The Black Metal Flower [Privado: Ashely]

Una petición misteriosa… un pago muy grande… un punto de reunión muy obvio… ¿Por qué algo me dice que es una trampa?... egh… por estas cosas; no me gusta aceptar trabajos de solicitantes que no llenan su hoja de información pero… el pago es muy grande y hay que pagar las facturas de Giga a menos que queramos problemas con varias zonas del digimundo por proveerle piezas y equipos; así como sujetos de prueba que obviamente no sabe cuidar para que le duren más de 2 días consecutivos. En fin, fuese como fuese… ya estamos próximos a la Zona Imperial asique negarme ahora sería algo sumamente estúpido… al menos esto también cuenta como deber de los Chaos Empire ya que se nos encargo conseguir un objeto de extraña procedencia que solo aparece en esa Zona… en sus terrenos prohibidos. No se nos dijo mucho del objeto en cuestión, solo su nombre… el cual me daba una clara idea de que estábamos buscando: la “Flor de Metal Negro”. Curioso nombre, mal lugar para ponérselo pero… egh, yo no soy quien para juzgar el lugar donde se asignan los nombres de estas cosas extrañas.

Nos acercamos a lo que sería la frontera próxima a los muros externos de la inmensa ciudad; por la zona Este respecto a la puerta principal; custodiada por 2 Knightmon cuyas espadas cruzadas entre sí parecían ser una especie de bloqueo para impedir el paso a aquellos que no se anunciaran primero. Pasar esa guardia seria fácil, solo debemos de decir que vinimos de turismo y no habrá problemas pero… como hay que entrar con un cliente; lo mejor sería esperar aunque… ¿Cuánto tiempo será eso?... no lo sé exactamente… menos cuando desconozco la identidad de aquel digimon que nos llamo. Ciertamente, como dije antes; si no estuviéramos en una situación de cierta necesidad, no aceptaríamos semejante trabajo así como así.

Me pregunto porque tanto secretismo… -observe el cielo; ya era medio día pero en este lugar casi siempre parece haber un extraño atardecer- y también me pregunto porque justamente esta zona donde ya teníamos planes pendientes…
A lo mejor han sido coincidencias… míralo del lado positivo; haremos 2 trabajos en un día, eso es una ventaja bastante amplias –Labramon evidentemente quería seguir viendo las cosas del lado bueno- por cierto… ¿Qué debíamos buscar?... ya olvide el nombre de nuevo
Se llama la “Flor de Metal Negro”… es una especie de objeto que restaura los datos de digimons mecánicos impidiendo que estos se pierdan con el tiempo… es como rejuvenecer para los humanos… pero el rejuvenecimiento es permanente –Evidentemente Nova se puso a investigar del tema… no me sorprende- seguramente los científicos quieren usar la flor para ver si pueden ampliar la posibilidad de uso de datos para las kimeras…
¿Significa que es como una… “llave a la juventud eterna” de los digimons maquina? –Labramon observo a Nova, quien simplemente asintió con la cabeza levemente- que miedo…
Lo que interesa por ahora será esperar a que llegue el contacto, ayudarlo con lo que sea necesite y después buscar inmediatamente la flor… -Cerré los ojos para intentar pasar el tiempo, aunque termine escuchando pasos… pasos grandes- ¿Qué diablos…? –me voltee para observar y casi inmediatamente me lance hacia un lado; evitando un gran ataque de garra- ¡¿Qué diablos?!

Alce la mirada y observe a una especie de maquina gigante de color rojo; con aspecto de dinosaurio… me recordaba mucho a Machinedramon pero estaba mas que claro que no era ninguno… ¿será alguna subespecie?... es posible que si pero… creo que no le caigo muy si se ah puesto a atacar tan sorpresivamente. Doy gracias a que empuje a Labramon conmigo y que Nova tuvo los reflejos suficientes para evitar el golpe sin mayores problemas. El digimon extraño no pareció querer esperar mucho, por lo que levanto su garra nuevamente para intentar atacarnos; algo que Nova decidió evitar colocándose en medio del ataque para bloquearlo pero… al contrario de una situación esperada; el digimon consiguió derribar a Nova, estrellándolo contra el suelo sin problema alguno.

¿Qué diablos?... ese digimon debe de ser nivel Mega… ¿Cómo es que no pudiste frenar su golpe, Nova? –lo observe bastante preocupado-
Debe ser… egh… un digimon de clase Super Ultimate… estas cosas… son básicamente un Mega evolucionado a otro, con un poder muy por encima del que tenemos nosotros juntos… -Nova consiguió hacer un pequeño esfuerzo para levantarse del suelo- aun con BlackMetalGarurumon no podríamos hacerle un rasguño… y evidentemente esta cosa vino a buscarnos… si no ya habría destruido el lugar…
Maldición… esto sí es malo… -fruncí el seño y observe nuevamente al digimon, quien levantaba su brazo para volver a repetir el mismo golpe de las anteriores 2 veces- demasiado malo…
“creo que debo de encargarme de esto…” –Extrañamente, sentí una voz muy rara… casi distorsionada… en mi cabeza- “ustedes descansen… yo me encargare de este pequeño problema con Chaosdramon…”
Egh… (¿Qué pasa…?... mi cuerpo se siente pesado…) –Observe a Labramon y a Nova, y ellos también se veían extraños… casi como si perdieran el control de si… mismos…- …


De un instante a otro; el humano y los 2 digimons perdieron la vida de sus ojos, quedando totalmente vacios… casi títeres sin titiritero; cual guerrero sin espada y ángel sin alas. La maquina se quedo observando unos segundos; intentando analizar la situación. Chaosdramon era una maquina asesina de gran poder, pero al momento de perder a su presa le costaba retomar el ritmo para mantener la situación bajo control, y evidentemente; los sensores que tenia para rastrear a sus objetivos, se habían desactivado… esos objetivos perdieron lo que le permitía a la maquina rastrearlos: sus esencias. Transcurrieron unos segundos hasta que los cuerpos de sus preseas volvieron a moverse; pero esta vez, no se veían agotados… sino más bien llenos de energía, aunque no lo demostraban de ningún modo; solo se juntaron para mantenerse alineados. Chaosdramon noto que sus presas seguían moviéndose; y pese a no tener sus esencias, sus cuerpos destruidos serian más que suficiente según su programa primario; por lo que no temió en bajar su brazo aun extendido hacia el suelo para aplastar los cuerpos del humano, el cachorro y el hombre dragón.

Matrix Evolution… -comento el humano de forma leve; a medida que su D-Arc comenzaba a brillar, así como el pequeño cachorro era bañado en dicho brillo; comenzando a fusionarse de forma mutua- ¡BlackMetalGarurumon…! –Grito el humano, ahora fusionado con su compañero digimon-
¡DNA… EVOLUTION! –Tan pronto estas palabras fueron pronunciadas por el hombre dragón y el canido metálico; estos comenzaron a brillar, expulsando un aura de energía oscura-

La energía que comenzaron a expulsar ambos seres; fue lo bastante poderosa como para frenar el brazo de Chaosdramon, quien retrocedió al no comprender al 100% lo que estaba ocurriendo; aunque para cualquier otro espectador del momento; que hubiera llegado al instante en que BlackMetalGarurumon y BlackWarGreymon pronunciaran la palabra “DNA”, tendrían claro que se trataba de una evolución de fusión, o Jogress como suelen decir algunas otras personas. Regresando al tema; la energía expulsada por ambos digimons, comenzó a acumularse frente al dragón mecánico de color rojo; formando una especie de cuerpo humanoide, de piernas algo largas y torso delgado; brazos largos y firmes, así como una cabeza; aunque parecía más bien una especie de casco de color negro.

Por su parte, los cuerpos de BlackMetalGarurumon y BlackWarGreymon comenzaron a desparecer; volviéndose meros datos que se internaron en sus respectivas cabezas; mientras estas aumentaban su tamaño hasta ser algo equiparable al cuerpo formado por datos oscuros. El cuerpo levanto sus brazos y de él emergieron 2 grandes manos; las cuales se internaron en las cabezas de ambos digimons Black. La mano derecha se interno en la cabeza de BlackMetalGarurumon, mientras que la izquierda en la de BlackWarGreymon. Chaosdramon al observar tales acciones; comenzó a entrar en razón, o al menos sus programas lo hicieron; forzándolo a moverse para atacar antes de que la fusión se completara… aunque ya era demasiado tarde; tan pronto como las cabezas de ambos digimons blacks fueron aseguradas; de estas salió expulsado una capa de vapor y alguno datos oscuros; que tiñeron ciertas zonas de la armadura de color amarillo; y además, creando una capa de color negro por fuera pero rojo oscuro por dentro, la cual cubrió totalmente la espalda del “caballero” que acababa de ser formado.

¡HYPER MUGEN CANNON! –La Chaosdramon cargo sus cañones y disparo una ráfaga de energía contra la armadura, aunque esta simplemente levanto su brazo izquierdo y de este emergió una gran espada, la cual fue usada a modo de escudo bloqueando el ataque sin problemas- ¡…!
… débil… -se escucho una voz extraña… profunda y seria; tranquila y “amable” en algún modo; fue en ese instante que en la zona de la cabeza del caballero, brillaron sus “ojos”; dejando ver 2 esferas de color rojo sangre por la comisura del casco- demasiado débil… -un rápido giro fue necesario para tomar la inercia adecuada; consiguiendo que el filo de su espada lograra cortar a la mitad en un tajo diagonal a Chaosdramon, volviéndolo datos de un instante a otro- … supongo que por el resto del día… yo tendré que cumplir con su obligaciones…

Si bien el caballero apareció para esta “pelea”; evidentemente, algo lo forzó a mantener unidos al humano y digimons… porque para realizar semejante comentario, significaría que ninguno de los 3 individuos… estaba controlando este nuevo cuerpo.

Gatomon y yo habíamos viajado hacia la zona imperial. Nunca habíamos estado allí sólo sabíamos que era una zona muy antigua. Hace pocos días recibí un mensaje desde el ordenador  mi apartamento de la zona habitacional de la zona D, alguién parecía querer reunirse con nosotras en dicha zona, no explicaba nada más solo que necesitaba vernos. Llevabamos ya bastante tiempo mi digimon y yo viajando por el digimundo y allí habíamos hecho muchos amigos, sin embargo estábamos descolocadas, no sabíamos quien podría requerirnos en tan antiguo lugar. Aun así después de pensarlo mucho, estábamos allí.

Nos encontrábamos en una colina desde donde podíamos ver una inmensa fortaleza como medieval en cuya puerta estaba custodiada por knightmon. Para la ocasión había dejado mi pelo castaño suelto al viento con una diadema roja como único adorno. Llevaba un chaleco como de explorador color beige y en la espalda llevaba bordado en azul marino el emblema de los US, mi clan. Bajo ese chaleco llevaba un top rojo y mi inseparable D-power al cuello. También llevaba unos adorables pantaloncitos cortos de cuyo cinturón pendía mi bolsillo para las cartas. y luego llevaba unos calcetines calentadores blancos  y unas playeras de treeking, estaba monísima parecía una verdadera exploradora. Gatomon como siempre llevaba alguna prenda a juego con mi atuendo en este caso un pañuelo rojo anudado al cuello.

-Es esa la zona Imperial, Gato?-Le pregunté pero ella estaba mirando alrededor nerviosa, aun así me respondió.

-Ashe, estamos en la zona imperial desde hace tiempo, lo que tenemos en frente debe de ser una de sus ciudades mas antiguas.-siguió oliendo el aire y mirando nerviosa a todos lados.

-¿Se puede saber que te pasa? Te noto tensa desde hace un buen rato...-le pregunté ya incómoda por su comportamiento.

-No me digas que no has notado que alguien lleva siguiéndonos desde hace tiempo. No es la primera vez que me siento observada y ese olor me resulta muy familiar....-dijo ella olfateando el aire.

-Ahora que lo dices....-me di cuenta de que yo tambien noté una punzada en la nuca, como de unos ojos invisibles que nos miraban. Miré a nuestro alrededor, no había mucho donde esconderse, sólo unas piedras que parecían pertenecer a un antiguo dolmen y detrás una máquina expendedora de perritos calientes, rarezas del digimundo. Había un envoltorio cerca de la máquina y una sombra que se movía tras la piedra, parecía estar comiendo.

