Τραγούδια (Pistas) - Rol Abierto

Las palabras de la Digimon dieron en el blanco al principio, algo en lo que había dicho llamo mucho mi atención, ya que quizá era lo que mas me impedía poder saber para que servía el aparato llamado Digivice. Mis emociones en este punto eran muy confusas, debido a que no sabía mucho de este mundo, ni de sus habitantes, pero tan solo tal vez, podría descifrarlo con el paso del tiempo.

Escuchaba las palabras de Sasha con atención, intentaba no dejar ir ningún dato, ya que sonaba bastante interesante todo lo que podía hacer este dispositivo, no estaba del todo segura si funcionaba ahora, ya que se había mojado anteriormente, pero quizá y en este lugar los aparatos electrónicos no se dañaban tan fácilmente.

Los Digimon que se encontraban alrededor de vez en cuando, centraban sus miradas en nuestra mesa, al parecer y atraíamos un poco a los espectadores, supuse que no sería por mi belleza, puesto que sería mas razonable que se notaran un tanto intrigados de por que una humana estaba en el restaurante, ningún otro humano se encontraba por los alrededores. Simplemente lo deje pasar por lo que restaba del tiempo.

Devolviendo mi concentración a Sasha, me impresiono el hecho de saber que podía tomar forma de uno de estos seres Digitales, el tomar la forma de uno de ellos me daba un poco de miedo, me inundo la curiosidad saber mas sobre los Digispirit, algo que ya me había comentado aquella bestia que frecuentemente irrumpía en mis sueños –¿Te refieres a que puedo ser un Digimon?- Pregunté dejando notar un cierto nerviosismo en mis palabras –No quiero quedarme para siempre como un Digimon, puede que sea interesante, pero…- Hice una breve pausa –No me gustaría quedarme para siempre así, me gusta mi forma humana- Solté un gran suspiro aliviada.

La Digimon, pronto respondió mi cuestión y preocupación con mas información que tenía en su libro, al parecer era un método que daba cierto poder, el cual, me daba la posibilidad de transformarme, pero no era algo permanente.

La conversación se hizo cada vez mas larga e interesante. Pronto, llego la mesera con los platillos que habíamos pedido –Muchas gracias- Tome el platillo con la rebanada de pastel, se veía muy apetitosa, y la cereza que tenía en la parte superior tenía un buen toque de diseño. Lleve el cubierto al alimento tomando un pedazo, inmediatamente lo lleve a mi boca y me lleve con la sorpresa que era un pastel muy delisioso –¡Hmmmm! Pero esto sabe verdaderamente bien, no pensé que en Digimundo hicieran postres así- Mis ojos se llenaron de brillo mientras continuaba comiendo.

Sasha se había hecho cargo de la cuenta, lo que posteriormente agradecería de alguna u otra manera. A decir verdad, esta Digimon se había convertido en una buena amiga.

Al poco tiempo, un gran golpe en las puertas principales me distrajo de la conversación con mi acompañante –¿Ah?- Voltee enseguida, mirando que se trataba de un extraño Digimon demandando saber algo a gritos y gruñidos -Deberíamos salir cuanto antes- Mire a Sasha un tanto preocupada, al parecer había problemas en la Ciudad, algo en lo que no quería involucrarme.

El cielo se pintaba completamente oscuro, bañado en estrellas y pequeños planetas que se podían ver a lo lejos. Ciertamente era muy diferente al cielo que cubría mi mundo. También, si fijabas un poco la mirada, se podía observar el mundo real, aunque no era como el planeta que había estudiado en clases, era diferente, su estructura pintaba diferentes formas y muchos agujeros de los cuales salían pilares de luz. Todo un espectáculo visual astronómico.

En medio de todo el embrollo que había ocasionado un Digimon, no pude notar hasta después, que el Digivice estaba reaccionando, una pequeña y tenue luz azul brotaba de la pantalla, no era muy notable. Inmediatamente lo tome en mis manos para ver de qué se trataba, pero no pude deducir que era lo que pasaba con el dispositivo, puesto que solo fueron fracciones de segundos de ese fenómeno.

Finalmente opte por guardarlo de nuevo, no le preste mucha atención, ya que había algo mas a lo que debería prestarle atención en este momento.

