Re: Porque la policía también puede ser cruel... {Misión: Elluka Clockworker}

por **Scott Desaster** Vie Ene 01, 2016 9:19 am

Mirror bajo sus orejas al escuchar la respuesta de la peli rosada, y no fue para bien. La canina frunció levemente el seño y se volteo, apartándose de ambas humanas y cruzándose de brazos, bastante molesta pero guardando su porte para no decaer en cuanto a su curiosa forma de lucir su apariencia. Rose observo a su compañera con cierta pena, pero no podía hacer nada… ella dio la idea de que la Sub-Oficial de cabellos rosados eligiera, y esta había elegido. Quizás seria la actitud de una mala perdedora o simplemente de alguien que se sentía decepcionada, pero ya no había tiempo para hacer nada; la humana comenzó a caminar y su compañera, luego de verla alejarse, cambio su mal humor por uno más bien deprimido y sumiso, suspirando levemente mientras bajaba su cabeza y seguía a su tamer con los brazos y hombros decaídos. Era una apariencia algo deprimente pero bueno, lo hecho ya estaba hecho, lo dicho ya había sido dicho… ahora solo se podía continuar avanzando.

Todo el camino hasta la estación de Trailmons fue cubierto por un silencio incomodo. Rose no quería hablar para no incordiar a su compañera, y obviamente Mirror se encontraba molesta e incapaz de decir nada porque seguramente si intentaba decir algo, sería algo ofensivo de forma casi segura. Fuese como fuese, tan pronto como el trió femenino llego al lugar, Rose se mantuvo a cierta distancia de la parada, manteniéndose cerca de una de las varias tiendas de comida rápida que se encontraban en las estaciones de Trailmons para los cansados y seguramente hambrientos pasajeros que llegaban tras un viaje largo. La estación se encontraba ligeramente vacía, habían algunos digimons y tamers que iban y venían pero ninguno tenía la atención de la chica violeta, lo cual daba a entender de que aun no había llegado su “ventaja”, pero, ¿a qué se refería con ventaja en ese momento?, una pregunta similar también existía, ¿Cuál era el plan que tanto quería seguir Mirror?... bueno, fuese cual fuese, lo más sensato sería preguntar por la ventaja ahora mismo, ya que meter ese “plan” podría molestar a la ya tocada canina.

Okey… esto funcionara así Luka… en el próximo Trailmon que llegue a la estación, habrá un digimon que debemos capturar e interrogar… pero no los interrogatorios que tú conoces, si no unos mas… de nuestro estilo –agrego la chica con un tono peculiarmente serio- se trata de un BlackGabumon… es un digimon bastante peculiar, es como el que ataco a Mirror pero bueno… con un diseño más monocromático supongo…
Egh… ¿otro de esos…?... siento que hoy voy a matar a alguien –comento la canina con bastante rencor y odio al recordar a su atacante del día de hoy- ¿Qué clase de “ventaja” podría darnos una de esas criaturas?
Esa “criatura” tiene información más concreta de donde irá a parar nuestro criminal estrella –Mirror levanto sus orejas al escuchar eso- según la llamada de “Info”, ese BlackGabumon puede conducirnos a un deposito escondido donde tendremos grandes pistas y evidencia para poder arrestar a nuestro amigo, y sin la necesidad de la placa de los Union Savers… pero claro, aun así necesitaremos de apoyo táctico –comento la chica de cabello morado, guiñándole un ojo a su compañera humana-

Finalmente, el Trailmon llego y de él bajaron muchos digimons, pero el más importante entre ellos no… al menos hasta el final. Cuando el Trailmon se alejo de la estación, dejo una cortina de vapor detrás de él, y tras esa cortina se encontraba aquel BlackGabumon que había mencionado Rose. El digimon tenía una especie de sombrero casi como el de un mafioso y también tenía un maletín esposado a su brazo izquierdo… sin duda debería de contener algo importante aunque lo que le interesaba a Rose era la información que poseía el monocromático amigo, no lo que pudiera estar llevando encima. Aun así, sería buena idea priorizar algo, ya fuera el contenido del maletín o la información del digimon… fuese cual fuese la que entregara, la otra no la diría aunque lo asesinaran, después de todo; con cantar una vez es suficiente para condenar un alma al infierno… o en el mundo digital, el Dark Área.

por **Elluka Clockworker** Vie Ene 01, 2016 10:33 am

Elluka sintió pena al notar la creciente tensión entre sus compañeras. ¿Había hecho algo mal? No pudo evitar pensar que era su culpa, su corazón se acongojó un poco por ello. Caminar hacia la estación de Trailmon fue un recorrido eterno, fue como caminar por toda la extensión de un piso de maternidad en plena noche. Sumo cuidado de no emitir ni un sonido para evitar una catástrofe de efecto dominó parecía ser el asunto más importante de todos, aún más que llegar a su destino. Sostuvo el mechón rosado que siempre se colaba por delante y lo peinó un sinfín de veces para tratar de saciar su necesidad de tranquilidad. Era un gesto que a sus hermanos le parecía adorable, pero Elluka lo detestaba, sentía que revelaba sus emociones de una manera muy obvia. No lo podía controlar, desgraciadamente. Era imposible deshacerse de ese mal hábito que la ponía en evidencia.

Llegadas a su destino, el trío se mantuvo a discreción. Eran un par de jovencitas muy hermosas, era difícil no llamar la atención sin necesidad de esconderse. ¿Sería bueno empezar a usar una máscara para sus misiones? La joven Union Saver comenzaba a entender la ventaja conforme avanzaba la explicación de Rose. Clavó su vista de monarca, tan afilada como la daga de la mismísima Helena de Troya, en el digimon de aspecto mafioso, tal vez intentaba verse gallardo y le salió mal. Elluka consideraba que no se veía del todo bien. Analizar al monocromo digimon fue sencillo, no debía tener mucho que ocultar... A excepción de ese maletín tan sospechoso.
-Rose, nada nos asegura que nos dirá la verdad. -Murmuró con su suave voz de sirena mientras posaba la diestra sobre el hombro de la muchacha. -Dime qué llevas contigo y te diré hacia dónde vas... No sé qué información busquen, pero sé que ese paquete es de ayuda... Mera corazonada. -Sugirió con una vista clavada en el maletín. Siendo honesta, a la chica cerezo le preocupaba esa expresión que usó antes... "A su modo". No pudo evitar pensar en la escena de ese dos contra dos que pudo acabar en un sangriento desenlace. No quería arrestarlas, no eran malas... Simplemente eran de cabeza caliente, aún más que la propia Clockworker. -La tortura es ilegal, no quiero detenerlas... Pero me veré obligada si lo hacen. -Advirtió con una voz penosa. En verdad le provocaba vergüenza la situación, ni siquiera sabía si estaba suponiendo correctamente. Sin embargo, el asunto de la sed de venganza la tenía muy angustiada. -Si su método no involucra ningún tipo de tortura, les permitiré que tomen la decisión que consideren mejor. -Decidió ceder ese beneficio de la duda. Y fue entonces que todo se aclaró para ella. Apretó el hombro de la chica de cabellera púrpura y posó una mano en la cabeza de la perruna digimon. -Tengo un plan... -Una risa muda se hizo presente y comenzó a explicar su idea a las chicas. Todo consistía en esforzarse en la situación con la que no había necesidad anterior de hacerlo: seducción. No había un solo ser masculino (o femenino) que se pudiese resistir a un par de halagos y ojitos bonitos, pestañeos que hipnotizan en unas milésimas de segundo. Elluka estaba muy confiada en que podrían obtener la información que necesitaban por medio de ese engaño. No robarían, no torturarían y no cometerían un crimen... Era perfecto, solo necesitaba la aprobación del dúo.

