The Black Metal Flower [Privado: Ashely]

Escuche las palabras de Angela… realmente ella tenía razón en todo lo que dijo. Asesinar a los digimons para tomar sus datos podría verse como una especie de canibalismo si lo pensamos detenidamente pero también, analizándolo con igual detenimiento… estoy defendiéndome. Puede que no lo parezca pero estos digimons que eh estado absorbiendo, pese a ser eso, digimons… no cuentan con pensamientos ni emociones… a diferencia de un digimon ordinario, ellos solo son cascarones vacios cuyos datos ya no son salvables. Puede sonar bastante duro pero es la verdad… reconozco esa forma tan desesperada de atacar; Cannondramon tenía una similar pero el aun guardaba parte de su personalidad… lo que significa que no se arriesgo mucho al cambio, solo lo suficiente para obtener el poder justo… pero, ¿estos que eh estado “masacrando”…? No… ellos no. Ellos tomaron el riesgo completo… pensaron que podrían con todo lo que la Flor ofrece pero se equivocaron y ahora no son más que animales que, al igual que en el mundo humano, atacan a todo lo que se acerque a lo que ellos podrían llamar “tesoro” o “fuente de alimento”. Fuere como fuese, detenerme para explicar esto sería no solo una pérdida de tiempo por mi parte, si no que sería una tontería porque estoy seguro de que cuando Angela vea de lo que es capaz esa condenada Flor… entenderá porque eh absorbido tantos datos en un lapso de tiempo tan ridículamente cortó solo para reparar mi armadura.

Descuide señorita Angela… créame que a mí tampoco me gusto tener que usar los datos de otros para reabastecerme pero… teniendo en cuenta lo que eh vivido, esta es ahora mi única solución… -Un Guardromon salió de una pared con ojos rojos, a lo que tuve que partir a la mitad- y respecto a su forma de Ophanimon… respeto sus ideales pero creo que en esta zona ya hay alguien que vela por exactamente lo mismo que usted… -Esta vez el enemigo que apareció mientras avanzaba fue un Gigadramon, el cual corte a la mitad con mi espada- no pretendo convencerla de nada… pero hay veces en las que es mejor no tratar de ayudar… créame… eh visto el suficiente dolor para entenderlo aun si no me cree en lo absoluto

Aun lo recuerdo… mi “nacimiento” ocurrió por el intento de ayuda de 2 guerreros… quienes solo terminaron enfrascándose en sus propios problemas y todos pagaron caro… así como yo pague caro cuando cometí el mismo error… creyendo que con mi espada y cañón podría marcar la diferencia… en este mismo lugar hace ya mucho tiempo.

Continúe avanzando eliminando todo lo que aparecía frente a mi pero de un momento a otros… todo paro… no mas enemigos… no más obstáculos… solo un pasillo vacio iluminado únicamente por las antorchas de la zona y por varios agujeros en el techo que dejaban pasar levemente la luz del día. Algo realmente raro estaba ocurriendo… y creo saber que es… y sabiendo que es, ya no es raro si no algo malo. Y mi sentimiento se hiso realidad cuando una pared cayo a bajo por la mano de un Boltmon… digimon que conozco a la perfección por el hecho de que mis partes viven con uno… pero este no debe ser un borracho como ese… no… este parece estar más que sobrio y listo para luchar abiertamente.

Angela… si mal lo recuerdo… tu forma de Ophanimon tiene un movimiento capaz de purificar almas, ¿verdad?... –Boltmon se crujió los nudillos, preparando su hacha mientras se acercaba- si es así… espero que puedas usarlo pronto porque este digimon de aquí… a este si no voy a matarlo para tomar sus datos… de hecho… a él quiero dejarlo vivo… el tiene algo que los demás no… y espero que puedas identificar el “que”


Los Mamemons reían divertidos, saltando de un lado a otro sin soltar a la reina ahora inmóvil; en un estado de shock aparentemente incurable. Mientras tanto, MetalMamemon seguía a Gagurumon saltando de igual forma que sus compañeros, pero sin intentar nada. No derribarlo, no atacarlo, no distraerlo; solo lo seguía dando brincos, seguramente para asegurarse de que todos llegaran a su destino: aquel detrás de todo esto. Realmente no era buena idea pero si QueenChessmon conseguía recobrar el sentido, seguramente habría una oportunidad de ganar tiempo hasta que Ophanimon u Omegamon Zwart llegaran a escena, siendo ellos quizás los más poderosos del lugar.

Mientras más saltaban y reían los Mamemons, mas caricaturesca se veía la escena. Un lobo gigante montado por una humana y una gata con guantes, persiguiendo a un grupo de esferas metálicas con pies y manos que acababan de secuestrar a una mujer “robótica” inspirada en una reina de ajedrez… ¿Cómo podría volverse más rara la situación?; muy simple, con el mero hecho de que de un momento a otro; sin que nadie se diera cuenta ni supiera el porqué exacto de la situación, el laberinto cambio las rutas de forma casi imperceptible, haciendo que el camino a su centro fuera mucho más rápido. Había una razón para que el camino se acortada por voluntad del laberinto: QueenChessmon. La reina, siendo la única capaz de poder activar y desactivar la flor, así como usar el poder de la misma sin perder el control de sí misma, era guiada por el laberinto hacia su tesoro: la flor de metal negro. Los Mamemons sabían esto, asique con solo secuestrar a QueenChessmon y avanzar, el laberinto los guiaría por si solos hasta el centro; el cual estaba cubierto por 4 grandes puertas a modo de muralla. Aunque lo raro del centro no eran las puertas… si no aquellos digimons que estaban tratando de derribarlas, teniendo todo un laboratorio científico y de programación montado junto a las mismas. Aquel que dirigía a todos esos digimons maquinas era un HiAndromon, el cual al momento de llegar, estaba enviando a una QueenChessmon diferente a la secuestrada para abrir la puerta. El resultado de ese experimento fue que esa QueenChessmon murió en un instante, volviéndose un Digitama y poco después eclosiono en un Mekanorimon de ojos rojos, el cual se alejo lentamente hacia una de las cuantas salidas de esa zona. Así es como se creaba la guardia del laberinto… así es como los digimons se corrompían y atacaban a los intrusos… seguramente también es eso lo que ocurría si no era QueenChessmon quien tocaba la flor.

¡Jefe! ¡Jefe! ¡Tenemos a QueenChessmon! ¡Está destrozada mentalmente asique usarla como la títere que es será fácil! –Rio MetalMamemon acercándose al gran HiAndromon, quien se volteo para verlo- ahora podremos acceder a la flor y usar su poder, ¿no?
Así es, mi enano camarada… -HiAndromon se volteo para ver a los 4 Mamemons que cargaban a QueenChessmon, para luego esbozar una leve sonrisa, pero llena de maldad a simple vista- tan hermosa como siempre… y tan ingenua a la vez… je… morirá como su madre: “por el bien de un reino hermano”… tch… tan tonta… siempre ah sido buena para ayudar pero también buena para engañar… tráiganla de inmediato… cuando Ebemon corrompa sus datos de memoria nos abrirá la puerta… ¡La puerta a la inmortalidad de las maquinas!
Jeje… ¿y qué hacemos con el trió orgánico de ahí señor? –Pregunto MetalMamemon ansioso de escuchar la sentencia- ¿Por qué no intentamos que abran la puerta a ver en que se transforman?
No servirá con ellos… son orgánicos… la puerta solo reacciona a maquinas como nosotros… tch… simplemente déjenlos estar… si molestan toqueteando el equipo importante, los aplastare yo mismo

Escuchaba atentamente las palabras de Omegamon y me dispuse a contestarle:

-Yo también he vivido muchas cosas... no creas, desde que me digimon se convirtió en data y se tuvo que ver relegada a ocupar mi cuerpo para pelear lo pasamos ambas mal y por ello decidí vengarla pues fue un digimon oscuro quien la aparto de mi lado convirtiéndola en mero digispirit y peleando contra la oscuridad es la forma que mi compañera hubiera elegido para vivir, por eso estoy aqui. Además deque no pienso q esa flor sea una herramienta de protección sino todo lo contrario y me gustaría detener a esa queenchessmon antes de que active la flor -explicó Angela.
Después de pasar por un pasillo, intuí que algo se acercaba y no me equivoqué pues un Boltmon apareció rompiendo paredes. Angela tomó su digivice cuando Dakunaito le preguntó si su ophani purificaba almas

-Si, el "Eden's Javelin" por...?-analicé al digimon tras las palabras del omegamon, y en efecto detecté algo malévolo en él pero no sabia si sería capaz de destruirlo con Ophani...-Veré que puedo hacer...-dicho esto tomé mi digivice en mi mano izquierda y con la derecha me rodeé de una bola grande de digicode el cual pasé por mi D-scanner.-¡HYPER ESPÍRITU DIGITAL! EVOLUCIÓN!!-sentí la poderosa energía de Ophanimon fluyendo una vez más por mi cuerpo mientras me vestía con su armadura y empuñaba su lanza.-OPHANIMON!!
-Sal de su cuerpo, ser impuro! EDEN'S JAVELIN!!- De la punta de su lanza salió un rayo multicolor que fue a impactar en el cuerpo de Boltmon, intentando así purificar ese mal que parecía tener.


