Ficha: Yeong—Hye Ji+Reis.

por Yeong—Hye Ji Sáb Jul 07, 2018 5:25 pm

Yeong—Hye Ji

Si yo no lucho por mi futuro, ¿quién lo hará?

Nombre: Yeong—Hye Ji|Edad: 23|Digi-vice y emblema: D1. Conocimiento|Digimon:Gomamon

Descripción física:
Tiene una complexión promedio para su edad, de la misma manera que su estatura no varía mucho de la estatura normal del japonés promedio. Sin embargo es notable que durante ciertas épocas del año luce más delgado porque en algunas ocasiones sufre pérdidas de apetito, en especial en las épocas de verano por el efecto del calor, de ahí que sienta preferencia por épocas donde la temperatura es más suave. Está algo pálido por su tendencia a vivir recluido en casa hasta el punto en el que si te fijas bien, se le notan más de lo usual las venas azuladas recorriéndole los antebrazos y las muñecas.

Físicamente es alguien que no destaca mucho de cualquier persona que puedas ver por las calles de Tokyo: su pelo es de color negro y corto, bastante fino y suave, aunque despeinado porque no se preocupa de prepararlo ni peinarlo cada mañana. Lleva gafas de forma rectangular y montura de color azul oscuro, pero su vista está lo suficientemente bien como para poder no llevarlas en ciertas ocasiones. Sin embargo debido a que continuamente está forzando la vista, prefiere tenerlas siempre puestas. Sus rasgos afilados le hacen parecer una persona muy seria. El color de sus ojos oscila entre la escala de grises según cómo le da la luz en el momento y normalmente tiene una mirada bastante fría. Tiende a llevar ropa oscura y los complementos que más utiliza son un reloj negro junto con una gorra con visera para protegerse la vista de la luz intensa. También lleva consigo una bandolera negra dentro de la cual guarda su ordenador portátil.

Es bastante sobrio a la hora de vestir, así que aparte del uniforme, suele llevar vaqueros azules y camisetas. En invierno se le ha llegado a ver con abrigo y bufanda.

Descripción psicológica:
Tiende a ser algo arrogante frente a los demás, hasta el punto de que le cuesta admitir sus errores pero sólo es una defensa contra el mundo porque de hecho sufre baja estima y constantemente se siente superado por todo. Se comporta de manera reservada y brusca porque es bastante inseguro sobre sus capacidades para hablar con los demás. Desea no estar tan alejado de las personas pero su mal concepto de la gente lo llevan a ser reticente a abrirse y a estar siempre a la defensiva. No es nadie complaciente ni para él mismo ni para los demás, tampoco se esfuerza en demasía por agradar a los demás aunque a veces tenga gestos amables hacia personas que le causen curiosidad por algún motivo puntual. Su tendencia natural es a ser más amable de lo que se muestra, sin embargo, ya sea por supervivencia o por considerarlo una debilidad, tiende a inhibir cualquier sentimiento altruista que sienta hacia otras personas. Tiene el mismo impulso de represión al hecho de sonreír. Se disfraza con una máscara de prepotencia y frialdad pero en el fondo es bastante protector con los más cercanos a él. Es alguien con tendencias posesivas y con muchísimos problemas a la hora de interelacionarse profundamente con otras personas por su carácter fuerte, problemático y su poca facilidad para demostrar afecto. Aparentemente, no le interesan los demás y es egoísta y egocéntrico, pero si algo no le requiere esfuerzo y hace feliz a alguien que le despierta simpatía, suele hacerlo y además no vanagloriarse por ello. Pero a pesar de escoger esa faceta de "lobo solitario" es seguro que, en realidad, se siente muy solo.

Se muestra siempre confiado en sus habilidades y es plenamente consciente de sus defectos, aunque no los reconozca ante los demás. Le cuesta pedir ayuda a los demás porque está acostumbrado a no contar con nadie y por lo general se siente incomprendido. Tiene complejo y vergüenza por ciertas cosas de sí mismo que son relativamente normales, como por ejemplo que su estómago se revuelve con facilidad o su acento coreano marcadísimo que siempre procura disimular. Sabe imitar y hacer voces divertidas pero rara vez las haría, ya que se sentiría demasiado ridículo. Es determinado pero a la vez muy orgulloso.