por **Scott Desaster** Vie Ene 01, 2016 10:59 am

Ambas chicas se quedaron calladas al escuchar el plan de la peli rosada, negándolo casi tan pronto como lo sugirió. Para comenzar, Rose no parecía de las chicas que pudieran hacerle ojitos a nadie, y Mirror tenía el problema de que casi todos la confundían con un hombre, y ese BlackGabumon seguramente no sería un caso similar. Aun así, las chicas prestaron atención al maletín… era claro que si era sospechoso, aunque a ambas les daba igual, si su compañera quería tenerlo, lo obtendrían… claro, debieran de robarlo o de encontrar un modo de que aquel digimon lo perdiera de un modo u otro; pero, ¿Cómo?... Rose podría tener mil soluciones pero todas bastante… ilegales, ya que en ningún momento se dispuso a hablar… Mirror por otro lado tenía algunas tácticas en su mente, pero claro, todas muy raras y confusas… realmente nada que se pudiera usar en aquella situación tan rara. Por un instante ambas compañeras se miraron, replanteándose la idea de tratar de seducir al BlackGabumon, pero antes de decir nada, volvieron a verlo; esta vez se le acercaba un DemiVeemon curioso al maletín, y cuando el digimon oscuro se percato de ello, se volteo rápidamente e hiso un claro amague de que iba a morder a la criatura, ahuyentándola sin el menor de los esfuerzos. Fue con esa acción que la rosa y el espejo dijeron de forma simultánea: “el no tiene corazón”. Una idea descartada y algunos puntos restados por parte de Rose y Mirror a su compañera peli rosada, pero bueno… al menos había intentado dar ideas y eso era lo que importaba, claro que habría sido mejor una idea que les funcionase pero bueno, no todo es posible en todo momento.

BlackGabumon se mantuvo en su posición un rato, casi esperando algo, hasta que finalmente se movió cuando el reloj de la estación marco la 1:20 PM… definitivamente ya no era momento para echarse hacia atrás, era ahora o nunca: conseguir la información o el contenido del maletín. El digimon oscuro se alejo de la parada de la estación, acercándose a la misma tienda donde esperaban las humanas y digimon. Rose y Mirror se alejaron rápidamente de la peli rosada, tomando un par de periódicos y abriéndolos para ocultar sus rostros rápidamente, dejando a la humana sola para que intentara no llamar la atención… debía de inventarse una excusa para que el digimon no sospechara, aunque este le dio la menor importancia a la humana; BlackGabumon simplemente la ignoraba, no tenía nada que a él le importara, ni siquiera el uniforme de los Union Savers llamaba su atención, el simplemente se quedo esperando un poco antes de pedir un trozo de carne para llevar.

Mirror observo al digimon fijamente y trato de acercarse, estirando su brazo ligeramente con la intención de por lo menos tocar el maletín del digimon, aunque este se percato de ello y sujeto el brazo de la digimon, levantándolo para verla a los ojos de forma amenazante. La Strabimon se sonrojo completamente apenada, tener a ese digimon sujetándola como si nada y marcando su completa superioridad le daban ganas de imitarlo, aunque no podía, él era el enemigo… era casi como ver a una mujer enamorada a primera vista, pero estaba claro que Mirror solo era presa del pánico de la situación.

Linda, te recomiendo mantener las patas lejos de mis cosas –comento el digimon, antes de tomar su carne y marcharse refunfuñando-
Haaaa… a-al menos p-pudo re-reconocer q-que soy mu-mujer… -comento la digimon dejando caer su cabeza sobre el mostrador del lugar, incapaz de hacer nada mas- haaa…
Egh… okey… ese sujeto estará más a la defensiva que cualquier otra cosa… tenemos que pensar como quitarle ese maletín… ya quedo completamente claro que intentar que lo entregue por las buenas es una pérdida de tiempo –Por un instante, Rose sonrió y suspiro con alivio, seguramente ella seguía totalmente en contra de la idea de usar su “encanto femenino”-
n-no creo poder volver a verlo a los o-ojos… se-sentí que iba a matarme si le respondia –comento Mirror abriendo los ojos con preocupación y levantándose de su lugar, alejándose de las penas- co-como mucho podría intentar localizarlo para saber por dónde se fue… -Para ese instante las 3 se habían percatado de que BlackGabumon había desaparecido- pa-parece que resultamos sospechosas después de todo
Egh… okey… Luka… tenemos que hacer lo siguiente… -Rose observo a su compañera unos instantes- encontrar a ese digimon y llevarlo a un lugar donde se pueda interrogar… no torturar, ¿entiendes?, yo puedo ser mala y agresiva, pero nunca me iría al nivel de la tortura… eso es caer bajo, créeme… no es nada que yo pudiera hacer

por **Elluka Clockworker** Vie Ene 01, 2016 9:20 pm

Ante la negativa a su idea, Elluka solo pudo fruncir los labios con una adorable mueca de ligero disgusto. Se frotó la nuca por debajo de su larga cabellera y suspiró con pesadez al observar al DemiVeemon. Parecía que se trataba de un digimon con aires de rudeza, pero con esa apariencia de Rookie no daba una apariencia que intimidara a la Union Saver, se veía como un simple niño que trataba de ser el bully del barrio.
-¿Pero qué...? -Murmuró al notar la carencia de movimiento del digimon. ¿Qué estaría esperando? De manera instintiva, Elluka llevó la mano a su digivice en un gesto por estar lista para cualquier batalla que se avecinara. Estaba imaginando que lo que estaría esperando tan pacientemente el monocromo sería algún otro digimon, alguien a quién llevarle el maletín seguramente. Corrigió su postura al notar la ausencia de sus compañeras y el cómo se acercaba el vigilado digimon. Encontró con la vista a las susodichas compañeras y sacó su teléfono, simulando atender una llamada importante, tratando de hacer parecer que no le interesaba en lo más mínimo la sospechosa silueta de BlackGabumon.
-Sí, ajá, te entiendo linda. -Murmuraba en una voz casi inaudible al teléfono de una manera muy poco convincente. Elluka era una pésima actriz, pero ella sentía que lo hacía de maravilla. Bajó el aparato electrónico ligeramente al caer en cuenta de la manera en la que estaba sujetando a su canina compañera. La de los cabellos rosados tenía ganas de intervenir y librar a Mirror del agarre tan rudo, podía incluso sentir el miedo de la pobre canina... Y sin embargo logró contenerse, no debía hacer aparición aún y estropearlo. Era un BlackGabumon agresivo, pero a los ojos de Elluka seguía siendo un simple bully de barrio. La doncella de blanco conocía lo que era el infierno y los demonios de sus propios ojos... Ese mocoso no la asustaba. Esperó a que el digimon y su comida se retiraran para acercarse nuevamente a sus dos compañeras y escuchar atentamente su conversación.
-Entonces no perdamos el elemento sorpresa, recuperemos esa segunda ventaja. -Sonrió a la del cabello de lila en un intento por mitigar la tensión que había provocado el pequeño enfrentamiento anterior. -Como dije, mientras no exista algo ilegal en el interrogatorio, son libres de hacer lo que gusten; soy su refuerzo ¿Recuerdan? -Asintió para reforzar su afirmación y se dirigió a la puerta del establecimiento. Se sentía aliviada por lo que había dicho Rose, tal vez había juzgado mal, pero no pudo evitarlo después de la situación en el área de comida internacional. Comenzaba a hacerse a la idea de ser un mero refuerzo, ambas eran muy buenas. No, refuerzo no. Ella era la parte moral de la misión y lo respetaba. Dirigió sus ojos a Mirror y le regaló una expresión de suma seriedad. -Confío en tus habilidades, pero permíteme ayudarte a rastrearlo; de eso me gano la cena de cada día. -Sonrío nuevamente, de una curvatura labial un tanto ligera pero perceptible. Si bien, Strabimon era un digimon lobuno y tenía un olfato más desarrollado que ambas humanas, Elluka había sido adiestrada en el rastreo por parte de su capitán. A decir verdad, su especialidad era la supervivencia en el medio difícil, pero la joven suboficial quería remediar su idea inútil haciendo algo que fuese de ayuda. -Encontremoslo, pero recuerden que el elemento sorpresa será el mejor knock out.