Blurr se estaba poniendo realmente nervioso con todas esas pelotas de metal saltando a nuestro alrededor, sus ataques de hielo no parecían hacer mella en ellas por lo que decidió intentar morderlas y atraparlas con la boca, mala idea pues saltaban por todas partes.

-Blurr!! haz el favor de correr recto! me estás mareando!!-le grité tirándole de los pelos del cogote.

-¡Woouff! Es que no puedo atrapar a esos rufianes, ¡Wouf!-protestaba el digimon ladrando a la vez q intentaba atraparlos.

Mientras tanto, Gato pasaba de esos dos y saltaba entre las cabezas de los mamemon corriendo por alcanzar a queenchessmon y liberarla

-Pero qué demonios...??-dije al comprobar a donde nos habían llevado y ver de donde nacían los digimon q nos atacaban en el laberinto, tanto garurumon como gatomon se detuvieron en sus acciones al ver aquel monstruoso panorama.

Gatomon, que era la más adelantada del grupo, pudo entrar detrás de la comitiva que llevaba a queenchessmon ante hiandromon y escuchar todo lo que dijeron.

-¡Tu! tio guapo mecánico!-Gato intentó controlar sus hormonas ante el hiandromon pues era de ese tipo de digimon varoniles y masculinos que le encantaban. Iba a decirle que se detuviera y que dejara ese plan infernal en un vano intento de salvar a queenchesmon pero le salieron otras palabras: -Por qué no dejas esas máquinas feas y nos vamos de copas tu y yo solos, ahora eh?-dijo acercándose y contorneandos sensualmente hacia hiandromon, mientras hacia una irresistible caida de ojos.

Tan pronto como pudo, Angela se transformo nuevamente en Ophanimon y utilizo el movimiento por el que preguntaba… el resultado fue algo… de lo más inesperado que pude haber visto en mi vida. Boltmon recibió el impacto directamente, pero permaneció igual unos instantes, antes de que en su caminata cayera de rodillas al suelo; casi a modo de arrepentimiento. Fue una escena extraña, pero en cuanto Boltmon cayó al suelo, estiro su brazo queriendo alcanzarnos, cosa que obviamente no consiguió pero decidí darle el gusto de dar unos pasos para acercarme y después detenerme; y al momento que me acerque, varias llamas azules cubrieron el cuerpo del hombre de piel verdosa, entonces levanto su mirada mostrando los ojos detrás de su máscara; eran ojos de desesperación y temor… algo realmente inusual en todos los digimons de aquí… quienes tenían ojos vacios y sedientos de poder

Por favor… ayúdenme… esa… esa condenada flor… mi cuerpo… ya no me responde… solo… solo escucha los susurros de esa condenada flor… por favor… detengan a HiAndrmon… el… quiere usar la flor… como arma… el… -Boltmon parecía perder el control de si mismo, la técnica de Ophanimon no estaba funcionando al 100%- el ah usado a… la reina… como una… marioneta…
¿QueenChessmon?... ¡¿Qué ocurre aquí?! ¡Habla! ¡Intenta resistir! –Realmente no me gustaba la idea de tener tanta información y a la vez tan poca- ¡Se fuerte y resiste!
No puedo… resistir mas… la flor… nos supera… tiene la energía de digimons… super ultímate… -Una vez que Boltmon dijo esas palabras, las llamas de su cuerpo se apagaron y se levanto, para dar un grito de guerra; el efecto del movimiento de Ophanimon ya no funcionaba sobre el- los destruiré… ¡EN NOMBRE DEL SEÑOR DE LAS MAQUINAS!
… tenemos prisa –Levante mi brazo cañón, golpeando al digimon directamente, aunque el consiguió frenar mi golpe a duras penas- ¡Ophanimon! ¡Es hora de separarnos un momento! –Levante mi brazo espada, tomándola con cuidado y lanzándola de modo que ella pudiera recomponerse en el aire hacia el agujero por el que había llegado Boltmon- ¡La alcanzare cuando me encargue de este guerrero!

Entonces el poder de la flor… es de mi nivel… por esas razones nadie ah podido destruirla… pocos Super Ultimate existen realmente en este mundo… y nunca tuve la oportunidad de intentar destruir esa cosa… bien… eso significa que seré capaz de hacerlo si puedo acercarme lo suficiente pero… antes de eso, deberé encargarme de este pequeño pero resistente oponente… aunque no puedo asesinarlo… el aun tiene alma dentro de sí… tengo que impedir que muera un inocente como él.


Los digimons maquinas continuaron trabajando, ignorando la presencia de los visitantes orgánicos; o era así hasta que apareció aquella Gatomon refiriéndose a HiAndromon, quien inevitablemente se dio la vuelta para escuchar a la molestia orgánica desde su punto de vista. Realmente aquella idea fue bastante tonta, pensar que un Digimon maquina como HiAndromon, quien ya había dejado en claro que no le importaban los seres orgánicos, se interesaría por una simple digimon de nivel Champion orgánica… bueno, siempre se ah valido soñar, ¿verdad?. El digimon observo a la digimon con indiferencia y después dejo lo que estaba haciendo, acercándose y agachándose para estar a su altura y verla directamente a los ojos. Parecía que estaba funcionando el intento de Gatomon por persuadir a la maquina, pero la verdad era que no, ya que el digimon levanto uno de sus brazos y sujeto a la gata por la cabeza; presionando ligeramente para mantenerla quieta. Acto seguido se levanto y la lanzo como si fuera una especie de pedrusco contra Garurumon, con la única intención de derribarlos a ambos para apartarlos del lugar.

¿De verdad creías que me importaría estar con una mera y vulgar orgánica como tú?... no me hagas perder el tiempo, felina inútil… no tienes nada que pueda servir para convencerme… y realmente, me has molestado bastante en poco tiempo –HiAndromon levanto su brazo derecho, apuntando hacia la humana, Gatomon y Garurumon- quizás deba de eliminarlos yo mismo ahora que tengo tiempo y aun no termina el hackeo de la data de QueenChessmon… mueran como las miserables plagas orgánicas que son

Afortunadamente, antes de que HiAndromon pudiera disparar cualquier clase de armamento que tuviera equipado; fue impactado por una lanza y lanzado hacia atrás contra un computador comandado por un Ebemon. Tan pronto como el digimon maquina recupero la conciencia, se levanto y observo la lanza que lo había impactado, entonces levanto al mirada para ver a una Ophanimon a la distancia.

… veo que tenemos problemas… MetalMamemon… encárgate de la orgánica… yo detendré a la orgánica de clasificación celestial… -HiAndromon libero vapor desde sus hombreras, antes de correr hacia la ángel para iniciar su ataque- lamentaras haber desafiado al verdadero señor de las maquinas… ángel entrometida
Egh… muy bien… -MetalMamemon se volteo para observar a la humana con seriedad- basta de juegos… ¡Es hora de ver porque el señor quería que los elimináramos con tanta insistencia! ¡Ebemon! ¡¿Cuánto falta para que QueenChessmon esté bajo nuestro control?!
Aproximadamente 5 minutos… o sea, que en 5 minutos se abrirá la puerta al máximo poder inimaginable para las maquinas como nosotros –Comento un digimon de aspecto alienígena, revisando varias computadoras a la vez que el cuerpo de QueenChessmon era recorrido por corrientes eléctricas- pronto seremos los amos de las maquinas…

Off: perdona que controlara también a Angela, pero quisiera que Daku llegara algo tarde para darle más emoción al momento ;D Por cierto, no me asesines a HiAndromon, si quieres a los Mamemons y MetalMamemon, pero al señor este no

Ophanimon analizaba la información que decía Boltmon y se extrañaba al ver que su ataque no hubiera hecho bien el efecto deseado, sería por el cansancio al que estaba sometida pues había evolucionado demasiadas veces y las galletas no la sanaban del todo.

