Una Bella Puesta de Sol (Privado Demyx)

Un fuerte ruido a lo lejos llamó la atención de los jóvenes y sus reptilíneos Digimons. No sonaba muy lejos, a decir verdad, aunque quizás fue porque no cesaba ese ruido. Era como si una bola de demolición estuviese derribando arboles una y otra vez.

Demyx: Me juego mi sitar a que Max y los demás se encuentran allí.

Agumon: Parece lo más probable, la verdad.

Axel: Pues entonces, ¡¿a qué esperamos para ir?! Es la mejor pista de la que disponemos hasta ahora.

Gabumon: Cierto, lo mejor será que vayamos allí

Los cuatro amigos corrieron apresuradamente hacia donde se encontraba el origen de ese ruido. Cada vez que daban un paso, el ruido se acentuaba, lo que indicaba que estaban acercándose. Al poco tiempo vieron qué era lo que estaba rompiendo los árboles. Era una tortuga amarilla gigantesca que estaba metida en su caparazón y atacaba dando giros, deteniéndose poco después. Al acercarse más sigilosamente, vieron a Soulmon, Max y Natsuki, acompañados de una especie de ángel guerrera, quien debía de ser la digievolución de Salamon, ya que no la veían por ninguna parte.

Agumon: ¡Llama Bebé!

Gabumon: ¡Minifuego B!

La llamarada anaranjada y el chorro de fuego azul de Agumon y Gabumon respectivamente, alcanzaron en la cara de la gran tortuga, quien sintió un poco el dolor de ambos ataques y, posteriormente, les miró con cara enfadada.

Axel: Sentimos el retraso chicos.

Demyx: Estabamos un poco perdidos, ¿dónde se encuentra DemiDevimon?

Una sonrisa apareció en el rostro del joven peliverde al ver a su hermano acompañado de su amigo y de los Digimons de estos. Soulmon vigilaba al enorme Tortomon que les estaba buscando. La verdad es que Soulmon, al ser un Digimon Fantasma, era un gran vigilante, ya que podía volverse invisible. De hecho, estaba en dicha forma invisible siguiendo a Tortomon, preparado para atacar en cualquier momento. Por otro lado, D'arcmon se había subido a la copa de un árbol para tender un ataque sorpresa a Tortomon cuando se lo ordenase Natsuki, quien se había reunido con Max, Axel y Demyx, además de los Digimons de estos dos últimos. Entonces, Tortomon recibió los ataques de Gabumon y Agumon, pero Soulmon y D'arcmon, actuaron para que no atacase a sus amigos.

¡Garra Tenebrosa!- una negruzca garra apareció de debajo de la sábana que recubría a Soulmon, quien había dejado de ser invisible para poder atacar, golpeando fuertemente la cara de Tortomon para detenerlo.

¡La Pucelle!- desde la espada de D'arcmon, quien estaba escondida en la copa de uno de los numerosos árboles que allí había, la hermosa guerrera celestial Digimon lanzó una potente ráfaga de rayos de luz hacia el rostro de Tortomon.

Venga, ¿a qué esperamos para derrotar a este Tortomon?- animó Natsuki a sus amigos con una sonrisa en su bello rostro angelical, decorado por dorados cabellos.

¡Agg! ¡Malditos críos!- cegado y furioso Tortomon se enrabietó contra todo y desató uno de sus más poderosos ataques-¡Púas de Caparazón!- comenzó a lanzar Tortomon sus afiladas y enormes púas por todos lados, impactando en el suelo e intentando acertar a todos sus enemigos.

¡Cuidado!- agarró rápidamente Max la mano de Natsuki mientras se ponían a salvo de las púas, intentando esquivarlas, las cuales eran más grandes que ellos mismos, esperando que Axel y Demyx se pusieran a cubierto también.

Demyx y Agumon se escondieron en un riachuelo cercano que había allí, esperando que las afiladas y enormes púas de Tortomon no acertasen a darles. Por otra parte, Axel y Gabumon se volvieron a internar en la frondosa zona por la que habían aparecido, sabiendo que estaban lejos del alcance del ataque de Tortomon. Ninguno de ellos sabían si Max, Natsuki y sus amigos se habían librado del ataque de Tortomon.

[En la zona donde se encontraban Agumon y Demyx]

Agumon: ¡Tenemos que deshacernos de ese maldito Tortomon!

Demyx: Lo sé Agumon, ¿qué tal si usamos alguna de las cartas?

