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El descubrimiento de las ruinas del Monasterio Draco, tallado en lo alto de una desolada montaña en el valle de los dragones, ha despertado un gran interés por todo el Digimundo. Principalmente porque según los tallados de la pared exterior dentro de las ruinas se encuentra un obre mágico que contiene en su interior la data y poder del treceavo Royal Kinght, la cual sera dada a quien reclame dicho objeto. Según la historia grabada en los murales, el obre fue dejado allí por el mismo Royal Kinght en caso de que su poder sea necesario para derrotar al mal que se alce en el futuro...por desgracia semejante premio también a llamado la atención de quienes usarían el poder para sus propias metas egoístas. Por lo que esta aventura ahora se a vuelto una carrera por ver quien consigue el gran premio.
6 meses despues de la ultima carrera, un BanchoLeomon reune al viejo equipo de organizacion para dar un nuevo espectaculo, pero en esta carrera, el misterioso patrocinador ha enviado a un "Aspirante a Campeon" con un extraño y unico Digivice. ¿Que es lo que sucedera a lo largo del evento y como funciona este nuevo digivice?.
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-Skin hecho por Hardrock de The Captain Knows Best.
-Imagenes realizadas por Runari Wildy
y Sigrun Vinter
-Imagenes realizadas por Runari Wildy
y Sigrun Vinter
Una travesía interrumpida [Prueba de Ragna]
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Re: Una travesía interrumpida [Prueba de Ragna]
Atento y concentrado, Ragna escuchó al HiVisionMonitamon, quien explicaba como era la base en la cual, se encontraba el Digimon a vencer; Mechanorimon. La pantalla de un Monitamon pasó a mostrar una especie de mapa del lugar, el cual, usaría el castaño para organizar el plan.
El lugar era una especie de búnker, bastante pequeño, en realidad, no tenía pérdida por sus cuatro paredes y su apariencia simple, cuando el chico de amarillos ojos pensaba que sería un lugar laberíntico, digno del desafío que significaría enfrentar al Digimon máquina.
El Digimon de traje negro informó de su capacidad para eliminar los sistemas de seguridad, pese a que podía hacerlo desde la distancia, se quedaría desprotegido, en un estado de suspensión, al igual que los Monitamon que seguían sus ordenes. También, podía hacerse presente Shonitamon, el Digimon que Ragna apaleó minutos antes, ¿insinuaba que había escapado de los chicos? Era probable.
Ciertamente y como lo mencionaba HiVisionMonitamon, Shonitamon no era una amenaza, pues era ingenuo y precoz, sin embargo, los Digimon que seguían sus ordenes; Monimon, aquellos Digimon verdes de pantalla rosa pálido, el chico de ojos pardos había observado uno con anterioridad, cuando los Digimon de los niños lo atacaron con burbujas.
Dichos Digimon pequeños eran varios, más que el que había divisado el muchacho con anterioridad. Aquellos vigilaban el perímetro del búnker, observando movimientos sospechosos por parte de intrusos al área, como si de vigilantes se tratara.
No era aconsejable dejarse ver de aquellos pequeños Digimon, pero si usaba de carnada al HiVisionMonitamon, los Digimon pequeños centrarían en él su atención, aunque los sirvientes de Mechanorimon le atacaran.
Pero... ¿Qué le importaba a Ragna eso?
Mientras sonreí de medio lado, el chico de armadura pensaba un plan.
El Digimon de traje negro prosiguió con su monólogo, diciendo que desactivaría las minas terrestres; Mechanorimon estaba bien protegido, Ragna debía admitirlo.
Sin embargo, la última línea de defensa del Digimon líder eran Shonitamon y sus varios Missimon, los cuales, demostraron ser un problema anteriormente, pero con el poder del DigiSpirit de Spadamon, lograría hacerles frente.
O eso pensó él.
Pasando al recuento de habilidades de Mechanorimon, este poseí un arsenal en el cual, las garras y láseres destacaban, siendo un atacando de cuerpo cuerpo y mediano alcance, los ataques a distancia le otorgarían la victoria al muchacho de ojos pardos, eso si es que poseía uno, claro está.