Tiene una visión del mundo y de las personas recelosa, sosteniendo la firme convicción de que la gente busca su propio beneficio y que los buenos valores que muchos exhiben están fundamentados en el egoísmo y en el guardar las apariencias. Piensa que el mundo claramente es un lugar horrible y que la realidad es triste, injusta y deprimente: sólo hay dos opciones, ser una víctima o ser un superviviente, y obviamente él no se va a permitir terminar como una víctima. A veces es demasiado duro y explícito con decir esto, en especial a la hora de intentar enseñarle a la gente a la que aprecia lo que él ve como la realidad. Aún así, Yeong—Hye sólo hace esto para ahorrarle a sus seres queridos el mismo sufrimiento que él llegó a tener al pensar que el mundo recompensa la justicia, a veces de manera inconsciente.

A pesar de ser alguien claramente inteligente, es supersticioso y tiende a ser conspiranóico: no sólo cree en los demonios, ángeles y espíritus, sino que cree que los ovnis, los reptilianos y los iluminatis existen. Al contrario de lo que parece por estas creencias, Yeong—Hie no es un bobo que cree todo lo que ve en internet, sino que es consciente de que la “mayoría de casos que se mediatizan son fraudes burdos”, lección que aprendió por su afición de destapar fakes de internet pero cree de corazón que debe existir algún caso auténtico. Así que, aunque esté dispuesto a aceptar cosas imposibles, es alguien que no está dispuesto a dejar de lado su actitud crítica y razonamiento.

Normalmente no es muy expresivo, pero cuando se asusta de veras, hace signos que corresponden a gestos para protegerse del mal de ojo y de la desventura en general. En general se muestra como impasible, pero cuando de veras se pone nervioso o se altera es gritón y saca todo su acento coreano.

Su fijación por superar los límites de lo que conoce y buscar nuevas experiencias lo han llevado a crearse hobbies extraños: por ejemplo, ha desarrollado cierta fascinación por asesinos famosos o eventos traumáticos, o como atentados terroristas. Quizás es por eso que le gustan las películas y series que tratan sobre distopías, asesinatos, misterio y ciencia-ficción. Disfruta de escuchar música aislándose del resto del mundo usando sus auriculares, generalmente pop indie y dubstep, además de bandas de K-pop. No fuma ni bebe, pero ha llegado a gastar más horas de las que querría jugando en salas de pachinko y al póker on-line.

Tiene un alto sentido de la supervivencia que siempre va reñido con su peligrosa fijación de encontrar nuevas sensaciones que le activen la adrenalina, debatiéndose en ambas. Además es alguien bastante curioso y al que en general le gusta meterse en asuntos ajenos y los lugares misteriosos, así que tiene el hobbie de visitar lugares tétricos como hospitales abandonados, edificios en ruinas y demás. Tiene un sentido del humor algo retorcido y le encanta tomarle el pelo a las personas demasiado inocentes y crédulas.

Así mismo se lleva mal con las personas demasiado perfeccionistas y cuadriculadas. Sorprendentemente aunque no soporta que las cosas estén sucias —en parte porque es alérgico al polvo—, es desordenado y tiene una preocupante tendencia a guardar casi todo, ya sea útil o no.

Su destreza con la tecnología es muy destacable y tiene motivos para mostrarse arrogante: de pequeño arreglaba él mismo sus juguetes para luego seguir con los electrodomésticos de casa y, finalmente, a buscar electrodomésticos que la gente tira y arreglarlos así que, a fuerza de práctica es capaz de apañar casi cualquier electrodoméstico o máquina común. Esto le ha hecho convertirse en alguien que tiende a tener amontonados un montón de electrodomésticos viejos en el trastero de su casa y que es reticente a comprar nuevos electrodomésticos. Es alguien ahorrativo, es decir, que no le gusta gastar dinero, pero no tacaño o que carezca de generosidad sino porque le parece un desperdicio de dinero hacer gastos innecesarios, hasta puntos exagerados: por ejemplo, se prohíbe a sí mismo comprar agua y bebe del grifo, y como esto, muchísimos detalles. Tiene talento natural para la informática y concretamente el campo del hackeo.

Es alguien con tendencia a aburrirse fácilmente cuando algo no le interesa, razón por la que repitió varios cursos de la enseñanza obligatoria, aunque con la edad ha llegado a arrepentirse de no haberse esforzado como debía, de ahí que guarde celosamente el secreto de que repitió varios cursos. Tiene una relación complicada con su padrastro por que sus sistemas de creencias son diametralmente distintos, pero reconoce que le ha enseñado a ser mejor persona, en general, a ser menos perezoso y a tener objetivos más claros.