por **Scott Desaster** Dom Ene 03, 2016 1:09 am

Rose y Mirror asintieron ante la propuesta de mantener el elemento sorpresa, y casi sin perder tiempo se levantaron para comenzar la búsqueda del pequeño digimon de abrigo oscuro. Lo cierto es que encontrarlo podría ser un poco complicado, no solo por el tamaño del digimon si no también por su paleta de colores por llamarla de algún modo… se trata de un digimon monocromático, de tonos blancos, negros y grises; algo muy confundible en una gran ciudad. Las únicas pistas para hallarlo un poco más fácilmente seria ver su sombrero o su maletín, pero nuevamente, el tamaño le daba cierta ventaja al digimon para mantenerse oculto, si es que se escondía porque no pareció darle la menor de las importancias respecto a tener a una miembro de los Union Savers frente a él o que intentaran tomar su maletín… algo bastante curioso. Fuese como fuese, el trió salió de la estación de Trailmons, siguiendo a la digimon canina para que esta pudiera guiarlos hacia BlackGagumon; aunque la tarea fuera difícil, Rose tenia la confianza en que Mirror conseguiría hallar al digimon entre tanta gente, y así fue milagrosamente. BlackGabumon no se había alejado mucho de la estación, estaba dirigiéndose a una parada de taxis para poder irse del lugar de forma rápida y sin llamar la atención aparentemente. El momento para detenerlo era ese, pero habría que ser cautelosos… la mejor idea sería separarse y tratar de hacerlo cambiar de ruta, pero, ¿Cómo lograrlo sin que recurriera a escapar de ningún modo?, podría tratarse de un puzlee bastante complejo así como podría ser algo sumamente sencillo… pero bueno.

Mirror se alejo para adelantarse, aunque no fue la mejor idea en principio ya que ella antes había quedado paralizada cuando el digimon la observo y sujeto fijamente, aunque no se pudo hacer nada ya que la canina había tomado gran distancia aprovechando sus piernas largas. Fuese como fuese, quizás sería el momento perfecto antes de capturar al pequeño mafioso para poder ampliar las conexiones con Rose, quien aun no ah dicho mucho respecto a lo que debía hacer ella hoy. Si, dijo que buscaba venganza justa contra aquel que le arrebato a alguien importante de aquella historia que conto, pero, ¿Cómo iba a hacerlo y porque requería una placa de los Union Saver realmente?... el momento para aclarar más dudas podría ser este, ahora que ya había una confianza un poco más amplia entre la peli rosada y la rosa de espinas violetas, aunque también sería una buena idea intentar ir a detener a Mirror ya que si se quedaba paralizada de nuevo, es muy posible que ese BlackGabumon sospechara que algo ocurriría y comenzaría moverse de forma más precavida para no ser encontrado.

por **Elluka Clockworker** Lun Ene 04, 2016 2:50 pm

Encontrar al monocromo no fue difícil, por lo menos a los ojos de Elluka no. El destino les había concedido ese pequeño milagro, ahora era cuestión de aprovechar que no se encontraban muy lejos de la zona original. Con esos gráciles ademanes de ballet, Elluka se transformó en Lekismon nuevamente para prevenir cualquier ataque. Miró el lugar con atención. Para su suerte, nuevamente, el lugar no parecía poblado en exageración... Incluso eran pocos los que esperaban un taxi. Lo más seguro era que el digimon sombrío tratase de no llamar demasiado la atención. ¿Qué debería hacer ahora? No pudo evitar pensar en las estrategias de un ajedrecista, se preguntó ¿Qué haría Fischer en un momento así? Comenzó a analizar su partida de ajedrez con suma cautela. Miró a Rose por un instante y después dirigió sus ojos al digimon perseguido. Ellas eran tres, él uno. No había digimon de nivel Champion o superior que resguardaran al Rookie, lo más probable es que el digimon tuviese la facultad de evolucionar y se protegiese a sí mismo. Seguían siendo tres contra uno, tal vez dos contra uno, y eso era una gran ventaja.
-Quizás Nímzovitch... -Murmuró mientras clavaba sus dagas rosadas en la figura del Black Gabumon. Si hacia una apertura semi abierta como esa, la situación se pondría de su lado. Una de las tres llamaría la atención mientras las otras dos le cubren la espalda e inician un ataque contundente. -O un gambito de Dama... -Se acomodó el cuello al estirarlo de lado a lado. Si usasen dicha apertura, también tendrían una ventaja significativa al iniciar, pero podrían ser contrarrestadas fácilmente y sin muchos problemas. Era algo cerrada, y a Elluka no le gustaba jugar cerrado -Tal vez a Lekismon sí-. En dicha jugada debería estar inicialmente pegada a Mirror como chicle y esperar un intercambio posterior, o quizás una declinación.