Con todo esto dicho y una mofa por parte de HiVisionMonitamon, el castaño marchó junto a el Digimon de traje negro.
Un rato de caminata precedió a encontrar un claro que estaba cubierto de tierra, alejado de todo rastro de vegetación por varios metros a la redonda, quizás para facilitar el escaneo de la zona por parte de los Monimon. Hablando de estos, varios de ellos, cerca de dos docenas estaban desperdigados por dicha zona, vigilándola.
—Entonces no mentía—pensó Ragna, observando el lugar con una mirada analítica y sus amarillos ojos reflejando dicha zona. HiVisionMonitamon lo observó y lo interrumpió, sacándolo de sus pensamientos.
—Oye, chico, debemos actuar rápido, el sol se está poniendo—indicó el Digimon, antes de que el castaño mirara al cielo, observando como este se teñía de un color oscuro, siendo pintado por blancas estrellas.
—Es parte del plan—dijo el muchacho antes de voltear a ver el búnker, mientras su mirada parecía tornarse filada—Como indicaste antes, estos Digimon vigilan el perímetro, pero son débiles, tu bloquearas las minas y los sistemas de seguridad mientras yo voy moviéndome por la vegetación para confundirlos, tu estarás indefenso entre los árboles y la falta de luz en la noche te servirá como camuflaje natural—tomó aire y exhaló, para continuar—Mientras ellos estén menos organizados, yo buscaré una entrada trasera para el búnker, ahí es donde tú te irás, si es que no te han atrapado, y yo ya estaré adentro, listo para enfrentarme a Shonitamon y los Missimon si los encuentro.
El Digimon de traje negro pareció pensarlo, pero al final, asintió.
Y así nos quedamos sentados, esperando que el sombrío manto de la noche terminara de cubrir el cielo digital.
Cuando la noche por fin cayó, el plan se puso en marcha, ante la orden de Ragna.
La antena en la cabeza de HiVisionMonitamon comenzó a realizar extraños movimientos, mientras que los Monimon parecían ponerse nerviosos y comenzar a correr.
—¿Sienten como está metiéndose con los sistemas de seguridad?—se preguntó el muchacho, pensando que eso representaría un cambio en su plan.
Sin embargo, siguió tal y como había planeado, y fue con paso veloz a través de la vegetación, cruzando por esta mientras los Monimon corrían sin la más mínima organización, desesperados.
HiVisionMonitamon rió ante esto, divertido, viendo como los pequeños Digimon chocaban entre sí, hechos un manojo de nervios. Ragna, por otro lado, mantenía una mirada decidida, listo para entrar en el búnker, fuera de la mirada de los Digimon más pequeños.
Cuando logró rodear la zona, el chico de ojos pardos se lanzó hacia el búnker, con ojo avizor sobre los Monimon, quienes aún estaban chocando entre ellos.
Una patada, solo eso bastó para tumbar una puerta trasera, cuya cerradura estaba gastada y oxidada, haciendo al chico pensar en el tiempo de descomposición de las cosas, y si este estaba presente también en un mundo digital.
Cuando la gravedad había hecho su trabajo, el chico castaño había caído al suelo, seguido por partículas de polvo, las cuales, se arremolinaban a su alrededor, dándole un aspecto magistral a su entrada. Provocando también, un ruido que resonó por la base de Mechanorimon.
Consciente del ruido que había hecho, el chico buscó con ansiedad un lugar donde esconderse. Afortunadamente, logró encontrar una caja de buen tamaño, quizás contenía anteriormente un mueble, pero luego de golpearlo un par de veces, notó que estaba vacía, escondiéndose dentro de la misma.
Cuando su espalda chocó contra la madera de la caja, el muchacho escuchó una serie de pitidos, pensando que sería su D-Scanner, lo sacó de su bolsillo, para luego examinarlo.
Cuando los pitidos se volvieron más fuertes y se dió cuenta que no provenían del dispositivo, un pensamiento cruzó por su cabeza.
