Mis primeros pasos por el digimundo [Rol Finalizado]

Había pasado ya un rato desde que emprendió el camino hacia el poblado, la velocidad de Mizuki le había permitido llegar casi al mismo tiempo que la chica, habían permanecido andando con cautela por si se encontraba al sheriff o su asistente, aun que para su desgracia fue todo lo contrario, observo el humo proveniente en dirección al pueblo. -Algo ah pasado... Hay que darnos prisa, rápido. - Ordeno el tamer ojos rojos a su Kyubimon, la cual apresuro el paso para llegar al lugar de donde provenía aquel humo, escondido entre edificios del lugar observo al sheriff, estaba herido gravemente, junto a este se encontraba su ayudante. - Tal parece que las cosas se salieron de control esta vez... de lo contrario el sheriff no estaría en este estado... esto significa que hubo una batalla y a juzgar por esas heridas me atrevo a decir que fueron al menos unos digimon de nivel campeón en adelante...  - Quedo pensante Kagura antes de decidir seguir adelante. Escucho el aleteo de unas alas,un aleteo familiar, miro hacia arriba, observo al Gumdramon de antes volar en una dirección.

Kagura saco nuevamente una carta azul de su bolsillo y la deslizo lentamente. - Hora de seguir por el aire Mizuki. - Ordeno mientras su Kyubimon cambia de forma nuevamente cubierta de una brillante luz, estaba llegando a su forma perfecta, Vamdemon, aun que una forma peculiar, pues no era como cualquier especie de Vamdemon al menos en el aspecto, pues Mizuki tenia una forma femenina, con una figura escultural y su cabellera larga. La sexy vampira cargo en brazos a su joven tamer y a su compañera Mikemon, fueron volando a un nivel bajo, siguiendo a aquel dragón a escondidas.

Paso poco tiempo para que lograran alcanzar a Gumdramon, deduciendo por el actuar del mismo que tal vez este podría tener una idea de lo que paso, pero por mera curiosidad, mantenía cierta distancia para tratar de averiguar todo lo que pudiera antes de actuar, ya no podría darse el lujo de actuar sin pensar, esa ya no era una forma aceptable de hacer las cosas, ya no era el mismo chico imprudente de antes, ahora estaba concentrado en hacer las cosas bien, como un agente de los US debe hacer.

Las cosas se habían vuelto a salir de control, era ahora aquel Gumdramon y aquel Metal Mamemon quienes atacaban indiscriminadamente a aquellos tamer y sus aparentes compañeros digimon, por lo que Kagura no tuvo opción alguna mas que interferir en esas acciones hostiles, como un nuevo y renovado agente de los US, su deber es mantener la paz y el orden, por lo que aprendió que antes de actuar, se debería investigar bien para asegurarse de tomar la decisión correcta. Por ello mismo pidió a Mizuki que se apresurase a llegar al lugar del conflicto el cual podía ver a lo lejos, pasaron a gran velocidad justo sobre la tamer del Mamemon que habían visto antes. Al llegar primero vieron al Impmon atacar al que anteriormente era un Gumdramon, aparentemente en represalia por haber lastimado al tamer, esto no lo hacia nada malvado en peculiar, sus acciones estaban justificadas, al final y al cabo cualquier digimon trataría de proteger a sus camaradas, eso incluía a aquellos que tengan un tamer.

Dando una simple señal con la mano, Kiseki, quien ya había descansado un poco de la batalla anterior, aun que aun estando un tanto adolorida; bajo del hombro de Kagura para hacer frente al  Impmon quien se hallaba completamente molesto. -Alto!! - Grito la pequeña Mikemon quien con una dulce y adorable voz infantil reprendió al irritado Impmon. - Meterse con otras personas mas pequeñas que tu esta muy mal nyaaa!!! lo mejor es hablar con las otras personas para atender a la situación nya. - Dijo mientras frotaba una de sus patitas en una de sus mejillas y sonreía de manera amistosa. El Impmon quien aun estaba molesto no acepto las palabras de Kiseki de una forma amistosa, si no irritante, pues hablar no arreglaba el asunto de que aquel Gundramon había lastimado a su tamer, por lo cual no dudo ni un segundo en darse la vuelta y seguir buscando al ahora Tunomon, el cual estaba oculto tras una roca, lugar al cual Impmon iba acercándose lentamente. Kiseki, algo molesta por ser ignorada vuelve a hablarle, pero el Impmon algo molesto le arrojo una pequeña flama de fuego, a lo que Kiseki molesta contesto evadiendo y dando un pequeño golpe de gato derribando instantáneamente al Impmon. -Nya... Si tan solo me hubieras escuchado no habrías tenido que recibir ese golpe.... - Decía la Mikemon algo decepcionada.

