Una noche como ésta... [Priv. Scott]

“¡Estás loco! ¿¡Quien podría dejar a alguien en una situación como esta!? ¡Yo no soy tan cruel como lo parezco!”… ¿Dónde escuche eso antes?... estoy completamente seguro que eh escuchado esa frase antes… ¿pero dónde?... ¿Dónde escuche esa frase?... ¿y cuándo?... tengo que recordarlo… tengo recordar donde lo escuche… esperen… ya lo recuerdo… uno de los tantos miles de recuerdos que tengo suprimidos… ahora lo recuerdo.
Era un día cualquiera en mi casa… yo estaba como siempre en dormido sobre mi ropa… ya que no me daban una manta porque creían que era una distracción…y cuando se encendió la luz y se abrió la puerta… en un momento ya estaba despierto y levantado con solo ropa interior… entonces los vi… los seres repugnantes que se hacían llamar mis padres… los que construyeron mi habitación en este antiguo sótano… donde recubrieron todo con pintura blanca… taparon las ventanas… e incluso cambiaron la puerta de madera común… por una puerta de bóveda de bando de acero puro… algo irrompible en cualquier cosa… pero bueno… aunque sea me dieron el lujo de tener habitación para dormir.
Al verme levantado, le dejaron un sobre en el suelo junto con un vaso de agua y un poco de pan… parecía más una prisión que una casa… pero bueno, así era la vi… después, antes de irse, mi padre dejo mi libro, es lo único bueno… mi libro… esa historia… me fascina… aunque mis padres me lo compraron para que aprendiera a comportarme y que ser malo me llevaría al infierno… me encantaba ese lugar… donde los malos son castigados… era lo mejor para mi… era algo… algo tan… tan… tan bueno para mí. Luego de que comiera mi pedazo de pan y aclarara mi garganta con el agua, vino mi madre y se llevo todo menos mi libro y el sobre… claro que al irse me hiso recordar vestirme… eso se me olvidaba casi siempre… porque nunca eh hecho muchas cosas por mi mismo… de hecho… creo que nunca hice nada por mí mismo.

… ya estoy vestido… papa… mama… -agarre el sobre que habían dejado y observe una cámara de seguridad-
Muy bien hijo, ahora estudia al cobrador de hoy y lee un poco, después jugaras ajedrez por qué evitaras que quebremos jugando –escuche la voz de mi padre por un parlante debajo de la cámara- y recuerda, comerás algo delicioso si ganas
Para que sepas que comerás, te lo diré ya que tu padre siempre mantiene las sorpresas –escuche a mi madre por el mismo parlante riéndose- será helado, un postre frio de crema que puede ser de muchos sabores, ¿Qué te parece hijo?, ¿ganaras para comer un poco?
Si mama… ganare… (Aunque igual sé que no lo cumplirán… cuando gane la trivia de televisión… no me dieron las papas fritas que me prometieron…) –observe el sobre y lo abrí y saque un papel- “Roger Aizawa”… director de las compañías Aizawa… padre de una sola hija… -al leer eso deje el papel en el sobre y deje el sobre junto a la puerta- termine… papa… mama…

Pasadas unas horas, termine mi libro nuevamente… ya deben ser unas 78 veces que lo termino… en fin… solo queda empezar de nuevo y leerlo de nuevo… si, es lo único que puedo hacer… tal vez lo termine para esta noche aunque no lo sé… pero antes de ponerme a leer, escuche la puerta abrirse, entonces los vi a todos… a mi padre con una sonrisa perversa en su rostro… el estaba seguro que ganaría… la verdad yo también… entonces vi a un señor de traje entrar y observarme… al principio de rio de mi… creo que yo le causaba cierta gracia.

Je… ¿este es tu hijo que me vencerá? –se rio abiertamente- no entiendo porque pones tus fondos en un torpe niño que tiene esa ropa tan rara
¿Qué tiene la ropa de mi hijo?, es simple para que pueda concentrarse –dijo mi padre sonriendo cálidamente al señor Aizawa- una remera y pantalones blancos son buenos, además así es fácil saber si la ensucia
Aunque jamás la ensucia, nunca ah salido –respondió mi madre riéndose como si nada- iré por las cosas para que jueguen, por favor espere aquí señor Aizawa –al decir eso mi madre salió mientras que yo estaba internado en mi libro, realmente quería terminar-
Je… espero que tengas un buen seguro porque te lo quitare cuando gane este juego sin sentido con un niño patético como tu hijo –al decir eso, el señor Aizawa volvió a reírse mientras yo seguía con mi lectura-
La verdad señor Aizawa… mi hijo no es patético… -al decir eso mi padre sonríe de una manera rara, es la misma sonrisa que usa cuando alguien se cree más inteligente que el-

Luego de 5 minutos mi madre volvió con dos sillas, una con respaldo y la otra era un banquillo, el señor Aizawa tomo la silla y yo me sentí con las piernas cruzadas en el banquillo… después pusieron una caja en medio con el tablero de ajedrez y comenzamos a jugar, aunque después de 14 jugadas rápidas, gane con casi todas mis piezas, de hecho, en todo el juego perdí solo 3 peones. Luego de perder, el señor Aizawa comenzó a discutir con mi padre, sobre que yo había hecho alguna trampa, pero eso era imposible, en ningún momento se volteo ni nada, en fin, mientras mi padre y el señor Aizawa discutían, yo me volví a concentrar en mi libro, pero esta vez… aquella niña, la hija de mi oponente en esta partida de ajedrez… se acerco a mi confundida y algo me pregunto que guardaba mi libro… ¿guardar?... mi libro guarda paginas… pero eh de suponer que se refería a su contenido textual, si… eso tiene mayor sentido.

