Que Lugar mas tenebroso... !Que Divertido! 2da Parte [Priv: Rena Ryuugu]

Han pasado cerca de 3 semanas desde que tuve un trabajo para los CE, y realmente trabajar para ellos es horrible, pero la razón por la que acepte este trabajo, es porque tengo la oportunidad de que Labramon vea a su amiga más reciente, Lopmon, y yo… bueno, podre ver a Rena, una chica muy agradable, amable y… tierna.
La última vez que nos vimos fue en la mansión de Myotismon para un trabajo en el cual debíamos atrapar a un traidor, la verdad yo pensé que el Murmukusmon que eliminamos era el traidor, no me importaba quien fuera su jefe, pero bueno, así trabajo. Recuerdo que Rena tiene una debilidad extraña reflejada en mi aura oscura, asique tendré que usarla lo menos posible, también recuerdo algo que hiso para ayudarme, me vendo el brazo que me había roto para cargar al máximo el poder de Cerberusmon.
También se ofreció a llevarnos a nuestra base, aunque no estábamos tan heridos como ella pensaba, aceptamos la oferta, no podía rechazar la oferta de un viaje gratis en uno de los digimons que más fascinan, Kyubimon, la digimon zorro de 9 colas, ese tipo de digimons siempre me han fascinado. En fin, hace unos días recibí un mensaje de Rena a mi digivice, sorprendentemente me estaba pidiendo ayuda para otro trabajo, normalmente pediría hablar en persona, pero Rena tiene trato especial, si quiere ayuda, se la daré. Ahora estoy montando a Cerberusmon, en medio del desierto, buscando el punto de reunión que Rena me envió, esperando no encontrarme con problemas y situaciones extrañas.

¿Ahora que Scott?, ¿llegamos, saludamos, ayudamos y nos vamos? –Pregunto Cerberusmon corriendo lo más rápido posible- ¿o nos quedaremos con ellas?
… Rena es una gran aliada y eres amigo de Lopmon… supongo que puedo intentar quedarme con ustedes… además… -observe el cielo y di un buen suspiro- olvídalo… solo acelera… si lo haces te prometo que invitaremos a Rena y a Lopmon a que vengan a casa un día
¡¿En serio!? ¡Eres el mejor compañero que existe! –respondió mi compañero totalmente alegre y acelerando en poco tiempo- ¡No perderé esta oportunidad! ¡Llegaremos en 5 minutos o no tengo una evolución mega tipo hombre dios!
Je… que raro eres amigo… (Bueno… tu y yo somos iguales… asique no le veo el problema en que seas raro a tu manera) –Pensé recostándome en el lomo de Cerberusmon- (es mucho sol…) –me tape la cara con mi bufanda-

Mientras Cerberumons corria, me puse a observar y vi a muchos tipos de digimons, en si había digimons máquina, seguramente buscando alguna antigua tumba egipcia para investigarla, también vi Ogremons en grupos y demás, je, muchos tipos de digimons para una zona tan seca y poco habitable. En fin, pronto también vi uno que otro Andromon montando a algún Aidramon, seguramente también pertenecían a la excavación, me pregunto que buscaran, ¿alguna tumba antigua?, ¿un tesoro?, no sé qué lo sea que busquen, pero sin duda es algo grande.
Luego de una hora corriendo, Cerberusmon se detuvo de pronto, entonces vi que alguien nos había detenido, y al ver claramente, vi a un Mummymon, apuntándonos con su arma, claro que genere mi aura oscura, pero extrañamente al ver mi aura, Mummymon sonrió extrañamente y nos dejó pasar, también se disculpó, no se a que vino eso, pero sin duda es algo realmente extraño, algo que no quisiera volver a ver, nunca había escuchado de un Mummymon que se arrepintiera o que siquiera se disculpara.
Finalmente pasaron algunas horas más, ya estaba atardeciendo, y el desierto es frio de noche, espero que a Rena no le moleste el frio del desierto, a mí me encanta en particular, en especial la vista, pero el frio me gusta, aunque si se excede, tengo a Cerberusmon que con un simple Hell Fire puede encender una fogata muy útil.