Una vez arreglado aquel asunto, Kagura bajo de la comodidad de los brazos de Mizuki para caminar y dirigirse a donde el tamer que estaba herido, lo mas probable es que solo pudiera brindarle asistencia medica básica, aquella que aprendió para curar las lesiones que el mismo se provocaba después de un arduo entrenamiento físico. La contusión no era nada grave, pero le impediría al tamer usar el brazo por al menos una semana o menos, lo siguiente que paso fue hablar un poco con aquel chico, el cual le explico lo que había pasado y que no entendía el porque de perseguirles o atacarles, si bien Kagura entendía que eran sospechosos ni siquiera él ahora mismo actuaria de esa forma tan descuidada sin tener al menos bases para tales acusaciones. Una vez termino de hablar con aquel tamer lo dejo marcharse junto a su Impmon, volteo a ver en dirección a la roca donde se escondía el pequeño Tunomon, camino lentamente y con suma delicadeza hablo. - Todo esta en orden... ya puedes salir de tu escondite. - Dio un paso mas para colocarse justo frente a aquel digimon. - Sabes.... Durante mi estadía en este mundo aprendí muchas cosas, una de ellas es... no juzgar a alguien por su apariencia, eso fue lo que realmente hiciste, ni siquiera te tomaste la molesta de quedarte en el lugar del incidente a recolectar pistas o datos... ¿te haz preguntado porque ninguno de ellos te Elimino?, eso es porque son tamers novatos, ninguno de ellos ah podido evolucionar a sus digimon a nivel campeón al menos, lo que paso en aquel lugar no fue algo hecho por simples novatos, ni siquiera el sheriff Starmon hubiera recibido tanto daño por 2 digimon novatos. Pero tu... te adelantaste a los hechos... y eso no esta bien, espero que comprendas que normalmente esto tiene un severo castigo, pero ya que no paso nada grave, y que tu también saliste herido este.... intento de "justicia", haré como si nunca hubiera visto tal acto incoherente. - Decía mientras tomaba al Tunomon en sus manos y lo cargaba para mirarlo cara a cara. - Ahora toca hacer lo que es correcto. - Llevo el Tunomon hacia Mizuki, quien lo tomo de manera delicada entre sus manos para que Kagura le comenzara a curar la quemadura con un ungüento que Kagura siempre traía consigo por tantas lesiones que sufría.

Una vez termino de atender al pequeño y de colocarle una venda para ayudar con la quemadura. Mizuki lo coloco cuidadosamente en el suelo y posteriormente Kagura saco una barra de cereal de su bolsillo y la coloco en el arenoso suelo. - Se que no haz comido nada, de otra manera no habrías regresado a tu forma anterior, debes tratar de cuidarte mas... o terminaras volviéndote datos nuevamente. Come, lo necesitaras para sobrevivir... todos tenemos derecho de vivir... - Sin decir nada mas y con la mirada baja, estuvo a punto de regresar a la escena del crimen, pero escucho unas explosiones no muy lejos del lugar. Inmediatamente corrió hacia Mizuki y subió a sus brazos, Kiseki lo siguió de cerca y subió al hombro de Kagura para que inmediatamente después, Mizuki levantara el vuelo, subiendo a la altura suficiente para divisar el lugar de las explosiones y ver quien había sido quien las causo, pues a juzgar por la potencia de estas, podría ser el verdadero culpable de tal acontecimiento.