-¿Quién..?-iba a preguntar pero Gato me interrumpió.

-¡Chist!-me mandó callar y adoptó una pose como de un gato cuando se prepara para saltar sobre su presa, se agazapó y se acercó sigilosamente hacia la sombra para luego abalanzarse sobre su propietario/a.

-¡Waag!! Cof! Cof!-nuestra víctima se había atragantado con el perrito.

-¿Quién eres tú, por que nos estas siguiendo, habla!-me acerqué y me di cuenta de que Gatomon estaba sobre el pecho de un extraño digimon al que bamboleaba para que hablase tirándole de los pelos del pecho.

-¡Gatomon para! ¿No te das cuenta de que se está ahogando?-aparté a mi digimon que seguía mirándole con desconfiada y algo extrañada pues su rostro le resultaba familiar. Le hize la maniobra de desatragantamiento y escupió el cacho atragantado sobre la cara de Gato que se restregó asqueada.

-Gra...gracias...-dijo el digimon

-¿Ryuki?-me extrañé yo al recordar a un viejo amor de Gato, miré sus datos en mi D-power para asegurarme del digimon que se trataba.

STRABIMON:

-Mis disculpas si os habéis sentido incomodadas con mi presencia pero quería volver a verte, Ashely. No conozco a ningún Ryuki, lo siento. Me sentía demasiado intimidado por vuestra fortaleza por eso no me atrevía a presentarme cara a cara...-dijo el Strabimon.

-¿Qué quieres tú de Ashely, cretino? No te dejaré acercarte a ella a menos que muestres tus verdaderas intenciones!-se encaró Gatomon delante de mi.

-Esta digimon sigue igual de irritante... seguro que yo sería mejor compañero para ti, Ashely-chan que esa gata. Supongo que no me recordaréis, pues volví a mi etapa rookie cuando conseguí salir de los dominios oscuros de Mirtha-sama para buscaros-soltó el digimon.

-No me digas que tu eras Cerberumon?-pregunté yo recordándole de  pronto--Ohhh!! Eres moradito y adorable!!! Puedo llamarte Blurr??-le estreché contra  mi pecho provocándole un pequeño sangrado nasal que Gatomon detectó enseguida.

-Maldito pervert! No mires así a Ashe!! ¡GOLPE DE GATO!!-gatomon le dio un puñetazo en la barbilla en cuanto se separó de mi que lo lanzó  a las puertas de la fortaleza justo delante de los Knightmon que lo miraron extrañados.

-Oye tío, acaso están planeando una invasion catapultando digimon hacia la ciudad?-le dijo un knightmon al otro.

-No se por si acaso apúntale con la espada si se mueve, pero Strabimon tenía dos espirales por ojos.

-¿Quieres dejar de ser tan bruta? Era muy mono y te aprovechaste de que está un nivel por debajo de ti!-le repliqué a Gato mientras corría hacia Blurr.

-¿Pero es que no te das cuenta de como te estaba mirando? Se por qué motivo un digimon sangra así y no es nada bueno-protestó Gato.

-Pues tú también sangras así a menudo y no te digo nada! y ahora si me disculpas voy a socorrer a Blurr!-corrí ignorando a mi digimon.

¿Será posible? ¡¿No me digas que me vas a reemplazar por ese chucho?!-dijo Gato siguiéndome.

-Alto! No se puede pasar a la fortaleza!-nos dijeron los knightmon en cuanto nos vieron socorrer a Blurr que parecía volver en sí.

-Disculpar, el strabimon viene con nosotras-dije mientras le daba golpecitos para que volviera en sí.-Vamos espabila, Blurr!

¿Estoy en el cielo? Creo que me despertó un ángel-balbuceó él.

-¿Pero qué? ¡Yo le mato!-dijo Gatomon soltando humo de sus narices.

-Knightmons, disculpar que nos presentemos así, recibimos un mensaje de alguien de esta ciudad que quiso que vinieramos a visitarle, somos de los Union Savers y este strabimon se viene con nosotras, lo sujeté de la cintura y le pasé la mano por mi hombro, para ayudarle a incorporarse, era curioso pero era casi de mi misma altura.-dije yo mirando a los knightmon y después a Gatomon para asegurarle de que nuestro nuevo amigo nos acompañaría y que se comportara bien con él.

Gatomon suspiró y se resignó muy a su pesar, estaba claro que no se habían caído nada bien y eso que ella adoraba más a un digimon masculino que a nada en el mundo, eso si que era raro.

-Me es extraño que alguien solicitase a soldados de los US en la ciudad pero bueno adelante.-dijo al final uno de los Knightmon mientras el otro abría la puerta.

Entramos en la ciudad y Blurr ya empezaba a volver en sí mismo.

-Estás bien? Perdona la brusquedad de mi digimon, Blurr, parece que no le gustan los perros-disculpe a Gatomon por ella mirándola con severidad.

-No... no importa, Ash de verdad. Yo soy feliz si estoy a tu lado, eres la única que me ha tratado bien en mi vida que yo recuerde y eso es muy importante para mi. Además me agrada que me llames Blurr aunque no sea azul jeje-contestó él.

Yo le sonreí para después observar la ciudad, parecia hecha toda de piedra, muy medieval. Me pregunto dónde nos esperaría aquel digimon que nos envió el mensaje... Ajena a los digimon que me acompañaban por un instante no pude ver como Gato se subia a la espalda de Blurr para decirle algo al oído.

-Mira chucho, me da igual que te parezcas a un amigo mío y puedo tolerar que Ashe te acepte y formes equipo con nosotras por que mi tamer, que no se te olvide es mi TAMER y de nadie más, así lo quiere pero como me entere de que quieras acosarla o que la mires con ojos de cordero degollado o que intentes cualquier cosa pervert con ella te mataré no lo dudes, a mi no me la das, perro y a acosadora, te puedo asegurar que no hay quien me gane jejejejejjeje-amenazó Gato.

Blurr tragó saliva pero le contestó.

-Muy bien Gatomon, está claro que tu y yo no nos llevaremos bien en la vida pero una cosa te diré, yo quiero estar con Ashe tanto como tú y ella me acepta si tu me matas, también le harás daño a ella jeje y otra cosa, bájate de encima de mi pesas como un mammothmon en un ojo!-soltó él

-Pero será....!!!-Gatomon preparó su puño de nuevo.

-Gatomon!-la miré inquisitivamente y ella bajó al suelo tragándose su rabia mientras Blurr sonreía triunfante.

“¿Quién?... ¿Por qué?... ¿Cuándo?”… todas esas preguntas rodeaban a los restos de los datos de Chaosdramon antes de que su Digitama fuera formado por los mismos… 3 misterios que ahora mismo invadían mi mente; una de las razones por la cual no permitiría que Scott Musahrahjy, Labramon Anubian y Nova Salamander despertaran de mi estado de control… los necesito quietos y ajenos a esto… aunque; quizás debería de replantearme las cosas para ver si soy capaz de desenmascarar estos misterios sin tantos problemas.

¿Quién envió a Chaosdramon?... está claro que esa bestia no ataco por cuenta propia… tenia sistemas que le permitieron identificar a sus presas… pero, ¿Quién los instalo y lo programo?... no tengo pistas… o mejor dicho; no tengo pistas concretas que bloqueen los cientos de caminos y alternativas al responsable… demasiados enemigos con los años, puede provocar bastantes problemas a la hora de identificar a uno solo.

¿Por qué fue enviado Chaosdramon?... esa es la duda más grande que tengo… quien lo envió no es algo sumamente importante pero si es importante el porqué lo envió. Está claro que fue enviado para acabar con las vidas de mis componentes pero… no puede ser posible que alguien sepa de mi… soy un ser de hace ya muchos años; y nadie sabe quien tiene los espíritus para despertar mi verdadera alma. Sin lugar a dudas, enviaron a Chaosdramon para eliminar, pero no sé el porqué de tal acción… quizás alguien quiere a los miembros de los Chaos Empire fuera… pero, eso abriría una duda… ¿Cómo supieron que estamos aquí?... sin duda, no cuento con las pistas suficientes para saber la verdad.

¿Cuándo fue enviado Chaosdramon?... pudo ser desde hace tiempo… así como pudo ser enviado hace 20 minutos… una maquina como esa es muy vistosa pero ni siquiera los Knightmons se alarmaron de él ni pusieron la ciudad bajo alerta… eso significa que no cruzo la ciudad ni se acerco como para alertar a nadie. Significa que pudo ser enviado desde una zona cercana… aunque también cabe la posibilidad de que nos siguiera pero eso ya es menos improbable.

Sin duda estos 3 enigmas comenzaban a molestarme bastante… no porque no fuera a solucionarlos pronto, si no porque todos involucraban un mismo componente con un mismo objetivo bastante perjudicial para mí y para mis componentes; puesto que ellos son los que deben vivir… yo solo soy un medio para ayudarles con sus problemas serios.

… ¿Qué ah ocurrido durante mi ausencia? –Evidentemente el mundo que conocí ya no es el mismo, y eso me preocupa bastante… mas porque estoy intentando reintegrarme al mismo-

Sin nada más que pensar, comencé a observar el cielo… anaranjado como si el anochecer se aproximara… aunque realmente era el cielo anaranjado por el amanecer… viví en esta zona el tiempo suficiente como para aprender cómo funciona sus ideas de tiempo. Ahora que lo pienso… reconocer este lugar seria mi segundo motivo para mantener esta forma física y poder transitar libremente por el lugar. Debo de averiguar muchas cosas aquí… una de ellas es averiguar que ocurrió exactamente con Chaos y su esposa… otra es investigar si los Dark Strikes siguen vivos… y quizás la última seria destruir la Flor de Metal Negro… un objeto como ese no puede permanecer existiendo… vi suficientes masacres por las 4 espadas de los Grandes Generales Dragón como para saber que muchos mataran por esta flor.

Eh… ¿disculpe? –Abrí los ojos levemente al sentir una voz leve; entonces me voltee para ver a un digimon pequeño… un Pawnchessmon negro, temblando de pánico con su pequeña lanza entre las manos- ¿E-es u-u-usted e-el me-mercenario q-que solicitamos?
… así es, pequeño… -Tuve que agacharme para intentar igualar su tamaño, aunque solo conseguí por acortar el tamaño… al menos ahora podría escucharlo bien- ¿tú has sido quien me convoco?
¡A-Ah! –El pequeño digimon se alejo asustado- N-no… a-ah sido m-mi reina QueenChessmon-Sama… e-ella desea q-que la ayude con algo importante…  ¿a-aceptara el tra-trabajo?
Por algo me eh tomado las molestias de venir hasta aquí, pequeño –comente con cierto sarcasmo, aunque con un tono levemente alegre; al menos ahora mi mente se despejara un poco- vamos… tu serás quien me guie hasta tu reina… ¿sí? –Lo observe, sonriendo de forma leve; aunque debido a mi casco era algo difícil notarse-
¡S-Si! –Pawnchessmon parecía alegre, aunque evidentemente aun me temía un poco-


El pequeño Pawnchessmon de armadura negra, guio al caballero de mismo color de armadura hacia la gran ciudad; con cierto temor ya que el pequeño digimon esperaba a 3 personas; no a un digimon que parecía tan poderoso como lo era Omegamon Zwart. Fuese como fuese, cuando ambos llegaron ah la entrada de la ciudad; los Knightmon alzaron sus espadas al ver al caballero oscuro gigante detrás del pequeño “peón” negro. Naturalmente el pequeño Pawnchessmon, como guía de Omegamon Zwart; aviso a los Knightmon que bajaran sus armas aunque… ¿Por qué las alzarían en primer lugar?, ambos caballeros eran de nivel Ultimate y obviamente Omegamon Zwart de nivel Mega a primera vista; aunque su poder alcanzaba al de un Súper Ultimate pero… ¿sería su instinto de guardia?, seguramente.

Finalmente, dentro de la ciudad; el pequeño Pawnchessmon continúo guiando a Omegamon Zwart, quien comenzó a atraer las miradas de todos los habitantes. Turistas, vendedores, herreros, floristas, músicos, sastres… todo aquel que estuviera en la calle o en una tienda con ventanas lo bastante traslucidas pudo ser capaz de ver al gran caballero oscuro; que pese a que podía reducir drásticamente su tamaño con solo reducir el nivel de sus datos en la armadura; prefirió no hacerlo para conservar su tamaño real; el cual no superaba al de un Brachiomon… obviamente no su cuerpo general si no su cuerpo mas la longitud del cuello.