—Dèja vù
Fue rápido, los Missimon cruzaron la puerta del almacen donde se encontraba Ragna, habían sido avisados por los Monimon del exterior, quienes avisaron sobre la falla del sistema de seguridad una vez dejaron de lado sus miedos y nervios.
—Maldición, son muchos, ¿qué puedo hacer con ellos?—pensó mientras asomaba levemente su cabeza por donde había entrado a la caja, observando al grupo de Digimon, como si de un enjambre de abejas de tratara—Quizás pueda tumbarlos de un solo ataque lo bastante fuerte, o aplastarlos, pero salir y enfrentarlos no es una opción.
El chico no tenía claro que hacer, así que se mantuvo pensativo, a la vez que volvía a dentro de la caja, para pensar una maniobra a usar contra el enjambre de Missimon.
Sin embargo, escuchó al pitido disiparse con el paso del rato, y al volver a asomarse por la apertura, observó como aquellos Digimon con apariencia de cohete se alejaban por la puerta que anteriormente, había derribado, probablemente, buscándolo.
—Bueno, si encuentran al de traje negro, será matar a dos pájaros de un tiro.
Por precaución, Ragna llevó una caja de cartón, de menor tamaño, para usarla como escondite si era forzoso el encontrarse con alguien*, sin embargo, dudaba que de verdad, aquella caja le ayudara, ¿quién sería tan tonto como para caer en algo así?
Su respuesta llegó pronto.
—Maldito humano, ¿quién se creyó él para engañarme?—refunfuñó Shonitamon, mientras caminaba por la base de Mechanorimon, pateando el suelo con rabia—Y apenas y escapé de esos niños, demonios, ¿qué me está pasando?
—Mejor que no lo averigüemos.
—¿Eh?
El sonido del cuerpo de Shonitamon chocando en seco contra el suelo resonó por todo el pasillo, como si fuera un costal de papas, aunque a los ojos de Ragna, eso era el Digimon dinosaurio-monitor.
Y claro, el chico de ojos pardos no tenía palabras para expresar la vergüenza ajena que sentía en ese momento, así que solo siguió avanzando por el pasillo; la recta final.
Y cuando abrió la puerta, ahí estaba.
Parecía una lavadora con media esfera en su cabeza, un brazo largo el cual dejaba ver un lo que parecían ser afiladas garras y un ojo visible.
Mechanorimon observó la humano que había entrado por la puerta principal, para que luego la cerrara con llave. Cuando se dio media vuelta para encararlo, sus ojos amarillos encontraron los del Digimon mecánico.
Su mano derecha entró en su bolsillo del mismo lado, tomando con fuerza el D-Scanner, mientras que con la izquierda, ya había sacado de su estuche su Uchigatana y adoptado una posición de kendo, perfecta para el contraataque y la evasión.
—En guardia.
El lugar era una especie de búnker, bastante pequeño, en realidad, no tenía pérdida por sus cuatro paredes y su apariencia simple, cuando el chico de amarillos ojos pensaba que sería un lugar laberíntico, digno del desafío que significaría enfrentar al Digimon máquina.
El Digimon de traje negro informó de su capacidad para eliminar los sistemas de seguridad, pese a que podía hacerlo desde la distancia, se quedaría desprotegido, en un estado de suspensión, al igual que los Monitamon que seguían sus ordenes. También, podía hacerse presente Shonitamon, el Digimon que Ragna apaleó minutos antes, ¿insinuaba que había escapado de los chicos? Era probable.
Ciertamente y como lo mencionaba HiVisionMonitamon, Shonitamon no era una amenaza, pues era ingenuo y precoz, sin embargo, los Digimon que seguían sus ordenes; Monimon, aquellos Digimon verdes de pantalla rosa pálido, el chico de ojos pardos había observado uno con anterioridad, cuando los Digimon de los niños lo atacaron con burbujas.
Dichos Digimon pequeños eran varios, más que el que había divisado el muchacho con anterioridad. Aquellos vigilaban el perímetro del búnker, observando movimientos sospechosos por parte de intrusos al área, como si de vigilantes se tratara.