Vio al segundo tamer corriendo junto a su compañero Keramon, estaban recibiendo disparos desde un lugar lejano, el aparente "artillero" no era otro mas que.... ¿Metal Mamemon?, Nuevamente Kagura suspiro con una expresión de irritación notable en su rostro, "Tendré que interferir de nuevo porque las personas nunca dejaran de juzgar a otros por lo que otras aparentan ser", pensaba en su mente mientras daba instrucciones a Mizuki para que volara a toda velocidad, a lo que esta obedeció inmediatamente. Alcanzando una enorme velocidad, lograron capturar al joven novato y su compañero Keramon justo antes de que  el proyectil que iba a darles tocara el suelo, Mizuki y Kagura habían evitado una enorme tragedia. Pronto se alejarían de lugar buscando un lugar para cubrirse y salir del rango de visión de Metal Mamemon. Al llegar a un lugar seguro, dejaron al joven tamer y al Keramon en el suelo. -Bien... comienza a hablar, se que ustedes no son los culpables de aquel incidente, pero podrían ser testigos clave. El otro tamer menciono algo sobre un "ángel", parecía muy asustado al respecto pero tu... - Observo a tamer quien escuchar "ángel" se abrazo a si mismo y comenzó a temblar cual  gelatina. - Veo que estas aterrado.... Como sea, necesito que me des algo, algún nombre o alguna pista, te asegurare con algo de protección, puedo contactar con algunos compañeros para que vengan a cuidar de ti... pero necesito que cooperes conmigo.. ¿si?. -Kagura le extendió su mano al otro tamer en señal de amistad, pero este retrocedió y solo repetía lo mismo una y otra vez. - Dragón.... Dragón.... - Todo mientras el Keramon se ocultaba tras su tamer. - ¿Dragón?.... Ángel... Dragón... - Dio un suspiro, estaba cansado y no tenia alguna buena pista para seguir aquel caso, solo 2 palabras que no parecían tener sentido alguno.

Observo a en dirección a Mizuki como si buscase algún consejo de su fiel compañera, los resultados no fueron lo planeado, aun necesitaría volver para examinar la escena de tal acto de "terrorismo". - Oh... cierto... aun necesito hablar con aquel Metal Mamemon... me pregunto donde habrá dejado a su tamer... no es bueno que los digimon se separen de sus tamer, podría pasarle algo a alguno de los 2... Lo mejor sera ir a hablar con él, Mizuki, cuento contigo. - Dando la orden, Mizuki nuevamente tomo a Kagura en brazos y emprendió el vuelo. -Recuerda regresar al pueblo, estando en lugares así no estarás seguro!!!!- Grito al pobre tamer y a su Keramon, los cuales estaban siendo dejados atrás. No paso mucho tiempo antes de que pudieran volver al lugar cercano en el cual había encontrado a aquellos tamer y vieron nuevamente al Metal Mamemon, volaron directamente hasta llegar a donde aquel digimon estaba y aterrizaron frente él. - Espero te des cuenta de tu grave error... casi matas a una persona y un digimon inocente... - Fue en ese mismo instante en que Kagura explico de la misma forma que le había explicado al Tunomon, para que Metal Mamemon pudiera entender. - Espero que la próxima vez tengas mas cuidado, por favor, vuelve con tu tamer, no estoy seguro de si es correcto que la abandones pues parece ser que actúas como su voz de la razón... Por alguna extraña razón presiento que se podría meter en problemas sin ti.- Sin ninguna otra palabra mas que agregar, Kagura volvió una vez mas a Manos de Mizuki para ir volando hacia donde se encontraba aquel edificio en llamas, tal vez era un poco tarde, pero definitivamente buscaría pistas que pudieran revelar que fue lo que ocasiono aquel incidente.

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Mientras tanto en aquel pueblo algo sucedía nuevamente, otros edificios mas ardían en llamas, los digimons corrían de un lado a otro, gritaban, suplicaban, partículas de datos salían de aquellos digimons que mostraban signos de batalla, no, batalla es el enfrentamiento de 2 fuerzas con las mismas posibilidades de ganar, aquello se había convertido en una masacre, aquellos que eran mas rápidos escapaban a las afueras del pueblo buscando refugio en el cruel y caluroso desierto, preferían morir de sed que a manos de aquel monstruo. Muy pocos habían quedado, y ahora todo estaba claro, que aquellos tamers y sus compañeros digimon no huían de aquel pequeño Gundramon, si no de aquel que sabían, había causado el primer indicio.

