Primeros encuentros [Libre]

yuzu no hacia falta que se lo dijeran por que ella prestaba atencion a cada detalle de lo que hacia teniendo curiosidad para el futuro, no pude evitar levantar una ceja ante lo que decia pagumon sobre la hoja que habia recogida, tal vez en el futuro seria util tener esa informacion. mas si se llegaba a encontrar a algun digimon malvado, serviria para dejarlo un poco k.o. aunque fuera solo momentaneamente. seria unna oportunidad perfecta para contraatacar, o huir fuera cual fuera el caso o situacion.

Despues de unso segundos que parecieron eternos comenzamos a bajar con el chuumon con nosotros hacia las escaleras que parecian bastante largas y lago agoadoras, cosa que no parecia molestar a kyaramon que estaba sobre mi cabeza relajadamente, como si nada.

aun asi no le dije nada y continuamos la bajada, hasta llegar donde habia un goburimon, la situacion por asi decirlo era un poco ridicula cuando lo vimos huir del lugar, trate de contener las risas pero ante el comentario de guillen no pude evitar soltar varias, tapandome la boca para no exagerar:

-lo siento- dije despues de calmarme mientras kyaramon al parecer se habia quedado dormida sobre mi cabeza.

-pues en esta zona se esta acabando los frutos es algo pequeño el lugar por lo que salimos a buscar algo de comida, en el bosque. pero justo nos bloquearon el camino y no pudimos seguir avanzando- dijo numemon. numemon miro confuso a guillem- ¿nombres? ¿numemon y chuumon?- dijo como si fuera lo mas ovbio del mundo

- … - Tina hizo todos los esfuerzos posibles para entender la situación del numemon pero le resultó simplemente imposible, llevaba demasiado tiempo como digimon salvaje como para ser exigente con los alimentos y tenía ya grandes sobre los vegetales comestibles incluyendo las zonas que favorecían el crecimiento de cada uno. Además, ya ni se acordaba de la última vida en que llegó a una etapa que requiriera una cantidad abundante de alimentos, pensándolo bien no era tan buena sobreviviendo, quizá si fuera un poco más grande…
- ¿Sabéis encontrar raíces? Duran mucho tiempo y se dan a patadas. Además hay más frutas venenosas que raíces toxicas.
- Eso sí, no saben bien - Remugó Guillem que ya llevaba cuatro días a régimen de estas.
Era curiosa la enorme diferencia que había entre un espécimen salvaje y uno “civilizado”. En el tiempo que llevaban juntos Tina había sido capaz de encontrar facilidad fuentes abundantes de comida a pesar de estar fuera de su territorio mientras que, al parecer, en un pueblo en el que supuestamente sus habitantes tenían que estar más avanzados, se tenía que recorrer una gran distancia para ir a la búsqueda de alimentos ya que a los alrededores escaseaban o no los sabían aprovechar. La verdad es que ahora que lo pensaba el chuumon pesaba bastante poco.

A medida que avanzaban los árboles frutales se hacían más comunes pero estaban todas sin frutos y con las ramas rotas, había algunos brotes jóvenes que hubieran podido crecer pero estaban partidos por la mitad, un olor a fruta podrida se esparcía por el aire.
Tina y Guillem intentaron mantener la calma pero a medida que se adentraban en el malherido bosque la indignación de ambos aumentaba hasta que Guillem no pudo soportarlo más y estalló - ¡Por vuestro propio bien espero que el bosque esté así por ataques de enemigos o por alguna plaga! ¡Porqué si lo habéis hecho vosotros la verdad es que os merecéis una tanda de bofetadas!
No eran las palabras que Tina hubiera usado pero estaba completamente de acuerdo.

yuzu no podia quedar as con la boca abierta por el lugar, no sabia como alguien podia vivir asi. y menos un pueblo entero, numemon nego con la cabeza, ante la pregunta de guillem. no era tan simple como parecia todo si fuera asi de facil, no estarian en esa situacion, estaba por demas decir que era un pueblo habitado por puros chuumon, y muy pocos numemon:

-la vida no es de color de rosa, este es un pueblo pacifico nosotros no buscamos pelea. y no hacemos nada contra los digimon, pero algunos suelen aprovechar ese pacifismo que tenemos, para quedarse con la comida. hace unos meses habiamos cambiado de habitat que teniamos para alejarnos de esos digimon que abusaban. pero hace unas noches los arboles comenzaron a escasear fruta, alguien la estado robando, dejando solo sobras de frutas mordidas, aun no hemos encontrado el problema pero aunque lo intentaramos encontrar no se que tanto podria hacer para ayudar- explica numemon.

yuzu despues de oir esto se sento pensativa ante lo que pasaba era una situacion bastante deprimente, pero si alguien los robaba sin que se dieran cuenta debia ser, en su creeer algo pequeño pero agil mire a kyaramon con el mismo pensamiento que ella:

-habra que hacer guardia y ver que es lo que pasa en este lugar- dije mientras miraba buscando algun arbol que aun tuviera frutas, tal vez podrian encontrar al que estaba causando todo esto

-no dejaremos que el que hace esto se salga con la suya- dice kyaramon con el ceño fruncido

Ante las palabras del numemon un sentimiento de odio despertó en Tina, las zonas de alimentos eran zonas neutrales en las que no se podía cazar, hacer emboscadas o usar como refugio La mera idea de que alguien osara destruirlas resultaba repugnante para cualquier habitante del bosque y el hecho de que se hiciera con el único propósito de perjudicar lo volvia un crimen aún mayor, fuera quien fuera el responsable no podía ser un salvaje ya que no parecía las consecuencias de sus acciones y si las conocía no había duda de que era un suicida.
- Debisteis avisar a los salvajes en primer lugar. El causante de esto ha incumplido las Leyes no escritas y por eso debe ser y será castigado.
Otra muestra de las leyes de los salvajes, Guillem ya conocía la Palabra de salvaje que obligaba a cumplir las promesas bajo castigo de muerte para quien no cumpliera con lo prometido. Realmente aquello más que un comportamiento animal era más bien una anarquía muy bien organizada, al parecer desconocida por los digimon civilizados que debían tener algún otro sistema de ley para esos casos. Si de verdad todos los salvajes acataban aquellos términos voluntariamente no había duda de que su organización era mejor que en muchas sociedades humanas.
- Totalmente de acuerdo - Dijo el chico ante las palabras de las chicas - Pero aún queda tiempo para el anochecer, ahora lo importante es dejar a este pobre a buen recado. No creo que sea buena idea montar guardia con él por aquí.
Una vez dejado el chuumon y el numemon con sus compañeros, Tina y Guillem empezaron a buscar algún rastro de él, o los, alborotadores. Mientras investigaban, Guillem empezaba a estar menos convencido sobre la idea de ayudarlos, ni Tina ni Kyaramon tenían nivel suficiente como para luchar. De acuerdo, habían vencido a un agumon el primer día, pero es que simplemente no le dieron oportunidad de atacarlos, ahora se enfrentarían a campo abierto. Quizá sería mejor irse, Tina podía salir herida y estaba a un nivel inferior al de los pueblerinos. Además, si tan grave era esa afrenta seguro que tarde o temprano otro salvaje acudiría para castigar al responsable.
Con esas dudas en la cabeza el aura oscura alrededor del digivice de su bolsillo se amplificó.
Tina estaba investigando algunos de los arboles destrozados, mientras la observaba el chico pudo percibir el odio y la decisión que demostraba con sus movimientos. Esos sentimientos por si solos no le servirían en una pelea pero estaba claro que no huiría. En ese momento el chico se dio cuenta de que en los pocos días que llevaban juntos le habia tomado cariño a la bola de pelos, si la forzaba a irse era seguro que le odiaría… En ese momento todas las dudas se disiparon: Si Tina quería luchar pues muy bien, allá ella, pero él se encargaría de que no le costara la vida.
El aura oscura pasó a volverse totalmente negra y una nube de oscuridad salió despedida del aparato hacia Tina ante el asombro de ambos.
La oscuridad envolvió por completo a la pagumon, una sensación de calidez recorrió su cuerpo mientras este se iba llenando del embriagador poder oscuro. Su cuerpo empezó a crecer y a tomar una forma más humanoide.
El proceso duró solo unos segundos pero para Tina el tiempo pareció dejar de fluir durante aquellos instantes, aquella sensación le gustó, no ¡Le encantó! La energía que recorrió su cuerpo se sentía genial, inundándola de poder. Dejó de respirar, tratando así de retener el momento pero finalmente la oscuridad fue totalmente absorbida por su cuerpo completando su metamorfosis en Impmon. Mientras la sensación se desvanecía Tina empezó a tambalearse para finalmente caer de cara en el suelo.
- ¿Estás bien? – Preguntó el adolescente a la pequeña diablilla mientras la ayudaba a levantarse.
- No - Respondió está haciendo esfuerzos para mantenerse de pie - Hace vidas que no uso piernas. No recuerdo como se andaba.
El chico sonrió, cuando Tina pudiera tenerse de pie era posible que la misión que tan estúpidamente se habían asignado se volviera plausible.