Pawnchessmon guio al caballero oscuro hasta un gigantesto castillo en mitad de la gran ciudad; donde una vez dentro, varios digimons de la familia “Chessmon” recibieron a ambos digimons. Los Knightchessmon oscuros hicieron una gran reverencia; mientras que los Rockchessmon se pararon firmemente; levantando sus brazos de cierto modo militar, aunque realmente no era lo suyo la actitud militar. Pero fuese como fuese; Pawnchessmon termino su guía al detenerse frente a una gran puerta con decorados de corazones. Era una puerta curiosa, puesto tenía un gigantesco corazón en la mitad, y al ser una puerta de castillo; era as bien una “puerta doble”, por lo que al ser abierta, el corazón que tenia por decorado seria “partido a la mitad”… interesante concepto y juego visual, al menos para el caballero oscuro que no tuvo problemas con abrir la puerta poco a poco… hasta llegar a una gran sala del trono. Dentro de la habitación, habían varios Pawnchessmon, quienes levantaron sus lanzas en señal de respeto al ver al caballero oscuro; quien dirigió su mirada para ver al gran trono que se encontraba al final de la sala, o más bien a quien se encontraba sobre el mismo. Una bella QueenChessmon de cabello largo color plateado, armadura negra y rosada con decorados amarillos, en la zona de la cintura poseía varias espadas colgando a modo de una falda larga; sentada con su bastón en mano.

QueenChessmon observo al caballero oscuro uno instantes; con gran seriedad pero sin sospechas, para luego soltar una pequeña risa con cierta gracia. El mantuvo una expresión vacía, al menos hasta la risa; lo que instintivamente le hiso formar un rostro de duda, pero duda respecto al porque ella reía. Entonces la “reina” se levanto de su trono, observando al caballero; que le doblaba la altura sorprendentemente, aunque lo cierto es que él había reducido su tamaño para poder entrar en el castillo sin problemas mayores.

Hacía mucho que un digimon de tan buen aspecto no venía a pedir mi mano en matrimonio –comento la reina con una sonrisa divertida en el rostro; aunque su comentario hiso que los Pawnchessmon la miraran sorprendidos; soltando sus lanzas y después observando al caballero oscuro como si fuese algo cierto lo que acababa de decir- y además eres un caballero… realmente has ganado muchos más puntos que los demás que han venido aquí
¡QueenChessmon-Sama! ¡El no vino por su mano! ¡Él es el mercenario! –El Pawnchessmon que guio a Omegamon Zwart evidentemente estaba algo molesto, pero también temblaba por haber levantado la voz sin permiso-
Me temo… -Casi todos los digimons de la sala dirigieron su atención hacia Omegamon Zwart- me temo que aunque su belleza, dama, sea tan deslumbrante y peligrosa como el acero de mi espada… no creo ser digno de su mano –Tal respuesta consiguió que todos los Pawnchessmon comenzaran a gritar sorprendidos, aunque su reina más bien se sonrojo levemente ante tales palabras- pero aun asi, es verdad, soy el mercenario que parece haber contratado… ¿Qué necesita de mi?...
Eh… ejem… -QueenChessmon borro su sonrojo rápidamente, para aclarar su voz y poder hablar tranquilamente- necesito que me acompañe a conseguir la Flor de Metal Negro –tal petición, hiso que el caballero abriera los ojos algo sorprendido- soy la descendiente de su creadora original… y la necesito para no crear un ejército como muchos harían… la necesito para ayudar a una ciudad hermana… sus habitantes han comenzado a enfermar y esa flor es su esperanza… como soy la descendiente de su creadora, conozco la manera de disipar la maldición que protege ese objeto…

Omegamon Zwart mantuvo silencio… el mismo se había planteado el destruir la Flor de Metal Negro pero… ¿realmente aquella reina que tenía enfrente podría ser de fiar realmente?... es obvio que si quisiera un ejército, ella ya lo habría hecho; y que de quererlo, no sabría la contraseña puesto se considera descendiente de la creadora de la flor, únicamente a quien no estaría dispuesta jamás a hacer mal de su poder si pudiese poseerla. Finalmente, el caballero tomo su decisión…

Muy bien… le ayudare a llegar a la flor… ¿Dónde se encuentra?... aunque también quisiera saber mas respecto a porque necesita mi ayuda para llegar a la misma… -Sin duda, el caballero preguntaría-
La Flor se encuentra en un laberinto subterráneo… hay accesos por toda la ciudad; aunque mis guardias están bloqueando todos… el único acceso que no está bloqueado es el del castillo… -QueenChessmon suspiro levemente, antes de ponerse en marcha- y necesito la ayuda de un mercenario porque los digimons que hay en ese laberinto… buscan la flor como yo y aun sabiendo de la maldición, creen superarla… debido a eso, todos han sido transformados en digimons maquina sin conciencia, con una sed de datos insaciable…
… debo asumir que la maldición corrompe la data de quien toque la flor para volverlo a ese estado… ¿correcto?
Exacto –Al decir eso, un pequeño corazón salió del casco de QueenChessmon, como si ella hubiera guiñado el ojo debajo del casco- bueno… vámonos

Off: para tu post, pon si quieres que los guardias del Acceso que vayas a usar [puede ser cualquier camino al laberinto subterráneo el no es ningún secreto XD] se quedaron dormidos o que se fueron a otro lado para que tu entres –w-
PD: si te molesta lo de las letras brillantes lo quito, porque han comenzado a actuar de forma rara ._.U

Nuestro nuevo amigo Blurr, Gato y yo entramos en la ciudad, era bonita a pesar de parecer que estábamos como en un antiguo reino medieval olvidado con sus casas de piedra, su castillo en el centro de la ciudad etc... Mis amigos parecían haberse calmado un poco y estábamos deseando encontrar a nuestro remitente. Caminabamos por la ciudad en busca de pistas del dicho remitente cuando oímos abrirse la puerta de la fortaleza de nuevo, todos parecían quedarse alucinados con el nuevo visitante, era bastante alto y parecía poderoso, iba a mirar sus datos en mi D-power, pero no hizo falta porque Blurr parecía conocerlo.

-¡Por Yggdrasil! ¡Es un Omegamon Zwart! ¿Qué diantres hará un digimon tan poderoso por aquí?-comentó Blurr.

-No sé, está un poco lejos para apreciar su olor pero... lo poco que me llega me resulta extrañamente familiar... aunque no se es confuso...-Gatomon intentó aproximarse más pero yo le tiré del rabo.

-Aguarda Gatomon... ¿Qué sabes de él, Blurr?-le pregunté yo a mi nuevo amigo.

-No mucho realmente, pero cuando estaba bajo el poder de Mirtha, conocí historias sobre ese digimon, es  protagonista de muchas leyendas oscuras... pienso que es un digimon de mal fario, chicas... Lo mejor será no acercarnos a él por el momento...-opinó Blurr.

-A mi no me parece tan peligroso... ¡Lo que quiero saber es por qué su aroma, bueno su mezcla de olores tiene un trasfondo me es tan familiar y no se qué es!-dijo Gatomon ofuscada porque su olfato no le diera más pistas.

-Gatomon, no creo que sea alguien a quien debas acosar... está muy por encima de tu nivel-dije cogiéndola en brazos para evitar que se moviera más hacia aquel digimon oscuro.

-Ulforcín también y no me asusta!-Gatomon se cruzó de zarpas en mis brazos enfadada porque no le dejaba hacer lo que quisiese.

-¿Tu digimon se lanza a todo digimon de apariencia masculina o me lo parece a mi?-observó Blurr algo intimidado puesto que él también era un chico y no le apetecía que esa gata loca le acosase, bueno mas bien ni que se le acercase.

-Bueno... ella es bastante peculiar, ya la irás conociendo, Blurr... pero en el fondo es buena chica.-comenté yo con cierta resignación

-Tranquilo perro, prefiero convertirme en data antes que si quiera pensar en que un perro como tú pueda llegar a gustarme.-dijo Gato mirándole con odio.

-¿Sois Ashely Shirley y Gatomon?-comentó una renamon acercándose a nosotras.

-Si, ¿eres tú quien nos envió el mensaje?-pregunté

-No, pero quien me envía me pidió buscaros en esta ciudad, por cierto ¿quién es él?-preguntó mirando a Blurr.

-Es un amigo, ¿puede venir con nosotras no? Es un aliado-pedí yo.

-No soy quién para decidir eso, venid conmigo-pidió la Renamon.

La Renamon nos llevó por unas callejuelas hasta una taberna escondida donde no había demasiada gente a esas horas, pero en un rincón había una figura femenina oculta tras un sombrero pirata y una gabardina blanca. En su mesa pude ver que llevaba un digivice semejante al que tenía Mirtha pero de color blanco con detalles en rosa y dorado.

-¡Ashely!-la mujer se quitó el sombrero dejando a la luz su largo cabello rubio y sus verdes ojos, iguales a los míos, que nos miraban a los 3.

-¡Mamá!-dejé caer a Gatomon y corrí a reencontrarme con los brazos de mi madre, parecía que habían pasado siglos sin verla, todo lo que llevaba en el digimundo.

-¡Cuánto me alegro de verte, hija!-dijo ella separándome un poco de su abrazo.

-Ay... esta Ashe...-protestó Gato masajeándose el trasero por el golpe.

-¿Es esa su madre?-preguntó Blurr

-¿Y a mi que me cuentas, perro? Es la primera vez que la veo aunque creo que sentí su olor en alguna parte... muy lejano... en mi memoria digital...-comentó la gata incorporándose.

-Su madre es tan hermosa como la hija....-comentó Blurr

-¡Cómo sigas hablando asi, eres chucho muerto!-amenazó Gato.

-¿Mamá, qué haces aquí? Sabes, encontré a papá, estaba aquí y a Jack y...-dije yo emocionada casi con lágrimas en los ojos por encontrarla pero ella me hizo callar.

-Si, hija ya lo se. Ellos están en casa ahora los dos y a salvo. He estado observándote todo este tiempo,Ashely. Sabía que estabas en este mundo porque tu padre me lo dijo y yo vine también hace poco tiempo después de tantos años sin volver para investigar un asunto...-comentó ella

-¿Qué? Tanto tiempo, ¿es que tú también eres una tamer?-pregunté yo.

-Conocí a tu padre en el Digimundo, los dos luchamos juntos contra la oscuridad hace tiempo... Cuando tenía tu edad yo también tenía a Gatomon como compañera hasta que... bueno cuando  regresé era un digispirit y mi D-power se volvió D-scanner-explicó

-Claro! Ya lo entiendo! por eso su olor me era tan conocido...-comentó Gatomon uniéndose a la conversación y sentándose en la mesa junto a mi madre.

-Tú eres Gatomon... oh! mi compañera era igual a ti, también tenía ese flequillito raro en la frente-mi madre la acarició y le revolvió el flequillo.-Ella no para de hablar de ti...aguarda un momento... parece que no hay nadie aquí... bien!-mi madre cogió su digivice y envolvió su mano en una nube de digicode-HYPER ESPÍRITU DIGITAL! ULTRADIGIEVOLUCIÓN!-tras envolverse en digicode ante nosotros apareció Ophanimon.

-Woow! Mamá eres preciosa!-exclamé y por la sonrisa de Blurr juraría que él pensaba lo mismo.

-Angela, tu madre Ash, forma parte de mi pequeña pero también Gatomon es mi hija, necesitaba tomarla con mis propios brazos también.-Ophanimon abrazó a Gato y la digimon le devolvió el abrazo.

-Ohh!! Madre... creía que habías muerto!-sollozó Gatomon.

-Para nada, Gato. Ni tu padre tampoco, él trabaja ahora para mi, en la Ciudad Celeste y sigue siendo el Wizardmon tan apuesto que un día hizo que me enamorara de él. Si vas alguna vez por allí no dudes en visitarle está deseando volver a verte y ver lo mucho que has madurado-comentó Ophanimon.