-Así que el poder que los posee es la flor... ya sabía yo que no era nada bueno...-comentó Ophanimon al escuchar a boltmon-Ya sabía yo que esa reina tenía tan poca personalidad que cualquiera podría manipularla, en fin... siempre tendré que salvarle el cu.... ¡Eh! oye! Quién te ha dado permiso para cogerme así!-se quejaba la digimon ángel cuando Omegamon la levantaba en volandas y la lanzaba hacia el lugar donde había venido Boltmon.

Ophanimon usó sus alas para amortiguar su aterrizaje y dijo:

-Maldito, idiota! mira que tratarme así...-Ophanimon analizó el terreno a donde había llegado caminó durante un rato y vió una amplia sala donde había tenido lugar una batalla, siguió un camino lleno de pisadas, huellas y ataques.

-Espero que Ashely y Gatomon estén bien....-comentó para sí misma.

Caminando, caminando llegó a una sala que parecía como una sala de máquinas donde se estaban librando combates por los ruidos que oía por lo que decidió volar hacia las alturas para averiguar lo que ocurría y vio algo que no le gustó en absoluto.


Sin saber por qué Gatomon fue estampada contra nosotros tirando a garurumon al suelo y a mi por ende ya q cabalgaba sobre su lomo.

-Se puede saber que haces, gata salida??? casi me haces dañar a Ashely!!-le espetó Blurr cabreado quitándosela de encima y volviendo a su etapa rookie, ese golpe y su intento por no caer encima de mi hizo que perdiera toda la energía que le quedaba.

-Asheee... ese hiandromon guapo me despreció...no se dejo acosar!!-me dijo mi digimon acercándose a mi.

-Ohhh, pobrecita mia, que no puede acosar... ¿¡ Cómo se te ocurre acosar a nuestro enemigo!? Y encima de nivel mega! Has visto lo que le hace a los digimon?-la reprendí pero no nos dio tiempo a casi ni levantarnos cuando el HiAndromon caminaba hacia nosotros apuntándonos con su arma, Gatomon se puso por instinto delante de Blurr y de mí, protegiéndonos y lanzándole una mirada desafiante a HiAndromon.

-Tu desprecio me ha hecho enfadar, y mucho más si intentas dañar a mi compañera!-le dijo Gatomon

-Gatomon, cuidado...-la sujeté mientras con la otra mano apretaba fuertemente la carta azul que había conseguido antes y mi digivice.

-¡EDEN'S NEEDLE!!-una lanza dorada estampo a HiAndromon y a Ebemon contra una computadora. Y todas las miradas se proyectaron hacia la causante del ataque.

-No te atrevas a ponerle un solo dedo encima a mis hijas!-dijo Ophanimon

-MADRE!!-Gritamos Gato y yo emocionadas de que nuestra madre nos hubiera salvado el pellejo.

Cuando HiAndromon fue hacia ella temimos que la hiciera daño y nos quedamos aguardando unos instantes a ver que hacía.

-Vamos, ven! Métete con alguien de tu nivel, maldito robot! ¡EDEN'S AIR!-Ophanimon le lanzó unos tornados a HiAndromon con la capacidad de purificar todo lo que entra en ellos pero también de hacer mucho daño a los malignos de corazón como era el caso de Hiandromon, esperando que este ataque tuviera mejor suerte que le que le cayó a Boltmon.

-Chicas! No es por meterme pero... no sería mejor intentar detener a esos?-señaló Blurr al ebemon y a un metalmamemon que estaban cerca de Queenchessmon como haciéndole pruebas o algo así.

-mmm tienes razón... Gato, Ebemon es más poderoso que tú asique intenta alejarlo o bloquear la máquina-le dije a mi compañera

-¡Déjamelo a mí!-me animó Gatomon

-Bien, vamos allá! ¡CARD SLASH!-Pasé la carta azul por mi d-power.-¡CARTA AZUL! ¡Chou Shinka!!-Grité mientras, acto seguido, Gatomon se envolvía en una esfera de luz.

-¡GATOMON SUPERDIGIEVOLUCIONA EN....LADYDEVIMON!!-la esfera de luz se disipó y ante mi apareció la atrevida LadyDevimon.

-No me gusta lo que están haciendo estos chicos malos....-guiñó un ojo en actitud sexy, ebemon no pareció inmutarse pero metalmamemon se quedó un poco embobado de verla..-Lo siento, bola metálica pero no eres mi tipo...STUN WHIP!!-con sus cadenas ató a metalmamemon y lo lanzó contra ebemon una de las computadoras.

-Lady! quizá esto te ayudé!-tomé una de mis últimas adquisiciones de cartas y la pasé por mi digivice.-¡CARD SLASH!! Carta atributo! ¡Gobernador de la noche!-en un instante todo se volvió penumbra pero la visión nocturna de LadyDevimon le facilitaba el trabajo.

-Gracias, Ashe! Ahora haré algo con lo que disfruto y mucho, destrozarlo todo!! muahahhahahahah!!!-dijo esto con una risa malvada-¡MELODÍA MORTAL!!-desató una horda de murciélagos bajo sus órdenes que empezaron a mordisquear todos los circuitos de las máquinas y hasta de los cables de ebemon, aunque eso a él no le hiciera mucho daño--Y ahora el toque maestro! ¡DARKNESS SPEAR!!-Con su brazo a modo de lanza atravesó varias de las computadoras que rodeaban a queenchessmon esperando que así recobrara el sentido.

La guerra ya había comenzado, o eso podría decirse. MetalMamemon fue aventado junto con Ebemon contra unas computadoras, y aunque el más dañado era Ebemon, su vida no corría el menor de los peligros debido a su nivel; una buena fortuna para el alienígena, pero también una desgracia ya que él no era nada más que un científico, no un guerrero; aunque quisiera empeñarse en atacar, no conseguiría nada más que fallar una vez tras otra. Lo único que le quedaba al digimon era que MetalMamemon hiciera algo, pero en vista de que se quedo viendo a esa LadyDevimon creyendo que tenia 2 Mamemons en la zona de su pecho (cabe mencionar lo tonto que es este digimon), no tuvo otra opción que ir contra el lugar donde estaba QueenChessmon y tratar de controlarla manualmente. Su data ya estaba ligeramente afectada, si podía terminar de afectarla el mismo podría controlarla y abrir la puerta de una vez para que HiAndromon los acabara a todos de una vez por todas. Por su parte, HiAndromon ya estaba preparado para pelear; y con solo recibir el ataque de Ophanimon detuvo su caminar hacia ella, pero luego de unos instantes, continuo tranquilamente mientras reunía energía en sus manos para realizar otro ataque. El digimon observo a la digimon ángel e inmediatamente le disparo un rayo de energía, no con la intención de destruirla, solo de apartarla para poder pasar a asuntos de mayor interés para la maquina.

No fastidies, ángel entrometida… aunque me hayas ayudado a engañar a QueenChessmon respecto a quien era su enemiga… no te perdonare esta interrupción –Comento la maquina, sin dejar de disparar- y te recomiendo no usar esa clase de movimientos contra maquinas como yo… por la sencilla razón de que… ¡YO NO TENGO CORAZON! ¡ATOMIC RAY! –Levanto sus hombreras y disparo un rayo de energía aun más poderoso contra la ángel- ¡Ebemon! ¡¿Dónde está MI puerta abierta?! ¡Si ese Omegamon Zwart aparece necesito todo el poder de esa Flor!
¡Espere un momento HiAndromon, señor! ¡Hackear una mente de forma manual es complicado! –Comento Ebemon manoseando la cabeza de QueenChessmon, intentando corromper su Digicore- vamos niña insolente… ya deja de luchar y acepta lo que eres… una marioneta de todos los que crees ayudar… yyyyyy… ¡LISTO! ¡QueenChessmon bajo sus órdenes! ¡Señor! –Ebemon se aparto rápido de donde estaba, ya que una pieza de metal volador estuvo por golpearlo- uff… eso estuvo cerca… -no pudo evitar una segunda pieza de metal volador, haciéndolo caer de su plataforma directamente al suelo-
Al fin… una cosa buena que ah salido de todo este tiempo perdido… -HiAndromon abandono su lucha contra Ophanimon, perdiendo todo el interés en la digimon para concentrarse en su objetivo principal: conseguir la flor- muy bien QueenChessmon… abre la puerta para mí y después has algo útil y concédeme el poder de la flor… cuando lo hagas, acabare con tu estúpida existencia para ahorrarme tiempo y energía de tener que vigilar que no interrumpas mis objetivos como esa ángel de allí
Si… señor… -QueenChessmon poseía un tono apagado, así como lo que parecía ser una mirada perdida- … -la Reina se inclino hacia delante y comenzó a caminar hacia la gran puerta-
Egh… ¿Qué haremos si no abre la puerta, señor? –Ebemon apenas estaba recuperándose de su caída-
¿Qué haremos?... bueno… si no abre la puerta significa que morirá, y no me interesa mucho… podría ser una salida más sencilla a poder gobernar este reino de forma directa y no contra sus mandatos… -HiAndromon se cruzo de brazos mientras la reina continuaba su camino hacia la puerta- pero bueno… preferiría tener el poder de esa flor… podría deshacerme de cualquiera que intentara interponerse en mi poder… como este cuarteto de orgánicos tan patéticos que han estado causando ya muchos problemas por aquí… -El tono de HiAndromon guardaba cierto rencor, por lo que se volteo a verlos a todos- no se preocupen… los matare en breve

Ophanimon estaba bastante frustrada pues últimamente sus ataques no hacían el cometido acostumbrado, además estaba muy cansada estaba llevando al límite sus fuerzas pero no se rendiría, nunca lo había hecho y jamás lo hará, sólo tenía una posibilidad, ganar tiempo alejando a hiandromon de la flor y de sus hijas mientras llegaba Dakunaito.