yuzu se quedo mirando dubitativa ante lo que decia pagumon no entendia mucho de lo que hablaba, sobre la ley salvaje. tal vez era algo poco comun para ella siendo la primera vez que veia a otros digimon, ademas de kyaramon. la cual parecia aun muy comoda. mientras los veia hablar y pensar, note como una luz oscura aparecia, en el lugar sin saber si intervenir intente acercarme, pero kyaramon me detuvo agarrando un poco de mi pelo con su pelo para detenerme en el camino de que me acercara, y ademas negando con la cabeza como diciendo que mejor no interviniera.

aun asi kyaramon estaba a la expectativa alguno le gustaba de todo esto y la mantenia con la guardia alta. no sabia que pasaba pero al igual que la luz oscura que rodeaba el bolsillo de ellos, senti una pequeña onda de calor recorrer mi digivice. a lo cual tambien brillaba kyaramon. pero yo no me daba cuenta por el hecho de que veia lo que sucedia entre ambos, digimon y tamer. en un momento senti como algo que recorria mi cuello, sintiendo por extraño que parezca un peso mas ligera del de antes. algo que me saco de la concentracion totalmente ademas del hecho de algo envolvia mi cuello era una voz, que aparecia cerca de mi oido:

-crees que debamos hacer algo con ellos?- pregunta la ahora kudamon justo cerca de mi oido, cosa que hizo que diera un "pequeño salto" (grande). ya que me habia tomado por sorpresa el hecho de que repente estuviera cerca de mi hombro, no recordaba que se hubiera bajado, en ningun momento.

-kyaramon no hagas eso casi me das un paro cardiaco- dije exageradamente mientras volvia al suelo aunque no me habia dado cuenta en ningun momento y al parecer tampoco kudamon. mire un poco mas de cerca y pude ver que habia cambiado totalmente al igual que tina.

-puedes decirme kudamon si quieres- dijo pacificamente kudamon mientras sonreia a los demas- al parecer no soy la unica que digievoluciono. no sabia por que pero despues de ese pequeño susto me sentia un poco debil, por varios segundos sin alguna razon aparente

digisoul usado: salto 1

Tina se quedó con los ojos como platos al ver a Yuzu saltar por encima de los árboles, tan sorprendida se quedó que casi vuelve a caerse  de no ser porque Guillem la sujetó a tiempo - ¿Puedes andar o necesitas ayuda?
- S... Sí, creo que puedo tenerme de pie… ¿Pero no has visto eso?
Guillem se giró y vio a Yuzu, que ya había aterrizado,  y parecía hablar con lo que al principio le pareció una bufanda pero que resultó ser la forma evolucionada de Kyaramon, decidió abstenerse de hacer ningún comentario acerca de su nueva forma, ya la había confundido con dos piezas de ropa en el mismo día y no iba a arriesgarse a que se ofendiera.
- Vaya, al parecer no has sido la única en evolucionar ¿Eh? - Le comentó sonriendo a la impmon mientras le acariciaba la cabeza.
- No me refería a eso… - ¿Se lo habría imaginado? Al fin y al cabo acababa de salir de un estado de éxtasis, sería normal que hubiese sido una ilusión. Sí, debió ser eso, aunque Yuzu pudiese dar saltos de esa altura, cosa imposible para un humano, jamás podría hacerlo con esa falda.
Convencida de que su vista debió engañarla la diablilla decidió centrarse en intentar moverse: Trató de dar algunos pasos, cosa que consiguió al su cola como contrapeso. Feliz con su hazaña personal decidió dar el siguiente paso tratando de correr solo para volver a encontrarse, segundos después, tendida en el suelo.
- ¿Seguro que puedes sola? - Insistió su compañero a la pequeña cabezota que logró ponerse de pie por sí misma.
- Sí... Solo dame un momento. Ya le voy pillando el tranquillo. - Esta vez Tina empezó a caminar despacio para ir aumentando su velocidad a medida que se movía logrando mantener el equilibrio - ¡Ya está! ¡Ya lo tengo!
- Sí - Le dio la razón el chico mientras sonreía con malicia - Ahora ya sabes huir.
Ofendida por el comentario Tina miró hacia él y para su sorpresa le escupió, algo preocupante teniendo en cuenta que lo que quería hacer era lanzarle una burbuja. Nerviosa volvió a intentarlo varias veces con idénticos resultados sin lograr realizar su ataque. Frustrada agarró aire y volvió a probar, esta vez en lugar de saliva o burbujas lo que expulsó fue un potente viento helado en dirección a Yuzu y Kudamon que no les golpeó de milagro. (Night of Blizzard)
- ¿¡Qué demonios!? - Exclamó Guillem al ver eso - ¿Estáis bien?
La impmon, la primera sorprendida por lo que acaba de hacer les dirigió una sonrisa nerviosa a las chicas - Pe… Perdón… Yo… - Musitó sintiéndolo de verdad.

