al actual Dracmon, pero esto valdrá la pena para ver la cara de furia o vergüenza que se le aparezca a mi compañero cuando se de cuenta de todas las tonterías que hizo ¡Jajajaja! ¡Que divertido, que divertido…! ¿¡Cuánto más tardará Palmon!? ¡Yo quiero ver acción ahora…!
Mi discusión interna se vio brutalmente interrumpida al momento de escuchar como si algo estuviese siendo golpeando, una superficie dura como la roca, de inmediato apareció en mi mente una imagen de BlackRenamon golpeando con su puño la pared maciza de tierra que había en la caverna por culpa de todos los malos pesares que había vivido o sufrido, me sentí mal ante dicho recuerdo, pero cuando volteé a verla directamente me di cuenta de que en su rostro no se dibujaba ese profundo pesar que antes tenía cuando hacía casi lo mismo en el escondite que habíamos encontrado para hospedarla por unos momentos- …¿Te sientes bien? –ella ignoro mi pregunta, haciendo lo mismo un par de veces más, por lo que veía entre una combinación de sorprendida y asustada como incluso su mano comenzaba a sangrar- … ¡Ugh…! ¿¡Pero que demonios haces!? –realmente estaba loca, ¿¡Que estará pasando por su cabeza!? Grrr… de nuevo preocupándome, como odio esta situación, tengo ganas de golpear a alguien.
Al parecer, la razón por lo que hacía esa tremenda estupidez, era para darle un agradecimiento a Palmon con la intención de plantar algunas semillas que las demás flores por los alrededores habían brotado con la intención de que alguien lograse reproducir más de su especie- Pero… ¿Por qué de esa manera…? –normalmente no me preocuparía, ella es dura y resistente, pero ahora se encontraba en malas condiciones… no era momento para hacerse la fuerte- Realmente no los entiendo, los digimon son casi tan raros como los humanos, puede que incluso mas… -suspiré; las palabras que me había dicho BlackRenamon sobre los problemas tampoco logré entenderlas bien, pero ya era algo de lo cual debía acostumbrarme, como había dicho antes… ella era un verdadero enigma, y que diga cosas que pueden incluso afectar en mi futuro seguramente deben ser algo de lo cual debe estar preocupada. Sin contestarle, pase por un lado de ella y recogí algunas semillas de las enredaderas que antes había mencionado, y mirando hacia la pared le di un puñetazo con todas mis fuerzas que incluso hizo temblar un poco la cueva, pero a cambio al primer golpe mi mano sangro un poco- Je… había olvidado esta sensación… -no sé que es lo que me ha estado pasando, pero me estoy poniendo a pensar… que no hace mucho comencé a cambiar mi forma de pensar y de vida, quería hacerme mas madura para evitar meterme en muchos problemas en la calle; me autodiscipliné para pasar desapercibida y que la policía dejase de buscarme, pero…- Esa no soy yo… -¿Por qué me estoy poniendo a pensar en esto ahora? Por la sangre que en estos momentos corre por entre mi puño; antes siempre solía tener este tipo de heridas, incluso peores, pues siempre ejercía el poder de mi cuerpo al máximo, corría por horas, en cualquier tipo de temperatura, no me pensaba las cosas y las hacía con el simple pretexto de ‘’Porque yo quiero’’ Esa… esa era la vida que realmente disfrutaba, pero por algo… algo que no logro recordar bien… me comencé a autodisciplinar para dejar esa clase de vida y optar por una vida tranquila- ¿Pero que es una vida tranquila…? -No es algo de mi estilo, la tranquilidad me aburre… ¿Por qué tan de repente he comenzado a hacer algo que no es parte de mí- Siempre limitando a las personas que quieren divertirse a mi lado, como Dracmon, creo que… debería ser mas consecuente y dejar de prohibirle tantas co… -mi atención se volvió hacia mi compañero, quien se encontraba acariciando detenidamente el puño herido de BlackRenamon, como si el puño fuese un lindo gatito al que dan esas increíbles ganas de tomar entre brazos y acariciar- ..¿¡Que estás haciendo!? –Exclamé bastante furiosa y confundida, mientras mi compañero yacía con la mirada perdida- Está herida, no puedo dejar que la luz de mis ojos sufra… -¡No de nuevo, Drac no puede estar diciendo esas cursilerías!...- Tsk… -cubrí mi herida y caminé de nuevo hacia la mesa de piedra, la cual tenía un pedazo de tela blanca como adorno, y sin siquiera pensarlo la recorté y la use como vendaje- Necesito paciencia, solo un poco más, este extraño comportamiento de Dracmon… ¡Acabara pronto…! –me repetía una y otra vez, para mantenerme en calma.
Bueno, por suerte, BlackRenamon no se encontraba indispuesta a darle ‘’la razón’’ a Dracmon, así que supongo que hasta que se cure del veneno estará a salvo de cualquier agresión física perteneciente a BlackRenamon o inclusive yo, tsk… suertudo, uno aquí preocupándose por una misión que fui envuelta por la culpa de el quien se le ocurrió morder un cactus venenoso y ahora me ha dejado sola, excelente, muchas gracias compañero- Yo tambien quisiera que lo conocieras –reí en mis adentros- Me pregunto como es que se llevaran… -seguramente BlackRenamon se vería colmada la paciencia con Dracmon y sufriría todo lo que ahora nosotros sufrimos por el, se lo tendría muy bien merecido por andar de tragaldabas.
Nuestra atención, o mas bien… solo la de BlackRenamon y la mía, se dirigió hacia donde se encontraba Palmon quien acababa de llegar con una especie de pequeño frasco entre sus manos… ¿O eran raíces? Bah, no estaba segura, pero realmente no importaba demasiado eso. Al parecer si éramos suertudos tal como dijo ella, pues esa planta es extremadamente difícil de conseguir- Que genial, al menos la suerte nos sonríe una vez –en mi rostro se dibujó una leve sonrisa de lado, ya quería que mi compañero volviese a la normalidad, no lo soportaba así… ¡El no era el Drac a quien me dispuse a aguantar por todos estos meses! Yo no quiero a este Dracmon, y haré lo que sea por devolver a mi compañero a la normalidad- Entendido –fue lo que respondí ante su pregunta, realmente no me importaba eso, con un simple sorbo de ese extracto era suficiente para tener a nuestro amigo devuelta, así que es lo único que me importara hasta el momento.
- ¿Cómo? ¿Entonces no lo conoces? Jejeje… llegué a pensar que ya llevaban mucho tiempo juntos, y que ambos eran algo así como… ‘’novios’’ –la Palmon comenzó a reírse ante esto, la verdad es que no logré escuchar bien lo que quiso decir, pero BlackRenamon no reaccionó muy bien que digamos… puesto que su ceño se había fruncido notoriamente, incluso le habló con seriedad a la Palmon que con tanta amabilidad nos estaba ofreciendo una planta que probablemente tardó años en sacar, yo en realidad estoy agradecida con ella.
Al final todo pareció ser una broma de ella, no quería ofenderla ni a ella ni a Dracmon quien seguía abobado como nunca… puesto que ya no se podía sostener de pie, estaba recostado en el suelo, los ojos de sus manos brillaban con intensidad como si estuviese soñando despierto, y se encontraba riendo tímidamente- Vamos compañero, resiste, volverás a ser tu mismo pronto… -dije en mis adentros, pues jamás me atrevería a decir algo así frente a otras personas… sería tan humillante- Da igual el sabor, el fue capaz de morder un cactus, seguro no le interesa eso –lo que dije era cierto, Dracmon era capaz de llevarse cualquier cosa a la boca con tal de alimentarse, era un verdadero tragón. Palmon se sintió aliviada con esto y me quiso entregar el antídoto, yo observaba el frasco con cierta ilusión, pero no pude sentirlo en mis manos… puesto que en un abrir y cerrar de ojos el frasco ya no estaba en las manos de la herbolaria- …¿Qué? –miré hacia el suelo, pero no estaba ahí, miré hacia Palmon y BlackRenamon pero ambas tampoco sabían en donde había quedado ese dichoso frasco.