-Vaya! qué casualidades de la vida que al final Gato y yo tengamos "en cierto modo" la misma madre jeje-comenté yo emocionada.

-Preciosa la estampa familiar y tal pero, discúlpeme sra. Ophanimon, Angela o cómo se llame, ¿por qué motivo mandó llamar a las chicas? No creo que sea solo por un reencuentro familiar-dijo Blurr

-Ohh si claro! Ashely, Gatomon y bueno y tú... esto... como se llama...-comenzó Ophanimon dejando a gatomon en el suelo.

-¡Blurr, señora! me llamo Blurr. ¿Puede ir al grano de una vez?-dijo el strabimon sin rodeos.

-Blurr, vale... los 3 supongo que podréis ayudarme, resulta que vine al digimundo hace poco tiempo... estuve investigando una profecía que afirma que existen unos artefactos con forma de flores que varias digimon poderosas han conjurado para ayudar a sus siervos en la antigüedad pero que han adquirido unos poderes tan colosales que en malas manos podrían provocar un desastre. Estuve investigando el asunto en la corte de Ancientisismon, una antigua amiga que descubrió una de las flores yo la ayudé en la investigación excavando y buscando pruebas bajo mi forma Ancient de Magnadramon y juntas descubrimos que una de las flores se encuentra cerca de aquí. Necesito que vosotros me ayudéis  a encontrarla y destruirla, puesto que todos sois miembros de los US supongo que estaréis acostumbrados a misiones de este calibre, ¿no es cierto?-explicó Ophanimon.

Si bueno... apenas somos unos soldados principiantes no tenemos mucha experiencia pero, Gato alcanza su forma ultimate supongo que podremos defendernos bien frente a lo que sea-comenté yo.

-AncientIsismon.... Magnadramon....¡Ya lo tengo!-dijo de pronto Gato

-Sigues con tu memoria olfativa de nuevo? Voy a empezar a creer que todos los olores te resultan iguales, Gata-comentó Blurr

-¡Ya cállate, Perro! Ashely! La carrera! AncientIsismon! Tu madre huele igual que esa Magnadramon, ya sabía yo que había olido eso antes y no solo en mi infancia!-me dijo Gatomon.

-¿Qué? ¿La magnadramon de la carrera.... eras tú?-deduje yo.

-Jeje! Ya te dije que te estaba observando desde hacía tiempo, si Ashely esa Magnadramon era yo. Y ahora vámonos, tenemos que colarnos en ese castillo y llegar al laberinto donde se esconde la Flor antes de que QueenChessmon lo haga!-dijo mi madre volviéndose humana de nuevo.

Salimos presurosas de la taberna en dirección al castillo. Con Blurr a la zaga.

-Si hay que colarse y luchar, por qué narices no mantienes tu forma de Ophanimon?? Con su poder no tenemos ningún tipo de problema si tenemos que luchar contra esa Queenchessmon!-Observé yo.

-Ashely cielo, llamo menos la atención de humana, ¿no crees que un digimon ángel llamaría mucho más la atención en una ciudad poblada de digimon maquinitas?-dijo ella

-Supongo que lo mismo que ese omegamon que vimos antes...-comentó Gatomon

-¿Qué ha entrado un Omegamon en la ciudad? Tenemos que correr y mucho, si se alía ese digimon con la Queenchessmon ya te digo yo que no tendríamos ni una minima posibilidad de vencer!!-Urgió Angela y sin provocar siquiera la fórmula de la digievolución se transformó en D'arcmon y nos llevó a los 3 volando hacia el castillo.

PD: perdón por la extramada extensión del post, quería contar muchas cosas en un solo posto jep, no te preocupes por el laberinto, entraré después de ti. Agradeceria lo de las letras si, molestan un poco.

La Flor de Metal Negro… una flor de 5 que son capaces de unirse si se le ofrecen a la digimon correcta… esta QueenChessmon quiere usarla para ayudar a una ciudad hermana… eso es lo correcto pero las intenciones de dicha ciudad son bastante… sospechosas. Una ciudad que comience a caer enferma de la nada… algo está ocurriendo tras su solicitud; pero no puedo hacer mucho… no sé nada de la situación… tampoco sé cómo se usan esas flores… pero si se que ayudare a QueenChessmon a llegar a dicha flor. Sé que debo de destruir esas abominaciones llenas de poder… pero di mi palabra de acompañar a la dama a su paradero, y como caballero debo de cumplir mi palabra… por más que mis objetivos y la palabra se contradigan entre sí de forma tan mutua.

Sea como sea… debo pensar cómo conseguir la flor y destruirla… se que con el cañón de BlackMetalGarurumon tengo una gran posibilidad de acabar con la flor… pero… de activarlo en el momento menos indicado; es posible que los soldados que acompañen a QueenChessmon además de mi se alerten y comiencen a atacarme.

… ¿eh? –Alce la mirada y note que ningún digimon nos seguía- … ¿no planean acompañarla sus fieles sirvientes y guardias?... (¿Realmente la caballería ah decaído tanto en estos años?)
Oh, bueno… los digimons que habitan el laberinto son de nivel Ultimate en adelante… y los Knightchessmon y Pawnchessmon no podrían hacer nada… los Bishopchessmon no son guerreros y los Rockchessmon son demasiado grandes… ninguno entraría en el laberinto subterráneo asique –La dama sonrió con cierta gracia- estaremos solos tu y yo allí abajo… jeje, espero que no intentes aprovecharte de la oscuridad para hacer una jugada
No se preocupe por mí, yo ya lo dije… no soy merecedor de su mano; asique no intentare nada para conseguirla… no tengo nada más que mi cuerpo para ofrecer… y sinceramente, ni siquiera eso puedo mantener constantemente –comente con cierta gracia, mientras seguía a QueenChessmon- (Al menos ahora sé que solo deberé lidiar con ella… una ventaja)
Je… sabes… realmente me sorprende que no seas uno de los tantos caballeros que han venido por mi mano… es raro, pero me halaga que alguien se digne a rechazarme –QueenChessmon se detuvo frente a una pintura de otra de su especie pero… extrañamente más bella y a la vez familiar- la creadora de la Flor de Metal Negro… aquella que sufrió por no poder ayudar a su amado a la hora de morir… entonces creo la flor para ayudar a todas las maquinas o digimons con aspecto mecánico…
… una noble intención… (Pero con desastrosos resultados)
Claro… bueno… no perdamos tiempo; el laberinto está lleno de peligros y esos peligros también quieren la flor desgraciadamente –De un instante a otro, QueenChessmon jalo de una antorcha que iluminaba la pintura, haciendo que esta se hundiera entre las paredes para dejar abrirse un gran pasadizo secreto- te recomendaría tener tu espada lista… la necesitaras

¿Asique necesitare mi espada?... supongo que entonces tendré que cortar la flor en pedazos si quiero hacer algo… usar el cañón levantaría sospechas y eso es lo que menos deseo ahora mismo. Aun así, ella misma afirmo que allí abajo estará oscuro… supongo que podría aprovechar el color de mi armadura y armas para poder tener el cañón preparado; pero no creo que sea buena idea… normalmente cuando esta fuera suele cargar energía involuntariamente, lo cual forma una pequeña linterna de color azul oscuro opaco… eso podría llamar la atención pero bueno… no estoy seguro del todo.

En fin, lo único que hicimos QueenChessmon y yo fue bajar hasta llegar a lo que parecía ser una caída sin fondo. Ella afirmo que era una especie de tobogán que nos llevaría uno de los accesos del laberinto… y que la idea del tobogán era más que nada para que ningún digimon del desafío subterráneo pudiese entrar internamente al castillo y causar desastres en el mismo. Lo acepto, es una buena idea.

No fue nada más que lanzarme primero para asegurar que todo estuviera bien; para que después bajara QueenChessmon, con su bastón preparado por cualquier situación. Me causo algo de gracia verla… una reina pero también una guerrera… no es algo que se vea muy seguido; y lo acepto, me gusta ver ese tipo de actitudes… hacen que ambas almas primarias en mi se sientan alegres, y eso por ende me mantiene de buen humor a mí.

Bien… supongo que ahora deberemos de avanzar por el laberinto hasta llegar a su centro… allí es donde reside la flor… -QueenChessmon tomo una antorcha, iluminando el camino que nos esperaba- es un laberinto que tiende a cambiar de lugar… será difícil superarlo pero…
No hay problema –comente en seco, comenzando a caminar- lo parezca o no… los laberintos vivientes son algo a lo que estoy acostumbrado… (Principalmente porque mis almas primarias estuvieron atrapadas en uno)
¡Oh! ¿Además de guerrero un sabio?, jeje, cada vez me sorprendes mas y mas… y creo que me gusta –Comento riendo la reina de armadura negra y rosa- oye… no te lo tomes tan en serio… aunque seas un mercenario, me gustaría saber cómo es la organización de “mercenarios familiares”… yo se que vosotros no podéis ser tan “infernales” como aparentan…
… es verdad… no somos demonios… pero yo soy un caso aislado… -No me dignare a responder mas de esto- por favor… concentrémonos en lo que vinimos a buscar…

OFF: perdoname la brevedad pero ando seco XD

Mi madre junto conmigo y mis dos amigos llegamos a la azotea del castillo, había algún pawnchessmon despistado pero parece que D'arcmon se hizo cargo de ellos.

-Escucharme este es el plan, mi amiga renamon me consiguió el plano del interior del castillo. La entrada al laberinto tiene que estar en este lugar.-señaló D'arcmon un punto marcado en rojo en el mapa, parecía una sala grande con una gran puerta.

-¿Y cómo llegamos hasta allí? Los soldados de Queenchessmon deben de tenerlo todo vigilado...-dije yo.

-Podíamos enviar a la gata salida, es pequeña y supongo que podrá meterse por cualquier rincón si no se atora con su barriga claro está...-sugirió Blurr

-¡Maldito, Perro!! ¿Quién te ha dado permiso para hablarme así? ¡Yo no estoy gorda te enteras?-se le encaró Gatomon.

-Gatomon, basta!-la sujeté

-Guardad silencio! Puede haber más soldados por ahí...-comentó mi madre.-Además creo que tu amigo ha tenido una buena idea. Creo suponer que hay un conducto de ventilación por aquí cerca, Gatomon es la única que cabe por ahi y creo que esa ventana de alla-dijo señalando todos los objetos en el mapa y nos señaló una ventana que estaba a pocos metros hacia abajo de la pared de la azotea- Sería el sitio idóneo para infiltrarnos-explicó

-Bien, Gatomon confío en ti, te ayudaré a infiltrarte con una carta nueva que hace poco conseguí y así tendrás más sencillo despejarnos el camino.-la animé yo.

-Lo haré Ash porque tu me lo pides... pero no me gustan las ideas de ese chucho sarnoso... Madre, ¿podrías indicarme el camino que he de seguir hasta la sala que da a esa ventana?-le pidió Gatomon a D'arcmon.

D'arcmon le dio una serie de indicaciones en el mapa y la llevó hasta el conducto de ventilación.

¡CARD SLASH! Carta de atributo! ILLUSORY WALLS!!-Gatomon se camufló con el medio que le rodeaba como si fuera un camaleón parecía casi invisible.

-¡Mola!-Exclamó Gatomon.-Una cosa, Ash... ¿como te puedo decir que podéis entrar en acción? ¿cuál será la señal?-me preguntó

-Supongo que tu maullido será suficiente, Gato-dije yo revolviéndole el pelo haciendo un tremendo esfuerzo para encontrar su cabeza, el poder de esa carta era realmente muy bueno.

-¡Buena suerte, hija! Confiamos en ti-le animó D'arcmon

-Espero ansiosa tu maullido, Gatomon jeje-le dije yo

-Intenta concentrarte, Gata salida y no te dediques a acosar a nadie, te recuerdo que dependemos de ti-le dijo Blurr

-Algún día de estos te haré tragar tus ladridos, estúpido perro...-le dijo Gatomon antes de meterse en el  conducto y perder más tiempo por miedo a que se le pasaran los efectos de la carta.