La verdad… trata de un demonio que fue elegido para resguardar las puertas y el corazón del infierno… pero luego… pierde el corazón y sale del infierno dejando que los demonios vengan a nuestro mundo… -dije observándola a los ojos mientras escuchaba atentamente sus palabras, pues parecía querer conversar-
Vaya… se ve que tienes gustos especiales –me dijo volteándose para ver que nadie la viera, supongo que no le dejan hablar con otras personas, igual que a mí- ¿Se podría saber cómo se llama?
Se llama… “Guardian Of The Erebo” –dije para responderle cortésmente, sinceramente creo que era lo mejor, desde que tengo 4 me han enseñado modales, aunque nunca los uso, bueno, casi nunca, cuando vienen los cobradores tengo que ser educado y cortes-

En esos momentos… aquella niña que me hablo… aquella niña que me dirigió la palabra pese a lo que pudiera decir su padre… me hiso sentir bien… como si no estuviera solo… porque ella parecía vivir igual que yo… como una simple marioneta que debía obedecer a quien fuera su titiritero. Después de un momento ella pareció notar como mi mirada volvía al libro lentamente… supongo que la preocupe por que en un momento, me dijo algo que me impacto, aunque nunca pude mostrar ese sentimiento de sorpresa.
“¡Yo quiero ayudarte!”… esas fueron sus palabras… supongo que le resulte patético e inútil… bueno, yo solo le respondí “déjame… me las ingeniare para no morir”, después ella grito diciendo que nadie podría dejar a alguien en una situación como la mía, y que ella no era tan cruel como lo parecía, la verdad no parecía cruel… pero su padre se dio cuenta y la alejo de mi… supongo que era algo de esperarse, pero mientras la alejaban de mi, ella me grito algo que me cambio por dentro… “¡No te rindas! ¡No te dejes encerrar! ¡Nosotros debemos ser…Lobos libres!”. Al decirme eso me sentí raro… entonces decidí terminar todo rápido… cuando su padre de sentó… esta vez lo vencí en 7 movimientos y no perdí ninguna pieza, entonces acepto la derrota y se fue… yo me quede callado… no volví a hablar en unos días… ni siquiera dormir.
Finalmente, 5 días después de que jugué al ajedrez… tome mi libro y mire hacia la cámara… dije que quería hablar con papa… entonces el vino a los 20 minutos, supongo que quiso comer algo antes de ver a su hijo que le había ganado mucho dinero… demasiado en pocos años… pero decidí perdonarlo… y que hice… le lance mi libro a la cara, y cuando se cubrió esta adolorido lo empuje y salí de la habitación por primera vez en 4 años… y cuando salí, tome mi libro y me fui corriendo, entonces subí a mi habitación anterior… la habían vuelto la habitación de mi otro hermano que entrenaba en las montañas… entonces vi uno de sus viejos trajes de guerrero y me lo puse… entonces mi padre subió enojado y tome una espada preciada para mi padre… y le corte el cuello.
Luego de eso asesine a mi madre, y a mis tíos que nos habían visitado, todos los que estaban en la casa solo se habían aprovechado de mi… y decidí matarlos a todos… el resto del recuerdo es historia personal pero… aquella niña… es… ella. La observe… ella parecía confundida… y yo también, entonces escuche su pregunta… y decidí responderle.

Si… ese niño patético que usaba ropa blanca y solo tenía un libro… era yo… -me levante y la observe- ¿y tu eres… aquella niña que… dijo que debíamos ser libres como… lobos? –la observe y me acerque- ¿tú eres… esa niña que me… hiso sentir feliz por un momento en mi asquerosa vida?...

Scott ahora se encontraba en una especie de lapsus, su expresión marcaba sorpresa, algo que.. bueno, jamás me hubiese imaginado ver en ese rostro tan serio que suele tener el, pero bueno, no es como si yo no estuviese sorprendida... ¿Quien diría que al agradable niño que encontraste hace media vida, y a quien habías dado por muerto tras enterarte de un trágico accidente, lo encontrarías ahora como un Digimon Tamer? ¡Jajaja..! ¡Claro! ¡Suena completamente lógico!- Cada día mi vida se vuelve un juego de una mente retorcida y demente, quien sea que controle nuestras vidas, no debe ser alguien sano mentalmente (Lel) -suspiró resignada, intentando repasar lentamente por mi mente todo lo que estaba viviendo el día de hoy; hoy, mi compañero digimon que tiene la apariencia de un pequeño niño que gusta de truco o trato había digievolucionado en un lobo vampiro, esta bien, voy bien hasta ahora, después me encontré con la increíble novedad de que mi callejón, un lugar donde nadie mas que Dracmon y yo podíamos accesar, había sido perturbado por la presencia de un loco y su perro, ajá, si... después que intentamos seguirlo nos encontramos con un robot; el cachorro que acompañaba a ese chico evolucionó en una especie de perro demonio que lanza fuego y rostizo a ese robot; luego un ave enana me robó mi sueter y tuve que ir con mi nuevo lobo vampiro hacia un rascacielos donde se libraría la batalla en donde ese pollo ojón evolucionaría en un avestruz ninja; al final me doy cuenta de que ese loco del perro.. ¡¡Era un niño a quien todos habían dado por muerto y que, ironicamente, conocía antes de que sucediese la tragedia!! ¡¡Jajaja, que lógico!!

- Así parece ser.. -fue lo unico que mencioné, mi mente estaba hecha un caos, y mi estomago seguía rugiendo como si hubiese un león adentro- ..Por favor, no exageres.. -comencé a acariciar mis sienes- Jeje.. mi cabeza me ha comenzado a doler, creo que accesar a recuerdos que uno ha intentado con tanto empeño olvidar.. Es doloroso, ¿No? -le pregunté, en realidad.. de alguna forma, ahora sentía que el me comprendía en ese aspecto, pues sabía un poco de su pasado.. el era un niño que, al igual que yo, sufrió mucho en su infancia.. aunque ambos sufríamos por razones diferentes, al final ambos añorabamos lo mismo.. libertad; cada quien tomó su propio camino, una se refugió en las oscuras calles de la ciudad, siendo criada por la misma vida callejera para poder sobrevivir de las leyes y escapar de las reglas; mientras que otro.. optó por algo mas elevado, un nuevo nivel de libertad, el se crió en el digimundo.. junto con el compañero que ahora mismo lo acompaña, el tuvo mejor vida que yo..- ¿Que hubiese pasado... si yo tambien hubiese ido a ese tal ''mundo digital'' y hubiese encontrado a mi compañero hace cinco años?.. -definitivamente, mi crianza hubiese sido diferente, tal vez.. solo tal vez.. no hubiese sufrido tanto, sería entonces una persona diferente a la que soy ahora, pero.. ¿Eso estaría bien... o estaría mal?- Eso significa que.. ese accidente, ¿Lo provocaste tu? -si, ahora que lo recuerdo, el me explicó hace poco que había asesinado a sus padres y había huido de su casa- Vaya... eso explica la razón por la cual su cadaver no se hallaba junto con los de sus padres y otros miembros de su familia -es increíble... a pesar de todo, yo jamás le he arrebatado la vida a alguien, nunca me he atrevido, me parece algo cobarde.. y no me gustaría manchar mis manos de sangre.