Una pequeña silueta salia de una iglesia que ardía en llamas desde su interior, la figura parecía pertenecer a un chico de estatura baja, su pelo azul como el mas profundo océano, sus ojos azules como los zafiros, y una sonrisa de satisfacción. -Eeeeeh... que rápido arden todos, casi no me dio tiempo de disfrutarlo. Bueno ya iba siendo hora de purificar este sitio lleno de pecadores, lamentablemente ustedes no son dignos de disfrutar de estas tierras, por eso deben arder en el infierno. - Decía en un tono burlón, su voz era la de un joven de no mas de 20 años.  - Pero claro... quien podría esperar yo de ustedes patéticas cucarachas....  Rayos debo recordar que volverán a renacer... el trabajo de limpieza nunca acaba... pero al menos lo disfruto hahaha.... HAHAHAHA!!! - Reía maniaticamente mientras veía como los habitantes de aquel pequeño pueblo se retorcían de dolor. - Yo, Akihiko Akuma, seré quien erradique el mundo de la escoria como ustedes.

Del caos al silencio, así como si hubiese sido cosa de magia de un momento a otro las cosas se habían tornado un tanto mas tranquilas, los gritos habían cesado misteriosamente, y esto llamo la atención de aquel chico de pelo azul, el cual se detuvo un momento a observar a sus alrededores, algunos edificios siguen incendiándose tal como los había dejado antes, lo que le parecía raro es que ya no se podía observar a nadie corriendo con pánico alrededor del lugar, tomo su dispositivo en una mano y en la otra apareció una serie de cadena con códigos digitales.

Dragon oscuro que has nacido para volver todo cenizas, ven y concédeme tu poder, para purificar este mundo una vez mas hasta el renacer de una nueva era, mi Digi-spirit bestia... Lucemon Satan Mode.

Menciono antes de deslizar aquella cadena de códigos complejos por el lector del dispositivo, el cual reacciono brillando y cubriéndolo con una luz oscura, parecía como si sus ropas se desgarrasen o desintegraran con aquella luz, pero esto no era si no el comienzo de su transformación, de un momento a otro iba aumentando de tamaño a medida que cambiaba su forma a la de un enorme dragón en cuyas patas delanteras sostenía una enorme esfera oscura y sobre su cabeza se encontraban 7 sellos que representaban los pecados capitales.

¿Donde están?, ¿a donde se han ido aquellos condenados por mis llamas? - Hablo el enorme dragón que se encontraba sobre volando aquel pequeño poblado. -  ¿A donde se han ido? ¡¡maldita sea!!. - Con una notable expresión de fastidio comenzó a lanzar un rayo desde la esfera oscura hacia algunos edificios los cuales se comenzaron a derrumbar. -Bien, si no sale nadie, entonces tendré que hacerlos salir... - Sonrió de una manera siniestra mientras seguía disparando aquel rayo, edificio por edificio, cada uno cayendo hasta solo quedar unos cuantos. Una vez mas cargo aquel rayo en la oscura esfera que sostenía, esta vez apuntando al edifico que tenia frente a él, edificio donde aquel Tunomon y su reciente amigo se resguardaban. La carga de aquella energía estaba casi lista y apunto de dispararse cuando de pronto, una linea de color rojo sangre se enredo en el cuello del enorme dragón, jalándolo para que el disparo de energía del dragón se desviara, esto por supuesto afecto la eficiencia del rayo para destruir por completo el edificio y provocando que solo la parte superior de este, se derrumbara en escombros que estaban a punto de caer sobre los pequeños digimon bebe.

Un estruendo se escucho, era el crujir de aquellos escombros siendo destrozados por unos puños de gato de una pequeña Mikemon, la cual había destrozado aquellos escombros para proteger a los digimon bebe, todo esto mientras se escuchaban maldiciones provenientes de aquel enorme y sombrío dragón. -¿Q-que.... quien demonios...? - Se preguntaba el enorme Lucemon SM mientras con una de sus alas termino soltándose de aquel cabe carmesí. Observo en dirección de donde había venido aquel ataque, su mirada se encontró con una vampiresa, una Vamdemon bajo el resguardo de miles de murciélagos a su alrededor que tenían la función de escudos, se encontraba furiosa. - Vaya, que enorme sorpresa, no tenia ni idea de que hubiera digimon de este tipo por aquí, aun que me alegra saber que aun hay esperanza de que haya digimons temerarios, así tendré el placer de divertirme mientras te saco el digicore. - Amenazo y sonrió el Lucemon SM que sin previo aviso expulso de su boca una enorme llamarada de flamas negras que iban en dirección de la Vamdemon, esta a su vez abrió su capa para dejar salir una oleada de murciélagos que se incineraban con las llamas, pero al menos así evitaba el ser quemada por aquel fuego.