Agumon: No es mala idea, la verdad, pero ¿y Axel y Gabumon? ¿Dónde están?

Demyx: No lo sé, pero espero que se encuentren bien

Agumon: ¡Seguro que sí!

Al notar que Tortomon había dejado de lanzar púas, Demyx y Agumon por un lado y Axel y Gabumon por el otro se apresuraron a volver a la zona de combate.

Axel: ¡Demyx!

Gabumon: ¡Menos mal que estáis bien!

Axel: ¡Debemos atacarle!

Una sonrisa aliviada se avecinó en el rostro del peliverde Max al ver a sus amigos y su hermano a salvo. La verdad era que ese Tortomon podía ser bastante fuerte, incluso estando en desventaja. Podía girar con su enorme cuerpo y destruir una gran cantidad de árboles, además de lanzar numerosas púas más grandes que cualquiera de los cuatro jóvenes humanos que se encontraban allí. Ellos insistieron en que debían derrotarle cuanto antes, por lo que D'arcmon y Soulmon se quedaron para mantenerles a raya mientras los demás se reunían y trazaban un plan.

Chicos, nos encontramos en superioridad numérica, poodemos derrotarle, tenemos cartas y tenemos dos Digimons con el mismo nivel que ellos, además de que Agumon y Gabumon son muy fuertes para estar en el nivel en el que están.- anunció Max sonriendo a su hermano y a sus amigos.

No será fácil Max, ¿tienes algún plan?- se colocó Natsuki su pelo detrás de la oreja mientras observaba al Tamer peliverde y echaba una mirada hacia atrás para observar que Soulmon y D'arcmon impedían que pasase Tortomon hacia ellos.

¡¿Qué tramáis?!- gritó Tortomon intentando acercarse a ellos, pero se interpusieron los dos Digimons compañeros de Natsuki y Max, impidiéndole el paso.

¡Garras Tenebrosas!- Soulmon lanzó sus dos garras negruzcas hacia las patas de Tortomon, haciendo que éste tropezase y cayese al suelo.

No es nada que te pueda interesar, puedes volverte por donde has venido- dijo D'arcmon con una sonrisa divertida sabiendo que éste no se iba a retirar.

¡El Amo Devimon confía en mi para derrotaros!- gritó Tortomon intentando levantarse torpemente.

Bien veamos, Demyx usa tu carta Afro, después Gabumon y Agumon debéis quemarle la peluca para que el fuego se extienda y, por último, Soulmon y D'arcmon podrán vencerle sin ningún problema, pues la peluca ya le habrá debilitado lo suficiente- compartía Max su plan con sus aliados con una sonrisa divertida

Demyx: Parece un buen plan, hermano, pero debemos esperar a que Afro le debilite considerablemente

Axel: Estoy de acuerdo con Demyx, tengo algunas cartas que nos podrían ayudar bastante

Una carta apareció en los enguantados dedos de Axel, observándola mientras sonreía y viendo que había cogido una carta de un Digimon muy parecido a Wizardmon. Era Sorcerymon y tenía el atributo de Hielo, lo cual podía dañar algo a Tortomon e, incluso, ralentizarlo.

Axel: Después de ti Demyx.

Entonces, Demyx hizo lo mismo que su amigo, agarrar una carta en la que aparecía una peluca afro multicolor.

Agumon: ¡Tenemos una sorpresita para ti, Tortomon!

Demyx: ¡Carta leída! ¡Afro!

La misma peluca multicolor ridícula que aparecía en la carta de Demyx, apareció momentos después, cuando Demyx pasó su carta por el lector de su Digivice, en la cabeza de Tortomon. Aunque pudiese suponer una carta ridícula, era realmente poderosa, pues podía debilitar considerablemente a su enemigo, absorbiéndole las fuerzas.

Gabumon: ¡Nos toca!

Axel: ¡Carta leída! ¡Sorcerymon!

Gabumon: ¡Nube de Cristales!

A Gabumon le apareció un báculo helado, similar al que tenía Wizardmon, pero con forma de cristal helado gigante en la punta. De la misma salieron cristales de hielo dirigidos hacia la cara y las patas delanteras de Tortomon, acertando varios cristales en el cuerpo de Tortomon, quedando algunos incrustados en el mismo, inflingiendo dolor al mismo.