habiamos estado tan concentradas en nuestra conversacion que no nos habiamos dado cuenta del ataque de la digimon hasta que sentimos una pequeña onda de frio, me acerque con kudamon aun en mi cuello a donde estaban, no le preocupaba. mientras no le hubiera dado a nadie no era ningun problema para ella, en caso de que le hubiera golpeado ahi si habria un pequeño problema que discutir. al oir la disculpa de impmon, no pude evitar sonreir poniendo una mano en la cabeza de ella:

-no te preocupes, debe ser dificil ese repentino cambio- dice yuzu- alguna ¿vez lo habias experimentado o es la primera vez que lo haces?- dije en referencia a la digievolucion ya que todavia no entendia mucho el proceso, por el cual se llevaba este. kudamon parecia un poco con el ceño fruncido por el ataque, aunque casi no se notaba en su cara de poker actual.

-es una suerte que hayas fallado-. dice kudamon finalmente a lo cual la mire aunque tenia razon, no era algo que debia decirle no estaba bien, kudamon sin importarle la mirada que le estaba lanzando en estos momentos solo largo una sonrisa- creo que aun no nos adaptamos ninguna de las 2 a lo que somos ahora, yo antes era un poco mas grande de lo que soy ahora me pregunto que poderes estaran conmigo- dijo kudamon tranquilamente tratando de canalizar su poder para ver si salia algo pero no salia nada

-tranquila kudamon ya saldra cuando lo necesites- dije sonriendole tranquilamente a mi compañera, aunque ella seguia en su mundo intentando concentrarse

Aprovechando el comentario de Yuzu, Tina intentó desviar la conversación hacia ese tema así que hizo esfuerzos para recordar alguna evolución. Nada, no recordaba ninguna vida en que hubiera llegado a Rockie. Confirmado, no era tan buena sobreviviendo como aprendiendo de sus muertes.
- En algunas vidas pasé de kuramon a tsumemon en vez de a pagumon pero nada más.
Aún un poco confundida sobre lo que acabab de hacer intentó repetirlo soplando suavemente sobre su mano (Night of Blizzard), una delgada capa de hielo cubrió su guante. Bien, al parecer dominar esa técnica era fácil, su potencia dependía del aire que explsaba.
De pronto una idea entró en su cabeza: repitiendo su aliento helado formó una bola de nieve y se la tiró a Guillem a la cara, el cual simplemente la detuvo con su brazo.
- Sigh, casi… - Dijo la diablilla chasqueando los dedos formando una bola de fuego que empezó a levitar sobre su mano (Night of Fire). La impmon la miró sorprendida para acto seguido dirigir una mirada maliciosa a su compañero.
- Tina… Tengo una hermana así que conozco esa mirada. Lánzame eso y te tiro de cabeza al río.
Resignada Tina volvió a chasquear los dedos haciendo desaparecer el fuego, repitió los chasquidos varias veces asegurándose de que podía convocarlo a voluntad.

Con tanto escándalo en la rama de un árbol cercano alguien despertó. Cauteloso agarró su tirachinas y observó de dónde venía el ruido, eran dos humanos y sus respectivos compañeros, teniendo en cuenta la hierba congelada al lado de la chica parecía que estuvieran peleando. Sonrió ¿Qué mejor ocasión que esa para comprobar su nuevo poder  que venciendo a los que se habían infiltrado en su zona de prácticas?

