¿Lograré la tranquilidad que busco o tal vez...? || [Libre - Lleno]

¿Por qué debería engañarme a mí misma? Ya estaba cansada de escuchar los mismos comentarios una y otra vez; "Vaya,su hija siempre saca buenas notas en sus exámenes","deben estar orgullosos de su hija","¿ha decidido ya su hija que estudiar?"... No soporto esa clase de comentarios. Ni soy un genio ni una niña prodigio. Apruebo porque estudio y estudio simplemente por no decepcionar a mis padres. Aunque,a pesar de aquello,había algo que me molestaba muchísimo más y era el hecho de que nadie reconociese los méritos de mi hermana. Ella también es una buena estudiante,¿acaso no merece también ser halagada?

Suspiré profundamente intentando calmar mi mente,al fin y al cabo,ese era el motivo por el que había decidido pasar el día en aquel bosque. Lejos de ruidos molestos provocados por el tráfico,sin tanta contaminación pudiendo respirar aire puro...
-¡Kayla!-exclamó una voz un tanto chillona.
-Oh,casi se me olvidaba.-murmuré sacando la lengua antes de reír. Abrí mi mochila dejando salir a mi compañero-Si me hubiese olvidado de tu presencia bola de pelo,¿te hubieses asfixiado?-sonreí con malicia,nada más allá de ser una simple broma aquellas palabras.
-Me hubiese comido la mochila si fuese necesario para salir.-gruñó mostrando sus diminutos dientes.
-Oh,pero que bonito eres cuando te enfadas.-sonreí sacudiendo su pelaje azul con el único motivo de molestar.

Ahora era el momento de comenzar mi nueva vida y dejar de ser la hija perfecta. Solo quiero ser yo misma y preocuparme por mi compañero. No estaba muy familiarizada con aquel término que escuché hace unos meses: "Tamer". Así que digimon y humanos luchando juntos,codo con codo. Genial,no me imaginaba a mi renacuajo compañero felino luchando contra nadie,o tal vez sí...Puede que logre vencer a sus enemigos a base de ronroneos,pero dudo mucho que eso fuese a suceder. Rezaba por no cruzarme con ningún digimon de nivel alto o con malas intenciones,de ser así,correría por mi vida. Obvio,cogería a mi compañero en brazos y luego saldría corriendo,no soy tan cruel como para dejarlo solo en semejante situación,¿o sí?

-Bueno,ya hemos llegado al lugar Wanyamon.-sonreí admirando la belleza del paisaje.
-Vaya,es increíble.-sonrió del mismo modo mi compañero,saltando de mis brazos hasta el suelo y dando botes por el lugar-Es la primera vez que me sacas de tu cueva.
-Habitación.-rectifiqué.
-Eso mismo,una cueva.-movió la cola victorioso.
-Si tienes alguna queja con mi dormitorio siempre puedes irte.-repliqué alzando la mirada al cielo-¿Serías capaz de vivir lejos?-cuestioné cruzando los brazos y rodando mis azules ojos hasta clavarlos en los suyos.
-¡No bromees!-se quejó-Me gusta tu cueva y no pienso irme. Permaneceré a tu lado.-respondió apartando la mirada,seguramente,avergonzado de decir aquello aunque fuese la pura verdad.

Apoyé mi espalda en el tronco de un árbol y me deslicé por este,dejándome caer hasta quedar sentada en el suelo. Al menos mi compañero se veía bastante feliz correteando de un lado a otro o,mejor dicho,botando. Respiré profundamente,era el momento perfecto para pensar en mi nueva etapa en la vida. Saqué de mi bolsillo el digivice IC y lo contemplé en silencio,como si con aquel gesto fuese a descubrir su funcionamiento al completo. Sin duda alguna tendría que encontrar algún lugar donde orientarme,era técnicamente imposible que fuese la única en la zona en tener un compañero digimon,aunque viviendo tan aislada de la sociedad a causa de mis estudios-por otra parte ya finalizados puesto que no pretendo ir a una universidad-quien sabe. Negué con la cabeza dejado a un lado aquella idea tan disparatada. Sin duda alguna tendría que haber alguien,una persona que sepa decirme lo que necesito saber pero,¿dónde?¿Cómo descifrar si esa persona sería la indicada?¿Y si solo pretendiese manipular mi mente para que mi compañero mostrase un comportamiento malvado en el futuro? Solté todo el aire de mis pulmones muy confusa,pasando ambas manos por mi pelo rosado,despeinando lo y volviendo a peinarlo. Nunca me había sentido tan perdida en la vida. ¿Por qué yo y no mi hermana? Seguro que ella sería capaz de entrenar a su compañero muy bien.