Ophanimon esquivó el ataque de Hiandromon y se dispuso a contraatacar.

-¡LadyDevimon ocúpate de la idiota de Queenchessmon, tú, montón de chatarra tecnológico, ven a por mí! ¡No tocarás esa flor! ¡SEPHIROT CRYSTAL!-abrió sus brazos como elaborando un conjuro creando una conjunción geométrica de cristales que fueron a impactar en el cuerpo de HiAndromon donde estallaron, sabía que hiandromon sería duro de roer pero tenía que ganar tiempo hasta que llegara Dakunaito y alejarlo de la flor.

La oscuridad que había creado con mi carta me volvía intranquila pues yo no era como mi compañera y me producía incertidumbre no ver lo que estaba pasando, Blurr lo notó y fue a abrazarme pero Ladydevimon fue más rápida y me puso su mano en el hombro tranquilizándome.

-Ashely, estoy aquí... Chucho sarnoso haz algo útil y cuida de Ashe, tengo que ocuparme de la reina estúpida, al final me tendré que poner del lado de mi madre... en fin, te cargaría conmigo Ashe pero son dos megas y no se que pueden hacer, lo siento-desde que Gatomon evolucionó le gustaba combatir junto a su compañera y se sentía más segura si Ashe iba a su espalda pues los enemigos eran más duros  y la protegía mejor llevándole con ella aunque limitara sus movimientos y le impidiera acosar con libertad, aun así con Ashe entre sus alas le daba cierta seguridad. Pero ahora, aunque odiara a Blurr, sabía que podía dejarla en buenas manos y combatir sin miedo a la seguridad de su amiga.

-Eso iba a hacer hasta que has llegado, maldita súcubo!-replicó Blurr
-¡Blurr! Ve tranquila, Lady-la animé yo
Lady miró mal al strabimon pero sabía que tenía cosas más importantes que hacer que entretenerse en las riñas de un crío con aspecto de perro, por lo que le ignoró asintió a mis ánimos y fue tras ebemon y queenchesmon.

Ladydevimon voló hacia Queenchessmon disipando la oscuridad a su vuelo, y en un rápido movimiento pateó a la reina en el estómago y la lanzó contra los restos de las máquinas, sabía que no tendría mucho que hacer contra un nivel mega pero, al igual que Ophanimon intentaría alejar a los malos de la flor el máximo tiempo posible.

-Vuelve de una vez en ti, reina de ajedrez!! O esque tienes tan poco seso que te dejas dominar por estos hombres, bicho o lo que sean?!-gritó Lady

-Jep, ni que estuviera hablando de si misma...-comentó Blurr

-¡Blurr! Aunque sea verdad, no pinches ahora!-le reñí pellizcándole en el brazo.

-¡Auuh! Ashe!-protestó

Lady le miró con odio y al mirar para aquí vio al Metalmamemon mirando embobado sus pechos. Lady pensó por un momento si Ulforce la mirara así... pero descartó la idea al ver la lujuria en los ojos de un digimon con un poder de atracción igual a 0 para ella y se limitó a decir:

-¡BINTA!-Le dio una bofetada oscura y lo volvió a lanzar contra ebemon matando así 2 pájaros de un tiro nuevamente.

QueenChessmon y Ebemon fueron lanzados hacia atrás, aunque ninguno resulto herido ante el empujón de LadyDevimon por ser ambos nivel Mega. Mientras tanto, HiAndromon recibió todos los impactos de Ophanimon, forzándolo a retroceder y mantenerse a la defensiva; estaba claro que aunque la energía santa no lo afectara por ser una maquina, un golpe físico era una historia totalmente diferente, aunque la maquina podía notar el decaimiento de la ángel; estaba claro, ella se encontraba agotada y no podía mantener una lucha directa, algo que le daba la ventaja a la maquina a la hora de mantenerse en la defensiva. El androide consiguió percatarse de que la reina había sido apartada de la puerta, y naturalmente eso lo forzó a abandonar su postura defensiva para correr hacia ella; QueenChessmon era la llave a su poder, y el androide no estaba dispuesto a dejarla ir así como así. El androide llego lo más rápido que pudo hacia la reina y la tomo entre sus brazos, abriendo sus hombreras para disparar rayos laser a cualquier que tratara de acercársele, aunque con estos láseres termino asesinando a Ebemon quien se encontraba cerca. Ninguna perdida en su ejército le hacía efecto a HiAndromon, el solo ansiaba el poder y lo obtendría a como dé lugar.

… -QueenChessmon seguía incapaz de tomar conciencia de sus acciones, la voz de nadie llevaba a su mente- …
Jeje… Ebemon hiso un gran trabajo… no puedes escuchar a nadie… nadie puede despertarte… y solo respondes a una simple orden… abrir esa puerta –alcanzo a decir HiAndromon, levantándose con la reina en sus brazos y una sonrisa malévola- muy bien… ha sido bastante… interesante… jugar con ustedes, basuras orgánicas… pero ya es momento de que la puerta sea abierta y con ella… mi poder…

HiAndromon dio un gran salto, evitando así a LadyDevimon y aterrizar frente a la gran puerta. Todos los digimons mecánicos dejaron de luchar en ese instante para ver a su líder, o más bien para ver a la puerta. El gran candado dejo salir una cadena de Digicore que rodeo a QueenChessmon, analizando su data cuidadosamente hasta que finalmente, la cadena brillo en un tono verde claro, dando una clara señal de que había aprobado a QueenChessmon. HiAndromon rio con calma hasta llegar a la risa de un claro y autentico demente psicópata que acababa de lograr su objetivo. El androide avanzo en la gran habitación que se había revelado ante todos los presentes… una habitación llena de mecanismos oxidados, todos rodeados por lianas de acero puro, y en su centro, un gran pilar con una esfera reposando en el mismo, y dentro de la esfera: una bella flor de pétalos negros brillantes como el metal recién pulido. Tan pronto como el androide se acerco con la reina en brazos, la esfera que contenía la flor comenzó a abrirse poco a poco, ya había reconocido a su dueña legitima, QueenChessmon, pero esta no podía tomarla, por lo que cuando la esfera termino de abrirse para que la dueña de la Flor recogiera la misma, el que tomo el tan preciado objeto fue HiAndromon.

Con la flor en sus manos, HiAndromon comenzó a ser rodeado por cientos de raíces metálicas, mientras que la Flor poco a poco comenzaba a instalarse en el pecho de la maquina; efectivamente el androide había logrado su cometido, obtener el poder absoluto. Una vez que el nuevo HiAndromon apareció, dejo caer a la reina al suelo, riendo como todo un maniaco mientras su cuerpo era rodeado por raíces a las cuales les crecían espinas en señal de la maldad que poseía el ser mecánico. Tan pronto como el androide termino de ser rodeado por aquellas raíces, este observo a la reina y la sujeto de un brazo, para luego lanzarla fuera de la habitación donde reposaba la flor hacia varias maquinas que sorpresivamente seguían intactas luego de la batalla. Pese a que la reina fuera lanzada contra todo ese equipo, su cuerpo seguía inmóvil, pero eso ya no importaba, puesto que el nuevo HiAndromon entro en escena con una sonrisa siniestra y con grandes ondas eléctricas recorriendo su cuerpo, en señal de que estaba lleno de energía… energía que no dudaría en utilizar para destruir a todos los presentes.