Una bola de hierro pasó rozando la cabeza de Guillem e impactó contra un árbol destrozándolo (Baby Sling). Tanto este como Tina se giraron hacia la dirección de la que provenía el proyectil. Desde la rama de un árbol intacto un koemon les sonreía desafiante. - Bueno, bueno… ¿Qué os parece mi puntería? Un poco más a la derecha y adiós a tu cabeza.
- ¿Tu eres el causante de esto? - Preguntó Guillem tranquilamente con una voz fría y sin emoción.
- ¿Eh? – Ese chico se acababa de librar de la muerte por un pelo y no parecía asustado  - Bueno, para practicar puntería se necesitan blancos y esas frutas son muy raras, solo sé si me gustan si las muerdo antes ¿Por qué?
No había lugar a dudas, un maldito imbécil que utilizaba los arboles como dianas y que estropeaba la comida. Tina le lanzó una mirada de odio mientras exhalaba un vapor frio - En ese caso la pena es la muerte…Cúmplase la sentencia.

me causaba un poco de gracia la pequeña discusión que estaban teniendo tanto tina como guillem, sin duda era todo un espectáculo verlo, me tape la boca para ocultar una pequeña y corta sonrisa. la cual se desvanecio ante la aparición de un digimon en un árbol, así que me puse a escuchar todo lo que decía el digimon.

mire con cierto odio hacia el digimon que parecía un poquito mono, cosa que no me sorprendía en este lugar lleno de digimons curiosos había hasta babosas en el lugar, pero bueno debíamos hacer algo, no podíamos dejar que se saliera con la suya, mire hacia kudamon unos segundos que al parecer pensaba lo mismo que yo. en estos momentos, después de unos segundos de pensarlo kudamon salio de mi cuello quedando en el suelo:

-vas a pagar por lo que le has hecho a este bosque- dijo kudamon mirando con cierto resentimiento hacia el digimon, aun mas al enterarse de que lo hacia por querer practicar sus ataques. después de unos segundos oí lo que decía tina sobre el tema, a  lo cual me salio una gota estilo anime en la cabeza, tampoco hacia falta exagerar tanto tal vez herirlo de gravedad y después... ¿encerrarlo? ¿funcionaban ese tipo de cosas en el digimundo. aun tenia mucho que aprender sobre este lugar. después de unos segundos la mejor decisión que se nos ocurrió ahora mismo era

-primero lo primero mejor bajemoslo del arbol, puede que este en su territorio en esa parte si lo bajamos, la ventaja sera nuestra- dije mientras miraba a kudamon quien despues de unos segundos decidio lanzar el primer ataque hacia, el digimon mono, de repente el collar de kudamon comenzo a brillar lanzando una luz enceguecedora intentando enceguecer al enemigo, y asi que este pudiera perder el equilibrio y caer del arbol, o al menos era la idea principal de kudamon

- Zekkoushou: Enceguece al enemigo con gran resplandor de luz blanca que sale de su collar.