- Kuro.. ¿De que estan hablando? -preguntó confundido mi compañero, yo lo volteé a ver unos instantes, pero pronto volví mi mirada hacia Scott- ..No es nada, pero.. al parecer Scott y yo nos conocíamos desde antes -sonreí de lado, y me di la vuelta, no quería que Dracmon supiese sobre esa historia.. no ahora- Bueno, Labramon dijo algo sobre que nos invitarían a comer, ¿No? ¡Vamos, sé que ustedes tambien se mueren de hambre! -quería cambiar de tema, aunque sea para distraer a mi compañero.

Es sorprendente pensar que la pequeña niña que conocí hace 8 años… esta frente a mi viniendo ser un chico… bueno, yo no juzgo los gustos de nadie, y si a ella le gusta fingir ser hombre, bien, le seguiré el juego porque parece que ni su compañero está enterado de la situación, lo que me resulta algo gracioso, aunque claro, es igual para mí. Luego de un momento, Haruka, creo que ese era el nombre de la hija del señor Aizawa, me hiso algunas preguntas, creo que no eran en sentido literal, pero no eh llegado a nada nunca con esas cosas, yo respondo todo, me guste o no, siempre soy directo.

Sinceramente… no me duele nada recordar… lo que me duele es pensar que pude haber seguido siendo un esclavo de no ser por tu ayuda… Kuro –dije vagamente, creo que así le decía su compañero por lo que debía ser tu apodo o algo así para que la confundieran con hombre- y si… el accidente fue mi culpa… aunque no me importa… ellos se buscaron mi rabia…
Haaa… das miedo amigo… en serio –dijo Labramon algo nervioso pero igual feliz- bueno, les prometimos comida, ahora vayamos a comer algo –comenzó a reírse, típico de Labramon, pero bueno, es el-
Si… la verdad no eh comido nada en 3 semanas y tengo hambre –dije tranquilamente mientras abría una puerta de una patada- que suerte que la gente pone puertas que van al techo, vamos, las alarmas corren y no tengo ganas de golpear hombres tontos con uniformes
Haaa… mejor le hacemos caso, será mejor correr –dijo Labramon comenzando a correr a toda velocidad para evitar cualquier tipo de problemas-

Al decir eso, perdí de vista rápidamente a Labramon, después me voltee a ver a Haruka, sinceramente carezco de modales, ética, educación y nobleza, pero se cuando dejar que un viejo amigo pase primero por la puerta de un edificio para huir de lo que parece ser la ley para comer algo después de una noche llena de persecuciones raras. Antes de que Haruka comenzara a correr, me detuve unos instantes para decirle que le ayudaría con esto de ser Tamer si quería, aunque lo dudo, viendo en lo que se convirtió, es impensable que quiera mi ayuda, al menos ahora.

Era dificil de adivinar, puesto que la expresión que usualmente Scott lleva en el rostro muestra siempre, o casi siempre, la misma emoción... pero puedo casi jurar que el, aunque sea internamente, se siente agradecido por algo que dije cuando era niña, ¿Enserio esa frase que dije sin siquiera pensar... cambió tan drasticamente la vida de un chico?- Es algo increíble, en el sentido de que simplemente no me lo puedo creer, realmente... lo había dicho sin pensar, pocos momento después de haber gritado eso recuerdo que mi padre me había golpeado un par de veces en la cara por haberlo desobedecido, era su forma de que aprendiera... a golpes; a pesar de que le daba el permiso a cualquier persona que servía a la casa de escarmentarme como mejor gustara, siempre a quien mas temía era los golpes de mi padre... ahora mismo no recuerdo porque, ya que he sufrido peores castigos después e incluso antes de haber escapado, pero supongo que se debe ya a un trauma... algo que en esa escasa edad que tenía no podía llegar a pensar o a analizar -Sonreí- Te admiro Scott -le susurré sin que ninguno de nuestros digimon pudiese escuchar- Yo jamás he manchado mis manos de sangre hasta el momento, sin importar cuan mal me haya tratado cualquier tipo de persona... y quizá, tan solo quizá, en estos momentos de mi vida no me importe hacerlo... -suspiré- Pero a esa edad tan inocente y pura... jamás se me hubiese ocurrido hacer algo tan... -no supe como terminar la frase, solo sonreí de lado como era costumbre mía, mientras miraba hacia el suelo algo decaída- ..Solo ten en mente eso, te admiro, y quisiera saber mas de ti... quiero saber que fue lo que le paso a ese pequeño niño que leía libros, de ropas blancas, que se mantenía callado y encerrado todo el tiempo... -el era ahora lo que yo había dicho, era un lobo libre... ¿Yo lo seré igual? ¿Enserio seré libre?... Porque a pesar de haber escapado de mis rejas, no... no me siento libre, algo falta.

Toda esta situación pasaba por mi mente mientras escuchaba la alarma que se había activado en cuanto Scott abría la puerta del techo de una patada, mi corazón latió con fuerza como señal de adrenalina, una media sonrisa se dibujó en mi rostro- Vamos Dracmon, Plan A -mi compañero y yo eramos los maestros de la burla, por eso hasta el momento no nos han atrapado sin importar cuantos policías se nos interpongan en frente- Jajajaja, claro -sonrió con malicia, deteniendonos ambos en un cruce de pasillos- Ustedes salgan, Dracmon y yo nos encargaremos de entretener a los policías -reí leve- No me gustaría saber que unos estupidos nos estan siguiendo mientras degustamos una deliciosa comida -relamí mis labios, el solo pensar en comida ya hacía que mi apetito se abriera, pero ahora debía concentrarme.