Buscó con la mirada a Mirror y ahogó un grito de desesperación al jalarse hacia abajo las orejas. Se estaba aproximando al digimon, nuevamente corría peligro. Si el digimon la volviese a ver tratando de tomar su maletín, quizás ahora sí la lastimaría. ¿Qué harían si la canina amiga se quedase petrificada nuevamente? Lekismon no lo pensó dos veces y arremetió contra el monocromo en una pasara similar a la que había aplicado para separar a Fangmon y Garurumon. Ésta tenía mucha menos fuerza que la que usó aquella vez con el champion, pero sería la,suficiente para derribar al Rookie. Desposó la diestra ajena a su zurda en tres movimientos rápidos y cruzó miradas un segundo con Rose. Sus ojos decían "ayúdame" en toda la expresión y extensión de la palabra. Era obvia la intención de proteger a Mirror con un arrebato tan poco planeado y tan repentino, esperaba que por lo menos apreciasen eso y no la criticasen. Aprovechando la ventaja de fuerzas, tomó al sombrío digimon en ambos brazos, cual si fuese un peluche, y corrió nerviosamente sin rumbo.
-¡Rose! ¡Mirror! -Las llamó a que la siguieran. No tenía la más mínima idea de lo que estaba haciendo, pero parecía dar resultado. Cambió de dirección al notar un callejón baldío y se adentró en el lugar. Buscó con la mirada a sus compañeras y nuevamente observó a su custodio. Ese definitivamente era el estilo de Elluka, apasionado y espontáneo. No había comedido algún delito al capturar tan contundentemente al Black Gabumon; no lo hirió en realidad ya que su 'patada' no era más que llamativa, estaba bajo el pretexto de custodia para interrogatorio, así que mientras no torturase todo estaría bien. Ni siquiera habían los suficientes testigos para declarar alguna falsedad. No tenía idea de qué ocurrió, pero parecía funcionar bien.
-Sólo necesitamos un par de respuestas, después de eso serás libre. -Comentó severamente mientras se giraba con todo y digimon en brazos para ver a sus dos compañeras y suplicarles con la mirada algo de ayuda, alguna reacción. Ya estaban desposados, no podía escapar a menos que Elluka se transformase nuevamente en humana. Ahora era cuestión de que Rose y Mirror hiciesen sus cuestiones. Si algo les faltaba, quizás una mirada amenazante o un par de gritos, Lekismon podría intervenir sin problemas.

por **Scott Desaster** Mar Ene 05, 2016 12:49 am

Tanto Mirror como Rose se quedaron boquiabiertas al ver como su compañera peli rosada se lanzaba tan… estúpida y ridículamente a la acción. Si, Mirror tomo una decisión arriesgada al acercarse de pronto, pero atacar tan ferozmente, aun si el digimon no salió lastimado, fue una idea mucho más absurda y arriesgada. Había poca gente en la calle, si, pero cualquiera podría testificar contra el trió femenino si ese BlackGabumon llegaba a presentar cargos… aunque la peli rosada se apresuro para llevarlo a un callejón sin salida. La violeta y el espejo no tuvieron mucho tiempo para pensar, más que actuar como si todo hubiera sido una obra de teatro callejera pre ensayada… y afortunadamente muchos de los presentes se lo creyeron; algunos otros quedaron con la duda y otros simplemente decidieron ignorar el asunto cuando escucharon la excusa de la obra de teatro… bueno, al menos ahora las 3 estarían a salvo pero aun así la chica se mostro bastante molesta al ver el accionar de sus compañeras. Puede que ambas humanas fueran así de impulsivas, pero aparentemente ni siquiera Rose de dignaría a realizar un ataque tan a ciegas que pudiera dejarla a ella o a alguien más al borde de ir a la cárcel a los ojos del publico, porque si se analizaba bien la situación, el trió había cometido varios delitos: acoso y seguimiento injustificado, agresión directa sin razones validas, retención para interrogatorio de alguien que no había hecho nada ni mucho menos visto algo si apenabas acababa de salir de la estación de Trailmons.

Fuese como fuese, yendo a la escena de Lekismon y BlackGabumon; el pequeño digimon monocromo sacudió su cabeza un poco, moviendo de lugar su sombrero de mafioso, reaccionando a las palabras de la digimon. Uno habría pensado que el digimon habría tratado de forcejear o sacudirse, gritar o pedir ayuda haciendo uso de su aspecto pequeño e y dependiente de la defensa de alguien más, o incluso que el digimon hubiera tratado de morder a la digimon en el brazo para que esta lo soltara y así poder huir… pero no ocurrió nada. Otro caso posible es que el digimon hubiera digievolucionado a un nivel superior para así soltarse naturalmente y huir, pero tampoco fue el caso… BlackGabumon solo guardo silencio, respirando tranquilamente con los ojos cerrados, mientras aguardaba a que algo ocurriera: la llegada de Rose y Mirror. Tan pronto como el dúo apareció, Mirror se oculto detrás de Rose con sus orejas bajas debido a que ella fue sermoneada duramente, algo eficaz contra la digimon que a simple vista se notaba que admiraba demasiado a su Tamer como para no verse afectada por sus palabras; aunque regrensando a Rose, ella directamente observo a su compañera humana con furia y decepción, dando el mensaje de que estaba decepcionada de ella por haber hecho lo que hiso… pero poco pudo hacer… solamente perder confianza en la peli rosada.

Ooooh… interesante… ¿estan jugando a la policía mala y a la policía buena?... bien, bien… pero creo que hay un fallo en sus papeles… y el primero es que tienen a la policía timida, que no sirve en este juego –comento BlackGabumon con un tono seco e indiferente, sin la intención de ofender pero tampoco con la intención de bromear… simplemente, comento al aire mismo- oigan, no tengo tiempo para juegos de niñas, asique les agradecería si me sueltan y se alejan de mi… antes de que me quite el sombrero y las muerda
Pfs… perro que ladra no muerde –agrego la chica del cabello morado, cruzándose de brazos y observando al digimon con seriedad- vas a responder a nuestras preguntas si quieres irte… asique, comenzaremos por aquí, ¿Qué hay den…? –antes de que la humana pudiera terminar de hablar, BlackGabumon bostezo ampliamente- ¡¿ESTAS BOSTEZANDO?!
Pues si… me divirtió un poco este juego estúpido al inicio pero ya perdió la gracia –BlackGabumon inclino la cabeza para ver a su captora fijamente- oye, niña coneja, puedes ir soltándome ya que tengo negocios que hacer, no vine desde el bosque solo para que me hagan una Falcon Kick y posteriormente ser secuestrado
¡No te secu…! –Nuevamente antes de que la humana pudiera terminar de hablar, BlackGabumon la observo como si le hubiera lanzado una daga, haciéndola callar-
Primero intentan pasarse de curiosas con mi maletín… luego me invaden mi privacidad siguiéndome injustificadamente… ¿y ahora me dicen que no me han secuestrado… cuando me dieron una patada en mitad de la calle y me trajeron a un callejón?... pfs… a menos que sean un trió de pervertidas buscando algo pequeño de lo que abusar, los siento, yo no juego a eso –añadió el digimon con suma indiferencia hacia las tres-
¡¿co-como que a-abusar?! ¡N-nosotras jamás ha-haríamos algo! –Mirror gruño levemente, moviendo sus orejas hasta su nuca, como cualquier canino enojado- ¡A-además d-de ser así! ¡Es-estoy segura d-de que no podrías ni-ni siquiera conmigo! –Ese último comentario, estuvo de más…-
Haaaa… Darling… no… -añadió Rose, haciendo que su compañera se sonrojada pero se mantuviera firme-
Eh… lo siento, pero no me va la pedofilia ni siquiera con un trió… -BlackGabumon bostezo, mientras que Rose y Mirror lo observaban confusas- oh, cierto, tengo 37 años humanos… asique en serio, nada de cosas para adultos mayores de 18 años porque después yo debo pagar hospitales por problemas médicos, digitamas y muchas cosas que no quiero pensar ahora

Aquel comentario fue tan directo que Mirror termino por esconderse atrás de un bote de basura, temblando como una cachorra mientras observaba con miedo a BlackGabumon, quien simplemente bostezo con desinterés antes de volver a hablar, esta vez tomando una actitud más seria.