Bien… bien… ya podemos dejar los juegos de lado… ya obtuve lo que quería desde el principio… ya no necesito a nada ni nadie más… -HiAndromon sonrió de forma siniestra, levantando sus brazos ligeramente en señal de que ya nada le importaba- y comenzare por la mas inútil de todas… -el androide levanto su brazo derecho y lo apunto al cuerpo de QueenChessmon- te eh usado por tantos años y finalmente me has sido útil… no lamentare tu muerte… pero tampoco la celebrare… después de todo, ¿para qué celebrar la muerte de mi títere?... ¡ATOMIC R…! –Antes de que el androide completara su ataque, un disparo de energía lo empujo dentro de la habitación, para terminar con una gran explosión de aire gélido- ¡¿Quién ha sido…?!
Miserable… -se escucho una voz profunda y fría, y el dueño de esa voz era aquel caballero oscuro… Dakunaito- … lamento la demora… Ophanimon, Ashely, LadyDevimon, Garurumon… tuve problemas con un Boltmon pero ya se soluciono todo –comento el caballero oscuro con un tono indiferente, avanzando por la habitación con su armadura repleta de daños notorios- ¿QueenChessmon…?... –el guerrero observo a la reina unos instantes y después estiro su espada hasta la mejilla de la digimon, cortando un hilo digital prácticamente invisible- listo… creo que ya puedes escucharnos… ¿verdad?
… ¿q-q-que…? –QueenChessmon finalmente pudo ser capaz de hablar, muy débilmente pero podía hablar- ¿Omegamon… Zwart?
Si, soy yo… pero quisiera que todos los presentes aquí me llamaran “Dakunaito”… suena más apropiado –el caballero rio con calma, para luego observar a sus aliados- yo me encargare de HiAndromon… ¿podrían encargarse de sus secuaces…? Oh… y Ophanimon –el caballero la observo y rio nuevamente con calma- lamento haberte arrojado así de pronto pero no teníamos tiempo que perder… ¿podría pedirte que saques a QueenChessmon de aquí?... ahora mismo no tiene fuerzas para pelear
Tsk… ¿Quién te crees que eres… PARA INTERRUMPIRME EN MI EJECUSION? –HiAndromon se lanzo desde su lugar hasta el caballero oscuro, propinándole un puñetazo en el rostro aunque sin llegar a moverlo ni un milímetro- ¡¿PERO QUE…?!
… ¿asique este es el poder que otorga la flor…?... el nivel Super Ultimate… tsk… que desperdicio –Dakunaito le regreso el puñetazo al androide, usando su brazo de BlackWarGreymon, estrellando a la maquina contra el suelo y causando un temblor como nunca antes en el laberinto- voy a divertirme cortándote en pedacitos por haber jugado con la mente de una dama…

Off: aun tienes a MetalMamemon, a su grupo de Mamemons y cualquier digimon maquina de nivel Champion para masacrar como gustes, yo por ahora quiero matar a HiAndromon~

Ophanimon pensó que había derrotado a HiAndromon debido a la explosión de su ataque en su cuerpo pero no fue así. En cuanto el humo del ataque se disipó pudo ver como el enemigo corría hacia Queencheesmon para llevarla a la puerta donde se guardaba la flor. Realmente le importaba poco o nada lo que le pasara a la reina de ajedrez pero el que desatara el poder de la flor no le gustaba nada y menos lo que hizo después HiAndromon. Como por impulso, Ophanimon voló y se puso delante de LadyDevimon, Ashely y el strabimon protegiéndolas con su escudo del ataque de HiAndromon.

-Mamá!-gritamos las dos al ver la reacción de Ophanimon para protegernos. Pero el protegernos de los misiles agotó completamente su energía y Ophanimon recuperó su forma humana y se desvaneció delante de sus hijas.

-Mamá, resiste!!-corrí a recoger a mi madre antes de que se diera contra el suelo, gracias al cielo que en mis brazos abrió los ojos.

-Ashely, cielo... creo que he cumplido con todo lo que está en mi mano... no temas estoy bien, solo algo cansada. Me he dado cuenta de que tu y tu compañera sois muy fuertes, os dejo el resto, siento no ser de mas ayuda, cariño...-dijo Angela

-Mamá... gracias...-dije con los ojos llorosos mientras Lady también nos miraba sin decir nada pero su rostro compungido decía todo.

-¡Chicas! ¡La flor!-dijo Blurr al ver como QueenChessmon entraba en contacto con la flor, el pequeño licántropo corrió como por impulso a intentar hacer alguna locura para impedirlo pero algo tiró de sus bufandas casi estrangulándolo para detenerle.

-¿Qué crees que haces perro? Si Madre, del mismo nivel, no pudo casi hacerle frente ¿qué vas a conseguir tu?-dijo LadyDevimon deteniéndole con su largo brazo mientras HiAndromon planeaba asesinar a queenchessmon.

-Pero no deberíamos impedir que matara a la reina por muy estúpida que fuese? Por muy mal que nos caiga no merece ese final-comentó Blurr recuperando el resuello.

LadyDevimon me miró a mí como esperando alguna orden antes de actuar ella por su cuenta y me vió como me encorajaba mientras ayudaba a mi madre a incorporarse, eso fue suficiente para ella.

-No consentiré que mates a un inocente! ¡STUN WHIP!-atacó  con  sus cadenas como látigos, quitándose del medio a los molestos que se interponían en su vuelo hacia HiAndromon (los mamemons y champions tipo máquina) y cuando estuvo justo enfrente de HiAndromon con flower power: ¡DARKNESS SP...!-estaba transformando su mano en lanza cuando un ataque helado golpeó al digimon cyborg, la digimon súcubo se detuvo para ver a su aliado momentáneo.
Todos observamos su entrada triunfal por asi decirlo, pero yo no se si fue su pose o su actitud de héroe pero algo en mi compañera cambió y sus ojos rojos se volvieron corazoncitos.

-Ay, no...! Ahora no....-dijimos en voz baja Blurr y yo a la vez...

-Qué hombretón tan macizo!! Tan varonil, tan héroe! Oye guapo quieres..... esta .. noche....! Agghh!!-empezó a decir LadyDevimon intentando abalanzarse sobre él para abrazarle o qué se yo pero anduve rápida y le lanzé el rayo sagrado desde mi digivice para detenerla.

-Lady querida, no interrumpas ahora!-dije sujetando el lazo con la mano libre que me quedaba pues con la otra seguía ayudando a mi madre a mantenerse en pie. Mientras Dakunaito se dirigía a nosotras.

-No te preocupes por eso, Dakunaito... lo comprendo-contestó Angela a sus disculpas-Bueno no estoy en muy buenas condiciones para rescatar a nadie pero no temas, estoy segura de que mis fieles guardianas lo haran por mí-dijo mi madre mirándome a mí, dándome un beso en la frente tras esas palabras, he de decir que mi madre no es muy dada a las muestras de cariño pero si en ese momento lo hacía era porque estaba orgullosa de nosotras y para mí era un buen motivo para hinchar el pecho y elevar la cabeza bien alto.

-Lady! déjate de acosos y galanterías y sácanos de aquí!-le dije yo a mi compañera

-Algún día destrozaré ese lazo tuyo, Ashely!-dijo en cuanto la liberé para que pudiera moverse.

-Sabes que si lo haces, romperás nuestra relación para siempre y eso ambas sabemos que no es lo que quieres, ¿verdad? Blurr, podrías ayudar a mi madre por favor?-el cargar con ella limitaba mis movimientos y necesitaba libertad para lidiar con una digimon demonio de nivel ultimate un tanto rebelde, por suerte Blurr no puso objecciones y como era más o menos de mi misma altura podía servir de apoyo a mi madre permitiéndole caminar lo más cómodamente posible en su estado.

En cuanto se vio libre, me dedicó una mirada de odio y volvió a intentar lanzarse amorosamente contra el omegamon

-¡Ladydevimon!-volví a sacar el lazo sagrado pero ella lo esquivó por suerte el lazo no se rendía así como así y le agarró una mano.

-Maldita!!-gritó ella empezando a lloriquear

-Obedéceme de una vez y no interfieras!-la atraje hacia mí con el lazo y cuando la tuve lo bastante cerca me subí a su espalda, en contra de su voluntad, y la liberé del lazo.

-De acuerdo... mi "querida" tamer....-me dijo con retintin, al menos conmigo encima no se atrevería a desobedecerme porque podía tirarla del pelo o hacerle daño en las alas o cuello además me aferraba a ella con las piernas como tenazas rodeando su cintura y no me separaría de ella así como así.

Así que, de mala gana, recogió a Queenchessmon y caminó acompañada de Blurr y mi madre a una sala cercana donde podíamos ver la batalla a salvo.