Mi mirada pasó hacia donde resonó una molesta risa con un tono salvaje y burlón, mis ojos se llenaron de ira al momento en que vi como una especie de chango verdoso con apariencia de cavernícola tenía el frasco en sus manos con una sonrisa maniaca que demostraba su naturaleza traviesa pero a un tono mas negro, en otras palabras, sus bromas serían capaces de matar sin remordimiento alguno; a su lado se encontraba una especie de vegetal con largas cepas de manos, era realmente fea, ni el tampoco se veía nada lindo; probablemente ellos eran…- ¿Serán los digimon fugitivos que estamos buscando? –si es así, sería muy extraño… no parecen ser muy fuertes, no creo que sean ellos los que he estado buscando. En cambio, extrañamente, BlackRenamon comenzó a comportarse de una forma que jamás me hubiese imaginado de su parte, puesto que las garras de sus manos se habían afilado tal cual gato que las enseña para mostrarle a su enemigo su agresión; sus ojos ya no mostraban ni una pizca de esa calma que la característicaba, estaba furiosa, no había duda alguna… pero estaba furiosa a un punto inimaginable. Para empeorar las cosas, el chango comenzó a insultarla a pesar de lo furiosa que la chica zorro se encontraba, todo por que… el era quien le había robado sus preciadas vendas- Santo cielo… Por favor, no hagan tonterías, esa planta es muy… muy delicada –dijo Palmon, mostrando su naturaleza tímida ante estas situaciones agresivas, yo formaba mis puños como si estuviese dispuesta a entrar a la batalla si se me permitía; pero mi compañero ahora se encontraba completamente incapacitado, no estaba segura si fuese capaz de pelear- Demonios… ¿Por qué en un momento así…? ¿¡Porque ahora!? ¡¡Estabamos tan cerca…!! –mis ojos se llenaron de ira, y mi digivice resplandecía con obvia notoriedad por esto, pero Dracmon parecía estar rechazando mis emociones que eran transmitidos por el digivice, quizá el trance amoroso le impedía pensar en otra cosa mas que BlackRenamon- Ojala nunca me enamore –dije en mis adentros, pensando que el amor se trataría de ese tipo de tonterías obsesivas.
Señalé con mi dispositivo hacia el chango y su acompañante, recibiendo de inmediato la información de ambos digimon:
- Como lo pensé, no son muy fuertes, pero… -dirigí mi mirada hacia ellos- ¿Qué podremos hacer?... Dracmon esta incapacitado en estos momentos, ni siquiera logra salir de su trance por cuantos sentimientos sean transmitidos a el con el poder del digivice; y puedo notar como tiembla Palmon desde esta posición, ella no pelea, es pacifista sin duda alguna… en cambio BlackRenamon… -posé mi mirada en ella, que apenas se había logrado controlar hasta el momento, pero en cuestión de segundos se lanzó contra el Monmon cegada por la ira- ¡Graaaah…! –había formado un puño, el puño que ahora yacía herido, pero ni siquiera llegó a tocar a Monmon, puesto que en cuanto estuvo lo suficientemente cerca de el…- ¡Dead Weed! –la Weedmon que protegía a ese taimado chango apareció de la nada, y con los látigos que usaba de manos golpeó fuertemente a BlackRenamon, impidiéndole avanzar más- Tu... no te metas –con sus manos, y sus garras que incluso se notaban mas grandes que antes, tomó uno de los brazos-cepas de Weedmon y la jaló hacia ella mientras la recibía con un rodillazo y después propinándole un codazo que la lanzó hacia el suelo- Ahora mismo me siento muy molesta… y sé que no me dejarás acabar con Monmon a gusto, así que me desharé primero de las molestias… -dicho esto dio un giro en el aire y acabó con una patada que fue directo hacia la espalda central del digimon, la cual gritó de dolor- Es increíble… ahora se ve mas decidida que nunca, ni siquiera parece que está herida… -dije en mis adentros, notando que Dracmon se levantaba y comenzaba a animar a BlackRenamon como si siempre hubiese prestado atención a la batalla, pero ella lo ignoraba… puesto que ahora su mente estaba enfocada en una sola cosa, y se notaba en sus ojos- Tu, ¿No vas a hacer nada? –le pregunté a Monmon, quien solo se limitaba a observar con una leve sonrisa en su rostro- Ahora mismo, BlackRenamon tiene la suficiente determinación para matar a quien ha intervenido en una batalla completamente ajena a ella con solo el objetivo de salvarte… y tu… -apreté mis puños con fuerza, el se rió- ¡Esa Weedmon…! Es débil, ella se ofreció a ser mi guardaespaldas, pero incluso yo siendo de menor nivel… puedo acabar con esa zorra de un ataque –sacó su resortera, y comenzó a generar una esfera de energía gigante de ésta- ¡Y lo probaré con este tiro…! ¡¡Baby Sling!! –al gritar esto, disparó la esfera que se había formado hacia las espaldas de BlackRenamon- ¡Cuidado…! –le advertí, pero mas me tardé yo en avisarle que ella en dar un salto lo suficientemente veloz como para evitar el ataque del Monmon, y que este resultara dándole de lleno a su antigua guardaespaldas… que comenzó a desaparecer en millones de datos...
Mi discusión interna se vio brutalmente interrumpida al momento de escuchar como si algo estuviese siendo golpeando, una superficie dura como la roca, de inmediato apareció en mi mente una imagen de BlackRenamon golpeando con su puño la pared maciza de tierra que había en la caverna por culpa de todos los malos pesares que había vivido o sufrido, me sentí mal ante dicho recuerdo, pero cuando volteé a verla directamente me di cuenta de que en su rostro no se dibujaba ese profundo pesar que antes tenía cuando hacía casi lo mismo en el escondite que habíamos encontrado para hospedarla por unos momentos- …¿Te sientes bien? –ella ignoro mi pregunta, haciendo lo mismo un par de veces más, por lo que veía entre una combinación de sorprendida y asustada como incluso su mano comenzaba a sangrar- … ¡Ugh…! ¿¡Pero que demonios haces!? –realmente estaba loca, ¿¡Que estará pasando por su cabeza!? Grrr… de nuevo preocupándome, como odio esta situación, tengo ganas de golpear a alguien.