No era aconsejable dejarse ver de aquellos pequeños Digimon, pero si usaba de carnada al HiVisionMonitamon, los Digimon pequeños centrarían en él su atención, aunque los sirvientes de Mechanorimon le atacaran.
Pero... ¿Qué le importaba a Ragna eso?
Mientras sonreí de medio lado, el chico de armadura pensaba un plan.
El Digimon de traje negro prosiguió con su monólogo, diciendo que desactivaría las minas terrestres; Mechanorimon estaba bien protegido, Ragna debía admitirlo.
Sin embargo, la última línea de defensa del Digimon líder eran Shonitamon y sus varios Missimon, los cuales, demostraron ser un problema anteriormente, pero con el poder del DigiSpirit de Spadamon, lograría hacerles frente.
O eso pensó él.
Pasando al recuento de habilidades de Mechanorimon, este poseí un arsenal en el cual, las garras y láseres destacaban, siendo un atacando de cuerpo cuerpo y mediano alcance, los ataques a distancia le otorgarían la victoria al muchacho de ojos pardos, eso si es que poseía uno, claro está.
Con todo esto dicho y una mofa por parte de HiVisionMonitamon, el castaño marchó junto a el Digimon de traje negro.
Un rato de caminata precedió a encontrar un claro que estaba cubierto de tierra, alejado de todo rastro de vegetación por varios metros a la redonda, quizás para facilitar el escaneo de la zona por parte de los Monimon. Hablando de estos, varios de ellos, cerca de dos docenas estaban desperdigados por dicha zona, vigilándola.
—Entonces no mentía—pensó Ragna, observando el lugar con una mirada analítica y sus amarillos ojos reflejando dicha zona. HiVisionMonitamon lo observó y lo interrumpió, sacándolo de sus pensamientos.
—Oye, chico, debemos actuar rápido, el sol se está poniendo—indicó el Digimon, antes de que el castaño mirara al cielo, observando como este se teñía de un color oscuro, siendo pintado por blancas estrellas.
—Es parte del plan—dijo el muchacho antes de voltear a ver el búnker, mientras su mirada parecía tornarse filada—Como indicaste antes, estos Digimon vigilan el perímetro, pero son débiles, tu bloquearas las minas y los sistemas de seguridad mientras yo voy moviéndome por la vegetación para confundirlos, tu estarás indefenso entre los árboles y la falta de luz en la noche te servirá como camuflaje natural—tomó aire y exhaló, para continuar—Mientras ellos estén menos organizados, yo buscaré una entrada trasera para el búnker, ahí es donde tú te irás, si es que no te han atrapado, y yo ya estaré adentro, listo para enfrentarme a Shonitamon y los Missimon si los encuentro.
El Digimon de traje negro pareció pensarlo, pero al final, asintió.
Y así nos quedamos sentados, esperando que el sombrío manto de la noche terminara de cubrir el cielo digital.
~Un rato después~
Cuando la noche por fin cayó, el plan se puso en marcha, ante la orden de Ragna.
La antena en la cabeza de HiVisionMonitamon comenzó a realizar extraños movimientos, mientras que los Monimon parecían ponerse nerviosos y comenzar a correr.
—¿Sienten como está metiéndose con los sistemas de seguridad?—se preguntó el muchacho, pensando que eso representaría un cambio en su plan.
Sin embargo, siguió tal y como había planeado, y fue con paso veloz a través de la vegetación, cruzando por esta mientras los Monimon corrían sin la más mínima organización, desesperados.
HiVisionMonitamon rió ante esto, divertido, viendo como los pequeños Digimon chocaban entre sí, hechos un manojo de nervios. Ragna, por otro lado, mantenía una mirada decidida, listo para entrar en el búnker, fuera de la mirada de los Digimon más pequeños.
Cuando logró rodear la zona, el chico de ojos pardos se lanzó hacia el búnker, con ojo avizor sobre los Monimon, quienes aún estaban chocando entre ellos.