Escúchenme, esto funcionara así, será simple y rápido para que nadie aquí salga herido –BlackGabumon bostezo un poco y observo a Rose, pero hablo claro para que Lekismon también se enterara- haremos un trueque, yo les doy algo y ustedes me dejan ir sin protestas… ¿les parece bien?, a mi si, y no traten de hacerse las adultas par de niñas, asique nada de intentar negociar conmigo… porque no les funcionara para nada bien –BlackGabumon sonrió victorioso- sea lo que sea que busquen, me necesitan, no pueden lastimarme o solo me harán callar mas… y tengo el seguro de que no me mataran porque si no perderán la pista de lo que sea que busquen, ¿o me equivoco? –Rose frunció el seño y rechino los dientes ligeramente- eso pensé… muy bien, díganme el precio de poder marcharme a mis negocios de una vez

por **Elluka Clockworker** Mar Ene 05, 2016 5:17 am

Lekismon chasqueó la lengua con desdén al escuchar el desinterés del digimon a blanco y negro, y alzó un poco al susodicho BlackGabumon en precaución de no dejarlo caer.
-Todo es bajo investigación policiaca. -Protestó al dejar terminar de hablar al monocromo digimon. -No te hagas falsas esperanzas; levantas sospechas, te interrogamos. Tienes información, te interrogamos. Así funciona la vida policiaca, todo es un mero interrogatorio. -Prosiguió mientras hacía a un lado la cabeza. -¿O espera, señor, que tengamos el tiempo de llevarlo en carroza hasta la estación? Estamos muy cortos de presupuesto. -Bromeó mientras se acercaba a las compañeras. Cruzó miradas con Rose, quien no parecía lo suficientemente contenta con la situación. Lekismon no pudo hacer más que encogerse de hombros y depositar en el suelo al digimon en sus brazos. La conejuna humana tuvo que apoyarse en una rodilla para estar a la altura del digimon sin necesidad de alzarlo con un brazo. Por un momento la de los ojos de atardecer dudó del supuesto negocio que proponía Black Gabumon, pero no era momento de echarse para atrás.
-No sé cuáles sean las preguntas que tengas preparadas. -Comentó mientras clavaba la mirada en la chica del sombrero gatuno. -Pero yo preferiría primero la información, que al maletín. -Miró a la lobuna Mirror con pena. Era notoria, debido a que bajó sus orejas hasta crear un ángulo mayor a doscientos grados, casi parecía parte mayor de los gruesos adornos de la parte trasera de sus mejillas, esos que cumplían la función de bigotes. Rose se había molestado, pero no iba a permitir que Mirror fuese expuesta al peligro que era Black Gabumon. Por lo menos no iba a permitir que se flagelara con un segundo fallo. Y no es que la suboficial Clockworker dudase de la capacidad de la Strabimon, si no que el Rookie monocromo parecía tener mucho más colmillo que la femenina canina en todos los sentidos. Se notaba que era mucho más vivido que las tres, lo podía contar por ese brillo malicioso y maduro de sus ojos. Pero Elluka consideraba que ese colmillo no podía ser más afilado que el suyo, un colmillo que fue pulido en los rincones más oscuros del infierno digital y forjado a través de la incertidumbre. -No sé qué deseas saber, te dejo la parte de las preguntas a ti. -Usó una voz cálida y suave. Era como un encanto propio de la misma muchacha de cabellos rosados, no de Lekismon, era como una canción de cuna que buscaba disminuir la tensión entre el trío de muchachas. No tenía intención alguna de seducir la salida de las respuestas de Black Gabumon, pero si fuese así, bien por las tres.
-O tal vez quieran el contenido del maletín, Mirror se empeñaba en conseguirlo. -Sugirió mientras señalaba con la mirada a la cachorra detrás de su tamer. -¿Será que encontraste algo ahí? ¿O era una mera corazonada? -Cuestionó mientras alzaba la vista hacia las nubes que se movían con el viento. -Ustedes son las que saben del plan, elijan ustedes las preguntas y tomen la decisión. -Pidió con una sonrisa ladina que no tenía otro significado que no fuese el resignarse a depender de las decisiones de ese par. ¿Ya qué más le quedaba? Aún seguiría protegiendo a la canina Mirror, ya lo había prometido.

por **Scott Desaster** Mar Ene 05, 2016 5:52 am

BlackGabumon ignoro cada una de las palabras de la peli rosada, salvo cuando esta lo dejo en el suelo dándole la posibilidad de huir al inicio, pero el digimon monocromo se quedo en su lugar quieto y sin señales de querer huir; quizás podría ser un ser sin corazón pero parecía respetar los tratos de todas las formas posibles. Fuese como fuese, Rose y Mirror se observaron mutuamente… la canina no tenia palabra alguna en el asunto, ella había causado problemas o estuvo por causar enormes problemas a causa de ese maletín y sus descuidos; por lo que la humana fue la que tomo la palabra del momento. Rose se acerco a BlackGabumon y lo observo directamente a los ojos, intentando nuevamente intimidarlo o mostrarse en igualdad de seriedad que él, pero fue algo inútil. El desinterés en los ojos del digimon demostraba su poca necesidad de ponerse serio en esa situación; él lo había dicho, estaba frente a 3 niñas y siendo el un “adulto” de 37 años humanos, naturalmente nunca sería capaz de tomar interés alguno en la manera de actuar de una joven humana. Aun así cuando las miradas “de cuchillo” no querían ceder, Rose aclaro su voz y hablo de forma clara, exigiendo una respuesta sin molestarse en preguntar… ella ya sabía lo que quería.

¿Dónde está la bodega donde esconden todo el equipo de “Vendetta”? –Pregunto la humana fijamente, observando al digimon-
¿Vendetta?... ¿para eso me secuestraron?, ¿solo para decirles de ese niño? –BlackGabumon suspiro con pesadez y molestia, para luego comenzar a caminar- menudas niñas… pudieron haberse ahorrado todo este problema y habérmelo preguntado cuando estábamos en la tienda de comida de la estación… egh… pero bueno, las niñas nunca parecen ser directas aparentemente
¡¿Cómo que no somos directas?! –Rose rechino los dientes y lo observo enojada, aunque incapaz de levantar un brazo para desquitarse- te exigiría una explicación pero no me la darás… ¿correcto?
Bien, comienzas a entender esto del mundo de adultos –el digimon se alejo hasta salir del callejón, donde un SkullMeramon apareció bastante molesto- aquí tienes tu encargo… trata de no destruir nada muy pronto, me costó bastante conseguir la mercancía –alcanzo a decir antes de que el SkullMeramon le arrebatada el maletín y se fuera rápidamente en un taxi que allí aguardaba- egh… estos clientes de hoy en día…
¡Espera! ¡¿Ha-has dicho destruir?! –Mirror alzo sus orejas nerviosas- ¡¿Qué contenía ese maletín?!
¿Eh?... –BlackGabumon observo a la digimon fríamente- el trato era información de Vendetta, no del maletín o su contenido… mejor suerte a la próxima linda –BlackGabumon bostezo y después señalo la dirección contraria a la que se fue SkullMeramon- al norte, cerca de una construcción cancelada, hay una puerta de hierro oxidado… si la cruzan llegaran a una bodega con las pruebas que buscan y quizás con alguna que otra sorpresita... ahora, si me disculpan niñas… tengo negocios que atender con otro cliente –El pequeño digimon sonrió con victoria, levantando su sombrero ligeramente en señal de “cortesía”, para luego marcharse- y si intentan “interrogarme” de nuevo… voy a morderlas, y esta vez no es una broma de las mías… las morderé hasta que tengan que cocerles los miembros