Me escurrí por un pequeño túnel que me daba el espacio justo para pasar gateando, lo que no suponía problema alguno para mi. Era un conducto muy gastado y deteriorado, quizá a la cantidad de años que tenía, puesto que en algunas partes sus datos no estaban completos y tenía que saltar los huecos que dejaba entre un tramo y otro, pero bueno aunque pasara por encima de los techos del castillo nadie podría verme la habilidad de camuflaje que me había proporcionado Ashe, era bastante buena. En un hueco observé hacia abajo, era una sala grande con una gran puerta abierta, solo había unos pawnchesmon bastante aburridos y estaba la ventana también. "Esa debe ser la sala que me dijo Madre"-pensé. Con esto me dejé caer a la sala justo en el momento que los efectos del Illusory Walls desaparecían.

-Un intruso, a él!!-dijo uno de los pawnchessmon lanzándose contra mí con el otro siguiéndole detrás.

Gatomon agachó las orejas y abrió muchos los ojos mirándolos con infinita ternura.

-Miau...! Miau...! Miau....!-maulló tierna y pausadamente

-Ohhh! es un amor de gatita...!-dijo uno
-Si, qué linda!-dijo el otro

-¡NEKODAMASHI!-Gatomon golpeó rápidamente a los pawnchessmon y los dejó amontonados en un rincón derrotados.


-Ahí está la señal! Vamos, Mamá, Blurr!-dije yo al oír los maullidos de mi digimon.

D'arcmon nos cogió a Blurr y a mí por la cintura y se dejó caer hacia la ventana, como odiaba esa sensación de dejarse caer al vacío, por mucho que me sujetara mi madre me daba vértigo igual, por lo que cerré los ojos y recé para no mirar abajo.

-Si te sirve de consuelo, Ashe... yo tampoco soporto las alturas...-me contó Blurr supongo que al ver mi cara de terror.

-No os preocupéis chicos, sólo será un momento.-mi madre extendió sus alas y giró para colarnos por la ventana.

-Vía libre, chicas!-dijo Gatomon terminando de apilar al último de los Pawnchessmon.

Dicho esto nos adentramos hacia la puerta que conducía al laberinto.

QueenChessmon se mantuvo algo callada mientras avanzábamos por el laberinto… supongo que el haber sido tan frio y cortante fue algo… poco esperable luego de dar una primera impresión como la que di. Supongo que intentar terminar con esto rápido no me está resultando muy buena estrategia… je, no me sorprendería comenzar a cometer errores… no suelo permanecer en este mundo mas allá de 10 minutos… pero en esta ocasión puede que este unos días o inclusive una semana completa. Sea como sea… tengo que hacer algo para que este silencio finalice pero… ¿Qué precisamente?... no estoy seguro… la ultima vez que estuve con alguien fue en el Dark Área, conviviendo con Reapermon… y eso fue hace ya muchos, muchos años… no estoy seguro de mi capacidad social para resolver problemas como estos.

Oye… -Mi atención fue captara por la dama de metal… bueno, no tendré que romper el hielo yo, eso me alegra- lamento si te incomode antes… es solo que quisiera conocer mejor con quien trabajo…
¿A que se refiere?... no es una mercenaria… no somos compañeros de trabajo –Esa es la verdad, por más directa y fría que suene- … no lo tome a mal… pero es la realidad y la realidad es algo que no podemos tener a un lado… siempre hay que tenerla clara…
Lo sé pero… ahora estamos actuando juntos para completar un trabajo que ambos tenemos… ¿no es como ser compañeros de un día? –QueenChessmon se rio tranquilamente, y la verdad es que ella tenía razón… mucha razón- oye… una pregunta simple… ¿Por qué?
¿A qué se refiere? –Comente vagamente mientras llegaba a una intersección de 2 caminos, tomando el camino izquierdo- no comprendo la pregunta…
Me refiero… a, ¿Por qué un caballero y mercenario?... son 2 títulos totalmente contradictorios… el caballero es leal a su señor o rey, tiene un honor por sobre todo y no duda en ayudar a quien lo necesite… el mercenario por su lado… solo tiene lealtad al mejor postor, no le importa que debe hacer para terminar su trabajo y siempre se muestra desconfiado a la hora de elegir trabajo… -La dama me observo y sonrió de lado- tu eres ambas cosas, lo cual es raro… ¿Por qué?
… pfs… jeje… -comente a reír levemente, alzando la mirada y cerrando los ojos; para poder reír a plenitud, algo que sorprendió bastante a QueenChessmon- vaya… nunca lo había pensado de ese modo… jeje… pero respondiendo a la pregunta… no lo sé con claridad… nunca eh completado la descripción de caballero y mercenario al 100%... soy un 50% de cada quien…
Je… te eh sacado una risa –QueenChessmon sonrió con cierto orgullo, adelantándose tranquilamente- venga, ahora que estamos de mejor humor, debemos continuar –Dicho eso, sonrió nuevamente, pero en esta ocasión con… confianza y alegría, solo para seguirla con calma-

Es extraño… ella es una reina pero actúa como una aventurera… je… quizás deba hacer esa pregunta en algún momento… después de todo; ambos títulos también se contradicen mutuamente… no solo mis títulos.

Fuese como fuese, a medida que avanzábamos por el laberinto… este comenzaba a hacer de las suyas. En principio no pude notar nada… pero antes de que me diese cuenta de nada; varios brazos salieron de las paredes del lugar; sujetándome como si sus vidas dependieran de ello… aunque librarme no fue del todo difícil. Lo que si fue difícil fue el mero hecho de que cuando estaba por dispararles con mi cañón por acto reflejo, estos brazos desaparecieron completamente… lo peor de todo es que el lugar comenzó a temblar repentinamente… significa que estaba cambiando de posición. Para cuando quise darme cuenta; las paredes a mis lados se volvieron el nuevo “adelante y atrás”; algo que además de despistarme, consiguió distraerme el tiempo suficiente para que esas manos volvieran a salir de las paredes, sujetándome el casco y los brazos en gran número… evidentemente estaban dispuestos a mantenerme quieto.

Egh… están colmando mi paciencia… y yo tengo una paciencia muy amplia –comente mientras aplicaba algo de fuerza para librarme; pero simplemente salían mas manos para volver a sujetarme sin importar que tanto las rompiera- (¡¿de dónde salen estas cosas?!)
¡Grand Cricket! –QueenChessmon levanto su bastón rápidamente y lo rodeo de un aura de energía oscura; para después bajarlo al suelo y hacer temblar el mismo- ¡Salid de vuestros escondites! –La reina simplemente repitió el mismo golpe; aunque variando el lugar donde atacaba, siendo algunas veces el piso y otras las paredes- ¡Eh dicho que salgan! –El último golpe fue dirigido al suelo; pero consiguió hacerlo temblar de tal modo que tuve que acomodar mis piernas para no caer por el temblor… quienes no pudieron evitar caer, fueron unos Golemons de las paredes, totalmente atontados- je… las primeras defensas de la flor…
(Es mas habilidosa de lo que pensé… comienza a caerme bien) defensas bien elaboradas… han sabido identificar el peligro mayor… -Observe a los Golemons quienes comenzaron a deshacerse en cientos de rocas pequeñas…- veo que aprendieron la lección…
No… debe hacer más gente en el laberinto –QueenChessmon observo atentamente el lugar- si no pueden con el más fuerte, atacaran a los más débiles y reunirán poder poco a poco para darte la cara… tenemos que apresurarnos… alguien mas quiere el poder de la flor y no lo permitiré…
Entonces será mejor seguir avanzando –Observe los nuevos caminos que teníamos… la verdad solo tome el que tenia frente a mí, aun tengo que descifrar como se mueve el laberinto-

¿Asique hay más gente en el laberinto?... bueno… los Golemons quizás puedan encargarse de ellos y no cruzaremos caminos pero… en cualquier caso… tengo que tener mi espada lista.

Bajamos hacia el laberinto por un tobogán, en el que "misteriosamente" pude ver por vez primera desde que nos conocimos a Blurr y Gato reírse a la vez, parece que les gustaban los toboganes. Una vez en la entrada del laberinto mi madre recuperó su forma humana y me tomó de los hombros.

-Ashely, aquí hay que andarse con ojo, según tengo entendido puede haber una amenaza en cualquier parte... Pues todo lo que encontremos aquí querrá proteger la flor metálica.-me dijo

-No te preocupes, mamá. Se cuidarme sola. Gato y yo llevamos viviendo aventuras juntas ya bastante tiempo. Sabemos defendernos.-la animé yo.

Gato se subió a mi hombro y corroboró lo que yo andaba diciendo.

-¡Claro! Además puedo llegar a nivel ultimate, jamás dejaré que a Ashely le pase nada, Madre jeje-dijo ella.

-Chicas, no es por molestar pero hay alguien ahí delante... Puedo olerlos...-comentó Blurr

De pronto el suelo tembló y unos Golemon cayeron de las paredes. Y también pudimos ver la alta figura del Omegamon Zwart que vimos entrar en la ciudad acompañado de otro digimon mas o menos de la misma estatura que Ophanimon. Parece que el segundo digimon había sido el causante de la incesante salida de los golemon a la luz.

-Reconocería esa voz en cualquier parte...-dijo Angela de pronto, pues ella y Queenchesmon no se llevaban muy bien, siempre habían sido rivales. Y pensar que esa digimon podría desencadenar el increíble poder de la flor le hervía la sangre.

-Mamá, ¿qué haces...?-le pregunté yo temiéndola

-Mantente detrás de mi, Ashely, Gato...¡HYPER ESPÍRITU DIGITAL! ¡DIGIEVOLUCIÓN! OPHANIMON!-Ante nosotros apareció Ophanimon
-¿Eh? ¡No señora, espere!-pidió Blurr
-Mamá no! Aguarda!-la sujeté de la armadura
-¡Madre, detente! harás que nos descubran!-intentó detenerla también Gatomon.

-Eso es exactamente lo que quiero, hijas mías! ¡QUEENCHESSMON NO TE DEJARÉ HACERTE CON LA PIEDRA NI QUE DESATES SU PODER! ¡EDEN'S JAVELIN!-de su lanza salió un rayo multicolor que falló a propósito como advertencia pasando justo entre la digimon y Omegamon repeliéndo en su trayecto a los golemon e incluso a nosotras mismas que consiguió separarnos de ella debido a su inmenso poder.

-¡Qué inmenso poder!-comentó Blurr

-Genial, Madre.... te has lucido...-protestó Gato poniéndose delante de mi también y preparándose para pelear, porque seguramente esa digimon no se tomaría a bien la aparición de su rival.

-¿Mamá, pero que has hecho?-me sorprendí yo

-Justo lo que tenía que hacer, manteneros detrás esta pelea es mía...-dijo Ophanimon, una mujer y una digimon que no sabían lo que era la palabra "contenerse".

Off: sorry por la brevedad, tampoco quería liarme a mamporros de primera instancia.

Solo un ataque… un solo ataque destruyo a varios Golemons y ni siquiera QueenChessmon y Omegamon Zwart estaban cerca para comprobarlo… pero ambos sabían lo que ocurría con total perfección. QueenChessmon había reconocido la voz de aquella ángel guerrera semejante a una valkiria; era su rival… alguien a quien si bien podía tolerar muchas cosas; como combates repentinos y competencias sin sentido, había cruzado la raya al lanzar un ataque en un territorio peligroso y además “sagrado” para la dama de hierro. Entrar en el laberinto era una cosa descabellada; ya que si habían entrado era para encontrar la flor; y en la mente de QueenChessmon, esa reliquia no podía caer en las manos de nadie más que de ella, no por egoísmo; si no por precaución. Cientos de años en el pasado, la mera existencia de esas flores habían causado guerras sin sentido y destrucción casi irremediable… ella lo tenía presente; ella tenía las memorias de sus antepasadas quienes cumplieron la tarea de proteger la flor y usarla únicamente si era necesario. Afortunadamente nunca fue necesario usarla hasta ahora… pero todo cambio con esa ciudad hermana de QueenChessmon. Ella como reina debía ayudar a sus compañeros y aliados; y como guerrera debía luchar para conseguirlo… por lo que no se permitiría que nada ni nadie se cruzara en su camino o se opusiera a ella. Una total y estúpida locura seria iniciar una batalla en un laberinto vivo subterráneo pero dadas las circunstancias; incluso QueenChessmon estaría dispuesta a olvidarse de su localización actual para detener a todo aquel que la desafié por su “tesoro familiar”.

