Re: ¿Primera vez en el Digimundo? [Libre]

por Taiga & Artaud Sáb Feb 14, 2015 5:29 pm

"Diantres, este mundo y sus reglas tan distintas del mio... Estos seres pueden llegar a tener tanto poder... Si los humanos tuvieran esos poderes, es seguro que algunos los usarían con fines atroces... No me extraña que en este mundo ocurra lo mismo..." Taiga pensaba mientras se acomodaban espalda con espalda los tres protagonistas. Lamentablemente, no podía ocupar demasiado tiempo en pensar, ya que estos seres evidentemente no lo hacían: atacaban. "Seres corrompidos... Probablemente disfruten con el dolor de los demás..."
Mientras tanto, DemiDevimon se preparaba para el combate, pero de otra forma completamente distinta. Normalmente era un digimon tranquilo, pero Taiga ya había notado un extraño dejo de sadismo en el episodio de los Gazimons, y es que en el fondo DemiDevimon disfrutaba de los combates: su sentido de justicia, como pronto entendería Taiga, pasaba por darle a cada uno una cucharada de su propia medicina. "Les gusta hacer sufrir, ahora sufrirán y sabrán lo que se siente". Él era consciente de que no tenía tanto poder, pero este instinto de cuasi justicia lo dominaba en estos momentos.
Pronto los Mushmon y Carlos realizaron los primeros movimientos. DemiDevimon no se quedaría atrás:
- ¡Qué empiece la comedia!
Dijo al tiempo que lanzaba sus Demi Dardos, comenzando con ataques a distancia para retrasar la llegada de los Mushmon al grupo, y para que estos llegaran ya debilitados al momento del combate cuerpo a cuerpo.
Taiga, en cuando escuchó las palabras de DemiDevimon, se volteó a mirarlo con una expresión casi traumática de asombro. "¿Qué clase de abominable comedia es esta?" Pero rápidamente se volteó hacia los dos Mushmon que ya estaba prácticamente sobre ella, dándole impulsívamente la patada más fuerte que pudo a uno de ellos. El otro intentó sujetarla por los brazos, y ella se tiró hacia atrás, dejándose caer al suelo encima del Mushmon que la agarraba. Tenía que ser lo más rápida posible, así que se giró en el suelo para quitarse de encima del Mushmon, dobló sus rodillas, encogiendo sus piernas sobre su pecho, y las estiró tomando impulso para volver a patear al primer Mushmon. No estaba dispuesta a esperar a que se levantaran, no podía correr ese riesgo. Pero, naturalmente, estaba en desventaja, ya que eran dos contra uno. Rapidamente el segundo Mushmon la volvió a tomar por las manos en cuanto ella cayó nuevamente al suelo.
- Torpe humana, no tienes poderes como nosotros, ¿en serio crees que puedes hacernos daño con esos golpes débiles?
Le dijo mientras pisaba su cabeza contra el suelo y sujetaba con fuerza sus muñecas. El otro Mushmon se levantó del suelo y la sujetó por las piernas, a pesar de los intentos de Taiga de volver a patearlo. Estaba casi completamente inmovilizada, y desde el suelo pudo ver cómo Growlmon les lanzaba unas sogas a los Mushmon, al grito de
- ¡Átenla y tráiganmela!

Mientras todo esto había ocurrido, DemiDevimon, que no había tenido tiempo de voltear a ver qué ocurría con Taiga porque tenía que lidiar con tres Mushmon, continuaba atacando a distancia.
- ¡Primer acto!
Gritó mientras lanzaba sus jeringas a los contrincantes. Aun así, aunque algo debilitados, pronto el primer Mushmon logró acercarse lo suficiente como para atacarlo cuerpo a cuerpo.
- ¡Segundo acto!
Gritó mientras utilizaba su técnica Aleteo de Murciélago para cortar al Mushmon con sus filosas alas traseras. Fue en ese momento cuando descuidó a los otros dos, que, aún lejos, lanzaron sus hongos explosivos hacia él...

Off Rol:

por Rony & Carlos Sáb Feb 14, 2015 8:47 pm

La batalla se volvía cada vez más complicada, puesto a ellos les faltaba un luchador, además de que Taiga no tenía experiencia en batallas ni sabía algún arte marcial que fuera de verdadera ayuda; mientras que sus enemigos les ganaban en número y poseían un Digimon champion que aún no había entrado en escena. Sin tiempo para pensar en aquella dificultad, Carlos continua embistiendo a uno y otro Mushmon, con su forma técnica “Spiral Edge”, logrando noquear a uno y lastimar a otros, evitando en el paso algunos golpes y hongos explosivos…pero no a todos. Un Mushmon con suerte o puntería, logran hacer impactar uno de sus hongos explosivos a un costado del camino por donde justo pasaba Carlos, sacándolo de su forma esférica de un golpe y haciendo que golpe de lleno en la tierra – arg! – dice algo adolorido pero con mas que fuerzas para continuar, cosa que demuestra luego de que tres Mushmon cercanos saltan sobre él, tratando de detener lo y atraparlo, pero todo su esfuerzo fue inútil – Water Cure – expulsando hacia el suelo un torrente de agua, que lo impulsa a él y los tres Mushmon, unos metros por el aire. Durante el trayecto vertical, los Mushmon cayeron uno por uno, haciéndose daño dependiente de la altura de su caída. Ya en el aire, Carlos logro tener una rápida y total perspectiva de la batalla, observando como Devimon peleaba con su espíritu encendido, y como a Taiga…bueno a ella no le iba muy bien. Al mismo tiempo que observaba esa escena por unos mili segundos, Carlos se percato de su propia debilidad, no ser buen estratega en batallas en equipo. Decidido a ayudar a ambos compañeros, en especial a Taiga, Carlos realiza otro Water Cure, pero esta vez usándolo para impulsarse de manera perpendicular, asía uno de los Mushmon que estaban capturando a Taiga. Combinando su Water Cure con su Spiral Edge, Carlos lleno con gran brutalidad hacia uno de esos Mushmon, dejándolo fuera de combate al instante, pero incapaz físicamente de detener su avance en forma de Rueda, Carlos tuvo que dejar a Taiga sola con el hongo restante. En esta batalla no podían desperdiciar ni un poco de energía, sabiendo perfectamente ese hecho, Carlos empezó a correr en su forma esférica y a toda velocidad, alrededor del campo de batalla, levantando gran cantidad de tierra, suficiente para crear una nube de polvo que dificultara la visión de todos los luchadores. Esto podría traer desventaja a ambos, pero considerando que los más numerosos eran sus enemigos, habría mayores posibilidades de que sus amigos le dieran a un Mushmon, permitiendo igualar las cosas para cuando la nube de polvo se dispersara – ¡Demi D! – Refiriéndose a DemiDevimon – ¡trata de debilitar a todos los que puedas con tus dardos, solo usa otro ataque si la victoria es clara! – tratando de compensar el falta de un verdadero trabajo en equipo. La idea sería debilitar a todos los Mushmon posibles, a si gastarían menos energía para derrotar los y tendrían más fuerzas para hacer frente a la verdadera amenaza.