Una patada, solo eso bastó para tumbar una puerta trasera, cuya cerradura estaba gastada y oxidada, haciendo al chico pensar en el tiempo de descomposición de las cosas, y si este estaba presente también en un mundo digital.
Cuando la gravedad había hecho su trabajo, el chico castaño había caído al suelo, seguido por partículas de polvo, las cuales, se arremolinaban a su alrededor, dándole un aspecto magistral a su entrada. Provocando también, un ruido que resonó por la base de Mechanorimon.
Consciente del ruido que había hecho, el chico buscó con ansiedad un lugar donde esconderse. Afortunadamente, logró encontrar una caja de buen tamaño, quizás contenía anteriormente un mueble, pero luego de golpearlo un par de veces, notó que estaba vacía, escondiéndose dentro de la misma.
Cuando su espalda chocó contra la madera de la caja, el muchacho escuchó una serie de pitidos, pensando que sería su D-Scanner, lo sacó de su bolsillo, para luego examinarlo.
Cuando los pitidos se volvieron más fuertes y se dió cuenta que no provenían del dispositivo, un pensamiento cruzó por su cabeza.
—Dèja vù
CRACK
Fue rápido, los Missimon cruzaron la puerta del almacen donde se encontraba Ragna, habían sido avisados por los Monimon del exterior, quienes avisaron sobre la falla del sistema de seguridad una vez dejaron de lado sus miedos y nervios.
—Maldición, son muchos, ¿qué puedo hacer con ellos?—pensó mientras asomaba levemente su cabeza por donde había entrado a la caja, observando al grupo de Digimon, como si de un enjambre de abejas de tratara—Quizás pueda tumbarlos de un solo ataque lo bastante fuerte, o aplastarlos, pero salir y enfrentarlos no es una opción.
El chico no tenía claro que hacer, así que se mantuvo pensativo, a la vez que volvía a dentro de la caja, para pensar una maniobra a usar contra el enjambre de Missimon.
Sin embargo, escuchó al pitido disiparse con el paso del rato, y al volver a asomarse por la apertura, observó como aquellos Digimon con apariencia de cohete se alejaban por la puerta que anteriormente, había derribado, probablemente, buscándolo.
—Bueno, si encuentran al de traje negro, será matar a dos pájaros de un tiro.
Por precaución, Ragna llevó una caja de cartón, de menor tamaño, para usarla como escondite si era forzoso el encontrarse con alguien*, sin embargo, dudaba que de verdad, aquella caja le ayudara, ¿quién sería tan tonto como para caer en algo así?
Su respuesta llegó pronto.
—Maldito humano, ¿quién se creyó él para engañarme?—refunfuñó Shonitamon, mientras caminaba por la base de Mechanorimon, pateando el suelo con rabia—Y apenas y escapé de esos niños, demonios, ¿qué me está pasando?
—Mejor que no lo averigüemos.
—¿Eh?
PLAF
El sonido del cuerpo de Shonitamon chocando en seco contra el suelo resonó por todo el pasillo, como si fuera un costal de papas, aunque a los ojos de Ragna, eso era el Digimon dinosaurio-monitor.
Y claro, el chico de ojos pardos no tenía palabras para expresar la vergüenza ajena que sentía en ese momento, así que solo siguió avanzando por el pasillo; la recta final.
Y cuando abrió la puerta, ahí estaba.
Parecía una lavadora con media esfera en su cabeza, un brazo largo el cual dejaba ver un lo que parecían ser afiladas garras y un ojo visible.
Mechanorimon observó la humano que había entrado por la puerta principal, para que luego la cerrara con llave. Cuando se dio media vuelta para encararlo, sus ojos amarillos encontraron los del Digimon mecánico.
Su mano derecha entró en su bolsillo del mismo lado, tomando con fuerza el D-Scanner, mientras que con la izquierda, ya había sacado de su estuche su Uchigatana y adoptado una posición de kendo, perfecta para el contraataque y la evasión.
—En guardia.