Aquella última frase fue dicha con alegría y un tono casi musical… como si hubiera cantado esa amenaza que claramente podía ser verdad por parte del digimon. Fuera como fuera, ya habían resultados… el trió femenino sabia a donde ir pero a causa de eso ahora podría haber problemas en otro lugar… y ya no se podía a hacer nada; solo informar a otras autoridades y esperar que ellos pudieran encargarse de la situación. Lo importante ahora era dirigirse a esa bodega y también averiguar mas sobre “Vendetta”… estaba más que claro que ese era el terrorista que Rose buscaba, pero aun había falta saber el porqué exacto además de la pérdida de un ser querido… ¿Por qué tanto empeño?... sería una buena idea hacer preguntas sencillas de camino al lugar.

por **Elluka Clockworker** Mar Ene 05, 2016 5:17 pm

Elluka regresó a su forma normal después de ver partir al monocromo y pensar en su anterior conversación. Se encaminó con sus compañeras a la salida mientras colocaba las esposas de nuevo en su cinturón. Comenzaba a cansarse un poco, ya se había transformado dos veces en un rato muy corto. Su cuerpo se sentía algo pesado y cortado, como si estuviese por tomar un resfriado o enfermedad ¿Eso era posible en el mundo digital? Lo mejor sería dejar que Lekismon y su alma descansasen un rato en el digivice, por lo menos lo suficiente para tener energía en los siguientes momentos de emergencia. Palmeó la cabeza de Mirror para que se animase un poco y le regaló una sonrisa severa, pero no demasiado. Se acomodó la camelia azul en su cabello con ambas manos y miró a Rose, haciendo a un lado la cabeza para después hablar.
-Vendetta. -Pronunció buscando llamar la atención de la muchacha punk -¿Es el terrorista que buscas, no? -Preguntó, aunque no esperaba una respuesta muy extensa. Sabía que la chica punketta estaba algo molesta con ambas, pero debía comprender la situación así como la misma Elluka no les recriminó sus acciones anteriormente. Alborotó con suavidad el pelaje de la cabeza de Strabimon y volvió de nuevo a la del pañuelo en el brazo. -¿Qué influencia tiene mi placa ahí? -Preguntó después de dejar pasar unos cuantos segundos. Un centenar de posibilidades se generaron en su cabeza, tal y como cuando inicias tu apertura con el peón del Rey. Quizás ese tal Vendetta era un aliado del terrorista, o un comerciante, pero nada le aseguraba estar correcta, simplemente necesitaba que Rose hablase del tema y de lo que sabía. Más que para aliviar el ambiente con una conversación casual, se trataba de todo lo que no había aprendido por parte del dúo peculiar. Sin embargo, Elluka solo deseaba que el ambiente fuese tranquilo. Aún tenían un largo camino por recorrer, no era necesario formar un nudo en la espalda alta... Se llevó la mano a la nuca y se presionó, la de los cabellos de atardecer estaba algo estresada, para ser honesta. Estaba claro que se irritaría si no le respondían, pero no reclamaría nada ¿De qué le serviría? Simplemente eran solicitantes difíciles. Tal vez era un simple estrés y cansancio lo que la hacía pensar de esa manera. ¿Será que se estaba haciendo adulta? Dieciocho años y ya necesita de un masajista. Miró de reojo a la digimon lobuna y frunció los labios hacia adentro de manera disimulada. La parte que más le preocupaba en toda la situación fue la inocencia de la pobre cachorra y su comodidad con la persecución de un terrorista.

por **Scott Desaster** Mar Ene 05, 2016 10:23 pm

Rose se mantuvo callada un rato, y Mirror prácticamente parecía muda ya que no parecía poder hablar… es decir, abría su boca como si quisiera hacerlo pero no llegaba mas lejos de allí; ella siempre la volvía a cerrar apenada y miraba hacia otra dirección, casi arrepintiéndose de lo que pudiera haber dicho pero no hiso en ningún momento. Finalmente cuando el trió paso por una zona con mucha menos gente paseando por la calle, Rose se puso junto a su compañera peli rosada y hablo, pero sin despegar la mirada del frente… era casi como una charla casual, quitando el hecho de que Rose no había cambiado en lo absoluto su expresión seria del rostro, así como el disgusto del error de Mirror y de su compañera peli rosada; pero tampoco es como si pudiera siempre mantener ese disgusto… todos cometen errores, eso había estado pensando ella, y cuando ella comenzó a buscar sus errores, simplemente se fue toda decepción de sus compañeras… y todo recayó en ella. No pensó en nada de este día, pensó en el pasado… un pasado del que quizás pudiera hablar, pero antes de eso, le respondería a su compañera para mantenerla informada… ya había demostrado ser ligeramente confiable, al menos lo suficiente para enterarse más de la situación.

Luka… en efecto es Vendetta… él es la persona a la que busco… él es quien me arrebato a quien mas quería de este mundo… -la chica no uso ningún tono melancólico, solo algo apagado- y tu placa… bueno… hay ciertas zonas de la Ciudad que simplemente están resguardadas por los Union Savers como escenas del crimen o zonas de investigación… el lugar donde podremos encontrarlo hoy es una de esas zonas… sin una placa oficial de los Union Savers no podemos acceder allí… y por ende, no podemos aplicar la justicia que se merece Vendetta…
… -Mirror se mantuvo callada, aunque finalmente consiguió hablar aunque sea un poco… aunque no para informar de nada realmente importante- lo haríamos nosotras porque no creemos que nadie más pueda aplicar la justicia… pero surgió la necesidad de apoyo… aunque fuera para algo tan simple como una placa… -comento la digimon, antes de callar nuevamente-
… mira Luka, no haremos nada ilegal… solo… quizás seamos algo violentas pero tu tranquila… no morirá nadie… no quiero ver a nadie muerto si soy justa… -Finalmente Rose volvió a adelantarse un poco, dejando a Mirror junto con su compañera peli rosada- oigan, creo que ya llegamos

Efectivamente el trió había llegado. Una construcción abandonada con una certa de madera de unos 3 metros de altura, con carteles y avisos de que estaba prohibido el paso pero eran meras advertencias de los constructores cuando cancelaron el proyecto. El trió camino dentro de la construcción y allí empezaron a buscar una puerta de acero oxidado, algo difícil de encontrar puesto solo estaba el esqueleto del edificio completo, aunque también tenía la base de algunos pisos superiores, pero eso no importaba mucho. Lo que si importaba es que luego de un rato de búsqueda, quien encontró la puerta fue la canina, llamando la atención de sus compañeras para que se acercaran a ver. La puerta estaba cerrada y como dijo BlackGabumon, se encontraba totalmente oxidada… quizás sería por estar abandonada o por las lluvias y/o humedad de estar en una zona prácticamente enterrada en aquella construcción… pero no se podía asegurar nada.