-Wanyamon.-murmuré buscándolo con la mirada-Wanyamon...-volví a llamarlo,poniéndome en pie al no lograr divisarlo mientras guardaba el digivice-¡¡¡Bola de pelo azul!!!-exclamé a los cuatro vientos.
-¡Deja de gritar!-exclamó él.
Alcé la mirada hacia la rama de un árbol. Allí estaba él,intentando comerse una mariposa blanca. Suspiré aliviada,pero fue por ese despiste que mi compañero se aprovechó,saltando así sobre mí. Lo cogí en brazos para que no cayese al suelo,aunque luego lo dejé en el mismo para que siguiese haciendo lo que le apeteciese. Hoy era su día,después de todo,nunca antes había salido de "mi cueva".

Off-rol:

No podía apartar la mirada de mi compañero. Le veía tan feliz,divirtiéndose como si de un niño pequeño se tratase... Era una sensación increíble y muy agradable poder pasar tiempo juntos. Wanyamon se quedó quieto de repente,muy quieto a decir verdad. Me acerqué a él con cierta curiosidad mientras su pelaje se iba erizando poco a poco. Sentía algo que yo no era capaz,pero no me decía el qué era con exactitud.
-No puede ser...-movió sus orejitas-Kayla,creo que debemos irnos de aquí.-me miró,su tono de voz se notaba preocupado.
-¿Por qué deberíamos?-arqueé una ceja.
-Se ha abierto.-murmuró y salió corriendo.
Cuando iba a seguirle escuché un ruido que logró acelerar por completo mi corazón,era algo realmente tenebroso de escuchar,semejante a un rugido pero muy diferente a los que cualquier animal podría emitir. Sacudí por un instante la cabeza,no tenía tiempo para temer a nada,debía ir junto con mi compañero.

Gritaba una y otra vez el nombre de mi pequeña bola peluda pero,tal vez debido a su tamaño,lo había perdido. Apreté las manos con fuerza formando dos puños,¿dónde estaría escondido? Los rugidos no cesaban y mis instintos me guiaban hacia ellos...O simplemente la locura de querer perder la vida ya que era facil deducir que aquel sonido provenía de algo muy grande y,lo más probable,es que no fuese precisamente amistoso. Tras varios metros recorridos llegué a un lado,pero igual que me dejé ver entre los árboles,volví a ocultarme. Coloqué ambas manos sobre mi pecho sintiendo los latidos del corazón. Más rápidos a cada milésima de segundo,más fuertes,incluso podría decir que rompería mis costillas para salir huyendo de allí.
-¿Qué demonios son esas cosas?-logré decir girando unos grados mi cuerpo para ver la escena aún detrás del árbol-Vale,genial,ahora solo necesito encontrar al maldito gato azul y salir de aquí.-murmuré volviendo a mirar la escena y ver a un joven en medio de aquella batalla-Va a morir,va a morir,va a morir...-cerré los ojos con fuerza por un instante ya que no quería ver aquello que mi mente estaba imaginando.
-Dudo mucho que eso suceda.-escuché decir y al alzar la mirada,sobre la rama de un árbol,estaba Wanyamon. Saltó hasta mi cabeza sin dejar de contemplar aquel poder-Algún día...-murmuró,como si sus pensamientos hubieran escapado de su mente en forma de palabras.
-¿Esas cosas gigantes de ahí son digimons?-cuestioné y mi compañero asintió-¿Y tú serás así de grande? Tendré que ahorrar para comprar un castillo si quiero tenerte a mi lado.-bromeé.

La batalla finalizó y,para mi sorpresa,aquel joven no parecía herido en lo más mínimo. Volví a ocultarme tras aquel árbol cogiendo a Wanyamon y mirándolo fijamente.
-Evoluciona.-dije,simple y directamente.
-A veces pienso que tu cabeza está hueca.-respondió.
-¿No puedes hacerlo?-suspiré decepcionada-Pues vaya compañero me ha ido a tocar.-aparté la mirada.
-¡Maldita niña!-gruñó-Cuando alcance mi última etapa te arrepentirás de esta conversación. Es más,voy a ir a dar una paliza a esos dos de allí.
-Tranquilo fiera,no quiero quedarme sin mi compañero digimon.-sonreí-Pero,dime una cosa Wanyamon...¿Puedes digievolucionar o no?
-No tienes el poder suficiente para ello.
-¿Insinúas que es mi culpa?-dije de manera teatral-¿Y cómo se supone que llegaste a esta segunda etapa?
-¿Con el tiempo?-arqueó una ceja.