Al parecer, la razón por lo que hacía esa tremenda estupidez, era para darle un agradecimiento a Palmon con la intención de plantar algunas semillas que las demás flores por los alrededores habían brotado con la intención de que alguien lograse reproducir más de su especie- Pero… ¿Por qué de esa manera…? –normalmente no me preocuparía, ella es dura y resistente, pero ahora se encontraba en malas condiciones… no era momento para hacerse la fuerte- Realmente no los entiendo, los digimon son casi tan raros como los humanos, puede que incluso mas… -suspiré; las palabras que me había dicho BlackRenamon sobre los problemas tampoco logré entenderlas bien, pero ya era algo de lo cual debía acostumbrarme, como había dicho antes… ella era un verdadero enigma, y que diga cosas que pueden incluso afectar en mi futuro seguramente deben ser algo de lo cual debe estar preocupada. Sin contestarle, pase por un lado de ella y recogí algunas semillas de las enredaderas que antes había mencionado, y mirando hacia la pared le di un puñetazo con todas mis fuerzas que incluso hizo temblar un poco la cueva, pero a cambio al primer golpe mi mano sangro un poco- Je… había olvidado esta sensación… -no sé que es lo que me ha estado pasando, pero me estoy poniendo a pensar… que no hace mucho comencé a cambiar mi forma de pensar y de vida, quería hacerme mas madura para evitar meterme en muchos problemas en la calle; me autodiscipliné para pasar desapercibida y que la policía dejase de buscarme, pero…- Esa no soy yo… -¿Por qué me estoy poniendo a pensar en esto ahora? Por la sangre que en estos momentos corre por entre mi puño; antes siempre solía tener este tipo de heridas, incluso peores, pues siempre ejercía el poder de mi cuerpo al máximo, corría por horas, en cualquier tipo de temperatura, no me pensaba las cosas y las hacía con el simple pretexto de ‘’Porque yo quiero’’ Esa… esa era la vida que realmente disfrutaba, pero por algo… algo que no logro recordar bien… me comencé a autodisciplinar para dejar esa clase de vida y optar por una vida tranquila- ¿Pero que es una vida tranquila…? -No es algo de mi estilo, la tranquilidad me aburre… ¿Por qué tan de repente he comenzado a hacer algo que no es parte de mí- Siempre limitando a las personas que quieren divertirse a mi lado, como Dracmon, creo que… debería ser mas consecuente y dejar de prohibirle tantas co… -mi atención se volvió hacia mi compañero, quien se encontraba acariciando detenidamente el puño herido de BlackRenamon, como si el puño fuese un lindo gatito al que dan esas increíbles ganas de tomar entre brazos y acariciar- ..¿¡Que estás haciendo!? –Exclamé bastante furiosa y confundida, mientras mi compañero yacía con la mirada perdida- Está herida, no puedo dejar que la luz de mis ojos sufra… -¡No de nuevo, Drac no puede estar diciendo esas cursilerías!...- Tsk… -cubrí mi herida y caminé de nuevo hacia la mesa de piedra, la cual tenía un pedazo de tela blanca como adorno, y sin siquiera pensarlo la recorté y la use como vendaje- Necesito paciencia, solo un poco más, este extraño comportamiento de Dracmon… ¡Acabara pronto…! –me repetía una y otra vez, para mantenerme en calma.
Bueno, por suerte, BlackRenamon no se encontraba indispuesta a darle ‘’la razón’’ a Dracmon, así que supongo que hasta que se cure del veneno estará a salvo de cualquier agresión física perteneciente a BlackRenamon o inclusive yo, tsk… suertudo, uno aquí preocupándose por una misión que fui envuelta por la culpa de el quien se le ocurrió morder un cactus venenoso y ahora me ha dejado sola, excelente, muchas gracias compañero- Yo tambien quisiera que lo conocieras –reí en mis adentros- Me pregunto como es que se llevaran… -seguramente BlackRenamon se vería colmada la paciencia con Dracmon y sufriría todo lo que ahora nosotros sufrimos por el, se lo tendría muy bien merecido por andar de tragaldabas.
Nuestra atención, o mas bien… solo la de BlackRenamon y la mía, se dirigió hacia donde se encontraba Palmon quien acababa de llegar con una especie de pequeño frasco entre sus manos… ¿O eran raíces? Bah, no estaba segura, pero realmente no importaba demasiado eso. Al parecer si éramos suertudos tal como dijo ella, pues esa planta es extremadamente difícil de conseguir- Que genial, al menos la suerte nos sonríe una vez –en mi rostro se dibujó una leve sonrisa de lado, ya quería que mi compañero volviese a la normalidad, no lo soportaba así… ¡El no era el Drac a quien me dispuse a aguantar por todos estos meses! Yo no quiero a este Dracmon, y haré lo que sea por devolver a mi compañero a la normalidad- Entendido –fue lo que respondí ante su pregunta, realmente no me importaba eso, con un simple sorbo de ese extracto era suficiente para tener a nuestro amigo devuelta, así que es lo único que me importara hasta el momento.
- ¿Cómo? ¿Entonces no lo conoces? Jejeje… llegué a pensar que ya llevaban mucho tiempo juntos, y que ambos eran algo así como… ‘’novios’’ –la Palmon comenzó a reírse ante esto, la verdad es que no logré escuchar bien lo que quiso decir, pero BlackRenamon no reaccionó muy bien que digamos… puesto que su ceño se había fruncido notoriamente, incluso le habló con seriedad a la Palmon que con tanta amabilidad nos estaba ofreciendo una planta que probablemente tardó años en sacar, yo en realidad estoy agradecida con ella.
Al final todo pareció ser una broma de ella, no quería ofenderla ni a ella ni a Dracmon quien seguía abobado como nunca… puesto que ya no se podía sostener de pie, estaba recostado en el suelo, los ojos de sus manos brillaban con intensidad como si estuviese soñando despierto, y se encontraba riendo tímidamente- Vamos compañero, resiste, volverás a ser tu mismo pronto… -dije en mis adentros, pues jamás me atrevería a decir algo así frente a otras personas… sería tan humillante- Da igual el sabor, el fue capaz de morder un cactus, seguro no le interesa eso –lo que dije era cierto, Dracmon era capaz de llevarse cualquier cosa a la boca con tal de alimentarse, era un verdadero tragón. Palmon se sintió aliviada con esto y me quiso entregar el antídoto, yo observaba el frasco con cierta ilusión, pero no pude sentirlo en mis manos… puesto que en un abrir y cerrar de ojos el frasco ya no estaba en las manos de la herbolaria- …¿Qué? –miré hacia el suelo, pero no estaba ahí, miré hacia Palmon y BlackRenamon pero ambas tampoco sabían en donde había quedado ese dichoso frasco.
Mi mirada pasó hacia donde resonó una molesta risa con un tono salvaje y burlón, mis ojos se llenaron de ira al momento en que vi como una especie de chango verdoso con apariencia de cavernícola tenía el frasco en sus manos con una sonrisa maniaca que demostraba su naturaleza traviesa pero a un tono mas negro, en otras palabras, sus bromas serían capaces de matar sin remordimiento alguno; a su lado se encontraba una especie de vegetal con largas cepas de manos, era realmente fea, ni el tampoco se veía nada lindo; probablemente ellos eran…- ¿Serán los digimon fugitivos que estamos buscando? –si es así, sería muy extraño… no parecen ser muy fuertes, no creo que sean ellos los que he estado buscando. En cambio, extrañamente, BlackRenamon comenzó a comportarse de una forma que jamás me hubiese imaginado de su parte, puesto que las garras de sus manos se habían afilado tal cual gato que las enseña para mostrarle a su enemigo su agresión; sus ojos ya no mostraban ni una pizca de esa calma que la característicaba, estaba furiosa, no había duda alguna… pero estaba furiosa a un punto inimaginable. Para empeorar las cosas, el chango comenzó a insultarla a pesar de lo furiosa que la chica zorro se encontraba, todo por que… el era quien le había robado sus preciadas vendas- Santo cielo… Por favor, no hagan tonterías, esa planta es muy… muy delicada –dijo Palmon, mostrando su naturaleza tímida ante estas situaciones agresivas, yo formaba mis puños como si estuviese dispuesta a entrar a la batalla si se me permitía; pero mi compañero ahora se encontraba completamente incapacitado, no estaba segura si fuese capaz de pelear- Demonios… ¿Por qué en un momento así…? ¿¡Porque ahora!? ¡¡Estabamos tan cerca…!! –mis ojos se llenaron de ira, y mi digivice resplandecía con obvia notoriedad por esto, pero Dracmon parecía estar rechazando mis emociones que eran transmitidos por el digivice, quizá el trance amoroso le impedía pensar en otra cosa mas que BlackRenamon- Ojala nunca me enamore –dije en mis adentros, pensando que el amor se trataría de ese tipo de tonterías obsesivas.