Okey… tenemos que entrar allí y recuperar la evidencia que podamos… algo que nos dé un apoyo para poner contra la espada y la pared a Vendetta –comento Rose observando la puerta fijamente- ¿me apoyan?
Yo no… luego de estos problemas que cause por ser directa… creo que sería mejorar esperar un poco a ver si viene alguien… podríamos capturarlo y sacarle más información que a ese BlackGabumon –comento Mirror algo débil, pero manteniendo un tono lo bastante fuerte para ser escuchada- pero hare lo que sea independientemente de lo que se decida…

por **Elluka Clockworker** Mar Ene 05, 2016 11:39 pm

Elluka asintió después de escuchar las razones de su solicitante. Comprendía de cierta manera, aunque no entendía el por qué. Ese deseo insaciable de ajusticiar hacia determinada persona, la de los ojos de cielo eléctrico lo sabía, conocía ese sentimiento. ¿Qué le habían arrebatado? Su corazón se acongojó tanto que sintió una gran cantidad de sangre helada ser bombeada, y llevó la mano a su pecho. Esa carencia de melancolía en la voz solo podía hacer a Elluka imaginar la cantidad de horas que la punketta había llorado, tanto tiempo que la tristeza se había ido y no le quedaba más que un vacío que quería llenar con una justa venganza.

Alzó su vista hasta desmenuzar el lugar entero, parecía abandonado. Un proyecto sin terminar en plena Ciudad Central. Le parecía algo sospechoso a la del uniforme inmaculado, pero decidió no hacer preguntas obvias, quedándose callada un muy rato, quizás unos cinco minutos. Miró de reojo a la muchacha Rose y una exhalación con aires de suspiro se hizo presente a partir de la nariz de la chica Clockworker. Por un momento, ella pudo imaginar a esa niña pelirrosada y de ojos de atardecer con el uniforme escolar hecho jirones, con raspones por todas las partes visibles a través de las partes rasgadas de las medias de sus piernas, con las lágrimas fluyendo cual gigante catarata canadiense y gemidos de dolor emocional. ¿Sería que Rose también se había sentido así? Tal vez, sólo tal vez, comenzaba a sentir empatía hacia la chica, una empatía más que profesional, amistosa. Quería ayudar a esa venganza, quería sentirse realizada por medio de esa venganza.

Ya encontrada la puerta oxidada que tanto buscaban, la nueva disputa era decidir buscar a alguien o entrar por evidencia. Entendía el miedo de la canina Mirror, pero no era momento de esperar por alguien que quizás no vendría. La decisión de la de los cabellos de camelia era obvia y contundente.
-Estoy con Rose, este lugar parece desértico. -Comentó mientras se cruzaba de brazos y clavaba sus orbes celestinos en las manchas anaranjadas y marrones de la puerta, buscando algún punto físico por el cual abrirlo sin necesidad de la fuerza bruta que no tenían tres señoritas. -Además, me gustaría ver el interior de ese lugar con mis propios ojos. -Continuó mirando a la tamer y asintiendo, como dando su apoyo a ella. Probablemente el interior sería objeto de futuras investigaciones y no dudaría en enviar a su oficial superior un informe detallado de lo que encuentren, tal vez relacionado con el supuesto Vendetta, quizás como escondite de los aliados del mismo. Todo era de provecho para lo posterior a la misión, una vez capturado el terrorista, deberían demoler por completo el lugar dependiendo de sus contenidos.

por **Scott Desaster** Miér Ene 06, 2016 5:37 am

Ambas chicas asintieron tan pronto como la peli rosada dio su opinión respecto a lo que se debería hacer. Rose se levanto de su lugar y bajo hasta quedar frente a la puerta, tocándola con su mano y pasando la misma, casi intentando sentir la dureza del metal de aquel obstáculo que les impedía el paso. Mirror por su parte estiro el brazo, para frenar a la peli rosada si esta intentaba acercarse para ver que quería hacer la humana de cabello morado y sombrero felino, pero, ¿Por qué?, la respuesta a esa pregunta momentánea se respondió tan pronto como la humana rodeo su puño por una inmensa llama de color morado y ejerció un gran puñetazo contra la puerta de acero; derribándola con suma facilidad e incluso internándola dentro de esa bodega, aunque por milagro no destruyendo nada de lo que había allí dentro. Era esa clase de cosas las que hacían que uno creyera que Rose no era nadie con etiqueta o que fuera de la nobleza, si no lo contrario a eso: una chica rebelde y con fuerza suficiente para defenderse a sí misma y a otros, una Bancho o Bantyo como se les conoce en Japón. Fuese como fuese, con la puerta abierta, era momento de entrar y ver lo que había allí… y realmente había bastantes cosas por observar. Para comenzar, varias mesas con juegos de química y recetas para hacer diferentes tipos de cocteles molotov, explosivos e inclusive bombas químicas; también había estanterías con armas colgando y unas mesas apartadas donde parecía que se reparaban dichas armas… sin duda alguna parecía el lugar donde se preparaban para la guerra. Inclusive en otra zona apartada que parecía una especie de oficina había cientos de papeles, tanto de reclutamiento como de informes policiacos, mapas con puntos marcados… la sala de operaciones por llamarla de algún modo.

Vaya… realmente aquí se preparaban bien… -comento Rose entrando en el lugar lentamente, manteniendo distancia de las mesas- no toquen nada… todo esto es evidencia… -la chica saco su teléfono y comenzó a tomar fotografías del lugar- me pregunto qué planearía Vendetta aquí…
Nada bueno… nada bueno –comento Mirror manteniéndose cerca de la peli rosada, iluminando el lugar con las puntas de su bufanda- ¿alguna señal de donde ir ahora? –Pregunto la canina, observando el lugar de un momento a otro- este lugar me da mala espina… ¿es así la expresión?
Si, es así… me alegra que al menos hayas estudiado –Rose aun sacaba fotos del lugar con su teléfono, mientras observaba con atención lo que pudieran haber hecho allí- creo que tengo suficientes pruebas para que no se escape de la prisión perpetua… ahora solo debo ver si lo que hay aquí me ayuda a localizarlo…

Aunque la idea de la chica era la más sensata, no pudo ponerla en práctica puesto que se escucharon ruidos del exterior, forzando al trió a ocultarse. Rápidamente se escucharon pasos y finalmente, se pudo sentir como alguien más entraba en el lugar, aunque no se adentraba en el mismo, seguramente solo estaría revisando por fuera.