Las palabras de Tina causaron qué el mono verde se sobresaltara - ¿Ma… Matarme? ¿Por qué?
De pronto Kudamon saltó de la espalda de Yuzu y despidió  un rayo de luz hacia el primate qué lo cegó. Aprovechando esto Tina lanzó su aliento helado pero con las prisas no tomó el suficiente aliento lo que provocó que no fuera lo suficientemente poderoso como para congelarlo pero sí tuvo la suficiente fuerza como para terminar de desequilibrarlo por completo provocando que se cayera de la rama.
Antes de caer el koemon se pudo sujetar  con la cola evitando estrellarse contra el suelo pero entre la luz y el viento soltó su tirachinas que terminó en el suelo, fuera de su alcance - ¡Perdón por atacaros! ¡Si este es vuestro territorio me iré pero no me matéis! ¡Por favor!
- ¿Tina? - Guillem no estaba seguro de que tan lejos quería llegar su compañera. El digimon quería irse y ellos querían expulsarlo, aquel trato parecía que dejaría contentos a ambas partes.
Como toda respuesta la impmon preparó otra oleada de aire frio. Ahora ya no peleaba para ayudar a nadie; tenía dos motivos propios para  acabar con su oponente: había destruido una zona de alimentos y por tanto era la obligación de cualquier salvaje acabar con él y además… Por fin era ella la cazadora, ya no más huir por su vida, ya no más buscar refugió donde esconderse, había escalado un eslabón en la cadena trófica e iba a sacarle el máximo partido.
Tina expulso su ventisca (Night of Blizzard) pero el koemon consiguió esquivar el impacto directo siendo tan solo congelada su cola, esté aún cegado por la luz, se encaramó hacia las copas altas esperando estar ahí fuera del alcance de los ataques - ¿Qué os he hecho? ¿Qué os hecho? - Repitió asustado mientras lloraba y se sujetaba fuertemente al tronco.
Ante las palabras el chico miró instintivamente hacia la bola de hierro que casi le arranca la cabeza  unos momentos antes. La verdad es que ese mono era tan hipócrita como la mayoría de humanos que había conocido, sobre todo teniendo en cuenta que el primer ataque lo hizo él.
A pesar de sus esfuerzos el aliento de la diablilla no lograba alcanzar a su objetivo, lo único que conseguía era dejar el árbol completamente congelado, el cual empezó a reflejar la luz del cielo. Frustrada observó al tirachinas que se le había caído a su escurridizo adversario y le lanzó una bola de fuego (Night of Fire) fallando por casi más de un metro. Una vez apagada la llama con su hielo volvió a apuntar hacia el arma que le había hecho hacer el ridículo repitiendo el ataque con idénticos resultados - Tina… - Comentó el adolescente a su compañera mientras esta volvía a apagar las llamas antes de provocar un incendio -  Cuando terminemos con esto a ti también te iría bien mejorar tu puntería - Tina se ruborizó mientras desviaba su mirada hacia el refugió del koemon. Por un momento le pareció que se reía de ella pero no pudo asegurarlo.
En las ramas altas, a pesar de la luz reflejada por el hielo, el mono fue recuperando progresivamente la visión y pensó en huir pero observó horrorizado que las ramas de todos los arboles cercanos no estaban en condiciones de soportar su peso, estaba atrapado.

dejarlo morir me parecia que era ir demasiado lejos, si por lo que kudamon le explico de la muerte era preciso, tampoco actuaria a nuestra ventaja que el terminara volviendo a la vida, ya que volveria a ocurrir el mismo problema en otra parte, debiamos hacer algo contra el. Pero por la mirada de tina, sabia que se enojaba cada vez mas y no aceptaria razones, tal vez podiamos usar el miedo que le estaba teniendo koemon en contra de el mismo. despues de analizar un poco todo a pesar de el haber atacado primero una idea se me ocurrio:

-saben podriamos dejarlo ir con una advertencia despues de todo con los conocidos que tenemos en el digimundo, estara vigilado siempre- dije dandole la espalda a koemon, mientras kudamon lo mantenia vigilado muy atentamente, yo aprovechando que no me viera le guiño un ojo a guillem y a tina. me di vuelta unos segundos despues- podriamos dejarte ir pero, si vuelves a hacer lo que le haces los arboles nosotros terminaremos enterandonos

-creeme que cuando nos encontremos de nuevo la punteria mia o de tina no fallara- dijo kudamon con una voz un poquito espeluznante- y creeme no quieres volver a encontrarnos de nuevo en la misma situacion ¿o si?- le pregunta kudamon mientras una sonrisa algo tenebrosa aparecia en mis labios esperando la reaccion de koemon. si es que esto no funcionaba dejaria que tina hiciera lo que quisiera con el. pero mejor intentar las cosas de una manera algo diferente