Esperé a que Scott y Labramon se adelantaran, en cuanto eso pasó, esperé a que el montón de policías se reunieran, apuntandonos los tres primeros con su arma- ¡Manos arriba! ¡Identifiquense! -en mi rostro seguía presente esa sonrisa traviesa y mi mirada que marcaba seguridad, mientras Dracmon y yo hacíamos lo que ellos pedían tan.. ¿amablemente?- Tranquilos, ya lo hice, ¿Y ahora que? -uno de los policías bajó el arma y miró a sus compinches- ...un momento... ¿No es él el bandido ''Kuro Neko''? -oh, en realidad no me esperaba que se diesen cuenta tan rapido- Son agiles de mente, debo admitirlo, e incluso les aplaudo por eso -dicho esto dejé de mantener mis manos como ellos me pidieron y aplaudí un par de veces, poniendose todos en guardia de nuevo- ¡Deja de burlarte, y coloca tus manos de nuevo arriba! -fruncí el ceño con disgusto- No quiero -uno de ellos recargó su arma- Dispararemos si presentimos una amenaza de tu parte, te recomendamos que hagas todo lo que te pedimos -sonreí de lado con malicia- Yo creo que el caso debe ser contrario -volteé a ver a Dracmon, quien con sus manos extendidas por los aires comenzó a reírse alto, generando una especie de onda rojiza desde los ojos de sus manos que, al impactar en todos los guardias, los dejó en una especie de shock mental que los hizo caer de inmediato al suelo con sus ojos abiertos e inmovilizados- Jejejeje... hacer un ataque con tanto rango como este consume mas energías, pero valdra la pena si nos dejan comer a gusto -relamió sus labios- ¡Vamos Kuro, hay que darse prisa y alcanzar a Labramon y a Scott! -yo asentí ante sus palabras, y corrimos a la misma dirección a la que ambos se habían ido.

Pude escuchar por un mísero segundo como Haruka me dijo algo, lo escuche perfectamente, dijo que me admiraba… ¿admirarme por qué?... ¿Qué eh hecho yo para que Haruka me diga algo así?... sinceramente no lo entiendo… pero tal vez… solo tal vez sea porque cree que alcance la libertad… je… parece una niña… mi libertad no será encontrada hasta dentro de mucho tiempo, pero bueno, que crea lo que guste, no gano nada cambiando sus opiniones a opiniones negativas.
Bueno, como sea, ahora estoy corriendo por un edificio, con las alarmas sonando, gente uniformada intenta detenernos y Haruka y Dracmon hacen todo lo posible para poder retenerlos, je, esta noche es algo raro, pero bueno, así es la vida, sorpresiva, no solo injusta, aunque en su mayoría, desde mi punto de vista, la vida es una completa injusticia. Luego de correr un buen rato, un montón de tipos uniformados aparecieron de la nada y trataron de atraparme, para mi suerte Labramon los noqueo de un Retri Bark, pero para mi suerte, apareció otro que me sujeto por la espalda, je, esto es divertido, tendría que salir un poco más a menudo si consigo desafíos tan sencillos para mi diversión.

¡No te escaparas! ¡Vándalo sin vergüenzas! ¡Ahora te interrogaremos! –me grito en el oído, yo solo respondió con un cabezazo como pude a la nariz, y después una patada al estomago- hack… ¿Quién demonios eres?.... ¿eres aliado de Kuro Neko?...
¿Ah?... no sé quien sea Kuro Neko… pero si se algo… yo soy un demonio… y no me gusta que me molesten… pero tienes suerte… hoy recordé algo horrible asique puedo sufrir, y cuando sufro, genero más energía, y cuando genero más energía, menor necesidad de comer necesito, asique me ahorrare algo de dinero –al decir eso le di una patada en el rostro y me fui corriendo, tenía que darme prisa y no tenía ganas de esperar-
¡Vamos Scott! ¡No tenemos tiempo que perder! ¡Algo me dice que van a infestar todo el edificio! –me dijo Labramon moviendo las patas para que me diera prisa mientras seguía corriendo como loco esquivando a los uniformados que saltaban de la anda con las intenciones de atraparnos- ¡RETRI BARK! ¡RETRI BARK! ¡RETRI BARK! –grito desasiéndose de al menos 6 guardias, 2 con cada Retri Bark-
Je… ¡Ese es el espíritu Labramon! –grite dando un salto y dándole una patada a uno que intento tomarme por tonto- ¡No soy estúpido! ¡Soy el demonio Musahrahjy! –Aterrice sobre un uniformado- ¡Y esta noche me voy a divertir! –Al decir eso pase una carta por mi lector, era la carta azul- ¡Labramon!
Bien… -dijo Labramon observando hacia el frente- Labramon shinka… -digievoluciono a mi digimon favorito- ¡Cerberusmon!

Al poco rato de que Labramon evolucionara a Cerberusmon, salte y monte su lomo, como este es un edificio administrativo hasta dónde puedo ver, había muchos escritorios, todos inflamables, por lo que sin pensarlo mucho, decidí quemar algunos para activar algunos aspersores y así ganar algo de tiempo. Luego de incendiar algunos escritorios, se encendieron los aspersores, de modo que todo comenzó a mojarse, y mientras los uniformados estaban distraídos con el agua, Cerberusmon los movía con la cola de manera que no estorbaran el paso a Haruka cuando llegara con Dracmon, aunque dudo que tuviera problemas, con o sin ayuda.

Por mas que corríamos aun no lograbamos avistar a ninguno de ellos- ¿Crees que estemos yendo por camino correcto? -preguntó mi compañero después de que hubiesemos corrido demasiado sin respuesta alguna, o siquiera alguna señal de que Scott y Labramon ya habían pasado por el mismo camino que nosotros caminabamos- Claro... ¿No se habrán ido por otro camino que no es derecho, verdad? -Dracmon se quedó pensando unos momentos- Bueno... cualquier cosa podría pasar, ¿Tu que dices? -Tsk... no puede ser, no podría ser que ambos se hayan ido por camino equivocado... No es que conozca este edificio o algo, pero no hay ninguna señal que dice ''salida de emergencia'' y creo que lo mejor sería encontrarnos y buscar la salida juntos, pero creo que el prefirió ir a hallar la salida por si solo- Espero que no se vaya a escapar para no darnos la comida que nos han prometido -comentó mi compañero con cierto tono molesto o desconfiado, a lo cual yo le negué- No lo creo, es cierto que hace mucho tiempo que no lo veo, pero dudo que ese niño al que una vez conocí se halla convertido en un traicionero mentiroso, te digo que es imposible -lo dije con un tono seguro, pero uno nunca esta seguro de una persona a la que no ha visto por.. ¿Cuanto? ¿ocho años?- ...o eso espero.. -detuve mi correr al momento en que otro grupo de guardias nos emboscaban.