Aquella conversación cada vez tenía menos sentido. ¿Cómo diantres obtendría ese supuesto poder para que mi compañero lograse hacerse más fuerte? Aunque,más importante aún,¿seguro que necesitaba mi ayuda para ello? Dejé a Wanyamon sobre mi cabeza echando un último vistazo al lago,el cual estaba completamente tranquilo. El joven...Espera...
-¡¿Por qué está así vestido?!-exclamé llevándome con velocidad las manos a la boca y rezando a cualquier cosa que no me hubiese escuchado.
-Muy vestido desde luego no parece estar.-comentó Wanyamon-Y por cierto,te han escuchado.-movió su cola dándome un golpe en la frente-Si no fueses tan escandalosa ahora podríamos habernos ido como si no hubiéramos visto nada. ¿Crees que necesitaré pelear?-cuestionó.
-No,tu cierra esa bocaza y déjame hablar a mí.-dije cortante. Después de ver aquellos digimons sabía que mi pequeña bola de pelo azul no lograría nada,ni si quiera hacerles reír-Ho-Hola...-dije dudosa dejándome ver,saliendo así de mi escondite-Yo...Tú...Tu digimon...-como un bebé,pues igual. No lograba decir una simple frase,solo quería evitar una pelea pero a este paso la provocaría por mi manera tan patética de hablar-Aún estoy en shock. ¿Por qué no has muerto? Deberías estarlo. Quiero decir,¿eres consciente de esos bichos tan grandes que había en el lago?-gesticulé con las manos-Estás vivo.-sonreí.
-Mocosa...-susurró mi compañero evitando soltar una carcajada-Tus frases sin sentido son realmente desagradables de escuchar.
-Te dije que cerrases la boca,felino.-dije dándole un golpe con el dedo índice de mi mano,pero en su defensa,me mordió-¡Ah!¡Qué eso duele!-rodé los ojos hasta el chico,sonriendo de nuevo como si nada hubiese pasado-Creo que debería dejar de hablar e irme ahora...

El mundo humano.... como me repugna, ese olor, esa contaminación ese montón de aparatos que no sirven más que para dar quebraderos de cabeza... No estaría aquí si no fuera por encontrar la tranquilidad que busco haciéndome más fuerte, y ese camino sólo tiene una salida: matar a una persona.

"Ese hombre es el origen de tus desgracias"-dijo una voz en mi cabeza"Por su culpa eres así de débil, no podrás llegar a ser reina de la oscuridad si ese ser sigue vivo"-seguía diciendo-"Una vez que le mates serás poderosa, con un poder y una oscuridad digna de una reina"-seguían las voces en mi cabeza, no sabía si eran mis digispirits o yo misma rememorando las palabras de mi madre, la cual me había hecho venir aquí con ese propósito.
Hace un rato atravesé un portal que me trajo a un parque cercano, intenté dejar mis vestidos góticos atrás, aquí debía ser más discreta por lo que opté por un uniforme militar de color negro con una falda y mi pelo rubio suelto. En un liguero llevaba oculta una daga por si mi poder digital no era suficiente para matarle, pero bueno lo primero era encontrarle, además debía ser cauta pues los humanos no están acostumbrados a ver digimons corretear por ahí como si nada y no debía causar destrozos a no ser que fuera estrictamente necesario.
Caminé entre los árboles con cautela mirando en todas direcciones buscando al hombre objeto de mi venganza, según lo que me había dicho Madre era muy alto y rubio... pero ese lugar estaba desierto, no habia nada ni nadie. Cuando iba a salir a la ciudad escuché un extraño canto proveniente de un árbol cercano, por instinto me transformé en lunamon, el único de mis digispirit al que me podía transformar casi instantáneamente.

-¡HYDRO WATER!-disparé un hidrochorro  a la fuente de los gorjeos y un pájaro muerto cayó del árbol.

-Estúpido, bichejo! Me asustó!-recuperé mi forma humana rápidamente y patée el cadáver frustrada.

Abandoné el parque y me adentré en la ciudad, parece que allí había más gente por lo que empecé a observar atentamente a la gente que me rodeaba en busca de mi víctima.