Una combinación de las cartas de Afro y de Sorcerymon fueron utilizadas por Demyx y Axel, además de los Digimons de éstos. Max asintió conforme, observando que su hermano aprendía rápidamente a pelear contra sus enemigos y a usar sus cartas. Probablemente, dentro de poco, Agumon podría llegar al nivel Campeón, aunque no sabía si podía decir lo mismo de Gabumon, hacía poco que le conocía. En cualquier caso, trabajaban bastante bien en equipo.

¡Carta leída!- dijo Max al agarrar una de sus cartas, observándola detenidamente con una sonrisa furtiva y pasándola posteriormente por el lector de cartas de su D-arc- ¡Cerberusmon!- pasó la carta en la que aparecía una especie de Digimon perro con tres cabezas, una de sus cartas favoritas.

¡Fuego Infernal!- una especie de luz verdosa apareció en la boca de Soulmon, iluminando el interior del mismo y exhalando después una enorme bocanada de fuego verde proveniente del Infierno del Mundo Digital, dirigida hacia el caparazón del Tortomon, dañando las zonas donde se había quedado sin púas, introduciendo algo de fuego en el interior de Tortomon, provocándole severas quemaduras internas.

¡Carta leída!- dijo Natsuki sonriendo mirando a su amigo peliverde e imitándole, al ver una carta en la que aparecía una especie de hada del bosque con flores en el cuerpo y apareciendo en las manos de D'arcmon un cañón con forma de flor, mientras que ella envainaba su espada en su vaina de la cintura- ¡Lillymon!

¡Cañón de Flores!- D'arcmon lanzó con el cañón de sus manos en forma de flor gigante un poderoso proyectil de color verde, aunque de apariencia no parecía demasiado fuerte, si que hirió en el costado a Tortomon haciendo que éste cayese de lado debido a los impactos que había recibido consecutivamente, a la vez que esparcía algo de polen que podía conducir fuego sobre el cuerpo de Tortomon.

¡Ahora Agumon y Gabumon! ¡Quemadle la peluca Afro y propagarle el fuego por todo su cuerpo!- dijo Max a sus amigos sonriendo y confiando en que podrían hacerlo.

Demyx: ¡No perdamos tiempo! ¡Quemad esa peluca afro!

Axel: ¡Ya está lo suficientemente debilitado!

Agumon: ¡Llama Bebé!

Gabumon: ¡Minifuego B!

El chorro de fuego azulado característico de Gabumon y la bola de fuego anaranjado de Agumon, se dirigieron velozmente hacia la peluca afro que, momentos antes, Demyx había colocado en la cabeza de Tortomon gracias a una de sus cartas y su Dispositivo Digital. Al poco tiempo de entrar en contacto con ambos ataques flamígeros, la peluca Afro multicolor de Tortomon comenzó a arder, propagándose por todo el cuerpo del reptilíneo enemigo gracias al polen que había dejado D'arcmon con la carta de Lillymon. Además, gracias a Soulmon y la carta de Cerberusmon, no sólo el Tortomon se estaba quemando por fuera, sino que también lo estaba haciendo por dentro. Al poco tiempo, mientras gritaba de dolor aquél gigantesco enemigo, se convirtió en datos, que comenzaron a recomponer un nuevo Digihuevo, elevándose éste y desapareciendo mientras volaba, dirigiéndose a algún lugar.

Demyx: ¡Lo conseguimos!

Axel: ¡Gran plan, Max!

Gabumon: Nunca pensé que ganaríamos a un Digimon de nivel campeón...

Agumon: ¡Pues esto es solo el principio! ¡Cada vez nos haremos más y más fuertes!

¿?: ¡JAJAJAJA! ¡BIEN HECHO, ESTÚPIDOS!

Una voz oscura y escalofriante apareció delante de todos ellos. La forma era una forma humana, de color negro azabache, con alas gigantescas de murciélago.

Demyx: ¡Devimon!

Axel: Ese... ¿ese es Devimon?

Devimon: El enano ha dado en el blanco

A pesar de que Agumon y Gabumon estaban exhaustos después de tantos combates, se prepararon para atacar a su mayor enemigo.

Agumon: ¡Llama Bebé!

Gabumon: ¡Minifuego B!

Devimon: ¡Por favor! ¿En serio pensáis derrotarme? ¡Viento Endemoniado!