- Vaya, vaya... ¿Quieren mas? -sonreí de lado mientras mi compañero se encorvaba y reía en sus adentros, colocando sus manos a sus costados para poder observar a los nuevos guardias- ¡Alto ahí! No sé como lo lograron, pero han noqueado a mas de una docena de guardias, pero nosotros somos mas experimentados que ellos -sacó su arma- Les recomiendo que no intenten bacilarnos -mi expresión se hizo seria- ¿Enserio quieren que no bromeé con ustedes? -fruncí mi ceño un poco- Entonces tendré que tomarlos enserio, espero que su ''experiencia'' les sirva conmigo -volteé a ver a Dracmon, quien solo me miró e hizo mas grande su actual sonrisa- Jejejeje... ¡Finalmente, acción! -me tomó con sus manos y me cargó por completo, lanzandome por encima de los guardias; aprovechando peso y tamaño me hice ''bolita'' pasando por encima de ambos a mayor velocidad y deshaciendo esta forma cayendo al piso de pie, al igual que un gato. Los guardias se tardaron mucho en coordinarse, pues tenían a Dracmon de un lado y a mi del otro, así que en cuanto uno volteaba a ver al contrario, otro se lanzaba contra el para atacarlo por la espalda- Mi compañero y yo no tenemos experiencia gracias a entrenamientos forzosos, si no por que la misma vida nos enseña a esforzarnos, dudo que su ''experiencia'' se compare con la nuestra.. -dije mientras noqueaba a uno de los tres ''experimentados guardas'' en un fuerte codazo por detrás del cuello, mientras Dracmon se lanzaba hacia el otro mordiendole su cuello tal cual vampiro sediento, pero esto solo sirvió para que el se desmayase del dolor por sentir los colmillos de mi compañero clavarse en su cuello, dejando solo al policía de en medio que aun tenía su pistola en manos- Q..¿Que demonios pasó?

Reí en mis adentros- ¿Que? ¿Fue demasiado rapido? Es porque me obligaste a empezar enserio desde un principio... si no fuese así, tu y tus guardias aun tendrían mas oportunidad de atraparnos -el guardia se dio la vuelta rapidamente, y me dio una fuerte patada que me lanzó lejos y me hizo rodar por el suelo- Ugh... no me la vi venir... -me cubría el estomago, que fue el area donde recibí la patada, y tosía un poco por la fuerza de impacto- ¡Kuro...! -Dracmon estaba por dar un paso hacia delante, pero frente a el, el policía posó su arma en su frente- Para su desgracia, tengo derecho a matar a personas tan problematicas y con tantos antecedentes como ustedes... -al momento en que escuché como recargaba su arma pude observar como el digivice en mi bolsillo comenzaba a brillar intensamente, ¿Acaso.. estaba percibiendo mi preocupación?- Jeje... puedo sentirlo.. ¡¡Siento el poder pasar por cada centímetro de mi cuerpo!! -el rayo de mi digivice impactó en mi compañero y lo hizo cambiar de forma y tamaño- ¡Dracmon shinka...! ¡Sangloupmon! -de nuevo, y sin que pudiese predecirlo antes siquiera, Dracmon había optado la forma de ese lobo de apariencia agresiva y salvaje; el guardia se espantó, dando unos pasos hacia atrás- ¿¡Ese niño se volvió un lobo!? -le apuntó con su arma nuevamente, sus manos se encontraban temblando- Pfft.. ¿Porque tanto miedo? El es inofensivo.. -comencé a reír en mis adentros- Al menos que tenga hambre... -Sangloupmon comenzó a olfatear al guardia, y luego sacó su grande lengua para lamer todo su rostro- Y la tengo ahora.. jejejeje.. -mostró sus colmillos al guardia, quien de inmediato soltó su arma y huyó tan pronto como pudo, haciendo que comenzara a reírme casi del mismo escandalo con el cual se suele reír Dracmon- ¡Muy buena esa! Eso estuvo divertido.. -me acerqué a Sangloupmon, mientras seguía sobandome el estomago- Aunque estoy vacía, y ese golpe solo me recordó mas cuanto hambre tenía, ¿Y si nos apresuramos para encontrar a Scott? -mi compañero comenzó a mover sus orejas y a olfatear el aire- ...¿Hueles eso?... Es humo... hay fuego en el edificio -¿Fuego?... ¿Como...?- Ah, claro, seguro Scott evolucionó a Labramon en Cerberumon e incendió algo.. -¿¡Pero como se le ocurre!? Tampoco queremos que toda la gente aquí muera, espero que este edificio tenga aspersores o algo así- Vamos Drac, sigamos el humo -el sonrió mientras me montaba sobre su lomo- Genial, ya puedo saborear la comida... -aulló con fiereza, iniciando su impactante correr.

Mientras estábamos corriendo, observando cómo los uniformados saltaban hacia los costados para evitar ser embestidos por Cerberusmon, y también ver el agua de los aspersores caer sobre el fuego que habíamos provocado, puse sentir algo extraño, era una especie de palpito… tal vez eran los latidos de mi corazón… supongo que estoy feliz… debe ser eso… el encontrarme con la persona que me dio la llave del camino a la libertad… me ah puesto feliz… je… espero que se detenga pronto, esto duele y no me gusta sentirme así… es algo molesto pero agradable… cosas que no deben juntarse desde mi punto de vista.