por Taiga & Artaud Sáb Feb 14, 2015 9:12 pm

Cuando Carlos liberó a Taiga del Mushmon que sujetaba sus manos, este ya las había amarrado. Sin embargo, aún tenía sus pies libres. Intentó rodar hacia un costado, torciendo las manos del otro Mushmon y liberándose. Se esforzó por ponerse de pie en seguida, y pronto la nube de tierra cubrió todo. DemiDevimon aprovechó para levantarse del suelo, ya que los hongos explosivos le habían dado. Al escuchar las ordenes de Carlos, no se detuvo a pensar, puesto que todavía no formaba un equipo muy sólido con su tamer y no podía quedarse a esperar las ordenes de ella. Lanzó sus Demi Dardos en la dirección donde creyó que estaban los Mushmon que le habían lanzado los hongos. Luego, se giró hacia donde creía que estaba el otro Mushmon al que había atacado con sus alas, y avanzó al tanteo. Taiga, mientras, se había puesto de pie y retrocedió dispuesta a pegarle a cualquier cuerpo que se le cruzara. Lamentablemente, lo primero que tocó fue a DemiDevimon, que sin querer avanzaba hacia ella, girando sus puños atados y cerrados y dándole una trompada.
- ¡Agh!
Se quejó DemiDevimon.
- ¡Ay no! ¡Lo siento!
Se lamentó Taiga arrodillandose al tanteo para ayudarlo a levantarse. Entonces, DemiDevimon tuvo la audacia de utilizar sus filosas alas pequeñas para cortar las sogas que mantenían atadas las muñecas de Taiga.
- Excelente, ahora vamos por ellos.
- Será un placer.
Pronto se ubicaron nuevamente espalda con espalda, y DemiDevimon comenzó a lanzar sus Demi Dardos hacia donde suponía que estarían los Mushmon que los habían atacado a él y a Taiga. A medida que DemiDevimon se giraba para redireccioar su ataque, Taiga se giraba, manteniéndose pegada a la espalda de su compaeñero, y estando atenta a cualquier Mushmon que quisiera atacarlos cuerpo a cuerpo.
- ¡Cuidado Carlos!
Dijo DemiDevimon, con la esperanza de que eso mantuviera alerta al digimon rana y así pueda esquivar cualquier jeringa que sin querer vaya dirigida a él.

por Rony & Carlos Sáb Feb 14, 2015 10:06 pm

El plan de Carlos parecía funcionar, el enemigo quedo confundido por la inesperada movida de la densa nube de polvo, y al parecer DemiDevimon logro seguir sus órdenes a la perfección, aunque sin mucha precisión, puesto una de las jeringas le pasa por los pelos a Carlos – eso estuvo cerca- dice. Luego de haber creado la nube de polvo el efecto de rodada de su técnica finalizo, por lo que volvió a su forma normal, cosa que venía bien puesto la velocidad que tenía en la forma redonda podría haber dispersado la nube antes de tiempo. Aunque tarde, Demidevimon advirtió a Carlos para que tuviera cuidado, por lo que ya no podía estar enojado con él, aunque si algo resentido, pero anda que no desapareciera pronto.

Mientras Demidevimon se ocupaba de intentar disminuir la energías del enemigo, Carlos andaba con rapidez y sigilo, además de cuidado por las jeringas; por la nube, olfateando el aroma penetrante de los hongos andantes. Actuando con sus instintos cazadores, desarrollados y mejorados durante su vida como Digimon salvaje en el pantano digital; Carlos logra alcanzar a dos de sus enemigos, uno había sido golpeado por una de las jeringas de Devimon, por lo que no fue difícil dejarlo fuera de combate con un buen zarpazo y luego un golpe en el estómago; por otro lado el segundo, que estaba asistiendo al que primero en cuanto vio que tenía una jeringa clavada en la cabeza; fue empujado por la rana para separar los de su amigo por unos minutos para neutralizarlo, luego con un Water Cure, fue lanzado lejos de la nube. En ese momento otro Mushmon que estaba cerca supone que la sombra que ve es un enemigo y se lanza a atraparlo, logando apresar en sus brazos a Carlos, pero por suerte los Gizamon tiene una piel húmeda, por lo que le fue fácil deslizarse de sus abrazo engañoso. El tiempo del escape solo le daría unos minutos para contra atacar antes de que su enemigo le mande un puñetazo, por suerte Devimon logro ayudar con otra jeringa que le dio justo en medio de la espalda del Mushmon, permitiendo que Carlos le diera una potente Frog Kick desde abajo, que mando a volar al hongo antes de que el golpe con el suelo le dejara inconsciente –Ya van cuatro – dice en voz baja para sí mismo, antes de continuar con su casería entre las sombras…aunque la nube ya estaba empezando a dar señales de su muerte, volviéndose un poco menos espesa. Con los cuatro enemigos eliminados por Carlos, junto al que elimino Demidevimon antes de la nube con su ataque de alas, dejaban un total de cinco Mushmon faltantes.