Mientras tanto, en la mente del caballero oscuro; solo podía analizar lo que ocurría. Comenzando por la repentina aparición de Ophanimon, digimon a la que conocía únicamente por la esposa de su antiguo aprendiz; un ChaosGallantmon que en épocas antiguas fue un general de la oscuridad. Aunque regresando al tema; Omegamon Zwart tenía claro que su oponente era una guerrera de la luz; una valkiria para describirlo de otro modo. Si bien el tendría la ventaja total por ser de mayor nivel; aun tendría problemas para cubrir 2 campos importantes: luz y espacio. La luz de Ophanimon, aun siendo un nivel inferior; era capaz de debilitar levemente la oscuridad, lo cual es una desventaja… mientras que el espacio se reducía al movimiento. El caballero aun reduciendo su tamaño drásticamente tendría problemas para desenrollarse en combate; ya fuese una finta o una simple estocada, le costaría espacio calcular la distancia y fuerza de movimiento de sus músculos para no chocar contra una pared o tropezar debido a la incomodidad. Además, también estaba el laberinto… ¿Cómo realizar un ataque sin destruirlo?... el poder de un SuperUltimate es capaz de mucho, y destruir el laberinto completo y causar un derrumbe entra en la lista.

Finalmente llego el momento de responder las palabras de la ángel… aunque la reina de hierro no parecía dispuesta a “hablar”… no del modo en que sujetaba su gran bastón martillo; temblando levemente intentando contener su furia. El caballero se percato de aquella furia… y liberarla así como así no sería nada bueno; menos si apenas acaba de causar un temblor solo para librarse de los Golemons. Sin muchas opciones en la mente, el caballero se volteo y levanto su espada. Aun separados por un muro, Omegamon Zwart haría todo para calmar a la reina, después de todo; nunca es bueno desencadenar la furia de una mujer.

De un movimiento rápido; corto la pared que los separaba de la valkiria y sus acompañantes, para luego acercarse caminando con calma; aunque de forma siniestra debido al brillo rojo de sus ojos en la oscuridad, sobresaliendo por el polvo levantado al caer la pared.

¿Qué haces…? –QueenChessmon intento acercarse a Omegamon Zwart, aunque este le apunto con su cañón- ¡¿Qué haces?!
Vete… -comento de forma fría- encontrar la flor es más importante que perder el tiempo aquí… -repentinamente el guerrero guardo su arma, intentando mantener una posición pasiva- yo las retendré aquí… tu aprovecha y avanza lo que puedas…
Eso sí que no –QueenChessmon se acerco hasta quedar a su lado- mira, yo tengo problemas con esa Ophanimon… y si vino a molestar, tendré que resolverlos de un modo u otro… asique tendrás que aguantarme
… muy bien… pero que conste –Omegamon Zwart pareció ponerse algo más serio, casi tomando el control de todo lo que ocurría, como un juez o arbitro permitiendo lo que estaba por ocurrir; aunque claro, bajo su supervisión- que ahora tu me debes un favor y cuando lo cobre… no te gustara el precio
¿q-que? –Evidentemente QueenChessmon no se sentía a gusta con ese comentario, y menos al sentir un aura oscura acercándose a ella- bien… hare lo que sea con tal de llegar rápido a la Flor y terminar con esto…
En ese caso… -Omegamon Zwart frunció el seño levemente, observando a sus “oponentes”- ¿Quiénes sois y que quieren aquí?... estamos algo ocupados y tenemos prisa… por favor evitemos un combate… no quiero destruir todo el lugar por una contienda sin sentido


Debo de hacer todo lo que esté a mi alcance para evitar una pelea directa… puedo defenderme usando mi espada y cañón; pero también debo evitar que QueenChessmon se enfade como antes y cause algún desastre sin darse cuenta. Por ahora tengo el control de la situación… mantenerme firme pero sin perder la compostura… intentar arreglar las cosas sin recurrir a ninguna pelea… e inclusive ahora tengo una excusa para que QueenChessmon me permita destruir la flor una vez que la use para ayudar a esa ciudad. Si las cosas siguen así de bien; seré capaz de irme en paz… aunque… ahora ah surgido otra razón para quedarme… aunque quizás pueda resolver esto aquí mismo: ¿Qué hacen Ashely y Gatomon aquí?... estoy seguro de haberlas visto… al menos la cola de Gatomon y ahora que debo mantenerme centrado, me eh percatado de su presencia… je… a veces detectar digimons de nivel Ultimate en adelante es un problema; y eso también cae en el problema de los Golemons.

PD: Dakunaito conoce a Ashely y Gatomon porque al controlar las mentes de Nova, Scott y Labramon para realizar la fusion; tambien es capaz de revisar los recuerdos de ellos, asique conoce a todos los que ellos conocen; aunque claro, a el nadie lo conoce por ser un ente diferente.

-¡Mamá contrólate! ¿No ves que ellos no quieren luchar?-dije intentando contener lo más que podía a Ophanimon y Gatomon igual. Blurr parecía algo confuso por la situación que se presentaba ante él.

-¡Es obvio que lo que quiero es destruir esa condenada flor, tiene un poder demencial y no quiero que esa Reina de ajedrez, lo desate!-dijo Ophanimon contestando a Omegamon y pasando de mi-Así que apártate de mi camino Omegamon, no me interesa purificar a un digimon oscuro como tú con mi poder, mi objetivo es Queenchessmon no tu-Ophanimon alzó el vuelo y fue tras Queenchessmon.

-Mamá no!-intenté pararla pero era mucho más fuerte que Gatomon y yo juntas

-Esa Ophanimon es terca como una mula...-comentó Blurr

-Oye tú! Qué es mi madre!-protesté yo

-Discúlpame por decir lo que pienso, Ashe-chan... no quise herir tus sentimientos...-dijo Blurr intentando adoptar una actitud amigable al comprender que metió la pata.

-Además, podías habernos ayudado a detenerla y no querarte ahí mirando perro lelo!-protestó Gatomon.

-Es igual, Madre se las apañará... espero que no cometa ninguna estupidez y solo se limite a romper la piedra y no a su heredera, desencadenante  o lo que narices sea esa Queenchesmon... Lo que no podemos permitir es que ese omegamon vaya tras ella, ¡Gatomon!-le dije yo a mi digimon

-Espera, que? Pretendes que me enfrente a ese Omegamon?-se extrañó Gatomon mientras me miraba como la carta azul aparecía ante mi.

-Yo soy mejor compañero que ella, Ashely. Dame ese poder a mi, a mi no me da miedo ese omegamon!-comentó Blurr

-Lo siento, Blurr... algún día podras de momento quien más o menos puede hacerle frente es Gato-dije yo mientras procedía a pasar la carta por mi D-power.

-Ni te atrevas a ocupar mi lugar, perruso! Está bien, Ashe... veré que puedo hacer...-dijo Gatomon empezando a llenarse de energía.

-¡CARD SLASH! Carta Azul! DIGIEVOLUCIÓN!-grité yo.

-¡GATOMON CHOUSHIINNNKAAAA..........LADYDEVIMON!!-ante nosotros apareció Ladydevimon.

-Mmmm la verdad es que gana más como Ladydevimon que como esa odiosa gata...-comentó Blurr al observar el voluptuoso y femenino cuerpo de Gatomon en su etapa ultimate.

-¡Te he oído, maldito perro!-protestó ella--Oye guapo, que tal si te fijas en una hembra más joven y apuesta que en esa Ophanimon descuidada? bueno es mi madre pero ya tiene una cierta edad, nada comparable conmigo jaja-dijo Ladydevimon volando hacia el omegamon y comenzando a acariciarle y a intentar seducirle.

-Ese era vuestro plan? que esa digimon medio súcubo, sedujera al tipo de la armadura y dejara en paz a la Ophanimon?-se asombró Blurr al ver el poder de Ladydevimon.

-A ver... Blurr, como te lo explico... como ya has notado gatomon es una pervertida pero ladydevimon lo es aun mas, y nuestro plan es retener a omegamon con nosotros lo justo para que ophanimon y la otra tipa arreglen sus cosas, evitando que omegamon vaya tras ellas. Y ya de paso intentaremos sonsacarle lo mas que podamos para averiguar los planes de Queenchesmon, lo pillas?-intenté explicarle a Blurr

-Ya veo... vaya métodos, en fin... supongo q será divertido luchar y viajar con vosotras jaja-dijo finalmente Blurr.

Esta Ophanimon evidentemente no tenía la menor intención de negociar conmigo… y cuando se dispuso a lanzarse contra QueenChessmon, solo pude hacer algo antes de dejarla avanzar tranquilamente… dispararle una brisa gélida a las alas para congelarlas e incapacitarlas para moverse a alta velocidad. Ciertamente debería haberla noqueado de un golpe o haberme interpuesto en la batalla pero… QueenChessmon se ve bastante segura y además… si algo aprendí gracias a mi “alma primaria femenina”, es que meterme en una pelea de mujeres no terminara en nada bueno. Fuese como fuese… ahora tenía que encargarme de algo: sacar a Ashely y Gatomon de aquí. No puedo permitir que les ocurra nada… aunque ese Strabimon que esta con ella… bueno, no importa, también lo sacare de aquí para evitar problemas… luego bajare y calmare las cosas entre Ophanimon y QueenChessmon antes de que terminen matándose mutuamente… egh… aunque eso podría ocurrir de un momento a otro, se que ambas deben tener una fuerza muy equivalente entre si; si no ya se habrían acabado mutuamente si realmente son rivales, enemigas o lo que sea que sean esas 2.

… ¿Cómo se supone que detenga una pelea de mujeres en un lugar tan frágil sin emplear la fuerza? –Murmure para mí mismo, observando cómo ambas damas comenzaban a atacarse mutuamente con sus armas- egh… pensare en eso cuando llegue el momento –me voltee para hablar con Ashely y Gatomon, aunque ellas hicieron algo que no esperaba… hacer que Gatomon digievolucionara a Nivel Ultimate- (cierto… ellas ya poseen ese poder… por poco se me olvida)

Lo próximo que hiso Gatomon en su nueva forma, LadyDevimon, fue acercarse a mí y comenzar a acariciar mi armadura; llegando hasta mi cuello y finalmente la mejilla, hablando en un tono bajo y firme, obviamente intentando seducirme. La verdad es que me causo algo de gracia ver esa forma de intentar “domarme”… jeje, aunque acepto que se sintió bien recibir contacto de este tipo luego de… ¿Cuánto?... ¿100 años?... ¿500 años?... no lo sé… solo sé que aunque ella no consiguiera su objetivo; si logro apaciguar un pequeño vacio en mi corazón. No me dispuse a hacer nada hasta que ella termino de intentar su seducción; observándome a los ojos intentando penetrar mi alma para llegar hasta mi… pero poco se puede hacer con un caballero que ya ah dado su palabra… aunque, si acepto que no pude evitar sonreír de forma leve.

Jeje… muchos aceptarían esa oferta inmediatamente… pero lamento decirte que ahora me encuentro algo ocupado, tengo que ayudar a QueenChessmon a llegar a esa dichosa flor… aunque –sonreí con calma; levantando mi brazo de BlackMetalGarurumon para devolverle la caricia, solo que en la cabeza- cuando esto termine, no me molestaría poder invitarla a una salida tranquila por la ciudad, damisela de ojos rojos como la sangre… usted tiene razón, es una mujer hermosa y joven… jeje, me siento indigno de ser quien llamara su atención pero… si tanto desea estar con… un tipo en armadura teñida por la oscuridad… no negare su deseo y me asegurare de que pase una velada digna –hice una leve reverencia, cerrando los ojos; sin borrar mi sonrisa ni un instante-

Internamente sé que no puedo hacer prácticamente nada referente a estos temas ya que solo soy el resultado de una fusión pero… ¿Qué clase de caballero seria si no concedo lo que una dama merece?... yo mismo me respondo, uno que no merece su titulo por nada del mundo. Fuese como fuese, me aparte levemente de LadyDevimon, para luego observar a Ashely y a su amigo Strabimon. Aun debo de sacarlos pero… si han recurrido a la táctica de la seducción con tal de quedarse… no puedo hacer nada para negarlo… además, si esa Ophanimon es la madre de LadyDevimon, seguramente podrán ayudarme a calmarla… puedo con QueenChessmon pero no sé nada de esa Ophanimon, asique calmarla será difícil para mí… aunque con su ayuda no me tomare mucho tiempo.

