El poder descontrolado y la sanación de un alma dolida [Priv. Scott y Sasha] Finalizado

Sasha caminaba lentamente al lado de Scott mientras escuchaba sus palabras. En mas de una ocasion, se tropezo debido al mal equilibrio de sus patitas a la hora de caminar; era una nueva etapa que estaba sufriendo y aun no se sentia del todo bien despues de salir de una operacion que casi, le cuesta la vida.

Esto es un poco mas difícil de lo que creí posible... Mizuki se estaría riendo en este preciso instante si me viera así - murmuro la cachorra con una mirada dolida mientras se sacudía para recuperarse del mareo. Estaba acostumbrada a volar como Gumdramon, pero ahora que diga evolución se esfumo, tenia que conformarse con caminar en 4 patas, sintiendo ademas, algo muy frió en su cuello. Era su anillo sagrado, solo que ella no lo sabia en ese instante.

¿tú sabes de donde es mi bufanda, verdad? En su momento, quien me la dio no me dio detalles más allá de su increíble resistencia… pero creo que tu podrías facilitarme esa información, ¿no crees?

La cachorra volvio a tropezar por tercera vez, esta vez de manera mas dolorosa ya que su rostro choco de lleno con el pavimento del pasillo. - Ouch... - se escucho esa palabra viniendo de la misma Sasha mientras recuperaba la compostura, su rostro estaba ligeramente rojo por el golpe, si fuera una humana, estaria sangrando por la nariz en ese mismo instante.

¿Tu bufanda? - ella se cuestiono con una interrogante hasta que recordo aquella prenda que llevaba Scott en la enfermeria y de la cual llevaba ahora, el color era exactamente el mismo y el aroma que desprendía, aparte de una pequeña pista muy llamativa y amigable de una zorrita en la suya y una de un perrito en la de Scott, eran exactamente igual y era porque ambas prendas estaban hechas de un material especial desconocido para Sasha.

Pues... - su mente ya se habría librado de las ataduras del pasado, podia pensar libremente sin sentir alguna opresion en su mente ni nada borroso, todo lo que vivio con su madre, paso por su mente como si fuera una especie de pelicula, llegando a la parte donde se responderia la interrogante del humano. Sasha se detuvo y comenzo a revelar informacion de su pasado - Tu bufanda y la mia tienen un nombre en especifico: Sukāfu - sujeto con una pata, la cola de su bufanda, observando el color rojo puro de la misma junto a la tela - No tengo mucha informacion al respecto sobre el origen de esta prenda, pero por lo que he oido, para una extinta tribu, es considerado un tesoro sagrado, para ellos claro... representa el honor puro de una familia y de tu nombre si portas una de ellas, ya que, la manera en como se teje y se crea, es totalmente desconocida pero demasiado dificil de crearla aunque no lo parezca - suspiro - No te culpo si dudas de eso ultimo, porque yo tambien admito que crear una prenda asi no resultaria tanto trabajo, de no ser por los detalles que acabamos de presenciar y de los que mencionaste: Extrema durabilidad y una magistral resistencia a los elementos.

Melek, es que la Renamon que cuido de mi en mi infancia, me contó que esta bufanda, ademas de ser un tesoro sagrado para esa tribu, lleva consigo una adivinanza que me tomo mucho tiempo poder descubrir y que para esos digimon en especial, tenia un significado muy especial... ya que ella no me lo revelo, me lo dejo de tarea antes de desaparecer de mi vida, la cual es la siguiente:

"Es algo que devora todas las cosas: aves, bestias, plantas, vida digital y flores; roe el hierro, muerde el acero, mata reyes, arruina ciudades y derriba las altas montañas. Un objeto puede resistirlo por muchos siglos y siglos y sin embargo, no es devorado por ese algo"

Sasha termino de narrar aquella adivinanza, sintiendo las palabras de su madre en su oido, como si fuera un De Ja Vu. Señal de que ya estaba madurando hasta estar a la altura de Melek o puede que un poco mas. Su mente se adaptaba con el pasar del tiempo y evolucionaba al punto de corresponder con su edad actual. Alli mismo observo a Scott y termino de explicar lo ultimo de la bufanda - Como te dije anteriormente, la procedencia de estas bufanda es algo muy desconocida para mi, pero se que proviene de una cuidad perdida en algún lugar del digimundo y su significado es tal como te lo dije. Es raro que aquel sujeto que te lo entrego, no te haya cobrado una gran cantidad de dinero por el material raro que esta hecho, tómalo como un lindo regalo de la vida misma. - Le dio una ultima mirada a Scott y le sonrió: ¿Deseas saber cual es la respuesta de la adivinanza?