Señalé con mi dispositivo hacia el chango y su acompañante, recibiendo de inmediato la información de ambos digimon:
- DigiDex:
Nombre: Monmon
Nivel: Infante
Tipos: Virus
Monmon es un Digimon tipo Bestia que tomó la forma de un chimpancé. Este guerrero joven y fuerte tiene la confianza suficiente como para golpear con precisión su objetivo sin perder con sus bolas de pachinko. Es rápido, pero debido a su descuido, tiene que disminuir en los árboles. Su ropa andrajosa y sus rayas blancas en la punta de la cola torcida son dos de sus características. Su ataque especial es el Baby Sling, con el cual lanza sus infalibles bolas de pachinko ya sea una enorme esfera de energía, o miles de estas en rafaga con su infalible resortera que lleva siempre a la espalda y es más de la mitad de grande que él.
- DigiDex:
Nombre: Weedmon
Nivel: Adulto
Tipo: Virus
Weedmon es un Digimon Tipo Planta de Nivel Adulto, su forma es la de una planta atrapa insectos que es igual a Vegiemon excepto que es de color verde con un tocado de hierbas en su cabeza y espalda. Su nombre weed, en inglés, significa mala hierba. Su ataque especial es el Dead Weed, con el cual suele golpear incontables veces a su oponente con las cepas en sus brazos, las cuales usa como un par de látigos.
- Como lo pensé, no son muy fuertes, pero… -dirigí mi mirada hacia ellos- ¿Qué podremos hacer?... Dracmon esta incapacitado en estos momentos, ni siquiera logra salir de su trance por cuantos sentimientos sean transmitidos a el con el poder del digivice; y puedo notar como tiembla Palmon desde esta posición, ella no pelea, es pacifista sin duda alguna… en cambio BlackRenamon… -posé mi mirada en ella, que apenas se había logrado controlar hasta el momento, pero en cuestión de segundos se lanzó contra el Monmon cegada por la ira- ¡Graaaah…! –había formado un puño, el puño que ahora yacía herido, pero ni siquiera llegó a tocar a Monmon, puesto que en cuanto estuvo lo suficientemente cerca de el…- ¡Dead Weed! –la Weedmon que protegía a ese taimado chango apareció de la nada, y con los látigos que usaba de manos golpeó fuertemente a BlackRenamon, impidiéndole avanzar más- Tu... no te metas –con sus manos, y sus garras que incluso se notaban mas grandes que antes, tomó uno de los brazos-cepas de Weedmon y la jaló hacia ella mientras la recibía con un rodillazo y después propinándole un codazo que la lanzó hacia el suelo- Ahora mismo me siento muy molesta… y sé que no me dejarás acabar con Monmon a gusto, así que me desharé primero de las molestias… -dicho esto dio un giro en el aire y acabó con una patada que fue directo hacia la espalda central del digimon, la cual gritó de dolor- Es increíble… ahora se ve mas decidida que nunca, ni siquiera parece que está herida… -dije en mis adentros, notando que Dracmon se levantaba y comenzaba a animar a BlackRenamon como si siempre hubiese prestado atención a la batalla, pero ella lo ignoraba… puesto que ahora su mente estaba enfocada en una sola cosa, y se notaba en sus ojos- Tu, ¿No vas a hacer nada? –le pregunté a Monmon, quien solo se limitaba a observar con una leve sonrisa en su rostro- Ahora mismo, BlackRenamon tiene la suficiente determinación para matar a quien ha intervenido en una batalla completamente ajena a ella con solo el objetivo de salvarte… y tu… -apreté mis puños con fuerza, el se rió- ¡Esa Weedmon…! Es débil, ella se ofreció a ser mi guardaespaldas, pero incluso yo siendo de menor nivel… puedo acabar con esa zorra de un ataque –sacó su resortera, y comenzó a generar una esfera de energía gigante de ésta- ¡Y lo probaré con este tiro…! ¡¡Baby Sling!! –al gritar esto, disparó la esfera que se había formado hacia las espaldas de BlackRenamon- ¡Cuidado…! –le advertí, pero mas me tardé yo en avisarle que ella en dar un salto lo suficientemente veloz como para evitar el ataque del Monmon, y que este resultara dándole de lleno a su antigua guardaespaldas… que comenzó a desaparecer en millones de datos...
- Tamer & Digimon
- Prueba de Rol :ADigi Puntos :354Cuentas :Ficha :Cronologia :NPCs :Nivel On Rol :MegaNivel On Rol de los Digi Aliados :UltimateIcono :Rango y Unidad :Haruka Aizawa
Rango: Holy Knight
Unidad: Dragon Spirit
Dracmon
Rango: Holy Knight
Unidad: Dragon SpiritRango y Unidad Digi Aliado :Gaomon
Rango: Knight
Unidad: Dragon SpiritInventario :
Haruka Aizawa
Re: Domando a las Bestias [Misión]
Al ver a BlackRenamon usar el ataque de Monmon contra Weedmon, te sorprendiste, era notorio que BlackRenamon era una digimon rápida, astuta y que se podía mantener totalmente centrada en una batalla sin muchos problemas, prácticamente había ignorado todos los cantos y porras de Dracmon en toda la batalla, y no había necesitado usar ninguna de sus técnicas para pelear, solo requirió de sus puños y piernas para arreglárselas sin problemas para eliminar a una de los dos digimons.
Al ver eso, notaste que Monmon estaba temblando, tal vez sabía que su vida estaría en peligro, después de todo, había insultado repetidas veces a BlackRenamon y también tenía sus vendajes en los brazos y el antídoto en las manos, pero lo que sello el pánico para el digimon mono, fue ver como BlackRenamon se dio vuelta para verlo a los ojos, y son solo abrir los ojos un poco, logro que Monmon gritara aterrado y dejara en el suelo con cuidado y los vendajes mientras huía por su vida, que seguramente pronto seria destruida por BlackRenamon que seguramente estaba por desaparecer y destruirlo, aunque, no lo hiso. Al contrario de todo lo que esperabas, BlackRenamon se acerco a los objetos abandonados y los recogió, algo extraño, realmente esperabas que desapareciera para regresar con la noticia de que Monmon dejaría de molestar o algo así.
Cuando viste a la digimon lupina recoger los objetos, notaste como se acercaba y te entregaba el antídoto, seguramente esperaba que tu se lo dieras a tu compañero, y eso estabas dispuesta a hacer sin dudarlo ni un solo y mísero segundo, aunque antes de hacerlo, la viste apartarse y después escuchaste su voz, parecía sonar algo más seria que de costumbre, pero también en un tono más delicado, tal vez era porque estaba feliz, después de todo tenía sus vendajes de nuevo consigo.