Joven humana, joven Strabimon, damisela LadyDevimon… ustedes parecieron ser los únicos que entendieron que no busco pelea, asi como tampoco QueenChessmon… aunque… bueno, ella ah cedido a la intensidad del momento –Suspire vagamente, para luego observarlos- ¿Qué tal si me ayudan a calmar la situación?... ustedes deben de conocer bien a la señorita Ophanimon, asique sabran como calmarla… y antes de que me pregunten “¿Por qué trabajar con un digimon desconocido de apariencia oscura?”… pues digamos que esta estructura de aquí es frágil… si ellas se pasan con su pelea, harán que el techo se nos caiga encima –Observe el techo levemente- y además tenemos un objetivo común: la flor… aunque yo quiero destruirla siendo sincero… vi lo que hicieron los digimons por ese endemoniado objeto y no dejare que ocurra de nuevo…

No sé si los estaré convenciendo para apoyarme, pero al menos estoy dando razones para que lo piensen detenidamente.

Si no quieren confiar en mí, son libres de dudar… pero yo seré franco… no quiero morir por una contienda absurda que haga que el techo se nos caiga encima –Ya eh dicho lo que tenía que decir… ahora queda escuchar su decisión- entonces… ¿colaboraremos para parar la pelea antes de que nos mate la misma?


Esa desgraciada Ophanimon… siempre teniendo que molestar… siempre teniendo que meterse en mis asuntos… ¡¿Por qué no deja de molestarme?! ¡Digimons como ella son la razón por la que me volví una Reina Gladiadora! La única combinación donde un gobernante es capaz de ejercer su poder para pelear además de dirigir un reino, imperio o lo que sea.

¡¿A quién llamas “Reina de Ajedrez”?! ¡Tu “Angelita Santa”! –Fruncí el seño y use mi bastón para bloquear su impacto; teniendo que aplicar fuerza para ser separadas- ¡No voy a dejar que te acerques a la Flor! ¡Tú solo causarías un desastre si le pones las manos en cima! Además, aun tengo que desactivar su maldición para usarla… asique no dejare que nadie la destruya antes de eso –gire mi bastón un poco, para luego sujetarlo en plena posición de combate- ¿quieres la flor?... tendrás que pasar sobre mi y sobre mi compañero Omegamon… y créeme, el es mas santo que tu

Apreté levemente el mango de mi bastón; para luego comenzar a martillar el suelo, causando pequeños temblores. No pensaba derribar el lugar, pero si conseguía desprender algunas rocas del techo para que le cayesen en la cabeza, me sentiría lo bastante contenta como para no abollarle el casco de un martillazo.

PD: hagamos que la pelea dure un post mas antes de calmar a estas fieras XD ya lo dijo Omegamon pero lo repito yo: no creo que sea conveniente tener a 2 mujeres enojadas peleando en un laberinto antiguo subterraneo

De pronto noté como mis alas parecían helarse, "Ese maldito Omegamon..." Espero que mis hijas se ocupen bien de él... Aunque no me agrada demasiado que mi pequeña evolucione correctamente a Ladydevimon pero bueno... mientras haga una buena pelea me sirve, dónde se habrá metido esa Reina de ajedrez?"-pensó

Decidí correr al ver que mis alas no respondían bien y llegué a una zona ancha del laberinto y donde encontré a Queenchessmon, de pie, esperándome.

-¡Estás aquí maldita!-dije preparando mi lanza y el escudo mientras movía y ejercitaba las alas para eliminar la escarcha gracias a una pequeña difusion de mi  poder sagrado a través de ellas.-La cosa es que sólo quiero destruirla por eso no quiero que actives la flor, gladiadora-dije respondiendo a sus palabras.

Ella  dijo algo de que parecía pretender usarla y que no me dejaría acercarse a la flor si no pasaba por encima de omegamon o de ella.

-¡Pasaré sobre quien haga falta para acabar con la fuerza maligna que irradia esa flor! ¡Ni tu ni ese caballero me suponéis ningún tipo de terror!-contesté disponiéndome a atacar.

Queenchessmon comenzó a provocar temblores, algunas rocas comenzaron a desprenderse.

-¿Crees que me harás daño con eso? Mujer de metal, con eso solo conseguirás derrumbarlo todo, jeje. Más facilidad para mi a la hora de destruir la flor. ¡EDEN'S AIR!-devolviendo el ataque creé unos tornados divinos que rodearon a las piedras que caían purificándolas y volviéndolas arena y algunos de ellos los dirigí directamente a impactar contra Queenchessmon con el fin de purificar su alma.
Si el combate continuaba no pensaba en contenerme más, destruiria el lugar sin importar lo que haya dentro y si era preciso aunaría todo mi poder restante para revelar mi ancientspirit y sacar a mis hijas y al strabimon ese de aqui, antes de que todo se hiciera pedazos.


-¿Sabes que? ¡Me pirran las armaduras! Olvídate de esa mujer y ven conmigo, te daré una velada digna que jamás olvidarás, si es cuestión de trabajo, Ashely y ese chucho pueden ocuparse de ello, mi madre está con ellas también asique no hay nada que temer mientras nosotros nos dedicamos un tiempo, hermoso y galante caballero. Tampoco me gustan demasiado las peleas.-seguía LadyDevimon arrullando y acariciando al caballero oscuro y besando su metálica frente.

-¿Oye Ashely, es necesario que estemos viendo esto? Me están dando ganas de vomitar...-me comentó Blurr.

-¡Chist! Calla, Blurr! está dando resultado! No parece un mal tipo después de todo jaja, Lady sabe elegir y trabajarse bien a sus víctimas de acoso, mucho mejor de lo que podría hacerlo Gatomon.-le dije a mi nuevo amigo.

Sin embargo de pronto Omegamon Zwart apartó cuidadosamente a mi digimon y se acercó a nosotros. Yo retrocedí algo asustada y Blurr se puso delante de mi para protegerme aunque Lady también se mantenía alerta. Pero el parecía un buen tipo después de todo cuando empezó a hablar y a contarnos su situación.

-Chicos, tranquilos, está bien! Uff... si quieres calmar a mi madre, lo tienes crudo. Cuando se mete un objetivo entre ceja y ceja es muy difícil pararla, no sabe lo que es contenerse. Por cierto, yo soy Ashely, mi compañera Ladydevimon que ya conoces y mi nuevo amigo Blurr- me presenté.
Poco después,como corroborando a mis palabras empezamos a sentir temblores y un frío aire en el corredor cercano a donde estábamos nosotros.

-Creo que la batalla, ya ha empezado, chicos...-comentó Blurr olfateando el aire lleno de polvo, tensión y flugor de batalla.

-Ashely, si tenemos un objetivo comun, que es destruir la flor no hay motivo para ser enemigos, creo que podremos fiarnos de este digimon tan varonil.-me dijo Ladydevimon

-Ya claro... lo que tu quieres es llevártelo al "cuarto oscuro", Lady-comentó Blurr.

-¡Cierra el pico, perro!-le pateó estrellándole contra la pared.

-Lady! contrólate! Blurr está 2 niveles por debajo de ti, se más amable con él!!-dije lanzando el haz de luz de mi digivice para rodear su cuello y controlarla para que  ayudara a incorporarse a Blurr y a atender sus posibles daños.

-¡Deja de usar ese maldito haz de luz! ¡Me abrasa! ¡Odio que me manipules!-dijo Ladydevimon intentando liberarse.

-Pues compórtate y hazme caso y no tendré que usarlo! Dísculpanos Sr. Omegamon, mi compañera se muestra muy díscola en esta etapa-le dije a nuestro nuevo aliado-- ¡Como vuelvas a tocar a Blurr, volveré a usar el lazo! ¿me oyes?-amenacé a Ladydevimon al verla que quería volver a arremeter contra Blurr con un nuevo ataque y esta vez de los poderosos al verla convertir su brazo en lanza.

-Eres retorcida y siniestra, Ashe...-dijo Lady alejándose de Blurr que aun estaba algo groggy pues solo recibía palizas de mi compañera ultimamente.

-Y tú una súcubo acosadora empedernida, Lady... asi que estamos igual-le contesté yo.

-Ashe... por que no dejáis vuestras contiendas internas por mi corazón y hacemos caso de lo que dice el tío de la armadura e intentamos detener a esas dos bestias pardas?-comentó Blurr

-¡Nadie se pelea por ti!-Contestamos las dos al unísono.

-En fin... está bien Sr. Omegamon iremos a intentar detener la pelea contigo... Pero yo ya te digo que por parte de mi madre... no prometo nada.-comente yo disponiéndome a dirigir la marcha seguida de Blurr, el cual había decidido que mientras más cerca estuviera de mi Lady no lo atacaría, hacia donde se enfrentaban Ophanimon y Queenchessmon.

-Dime una cosa, guapo. Si nuestra misión de destruir la flor sale bien... ¿saldrías conmigo?-le preguntó Ladydevimon revoloteando a alrededor de Omegamon.

Evidentemente mi actitud pareció agradarle a LadyDevimon, aunque bueno, no busco mentir; asi soy en realidad y eso es bueno… supongo. Pero bueno, antes de que pudiéramos ponernos en marcha, una vez que Ashely acepto lo de trabajar en equipo conjunto por ahora, hubo una pequeña discusión entre LadyDevimon y su tamer involucrando también al Strabimon. Eh de admitirlo, la pelea fue algo… hilarante en ciertos aspectos, ya que son exactamente iguales a las peleas que almacenan los recuerdos de mis tres componentes, aunque claro… yo no puedo asegurarlo correctamente; después de todo solo doy vistazos rápidos para informarme, no más que eso.

Fuese como fuese, una vez que todo pareció calmarse en nuestra zona nos pusimos en marcha; avanzando cuidadosamente por el lugar que ya parecía responder ante la pelea de Ophanimon y QueenChessmon. Aunque algunas rocas comenzaron a caer del techo, aun no era nada serio… el problema sería alguna explosión de gran magnitud… y aunque pudiese congelar el lugar con el Garuru Cannon… ¿Qué lograría de eso?... quizás que el laberinto aguante unos minutos mas y que después se vuelva nuestra tumba gélida… egh… definitivamente… solo veo desastres con cada posible solución.

(¿Qué se supone que debo hacer?... podría devolver a QueenChessmon y a Ophanimon a su nivel Rookie de un golpe si así lo quisiera pero… no puedo emplear la fuerza contra QueenChessmon ya que le eh dado la palabra… y Ophanimon… Ashely ya me prometió ver qué hacer para calmarla…) esta Flor sigue causándome problemas… tanto en el pasado como en el presente –Murmure para mí mismo, aunque pronto volví a la realidad a ver a LadyDevimon volando a mi alrededor- ¿Eh?... –la escuche atentamente; y debo admitirlo, ¿no había quedado claro ya...?... oh bueno- je… salga bien o mal… yo me asegurare de llevarla a la velada que usted se merece, dama de la noche… y por si las dudas no fui muy claro –sonreí con calma- me encantaría salir con usted cuando todo este problema termine

Es la verdad; antes dije que lo haría y no me retractare después… quizás mis componentes podrían enfadarse si se enteran de esto pero… aun si se enteraran, deberían aceptarme… después de todo no saben cómo fusionarse y yo si… egh… ¿Por qué pienso estas cosas?... seguramente mi alma primaria de BlackWarGreymon esta diciéndome todo esto… jeje… bueno, no importa. Lo único que me importa por ahora, es la Flor y su destrucción… bueno, su destrucción después de ser usada… pero algo tengo claro… vigilare su uso; no permitiré que nadie se aproveche de la situación.


¡¿Mujer de metal?! ¡Está bien que use una armadura pero no soy 100% metálica! ¡Tengo alma como ella! Tsk… por esto odio a las digimons como ella… no hacen nada más que juzgarme por lo que ven. Pero bueno, aun asi no me dejare caer en sus provocaciones… al menos no de nuevo.