Al escuchar las palabras de la cachorra, el pelinegro observo su propia bufanda con cierta curiosidad. Le daba curiosidad saber cómo y con que fue hecha, aunque ciertamente tampoco iba a averiguarlo; después de todo, solo era una bufanda. Lo que si estaba dispuesto a averiguar era la identidad de aquel que se la entregó en primer lugar. No sabía quién era, no sabía porque le entrego esa bufanda; no sabía nada, excepto que se trataba de un digimon varón. Fuese como fuese, cuando escucho la adivinanza provenir de la cachorra, su mente automáticamente dejo pasar las palabras. Era malo adivinando; odiaba las adivinanzas con casi la misma fuerza que odiaba a los humanos sin digivice; era terrible y no le gustaba cuando venían con una adivinanza para él. Cada vez que le lanzaban una adivinanza, el pelinegro directamente se rendía, puesto no tenía tiempo para ponerse a decir respuestas sin sentido hasta dar con la correcta.

Francamente me cuesta creer que una bufanda como esta exista, pero tampoco seré yo quien se queje… esta cosa me ha traído muchas oportunidades para sobrevivir y hacer que otros sobrevivan… además de que en invierno cuando no quiero pagar la calefacción es perfecta –El mercenario suspiro levemente y comenzó a caminar- y solo dime la respuesta de esa adivinanza, no soy de la gente que saca las respuestas instantáneamente o que no se rinde hasta dar con la clave… al contrario, odio las adivinanzas y si quieres que seamos amigos, no volverás a decirme ninguna adivinanza… camina

Con eso dicho, el mercenario continúo caminando hasta llegar al gran comedor. Todos estaban allí sentados en la mesa que iba de un extremo de la habitación al otro. Spike (Boltmon) bebía un barril de cerveza tranquilamente junto a Nova, quien solo bebía un vaso pequeño de agua; Samanta (LadyDevimon) y Farah (Persiamon) discutían con Labramon en medio, siendo el tema de la discusión quien lo abrazaría durante la cena. Kyuki (Kyukimon) y Grademon estaban sentados juntos, aunque Grademon parecía hablar solo porque no se escuchaba una sola palabra de la boca del contrario (Quien parecía mujer ciertamente). Crimson (SkullSatamon) jugaba a las pulseadas con un Astamon vestido de maid sin ningún motivo aparente; y finalmente Meliodas estaba sentado en un rincón apartado con un chichón en la cabeza, seguramente producto de hacer enfadar a BR por algún comentario fuera de lugar.

Scott simplemente camino junto a la cachorra y la subió a una silla vacía, sentándose el justamente al lado. Al cabo de un rato, la Renamon de pelaje oscuro salió de una puerta de restaurante, empujando un enorme carrito lleno de comida para que todos pudieran tomar su parte, además de un agregado de un platillo con la comida preferida de cada persona allí presente. El único que no se sirvió nada de comida fue aquel Astamon, quien simplemente se sirvió una taza de café, le hecho una botella de miel entera y se esfumo en el aire como si nada.

Bueno… escúchenme todos –Interrumpió el pelinegro, levantándose de su silla tranquilamente- esta de aquí, es Sasha… fue operada por Giga y ahora está lista para empezar una nueva vida… quiero que sean amables con ella, puesto ya es parte de la familia –Con eso dicho, Scott volvió a sentarse- ahora sí, coman
¡Oye nueva! ¡¿Quieres sentir la resistencia de mis huesos?! –Pregunto el esqueleto rojo riendo alegremente-
¡Farah! ¡Allí tienes a otra canina! ¡Abrázala a ella! –Exigió la vampiresa-
¡Ve tú! ¡Yo no abrace a Labra en todo el día! ¡Deja de acapararlo! –Bufo la gata-
¿Por qué no pueden buscar otra cosa que abrazar…? –Se lamentaba el cachorro digital-
¡VIVA LA BUEHA VIHA! Hic… ¡OTA ROHDA POR FAOOOOR! Hic –Hablaba borracho el Boltmon-
Bienvenida a la familia –fue lo único que dijo Nova-
Bueno Sasha, parece que pasaste la prueba definitiva –La Renamon le sirvió un plato de arroz- integrarte a una familia nueva y dejar esos problemas tan molestos del pasado
Seh… felicidades enana –Bromeo el pelinegro de sorpresa- a partir de ahora, ya no seremos tan compasivos cuando sea hora de formarte para que vuelvas a ser una gata