Bueno Cerberusmon, ahora solo queda esperar a que Rena y Lopmon lleguen para que nos informen de lo que sucede –dije observándolo todo a mi alrededor- vaya que es un lindo lugar… y el oasis con palmeras cruzadas… buen sitio para reunirse Rena…
Je, ya quiero ver a Lopmon, hace tiempo que no hablo con ella –dijo Cerberusmon sentándose como si fuera un perro- me pregunto si se volvió más fuerte
Seguramente, igual que Rena, nadie conserva la misma fuerza, siempre aumenta o disminuye –dije recostándome bajo una palmera- por favor avísame cuando Rena y Lopmon lleguen… me echare una siesta –bostece, me estire y después me quede dormido-


Es increíble que vuelva a ver a Lopmon, y que Scott vea a Rena, je, esos dos serán buenos amigos, lo sé, mis instintos me lo dicen y ellos nunca fallan, aunque, el aura de Scott será una complicación en el proceso, incluso, tal vez por esa aura no tiene amigos, siempre prefiere mantenerse lejos de todos y evitar hacer amigos por su paranoia eterna de que todos lo traicionaran y usaran su poder en su contra.
Bueno, igual sé que serán amigos, si intento ayudar podrían llegar más lejos, Scott podría tener una mejor amiga, o si no, si supera ese sentimiento de incomodidad, podría conseguirle algo mejor, pero, seguramente me mataría, asique mejor olvido esa idea y me quedo con la opción de la mejor amiga.
Luego de un rato bastante largo, vi una sombra gigante acercándose a lo lejos, y tenía orejas, brazos y piernas largas, era nada más y nada menos que Antylamon, ¡al fin llegaron! ¡Ahora quede esperar a que lleguen y a que Scott se despierte!

Al fin… es bueno trabajar con amigos nuevamente –dije sonriendo de lado a lado mientras movía la cola como si fuera Labramon-

Habían pasado ya tres semanas desde que ‘’eso’’ sucedió, y si, con ‘’eso’’ me refiero a la misión que me había sido asignada la vez anterior en la Mansión de Myotismon; quien hubiese creído que alguien como yo terminaría interesándose tanto en una misión en particular... Desde ese día dejé de pensar mucho en las siguientes misiones que se me iban acumulando poco a poco, por suerte, yo tenía a alguien conmigo que era capaz de hacer todas esas misiones sin problema: ¡Lopmon! Ella, con tal de verme feliz, aceptó con gusto mis peticiones sobre poder hacer todas esas misiones ella sola y por su cuenta, realmente me daba pena ordenar algo así, pero claro que... me comunicaba con ella con un comunicador especial, además de que los lentes que mi uniforme lleva integrado me permiten ver, mediante una cámara especial instalada en mi aliada, podría ver todo lo que ella ve y escuchar lo que ella escucha cuando activaba los audífonos, así podía ayudarla desde lejos cuando se metiera en problemas, por suerte, nunca tuvimos esa necesidad, así que me tomé el trabajo que yo misma me había dado con mucha mas calma.

No dejaba de pensar, ¿Cómo le estará yendo a Scott y a Labramon? Es cierto que ellos se saben cuidar solos, pero al igual que yo, seguramente han tenido mas misiones que los han mantenido ocupados, es por eso que… nunca me atreví a llamarlos o algo por el estilo, sabía que si quería volver a verlos junto con Lopmon tenía que terminar la investigación que había comenzado, por lo tanto, me encontraba muy decidida en el asunto dado.

Inicié con datos pequeños, en una simple hoja de papel, comencé a anotar los rasgos importantes que mi primera misión en la Mansión de Myotismon pude recolectar, alguna que otra extraña actitud mostrada por el mismo Murmukusmon, o incluso de algunos invitados que, según recuerdo, se tardaron mucho en huir después del alboroto que había hecho Scott cuando su aura oscura se había apoderado de sus instintos y de los de Cerberumon, era una desgracia que nunca me detuve a analizar la forma o el rostro de todos esos digimon que sin mas se fueron poco después de que la verdadera lucha contra Murmukusmon había comenzado.

Aparte de eso, también investigué sobre otros aspectos que tendrían que ver con Scott y Labramon, por ejemplo, a pesar de haber ya conocido sobre el digivice de éste anteriormente… nunca me había detenido a analizar su sistema mas detenidamente, por suerte, mi clan tenía muchos investigadores cibernéticos expertos en ese tipo de baratijas y, por alguna razón, la mayoría de todos ellos poseían ese mismo digivice, así que les dejé a ellos con una orden del ‘’Jefe’’ Heh… claro que realmente fue una broma eso, tuve que engañarlos porque sabía que nunca le harían caso a una subordinada cualquiera como yo.
También, tuve que hacer uso de mi habilidad de camuflaje que tengo en el cuerpo de Renamon, esa habilidad suya de camuflarse entre las sombras me ha ayudado de mucho en mis momentos en los que tuve que infiltrarme secretamente en la junta que tenía el representado del jefe junto con otros subordinados de nivel alto para comentar sobre las diferentes circunstancias que se encontraban dando origen en el digimundo, también descubrí que precisamente en esa sala daban por orden las misiones para los demás subordinados y a veces para ellos mismos dependiendo del nivel de dificultad. Gracias a esto, pude surtirme de varios conocimientos sobre el tema que he estado investigando en particular: al parecer, el traidor nunca fue mencionado en las juntas, o mas bien, su nombre había quedado como anónimo así que en mis investigaciones yo lo he llamado como ‘’Eksmon’’ dando referencia a la X que se utiliza en el algebra cuando no se sabe que numero escondido hay ahí.