¿Hola…? –alcanzo a escucharse una voz masculina no muy grave, seguramente un adolecente que apenas estaba llegando- … genial… este lugar se cae a pedazos… o quizás alguien no sabe lo que es un saco de boxeo –agrego la voz, seguramente al notar la ausencia de la puerta-
Tsk… -Rose frunció el seño y observo a sus compañeras escondidas no muy lejos- ¿alguna tiene una idea brillante para sacarnos de este apuro? –Dijo murmurando levemente, intentando no llamar la atención de aquel sujeto desconocido- no creo que sea casualidad que alguien viniera…
I haven’t ideas –agrego Mirror temblando levemente, sujetando sus bufadas con fuerza con la intención de no crear ninguna luz- haaa…
Egh… Luka, dime que tu si tienes alguna idea –agrego Rose observando a su compañera casi desesperada- no podemos simplemente saltar sobre el… no sabemos ni siquiera si es humano o digimon… no sabemos si está acompañado o no… tenemos que hacer algo

por **Elluka Clockworker** Jue Ene 07, 2016 4:15 am

Elluka tomó de su cinturón una grabadora pequeña, esas que son de cinta y tienen pocos botones. Muchos le dijeron que era algo anticuado, pero a ella le parecía más cómodo escuchar sus notas que ver fotos y olvidar lo que diría de ellas.
-Elluka Clockworker, solicitantes: Mademoiselle Roseblood, Strabimon. Nos encontramos en lo que parece ser una base de operaciones del supuesto terrorista Vendetta. -Hablaba al pequeño aparato mientras recorría el lugar con la mirada y observaba a la muchacha del gorro animal tomar fotos con un aparato celular. Asintió con una tenue sonrisa, tal vez en conjunto ambas evidencias tendrían un mayor peso. Comenzó a describir el lugar a minucioso detalle mientras caminaba y desmenuzaba cada uno de los olores químicos. Muchos de los frascos estaban cerrados, probetas, embudos, varios contenedores matraz de diferentes tipos también. -Parece ser que existen repor... -No terminó su oración, sus oídos captaron los pasos y sintió la repentina tensión de las dos acompañantes. El trío se apresuró a esconderse, pero ninguna parecía tener una idea de cómo librarse de la situación en la que no sabían si arriesgarse o no. No había manera de saber si era un enemigo o no. Elluka debía pensar rápido, miró a una toma de gas cercana a la entrada, pero la descartó de inmediato. No podía acercarse tanto a abrir un poco la toma y ahuyentar al chico con el hedor... Hedor. Los engranajes de la imaginación de la pelirrosada comenzaron a girar a toda velocidad mientras analizaba una gradilla llena con los ojos. Para su suerte, los contenedores tenían nombre. Una sonrisa ladina se pintó en los labios de la chica y unos ojos pícaros brillaron en la chica.
-El instituto Clarion-Chapin para señoritas -Murmuró la de los ojos celestinos. Elluka recordó una situación graciosa, debía tener alrededor de catorce o quince años. Tomó una probeta con una tapa de botón, tenía una etiqueta que leía verticalmente "Crotyl Mercaptan" y miró a sus acompañantes. -Traten de contener sus impulsos de vomitar todo lo que puedan. -Suplicó y destapó la probeta, dejando salida a un olor extremadamente fétido. La dejó rodar silenciosamente por el suelo, vertiendo el líquido y provocando la expansión del olor. Frunció los labios hacia adentro, tratando de contener la respiración lo más posible. El Crotyl Mercaptan no es una sustancia nociva por su cuenta, solo es molesta y muy fétida. El olor era similar a el que despedía una mofeta al ser amenazada, pero estaba por todos lados. Sería natural que el muchacho lo confundiese con una fuga de gas o algo peligroso, incluso podría retirarse por la intensidad del aroma. Si el chico decidía quedarse aún así, debería estar loco o ser un masoquista.

por **Scott Desaster** Jue Ene 07, 2016 11:31 am

Hubo silencio por un buen rato, no se escucharon los pasos de salida ni de entrada de aquel vigilante misterioso que se había presentado de improvisto, asique moverse no era una buena opción puesto estaría aun en su posición desconocida cercana a la salida. Lo peor de todo es que la que estaba sufriendo más que nadie era la pobre canina, quien tenía lagrimas contenidas y sus manos e inclusive sus pies tapando su cara, intentando cubrir su muy pero increíblemente muy sensible y agudo sentido del olfato que en ese instante parecía estar matándola. Rose observo a su compañera con su camiseta subida hasta su nariz y quiso intentar ayudarla pero estaban escondidas en mesas diferentes, de querer acercarse y ayudar, tendría que salir a campo abierto y eso obviamente hacia que la descubrieran. Afortunadamente, o quizás desgraciadamente, se escucharon mas pasos, estos más pesados, y al cabo de unos instantes, se escucho una nueva voz más grave, de un digimon seguramente.

¿Qué está pasando aquí?, ¿Por qué ha sonado la alarma…? ¡¿QUE ES ESE OLOR?! –El digimon desconocido comenzó a quejarse y hacer arcadas, tratando de toser- ¡RAYOS! ¡¿OTRA FUGA?!
¿De qué olor estás hablando ahora? –Se escucho a la primer voz hablar tranquilamente- ¿hay una fuga de gas?
Egh… es verdad que tú no tienes sentido del olfato… buag… humano afortunado… ¡Si! ¡Hay una fuga de gas! Voy a bloquear la puerta ahora mismo… si los detectores de afuera sienten esta pestilencia descubrirán el lugar, asique muévete ahora mismo –el digimon dio un paso más, haciendo notar que estaba dispuesto a recoger la puerta y ponerla en su sitio-
¡Espera! ¡¿No sería mejor sacar lo que podamos?! ¡Al final este lugar volara! –El humano detuvo al digimon desconocido quien se mantuvo en su lugar- mira… déjame sacar lo que valga la pena… cerrare todas las tomas de gas que pueda a ver si para la fuga y después nos vamos… ¿te parece bien?
Tsk… como quieras… ¡PERO DATE PRISA! ¡MI POBRE NARIZ NO MERECE ESTA TORTURA! –Finalmente el digimon dueño de la segunda voz dio pasos de ida, marchándose del lugar hasta que finalmente no se escucho mas de el-
Uff… ah estado cerca… -la primer voz, cuyo humano era su dueño, hablo un poco más claro- sé que hay alguien aquí, nadie puede golpear una puerta de esta forma y huir sin ser atrapado por ningún peatón… venga, estamos en confianza, acabo de evitarles lo que según dijo mi compañero, es una muerte por gases –nótese que la voz aguanto una pequeña risa, seguramente esa clase de “muerte” era demasiado graciosa para alguien como él- … quizás sean de las personas que necesiten pruebas… egh… ¿Qué puedo ofrecer…?
… -Mirror estaba al borde de llorar o de romper su nariz, porque obviamente la pobre no aguantaría mucho- una máscara de gas… pídanle… una máscara de gas…
¿Una máscara de…? –Rose se volteo a ver a su compañera y esta ya estaba en el suelo con ojos similares a una espiral, lagrimas recorriendo su rostro y una sonrisa falsa que demostraba su incapacidad para seguir consiente- ¡…!
Egh… no se me ocurre nada… bueno… -la primer voz se mantuvo en silencio unos instantes- si no quieren salir y mostrarse tendré que ir a buscar y dudo que eso sea algo bueno… vamos, no les hare nada, soy un simple empleado de vigilancia –admitió el humano- si se muestran no le avisare a nadie, lo prometo

¿Salir o no? ¿Confiar en este humano o no? Realmente sería lo mejor por hacer, después de todo si había evitado una muerte por asfixia o por pestilencia en este caso, lo mejor sería hacer caso a lo que decía, y en cualquier caso de mentir, seguramente 2 Digimons de nivel Champion como Lekismon y Fangmon, mas una chica con Digisoul podrían hacerle frente si se mostraba violento.

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