"Es algo que devora todas las cosas: aves, bestias, plantas, vida digital y flores; roe el hierro, muerde el acero, mata reyes, arruina ciudades y derriba las altas montañas. Un objeto puede resistirlo por muchos siglos y siglos y sin embargo, no es devorado por ese algo"

Es el tiempo, el único que puede devorar todas las cosas sin importar cual sea, a excepción de algunos elementos en especifico, como lo puede ser el mismo digimundo que tiene una existencia inimaginable o nuestras bufandas. Estas pueden pasar de generación a generación sin sufrir daño por el tiempo, si es que se la sabe cuidar bien claro. - explico la cachorra a medida que alcanzaba al humano, como si fuera su dueño.

Si, lo se, es un poquito raro esa adivinanza ya que la respuesta es difícil de averiguar pero bueno, no es algo que yo inventara sino la antigua portadora de esta bufanda roja. Estos ítem son muy valiosos, debemos cuidarlos muy bien pase lo que pase. - finalizo su comentario con una sonrisa, sintiendo la calidez de la prenda en su cuello.

Despues de tener esta pequeña charla, ambos se acercaron a un gran comedor, donde se encontraban algunas caras conocidas y otras nuevas para la cachorra, todos teniendo un dia completamente normal y sin problemas desde sus respectivos asientos, era una vision de una familia muy unida a su manera, lo cual llamo mucho la atención de Sasha, quien no tuvo familia a excepción de Melek.

Scott la sento de una silla a su lado para luego dar un mensaje a todos los miembros, diciendo que Sasha era parte de la familia a partir de ese momento. Detalle que ella no logro esperar por parte del mercenario. Luego, todos los demas comenzaron a compartir palabras con la felina o la cachorrita mejor dicho.

¡Oye nueva! ¡¿Quieres sentir la resistencia de mis huesos?! - pregunto felizmente el esqueleto rojo. Por alguna razon Sasha queria saltar sobre el y atrapar un hueso, pero se contuvo - No fuera, impulso de idiotez! - se dijo a si misma la cachorrita.

Bienvenida a la familia - Dijo Nova desde su asiento, Sasha por un momento se sintio intimidada por recordar aquel golpe pero se relajo al ver los ojos del mismo. Mostraba un aire de tranquilidad y paz interna - Gra...gracias Nova.

Bueno Sasha, parece que pasaste la prueba definitiva... integrarte a una familia nueva y dejar esos problemas tan molestos del pasado - Aquella Renamon vestia un lindo delantal tan bonito que por un momento Sasha creyo estar pensando que era su verdadera madre, aun viva. Por un momento casi se deja llevar al ver la sonrisa de BR para darle un abrazo pero rápidamente sacudió la cabeza para regresar en si, evitando un momento muy incomodo con la zorrita - Gracias BR, por tu aceptación y por la comida - le dio una cálida sonrisa al verla así.


Meliodas no pudo evitar sonrojarse al volver a mirar a BR con delantal. Solo murmuro unas palabras en su accion mientras bebia un poco de cerveza con los ojos cerrados.

Seh… felicidades enana.

Gracias Scott, nunca me imagine que me integrarías a tu familia, en serio muchas gracias - coloco sus dos patas delante de ella en señal de respeto y agradecimiento, como lo hacia las Renamon. Era su manera de darle su eterno agradecimiento a Scott. Era la primera vez en la que Sasha era recibida en una familia tan numerosa y eso que solo busco a Scott para poder obtener su ayuda pero obtuvo mucho mas de lo que se pudo haber imaginado, ser recibida en la familia.