- Invitado
Invitado
Re: Una travesía interrumpida [Prueba de Ragna]
—¡Humano insolente! ¿¡Quién te crees que eres para entrar a mi casa!?—el digimon máquina parecía contrariado y en seguida lanzó sus garras contra Ragna.
La pelea estaba igualada, en un principio, pero poco a poco Mecharinomon iba ganando terreno y las cosas se ponían más difíciles para Ragna. Era cierto que Mecharinomon era fuerte.
—Hola, jefe—fue un saludo muy sarcástico—¡Eh, humano, tengo información interesante! ¿Sabías que el digicore de los Mecharinomon se sobrecalienta con facilidad?—dijo la voz de HiVisionMonitamon. Probablemente había hackeado la seguridad para hablar por los interfonos... vaya, el digimon monitor era pequeño pero tenía sus recursos.
—¡Tú, estúpida babosa! ¿Le has ayudado?—bramó el digimon máquina.
—Verá, partir entre tres no es lo mismo que no repartir—interferencia que parecía una risita—Ah, y que descubrí que te llevabas comisión, quedándote en secreto con parte del botín. ¿No has oído de eso de "lealtad entre ladrones"?
Off: Me encantó la referencia a Metal Gear xDDD
Vamos a los últimos post. Ahora debes describir la pelea como quieras, siempre que siga la pauta que he comentado -al principio igualados, luego a Ragna le cuesta-. Luego, oyes la información de tu aliado y ya puedes describir cómo Ragna aprovecha la info y acabar con él, al menos para que no pueda seguir combatiendo.
La pelea estaba igualada, en un principio, pero poco a poco Mecharinomon iba ganando terreno y las cosas se ponían más difíciles para Ragna. Era cierto que Mecharinomon era fuerte.
—Hola, jefe—fue un saludo muy sarcástico—¡Eh, humano, tengo información interesante! ¿Sabías que el digicore de los Mecharinomon se sobrecalienta con facilidad?—dijo la voz de HiVisionMonitamon. Probablemente había hackeado la seguridad para hablar por los interfonos... vaya, el digimon monitor era pequeño pero tenía sus recursos.
—¡Tú, estúpida babosa! ¿Le has ayudado?—bramó el digimon máquina.
—Verá, partir entre tres no es lo mismo que no repartir—interferencia que parecía una risita—Ah, y que descubrí que te llevabas comisión, quedándote en secreto con parte del botín. ¿No has oído de eso de "lealtad entre ladrones"?
Off: Me encantó la referencia a Metal Gear xDDD
Vamos a los últimos post. Ahora debes describir la pelea como quieras, siempre que siga la pauta que he comentado -al principio igualados, luego a Ragna le cuesta-. Luego, oyes la información de tu aliado y ya puedes describir cómo Ragna aprovecha la info y acabar con él, al menos para que no pueda seguir combatiendo.
- Tamer & Digimon
- Faltas :1Prueba de Rol :ADigi Puntos :402Ficha :Nivel On Rol :RookieNivel On Rol de los Digi Aliados :Leonardo
Champion
Icono :Rango y Unidad :Luna Naitoenjeru
Rango: Soldado
División: Four Holy Beast
Unidad/Sub-division: North Shield Tortule
Flora
Rango: Soldado
División: Four Holy Beast
Unidad/Sub-division: North Shield Tortule
Rango y Unidad Digi Aliado :Leonardo
Rango: Soldado
División: Four Holy Beast
Unidad/Sub-division: North Shield TortuleInventario :
Luna Kobayashi
Re: Una travesía interrumpida [Prueba de Ragna]
- Yatt, pon la radio:
No podías esperar una reacción pacífica. No podías esperar que te diera una taza de té. No podías esperar que te invitara a jugar a las muñecas, pues este mundo, tiene mucho parecido al humano, quisiera Ragna admitirlo o no.
Las chispas volaron del arma del castaño, como si estas tuvieran vida propia, luego del fuerte choque entre las garras de Mechanorimon y el frío acero de la hoja del chico de ojo pardos. El chico cerró levemente sus ojos, protegiendo aquellos orbes de las amarillas chispas que surgieron del impacto.