por Taiga & Artaud Dom Feb 15, 2015 7:34 pm

La niebla se dispersaba, y DemiDevimon comenzó a ver mejor el panorama. Quedaban cinco Mushmon, pero se notaba que estaban bastante desorientados. Se preparó para terminar con ellos, pero sintió que estaba débil: ya había lanzado su ataque de jeringas varias veces, y no estaba muy acostumbrado a combatir tan seguido, siendo que llevaba ya dos combates en el día. Decidió utilizar algo que le costara menos energía. Se despegó de Taiga, y se dirigió directamente a uno de los Mushmon, que caminaba desorientado aún. Llegó a él y lo tomó con sus patas de los costados de su cabeza, quedando ambos mirándose a los ojos, y sin perder el tiempo utilizó su técnica Susurro del Diablo. Para cuando el Mushmon se dió cuenta de lo que ocurría, ya tenía encima los hipnóticos ojos de DemiDevimon, y sin poder controlarse, perdió estabilidad y cayó al suelo, quedando totalmente dormido. DemiDevimon, con cierta gracia, se paró sobre el Mushmon dormido, y poniendo una de sus alas delante de su cuerpo, y levantando la otra, se inclinó en una especie de reverencia, diciendo
- Tercer acto.
Dos Mushmon habían presenciado el final de esta escena, y se dirigieron a él corriendo para agarrarlo. Apenas terminó de decir eso, tuvo que saltar hacia arriba y alejarse volando para que los Mushmon no lo atraparan. Taiga había observado lo ocurrido también, y corrió hacia uno de los dos Mushmon, saltando cerca de él para darle una patada de modo que el Mushmon fuera golpeado y empujado hasta caer al suelo. Entonces el segundo Mushmon fue por Taiga, viendo que el murciénago estaba fuera de su alcance. La tomó por atrás, y DemiDevimon, viendo eso, regresó por el Mushmon, posándose entre él y Taiga, y dirigiendo nuevamente sus ojos hipnóticos hacia el Mushmon, que ya lo había mirado por la sorpresa de que regresara desde arriba y se le apareciera delante tan de repente. Pronto sus brazos se aflojaron y cayó al suelo, comenzando a roncar sonóramente. El Mushmon al que Taiga había pateado, que vió desde el suelo todo lo ocurrido, gritó para sus compañeros:
- ¡No miren al DemiDevimon!

por Rony & Carlos Lun Feb 16, 2015 8:30 pm

Así como DemiDevimon, Carlos no se detuvo en esta batalla de encuentra y elimina, por lastima la niebla estaba disminuyendo su densidad, por lo que a cada segundo se podían ver con más nitidez algunas figuras, reflejadas en el polvo. Al trió aventurero, solo le quedaban tres Mushmon mas por derrotar, aunque eso no aseguraba su victoria completa, al menos les sacaría un dilema de encima, quizá luego con otra cortina de humo, podrían escapar con el Pegaso digital, si es que él mismo pudiera volver en sí y caminar. Dado un paso a la vez, Carlos se puso a buscar otro adversario, pero debido a drástica disminución de los mismos, era más difícil hallarlos en aquella cortina de polvo. Aunque no hallo ningún otro enemigo, logro encontrar a sus dos compañeros – esto no durara mucho, mejor nos cubrimos las espaldas- refiriéndose a la nube de polvo que en efecto fue eliminada con rapidez por un rápido sacudido de la cola del Growlmon, que había hecho para impulsar el aire y poder ver de una vez que pasaba allí adentro. Ahora sin nada que obstaculizara la vista, todos lograron ver bien la situación, la batalla ahora era de cuatro, contando a Growlmon; contra tres. Mientras Carlos, Taiga y Demidemivmon, se habían mantenido juntos, cubriéndose parcialmente las espaldas, por no saber con anterioridad donde estaban los Mushmon faltantes, estos se encontraban todos del mismo lado, en la misma dirección que Growlmon, por lo que les favorecía a nuestros aventureros, puesto podrían dejar a Taiga en la retaguardia, sirviendo más para guiarles y dar indicaciones – prepárense, ahora vendrá lo difícil – reconociendo que lo más probable se a pelear contra el Growlmon junto a los Mushmon que quedaban.

-arggg ¡Malditos ineptos! – gruñe malhumorado, y le da un buen zarpazo al Mushmon que tenía más cerca, volviéndolo una DigiTama, en cuanto golpea con el suelo. Ahora solo quedaban dos Mushmon listos para pelear…o mejor dicho aterrados por la ira de su jefe. Al parecer la batalla con los Mushmon había terminado y pronto empezaría el enfrentamiento contra el dinosaurio dorado, quien deja eso en claro con las palabras – Al final siempre termino arreglando todos los dilemas yo mismo – caminando hacia el grupo de Digimons y la humana. Carlos creía que no podían correr con menos suerte que esa, Demidevimon se veía cansado, seguro porque su cuerpo aún no se acostumbró al trabajo duro de ser un Rookie; además ahora deberían llevar su poder al máximo y sus mentes al límite, para soportar los ataques de un Champion y buscar la manera de detener le.

-Genial – dice con sarcasmo – debemos actuar con cautela y…. – siendo interrumpido por el grito “Exhaust Flame” del Growlmon, antes de que este escupa una gran bola de fuego desde su boca, hacia ellos – cuidado! – saltando sobre sus compañeros para hacer los a un lado y así evitar todos el potente ataque del enemigo. Sumado a la embestida de Carlos, estaba la onda expansiva provocada por la bola de fuego al impactar contra el suelo, por lo cual terminaron un poco más lejos de donde debieron caer, y puede que ello también les haya hecho rodar un poco por el suelo, como le paso a Carlos, que termino separándose del grupo - ¡Spiral Edge! – atacando apenas termina de dar vueltas esperando tomar a su enemigo de sorpresa y darle tiempo a sus aliados para que se recuperen. Por desgracia su ataque es inútil, con una de sus garras, el Growlmon golpea al Gizamon en su forma esférica, haciendo que impacte con fuerza contra la tierra. La única ventaja que tuvo la rana digital, fue que la zona donde termino le daba buena distancia de su enemigo, por lo que no sería rematado con algún ataque cuerpo a cuerpo; y además su forma esférica logro distribuir la fuerza del impacto por todo su cuerpo, evitando que muriera como el Mushmon, pero le dejo bastante herido de todas formas.