-Señora, le confesaré un secretillo.... odio a las súcubos...-le contó en voz baja Blurr a Angela, a lo que está le sonrió divertida.

-¿Decías algo chucho sarnoso?-se volteó Lady en un ademán que casi tira a Queenchessmon

-Lady, cálmate! No le hagas caso y cuida de la reina!-la reñí y a regañadientes entró en la sala soltando a Queenchessmon a su lado, se sentó en el suelo y con una mano me bajó de su espalda sentándome a su otro lado.

-Ya estás contenta?-me dijo malhumorada.

-Ay Lady... a dios gracias que no eres una forma corrupta...-concluí mientras Blurr y mi madre se acomodaban también cerca.

Tan pronto como el equipo de “rescate” conformado por 2 humanas, una LadyDevimon y un Strabimon sacaron a QueenChessmon de la zona de guerra, el caballero oscuro pudo darse el lujo de relajar sus músculos y observar a su oponente con rencor y odio; algo impropio del guerrero pero que por esta ocasión se permitiría demostrar, puesto que ahora tenía lo que había venido a buscar y además, tenía el bonus de vengar a QueenChessmon así como el bonus de tener una razón para destruir a HiAndromon. Ciertamente Omegamon Zwart poseía muchos “bonus” de razones por las cuales debía de acabar con la existencia de HiAndromon, pero él lo haría por la razón principal: la Flor. Destruir la flor era lo que él buscaba desde el principio, y ahora que QueenChessmon había sido traicionada por HiAndromon, la reina no tendría resentimiento alguno con la partida de dicho digimon y tampoco con la destrucción de la flor porque ella misma lo había admitido junto con el caballero: la flor fue, es y será un error de su familia que desearía destruir. Fuese como fuese, regresando con la reina, esta comenzaba a recuperar sus fuerzas poco a poco, mientras todo el laberinto comenzaba a temblar por la ausencia de la flor en su pedestal, asi como el inicio de la batalla entre el caballero y el androide.

Egh… de-demonios… -la Reina hiso una mueca de dolor y sujeto su cabeza- ese maldito… de HiAndromon… creí que era mi aliado… rayos… chatarra… -maldijo la reina, intentando calmarse- muchas gracias… de no ser por ustedes, humana, LadyDevimon y Strabimon… estaría muerta ahora mismo –comento la reina con una sonrisa agradecida a la humana más joven y a sus digimons, para luego observar a la humana dueña del Digispirit de Ophanimon, con cierto resentimiento y seriedad- … creo que no tiene sentido seguir peleando… egh… soy una reina y debo de ser capaz de tragarme mi orgullo para decir esto… Angela… -QueenChessmon estiro su brazo, abriendo la mano poco a poco- no tengo más intenciones de seguir luchando contigo… no pienses mal… no me estoy disculpando por nuestros pleitos ni acciones… solo intento llegar a un acuerdo… tú te alejas de mi vida y yo no me muevo de mi lugar… así las 2 seremos felices, ¿no crees?... –el lugar comenzó a volverse pedazos- … y sepas, que aunque aceptes esto o no… los sacare a todos de aquí… solo necesito… levantarme

En cuanto QueenChessmon se levanto de su lugar, respiro algo agitada, seguía agotada por haber sido controlada y apaleada por Boltmon, pero era claro que la reina tenía algunas fuerzas para poder caminar por su cuenta.

Acompáñenme… sin la flor el laberinto no puede moverse… eso significa que hay una ruta directa para salir de aquí antes de que todo se derrumbe –dicho eso, QueenChessmon comenzó a caminar con dificultad, pero manteniendo un paso estable para que pudieran seguirla hacia el camino seguro-

Mientras tanto, Omegamon Zwart e HiAndromon no se daban la menor de las piedades, atacándose de forma mutua independientemente de si impactaban con la estructura del laberinto o no; en sus miradas solo podía verse la concentración en su combate, nada más. HiAndromon luchaba de forma táctica y ofensiva, usando su agilidad y cuerpo de menor tamaño para poder evadir las grandes y pesadas manos de Omegamon Zwart con suma facilidad; mientras que el caballero oscuro trataba de usar su espada para cortarlo cuando este se acercaba, y su cañón para dispararle a largas distancias, aunque sin mucho éxito en ninguna de estas 2 formas de ataque. Lo cierto es que HiAndromon tenía la ventaja de territorio así como de cocimientos tácticos, después de todo el había estado en el laberinto un buen tiempo y había estado vigilando lo que ocurría en el mismo, aprendiendo poco a poco el estilo de combate del caballero oscuro sin que este lo supiera; esto se hiso bastante notorio cuando llego el momento en que HiAndromon trato de atacar al caballero y este aguardo con su espada a que llegara el momento justo, pero antes de contraatacar el androide disparo sus rayos de energía al rostro del caballero, forzándolo a retroceder mientras cubría su mirada por el ardor de aquellas ráfagas de energía. El androide aprovecho esto para proporcionarle una gran patada directamente en la cintura al caballero, internándolo dentro de la cámara donde había estado reposando la flor.

Omegamon Zwart trato de levantarse pero el androide fue más rápido y salto sobre el caballero, enterrando ligeramente su cuerpo en el suelo debido al impacto causado por el aterrizaje sobre el androide. Realmente era difícil creer que hacia tan solo unos instantes atrás, HiAndromon había golpeado al caballero y no le había hecho el menor rasguño, ya que ahora todo parecía haberse volteado completamente a favor del androide, quien comenzó a golpear al caballero en el rostro hasta que finalmente los ojos del mismo comenzaron a apagarse. El androide sonrió victorioso y se aparto del cuerpo del caballero una vez sus ojos dejaron de irradiar luz; se dio la media vuelta y se alejo hasta la puerta, tomándola para cerrarla y dejar allí el cadáver del caballero, pero antes de que llegara a cerrar las puertas la espada del caballero atravesó el cuerpo del androide por completo de un instante a otro, partiendo inclusve a la misma flor que intentaba reconstruirse tomando las raíces y plantas de la habitación, pero sin lograr nada por aquella espada atravesada en su centro.

¿Qué pasa?, ¿no vas a pelear más que este? –Comento el caballero con un tono frio- … esperaba algo más del “señor de las maquinas”… ¿Qué ocurrió?, ¿No ibas a hacerme pagar o algo así?
Tsk… co-como… ¿Cómo es posible… q-que un simple orgánico me este… derrotando? –HiAndromon intento separarse de la espada, pero era una tarea imposible, cuando el retrocedía para quitársela, el caballero avanzaba con el- ¿Qué eres tu…?
… ahora que no está la señorita LadyDevimon… hablare –el caballero rio con calma, demostrando una sonrisa indiferente a la batalla que continuaba en pie- no quiero arruinar sus esperanzas… pero es muy simple… -los ojos del guerrero repentinamente cambiaron a uno verde y uno amarillo, siendo el izquierdo el verde y el derecho el amarillo; el color de los ojos de sus 2 partes, de los 2 digimons blacks originales que lo habían formado hacía muchos años- soy un guerrero antiguo… cuya alma descanso en el Dark Área hasta que 3 almas consiguieron liberarme de esa prisión… y como agradecimiento, yo los ayudo a ellos…
e-eso no tiene sentido… ¿alma…?... ¿prisionero del Dark Área…?... nadie… nadie que vaya al Dark Área regresa… -comento la maquina, rechinando sus dientes tratando de quitarse la espada de su pecho- ¡MIENTES!
Oh, pobre androide –HiAndromon se cayó al escuchar ese tono de voz- ¿todavía creer que el alma no existe aun cuando posees una flor que contiene el alma de una mujer dentro?... jeje… eres gracioso… pero eso no te salvara de tu ejecución –dicho eso, Dakunaito dio un giro rápido y arrojo al androide contra el techo del laberinto, atravesando el mismo hasta que el androide llegara a plena calle de la ciudad, seguido por el caballero- ¡Es hora de la verdadera obra! ¡El primer acto ya fue visto bajo tierra! ¡El segundo acto está por terminar y la caída del telón se llevara a cavo… con la destrucción de esa endemoniada Flor! –Agrego el caballero, preparando su cañón y su espada para el final del combate- ¿unas últimas palabras antes de que te enseñe la diferencia entre un caballero y un miserable como tú?

OFF: te dejo la salida a ti XD

Todos escuchamos las palabras de Queenchessmon, Strabimon y yo aceptamos sus palabras (Lady solo tenía ojos para dakunaito y la mantenía con nosotros tirando de una de las cadenas que rodeaban su cuerpo) sin embargo mi madre seguía mirándola con desdén, en su mente seguía siendo una estúpida. La reina pareció notarlo y se acercó a Angela en una actitud de firmar una tregua.