Por un momento ni Tina ni Guillem comprendieron a que se refería Yuzu, ambas parejas habían dejado claro que eran nuevas en el Digimundo. En ese momento la chica les guiñó el ojo y adoptó una expresó siniestra hacia el koemon, el farol quedó más claro por lo segundo que por lo primero; no es que lo hicieran mal, simplemente esa actitud era demasiado diferente a la demostrada hasta ahora.
- ¡Sí! ¡De acuerdo! ¡No volveré a quebrar ni una rama! Por favor… - El koemon no podía creerse su suerte, estaba seguro que iba a morir y ahora un resplandor de esperanza le daba posibilidades de vivir.
Sin embargo eso no iba ocurrir, Gullem lo sabía. La sangre de Tina ya se había encendido y ella, a pesar de lo que pudiese parecer, era una bestia salvaje; instintiva y cruel. No renunciaría a su presa solo por los escrúpulos de una preadolescente.
Sin embargó la impmon pareció dudar un momento, como valorando las opciones; no podían alcanzar el mono pero aun así lo tenían acorralado, solo sería cuestión de esperar. Aunque pensándolo bien… - ¡Baja de ahí, maldito gamberro con suerte! Tienes suerte de que estos tres sean unos buenazos.
El koemon seguía sin creérselo, y el adolescente aún menos. Llorando, el primate bajó del árbol todavía temblando de miedo, una vez en el suelo inmediatamente se arrodilló delante Yuzu - Gra… Gracias… ¡Muchísimas gracias! - Con los ojos todavía húmedos dirigió a tods una mirada de agradecimiento antes de disponerse a irse.
- ¡Eh! ¿A dónde te crees que vas? - Para la sorpresa de Guillem el koemon se giró hacia Tina en vez de salir corriendo, aunque eso sí, se podía ver que estaba aterrado - ¿No te olvidas de algo? - La diablilla había recogido el tirachinas y se lo ofrecía al mono el cual se quedó momentáneamente paralizado sin saber que hacer pero finalmente decidió acercarse y recoger su arma pero cuando las manos del simio se cerraban encima de esta Tina la dejo caer e inmovilizando los brazos del mono le eso. Justo entonces el koemon empezó a forcejear.
Por unos momentos Guillem no comprendió bien la situación pero de repente comprendo lo que ocurría, abalanzándose sobre su compañera la levantó por la cola, separándola del digimon que empezó a sujetarse el cuello desesperado: su garganta estaba obstruida por un bloque de hielo (Night of Blizzard). Dejando ir a Tina el chico trató de hacérselo escupir pero al presionar sobre su tórax comprendió que todo era inútil: sus pulmones se habían llenado de hielo. Miró a los ojos al primate que estaba desesperado, lo único que pudo hacer fue agachar la cabeza mientras este moría ahogado.
Tras unos segundos que se hicieron eternos el koemon empezó a descomponerse en datos que fueron atraídos hacia Tina y Kudamon, un huevo se formó a partir de los datos que no fueron absorbidos.
Se hizo el silencio…

kudamon y yo quedamos impactadas ante la actitud que estaba teniendo tina. sabiamos que algo andaba mal en cuanto la vimos ofrecer el tirachinas, algo se sentia raro en ella, no sabia que era pero era una terrible sensacion en ese momento. cosa que termino haciendose realidad cuando vi como ella le congelaba por dentro. no sabia que hacer en ese momento solo miraba como koemon se retorcia en su lugar, hasta desaparecer. aprete los puños molesta por las acciones de tina, mientras me acercaba a la especie de huevo. me recordaba un poco a como habia nacido kudamon, de uno parecido, me acerque con cuidado sintiendo algo de lastima, por el koemon. que habia desaparecido, de hecho kudamon intentaba un poco no absorber los datos del pobre koemon. pero no era algo que estuviera en su control:

-supongo que esto es lo que queda de koemon ahora mismo.- dije mientras levantaba el huevo

-asi es cuando un digimon muere un huevo sale de sus datos- dice kudamon mientras se enredaba a traves de mi cuello en una especie de abrazo, aunque quedando mas estilo bufanda que otra cosa

-no crees que fue un poco bajo ese ataque a traicion hacia koemon- pregunte sin mirar a tina- en una pelea es casi como que te claven un puñal en la espalda. funciona para hacer pero no para que te lo hagan a ti- dije finalmente mirando hacia tina un poco mas solemnemente

-¿que hacemos con el?- pregunto kudamon mientras miraba a guillem y despues cambiaba mirando hacia su digicompañera