Off: unos users harán un tema libre sobre un joya perdida ¿te apuntas?

por Taiga & Artaud Mar Feb 17, 2015 5:18 pm

Taiga y DemiDevimon se encontraban alejados de la acción. DemiDevimon no quería cargar a Carlos con todo el combate, aunque sabía que con lo cansado que estaba no conseguiría mucho con ese Growlmon. Taiga no pensaba en otra cosa que en cómo escapar. No tenía ningunas intenciones de continuar ese combate, notaba la respiración agitada de su compañero digimon, y veía las heridas superficiales que este tenía. Pensó que Carlos podría generar una nube de tierra como la que había generado antes, y así huirían sin que aquel dinosaurio los viera. Al ver caer a Carlos, Taiga le susurró a DemiDevimon
- Tenemos que huir, estás cansado, no podremos contra él, y tenemos que encontrar a Rony... Intenta acercarte a Carlos y decirle que haga otra nube de polvo para poder huir sin ser vistos...
- Pero, ¿y Pegasusmon?
- No es nuestro problema, haz lo que digo si no quieres terminar muerto...
DemiDevimon obedeció, aunque no quería dejar allí al Pegasusmon. Cuando se iba a acercar a Carlos, el Growlmon le lanzó su Flama Extenuante, por lo que rápidamente debió esquivar ese ataque. DemiDevimon tenía, para esquivar, la ventaja de que podía volar, por lo que pudo esquivar tres veces (aunque la última por poco) el ataque de fuego del digimon dinosaurio. En cuanto se acercó a Carlos, le transmitió el mensaje por lo bajo:
- Dice Taiga que no cree que podamos contra él, cree que lo mejor sería que intentaras hacer otra nube de tierra para poder huir...
La expresión de resignación del murciélago lo delataba: no le gustaba nada tener que ejecutar ese plan, pero veía que no quedaba otra opción. Además, Rony aún no había aparecido, tal vez estaba en problemas, y ellos tres ahí perdiendo el tiempo con estos digimons mientras Rony estaba sólo quién sabe dónde... Rápidamente agregó:
- Además, tenemos que ir a buscar a Rony, él está sólo, si está en problemas, debe estar pasando peor que nosotros que al menos somos tres...
Mientras, el Growlmon, que no se preocuparía por una humana, se acercaba a los dos digimons y preparaba otra bola de fuego en su boca...

Off Rol:

por Rony & Carlos Jue Feb 19, 2015 2:14 pm

El cuerpo de Carlos estaba muy herido por el ultimo ataque que recibió, por lo que no se molestaba en moverse del suelo donde estaba tumbado, mirando con fervor a su oponente. Realmente le molestaba ser derrotado, nunca fue un buen perdedor contra quien consideraba un rival o enemigo, pero él ya estaba por llegar a su límite y no había nada que pudiera hacer para vencer a aquel Digimon prehistórico. Por el golpe le fue difícil tener una buena noción del tiempo, por lo que para su cerebro fue case instantáneo la llegada de su compañero alado, en busca de su ayuda para una estrategia de retirada. El plan era simple, pero Carlos sabía que no funcionaria, este Digimon era muy fuerte, solo bastaría con unos movimientos de su cola para dispersar la distracción, si es que no golpeaba antes a Carlos mientras estaba como rueda, puesto con sus heridas ira mucho más lento; además de que antes uso la gravedad para ganar potencia, pero si intentaba el mismo truco era claro que le comerían en el aire….pero bueno, no tenía otro plan en mente tampoco, puede que al menos lograra ganar tiempo para que Taiga y Demidevimon escaparan, eso fue lo único que logro dar le fuerzas para ir poniéndose de pie, con algunos tambaleos. Por desgracia el tiempo estaba en su contra, puesto su enemigo le atacaría en cuestión de segundos, tiempo suficiente para evitar que Gizamon empezara con su estrategia.

Pasando con rapidez por al lado de Taiga, como si fuera una fuerte brisa; llegando hasta Growlmon si ser detectado por sus ojos, puesto este estaba muy concentrado con sus dos pequeñas presas. Un puño cargado de Digisoul Naranja golpea con fuerte, desde abajo, la quijada del Dinosaurio prehistórico, ganando impulso con un salto anterior. Apenas se logra oír la sorpresa del Dinosaurio y el dolor, antes de que la explosión del colapso de su bola de fuego, se llevara a cabo en su boca, justo antes de que se tumbara de espaldas, dando más tiempo a los aventureros y a su miembro faltante que había llegado justo a tiempo – mejor ni te levantes – le dice como amenaza al Growlmon, el cual en realidad no le oye bien por estar aún algo aturdido.

-Rony…. Maldito deja de hacerte el héroe!- pareciendo al comienzo un encuentro acogedor y grato, pero estallando rápidamente en una bienvenida llena de furia y frustración.

-¡deberías estar más agradecido acabo de salvarte la vida! – reaccionando de igual manera ante el tono de su compañero.

-¡no vengas con esas excusas, es tu culpa que todo esto pasara en primer lugar! – terminando ambos por enfrentar miradas de un odio cortante.

-¡arg! Maldito….maldito humano entrometido!!! – levantándose de golpe detrás de Rony, listo para seguir peleando, pero solo logra recibir otro puñetazo con Digisoul, en el estómago, que dejo al descubierto, debiendo soltar todo el aire por completo. Habiendo descargado toda esa ira reciente en el Growlmon, Rony prosigue rápidamente a cargar DigiSoul en su digivice, potenciando el ataque de Carlos, posiblemente el último.

-¡¡Water Cure!! – sin necesidad de moverse mucho, Carlos gasta sus últimas fuerzas en este ataque potenciado, apuntando a la ahora, abierta bocaza de su enemigo. No le causó daño físico, solo provoco que retrocediera de golpe y terminará tosiendo al final de la táctica, puesto ese ataque casi le ahogaba en plena tierra firme.