En la parte baja, entre los estrechos callejones de ese pequeño pueblo en ruinas, caminaba Kagura para encontrarse junto a su compañero Mikemon. - ¿Están bien?, perdonen... creo que llegue un poco tarde por tratar de investigar en aquella destilería. - Dijo el chico de ojos rojos disculpándose con aquellos digimon bebe mientras veía a su alrededor los edificios destruidos.

El ataque de Lucemon había sido interrumpido, había recibido un impacto directo en la esfera oscura que resguardaba celosamente en sus patas delanteras,  una pequeña grieta parecía haberse formado por la fuerte explosión, a lo que este al darse cuenta, reacciono de una manera aun mas agresiva. -¿Como.... Como se atreven?, voy a incinerarlos hasta que no quede rastro alguno de su miserable existencia!!!! - Reclamaba mientras en un arrebato de ira comenzó a expulsar una intensa llamarada tanto de su boca como de la esfera. -Si sigo dejando que expulse esa cantidad de fuego... terminara destruyendo por completo este pequeño pueblo, debe ser detenido ya.- Hablo para si misma la vampiresa que era Mizuki en su etapa perfecta. - Si tan solo el amo Kagura...- Fue interrumpida por la intensa llamarada que casi la alcanzaba de no ser por los murciélagos que nuevamente uso para bloquear aquel intenso fuego. - Si tan solo estuviera cerca para saber que hacer... - Nuevamente uso sus látigos sangrientos en una serie de combos, golpeando el rostro de aquel Lucemon SM, los golpes consecutivos eran molestos y le lograban aturdir por pequeños momentos pero aun se mantenía a flote, fue ahí que Mizuki al mirar hacia abajo en busca de su tamer, logro notar la pequeña fisura en la esfera que aquel Lucemon protegía tanto. -¿Sera posible que... ?, ahí es donde recibió un impacto... Claro, ahora entiendo como es posible que soporte todos mis ataques, no estoy atacando el lugar correcto.

Mientras tanto en la zona baja donde el pueblo seguía ardiendo, entre los escombros se encontraban aquel chico de pelo color plata y la adorable Mikemon quien a pesar de las circunstancias se acicalaba su pelaje como cualquier otro felino. -¿Dices que quieres ayudarme a acercarme a Mizuki?... - Kagura miro fijamente a aquella Gumdramon, dudaba si involucrarla en algo peligroso, tanto para ella como para él mismo, exponerse en el aire con aquel enorme "monstruo", serian un blanco fácil, no importara que tan rápido fuera, simplemente aquella criatura tenia un poder temible y un rango de ataque increíble del cual muy difícilmente escaparían, si tan solo Mizuki tenia problemas y están al mismo nivel aparentemente, pero la situación era critica, recibieron un poco de ayuda con "fuego amigo", un proyectil de alguien había acertado a la criatura, y aun con ello no habían logrado hacer gran daño a la criatura, aun que parecía que algo cambio, ya que noto como la criatura se enfureció al grado de sacarlo de quicio. ¿Que fue lo que paso?, acaso aquella esfera es su punto débil, definitivamente algo cambio, y es que poco a poco una pequeña grieta se formo, como si la esfera estuviera a punto de ceder, pero aun así no funciono.

Acepto. - Contesto en seco Kagura mientras observaba a su alrededor, parecía que nada estaba a su favor, pues no había muchos puntos estratégicos cercanos de Mizuki donde pudiera colocarse para dar instrucciones, incluso el lugar mas alto del pueblo se encontraba ardiendo como el resto de los edificios, entonces ahí fue donde los vio, observo unas pequeñas figuras correr, no cabía duda, reconocería aquella silueta perfectamente circular, era la de aquel Metalmamemon, y si el se encontraba ahí, quien estaba junto a el no podría ser otra mas que su alocada tamer. -Ahí!!- Dio la orden Kagura. - Llévame a aquel lugar!! rápido!! - Fue así como la Gumdramon tomo a joven tamer de los brazos y con un enorme esfuerzo lo comenzó a levantar. - H-Hey! espérenme!! - Grito la pequeña Mikemon saltando y colgándose de un pie de Kagura. Estaban a medio camino cuando... -¿Hmmm?... ¿mas moscas para quemar?, ¿es que fueron ustedes los que me lanzaron aquel proyectil?, ahora verán de lo que soy capaz!! - Estuvo a punto de golpearles aquel enorme dragón un coletazo, pero uno de los látigos de Mizuki se enredado en la cola de este disminuyendo la fuerza del impacto provocando que recibieron un pequeño golpe que los impulsaría para llegar al lugar indicado aun que lastimados. - Yo soy tu oponente!! - Reclamaba Mizuki aun forzando con la cola de Lucemon tratando de que este no terminara por aplastar a su tamer. - Eres.... Una molestia!!! - Grito Lucemon golpeando a Mizuki con una de sus enormes alas y lanzando la justo hasta donde su tamer se encontraba.