Tina esperó tranquilamente que Yuzu dejara de regañarla, una vez está terminó dio un suspiro y trató de mirarla a los ojos pero la chico no se dignó a mirarla - Sí, lo sé. Mira, no tengo ni idea de cómo rayos crees que funciona el mundo pero en el bosque se actúa así: se aprovechan las oportunidades, se tienden trampas, si se puede se eliminan las amenazas antes de que lo sean, no se corren riesgos inútiles, no se cofia en los enemigos bajo ninguna condición… ¿Sabes lo que les ocurre a los que no lo hacen? ¿Quieres saberlo? - Lianas clavándose en su cuerpo, garras desgarrando su carne, dientes despedazándola… El cuerpo de la diablilla se estremeció con esos recuerdos pero continuó - ¡Mueren! Eso es lo que les pasa. Ahora dime ¿Qué diferencia hubiese habido si le hubiera matado arriba del árbol? ¿Qué hubiese cambiado? ¿Es por su promesa? ¡Como si una promesa hecha bajo amenaza tuviera alguna validez! Que esa es otra ¿De verdad era ese tu plan? ¿Un farol?  Puede que el miedo pudiese funcionar al principió pero ¿Y cuándo se le pasase? Los faroles solo son efectivos a corto plazo, una vez hubiese visto que nadie le vigilaba se hubiese dado cuenta ¿Y entonces qué? ¿Irías tú a buscarlo y a repetir el susto? - La diablilla había empezado seria pero a medida que hablaba su tono fue en aumento hasta que empezó a gritar - ¿Si le hubiese arrancado la cabeza a Guillem con su primer tiro hubieses dicho algo porqué lo matara? ¿Si nuestros primeros ataques no lo hubieran desarmado crees que nos hubiéramos enfrentado a un mero cobarde? ¡Nuestros ataques no le alcanzaban y los suyos a nosotros sí! ¡Y te recuerdo que partía arboles con un tiro! ¿Fue un ataque a traición? ¡Por supuesto maldita sea! ¿O crees que para cazar hay que informar antes a la presa? ¡Piensa lo que quieras sobre mi pero cambia esa actitud o tu o Kudamon acabareis muertas!
Al terminar Tina estaba hiperventilando, creando pequeñas nubes de vaho, sus ojos reflejaban odio.
Guillem por su parte esperó pacientemente que su compañera terminara de gritar, no pensaba meterse en esa discusión - Llevemos el huevo al pueblo de los chuumon, les informaremos que hemos detenido al causante de los destrozos y ellos ya se encargaran que vuelva a causar problemas en cuando renazca.

me quede escuchando toda la explicacion que me daba tina sobre el tema. no queria interrumpirla hasta que terminara, pero poco a poco me daba una idea de las variables de lo que podia responder. se notaba que estaba bastante enojada por lo que habia dicho, despues de unos segundos termine respirando hondo, mientras ponia una mano en mi cabeza. no es que estuviera en desacuerdo, pero algo pensaba que fallaba en lo que decia aunque no sabia como es que se lo podria llegar a tomar ella lo que estaba a punto de decir:

-yo nunca dije que conociera el digimundo ni el bosque, ni sus leyes, pero se me ocurrio una posibilidad mientras hablabamos con el koemon, si lo derrotamos. los digimons ¿tienen memoria despues de revivir?- pregunte mirando a kudamon, imaginandome la respuesta. despues de unos segundos kudamon termino asintiendo asi que volvi a hablar- ¿que pasa si cuando recupera su estado rockie sediento de venganza comienza a entrenar, evoluciona como lo hizo kudamon y vos misma se vuelve mas fuerte? me vino la pregunta ¿podria volver aqui para intentar encontrarnos?- dije- ¿si no estamos en este lugar cuando vuelva con quien podria llegar a desquitarse?. en cambio huye sigue intentando salirse con la suya ¿cual es la posibilidad de que se encuentre con digimons, que no aceptaran lo que haga como tu que si pueden defenderse? ellos no podrian quedarse de brazos cruzados, y podrian tomar represalia propia- dije pensativa- aun asi tambien es solo teoria, ¿cual es la probabilidad que cuando regrese sienta esa sed de venganza? ¿cual es la probabilidad que pasaramos a un digimon malo a algo peor?. igual todo es teoria despues de todo no se mucho del digimundo

-aunque no discutimos que tambien de las posibilidades de que terminaran muertos- dice kudamon de acuerdo ante lo ultimo que decia tina- nosotros podemos fallar si. pero seguiremos peleando hasta lograr darle- dice kudamon decidida-no dejare que nadie asi dañe a nuestros compañeros- dice kudamon, finalmente- ¿es seguro llevarlo con los chuumon?-dijo kudamon mirando hacia el huevo

off: perdon si hay alguna discordancia