Por otro lado, ajenos a la batalla de su jefe, los Mushmon restantes solo se dispusieron a moverse con sigilo hasta Taiga, mandándose de golpe a atrapar por la espalda – ¡¡ya eres nuestra!! – dice de forma maliciosa. Pero entonces de la tierra, justo debajo de ellos, salen dos Gazimons, golpeando a ambos Mushmon con sus filosas garras. Un tercer Gazzimon, el líder de estos, sale de otro hoyo que aparece cerca de Rony – ya está.

-Perfecto, muchas gracias.

-¿Gazimons? ¿Que se supone que pas….haaaa!- siendo interrumpido de golpe por un movimiento del terreno donde estaba, el cual se hunde varios metros, arrastrando con el al Dinosaurio dorado. Prácticamente al mismo tiempo que el polvo levantado se dispersas, de los bordes de aquel hoyo salen los restantes Gazimons, quienes se colocan sus rostros en el borde del mismo, y aprovechando la confusión de su enemigo, y siguiendo la orden de su líder, todos efectúan su técnica de gas venenoso, inundando con este el hoyo y provocando la derrota por mal estado de salud de su contrincante.

-genial! Ustedes si saben trabajar en equipo – dice sorprendido, echando una mirada dentro del hoyo para ver al Growlmon recostado en un rincón quejándose de un fuerte dolor de estómago.

-¡espera!- interrumpe molesto – ¡ahora trabajamos con estos conejos de feria! – provocando cierta molestia en los Gazimons, pero sin actuar por orden de su líder.

-tranquilo Carlos, son amigos ahora – para calmar a su compañero- les destruimos su hogar, aun si este molestaba a otros, era su hogar. Por lo que logre convencer los de dejar les ayudar en su búsqueda de uno nuevo, así nos aseguraremos de que vivan en paz en un lugar donde no puedan molestar a nadie- le explica, pero consiguiendo únicamente un resoplido de enojo y molestia, aunque muy muy muy en el fondo agradecido por ser salvado.

por Taiga & Artaud Jue Feb 19, 2015 5:47 pm

- ¡Rony!
Exclamó Taiga por la sorpresa y el alivio de verlo. Pero pronto vió a ambos lados los Mushmon que regresaban por ella. ¿Cómo no los había visto antes? Pronto se abalanzaron sobre ella, interumpidos por el repentino ataque de los Gazimons.
- Pero qué...
Taiga no entendía nada. De inmediato dirigió su mirada a Rony, que ya prácticamente tenía derrotado al Growlmon. La batalla se dió vuelta en pocos segundos, y sin que Taiga ni DemiDevimon pudieran hacer nada, esta finalizó. En parte se sintieron algo inútiles, pero también se alegraban de que al fin se hubiera terminado, especialente Taiga, que no quería seguir demorando su retorno a su casa. Antes que nada, al ver que la batalla estaba resuelta, Taiga se dirigió hacia su compañero Digimon.
- ¡DemiDevimon, ¿estás bien?!
- Sí, no te preocupes.
Dijo él, volando hacia ella. Luego, la pregunta que les surgía a ambos era por qué esos Gazimons estaban ayudándolos, pero Rony no tardó en explicar la situación. Entonces, ambos se dirigieron a Rony, con dos planteamientos distintos casi expuestos a la misma vez:
- ¿Cómo haces eso? De golpear a los digimons y que les afecte, tus golpes no son como los míos, ¿qué era eso que tenías en tu mano?
- Tenemos que ayudar a Pegasusmon a recuperarse, se ve bastante mal...

por Rony & Carlos Jue Feb 19, 2015 10:37 pm

Una vez terminada la batalla y las palabras, Rony solo se acercó a Carlos para meter lo dentro de su Digivice, apuntándole con la cámara en la parte trasera del mismo; cosa que pueda descansar de sus heridas en el interior. Normalmente él se quejaría por tener que estar atrapado allí dentro, pero aceptaba que era el mejor lugar para descansar en paz y tranquilidad. La acción de meter lo alli no solo involucraba apuntar lo y listo, sino que era más vistoso, puesto el Digimon se volvía varios cuadrados, los cuales se achicaban en el haz de luz leve que salía de la cámara, a medida que estos cuadrados se acercaban a la lente de la cámara, una vez finalizada la transferencia la pantalla mostraba la imagen de Carlos.

-¿estás bien allí?- algo preocupado por el estado de su compañero – hiciste un gran trabajo, manteniendo con vida a nuestros amigos – dice como alago, puesto sabia lo importante que era para su Digimon recibir su aceptación por sus actos, en especial si era por ayudar a sus amigos.

-estoy bien, solo hice mi trabajo – dice feliz y algo apenado, pero con un tono algo indiferente para disimular eso, puesto no le agradaba demostrar sus emociones ni nada de esas cosas. Luego de que esto terminara fue que Taiga y DemiDevimon le bombardearon con preguntas y sugerencias.

-¿¡he?!- algo sorprendido al inicio, pero por apenas unos mili segundos – claro, primero ayudemos a ese Pegasomon – mirando primero a Digimon en el suelo, y luego echando una mirada a los Gazimon, que no tardaron en ayudar a Rony, a cargar al lastimado Digimon hasta el interior de su cabaña, para dejar lo en su cama, mientras otros dos Gazimon se fueron al pueblo más cercano para buscar un doctor y una figura de ley para que se llevara a Growlmon y a los Mushmon, cosa que no volvieran a causar problemas. Una vez dejado el caballo alado en un lugar cómodo y seguro, Rony se dispuso a continuar la conversación con Taiga – se llama DigiSoul, aquellos tamer con mi tipo de Digivice, pueden usar la DigiSoul para pelear contra Digimons mano a mano o potenciar la fuerza de nuestros compañeros digitales – le termina de aclarar, la verdad no sabía de donde salía exactamente la DigiSoul, para el era una simple representación del alma humana en una forma tangible, algo que podría considerarse normal en el Digimundo – pero ¿ustedes están bien? – preocupado por ellos, en especial por Taiga, puesto ella no tenía poderes ni nada – lamento haber llegado tarde, tuve que haber me apurado cuando en la aldea me dijeron que se marcharon en esta dirección – molesto consigo mismo, echándose la culpa del estado actual de todos, aun si no hubiera podido llegar a tiempo para ayudar a Pegasomon.