El impacto no había sido tan fuerte, relativamente solo fue un golpe, el primero que recibía, pero otros cuantos mas podrían forzar a Mizuki a regresar a su forma Rookie, el tiempo apremiaba. - Amo Kagura, la esfera!! es su... - Fue interrumpida por su tamer. - Es su punto débil, y sospecho es que su fuente de poder... pero... mientras siga atacando a diestra y siniestra sin que nos deje acercarnos... no podremos hacer nada... a menos que... - Su rostro expresaba claramente su idea, su mirada se poso sobre la esfera. - Tenemos una oportunidad... Un golpe... Solo un golpe para acabar con ese bastardo. Mizuki, acércate lo mas que puedas, no importa que pase. - Ordeno de una forma fría, como si supiera el riesgo que su compañera podría sufrir. -  Como ordene usted amo Kagura. - Asintió Mizuki, lanzándose una vez mas al combate contra aquel monstruo. - Espero estar en lo correcto...  - Decía el chico de pelo color plata para después soltar un pesado suspiro y sacar su baraja de cartas y su dispositivo. - Vamos... tienen que estar por aquí.... los necesito ahora... - Seguía buscando a prisa mientras Mizuki trataba de resistir todos los ataques posibles y se acercaba cada vez mas a la esfera maniobrando en pleno aire. - Aquí... aquí están. - Afirmo. - Bien Mizuki... espero que estés lista para un pequeño cambio... - Tomo la primera carta y la deslizo por el lector del dispositivo. - Cambio de carta, Blue Awakening. - Un destello salio de la pantalla, los efectos habían sido enviado directamente a Mizuki que poco a poco resentían menos los ataques de Lucemon. - Puedo sentirlo... el dolor no es tan fuerte como antes... sus ataques no me hacen tanto daño gracias a mi amo Kagura. - Decía Mizuki mientras contra atacaba nuevamente con sus látigos, golpeando nuevamente al Lucemon dejando esta vez marcas mas profundas. - Como sospechaba... Lucemon es un digimon tipo virus... ahora que eh cambiado el atributo Virus de Mizuki a un atributo de Vacuna.... ella no recibirá tanto daño mientras que él si recibirá bastante. - Mencionaba orgullosamente Kagura.

Kagura paso nuevamente otra carta por el dispositivo. - Ahora que ya sabemos unos cuantos secretos tuyos... te tenemos donde queremos.... acabaremos contigo por todo lo que has hecho a las personas de este sitio!!! - Grito furioso Kagura. - Cambio de carta, Crescemon: ataque Lunatic Dance.- Un nuevo destello salio de la pantalla del dispositivo, esta vez concediéndole a Mizuki la capacidad de crear 3 clones de ella misma, formando así un pequeño grupo de cuatro Vamdemon. -Agh!! ¿como se atreven?!!! - Reclamaba aun mas furioso el Lucemon, sufriendo algunas heridas pero no cayendo derrotado, y confundido al ver como su oponente se había multiplicado. -¿C-Como?- Nuevamente Kagura aprovechando la oportunidad pasa otra carta. - Cambio de carta, Nightmare Soldiers Emblem. Con esto no sera tan fácil que las destruyas a todas... Mizuki, te encargo el resto por ahora... -Decía Kagura mientras volvía a rebuscar en su baraja. - Ahora solo falta... - Miraba fijamente 2 cartas que separo de la baraja.