Dale el antídoto… quiero conocerlo rápido… además lo necesitaremos para enfrentarnos a esos fugitivos que buscas Kuro… por que a partir de ahora… -te observo de perfil y lanzo una sonrisa de confianza- me tienes completamente de tu lado, no dejare que ese mono bastardo siga con vida… ni sus jefes que seguramente le ordenaron robar mis vendajes
Jeje… eres una chica algo extraña pero de buen corazón… no importa que tanto digan todos que seas un error… eres como una Renamon normal pero con un toque más oscuro –dijo Palmon sonriendo algo nerviosa porque había dejado unas grietas muy grandes la pelea que tubo BlackRenamon contra Weedmon- hay dios… por favor no destruyas mas mi casa… en serio… vine aquí para ayudar a los viajeros y para vivir más tranquila…
Al escuchar eso reíste en tus adentros, era algo gracioso ver el nerviosismo de Palmon ante la tranquilidad y elegancia que mantenía BlackRenamon después de una pelea. Aunque lo que más te impresionaba quitando todas las bromas, era como las heridas que tenia BlackRenamon sanaron en unos segundos con lo gruñir de rabia y enfurecer, era como si ese sentimiento la hubiera “recargado” de energía, la suficiente para pelear contra otro Greymon, incluso un MetalGreymon y poder ganarle sin problemas, aunque era mejor no averiguar eso, porque si no podía, terminarías quedándote sin una valiosa aliada.
Luego de darle el antídoto a Dracmon, este reacciono completamente ante el amargo sabor del antídoto, y lo más gracioso fue lo siguiente que hiso Dracmon al haber regresado a su molesta pero buena normalidad. Lo que hiso al sentir el sabor del antídoto fue rasparse la lengua con sus manos intentando quitarse el sabor, después de eso paso la lengua por la tierra desesperado por quitarse el amargo sabor del antídoto. Estabas confundida, ¿tan amargo podía saber?, para confirmarlo, la última gota que quedaba decidiste beberla, y al hacerlo, pudiste sentir el peor sabor de toda tu vida, era algo realmente asqueroso y amargo, demasiado, era menos amargo chupar un limón con sal.
Luego de un momento, te diste vuelta y viste a Dracmon, quien realmente estaba de nuevo en este mundo, pero se quedo observando a BlackRenamon un segundo, ella se colocaba sus vendajes, el primero iba en su pecho, tuvo que levantar su melena para poder pasar la vieja venda y poder ajustar el nudo en su espalda. El segundo se lo puso en el hombro izquierdo, para ponérselo tubo que quitarse el guante y entonces ajusto el nudo y volvió a colocarse el guantes. Por un momento creíste que Dracmon estaba aun bajo los efectos del veneno, pero antes de que pudieras darle un golpe para despertarlo, viste como se acercaba algo nervioso a la digimon lupina que lo observo confundida unos segundos, pero después descubrió que ya estaba curado del veneno “amoroso” que tenia con anterioridad.
Je… ¿con que tu eres el Dracmon?... ¿o quieres que te llame Drac? –Pregunto gentilmente BlackRenamon estrechándole la mano- yo soy BlackRenamon… aunque mi maestro suele decirme BR… creo que debí decirte ese apodo antes Kuro –al decir eso, “BR”, soltó una pequeña y leve risa y después se levanto y observo a Dracmon atentamente- bueno… disculpen que quiera asumir el cargo de líder aquí pero… tenemos que buscar a ese mono revoltoso… -se crujió los nudillos- le enseñare a no meterse conmigo… por que en verdad soy alguien de temer cuando se enoja… y lo mejor de todo… es que casi nadie puede ver mi enojo
Al decir eso, escuchaste un mini balbuceo de Dracmon, afortunadamente no eran uno de esos balbuceos largos y molestos, para tu fortuna eran los molestos e insoportables balbuceos de Dracmon, el Dracmon de siempre, el que no decía tonterías solo por ver a BlackRenamon, aunque desde el punto de vista lógico, parecía que había cambiado pero no totalmente, ¿será que se necesitaba más antídoto?, esa era la pregunta que te formulaste en unos momentos, pero luego simplemente decidiste ignorarlo, tal vez solo era tu imaginación afectada por decir tantas cosas que no te gustan y el solo hecho de ver a tu compañero en ese estado.
Tras escuchar a BlackRenamon antes, comenzaste a seguirla junto con Dracmon, quien te alegraba ver cuerdo y no loco de “amor”, en fin, los dos seguían a la digimon lupina que seguía con atención las huellas de Monmon, las cuales había dejado al escapar para salvar su vida del ataque de BlackRenamon, aunque aun estaba por verse si lo encontrarían de nuevo, tal vez sus jefes ya lo estarían torturando por dejar esas huellas.
Al ver eso, notaste que Monmon estaba temblando, tal vez sabía que su vida estaría en peligro, después de todo, había insultado repetidas veces a BlackRenamon y también tenía sus vendajes en los brazos y el antídoto en las manos, pero lo que sello el pánico para el digimon mono, fue ver como BlackRenamon se dio vuelta para verlo a los ojos, y son solo abrir los ojos un poco, logro que Monmon gritara aterrado y dejara en el suelo con cuidado y los vendajes mientras huía por su vida, que seguramente pronto seria destruida por BlackRenamon que seguramente estaba por desaparecer y destruirlo, aunque, no lo hiso. Al contrario de todo lo que esperabas, BlackRenamon se acerco a los objetos abandonados y los recogió, algo extraño, realmente esperabas que desapareciera para regresar con la noticia de que Monmon dejaría de molestar o algo así.
Cuando viste a la digimon lupina recoger los objetos, notaste como se acercaba y te entregaba el antídoto, seguramente esperaba que tu se lo dieras a tu compañero, y eso estabas dispuesta a hacer sin dudarlo ni un solo y mísero segundo, aunque antes de hacerlo, la viste apartarse y después escuchaste su voz, parecía sonar algo más seria que de costumbre, pero también en un tono más delicado, tal vez era porque estaba feliz, después de todo tenía sus vendajes de nuevo consigo.
Dale el antídoto… quiero conocerlo rápido… además lo necesitaremos para enfrentarnos a esos fugitivos que buscas Kuro… por que a partir de ahora… -te observo de perfil y lanzo una sonrisa de confianza- me tienes completamente de tu lado, no dejare que ese mono bastardo siga con vida… ni sus jefes que seguramente le ordenaron robar mis vendajes
Jeje… eres una chica algo extraña pero de buen corazón… no importa que tanto digan todos que seas un error… eres como una Renamon normal pero con un toque más oscuro –dijo Palmon sonriendo algo nerviosa porque había dejado unas grietas muy grandes la pelea que tubo BlackRenamon contra Weedmon- hay dios… por favor no destruyas mas mi casa… en serio… vine aquí para ayudar a los viajeros y para vivir más tranquila…
Al escuchar eso reíste en tus adentros, era algo gracioso ver el nerviosismo de Palmon ante la tranquilidad y elegancia que mantenía BlackRenamon después de una pelea. Aunque lo que más te impresionaba quitando todas las bromas, era como las heridas que tenia BlackRenamon sanaron en unos segundos con lo gruñir de rabia y enfurecer, era como si ese sentimiento la hubiera “recargado” de energía, la suficiente para pelear contra otro Greymon, incluso un MetalGreymon y poder ganarle sin problemas, aunque era mejor no averiguar eso, porque si no podía, terminarías quedándote sin una valiosa aliada.