Es bilingüe ya que sabe hablar coreano y japonés a la perfección, aunque a menudo al leer japonés le cuesta reconocer algunos kanjis dando lugar a cierta confusión. Es mucho mejor para hablar y escuchar que para escribir, ya que a menudo tiene faltas de ortografía o mala memoria para los kanjis. También se maneja muy bien con el inglés ya que una de las cosas que hizo su padrastro fue obligarlo a ir a una academia de idiomas, en vista de que él no quería tener que ver con ningún club escolar.

Otra cosa de la que se avergüenza es que tiene miedo a la oscuridad total, hasta el punto de dormir con una pequeña luz encendida. Así mismo, no puede comer alimentos picantes porque su estómago se revuelve con mucha facilidad.

Debido a que pasaba mucho tiempo en casa y a que sus padres están la mayoría del tiempo ocupados en el restaurante solía ser el encargado de ocuparse del mantenimiento y limpieza de casa desde muy joven, así que tiene experiencia y soltura en labores del hogar, lo cual le da vergüenza admitir por considerarlo poco masculino. Ayudar en el restaurante desde muy joven le ha hecho aprender a cocinar bastante bien: no es que le encante cocinar pero lo prefiere a tener que gastar dinero en comida a domicilio. También solía hacer de repartidor cuando el restaurante no tenía el suficiente éxito como para contratar uno, en principio utilizando bicicleta, pero luego se sacó el carnet y compró una motocicleta vieja. No suele utilizarla en su vida usual porque se estresa con la presencia del tráfico, de la misma manera que se estresa esperando colas, así que hace todo trámite que puede por internet.

Historia:
Yeong—Hye se ha criado a solas con su madre, la cual regenta un restaurante en el barrio del Shin-Ōkubo, que es el barrio coreano más grande de Tokyo. Su padre fue policía pero murió en servicio cuando él era pequeño, lo cual le marcó bastante en el carácter y probablemente le generó gran parte de su complicada personalidad. Desde que su padre falleció la situación económica de su madre no siempre ha sido buena y aunque ha ido mejorando con el tiempo, los préstamos que pidió durante la infancia de Yeong—Hye para mantener el restaurante siguen representando un problema en forma de deuda. Esto probablemente ha condicionado en que Yeong—Hye sea tan reticente a gastar dinero aunque lo tuviera. A Yeong—Hye no se le compraban muchos juguetes, así que él mismo los arreglaba de pequeño, lo cual originó su interés posterior en arreglar electrodomésticos. Debido a la ausencia de un padre, Yeong—Hye se responsabilizó rápidamente de las tareas y mantenimiento del hogar desde bastante pequeño y tuvo el papel de “pequeño hombre de la casa” sobre sus hombros. De la misma manera que ahora, no fue muy sociable de niño, así que pasaba mucho tiempo trasteando con electrodomésticos y tecnología. Se maneja perfectamente con ordenadores y móviles, tanto en cuestión de arreglarlos físicamente como entenderse con la programación, ahora que se dedica a estudiar dicho aspecto. Sorprende cómo a pesar de su economía se ha apañado para siempre tener móviles caros y un ordenador muy decente, ¿cuál era el truco? Los móviles los solía comprar rotos por un precio muy rebajado y los arreglaba él mismo. Su ordenador está montado a piezas de otras torres viejas. Acomodó un trastero para guardar piezas y todo tipo de aparatos viejos y lo convirtió en su espacio para arreglar cosas.

Siempre ha odiado tanto el colegio como el instituto por aburrirse mucho y porque nunca se ha llevado bien con el resto de personas a su alrededor. Repitió varios cursos en el colegio. Sus profesores y su madre creían que era debido al impacto emocional de no tener una figura paterna en casa, pero lo cierto es que simplemente se aburría en la escuela. Lo único que le interesaba era la informática y arreglar cosas, así que en lugar de saltar en los parques o tomar el aire, él se encerraba en estos hobbies de manera casi obsesiva.