Je… estas feliz… ¿no es así Scott? –Me pregunto mi compañero observándome levemente mientras corría y empujaba a los uniformados con la cola- ver a ese chico por alguna razón te alegra… y debe ser porque él te ayudo a escapar… ¿o me equivoco?
Realmente… estas en lo cierto amigo… ese chico me ayudo y por eso creo estar feliz… pero bueno… espero que se acabe pronto este sentimiento… comienza a molestarme tener que aguantar un palpitar más fuerte de lo usual –dije riéndome ligeramente mientras observaba a un uniformado pretendiendo detener a Cerberusmon- oye, quítate del camino por que nada detiene a este perro, menos cuando está dispuesto a matar para comer algo –dije tranquilamente mientras observaba como nos acercábamos mas y mas-
¡No lo creo! –grito el uniformado saltando y aterrizando frente a mi- je… ¡estas arrestado! ¡Y cómo me has hecho pasar una mala noche! –Saco un arma de fuego, creo que era una pistola- ¡Usare el derecho a matar problemáticos como tú!
Oye… ¿eres estúpido o qué?... estas sobre la espalda de un perro infernal que escupe fuego, tiene garras que cortarían piedra maciza fácilmente, apuntándole con un arma a un chico menor de edad que solo está perdido en este mundo… eso no da buena reputación a tu trabajo, ¿sabes? –Dije con un tono indiferente y con una sonrisa burlona- escucha, como no me conoces te daré la oportunidad de saltar y evitar golpear tu cabeza contra el agujero que esta por formarse en la pared en unos… -me incline para observar- 20 segundos
¡¿QUE DEMONIOS ESTAS DICIENDO MOCOSO?! –Me grito preparando el arma para disparar- ¡NADA ABRIRA NINGUN AGUJERO! ¡ESTE PERRO NO PUEDE HACER LO QUE DICES! ¡Y TU IRAS A PRISION!

Yo simplemente bostece y espere a que todo ocurriera, entonces vi como las garras de Cerberusmon se rodeaban de energía oscura, estaba por hacer su movimiento favorito, el gran “Styx Killer”, “estigio asesino”, esa es la traducción según recuerdo lo que leí de mi libro de mitología, bueno, no era mío pero igual era un libro de mitología. En fin, cuando Cerberusmon preparo sus garras, dio un gran salto hacia la pared, la cual destruyo con total facilidad, y en cuanto al uniformado, pues se golpeo la cabeza y por poco cayo 3 pisos hacia el suelo, je, y digo por poco porque Cerberusmon se apiado de él y lo sujeto con la cola, tengo que enseñarle a ser mas como yo, al menos en el aspecto maligno, creo.
Una vez en el suelo, vi a un montón de uniformados, je, nada que Cerberusmon no solucionara con un simple Hell Fire, cosa que estaba preparado para hacer, porque a este paso nos atraparían y nos meteríamos en problemas, cosa que no quiero por ahora.

¡QUIETO! ¡SI TE MUEVES LE DISPARAREMOS A TU PERRO! –Me grito lo que parecía el líder de los uniformados- ¡ASIQUE MEJOR QUEDATE QUIETO O TU PERRO MORIRA!
Pfs… ¡Jajaja! ¡Dios! ¡Qué gracioso! ¡¿Cerberusmon morir?! –Me reí abiertamente y después suspire- Cerberusmon no puede morir ante pequeñeces como las que tienen…

En un segundo, Cerberusmon ya había lanzado el Hell Fire, haciendo que todos esos uniformados comenzaran a correr como niños asustados, je, realmente son patéticos, ¿y aun así se hacen llamar la ley?, dios, si así es la ley, no me sorprende que los humanos sin digimons estén destruyendo al mundo, no tienen una ley que los controle hasta el punto en que puedan convivir los unos con los otros y con la naturaleza. En fin, luego de unos momentos, vi una sombra sobre mí, y al elevar la mirada, vi a Sangloupmon, evidentemente ya podremos ir a comer algo.

Qué bien, comenzaba a creer que no vendrían, vamos, como dije, les invitaremos la cena –al decir eso sonreí ligeramente y di un suspiro- vamos Cerberusmon, tenemos que perder a estos uniformados tontos a ignorantes

A cada paso que Sangloupmon corría podía jurar que mi nariz llegaba a captar el sutil y algo intoxicante aroma del humo que era provocado por las llamas infernales de Cerberumon- Creo que están cerca... ¿No lo crees? -mi compañero alzó la mirada y olfateó con brusquedad, terminando estornudando fuertemente después- Agh.. ¿Tu lo crees? Mi olfato es diez veces mas agudo que el tuyo, y estoy ahogandome con el putrefacto aroma del humo... ¡Definitivamente estamos cerca! -vaya... no necesitaba usar tanta rudeza al hablar, jajajaja... como si realmente importara, en verdad me daba gracia cuando se impacientaba con ese tipo de preguntas obvias, e incluso otro tipo de temas, pero ese es otro tema aparte.

Llegó un momento en el que ese humo se había hecho inclusive intenso para mi, sabía que estabamos cerca, sobre todo al momento en que pude ver ese extraño humo aparecer cerca de una esquina- Doblando a la esquina los encontraremos -fue lo que pensé, pero antes de llegar a esta pude observar a miles de empleados y civiles huyendo del área espantados- Creo que fue muy precipitado de Scott incendiar este lugar, a pesar de todo, sigue habiendo personas que pueden perder su vida por algo como esto... unos simples aspersores no podrán calmar el fuego infernal de Cerberumon -dije en mis adentros, esquivando la multitud de personas asustadas para llegar a donde se encontraba Scott montado en Cerberumon- ¡¡Yahoo!! -exclamó mi compañero dando un gran salto que lo hizo aterrizar enfrente de ambos seres con un aire obvio de superioridad- Ugh... me siento mareada... ¿Porque tuvo que hacer ese salto tan de repente?... -intenté cubrir mi mareo mirando hacia otro lado para que Cerberumon y Scott no lo notasen.