por Taiga & Artaud Vie Feb 20, 2015 12:29 am

- Estamos bien, no te preocupes. Me alegra que tú también estés bien. Lo que me preocupa es cómo voy a llegar rápido ahora hasta esa estación de trenes si Pegasusmon apenas puede moverse...
Taiga se sentó contra la pared, algo decepcionada. Empezó a calcular: había llegado al Digimundo aproximádamente al mediodía. Habrían estado una hora o un poco más hasta llegar al pueblo de los Gekomons. Luego entre la batalla con los Gazimon y el descanso en la posada, pudo haberse ido otra hora. Y una hora más entre el camino a la cabaña y la última batalla. Supuso que eran las 3 o las 4 de la tarde. Antes de entrar a su habitación, cuando había llegado a su casa, encontro la nota de su padre que decía que llegaría a la noche. Anochecía más o menos a las 8. Tenía que intentar llegar a su casa en cuatro horas, y los Gekomon habían dicho que volando en Pegasusmon tardaría medio día en llegar a la estación de trenes. Partiendo de eso, y viendo que Pegasusmon ni siquiera podía moverse, se volvía imposible llegar a su casa en cuatro horas. Pensó en buscar la manera de comunicarse con su padre cuando se hiciera de noche, para avisarle que estaba bien y que pronto llegaría. Pero cuando llegó al Digimundo, lo hizo sin su teléfono móvil, el cual quedó sobre su cama. Le quedaba la opción de averiguar si existen teléfonos públicos en el Digimundo. Mientras pensaba en eso, DemiDevimon se acercó a ella.
- Taiga... ¿Estás bien?
Dijo preocupado.
- Sí...
- No te preocupes, encontraremos la forma de que llegues a tu casa...
Dijo, adivinando los pensamientos de su compañera, sabiendo que desde que había llegado, sólo le había preocupado eso. Entonces ella lo miró, y recordó algo que se le había pasado por la cabeza durante el combate, pero que no pudo decir porque ese no era el momento más indicado.
- Dime algo DemiDevimon... ¿Te gusta el teatro?
- Sí, ¿cómo lo sabes?
- Bueno, lo deduje por las cosas que decias durante el combate de recién... Así que en el Digimundo existe el teatro...
- Sólo una vez vi un teatro, cuando era un Pagumon, empecé mi viaje desde la zona inicial por el Digimundo hasta encontrarte, y al pasar por un pueblo de Biyomons, vino un teatro ambulante...
Taiga entendía poco y nada de la anécdota de DemiDevimon. No sabía ni lo que era una zona inicial, ni por qué Pagumon sabía que tenía que encontrarla a ella, ni lo que era un Biyomon, pero lo único que atinó a preguntar fue:
- ¿Un teatro ambulante?
- Sí, era una carreta, de donde salieron algunos digimons, como Shurimons, Yaksamons y Puppetmons, y representaron una obra para los Biyomons, y como yo pasaba por ahí, me quedé a verla, y me gustó mucho...
- Vaya...
Dijo Taiga, nuevamente sin entender parte de la historia. Supuso que eran digimons que ella no conocía los que tenían esos nombres tan estrambóticos terminados en "mon". Pero no quiso detenerse en ello, porque quería decir de una vez aquello que se le había ocurrido durante el combate y no había podido decir.
- Entonces, tengo un apodo para tí.
La expresión de DemiDevimon se iluminó de entusiasmo.
- Dime.
- Bueno, ya que te gusta el teatro... Artaud.
- ¿Artaud? Me gusta... ¿Qué significa?
- Bueno, un hombre llamado Antonin Artaud fue un escritor, director y actor de teatro muy importante y famoso en mi mundo...
- Qué bien, entonces me encantará tener ese apodo.
Dijo el murciélago, entusiasmado.
- ¿Entonces aceptas "Artaud" como apodo? ¿Puedo decirte así?
- ¡Claro!
- ¿Sin importar cuánto evoluciones o cambies de forma?
- Jajaja, claro, desde ahora tomaré por nombre Artaud.
- Excelente.
Dijo Taiga, palmeando a su compañero en señal amistosa. Ahora sólo restaba ver cómo se resolvería el problema de Pegasusmon...

por Rony & Carlos Mar Mar 03, 2015 4:17 am

Rony tampoco tenía una respuesta para consolar a Taiga por el tema de cómo regresar rápido al mundo humano. Realmente no debía ser el mejor primer día en el DIgimundo, puesto parecía que todo se estaba acomodando para que ella nunca logre regresar o al menos no a tiempo. Al no tener ninguna idea en mente, Rony solo pudo soltar unas palabras de apoyo – no te preocupes seguro encontraremos la forma de que regreses a tiempo – con algunas palabras de verdad que tal vez le den más alivio – Además las medicinas Digimons son más como pociones y magia, seguro le dejara como nuevo.