El golpe lo empujó levemente, y la fuerza del Digimon mecánico era notablemente superior a la suya, pero el no retrocedió, y volvió a la carga, acercándose al Digimon con la punta de su Uchigatana deslizándose por el suelo, provocando que un chirrido resonará en la gran habitación.
Cuando estuvo cerca del Digimon, alzó su punzante arma sobre sus hombros, intentando un tajo vertical sobre el medio orbe que este mantenía en su cabeza, sin embargo, el Mechanorimon bloqueó el arma del castaño con su brazo izquierdo, mientras que intentaba un rasguño con el derecho. El chico se percató de esto, y bajó su arma, rasgando levemente el brazo del Digimon máquina, para bloquear el impacto del segundo brazo, el cual, terminó por empujarlo.
Sus pies se arrastraban por el suelo, levantando polvo y dañando levemente el cuero de la suela de sus botas, aunque poco le importo lo segundo y dio un alto hacia un lado, al ver como una luz apareció en el cuerpo del Digimon, de la cual, emergió un láser rojo, como HiVisionMonitamon había mencionado anteriormente.
El láser surcó el suelo, dejándolo levemente rostizado, pero sin daños mayores.
—Es un láser térmico; no lumínico—pensó el chico, antes de esquivar un segundo disparo por parte del Digimon—, si eso llega a tocar mi Uchigatana, la derretirá.
Colocó su mano derecha en el suelo, y luego el resto de su cuerpo para esquivar un tercer rayo, que casi atraviesa su cabeza.
—Estoy perdiendo terreno—pensó el castaño, lanzándose de nuevo contra el Digimon, planeando utilizar una fnta para asestar un corte.
Para su mala suerte, el Mechanorimon previó su movimento, terminando por golpearlo con su brazo y mandando al chico algunos metros atrás, de espaldas contra el suelo.
Aprovechando el bote de su cuerpo, se curveó para caer sobre su rodilla derecha. Cuando estuvo estable de nuevo, se vio forzado a interponer su arma a un costado, bloqueando un golpe del brazo de Mechanorimon, el cual, lo separó de su arma, mandándolo a el costado contrario.
—¿Lo notas, humano?—preguntó el Digimon, con voz soberbia—¿la diferencia entre nuestros poderes?
—No te creas mucho, lavadora andante—dijo el muchacho, sonriendo socarronamente, antes de sacar su D-Scanner del bolsillo derecho—. Después de todo, nunca di lo mejor de mí.
Y fue entonces cuando sonó en los parlantes el consejo de HiVisionMonitamon, y dándole una idea a Ragna.
—Supongo que deberé agradecerle luego al enano, pero por ahora...—en su mano izquierda apareció una cadena luminosa, la cual, acercó lentamente al dispositivo— ... ¡Me concentraré en derrotarte!
Y antes de que Mechanorimon pudiera evitarlo, el castaño chocó la cadena contra el dispositivo digital, inicando la transformación.
Su cuerpo fue recubierto por una luz blanca, la cual, parecía cubrirlo por completo. Su estatura disminuyó, superando por poco el metro, su cabello se alargó, cubriendo hasta los talones, además de adquirir rasgos felinos y un peto, así como un casco de color azul.
Una luz apareció en su mano derecha, alargándose hasta parecer un cuchillo de caza.
—Rookie Spirit Evolution—comenzó, con una voz algo aniñada, pero teniendo la escencia de la voz grave de Ragna—¡Spadamon!
Y cuando el brillo se desvaneció, dejó ver el nuevo cuerpo de Ragna.
—¡JAJAJAJA! ¿¡Eso es lo que planeas usar para derrotarme, humano!? ¡JAJAJA!
—¡Mikazuki no Mai! (Danza de la luna creciente)
Ragna comenzó a correr hacia Mechanorimon a una gran velocidad, mientras también, su espada-cuchillo comenzaba a brillar, como si estuviera cargando un ataque.
