Un lugar, un destino, una historia...[Libre]

El día era cálido, de eso no había niguna duda. El sol estaba en lo más alto del cielo, por lo que podía causar graves quemaduras en la piel, pero algo extraño iba a pasar ese día. Las blancas y tranquilas nubes comenzaban a moverse como si una piedra hubiese caido en el agua, produciéndose ondas en el cielo. Poco tiempo después, la zona donde aparecían las ondas comenzó a ponerse de color primero rojo, después azul y, por último, de color morado. Entonces, dos figuras cayeron de, lo que parecía ser un portal que se había formado en el lugar donde estaban las ondas en el cielo. La primera figura era un joven chico de pelo verde con camisa blanca y pantalón corto. La otra figura era una especie de hámster que podía volar gracias a sus orejas.

¡Waahhh!- gritó la figura humana mientras caía al agua que, por cierto, tenía un bello color cristalino.

¡Auch!- dijo la figura con forma de roedor volador que había caído antes, ya que pesaba mucho menos que el muchacho peliverde.

Pasaron unos minutos, cerca de una hora, hasta que las dos figuras se despertaron debido al golpe que se habían llevado en la cabeza. El extraño portal del cielo había desaparecido y el joven peliverde se levantó dolorido.

¿Te encuentras bien Tsukaimon?- preguntó Max acariciando la pequeña cabeza del hámster volador que era de color violeta.

Si, estoy bien Max, ¿qué fue lo que pasó? Estabamos en Digital Inc antes de esto- dijo Tsukaimon sin comprender mientras observaba sus alrededores. Sabían que estaban en una playa. La arena estaba limpia y caliente y alrededor había plantadas firmemente unas palmeras que parecían bastante sanas.

Supongo que... esto es tu mundo, el Mundo Digital y cruzamos accidentalmente un Portal al Digimundo- especuló Max mientras acariciaba su mentón pensante observando atentamente su entorno, el cual no le era para nada familiar, entonces, se encogió de hombros- pero no lo sé a ciencia cierta.

Lo que está claro, Max, es que aqui no parados no haremos nada, debemos encontrar respuestas y una salida de aqui. Devimon puede causar destrozos en tu mundo, Kenku- dijo Tsukaimon preocupado mientras comenzaba a revolotear alrededor de su Tamer Max.

Seguramente habrá Digimons que nos puedan ayudar por aqui cerca, no desesperemos- dijo Max sonriendo de lado mientras comenzaba a caminar siguiendo el sendero de la playa sin detenerse.

Entonces un pequeño Digimon anfibio de color azul se encontró con el Tamer y su Digimon. Max sacó entonces su Digivice morado y negro y comenzó a analizar los datos de aquel pequeño Digimon.

Analizador de Digimons:

habia atravesado el portal digital que estaba dentro del arco torii de aquel templo abandonado en elbosque y tras volar por el ciberespacio acabe cayendo en el agua en el que casi me ahogo por la sorpresa sabia que habia ido a parar a un lugar diferente -desde luego ya no estoy en Japon- dije saliendo del agua, hacia bastante sol y decidi aprovecharlo para secarme -lastima que no me haya traido el bronceador- dije volviendo a ponerme la ropa ya seca, cogi el Digivice  y di una vuelta por la playa contemplando la blanca arena y el azul del mar -que lugar tan extraño, en vez de cocos en las palmeras hay paquetes de galletas- dije pero estaba algo cansado -tengo sueño- dije y me sente vajo la sombra de una palmera a intentar echarme una siesta viendo la playa pero el sol pegaba fuerte -que calor hace ojalas tuviera a mano un helado de queso- dije y me parecio ver un surfista en la playa remontando las olas, como no podia dormir por culpa del sol me quite los zapatos y me tire al agua para refrescarme