Luego de darle el antídoto a Dracmon, este reacciono completamente ante el amargo sabor del antídoto, y lo más gracioso fue lo siguiente que hiso Dracmon al haber regresado a su molesta pero buena normalidad. Lo que hiso al sentir el sabor del antídoto fue rasparse la lengua con sus manos intentando quitarse el sabor, después de eso paso la lengua por la tierra desesperado por quitarse el amargo sabor del antídoto. Estabas confundida, ¿tan amargo podía saber?, para confirmarlo, la última gota que quedaba decidiste beberla, y al hacerlo, pudiste sentir el peor sabor de toda tu vida, era algo realmente asqueroso y amargo, demasiado, era menos amargo chupar un limón con sal.
Luego de un momento, te diste vuelta y viste a Dracmon, quien realmente estaba de nuevo en este mundo, pero se quedo observando a BlackRenamon un segundo, ella se colocaba sus vendajes, el primero iba en su pecho, tuvo que levantar su melena para poder pasar la vieja venda y poder ajustar el nudo en su espalda. El segundo se lo puso en el hombro izquierdo, para ponérselo tubo que quitarse el guante y entonces ajusto el nudo y volvió a colocarse el guantes. Por un momento creíste que Dracmon estaba aun bajo los efectos del veneno, pero antes de que pudieras darle un golpe para despertarlo, viste como se acercaba algo nervioso a la digimon lupina que lo observo confundida unos segundos, pero después descubrió que ya estaba curado del veneno “amoroso” que tenia con anterioridad.
Je… ¿con que tu eres el Dracmon?... ¿o quieres que te llame Drac? –Pregunto gentilmente BlackRenamon estrechándole la mano- yo soy BlackRenamon… aunque mi maestro suele decirme BR… creo que debí decirte ese apodo antes Kuro –al decir eso, “BR”, soltó una pequeña y leve risa y después se levanto y observo a Dracmon atentamente- bueno… disculpen que quiera asumir el cargo de líder aquí pero… tenemos que buscar a ese mono revoltoso… -se crujió los nudillos- le enseñare a no meterse conmigo… por que en verdad soy alguien de temer cuando se enoja… y lo mejor de todo… es que casi nadie puede ver mi enojo
Al decir eso, escuchaste un mini balbuceo de Dracmon, afortunadamente no eran uno de esos balbuceos largos y molestos, para tu fortuna eran los molestos e insoportables balbuceos de Dracmon, el Dracmon de siempre, el que no decía tonterías solo por ver a BlackRenamon, aunque desde el punto de vista lógico, parecía que había cambiado pero no totalmente, ¿será que se necesitaba más antídoto?, esa era la pregunta que te formulaste en unos momentos, pero luego simplemente decidiste ignorarlo, tal vez solo era tu imaginación afectada por decir tantas cosas que no te gustan y el solo hecho de ver a tu compañero en ese estado.
Tras escuchar a BlackRenamon antes, comenzaste a seguirla junto con Dracmon, quien te alegraba ver cuerdo y no loco de “amor”, en fin, los dos seguían a la digimon lupina que seguía con atención las huellas de Monmon, las cuales había dejado al escapar para salvar su vida del ataque de BlackRenamon, aunque aun estaba por verse si lo encontrarían de nuevo, tal vez sus jefes ya lo estarían torturando por dejar esas huellas.
- Tamer & Digimon
- Prueba de Rol :ADigi Puntos :707Cuentas :Ficha :Relaciones :Cronologia :NPCs :Nivel On Rol :DNA Evolution (Super Ultimate)Nivel On Rol de los Digi Aliados :Nova: Mega
BR: MegaIcono :Rango y Unidad :Scott Shadowest Musahrahjy
Rango: Hades Knight
División: Hades Titans
Unidad/Sub-division: Titans
Labramon
Rango: Hades Knight
División: Hades Titans
Unidad/Sub-division: TitansRango y Unidad Digi Aliado :Nova (BlackWarGreymon)
Rango: Hades Knight
División: Hades Titans
Unidad/Sub-division: Titans
BR (Renamon)
Rango: Soldado
División: D-Brigade
Unidad/Sub-division: Shadow LizardInventario :
Scott Desaster
Re: Domando a las Bestias [Misión]
No podía creer lo que mis ojos veían, Weedmon había recibido el ataque que Monmon había lanzado con toda intención de darle a BlackRenamon, pero no tomó en cuenta su velocidad y reflejos- Weedmon… -a pesar de que ella no era aliada nuestra, lo que mas me daba esa sensación de tristeza… era la frialdad y estúpidos movimientos que había hecho el Monmon tan descuidadamente- Es un hijo de… -mordí mi labio inferior con intención de calmar todo lo que sentía, volteándole a ver con ira, y observando como temblaba por completo al recibir, mas que nada, la mirada de BlackRenamon… quien por obviedad ahora iría por el. El gritó con terror, y dejó tanto las vendas de BlackRenamon como el antídoto de Palmon en el suelo y huyó sin problema- …No era nada mas que un miedoso… -volteé a ver a BlackRenamon, quien de inmediato volvió a su antigua compostura haciendo un largo suspiro con el cual pareció reprimir por unos instantes toda esa furia interna que, aunque no haya sido su verdader objetivo, se había calmado con la muerte de Weedmon… o al menos eso creía.
Fue hacia donde se encontraban los objetos que habíamos recuperado, y me entregó el antídoto en las manos, no pude evitar mirar con una especie de sentimiento similar a la esperanza y deseo al liquido en frasco que yacía en mis manos- Finalmente… todo volverá a la normalidad –cerré mis ojos y sonreí con serenidad, volteando a ver por unos instantes a mi compañero que al parecer se había quedado dormido, regresé mi mirada hacia la chica zorro al momento en que ella comenzó a hablar… ante esas palabras yo solo sonreí de lado y asentí con mi cabeza- Estoy consciente de eso, iremos por el en cuanto Dracmon vuelva a la normalidad… -apenas me estaba dirigiendo hacia mi compañero riendo levemente por lo que había mencionado Palmon tan nerviosamente a BlackRenamon quien simplemente calló ante esto- Bueno camarada, espero que tengas hambre, porque este trago te quitara todo tipo de hambre que tengas, jeje… -sonreí de lado al murmurarle esto a mi compañero, y le abrí su boca con mi mano, abriendo el frasco y derramando todo ese liquido en su boca.