Scott se encontraba ahora mas que decidido en nuestra salida a cenar, algo que me inspiraba a llegar lo mas rapido posible, realmente tenía mucha hambre... y el pensar en que podré comer comida deliciosa hace que se me haga agua a la boca y mi estomago gruña como si fuese un león hambriento- ¡De acuerdo, vamos Sangloupmon! -me tomé fuerte de los cabellos que rodeaban su cuello, y el pareció esbozar una sonrisa, volteando a ver a Cerberumon- Oye amigo, ¿Que te parece si hacemos una carrera para llegar al dichoso restaurante ese? -rió en sus adentros- ¿O será que tienes miedo? -Demonios, Dracmon siempre buscando una manera de hacerse lucir, era cierto que su velocidad era monstruosamente alta pero... ¿Enserio se compararía a la velocidad de Cerberumon? El es de mayor nivel... ademas.. ¡Yo estoy sobre el...! No uso toda su velocidad ahora por el espacio pequeño, pero teniendo toda la ciudad de pista de carreras...- Voy a morir... -cerré los ojos nerviosa, al momento en que mi compañero se lanzaba por el hueco abierto a nuestro lado en la pared- ¡Entonces ahí nos veremos, Cerberumon! Jajajaja -grité, no sé si era por miedo o emoción, pero mi corazón latía con fuerza mientras veía como nos acercabamos mas y mas al suelo- ¡¡Sangloupmon idiotaaaa...!! -grité por los aires, a lo que el solo clavo sus garras-cuchillas en el edificio para impulsarse después con un enorme salto que lo hizo aterrizar al suelo sin complicaciones- Jajajaja.. ¿Sorprendido? ¡Yo tambien, este nuevo cuerpo me encanta! -se relamió los labios- Sin duda alguna, ya me siento lo suficientemente rapido como para ganarle a Cerberumon.. ¡Y obtener mi jugosa recompensa por mi grato esfuerzo! -me dejé caer mareada en su lomo- ...Si sigues balbuceando en lugar de correr, ellos nos ganaran -el levantó sus orejas al escuchar esto, y de inmediato comenzó a correr a una velocidad en la cual tenía que cerrar los ojos para no ser lastimada por el agresivo aire que golpeaba mi rostro- ¡AHHHH, DEMASIADO RAPIDO...!

Sangloupmon, lleno de adrenalina, lanzaba un intenso aullido de vez en cuando, saltando de auto en auto sin importar si fuese un trailer o un auto corriente, claro que estos ultimos recibían enormes daños por culpa del peso de ambos y las filosas garras de mi compañero clavarse en el cofre y techo- ¡Esto es estupendo! -exclamó, mientras yo le gritaba mas de una vez que se detuviese, el no me hacía caso... creo que se había vuelto mas impulsivo que cuando era Dracmon, al menos Dracmon se detenía cuando yo se lo pedía. Llegó un momento en el que el restaurante estaba a solo unos metros de nosotros, pues ya podíamos verlo con claridad, pero mientras corríamos pude ver que a nuestros lados se avecinaba Cerberumon a toda velocidad- ¡Nos va a alcanzar...! -me sorprendí, a pesar de la velocidad que tenía Sangloupmon... Cerberumon estaba alcanzandolo, y Scott no parecía ni inmutarse ni un poco por dicha aceleración, definitivamente... ambos ya estaban acostumbrados a estas cosas.. ¿Yo me acostumbraré algún día?- ¡Vamos Drac, estamos muy cerca! -el rió en sus adentros e igualmente aceleró lo mas que pudo, llegando ambos a estar a la misma distancia de nariz a nariz al momento en que llegaron a la meta.

Apenas Haruka y Sangloupmon bajaron del edificio, note a Haruka algo… ¿mareada?, realmente no tengo idea, se cubrió la cara por lo que no se si lo estaba o no… aunque realmente no era tan importante, seguro se le pasaría con la comida, igual que a mí, aunque lo siguiente que paso al momento de su aterrizaje si me sorprendió. ¿Sangloupmon estaba retando a Cerberusmon a una carrera?, je… ¿acaso no tiene idea de la diferencia de niveles?, ¿y como se le ocurre algo así sabiendo que aun no controla del todo la digievolucion?, bueno, mejor era dejar que el “lobito” obtuviera lo que quisiera, después de todo, esta noche es para agradecer y complacer, aunque solo estoy dispuesto a complacer una necesidad de cada uno, asique si Sangloupmon desea correr, se lo concedo, pero no le daré comida.
Antes de que siquiera pudiera aceptar la carrera para que Cerberusmon se pusiera en posición, Sangloupmon salió disparo a toda velocidad, creo que estaba ansioso, aunque realmente no era gran cosa alcanzarlo, eh visto a Cerberusmon correr a toda velocidad, y es algo que simplemente destruye asombrosamente la barrera del sonido en minutos, no quiero imaginarme cuando sea Anubismon, je, tal vez no le tome mas de unos 40 segundos destruir la barrera del sonido al volar, pero eso lo sabré cuando alcancemos ese poder. En fin, cuando le di la orden a Cerberusmon, no le tomo ni 10 segundos comenzar a correr como todo un salvaje.

Je… realmente quieres correr… ¿no es así viejo amigo? –Dije tranquilamente mientras observaba los autos destrozados, seguramente por Sangloupmon- je… se nota que aun tiene que adaptarse a su nuevo cuerpo… parece que no sabe controlarlo aun… es muy… impulsivo…
¡JAJAJA! ¡Déjalo que se divierta Scott! ¡Si él quiere causar desastre no veo el problema! ¡Después de todo también me diste permiso de destruir lo que se me ponga enfrente! –dijo mi compañero riéndose tranquilamente mientras aplastaba todos los vehículos estacionados con tan solo pisarlos- ¡Ahora! ¡Dame la orden y comenzare a correr en serio Scott! ¡No quiero perder tan fácilmente! ¡Menos contra alguien que no dio la señal!
Muy bien… -levante mi brazo derecho mientras me sujetaba del casco de Cerberusmon con el brazo izquierdo- ¡Acelera! –baje con fuerza el brazo derecho mientras volvía a sujetarme del casco de Cerberusmon con fuerza- y no tengas conciencia de lo que se ponga en frente a menos que sea algo vivo…
Je… esperaba esas palabras… -al decir eso, Cerberusmon acelero a una velocidad impresionante para muchos, nada para mí- ¡A UN LADO! ¡PERRO DEMONIACO PASANDO! ¡Y CONSIDEREN QUE NO TENDRE PIEDAD POR NADIE QUE NO RESPIRE!

Una vez dicho eso, Cerberusmon comenzó a correr por el centro de la calle, y cada auto que se le acercaba, era abandonado por su piloto mientras Cerberusmon se dedicaba a embestirlos, volteándolos con su fuerza brutal y su velocidad extrema, que comenzó a no solo destruir autos cuando los pisaba, sino que también comenzó a agrietar ligeramente el suelo, supongo que aplicaba mucha fuerza en sus pasos para hacerlos alargados y rápidos, y como corría con algunas incomodidades, tenía que mantener sus patas en el suelo siempre, si no daría un gran salto que nos haría llegar a un rascacielos en 2 minutos.
Al cabo de unos 3 minutos, logramos alcanzar a Haruka, je, realmente llegaron muy lejos, y realmente me sorprendió un poco el que Cerberusmon lograra alcanzarlos, después de todo, ellos salieron del punto de partida de forma anticipada, asique es obvio que tendrían ventaja, pero al final todo termino en un empate limpio, claro que cuando llegamos al restaurante Cerberusmon dio un gran salto para evitar estrellarse contra la pared y aterrizo aferrado a la pared de otro edificio junto al restaurante, je, este perro siempre hace lo mismo.

