Capitulo 1: Momento de comenzar las aventuras en el Digimundo

por primera vez en mucho tiempo me habia dado un dia para despejarme de mi vida cotidiana, habia tenido una semana pesada y necesitaba descansar y de paso practicar algunas cosas, asi que para evitar molestar a mis vecinos y tambien evitar revelar uno de mis secretos me habia dirigido al digimundo a practicar uno de los instrumentos que mas me gustaban, el violin

no era la primera vez que hacia esto, y antes de siquiera pensarlo siempre recorria la zona buscando personas que pudieran estar vagando cerca, pero esta vez no habia reparado en hacerlo, inclusive habia dejado que algunos digimons bebes se acercaran curiosos a verme tocar, claro que apenas estaba sacando el instrumento de mi pequeño estuche, lo que mas me gustaba de esta zona era que debido al nivel de los digmons no habia ruido, ellos solo saltaban mostrando gusto o disgusto ya que no podian hablar hasta despues de cierto tiempo, me habia parado enmedio de una zona despejada con solo unos cuantos nidos esparcidos, tenia digmons etapa 1 rodeandome, por lo menos conte 20, suspire relajandome y tome el violin del mango acomodandolo en mi hombro y parte de mi omoplato y haciendo cierta presion con mi barbilla como me habian enseñado

comence a tocar una cancion ligera cerrando los ojos y dejandome llevar por aquel sonido producido por las cuerdas, la primera cancion me la sabia de memoria, asi que mis dedos y manos se movian por inercia llevando el arco de ariba hacia abajo y visceversa, marcando y cambiando el sonido haciendo ligera presion en las cuerdas, por un momento no senti a nadie mas, solo podia oir el sonido de tan majestuoso instrumento

al haber terminado la primera cancion baje mi arco lentamente, respire profundo y abri los ojos, frente a mi se encontraba un chico de cabello castaño claramente confundido, el cual me pregunto que lugar era este ademas de agregar que no tenia idea de que hacer, "nuevo" dijo mi mente en automatico

- Hola - le conteste viendolo de arriba a abajo - este es el digimundo, bienvenido - dije con una media sonrisa - Tu eliges que hacer, si explorar este nuevo mundo o regresar al mundo humano - guarde mi violin en su estuche debido a que no me gustaba tener espectadores humanos al tocar - Hay un pueblo cercano donde hay un portal al mundo humano - señale con el arco la direccion en la cual se encontraba el pueblo antes de guardarlo en el estuche - solo debes atravesar el bosque que rodea esta zona, por suerte terminaste en una de las zonas mas pacificas del digimundo - cargue el pequeño estuche en forma de maleta - ¿alguna otra duda? - le pregunte directamente viendolo a los ojos, no parecia una amenaza, solo se veia claramente confundido

aquel chico saco su digivice de su funda para celular y comenzo a plantear su duda para terminar presentandose, al parecer le gustaba hablar

- Yuuki - me presenté haciendo una leve reverencia viendo como se sentaba en el piso, le imite mientras los otros digimons comenzaban a esparcirse por la zona, ya no les interesaba estar ahi despues de acabada la musica

- Eso que tienes ahi es un digivice - saque el mio que solo se diferenciaba en el color - y dudo mucho que te vuelva a servir de algo en el mundo humano, hasta donde tengo entendido permite cierta comunicacion en este mundo, pero solo eso - aclare - funciona como un guardador de datos, o mejor dicho almacena digispirits - inmediatamente mi digivice comenzo a emanar una leve luz y pasando mi mano izquierda la cual se habia cubierto de igual manera de luz y una banda de datos se apreciaba recorriendola,  me transforme en mikemon, me encontraba sentada en la misma posicion mientras el digivice de mi mano desaparecia, esperaba no asustarlo con esto pero era la unica forma de explicarlo - te permite cambiar tu apariencia y transformarte en uno de estos seres - me quede tranquila viendo su reaccion

como esperaba se sorprendio al verme hablarle convertida en esa criatura con apariencia felina, pero contrario a lo que esperaba comenzo a hacer una pregunta tras otra mientras yo evite responder hasta que termino de hablar

- No estoy muy segura de cuantos digispirits pueda lograr almacenar, la verdad yo solo he encontrado uno, llegue ha este lugar transformada en mikemon, de echo no pude volver a mi forma humana hasta mucho tiempo despues - le confese un tanto apenada conmigo misma - solo conozco personas que han llegado a transformarse mas de 4 veces, pero desconozco si eso es el limite, o si acaso tienen alguno -