Ante esto, Dracmon parecía seguir inconsciente, pero llegó un momento en el que comenzó a toser una y otra vez, y de pronto… los ojos de sus manos se abrieron a la par de forma alterada- ¡¡AGH…!! ¿¡QUE PASÓ!? –comenzó a limpiarse la lengua sus manos, y después a lamer lo mas cercano que vio, que pareció ser el suelo- ¿¡Que demonios me diste Kuro!? ¡Esto es lo peor que he probado en mi vida…! –le miré con extrañeza, frunciendo el ceño un poco- Vamos amigos, no creo que sepa tan mal… -vi el frasco, notando que había aun un leve trago de ese liquido espeso y verdoso- …Bueeno… -bebí lo ultimo que quedaba, abriendo los ojos con sorpresa, y en cuestión de segundos tiré el frasco vacío al suelo y me empecé a limpiar la lengua con mis manos- ¡¡Amargo, amargo, amargo…!! –era horrible, creo que duraré años con este espantoso sabor de boca- Ugh… pero este no es momento para estar haciendo estas ridiculeces… -intenté olvidar el terrible sabor que ahora se estaba viviendo dentro de mi boca, y después de pensármelo mucho, interrumpí igual a mi compañero y le di un fuerte abrazo- ……¿¡Que te pasa!? –exclamó alterado. Me comencé a sentir extraña, no me gustaba para nada hacer esto, pero era algo que necesitaba después de tantas preocupaciones que pasé, supongo que me he estado ablandando y no entiendo porque… ugh, ¡Realmente odio estos sentimientos!...- ¡Palmon, algo le pasa a Kuro, creo que la poción que bebió le ha hecho mal! ¡Ayudela por favor! –exclamó mi compañero, yo de inmediato reaccioné y lo solté, brindándole un fuerte golpe en la cara- Si… tambien extrañaba esto –me troné los nudillos, había olvidado que este puño seguía herido, pero no importaba… quería sentir de nuevo la sensación de la cabeza de Drac crujir ante mi puñetazo- Auch… -el se levantó como si nada, quizá ya se había acostumbrado a tantos golpes, pero realmente no lo golpeaba para herirlo… si no porque me sirve mucho para desahogarme, y a el no le parece molestarle- ¡Eso no era necesario!... -…no mucho… heh; aún extrañado por todo lo que pasaba, el volteó a ver indiferentemente hacia la BlackRenamon que se encontraba colocándose sus vendajes, a lo cual se sorprendió un poco- …¿Eh? –no… ¿No seguirá con ese extraño trance, verdad?- Kuro, ¿Qué hace ella aquí? –preguntó extrañado, y aun con esa expresión de sorpresa en su rostro, algo que intentó disimular volteando a verme a mi de inmediato- ¿O sea que no recuerda nada desde que pasó la pelea con Greymon?... –pensé, era un mal punto, yo quería que recordara todas las ridiculeces que había hecho, así podría burlarme de el… ugh… bueno, eso no importa mucho, creo- Ella es BlackRenamon, nos ha estado acompañando desde hace… no mucho –ahora que estaba de acuerdo en que el no sabía nada sobre lo ocurrido, la verdad es que no me gustaría que lo supiese- Pero te has dormido por todo el momento, creo que ese cactus tenía efectos somníferos –ante su expresión sonriente e ingenua como usualmente la solía tener me hizo saber que el había vuelto a ser el de siempre, y solo asintió- Oh, ya veo, eso tiene sentido ¡Jajaja! –si, defintivamente, mi compañero era el de siempre… que… ¿Qué es esta sensación calida que siento?... Me siento feliz, sin duda.
BlackRenamon se acercó hacia nosotros un momento después de haberse colocado sus vendajes, algo que le quedaba muy bien a su aspecto realmente, pero Dracmon no dejaba de mirarla con una expresión de curiosidad de niño pequeño- ¿Ah? ¿Cómo sabes que me llaman Drac? –preguntó por sorpresa, a lo que solo rió como era de costumbre… de esa forma molesta y escandalosa- ¡Llamame como gustes, algún día seré conocido por todo el digimundo como el digimon mas fuerte que puede haber! -¿Sigue con ese sueño egoísta y sin sentido? Bueno, el sigue siendo un niño… o eso creo, ¿Cuántos años tendrá de nacido?- Tranquila, ‘’BR’’, aunque yo seguiré llamándote BlackRenamon, si no es mucha molestia –sonaba bien después del todo, ese nombre agradaba.
Al parecer, por mas seria que pareciera, ella se encontraba aún consciente con el tema que se había vivido hace unos momentos con el Monmon que había escapado, esa actitud suya tambien me agradaba… no pude evitar sonreír de lado ante esto- De acuerdo, puedes contar con nosotros, ¿Verdad, Drac? –lo volteé a ver, el aun se encontraba mirando curiosamente a BlackRenamon, pero al notar mi mirada sobre el reaccionó e hizo una especie de pose de soldado mal hecha, puesto que no se encontraba firme al hacerla- ¡S-Si señor… digo, señora.. digo.. BR! –en cuanto dijo esto, reaccionó con la pose y se puso firme- …¿Habrán quedado secuelas de el veneno?... –me preocupaba eso, temía que Dracmon no volviese a ser el mismo de siempre, a lo cual Palmon me tocó el hombro- Disculpa un momento Kuro, ¿Puedo hablarte un momento? –me guiñó el ojo, alejándose unos pasos de nosotros, a lo cual fui con ella y me acerqué- ¿Qué sucede? –ella se quedó pensante unos momentos- ¿Recuerdas que me habías dicho la forma que tenía ese cactus? Redondo y con fruto rojo –sentí una sensación extraña recorrer todo mi cuerpo, pero me limité a asentir nerviosa- Bueno, ese cactus que me has descrito no es precisamente un ‘’cactus del amor’’ como ustedes creían –lo sabía, sabía que diría algo como eso… fruncí el ceño notoriamente- ¿A..Ah si?... –intenté controlar mi furia, apretando mis puños y sonriendo con muchísima dificultad- ¿Entonces que clase de… cactus es, eh? –Palmon comenzó a notarse nerviosa ante mi expresión semi-maniaca que tenía- E-Ehm…! Bueno… Resulta que ese cactus, una vez inyectado el veneno, hace que el sentimiento mas grande que este sintiendo el afectado al momento en que le veneno se infiltra en su cerebro aumente en cantidades colosales e inimaginables, ya sabes… si mientras el veneno hace efecto y estas enfadado, tu furia será monstruosa, si estas triste… te depremiriras a un punto extremo, y Dracmon… bueno… -volteó a verlo unos instantes. No podía ser… significa que Dracmon estaba realmente… ¿¡Enamorado!?- ………Ese chango INUTIL!! –exclamé con furia, caminando a pasos pesados hacia donde se encontraban Dracmon y BlackRenamon- Vamonos de una vez, quiero terminar esta misión lo mas pronto posible e irme lejos, no se a donde, pero definitivamente no quiero seguir ni un momento mas aquí –era obvio que me encontraba mas molesta que antes, pero no quería desatar esa ira ni en mi digimon ni en BlackRenamon- ¿Te encuentras bien, Kuro? –le miré- ¡Por supuesto que si…! ¿¡Que te hace pensar que no!? –comencé a reír como si toda cordura en mi se hubiese esfumado; odiaba los fraudes, y ese ‘’Shamamon’’ me había hecho un terrible fraude, ahora mismo… ¡Quiero matarlo!
Fue hacia donde se encontraban los objetos que habíamos recuperado, y me entregó el antídoto en las manos, no pude evitar mirar con una especie de sentimiento similar a la esperanza y deseo al liquido en frasco que yacía en mis manos- Finalmente… todo volverá a la normalidad –cerré mis ojos y sonreí con serenidad, volteando a ver por unos instantes a mi compañero que al parecer se había quedado dormido, regresé mi mirada hacia la chica zorro al momento en que ella comenzó a hablar… ante esas palabras yo solo sonreí de lado y asentí con mi cabeza- Estoy consciente de eso, iremos por el en cuanto Dracmon vuelva a la normalidad… -apenas me estaba dirigiendo hacia mi compañero riendo levemente por lo que había mencionado Palmon tan nerviosamente a BlackRenamon quien simplemente calló ante esto- Bueno camarada, espero que tengas hambre, porque este trago te quitara todo tipo de hambre que tengas, jeje… -sonreí de lado al murmurarle esto a mi compañero, y le abrí su boca con mi mano, abriendo el frasco y derramando todo ese liquido en su boca.