Desvié la mirada hacia el agua al tener una extraña sensación y,en efecto,allí pude ver un...¿Pez? No,desde luego aquello no era un pez normal. Así que ese humano había llegado aquí junto a su compañero digimon. Ahora me cuadraban las cosas,bueno,sinceramente aún no entendía nada.
-Un segundo.-volví a mirarlo de nuevo para centrarme en mi cuestión-¿Quieres decir que ese pequeño digimon de ahí-dije señalando al lago y,que por cierto,Coelamon tampoco es que fuese diminuto-es el mismo digimon rojo de antes?¿Ese tan grande y que rugía tanto?¿En serio?-puse en duda sus palabras más confusa que en mis exámenes finales-Increíble...
-Oye,tú,pequeño pecezuelo al que alimentaron con demasiado hierro.-gruñó Wanyamon saltando de mi cabeza y parando frente al digimon-¡¿A quién llamas bola de pelos,eh?!-dijo dando saltos frente a él de manera "intimidante"; más bien divertida dado su tamaño-¡Acabaría contigo de un solo golpe si fuese necesario!
-Claro,claro.-reí por lo bajo. Lo llamé y sin mediar palabra saltó hasta estar frente a mí-No hagáis caso.-dije cogiéndolo en brazos con media sonrisa-Es la primera vez que lo veo ponerse así...Sí que tiene mal carácter.-pensé mirando a mi compañero-Por cierto,me llamo Kayla y él es...
-¡Vuestra peor pesadilla a partir de ahora!-me interrumpió mostrando sus pequeños colmillos.
-Wanyamon,-cubrí su boca para que no volviese a interrumpirme y asegurándome que esta vez no me mordiese-pero puedes llamarlo bola peluda o como quieras.-reí encogiendo algo mis hombros y apartando la mano de mi compañero.
-Víbora...¿Me estás vendidendo así,como si fuese un simple juguete?-se quejó Wanyamon.

Aquel joven realmente no parecía ser una mala persona,pero seguía con mis miles de millones de dudas con respecto a los digimon y,ajenas al tema,si él era en verdad buena persona o solo sería una fachada. Había peleado con otro digimon,eso es cierto pero,¿cuál fue su verdadero motivo?¿Simple diversión?¿Entrenamiento?¿Una misión de alguien malvado? Mi mirada se perdió en la nada mientras me cuestionaba aquellas cosas aunque alguien logró sacarme de mis pensamientos.
-Tengo una pregunta.-murmuré reaccionando al sonido que emitió mi compañero,una especie de ronroneo-Bueno,sinceramente tengo muchas cosas que preguntar pero...-saqué del bolsillo mi digivice IC en tonos grises-¿Qué es este digivice?¿Cuál es su función?-miré al joven ya que,si mi memoria no me jugaba una mala pasada,me había parecido que él poseía uno muy semejante.
-No me escucha cuando la hablo...-dijo Wanyamon en un susurro ya que,hacía algún tiempo,me había hablado del dispositivo pero lo olvidé por completo.
Por el momento solo quería saber qué era en realidad el digivice y su utilidad,luego ya preguntaría cosas más personales; por ejemplo,si planeaba atacar la ciudad o cualquier cosa que pusiese en peligro mi vida,la de mi compañero y mi familia.

Después de una vuelta por la ciudad sin éxito decidí volver al parque.

"Genial, Mirtha! Nos has hecho venir al mundo humano para nada?"-protestó Kazemon siempre con ganas de sangre y de pelea."Quizá te equivocaste de ciudad... mira que te dije que miraras los planos del mundo humano..."-apoyó Lunamon

-Callaos las dos de una vez! asi no hay quien se concentre!!-dije en voz alta y la gente que pasaba por mi lado se me quedó mirando se creerian que estaba loca por hablar conmigo misma, aunque realmente hablaba con mis spirits.. y... ¿desde cuando me importa a mi lo que piense la gente sobre mi? Anda y que les den!¿Qué pasa eh?-me encaré a ellos y seguí caminando hasta que volví a entrar en el parque, la verdad estaba ahi mejor que con tanto humano molesto a mi alrededor. Al poco vi un estanque y decidí relajarme un poco luego quizá buscaría a mi víctima por otro sector del lugar. Me volví Lunamon y me metí en el agua. Me dejé llevar por el agua hasta que oí voces cerca. Abrí los ojos y me sumergí en el agua por si acaso. Allí había lo que parecía ser un coelamon. ¿en serio? Digimons en este mundo?-me extrañé
-¿Hola? Mirtha? Te recuerdo que ahora somos digimons?? Pues claro que puede haber digimon so mema! Además... es un pescado...-me contestó lunamon babeando como diciendo "comida", aunque lo siguiente que hizo doy fe de que no se lo ordené yo.
Lunamon se lanzó contra el coelamon y le mordió una pata, en serio no se por qué hizo eso...