Mi atención fue captada de nuevo por Sasha, quien se encontraba un poco mas calmada. Paso por mi mente en que ella quizá conociera a esos bandidos, o quizá simplemente sabía tratar mejor la situación que yo. No estaba en posición de enfrentarlos, ni mucho menos entregarles mis pertenencias, por lo que mi mente se lleno de preocupación y de un sentimiento de fastidio. No podía pensar en como salir del lugar sin llamar mucho la atención.

Durante el tragueteo de los vándalos, la camarera que anteriormente nos había atendido, salió intentando calmarlos. Al voltear mi vista a mi alrededor, pude ver que los demás clientes se encontraban asustados, molestos e irritados. Las demandas del Digimon, parecía buscar a una persona que sonaba un poco a mi descripción. No sabía que era lo que traían conmigo o si era la victima correcta.
Mi atención ahora se centraba en Angewomon, quien intentaba lidiar con el Digimon causante del alboroto. Me sorprendió que fuera un simple acto, para después ver que había realizado una especie de poder. Se podía sentir un ambiente tranquilo y relajado. A los pocos instantes el Digimon vándalo y sus secuaces cayeron al suelo, parecían encontrarse dormidos, al parecer era un ataque inofensivo por parte del ángel, pero muy eficaz para usar de distracción. Quizá y ahora era el momento para salir cuanto antes.

Me sorprendió que Angewomon nos señalara indicándonos que escapáramos. En este instante era un manojo de nervios, si no fuera por la prudencia de la Digimon que me acompañaba me hubiera quedado paralizada –Si vamos – Dije acatando la idea de Sasha en salir en ese momento.

Al salir, Sasha se dio a la tarea de revisar el área. Algo en mi se sentía un poco extraño, era como si mis emociones comenzaran a conectarse con el Digivice en mi bolso, por ello, lo tome nuevamente en mis manos. Miraba la pantalla de este observando la pequeña estatuilla que se mostraba. Aquella extraña ostra de color rosa se veía igual que antes, pero ahora podía sentir una extraña presencia cuando la miraba.

Escuche las palabras de Sahsa y asentí con la cabeza, ahora debíamos salir cuanto antes del lugar. Si era verdad que nos estaban siguiendo deberíamos alejarnos lo mas pronto posible –Esta bien, pero… – No pude terminar la oración debido a un estrondoroso golpe que se dio en la puerta por donde habíamos salido. Era Cerberumon, quien se había librado del ataque de Angewomon –Vámonos! – Tome a Sasha y saltamos de la azotea.

Volamos por unos cuantos minutos, mientras otros Digimon con forma de perro nos seguían por vía terrestre –Sasha debes darte un poco mas de prisa – Exigí a la Digimon. En ese momento, me quede en silencio por unos segundos, Sasha estaba en peligro al igual que yo, ellos habían mencionado que buscaban a una humana, por lo que me hacía sentir un poco mal que Sasha se viera envuelta en este asunto, cuando el objetivo quizá y únicamente se tratara de mi. Pensaba en que ojala pudiera ser lo suficientemente fuerte para ayudarle.

Finalmente, perdimos de vista a los Digimon que nos venían siguiendo, pero esto no dejaba que nos siguieran buscando. Aterrizamos en un lugar lejano, en donde el camino estaba compuesto de un pequeño lago en línea recta que conducía a un enorme árbol, el árbol que estábamos buscando, pero aun estaba lejos.

Ahora deberíamos apresurarnos para adelantarnos. Por un momento me quede en silencio y mire a Sasha –Lamento no poder ayudar, creo que por estar conmigo te he metido en esto – Dije mientras bajaba un poco la mirada. Al mismo tiempo que terminaba de hablar, nuevamente la luz que emergía de mi Digivice se hizo presente, pero esta vez, parecía ser mas fuerte y radiante.

Parecía escuchar algo, una voz que solo escuchaba en mi mente –Bueno, creo que es hora de que te preste mi poder, úsalo bien – Esa extraña voz parecía prevenir del mismo Digivice. Una cortina de datos me envolvió por unos minutos, la luz era tan fuerte que tuve que cerrar los ojos.

Pasados unos segundos, pude lentamente abrir mis ojos, todo se notaba igual, únicamente que la altura de Sasha ahora era igual a la mia –¿Que esta pasando? – No podía sentir mis brazos ni mis piernas, ahora mi cuerpo se sentía muy diferente. Me acerque al agua mirando mi reflejo. Inmediatamente solté un enorme grito al ver en lo que me había convertido… Era una especie de molusco con una enorme coraza de color rosa. Este era el primer poder que obtenía del Digivice…