Eksmon, tal como lo había llamado yo misma, era un digimon que antes era de los mejores subordinados en el CE, por lo tanto asistía a esas mismas conferencias en las que yo estaba espiando nutriéndose de varios datos que seguramente de le serían muy interesantes. Yo tengo mis propias hipótesis, creo que el no era solamente miembro del CE, si no también puede que se halla aliado a los RK e incluso puede que a la US que son los ‘’tres grandes clanes que rigen el digimundo’’ y en los tres, seguramente, ha sido un miembro de alto rango. Sin embargo, el Chaos Empire ha sido al único a quien le ha importado dicha traición y por eso lo tienen en la mira. Aquel digimon tenía sus propios subordinados, todos digimon hábiles en ciertos aspectos de batalla, a pesar de que no todos estaban a su máximo nivel… todos tenían habilidades dignas de ser consideradas ‘’Mortales’’ además de que, todos al mismo tiempo, adoraban a Eksmon como si fuese una clase de Dios, y lo seguían con la intención de que el gobernara el digimundo y lo hiciera prosperar, al parecer, logré escuchar también, que él odiaba a los humanos, los consideraba una plaga enfermiza para el digimundo y debían ser eliminados en su totalidad.

Al parecer la próxima reunión de subordinados sería mucho mas secreta que la primera, en la Mansión de Myotismon, donde fue camuflada como una fiesta en la que todos podían entrar con la condición de que tuvieran pareja, lo cual incluso me hace sospechar que el numero de subordinados es considerado un ‘’Par’’; como iba diciendo, la segunda reunión se centraría en el Desierto, un lugar no muy poblado por sus climas extremadamente elevados por la tarde y mortalmente bajos en la noche, por supuesto, me había acomodado mi uniforme… pues ahora venía el comienzo de una nueva misión.

Ahora mismo me encontraba sobre los hombros de Antylamon, dirigiéndome a un punto de encuentro donde había acordado con, ¿Quién mas?, mi viejo amigo quien me acompañó en mi antigua misión- ¡Estoy tan ansiosa! Ya quiero poder ver a Scott y a Labramon, ¿Tu que opinas? –mi compañera simplemente asintió levemente- Si, aunque no lo parezca, yo también espero con ansias nuestro encuentro con ambos… realmente quiero volver a ver a mi amigo Labramon de nuevo –no se si eran imaginaciones mías pero puedo jurar que he visto a Antylamon sonreír, algo muy extraño cuando ella se encontraba en esa forma- Por cierto, ¿Llevas todo en la mochila? –yo asentí, pero por si las dudas di un ultimo vistazo, confirmando esto- Si, aquí esta todo, ¡Estamos listas para nuestra misión! –Antylamon pareció aumentar un poco el paso- Ya pude verlos, Scott esta en el punto de encuentro junto con Cerberumon, quien parece que ya nos ha detectado –no me sentía sorprendida, las habilidades de percepción de Cerberumon eran muy elevadas, no por nada era considerado el guardián del Dark Area- ¡Heeey! ¡Cerbermon! ¡Scott! ¡Aquí estamos! –exclamaba saludando a lo lejos.