Mientras los demás Gazimons iban recolectando a los Mushmon y atándolos con cuerdas encontrados en la casa del pegaso digital. El jefe Gazimon estaba afuera supervisando al resto, solo el más curioso y vago del grupo se había quedado en la casa, revisando todo los rincones de la misma en busca de algo útil o de valor. Dando le algo de espacio a Taiga y DemiDevimon, Rony se dispuso a echar una mirada por la casa del herido caballo alado, fue entonces que contemplo al Gazimon renegado ingresar a una habitación. El joven esperaba que aquel Digimon no estuviera haciendo nada malicioso, puesto tenia fe en que podían volverse seres buenos…pero comprendía que algunos hábitos se pegan demasiado, motivo por el cual los amigos están para ayudar en cierta medida. Siguiendo al conejo escurridizo, le encuentra intentando robar unos objetos sobre el escritorio de aquella habitación, la cual parecía ser la oficina del Pegaso. Una simple toz de parte de Rony, y una mirada autoritaria, fue todo lo que se necesitó para que el conejo dejara todo donde estaba y se retirara con una disculpa y un tono algo apenado, más que nada por ser atrapado. Rony siguió con la mirada al Gazimon, regresando a echar una mirada a la habitación, solo cuando el Digimon se fue - …eso es…- al descubrir con los ojos un monitor tirado en el suelo. Al acercarse logra ver los demás artefactos alrededor del mismo, sin duda era una computadora aunque algo maltratada por el golpe que debió recibir al caer al suelo, seguramente culpa de los Mushmon y el Growlmon –No parece que nada se haya roto – revisando todas las partes rápido antes de acomodar todo sobre el escritorio y disponerse a prender la - …jeje parece que funciona – alegre al ver como el monitor se encendía. Feliz y sin perder tiempo, Rony camina hacia la puerta de la habitación para llamar a sus amigos y dar le la noticia – ¡Taiga, Demidevimon, vengan! Encontré una computadora- simplificando la noticia solo para luego de unos minutos informar un poco más – Seguro Pegasumon la usaba para su negocio o comunicarse con otros en el Digimundo. No creo que sea de las computadoras de las que te hable, que se encontraban dispersas en el Digimundo, esta parece una computadora normal….aunque de ultima podrías probar si abre una puerta a la Tierra, apuntándole con tu Digivice al monitor…de ultima podrías usar la para mandar un mensaje a tu familia para que no se preocupes – esperando que eso consuele a la joven con su dilema.

por Taiga & Artaud Mar Mar 03, 2015 4:49 pm

Con el tiempo que había tenido Taiga para reflexionar mientras Rony había encontrado la computadora y la armaba, ella estaba volviendo a su forma natural de ser. El viaje al Digimundo la había sacado completamente de sí, por poco no se reconocía a ella misma. Normalmente era una persona calmada, y era difícil sacarla de sus casillas. Esta situación había sido extremádamente extraña, lo suficiente como para desatar en ella emociones visibles e impulsivas que normalmente no tenía. No le gustaba para nada perder el control de las cosas, pero menos de sí misma. Así que respiró profundamente, y en un abrir y cerrar de ojos se sintió ella de nuevo. Otra vez, como de costumbre: ya nada podía sorprenderla, y sería muy difícil volver a hacer que perdiera su porte característico. Se puso de pié, se sacudió la ropa con las manos, y se dirigió a Rony, que la llamaba para intentar hacer de esa computadora algo útil.
- Apuntar con el digivice...
Dijo en voz baja, como repitiéndose las instrucciones a sí misma, mientras pensaba en lo ridículo que parecía todo esto. Sacó el dispositivo de su bolsillo y extendió vagamente el brazo hacia adelante, como si ya no le preocupara tanto regresar a su casa. Artaud sintió el repentino cambio de actitud de su tamer, y se extrañó, acercándose a ver qué ocurría. Nada. El digivice no reaccionó, ni la computadora.
- Nada...
Dijo con tono neutro, como si fuera una obviedad que pasaría esto.
- De todos modos, enviaré un correo...
Taiga sabía que su padre no usaba computadoras, y dado que ella había dejado el teléfono móvil en su casa, no podía llamarlo. Pero ya había pensado en todo eso, y sabía de alguien a quien sí podía enviarle un e-mail sabiendo que lo leería prácticamente al instante.
"Hola, soy Taiga, necesito que me hagas el favor de llamar a mi padre esta noche y decirle que estoy bien, que estoy en la casa de un amigo, pero que me olvidé el teléfono móvil en casa. Cuando regrese le explicaré. Gracias, nos vemos."
Tipeó en la pantalla, y le envió el correo a su tío Hayate, el hermano de su padre. Este era programador, y ella bien sabía que él se pasaba todo el día frente a la computadora. Sabiendo que su padre recibiría el mensaje, ya no tenía más nada de qué preocuparse. No querría pasar la noche en el Digimundo, pero de última, era viernes y al día siguiente no tendría que ir a estudiar. Bueno, en realidad, sabiendo que estaba en un mundo donde las criaturas tenían poderes y habilidades raras, había mucho de qué preocuparse. Pero mantener la calma es lo más importante, pensar en frío puede salvar a uno de cualquier situación, esa era la forma de proceder de Taiga, y ahora que sentía que había recuperado su cabeza, no se sentía preocupada.
- Listo, esto me dará tiempo. Ya no tengo de qué preocuparme... Me quedaré aquí hasta que vengan los médicos a curar a Pegasusmon, y luego buscaré la forma de seguir mi camino. No tengo tanto apuro, pero de todos modos eventualmente tendré que regresar a mi vida en la Tierra...
Explicó a los presentes. Mientras, Artaud, que ya se había aburrido hace rato, andaba posándose hacia abajo en las maderas cruzadas del techo de la cabaña, examinando sus nuevas habilidades de murciélago...

Off-Rol:

por Rony & Carlos Mar Abr 14, 2015 7:49 pm

-Es bueno ori eso. Sería poco divertido si te perdieras las otras maravillas y diversión menos violenta que tiene el Digimundo – Dice Rony una vez Taiga manda el correo y dice unas palabras, demostrando más tranquilidad. Fue una lástima que no sea la computadora que buscaban pero al menos logro servir para algo. Una vez terminado aquel asunto Rony salió de la casa, por un pequeño altercado que tuvieron dos Gazimons, el cual fue resuelto por su líder antes de que él humano lograra comprender de que se trataba todo, pero gracias a ello logro recordar el dilema de la pared rota de la cabaña. No era su responsabilidad ni sentiría culpa por dejar lo todo así, pero la verdad puede que al ayuda que esperaran tardara un poco así que logra organizar a algunos Gazimons y así todos empiezan a improvisar una reparación con la madera que encontraron en la parte trasera de la casa.

-listo, quedo perfecta!- dice una Gazimon una vez todos terminan los toques finales de la reparación.

-…he quedo linda pero… ¿era necesario grabar en la pared la imagen de un Gazimon? – haciendo mención la imagen de un Gazimon que estos Digimons había grabado en la madera con extremo cuidado y dedicación…la verdad Rony no se esperaba que estos Digimons tuvieran esa habilidad con la talla en madera…pero bueno al menos habían colocado una pared sólida para la cabaña.