Ante esto, Dracmon parecía seguir inconsciente, pero llegó un momento en el que comenzó a toser una y otra vez, y de pronto… los ojos de sus manos se abrieron a la par de forma alterada- ¡¡AGH…!! ¿¡QUE PASÓ!? –comenzó a limpiarse la lengua sus manos, y después a lamer lo mas cercano que vio, que pareció ser el suelo- ¿¡Que demonios me diste Kuro!? ¡Esto es lo peor que he probado en mi vida…! –le miré con extrañeza, frunciendo el ceño un poco- Vamos amigos, no creo que sepa tan mal… -vi el frasco, notando que había aun un leve trago de ese liquido espeso y verdoso- …Bueeno… -bebí lo ultimo que quedaba, abriendo los ojos con sorpresa, y en cuestión de segundos tiré el frasco vacío al suelo y me empecé a limpiar la lengua con mis manos- ¡¡Amargo, amargo, amargo…!! –era horrible, creo que duraré años con este espantoso sabor de boca- Ugh… pero este no es momento para estar haciendo estas ridiculeces… -intenté olvidar el terrible sabor que ahora se estaba viviendo dentro de mi boca, y después de pensármelo mucho, interrumpí igual a mi compañero y le di un fuerte abrazo- ……¿¡Que te pasa!? –exclamó alterado. Me comencé a sentir extraña, no me gustaba para nada hacer esto, pero era algo que necesitaba después de tantas preocupaciones que pasé, supongo que me he estado ablandando y no entiendo porque… ugh, ¡Realmente odio estos sentimientos!...- ¡Palmon, algo le pasa a Kuro, creo que la poción que bebió le ha hecho mal! ¡Ayudela por favor! –exclamó mi compañero, yo de inmediato reaccioné y lo solté, brindándole un fuerte golpe en la cara- Si… tambien extrañaba esto –me troné los nudillos, había olvidado que este puño seguía herido, pero no importaba… quería sentir de nuevo la sensación de la cabeza de Drac crujir ante mi puñetazo- Auch… -el se levantó como si nada, quizá ya se había acostumbrado a tantos golpes, pero realmente no lo golpeaba para herirlo… si no porque me sirve mucho para desahogarme, y a el no le parece molestarle- ¡Eso no era necesario!... -…no mucho… heh; aún extrañado por todo lo que pasaba, el volteó a ver indiferentemente hacia la BlackRenamon que se encontraba colocándose sus vendajes, a lo cual se sorprendió un poco- …¿Eh? –no… ¿No seguirá con ese extraño trance, verdad?- Kuro, ¿Qué hace ella aquí? –preguntó extrañado, y aun con esa expresión de sorpresa en su rostro, algo que intentó disimular volteando a verme a mi de inmediato- ¿O sea que no recuerda nada desde que pasó la pelea con Greymon?... –pensé, era un mal punto, yo quería que recordara todas las ridiculeces que había hecho, así podría burlarme de el… ugh… bueno, eso no importa mucho, creo- Ella es BlackRenamon, nos ha estado acompañando desde hace… no mucho –ahora que estaba de acuerdo en que el no sabía nada sobre lo ocurrido, la verdad es que no me gustaría que lo supiese- Pero te has dormido por todo el momento, creo que ese cactus tenía efectos somníferos –ante su expresión sonriente e ingenua como usualmente la solía tener me hizo saber que el había vuelto a ser el de siempre, y solo asintió- Oh, ya veo, eso tiene sentido ¡Jajaja! –si, defintivamente, mi compañero era el de siempre… que… ¿Qué es esta sensación calida que siento?... Me siento feliz, sin duda.
BlackRenamon se acercó hacia nosotros un momento después de haberse colocado sus vendajes, algo que le quedaba muy bien a su aspecto realmente, pero Dracmon no dejaba de mirarla con una expresión de curiosidad de niño pequeño- ¿Ah? ¿Cómo sabes que me llaman Drac? –preguntó por sorpresa, a lo que solo rió como era de costumbre… de esa forma molesta y escandalosa- ¡Llamame como gustes, algún día seré conocido por todo el digimundo como el digimon mas fuerte que puede haber! -¿Sigue con ese sueño egoísta y sin sentido? Bueno, el sigue siendo un niño… o eso creo, ¿Cuántos años tendrá de nacido?- Tranquila, ‘’BR’’, aunque yo seguiré llamándote BlackRenamon, si no es mucha molestia –sonaba bien después del todo, ese nombre agradaba.
Al parecer, por mas seria que pareciera, ella se encontraba aún consciente con el tema que se había vivido hace unos momentos con el Monmon que había escapado, esa actitud suya tambien me agradaba… no pude evitar sonreír de lado ante esto- De acuerdo, puedes contar con nosotros, ¿Verdad, Drac? –lo volteé a ver, el aun se encontraba mirando curiosamente a BlackRenamon, pero al notar mi mirada sobre el reaccionó e hizo una especie de pose de soldado mal hecha, puesto que no se encontraba firme al hacerla- ¡S-Si señor… digo, señora.. digo.. BR! –en cuanto dijo esto, reaccionó con la pose y se puso firme- …¿Habrán quedado secuelas de el veneno?... –me preocupaba eso, temía que Dracmon no volviese a ser el mismo de siempre, a lo cual Palmon me tocó el hombro- Disculpa un momento Kuro, ¿Puedo hablarte un momento? –me guiñó el ojo, alejándose unos pasos de nosotros, a lo cual fui con ella y me acerqué- ¿Qué sucede? –ella se quedó pensante unos momentos- ¿Recuerdas que me habías dicho la forma que tenía ese cactus? Redondo y con fruto rojo –sentí una sensación extraña recorrer todo mi cuerpo, pero me limité a asentir nerviosa- Bueno, ese cactus que me has descrito no es precisamente un ‘’cactus del amor’’ como ustedes creían –lo sabía, sabía que diría algo como eso… fruncí el ceño notoriamente- ¿A..Ah si?... –intenté controlar mi furia, apretando mis puños y sonriendo con muchísima dificultad- ¿Entonces que clase de… cactus es, eh? –Palmon comenzó a notarse nerviosa ante mi expresión semi-maniaca que tenía- E-Ehm…! Bueno… Resulta que ese cactus, una vez inyectado el veneno, hace que el sentimiento mas grande que este sintiendo el afectado al momento en que le veneno se infiltra en su cerebro aumente en cantidades colosales e inimaginables, ya sabes… si mientras el veneno hace efecto y estas enfadado, tu furia será monstruosa, si estas triste… te depremiriras a un punto extremo, y Dracmon… bueno… -volteó a verlo unos instantes. No podía ser… significa que Dracmon estaba realmente… ¿¡Enamorado!?- ………Ese chango INUTIL!! –exclamé con furia, caminando a pasos pesados hacia donde se encontraban Dracmon y BlackRenamon- Vamonos de una vez, quiero terminar esta misión lo mas pronto posible e irme lejos, no se a donde, pero definitivamente no quiero seguir ni un momento mas aquí –era obvio que me encontraba mas molesta que antes, pero no quería desatar esa ira ni en mi digimon ni en BlackRenamon- ¿Te encuentras bien, Kuro? –le miré- ¡Por supuesto que si…! ¿¡Que te hace pensar que no!? –comencé a reír como si toda cordura en mi se hubiese esfumado; odiaba los fraudes, y ese ‘’Shamamon’’ me había hecho un terrible fraude, ahora mismo… ¡Quiero matarlo!
- Tamer & Digimon
- Prueba de Rol :ADigi Puntos :354Cuentas :Ficha :Cronologia :NPCs :Nivel On Rol :MegaNivel On Rol de los Digi Aliados :UltimateIcono :Rango y Unidad :Haruka Aizawa
Rango: Holy Knight
Unidad: Dragon Spirit
Dracmon
Rango: Holy Knight
Unidad: Dragon SpiritRango y Unidad Digi Aliado :Gaomon
Rango: Knight
Unidad: Dragon SpiritInventario :
Haruka Aizawa
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