—¡No me subestimes!—gritó Mechanorimon antes de mandar uno de sus brazos hacia donde estaría Ragna, con el objetivo de ensartar sus garras en su cuerpo.
Sin embargo, como si de un borrón se tratase, el chico se desvaneció, apareciendo a un costado del Digimon máquina, con su arma en mano, y realizando un tajo con esta en su hombro izquierdo, lanzando un "Aurora Blazer" a quemarropa.
Con la pequeña onda expansiva que creó el ataque, Ragna salió propulsado hacia atrás, manteniendo su guardia alta.
De la nube de humo provocada por el ataque, emergió un láser, con destino a Ragna, pero este lo vio venir, pues era la única salida del Digimon mecánico, así que logró esquivarlo, saltando hacia un lado, y disparando un segundo Aurora Blazer.
Mechanorimon lo bloqueó con cierta facilidad, pues la media luna de energía había perdido poder debido a la distancia que recorrió, luego, lanzó un segundo láser contra Ragna, quien rodó por el suelo para esquivarlo.
—Si estoy en lo correcto, lo que hace que su DigiCore se sobrecaliente es el disparo de su láser, pues es energía térmica la que produce—pensó el chico, mientras se acercaba al Digimon virus con el objetivo de asertar otro golpe.
Este supo lo que el chico planeaba, así que colocó sus brazos a ambos lados, para luego acercarlos para atrapar al chico, este saltó, con su arma cargada para lanzar un nuevo Aurora Blazer, pero el cuerpo de Mechanorimon se volvió a iluminar, disparando otro láser, el cual, impactó con el ataque del chico, causando una fuerte explosión.
De la nube de humo que se formó, salió Ragna disparado, justo al lado de su Uchigatana. Mientras que Mechanorimon solo se deslizó por el suelo, rompiéndolo las baldosas ligeramente.
—Sus ataques se vuelven más débiles, está cansado y pronto, dejará de pelear—afirmó el chico mentalmente, siendo apoyado por la apariencia del Digimon, cuyos ojos comenzaban a cerrarse lentamente.
—Eres fuerte, eso te lo concedo—dijo el chico, tomando su Uchigatana, algo grande en su forma actual, pero manejable, con su mano libre—, pero te cansas rápido debido al sobrecalentamiento de tu DigiCore, si no me equivoco, eso lo ocasiona tu láser, ¿no?
Mechanorimon se quedó callado.
—Lo sabía—dijo antes de sonreír; su victoria era casi segura, pero no por eso debía confíarse—. Entonces, finalizaré esto, ¡con solo un movimiento más!—sentenció, mientras comenzaba a correr contra el Digimon campeón.
Su Uchigatana, en la zurda, y su cuchillo, en la diestra, siendo cargado de energía. Por otro lado, Mechanorimon cargaba un láser, y aunque su fuerza había mermado, este iba con más carga, buscando equiparar y vencer el ataque del chico.
—¡Maldito humano!—gritó, lanzando el ataque.
—¡Este es el inicio!—comenzó Ragna, mientras saltaba hacia un lado, esquivando el láser. Sin embargo, Mechanorimon se movió sobre su propio eje, intentando darle—¡El inicio de tu fin, Mechanorimon!
Con un derrape, Ragna soltó aquel Aurora Blazer que llevaba un buen rato cargando, el cual atravesó el láser de Mechanorimon, cuya fuerza mermó significativamente, terminando por impactarle de lleno. Luego, corrió a gran velocidad contra él, y con la Uchigatana, realizó una serie de cortes a través del torso del Digimon máquina, los cuales ocasionaban un daño significativo debido a su debilitada situación.
—¡Shiroi Kiba no Densetsu! (Leyenda del Colmillo Blanco)—dijo, marcando el final de la técnica, con un fuerte corte descendente, el cual, terminó por desorientar a Mechanorimon, luego, cargó su puño derecho de una energía que comenzaba a emanar vapor; hielo—¡Sugar Pound!—sentenció, conectando el helado golpe contra un ya derrotado Mechanorimon.
- Invitado
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