-pues claro, eso es lo más importante, debía estar de ambos lados – con orgullo y algo de arrogancia.

-…¿ambos lados? – pregunta algo ignorante, pero sin necesidad de que le respondan. En eso mientras admiraban aquel arreglo, llegan tres Digimons, dos eran Garururmons, que por las insignias de los Union Saver en sus collares, eran claramente la ley; y una Angewomon, quien por su solicitud de ver al Pegasumon herido, dio a entender que era la doctora. Sin esperar más tiempo Rony le llevo inmediatamente con Pegasumon en el interior de la cabaña, mientras los dos policías se encargaban de los rufianes atrapados en los hoyos.

Off: no hay drama, solo avisa al staff para que puedas cambiar la apariencia en tu ficha. Te quedo bien la apariencia. Manipula como desees a los NPC, así si quieres pegasumon se recupera en tu post y puede llevarte a donde quieras o emprendes tu camino, como prefieras.
Perdon la tardanza ando con algunos dilemas.

por Taiga & Artaud Mar Abr 14, 2015 9:36 pm

"¿Diversión?", pensó Taiga, pero antes de que pudiera dar una respuesta, Artaud se posó sobre su hombro y dijo:
- ¡Hay muchos lugares del Digimundo que quiero que veas! Además, tienes que ayudarme a buscar un castillo...
- ¿Castillo? ¿De qué estás hablando?
Dijo Taiga sin ninguna intención de comprometerse en tareas estrafalarias.
- Bueno, necesito un castillo para vivir, si no ¿qué clase de vampiro sería?
Por el tono de voz, parecía que Artaud estaba jugando, así que Taiga le siguió la corriente, queriendo escapar rápido de esa extraña salida que había tenido su compañero.
- Seh, como digas...

Al ver que el equipo Gazimon y Rony se ponían en marcha en la tarea de reconstruir la cabaña, Taiga pensó que debería ayudarlos, no porque realmente se sintiera comprometida, sino porque quedarse viendo mientras todos trabajaban la pondría en una posición que le resultaba incluso más incómoda que ir a trabajar con el equipo.
- Vamos...
Le dijo a su compañero en tono neutro, y él entendió de inmediato.

La reparación al menos los distrajo de la aburrida espera por una solución a la situación. Entonces, la ayuda llegó. Taiga examinó con la vista a los nuevos digimons, mientras Artaud le susurraba los nombres de los mismos. El "ángel" le pareció extraño, de hecho, esbozó mentalmente la teoría de que los ángeles de los que hablaban los humanos podrían estar basados en digimons como ese. Pero no se detuvo demasiado en eso, puesto que le interesaba muy poco. Más llamaron su atención los Garurumons. No podia quitarles los ojos de encima. La razón era que los lobos eran animales que le gustaban en su mundo, y estas criaturas recordaban por su forma a dichos animales. En cuanto uno de los "lobos" se percató de la mirada de Taiga, ella se volteó para evitar preguntas, y se dirigió a la cabaña a ver qué pasaría con el Pegasusmon. Dentro, Angewomon sostenía un pequeño frasco que contenía un líquido amarillo brillante. "¿Será radiactivo? No... A esta altura debería saber que no puedo analizar este mundo según la lógica de mi mundo... Debe ser mágico...", pensó, mientras acompañaba a la voz silenciosa dentro de su cabeza con una evidente expresión sarcástica. El Pegasusmon bebió el contenido del frasco, ayudado por la "doctora". Lentamente, lo ayudaron a ponerse de pie.
- En unos minutos estarás curado...
Dijo aquel ángel. Taiga se volvía a plantear mentalmente si no estaría soñando, por el poco sentido que hallaba a lo que veía. Pronto se retiró la doctora, saludando a quienes quedaban en la cabaña, y escoltada por los Garurumons que llevaban como prisioneros a los "mafiosos" que habían causado todo el desastre. Y efectívamente, a medida que los minutos pasaban, Pegasusmon se sostenía en pié cada vez mejor, recuperaba su fuerza, caminaba, y luego de diez minutos abrió sus alas y las agitó un poco, demostrando que ya estaba mucho mejor.
- Ya estoy mejor... Muchas gracias por lo que hicieron por mí... Estoy en deuda con ustedes, si necesitan algo sólo díganmelo...
- No fue nada...
Respondieron algunos Gazimons en un esbozo de cortesía que aún sonaba algo forzado en ellos, pero al menos intentaban mejorar...
- Ahora que lo menciona... - Dijo Taiga, aprovechando el ofrecimiento del pegaso dorado - Sí, necesito algo...
- Pues dímelo, haré lo que esté a mi alcance.
Dijo con tono servicial.
- Bueno... Necesito llegar hasta la terminal de trenes... Em...
Taiga se esforzó por recordar lo que le había dicho Rony, pero con todo lo que había pasado, ya no recordaba a dónde tenía que ir. Entonces, Artaud demostró nuevamente que era más avispado de lo que parecía:
- Tienes que ir a la estación de Trailmon más cercana para tomar uno hasta la Zona D...
- Vaya... Qué memoria... Eso, eso mismo...
Dijo Taiga sorprendida, y esperó la respuesta del Pegasusmon.
- Mmm... Bueno, conozco una pequeña ciudad donde hay una estación de Trailmons... Está a unas cuantas horas de viaje...
- ¿Cuántas horas?
Preguntó Taiga, ansiosa.
- Bueno, yo llegaría en seis o siete horas, creo... Por tierra el camino es mucho más difícil... Y supongo que quieres que te lleve, ¿no es así?
- Bueno... Sí, eso es lo que necesito.
- De acuerdo, ¿eres tú sola o alguien más? Puedo llevar hasta dos como tú sentados cómodamente en mi espalda.
- De momento somos Artaud y yo... A menos que... ¿Rony, tu también vas?
Dijo ofreciendo compartir el vuelo. A esta altura, tampoco recordaba cuál era el destino de Rony, si también iba a la ciudad, o si aquí se separaban sus caminos...

Off Rol:

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