-Sabía que sería peligroso despertar el poder de la flor y mira que te lo dije. Yo no te deseo ningún mal Queenchessmon sólo te pido que no seas tan estúpida e ingenua, si tienes semejante poder tan cerca no debes de fiarte ni de tu sombra, lo único que quería era hacerte entrar en razón, solo es que me repatea que no te dejes ayudar y que no hagas caso a los que quieren mantener la paz y la tranquilidad en el Digimundo como es mi digispirit, como soy yo misma. Tengo mucho carácter, lo reconozco y se que no son formas las que utilicé para intentar ayudar, antes de confiar en alguien para que custodie la flor asegúrate bien de que no tiene ningún interes en ella y que te ayuda de forma altruista, hay mucha oscuridad en el digimundo y lo sabes. Yo no quiero interferir en la vida de nadie tengo bastante con la mia propia, si no intentas ninguna otra estupidez que afecte a la gente que quiero o a mi gente no me volverás a ver si así lo deseas, yo tampoco quiero tener que volver a este lugar, no me gustan las máquinas ni la zona imperial, solo vine porque cerca de aquí hay terrenos celestiales y esa zona me pertenece y no quería tener ningún tipo de problema, detecte la oscuridad que venía de aquí y por eso hice llamar a mi hija, que siendo miembro de uno de los clanes que velan por la paz del digimundo sabría tratar estos temas y pasaría más desapercibida que yo.-argumentó Angela.

-Espera un segundo... ¿me utilizaste?-pregunté yo creyendo no comprender bien.

-Ashely, realmente en cuanto supe que viniste al digimundo en busca de tu padre, enseguida quise dar contigo, quería saber de lo que eras capaz con tu compañera, realmente podía haberlo hecho yo sola pero seguramente no habría tenido éxito de no haber contado contigo y con tus amigos, seguramente el recelo contra Queenchessmon me habría cegado-se excusó ella

-¿Acaso no lo ha hecho igualmente?-preguntó Blurr, pero le di un codazo para que se callara.

-Entiendo... querías probarme...Además, ¿por qué nos ocultasteis tú y papá que ambos erais tamers también, a mi hermano y a mí?-pregunté yo.

-Eso te lo contaré en otra ocasión, ahora obedezcamos a Queenchessmon y salgamos de aquí-dijo incorporándose ella sola, parece que el pequeño descanso había restablecido algo sus fuerzas.

-Lady vámonos!-llamé a mi compañera pero esta seguía observando a Dakunaito combatiendo inquieta con los ojos como corazoncitos y deseando ir a por él como un animal en celo.

-Y unas narices! Yo no me voy sin ese buen mozo!-echó a volar de nuevo hacia los combatientes, por suerte yo fui rápida y la enganché con el lazo de mi digivice de nuevo y no consiguió volar muy lejos pero casi me lleva a mi a rastras de no ser por que Blurr me sujetó.

-Gra...gracias Blurr-le dije yo al strabimon mientras me agarraba por la cintura. Sin embargo, mientras yo estaba ocupada intentando traer hacia nosotros a Lady, que la muy ca·!"·$·"$"$" se debatía, el pelaje del perro se volvió rojo como un tomate cuando en los movimientos de retención mi pecho rozó sus brazos y una gotita de sangre goteó de su nariz. Sin embargo alguien si que se dio cuenta de ello.

¡PAF!

-Suelta a mi niña, pervertido! y ayuda a la señora Queenchessmon a moverse!-abofeteó mi madre a Blurr. Yo seguía sin darme cuenta pues estaba a punto de conseguir traer a LadyDevimon pues en ese momento su cuerpo golpeó el suelo.

-¿A qué vino eso? Pero si yo no...-protestó Blurr masajeándose la zona golpeada.

-¡Muévete!-le insistió mi madre
Blurr a regañadientes sirvió de apoyo a Queenchessmon que empezaron a caminar hacia la salida.
-Ashely! Ya, basta!! Quítamelo!-seguía resistiéndose ella.

-Vuelve aquí de una vez!!-la reñí

"Mi madre, nunca pensé que mi hija fuera así de rebelde..."-comentó Ophanimon desde el D-scanner de mi madre pero nosotros no pudimos oírla solo Angela

-LadyDevimon, escúchame, si nos sacas de aquí estoy segura de que Dakunaito sabrá recompensarte, pero ahora has de obedecer a tu tamer y ayudarnos a salir de este lugar-intervino Angela intentando hacer presión para que la oscura digimon obedeciera.

-¿Qué? ¿De verdad?-se volvió y miró a mi madre con los ojos como corazones, momento que aproveché para liberarla del lazo.

-Gracias, mamá-le dije yo en voz baja.

Al poco Ladydevimon emocionada, cargó conmigo y con mi madre y seguimos volando a Blurr y a Queenchessmon hacia la salida.

Una vez fuera, Queenchessmon aguardó con nosotros a que saliera el triunfante Omegamon Zwart, pero mi madre me puso las manos en los hombros y me miró tiernamente.

-Ashely, hija mía, me has demostrado lo mucho que has crecido, no sabes lo que te pareces a tu padre eres tan noble y tan poderosa como él, contigo y con tus amigos se que el Mundo Digital estará en buenas manos-dijo ella

-También tiene la belleza exótica de su madre, grr..-comentó Blurr pero Lady le dió una colleja.

-Cierra el pico, perro! No solo es como su padre Madre, también tiene vuestra mala baba....-protestó Ladydevimon masajeándose el cuello y el brazo donde la había sujetado el lazo sagrado impidiéndola acosar.

-¡¿Pero por qué todo el mundo me pega hoy?!-se lamentó Blurr

Angela se rió divertida al ver nuestro variopinto equipo.

-Jaja, supongo que tuve buenos ejemplos, mamá-nos abrazamos

-En fin, he de irme. Ashely te espero para cenar, hace tiempo que me gustaría tener una cena en familia. Ladydevimon, cuídamela bien y vigílame al perro, Blurr ayuda a Ashely a controlar a Lady, también me gustaría que los 2 viniérais a cenar-se despidió ella

-Volveremos a casa para cenar, mamá-le aseguré yo y mi madre me besó en la frente.

-Queen, vigila a tus amistades y sinceramente espero no tener ningún otro encontronazo contigo. Hasta pronto, chicos-dicho esto se transformó en D'arcmon y voló hacia el horizonte hasta perderse de vista.

-¡Adiós, mamá!-Dijimos Lady y yo a la par.

-Hasta pronto, señora-se despidió también Blurr.

Las calles prestaron su atención al caballero, quien mantuvo una postura firme y estática, observando a HiAndromon mientras este intentaba levantarse del suelo y reincorporarse, dándole una mínima oportunidad para retomar el combate y tratar de alcanzar la victoria, aunque ya estaba claro que el androide había sido derrotado… solo bastaba con ver el cuerpo. Las raíces que lo cubrían estaban mas y mas aferradas al metal que recubría el cuerpo del androide, y parecían aferrarse mas y mas con cada daño significativo… la flor en efecto estaba tomando la vida de su poseedor para mantenerse ilesa… al igual que un parasito que succiona la sangre o esencia vital de su huésped, la flor estaba asesinando lentamente a HiAndromon, en busca de sustento y la capacidad para seguir existiendo; algo que el caballero oscuro no permitiría por mucho más tiempo. Hubo un instante de silencio, HiAndromon se mantuvo estático, su cuerpo ya era demasiado pesado para el digimon… la flor había terminado de consumir sus energías para reconstruirse y el androide aun no sabía el porqué, fue ese el instante en el que el caballero dio un paso hacia delante, dando un rápido giro para terminar cortando al androide en diagonal por la mitad; aunque no termino allí. Otro giro para cortar nuevamente al androide en vertical y horizontal, terminando en la diagonal contraria a la inicial, partiendo el cuerpo del digimon en 8 pedazos y con él, a la flor de igual modo. La desesperación consiguió verse en los ojos de la maquina, quien incapaz de moverse, observo al caballero con temor; una sensación que el androide cría haber dejado de sentir… pero solo creía, puesto que cuando su cuerpo dejo de responderle, pudo darse cuenta de que siempre sintió el temor… con solo ver al caballero llegar a la zona imperial horas atrás, el androide sabía que su destino era la muerte… pero cegado por su codicia, continuo avanzando sin pensar en lo que podría sucederle.