- Por lo demas el digimon dormido en ese Digivice deberas descubrirlo por ti mismo, aunque ten cuidado, la mayoria no puede volver a su forma humana hasta no haber encontrado a su siguiente etapa - le adverti seriamente, la primera vez en el digimundo me habia pasado eso, hasta no haber tenido a darcmon no pude dejar mi forma de mikemon y despues habia perdido nuevamente el digispirit, deshice mi transformacion volviendo a mi forma humana -por lo visto tu interes en este mundo es mucho, solo mantente alejado de las zonas aridas y oscuras y no deberias encontrar muchos problemas por el momento, la mayoria de las zonas boscosas tienen digimons pacificos que te ayudaran gustosamente si necesitas ayuda -

su actitud de encontrarlo inmediatamente me parecio curiosa, no tenia ni un dia y ya habia aceptado la idea de estar en otro mundo, o era demasiado aventurero o no tenia idea de lo que pasaba realmente, menciono que se iria en busca de su digispirit directamente al bosque y me hizo una invitacion

yo me levante de mi lugar sin responderle, solo avance en la misma direccion que habia partido aquel chico, siguiendolo detras por solo unos pasos con mi maleta en la mano, dandole a entender que lo acompañaria, al menos hasta asegurarme de que estuviera a salvo, el bosque se veia tranquilo como todos los dias, llegado al limite de la ciudad del inicio los bebes digimon no pasarian, solo nos encontrariamos con algunos digimons en etapa rookie, pude ver como algunos patamons pasaban entre los arboles, ademas de tentomons, un lopmon y algunos lalamon, entre otros digimons de etapas tempranas, iban y venian a la ciudad del inicio ya sea para cuidar a los bebes como para ir a otros pueblos, todo parecia indicar que sera un dia sumamente tranquilo, al grado que pasabamos desapercibidos en el camino

Aquel chico en verdad lo habia logrado rapidamente, el digispirit lo habia llamado desde uno de los arboles que estaban solo un poco alejados de la zona inicial, usando su digivice como una especie de localizador con luz, estaba a punto de elogiarlo cuando sin pensarlo dos veces habia usado su nueva habilidad quedando convertido en un patamon

al adoptar su nueva forma me miro diciendo que lo habia logrado, como si fuera una gran victoria, la verdad no sabia si reirme o felicitarlo, habia sentido lo que era no poder verte en ningun lado con tu forma humana, aunque quiza el chico preferia su nueva forma de digimon

- No podras volver a tu forma humana - le recorde con mirada seria - Espero que lo hayas echo con eso en mente - no era realmente dificil sobrevivir un tiempo aqui en el digimundo, pero cada digimon tenia ciertos enemigos casi naturales - Ademas el siguiente digispirit no te sera tan facil de conseguir -   me cruce de brazos esperando que es lo que diria aquel chico, su nueva forma de patamon era tierna como todos esos digimons, al menos no tendria problemas al hablar con otras personas o digimons del lugar

el chico al parecer queria enfrentar el digimundo en esa forma, no tenia nada en contra de eso, asi que me limite a asentir al escuchar su explicacion, poco despues me reto a un ligero entrenamiento

- Si asi lo quieres - le respondi convirtiendome nuevamente en Mikemon - comencemos con algo simple, ya que estas en el suelo alcanzame - corri hasta el arbol mas grande que habia a nuestro alrededor subiendo agilmente con ayuda de mis garras a una de las ramas mas bajas, quiza no era mucho reto pero sabia que no estaba acostumbrado a sus alas, me sente en la rama y espere viendolo fijamente, tenia que medir el alcance de vuelo asi que estaba lista para saltar una rama mas arriba cuando me alcanzara un poco - Tomate tu tiempo, es temprano aun - le dije animandolo un poco, ya que acababa de bajar al suelo cansado de volar - recuerda que no es necesario agitar las alas por mucho tiempo despues de despegar, tienes que dejar que el mismo viento te ayude - le hice señas con ambas patas tratando de simular el movimiento de las alas, fue quiza lo mas complicado que pude encontrar de mi siguiente transformacion, aunque tardas poco en acostumbrarte sabia que el inicio siempre costaba