-Comida!! mmmm hambre!-dijo bajo el agua, he de reconocer que mi spirit rookie tiene a veces cosas de lo mas infantil... de esta no saliamos vivas... pensé mientras seguía mordiendo con saña la pata de coelamon.

Off: sorry por la brevedad, no quería avanzar mucho más hasta que no estuvieramos todos juntos Xb

OFF: Ups...Sorry...Ya lo he editado ñ.ñ" ¡Ah! Y he cerrado los cupos,creo que entre los tres puede salir algo bueno y extraño para Kayla XD

ON:

Wanyamon,a pesar de quedarse tranquilo en mis brazos,no apartaba la mirada del compañero digimon de Rony. Por otro lado yo escuchaba atentamente las palabras del joven intentando comprender todo aquello. Observé ambos digivices,el suyo y el mío. Me sorprendió que fuese el mismo,aunque aquella casualidad podría otorgarme más información. Así que el Digivice IC no es el único modelo que hay... Ahora estaba más curiosa por querer ver los otros modelos y saber sus funciones. Tal vez fuesen similares los unos con los otros o,por el contrario,completamente diferentes.
-¿DigiSoul?-arqueé una ceja mirando a mi compañero-Así que sin mi ayuda no puedes evolucionar,¿eh?-cuestioné,a lo que mi compañero digimon asintió-Espera...¿Has dicho almacenar a mi digimon?-volví a mirar al joven con una sonrisa en el rostro. Aquello evitaría muchos problemas con mi familia y el resto de ciudadanos-Wanyamon.-apunté la cámara del dispositivo presionando el botón central como el muchacho dijo.
-¡Kayla!-exclamó el digimon antes de desvanecerse en mis brazos-¡¡Sácame de aquí!!

Abrí los ojos muy asombrada por aquello. Wanyamon ya no estaba presente pero pude escuchar su voz con total claridad. Miré la pantalla del Digivice y allí estaba mi felino azul,dándo botes dentro del interior. Desvié la mirada hacia el joven,pero en el momento que iba a cuestionar algunas dudas,escuché a su compañero saliendo del lago.
-Tu digimon.-dije algo exaltada y al agudizar mi vista vi con claridad algo en su pata trasera-¿Qué es eso?-murmuré.
-¡Niña estúpida,sácame!-escuché decir y miré a mi compañero.
-Oh,claro,lo siento.-asentí haciendo a Wanyamon salir del Digivice.
-¿Dónde está el digimon?-cuestionó mirando a todas las direcciones en un pequeño gruñido hasta divisarlo-No te preocupes Kayla,yo me encargo de él.-dijo con valentía pero lo sujeté con fuerza antes de que se metiese en una pelea-¡Déjame!¡Puedo acabar con él!
Lo miré seria sin necesidad de decir una sola palabra. No muy conforme con mi decisión soltó un suspiro enfadado consigo mismo. Centré mis cristalinos orbes en aquel digimon con aspecto de...¿Conejo? Me cuestioné a mí misma a qué podría asimilarse el digimon,pero era algo que no resultaba para nada familiar.

Odiaba cuando Lunamon tomaba el control de las dos, era muy niña y sus comportamientos infantiles distaban tanto de mi personalidad que me hacía parecer a mi como una estúpida. Era obvio que ese coleamon nos golpeara, pero ella se lo tomó como un preludio de ataque, juego...? qué se yo la cosa es que cuando  se despegó de la pata del coelamon lanzó un chorro de burbujas hacia la coraza del digimon.

-Jajajja a esto es lo que yo llamo comida rebelde!!-dije antes de caer rodando por la hierba.

Con el golpe Lunamon pareció algo desorientada y por fin pude tomar el mando en su cabeza, analicé la situación estaba rodeada de una chica con un digivice extraño, muy distinto al mío  y el coelamon parecía ser compañero de un chico con tendencia al exhibicionismo. Como no me sentía muy a gusto entre humanos y aprovechando que estaba adoptando la forma de mi spirit, decidí permanecer en esa etapa, al menos hasta ver si eso dos podían serme útiles para culminar mi asesinato.
Al poco noté como Lunamon volvía a estar dominante en mi mente y le dije que intentara socializar ella con los tamers, a mi se me daban muy mal esas cosas, pero parece que ella eso lo tenia controlado.

-Perdonar esta entrada, ando algo hambrienta, hace tiempo que llegué a este mundo y aun no he sido capaz de encontrar nada comestible. Me llamo Mir... estooo Lunamon-preferí mantener mi identidad oculta por el momento-Pero podéis llamarme Luna. ¿Quiénes sois vosotros? ¿Qué os trajo por el mundo humano?-me presenté.