Espera… pu-puedo remediarme… ¡PUEDO REPARAR MIS ERRORES…! –El androide preso del pánico intento negociar con el caballero, quien con sus ojos de 2 colores diferentes, verde y amarillo, cargo su cañón- ¡TEN PIEDAD…!
¿Cómo tú ibas a tenerla por tu reina…? –con ese último comentario, el visor de HiAndromon se quebró con facilidad, dejando ver sus ojos cuya esperanza había sido destruida- eso supuse… es hora de que se cierre el telón… tengo que atender una promesa importante… Omega Blast… -el caballero golpeo el centro del cuerpo cortado de HiAndromon, levando los pedazos al cielo para finalmente disparar su cañón, cargado con energía negativa- desaparece de este mundo y queda preso donde la gente como tu merece estar… en el infierno

Con esas últimas palabras, el cañón del caballero expulso aun más energía, extendiendo el rayo que emanaba del mismo hasta el cielo y creando un inmenso hoyo en las nubes. El alba fue oscurecido rápidamente por el brillo oscuro del arma de fuego; las nubes desaparecieron en un torbellino invertido cuando el arma hiso contacto con estas… y el cuerpo de HiAndromon fue borrado dato por dato, hasta que finalmente se formo un Digitama el cual desapareció en mitad de la onda de energía. El Digitama estaba a salvo, simplemente había ido a la ciudad del inicio; no obstante lo que aun permanecía en su sitio era la dichosa flor. Inclusive el cañón del caballero tenía problemas para perforar la data de ese objeto, aunque sin un huésped del cual sustentarse, la flor comenzó a decaer poco a poco; su brillo metálico comenzó a perderse, así como los pétalos de hierro comenzaban a moverse como si fueran pétalos comunes de cualquier flor; la fuente de poder de las maquinas estaba cayendo y cayo finalmente… perdiendo todos sus pétalos hasta que solo quedo el tallo con un pequeño digicore en su punta, el digicore de la creadora original de la flor. Cuando el digicore quedo al descubierto, el caballero estiro su espada y atravesó el alma núcleo digital, abriendo también la boca de su espada, para finalmente aplastar la esencia cuando esta estuviera dentro. Un final algo cruel para muchos, pero el apropiado independientemente de lo que opinara la gente.

El disparo del cañón finalizo con la ida de la flor, y con el digicore que poseía la misma aplastado en la mano izquierda del caballero, este podía relajarse finalmente; dejarse caer en el suelo sentado, mientras su armadura absorbía los datos del alma que acababa de aplastar para así reconstruirse completamente en cuestión de segundos. Pasaron unos instantes hasta que finalmente, el caballero volvió a ponerse de pie, observando el castillo a tan solo unas calles de distancia para luego encaminarse hacia el mismo lugar. Le tomo unos 20 minutos pero finalmente llego, para ver la partida de D’Arcmon, algo que le alegro ligeramente el corazón ya que si D’Arcmon seguía viva, significaba que habría llegado a un acuerdo con QueenChessmon… aunque claro, el odio de ambas mujeres persistiría y ambas sabrían que ninguna cambiaria en lo absoluto, quizás habrían llegado a un acuerdo para dejar de molestarse. D’Arcmon no sabe cómo funciona el mundo de las maquinas, QueenChessmon no sabe cómo funciona el mundo de los orgánicos… así es como el mundo debe girar, eso pensó el caballero; aunque lo que más le importo fue llegar al lugar donde se encontraban sus aliados de aquella “aventura” en el subterráneo. Tan pronto llego al salón del trono donde se encontraban Ashely, Strabimon, LadyDevimon y QueenChessmon, el caballero hiso una reverencia, llevando su brazo derecho al pecho en señal de respeto.

La flor… ya no existe… nuestro objetivo ha sido cumplido, QueenChessmon –comento el caballero, cerrando sus ojos momentáneamente- la deuda ha sido saldada satisfactoriamente…
¿ya Flor ya no existe…? –QueenChessmon se mantuvo en silencio y después respiro profundamente- ya veo… ¿ese era su objetivo desde el principio, Dakunaito…? –El caballero asintió levemente, mientras la reina apretaba sus puños ligeramente molesta, pero después suspiro con pesadez y cierta alegría- está bien… supongo que es lo más normal… bueno… creo que ya no importa, esa flor… todos los afectados por su maldición… deberían de mejorar en poco tiempo… jeje… bueno, Dakunaito… creo que aun así mereces una recompensa, asique… ¿Por qué no vamos usted y yo a…? –Antes de que la reina pudiera terminar de hablar, el caballero negó con la cabeza- ¿eh?
Lo siento señorita pero yo ya eh prometido algo a alguien más… aunque sea bastante deshonroso para un caballero el negar el ofrecimiento de una reina, la palabra es primero, mas para un caballero sin rey ni reina… -Dakunaito se levanto del suelo y observo a LadyDevimon, sonriendo con calma- recuerdo bien haber prometido una cena para usted señorita, allá en el subterráneo… y un caballero nunca rompe su palabra, menos ante una dama… no obstante, solo puedo ofrecerle una cena y solo eso… ya que después de esta noche, deberé de desaparecer algún tiempo… -esa última oración fue dicha con pesadez, pero sin tristeza alguna; fue más bien como algo de molestia pero muy ligera- bueno, ¿quiere partir señorita?... claro, si su tamer me lo permite
A-ah… comprendo… ¡Bueno! Yo iré al subterráneo con un equipo de rescate… jaja… los dejare por hoy… mu-muchas gracias a los 4… -QueenChessmon abandono el lugar, internándose en su castillo, y una vez que se alejo de todos quedando sola, logro decir con molestia- maldita súcubo… debí de habérselo pedido antes…

Off: la muerte de HiAndromon ocurrio antes de que Ashely y los demas salieran del subterraneo. Solo eso

Hubo muchos ruidos y temblores en el laberinto, Lady acudió a mi lado por si acaso.

-Menuda pelea se debe de estar viviendo allí dentro...-comentó Blurr

Lady puso su mano en mis hombros para protegerme por si salía algún cascote disparado pero de pronto todo estuvo en calma y Dakunaito apareció al cabo de un rato delante de nosotras.

-¡Daku-san!!!-LadyDevimon se emocionó al verlo y no pude sujetarla, se abalanzó y abrazó a Dakunaito

-Incorregible....-Dijimos Blurr y yo a la vez.

-Lady... déjale hablar!-la tiré de las cadenas para traerla conmigo un rato--¿Conseguiste destruir la flor? ¡Genial!-dije yo

-Miii heeeroe!-volvió a abrazarse LadyDevimon a él.

Cuando Dakunaito dejo de lado a Queenchessmon y aceptó la cena de Ladydevimon mi digimon se desmayó de la sorpresa pues no estaba acostumbrada a que nadie aceptara sus acosos, excepto Zoby, pero eso pasó hace mucho tiempo por lo que lo de ahora la pilló desprevenida.

-¡Lady!-fui a socorrerla

-No temas, Ashe lo que está es pervert perdida mira su cara-Blurr señaló el rostro de mi digimon y tenía la cara como un tomate para ser de normal tan pálida y de su nariz salieron pequeñas gotas de sangre y tenía una cierta expresión de gusto en su cara.

-Dios mío, no se en qué demonios estará pensando ésta...-me puse la mano en la cara y me sonrojé de pura vergüenza por la conducta de mi compañera.

Cuando Dakunaito le dijo si queria partir si su tamer se lo permitía, Lady se levantó como autómata estiró sus alas e intentó llevarse en volandas al omegamon pero descubrió que era demasiado pesado para ella.

-Creo que ahí tienes tu respuesta, Sr. Dakunaito, llévatela un rato a ver si se le pasa la tontería y bueno, te agradecería que me la devolvieras cuando volviese a ser Gatomon...-comenté yo.

-Espero que no se demore mucho, recuerda Ashe que tu madre nos invitó a cenar luego-me recordó Blurr

-Oh es cierto, no te apures por ello, mejor que se descargue por ahi que nos la lie en la cena, yo me disculparé por ella, pasarlo bien-les dije a ambos

-¿De veras me dejas ir? ¡Eres un sol de tamer, Ashe!-en un momento Lady vino y me abrazó tan fuerte que me espachurró entre su gran envergadura, en todos los sentidos.

-Vale, vale que la despachurras...-intervino Blurr salvándome de ser aplastada, aunque realmente parecía molesto por la actitud de LadyDevimon o acaso, estaba celoso? No se muy bien solo se que el resto del día, estuvo de un humor de perros, nunca mejor dicho.

Tras el abrazo, Lady volvió emocionada con Dakunaito lista para su cena con corazoncitos rodeandola por todas partes.