Mientras tanto, en el aire aun se llevaba una feroz batalla contra aquel enorme digimon. Todas las Mizuki atacaban al mismo tiempo a aquel Lucemon sin darle oportunidad alguna de atacar. - Ya basta.... ya basta... YA BASTAAAAA!!!!- Rugio con fuerza la bestia aun mas furiosa que antes casi en una explosión de cólera que desencadeno un sin fin de llamaradas lanzadas desde su boca y esfera que iban en varias direcciones, acabando 1 por uno con los clones, pero finalmente bajando la guardia y exponiendo por completo aquella oscura esfera. - Amo Kagura!!! - Grito Mizuki, a lo que Kagura asintió y rápidamente paso una carta tras otra en un combo. - DOBLE CAMBIO DE CARTA!!! Excalibur y Battle End. - Un radiante rayo de luz fue expulsado de la pantalla del dispositivo, el cual fue a dar hasta Mizuki, comenzando así la estrategia final de Kagura, el todo o nada, habiendo cambiado anteriormente el atributo de Mizuki a Vacuna y ahora otorgándole la espada sagrada y legendaria que elimina todo mal, así como dando un gran impulso sobrecargando a Mizuki de poder para que llegara hasta sus limites, para que con un descuido del oponente y un gran y certero golpe, terminar aquella batalla. -Ahora Mizuki!!! - Ordeno Kagura a su ahora Vamdemon la cual resplandecía llena de energía quien velozmente se lanzo a contra la esfera que se encontraba vulnerable. - ¿Que?!! no, no puedo permitirlo!!- Exclamo la enorme bestia tratando de detener a Mizuki, pero esta logro evadir el golpe que venia venir de este con una maniobra aérea y dando un giro en torbellino logro acertar el golpe justo donde la grieta. - NOOOOOOOOOOOOO!!!- Gritaba de dolor aquel dragón mientras parecía deshacerse en cadenas de datos al mismo tiempo que Mizuki se degeneraba hasta volver a ser una simple y pequeña Viximon.

A pesar de que todo había aparentemente terminado, Kagura se lanzo corriendo preocupado por su compañera, deslizándose por una pequeña pendiente para caer de pie y volver a correr en dirección a ella. -Mizuki!!!- Grita preocupado mientras busca en todas partes.- Mizuki!!!- Grito una vez mas hasta ver en un pequeño claro despejado donde el fuego ya se había extinguido, la pequeña silueta de una Viximon tendida en el suelo. - Mizuki... - Corrió lo mas rápido que pudo para recogerla entre brazos. - E-Estoy bien... - Contesto la pequeña Viximon, la cual fue abrazada fuertemente por su tamer. -Lo se... Perdón... Mis estrategias siempre te obligan a ponerte al limite... - Confeso Kagura mientras acariciaba a su compañera quien aun se encontraba completamente agotada. - Sabia que lo lograríamos... yo siempre eh confiado en ti... - Contesto la Viximon, Kagura en silencio, camina cargando a su compañera, cargando a Mizuki en sus brazos. Pero antes de irse, un ligero ruido llama su atención, de unos escombros, sale aquel chico de antes, riendo, como un loco, como si le encontrara gracia a haber sido derrotado. - INTERESANTE!!!, MUY INTERESANTE!!- Decía a espaldas de Kagura, el cual se volteo para verlo. -Sobreviviste... - Menciono observando al que hasta hace unos instantes era un enorme Lucemon. -Claro que sobreviví... no creerás que  me moriría por un ataque como ese, pero debo felicitarte, eres una de pocas personas que ah logrado lastimarme de esta manera, felicidades, lo reconozco, tal vez eres un poco mas especial de que esperaba, pero aun siendo así... algún día acabaras aplastado por mis manos como el insecto que eres porque.... -Fue interrumpido por un buen puñetazo de parte de Kagura quien se lanzo para darle aquel potente golpe al rostro. - Agh... No deberías interrumpir cuando estoy hablando... Rayos... ya son 2 golpes, y aun ni se tu nombre... - A pesar del dolor aparentemente aquel sujeto no podía dejar de sonreír. - Mi nombre es Kagura.... Kagura tenshi. - Contesto a manera cortante. -¿Kagura Tenshi?, Vaya.... esto debe ser el destino, que trama mas poética. - Volvió a reír demencial mente. - Bueno... Mi nombre es Akihiko Akuma.... Y estoy seguro que algún día nos volveremos a ver... así que... hasta otra... Kagura Tenshi... - Reía mientras iba adentrándose dentro de un portal que aparentemente había hecho aparecer de la nada.