Jeje… buena carrera Sangloupmon… -dijo mi compañero cansado y bajando de la pared para finalmente volver a ser Labramon- ¡Jajaja! ¡Nunca corrí así! ¡Espero que lo repitamos algún día Sangloupmon! –sip, Labramon es muy agradable, ya tiene un amigo nuevo-
Cuenta con eso… creo que considerare regresar al mundo humano… si puedo ver a un viejo amigo… vale la pena venir a este mundo lleno de plagas y escorias insignificantes que no merecen vivir sin un compañero digimon –al decir eso me estire ligeramente y me crují los huesos del cuello- bueno, iré por la comida -entre tranquilamente al restaurante-

…

Aquí traje la comida –dije saliendo con unos cuantos hombres con al menos 2 docenas de bandejas, todos asustados por mi aura- je… gracias, quédense con el cambio y no llamen a esos “policías”, porque si no les mostrare algo aun peor de lo que vieron –al decir eso todos se metieron en el restaurante aterrados-
¿Qué les hiciste Scott? –pregunto Labramon confundido-
Nada… solo les enseñe el demonio que soy –una vez dicho eso, tome algunas bandejas de comida y las lleve a un callejón- vamos, podremos comer sin que nadie nos moleste allí –dije sonriendo ligeramente- vamos, no piensen que compre esto para que se queden allí sin comerla

No podía creerlo, simplemente no podía creerlo, Sangloupmon era un digimon exageradamente rapido... y a pesar de haber tenido ventaja por haber salido antes Cerberumon había podido alcanzarlo sin mucha dificultad, además, su Tamer Scott... no estaba en lo absoluto inmutado ante esa increíble velocidad, mientras que yo estaba dando mi mayor esfuerzo para no salir volando ante tanta velocidad- Ese par es realmente impresionante... -suspiré, al menos habíamos llegado en empate, si no me hubiera dolido en mi orgullo haber perdido en una carrera en la cual llevabamos ventaja, sería imperdonable- Ja... si, muy buena carrera -Sangloupmon esbozaba una especie de sonrisa forzosa, lo sabía, a el ni siquiera le parecía la idea de que hubiesemos quedado en empate, el lo unico que buscaba era la victoria... seguro su orgullo ahora estaba siendo aplastado pero no era capaz de decir nada porque ellos eran los que nos iban a invitar la comida, supongo que Dracmon no es tan tonto como lo aparenta siempre.

Parecía que nuestro encuentro y la impulsiva carrera de Sangloupmon y Cerberumon habían logrado que Scott se alivianara un poco, puesto que recuerdo que al momento de encontrarnos el se notaba serio y tenso, quizá por esa dichosa misión que tenía que completar sin importar qué- Que pereza estar cumpliendo misiones sin sentido -suspiré- Debe ser horrible estar recibiendo ordenes de personas que uno ni siquiera conoce, yo ni de chiste haría algo como eso nunca -después de haberse acomodado los huesos en su cuello, se adentró al dichoso restaurante donde tuvimos nosotros que esperar afuera en un largo silencio- ...Tengo hambre... -era lo unico que pensaba en estos momentos, tanto así, que casi no podía escuchar todo el barullo que se escuchaba en el interior del establecimiento; reaccioné al momento de sentir como mi mano era tomada por alguien y después sentir un cálido aliento cubrir parte de mi brazo- ¡Que ni se te ocurra! -exclamé al ver a mi compañero dispuesto a morder mi brazo, por lo que con mi otro brazo le di un codazo en la cabeza obligandolo a soltarme- Ugh... ¡Pero Kuro...! Tengo hambre... Scott se esta tardando demasiado... -se quejó mi compañero mientras se sobaba la panza- No seas llorón, todos nos estamos muriendo de hambre, pero... -antes de que terminara de hablar, se abrieron las puertas del establecimiento y salió de ellas Scott acompañado de casi todos los meseros del local con una mirada sumida en el terror- ¿Huh?... -era extraño, ya me suponía lo que había pasado así que ni siquiera pregunté- Heh... ¿Enserio el es el niño al que conocí hace 8 años? -sonreí de lado, era bastante cómico pensarlo, pero me limité a esa sonrisa... sin emitir ni un solo sonido.

Seguí el aroma de la comida, que solo hacía que se me hiciera agua a la boca, así que nos dirigimos hacia un callejón cercano donde se encontraba unos cuantos botes de basura, cajas de cartón y alguna que otra rata huyendo de los gatos que estaban intentando cazarlas para darse tambien su propia cena- Aquí parece estar muy bien.. -use una de las varias cajas de cartón como silla mientras arrastraba otra hacia en medio del callejón para usarla de mesa donde podrían colocar la comida.

Scott y yo nos quedamos hablando por un par de horas, explicandome cosas principales sobre los Tamers como el uso de las cartas, lo que era le ''digievolución'' y en que consistía, la función del digivice... solo ciertas cosas de este puesto que algunas simplemente no podían ser respondidas con claridad como ''¿Porque el digivice me eligió para ser la Tamer de Dracmon?'' ¿Será enserio obra del destino?... Suena tan descabellado que me parece imposible creer en cosas tan ridiculas como esas, pero... quien sabe, a veces lo mas extraño puede ser lo mas real que muchas otras realidades que hoy en día conocemos. Después de que hayamos terminado el banquete, Scott tuvo que despedirse diciendo algo sobre una misión, supongo que aun debía tener muchas otras ''misiones'' en su larga lista... pero había utilizado esto como un breve receso de tanta carga- Entonces hasta luego... -esa fue mi despedida, antes de que el se marchara nuevamente montado en Cerberumon- ¿''Hasta luego''? -me miró Dracmon confundido, yo solo asentí leve- Así es, tengo la sensación de que, ahora que nos hemos encontrado, lo haremos de nuevo en un futuro.. -''Así está escrito''.