Fuese como fuese; evidentemente el desprender rocas del techo no pareció afectarle en mucho; es más, incluso comenzó a decir tonterías como que le ayudaría a destruir la flor… tsk… ¡¿acaso sabe cómo hacerlo si quiera?! ¡Ni yo! ¡Ni mi madre! ¡Ni mi abuela! ¡Ni siquiera la creadora directa de la flor tuvo el poder necesario para destruirla! ¡¿Una Ophanimon tan simplona y horrenda puede destruirla?! ¡No me lo creo ni pienso creérmelo! ¡Menos cuando no es ninguna Metal Empire!

Desafortunadamente, mientras comenzaba a contener mi furia para no destruir el lugar; no pude evitar los pequeños tornados que esa bruja mal ejercitada lanzo contra mi; empujándome contra una pared y terminando por quebrarla completamente. Las desventajas de tener una armadura como la mía, es que ser lanzada contra una pared y recibir precio es que la pared seguramente no aguantara. Aun así, cuando ella se acerco para contemplar su “victoria”, tome una de las espadas de mi cintura; usadas normalmente como decoración, pero me levante y realice un corte limpio a su rostro… aunque no calcule bien por a furia; por lo que creo que solo termine cortándole un mechón de cabello.

Tsk… ¿crees que unos simples tornados van a oxidarme? –Comente bajando la espada- tú no sabes a que te enfrentas… ¡No podrás destruir la flor! ¡No tienes el poder ni las características necesarias! –me voltee para tomar otra espada con la mano libre- escúchame bien… normalmente te recibiría con una buena pelea para luego echarte tras una pelea verbal entre dos damas de alta clase… pero ahora no soy precisamente la “reina de ajedrez compasiva”… hay vidas en juego; no solo la mía, si no la tuya, la del Omegamon y los demás que has traído a este lugar… ¡Hay quienes necesitan la flor ahora y no dejare que una ángel estúpida venga a dejar que esas vidas se acaben!

Se acabo la QueenChessmon compasiva… ahora solo voy a detener a esta bruja disfrazada antes de que cause un desastre… como destruir el laberinto… tsk… si quiere destruir la flor; quiere destruir todo lo que hay aquí dentro… si está bien enterada como parece estarlo.

PD: Okey, ya en tu próximo post podrías continuar un poco la pelea pero que ya vengan los refuerzos para calmar a Ophanimon y QueenChessmon; y ya en mi post, luego de calmar a QueenChessmon, explico la situación para evitar peleas en el futuro, ¿te parece?

"Mmm eso fue un buen ataque, me aseguraré de que esté bastante nockeada como para volver con los míos."-pensé. Sin embargo me arrepentí enseguida de acercarme tanto pues en cuanto me sintió cerca se levantó enarbolando su espada hacia mí. Por instinto de tantas batallas realizadas me aparté lo justo por instinto, para que no atacara a ninguna zona vital. Pero ella también era muy diestra con la espada y rozó mi pelo con la misma cortando algún mechón.

-¡Mi pelo! ¡Mi precioso pelo! ¡Maldita!-decía mientras hacia caso omiso de sus bravuconadas de que si no sería capaz de destruir la flor, su familia.. y bla, bla, bla... cháchara insulsa. -Supongo que si te destruyo aquí y ahora, también puedo garantizar que esa flor no sea activada !jejejejje!-le dije preparándome para atacar separandome de ella, ya que la mayoría de mis ataques eran a distancia.-¡SEPHIROT...!-era uno de los ataques más mortíferos que tenía pero fue interrumpido por una voz que me era familiar.


-¡Detente, Mamá!-grité yo sintiendo en mi cuerpo la energía que fluía en el ambiente como premonición de un potente ataque que causaría una gran destrucción en el laberinto.

-¡Ashely, apártate de aquí! ¡Esto es una contienda entre nosotras, no te metas!-dijo Ophanimon manteniendo su ataque en stand by mientras decía eso, parece que tardaba en cargarse.

-¡Si realizas ese ataque, Madre! No solo destruirias a Queenchessmon sino a todo el laberinto que caería sobre nosotros!-dijo Ladydevimon interponiéndose entre Ophanimon y Queenchessmon

-¡No me obligues a atacarte LadyDevimon, te aseguro que no quiero dañarte!-dijo Ophanimon con su otra hija enfrente de ella.

-¡Mamá por favor... detente! No quiero que nadie más salga lastimado... además la necesitamos viva para que nos lleve hasta la flor y poder destruirla-rogué porque Ophanimon me escuchara.

-Cierto, si lanzas un ataque más, me darás a mí y no creo que te guste perder una hija y hacer daño con mi pérdida a otra hija ¿verdad? Porque te recuerdo que tus ataques son mucho más poderosos en mi ya que soy una digimon oscura.-razonó LadyDevimon.

Ophanimon dudaba, tenía que elegir entre su rival y su familia, una decisión terriblemente difícil para alguien tan combativo como ella.

-¡LICHT BEIN!-Blurr aparecio de la nada y atacó a la lanza de Ophanimon y al escudo de ella con sendas patadas luminosas. Que al pillarla de imprevisto, volaron de sus manos.

-Se que no debo meterme en cosas de familia pero... haz caso por una vez a tus hijas, Ophanimon. Escúchalas! Seguro que tienen buenas razones para detenerte.-intentó tranquilizar el pequeño Strabimon.

Ophanimon tras eso se quedó furiosa e impotente pues no tenía nada que hacer, si recogía sus armas enfurecería a sus hijas y si no las recogía estaría dando cuartel a esa dama de ajedrez que tan mal le caía. Al final cedió y recuperó su forma humana cesando completamente su espíritu combativo.

-¡Gracias, mamá!-fui corriendo a abrazarla para darle las gracias pero ella me rechazó.

-Más vale que tengas una buena razón para hacerme esto, Ashely, pero por eso estarás castigada un mes sin salir!-me dijo mi madre.

-¿Qué? ¡Eso es injusto!-protesté.

-Es lo menos que podíamos tener, por enfrentarnos a un nivel mega jeje, anímate Ash-dijo Ladydevimon volando a mi lado y palmeandome la espalda en actitud amistosa.

-Y ahora por favor escucha al caballero oscuro ese, tiene buenas razones para aliarse con nosotros jeje.-le dijo Blurr a Angela la cual miró al omegamon con desdén.

-Gracias, Blurr... Sin tu ayuda dudo mucho que hayamos conseguido detenerla jeje-le dije a mi nuevo amigo al oído revolviéndole el pelo de la cabeza, mientras Ladydevimon se crispaba por dentro al ver que atendía al strabimon más que a ella, pero se tuvo que tragar su orgullo porque esta vez el "perro" como ella le llamaba había servido de ayuda. ^^

Evidentemente esta necia no pensaba escucharme… supongo que mi única opción real seria atacarla hasta matarla. No me gusta tener que mancharme las manos de sangre pero si no queda más remedio para cumplir mi cometido… estoy dispuesta a hacer lo que sea. Ophanimon ya tenía su siguiente movimiento cargado, pero algo le impidió lanzarlo; entonces apareció una humana con una LadyDevimon y un Strabimon, quienes comenzaron a hablar con Ophanimon, tratando de calmarla, cosa que consiguieron pero… dijeron que los guiaría a la flor para destruirla… tsk… ¿Quiénes se creen que son para venir aquí y decirme que los guiare al tesoro de mi familia únicamente para destruirlo?... no lo permitiré… no les dejare hacer nada…

¡¿Quién dijo que los guiaría a la flor?! ¡HEART BRE…! –Antes de terminar mi ataque; Omegamon Zwart apareció de la nada y con una simple finta, mando a volar mis espadas, clavándose contra el techo para luego apuntarme al rostro con su cañón; manteniendo una postura firme y dominante- ¿q-que haces…?
La pelea termino… es momento de pensar las cosas con coherencia, QueenChessmon –Lo observe algo molesta pero esa mirada suya simplemente… me hiso callar- es obvio que esta humana de aquí no tiene idea de que ocurre… su información de la flor debe ser muy básica… asique es mejor que informes lo que ocurre si quieres seguir adelante con esto
Pe-pero… ellas… yo… -Esa mirada suya simplemente no me dejaba opciones- egh… muy bien… pero deja de mirarme así… e-es incomodo –frote mi brazo algo apenada y luego observe a las humanas y digimons “intrusos”- escuchen… no se que tanto sepan de la flor pero les diré lo que importa… solo las descendientes directas de las creadores de las 5 flores “milagrosas” pueden desactivar la maldición que las rodea… y para ser una descendiente directa; o saber que eres una… es tener un alma tan pura que aun con el poder de la flor, no podrías pensar en usarlo para malos propósitos –Observe a la humana que antes era Ophanimon- si vine por la flor, es para usarla una vez y volver a dejarla aquí… o perderla más de lo que ya estaba… esa cosa no puede destruirse… ni siquiera yo pude cuando la descubrí hace años
Verán… aparentemente una ciudad hermana a esta se encuentra en peligro… y lo único que piensa hacer la señorita QueenChessmon es usar el poder de la flor para ayudar a esa ciudad… nada mas, nada menos –Omegamon Zwart se hiso a un lado, guardando sus armas- si dudan de nosotros, son libres de hacerlo pero nosotros tenemos claros nuestros objetivos… duden o no, seguiremos adelante
Esa es la única y pura verdad… -Observe a la humana seriamente- dime ahora… ¿de verdad planeas detenerme?... si es así, será mejor que salgamos de aquí para pelear… ya quedo claro que ninguna de las 2 quiere involucrar a gente ajena…

Me duele tener que decir esas palabras pero no me queda de otra… no quiero recibir esa mirada de nuevo… se sintió muy raro… como si me estuvieran regañando… como si volviera a ser una niña pequeña que acaba de cometer una travesura y la están reprochando por sus acciones.


Me alegra que hayamos llegado a tiempo… unos segundos más tarde y seguramente habríamos muerto todos por la caída inminente del techo sobre nuestras cabezas. Pero bueno… el caso es que llegamos a tiempo y que ahora nadie esta en peligro… bueno, al menos de un peligro 100% real como lo fue esta contienda de mujeres… el laberinto sigue lleno de peligros que hay que afrontar pero dudo que sean tan difíciles como calmar a estas damas. Fuese como fuese, apenas terminamos de explicar la situación a Ashely y su… madre, nos apartamos un poco QueenChessmon y yo. Tengo que platicarle del asunto de destruir la flor… ahora que ah salido el tema a la luz, tengo que acostumbrarla a que destruiré ese objeto apenas ella termine de usarlo.

QueenChessmon… ahora que hemos dicho todo, creo que debería platicarte de algo importante –me agache un poco para estar a su altura- es sobre la flor…
No tienes que decir nada… entiendo que te incomode que una “ángel” quiera destruir algo que usaremos para el bien… pero descuida, cuando la usemos; no permitiré que la destruya –QueenChessmon sonrió con alegría- además se que tu evitaras que algo le ocurra a esa flor, ¿cierto?
Eh… vera… yo tengo otro plan referente a ese tema… -Antes de que QueenChessmon me preguntara cual era el plan; el suelo comenzo a temblar levemente, para luego volverse un temblor mas grande- ¿Qué diablos…? –me levante del suelo, observando lo que ocurria a mi alrededor- ¿de donde viene eso…?
¡Quizas quieras voltearte a ver! –QueenChessmon señalo el hueco en la pared por el que llegamos Ashely, Blurr, LadyDevimon y yo; del cual parecía aproximarse una especie de esfera cubica a toda velocidad- ¡Valvemon! Otra defensa del laberinto… creo que ya se molesto mucho con nosotros por pelear así


Repentinamente, apareció otro repentinamente a través de una pared que se abrió y cerro de la nada. 2 enemigos de nivel Ultimate… aunque el que estaba frente a mi parecía más… extraño… supongo que este tendría algo especial que me complicaría las cosas. Sea como sea, ahora que acabo una pelea, tenemos que iniciar otra… afortunadamente… esta no es a muerte como la anterior.

… yo me encargare de este de aquí –respire profundamente y desenfunde mi espada- señorita QueenChessmon, será mejor que avance ahora que puede… y es recomendable que vaya con la señorita “Ophanimon”… estos 2 enemigos no son la gran cosa… de eso estoy seguro
Ha… muy bien… confió en que no tendrás problemas mayores… -QueenChessmon observo a la humana, algo molesta pero tranquila- démonos prisa antes de que el laberinto envié mas problemas…