A lo largo de su paso de la niñez a la pre-adolescencia sucedió un hecho muy importante: su madre volvió a casarse. Yeong—Hye no aceptaba al nuevo marido de su madre, así que tuvo muy malas relaciones al principio con él y pasó una etapa de rebeldía, al sentir que su posición de “pequeño hombre de la casa” era amenazada. Eso empeoraba por el choque con el rígido y cabezota carácter de su padrastro, un detective separado y que tenía un hijo de su antiguo matrimonio. Su padrastro siempre ha intentado regular las conductas problemáticas de Yeong—Hye, y aunque siguen teniendo cierta tensión —nunca lo ha llamado "papá"—, hay cierta armonía en la casa porque al crecer Yeong—Hye comprendió que sus intenciones no eran malas y que de veras lo trataba como si llevasen la misma sangre, para bien o para mal. Aún así siempre tendrán cierta tensión entre sí por sus caracteres dispares y Yeong—Hye se avergüenza de él. Curiosamente con el hijo de su padrastro se lleva muy bien, hasta el punto de que eran amigos y de que Yeong—Hye deseaba que su hermanastro viviera de forma permanente con ellos.

TODA LA WEA DE DATAMON

Debido al duro golpe emocional que le supuso, Yeong—Hye no quiso saber nada más sobre el mundo digital y dejó guardado en un cajón el digivice el cual, él creía, que le unía a Datamon y siguió resignado su vida sin querer volver a involucrarse en el mundo digital o con los digimon. Aunque fue durante esta época en la que desarrolló cierta adicción al pachinko, también se concentró en sus estudios y en su desempeño de cara a su inminente entrada a la Universidad de Tokyo: tanto se concentró que de notas regulares pasó a notas sobresalientes que le han conseguido una beca en la Universidad de Tokyo donde gracias a sus conocimientos adquiridos tenía un desempeño ejemplar. Debido a su posición económica Yeong—Hye alquiló una habitación en un piso con otros estudiantes y tuvo que pasar a alimentarse de ramen, motivo por el que lo odia aunque no le quede más remedio que comerlo. Desde ese momento, aprecia mucho más la comida que le prepara su madre cuando la visita.

A pesar de querer desligarse por completo del mundo digital y haber olvidado incluso el digivice en el fondo de un cajón, durante el verano en el que finalizó su primer año de universidad volvió a cruzar su camino con un digimon. Él y su familia habían ido a las costas de Tottori, aprovechando que la situación económica pasaba por un pico alto. Emocionado por poder viajar con su madre, padrastro y hermanastro, Yeong—Hye pasó los días en Tottori tranquilamente. Un día en el que paseaban juntos, su hermanastro señaló hacia el mar, diciendo que veía algo entre las olas así que ante la mirada atónita de Yeong—Hye, se lanzó a rescatarlo. Entonces, comprobaron que en lugar de ser una persona era, lo que parecía a primera vista un digimon: aunque Yeong—Hye tuvo el primer impulso de dejar a la criatura allí para evitar problemas, terminó por llevársela al hotel para cuidarlo. Se terminaron enterando de que el digimon había caído al mar dentro de un camión de digimon que servirían como experimentos de Digital I.N.C en una de sus bases isleñas secretas. Aunque intentaron buscar a los otros digimon del camión, se percataron de que Digital I.N.C ya estaba peinando toda la zona, así que no había esperanza de salvarlos. Se sintieron aliviados al volver a Tokyo sin que Digital I.N.C detectase al pequeño Pukamon, sin embargo Yeong—Hye no sabía bien qué hacer: ¿era, aquel, el digimon ligado al d-1 que él tenía? Comenzó a dudar, a pensar que quizás tanto el digi-vice como el digimon eran de su hermano. Sin embargo, el digimon aseguraba que llevaba mucho tiempo buscándolo así que no se sentía en posición de no cuidarlo. Aunque el digimon era algo asustadizo de los humanos, decía que había buscado al elegido por el emblema del conocimiento por mucho tiempo: Yeong—Hye no entendía a qué se refería y tomó el relato del digimon sobre los tamers con cierta cautela. Por curiosidad, trasteaba con el D-1, intentando encontrar respuestas sobre cómo funcionaba y por qué, tras tanto tiempo guardado, reaccionaba con la presencia de Pukamon: si fue su ardua búsqueda e interés en el tema lo cual lo hizo ser elegido por el emblema del conocimiento para entrar al mundo digital o si fueron sus habilidades con la informática lograron abrir una puerta digital, es algo que no se sabe, pero en una calurosa noche de Julio, despertó en un nuevo mundo: el mundo digital.

* * *
"Es muy presuntuoso creer que una sola mente mortal pueda alcanzar a comprender la complejidad de la realidad."