Con sus alas, Devimon creó una ráfaga de aire cortante que eliminó con facilidad los ataques de Agumon y Gabumon, dañando seriamente a ambos Digimons, volviéndolos a su forma de Koromon y Tsunomon, además de provocar varios cortes en la ropa y en la cara de Demyx y Axel, tumbándolos en el suelo, incapacitándoles durante varios minutos.

Devimon: Y ahora, ¿me váis a escuchar?

Un escalofrío recorrió el cuerpo del joven peliverde al escuchar esa voz que le resultaba tan extrañamente familiar. Era Devimon, su mayor enemigo y a quién aún no habían derrotado. Agumon y Gabumon intentaron atacar a Devimon pero, contando que ambos estaban agotados, Devimon era de nivel Campeón y, además, era mucho más poderoso que cualquier Digimon a los que se habían enfrentado, fueron derrotados con asombrosa facilidad, devolviendo a ambos Digimons a su etapa Bebé.

Y ahora, ¿me váis a escuchar?- preguntó Devimon sin perder su maliciosa sonrisa haciendo crujir sus nudillos, contemplando a D'arcmon con una sonrisa desafiante- una Digimon de luz ¿eh? Si que sabéis elegir a vuestros aliados Max- otra mirada endemoniada fue dirigida hacia el joven peliverde, dirigiendo después una mirada a Soulmon- vaya Tsukaimon, te veo bien, nunca esperé que te convirtieses en un Soulmon, creía que te convertirías en un Devimon o un IceDevimon

¿Qué es lo que quieres, Devimon?- cortó tajantemente Soulmon, mientras Max miraba a Natsuki y a D'arcmon negando con la cabeza para que no atacaran, puesto que Devimon era traicionero, si lo que quería era atacarles, ya les habría atacado.

Nuestro Mundo, el Mundo Digital, está en peligro, necesito vuestra ayuda- miraba seriamente hacia Soulmon y D'arcmon y, después a sus respectivos Tamers, señalando luego con su dedo pulgar hacia atrás, hacia donde se encontraban Demyx, Axel y los Digimons de ambos-incluso esos debiluchos podrían resultar de ayuda


¿Tú? ¿Pedirnos ayuda a nosotros? Debe de haberte costado media vida y tu orgullo entero, Devimon- Max se regodeaba al oír las palabras "necesito vuestra" a Devimon, aunque eso quería significar varias cosas, una de ellas es que Devimon podría tenerles miedo o, por lo menos, reconocer que podrían igualar sus fuerzas con las de Devimon.

Si, os estoy pidiendo ayuda- dijo totalmente serio, desapareciendo su maligna sonrisa de su rostro.

¿Por qué ibamos a ayudarte después de todo lo que nos has hecho?- preguntó D'arcmon desenvainando su espada, preparándose para atacar si era necesario.

Os lo he dicho, el Mundo Digital está en peligro, varios Digimons llamados Keramon se han descontrolado y están comenzando a comerse los datos del Mundo Digital, empezando por la zona en la que gobierno.- cruzó sus brazos Devimon informando a sus enemigos a quienes estaba pidiendo ayuda.

¿Qué diferencia hay entre lo que le quieres hacer tu al Mundo Digital de lo que le quieren hacer los Keramon?- preguntó con desconfianza Natsuki sin dejar de mirar al enorme Digimon malvado.

Yo no quiero destruir mi mundo, solo quiero gobernarlo junto con el Mundo Humano- respondió Devimon explicando su plan sin preocuparse por ello- los Keramon se quieren comer el Mundo Digital ENTERO y cuando acaben con él, vendrán aquí, al Mundo Humano.- la verdad es que Devimon parecía desesperado, había algún que otro matiz de pánico en su rostro- si cambiáis de opinión, os espero en el Castillo de la Noche, en las Zonas Oscuras del Mundo Digital, diré a mis súbditos que no os ataquen- dicho esto, Devimon desapareció por completo, por lo que, esperando a que Demyx y los demás se recuperasen, Natsuki se acercó a Max, volviendo Soulmon y D'arcmon a sus formas de Tsukaimon y Salamon respectivamente.

¿Qué vamos a hacer Max?-preguntó Natsuki mordiéndose el labio inferior nerviosa.

Devimon decía la verdad, lo conozco de sobra, pero de todas formas iremos con sumo cuidado, si conseguimos derrotar a los Keramon después de ayudarle, posiblemente se vuelva contra nosotros- dijo Max ayudando a levantarse a Axel y a Demyx, mientras que Natsuki cogía en sus brazos a Koromon y a Tsunomon.