Nombre:
Reis

Tipo de digimon:
Gomamon//Sorcerymon//Wisemon//AncientWisemon

Personalidad:
Es muy optimista aunque a veces se pasa de ingenuo y es fácil de enredar, por lo que hay veces en las que cree en las conspiranoias que su tamer dice. Es amistoso y educado, todo un caballero. Es algo introvertido y hay quien se aprovecha de ello. Suele preocuparse mucho por los demás pero cuando se estresa le da dolor de estómago. Su experiencia como sujeto de experimentos de Digital I.N.C le han hecho algo asustadizo ante los humanos pero dice abiertamente que admira la cultura humana, en especial las grandes construcciones como las pirámides o la gran muralla china. Es honesto y servicial pero está particularmente orgulloso de su condición de mago. Es tranquilo y cariñoso con los demás, casi siempre hablando en un tono amable y actitud cálida. Es fácil de hacer reír y casi siempre está sonriendo, así que despierta buena impresión. Suele sentirse incómodo cuando se trata de hablar de algo inapropiado o de romper las reglas. Aunque normalmente es alguien de carácter tranquilo y calmado se pone muy asertivo e irritable cuando algo no está bien ordenado o en su lugar y tiene cierta obsesión por la simetría. Es precavido y prudente, a veces demasiado y por lo general no le gusta jugar con aquello que no conoce. Puede llegar a ser muy pasivo pero es laborioso. Considera que hay leyes universales que no han de ser modificadas. Valora el conocimiento no por acumulación sino en tanto a cómo aplicarlo al bien común o como nexo para relacionar sociedades y personas y en general le gusta utilizar su magia para impresionar a otras personas a modo de espectáculo. Sabe leer y escribir digimoji con soltura. No esconde nada en particular pero se suele mostrar reticente a hablar del pasado. Su voz es suave así que no es demasiado difícil hablar por encima de él. Sin embargo, se enoja cuando siente que alguien se está dejando llevar por la pereza y no tiene reparo en reñir y sacar su determinación para ser escuchado. Le gusta beber sake bajo los cerezos en flor.

por **Scott Desaster** Lun Jul 09, 2018 9:45 am

Ficha Denegada

Los motivos son los siguientes:

1-Apariencia: no llega a rondar las 300 palabras. Tiene 139 palabras por lo que no se ahonda demasiado en la apriencia del personaje. Podrias añadir vestimentas alternativas, atuendos curiosos, marcas de nacimiento, etc. Lo importante es que debes extender el apartado.

2-Detalles y contradicciones de la personalidad: sinceramente la personalidad me sorprendio, es mas extensa que la historia, pero tiene contradicciones y detalles importantes que no pueden dejarse pasar.

El primero que me llamo la atencion fue el hecho de que sea alguien competitivo y timido a la vez. Me cuesta pensar en alguien con timidez actuando de forma competitiva, mas si esta es de forma "hostil".

Otro detalle es que tenga un talento natural para el "hackeo" y que encima sea de leer lento. No soy un experto en hackeo ni nada, pero estoy seguro de que debes de procesar la informacion rapido para burlar barreras y programas que impidan el hackeo en general. No me imagino a un programa dandole al hacker mas de 5 segundos para que este escriba una linea de codigo en respuesta.

Tambien estaria saber porque se maneja tan bien con el ingles, ya que en ningun momento se hace mension a que lo haya aprendido. Solo se ha mencionado el coreano y japones en cuanto a su educacion, pero nada de ingles.

3-Detalles de la historia: para comenzar, es dificil de creer que un hacker amateur pueda vivir en el mismo hogar que un policia rigido. Si lo pensamos bien, si el chico hace bien su trabajo de hacker amateur, llamaria la atencion conforme mas y mas trabajos le encargaran; y sabiendo que es amateur, seguramente las fuerzas policiales lo ubicarian rapidamente.

Otro detalle que veo imposible segun la informacion de la ficha es que pudiera meterse en la base de datos de la policia sin que nadie se dienta cuenta. Reitero en que la ficha afirma que es amateur, y un amateur no podria meterse en el servidor de la policia sin ser detectado. Y aqui viene lo que menos creo posible: que Digital INC no hubiera borrado ya todos los datos de la estacion. Recordemos que esa compañia tiene los medios y recursos para borrar toda evidencia de los digimons, y que los policias tuvieran informacion de estos, solo los relacionaria con Digital INC, lo que volveria AUN MAS IMPOSIBLE meterse en su base de datos sin que nadie se de cuenta.

Por favor arregla estos detalles y avisame cuando lo hayas hecho.

Ficha: Yeong—Hye Ji+Reis.

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