Cuando Antylamon se acercó lo suficiente hacia nuestros compañeros me dejó en el suelo y volvió a su forma de Lopmon donde corrió inmediatamente a subirse a la cabeza de su amigo y compañero: Cerberumon- ¡Cerberumon, cuanto tiempo! –Lopmon usaba sus orejas de brazos y con ellas abrazaba por completo la cabeza de Cerberumon mientras sus verdaderas manos se encontraban entre los ojos de éste- Jajaja… Lopmon, si que sabes aprovechar tu tamaño –dije de broma, posando mi mirada en Scott y sonriéndole de forma cálida- Pero digo lo mismo que ella, ¡Los extrañábamos mucho! –quería seguir hablando con ellos, pero probablemente los incomodaría un poco o algo así... así que decidí pasar al grano- Por cierto... supongo que desean saber sobre la misión, ¿Verdad?... Ahora les explico con gusto –al decir esto les conté todo, mis hipótesis sobre ‘’Eksmon’’ y el porque de llamarlo así, también sobre sus subordinados y sobre sus ideales y actitudes- Al parecer, en una pirámide no muy lejana a nuestra posición, conocida como la pirámide central, ya que se encuentra en el centro del Desierto y es la mas grande que todas las demás, es donde será la junta de los subordinados de Eksmon… -comencé a rascarme la cabeza un poco, sentía que algo se me olvidaba… pero lo recordé- Ah, cierto, ¿Recuerdas la parte de que a Eksmon odiaba a los humanos? Pues bueno… como esta junta es mas secreta que la anterior, dudo que dejen entrar a humanos… pero no podemos dejarte atrás Scott -Yo tenía mi propio método, pues podía transformarme en digimon fácilmente, pero Scott no podía hacer eso… así que saqué de mi mochila dos pares de auriculares pequeños que no se notaban mucho- con estos auriculares, si se los ponen Cerberumon y tu, podrán escuchar todo lo que el otro escucha… -me volví a colocar mi mochila, y me di unos golpesitos en la cabeza para poder recordar más, realmente odiaba mi mala memoria…- ¡Ah, si! Tambien investigué un poco sobre tu digivice, no se si lo sepas, pero tu digivice al estar conectado con tu digimon, si buscas la opción en el, podrá aparecer una pequeña pantalla digital sobre el en donde te mostrará todo lo que Cerberumon ve, así que de esa forma podrías tambien estar al tanto de lo que le rodea a tu compañero, ¿Qué dices? –suspiré exhausta- Me ha tomado todas estas tres semanas pero… he logrado sacar provecho de ellas, ¿No crees? –reí leve.

Sin duda me reí mucho cuando Lopmon salto sobre mí y me sujeto la cabeza con sus dos largas orejas, era algo gracioso, pero algo más gracioso era que me sujetara la cara con sus dos pequeños bracitos, je, es tierna, si no fuera porque mi saliva tiene propiedades acidas, le daría una gran lamida en la cara para demostrarle que también me alegra verla de nuevo.
Mientras Scott estaba despertando, logre escuchar todo lo que Rena había dicho, y estaba algo preocupado, si Scott no podía entrar entonces no podría darme instrucciones, al menos eso pensé hasta que recordé que nuestras mentes están ligadas, no necesitamos del digivice ni de ningún otro objeto, solo con nuestras mentes podemos estar en contacto desde los puntos más lejanos.

No te preocupes tanto Rena –sujete a Lopmon con mi cola y la subí a mi lomo- estaremos bien sin esos comunicadores ni el digivice, además, no entraremos aun... primero tengo que explorar un poco

Al decir eso, deje a Lopmon en el suelo y comencé a correr, si teníamos que infiltrarnos, tenia que conocer el terreno y todo lo que estuviera a nuestro alrededor, y pese a que había una pequeña tormenta de arena, estaba decidido a correr toda la noche y reconocer toda esta área, tengo que hacerlo, es parte de nuestra misión, ayudar a Rena en todo lo posible, hacer todo lo posible para detener a este “Eskmon”.
A medida que avanzaba, la tormenta parecía empeorar, entones llegue al terreno de la excavación, y pronto logre ver a Mummymon disparándole a un grupo de trabajadores que habían dejado el trabajo para descansar, tsk, ese digimon me está haciendo enojar mucho, y no tolero que den un trato tan injusto a esos digimons, aun si apoyan a Eskmon, deberían respetar sus derechos de vivir.

Tsk… pronto verán un infierno… -dije gruñendo y comenzando a correr a toda velocidad- (no dejare que ese Eskmon se atreva a lastimar a mis amigos)

Apenas dije eso, exhale fuego verde desde todas mis cabezas, estaba decidió a atrapar a Mummymon y hacerlo pagar por esas vidas que acabo sin piedad aun después de fiel servicio, definitivamente lo destruiré.


Es sorprendente, solo dormí 20 minutos y Rena ya había llegado con Lopmon, y desperté a tiempo, porque ella estaba explicando algo, muchas partes a las sabia, eh hecho algunas cosas mientras ella hacia su parte, en fin, dijo que tendríamos problemas para hacerme entrar, ya que ese tal Eskmon como Rena le llamaba, odiaba a todos los humanos y por tanto esta reunión suya será más secreta, y por lo tanto, con mayor nivel de seguridad, también menciono algo de mi digivice, algo totalmente inútil a mi parecer.
Al parecer la función de mi digivice era poder abrir una pequeña ventana por la que podría ver todo lo que Cerberusmon ve, je, como si no hiciera eso ya, pero supongo que Rena no lo sabe asique habrá que mantenerla al tanto de la situación, por lo que me levante y me dispuse a explicar todo lo posible.

Rena… esa función de mi digivice es total y completamente inútil –dije estirándome mientras que le daba la mano- veras… mi energía demoniaca esta dentro de Cerberusmon, y puedo ver a través de esa energía, por lo que ya puedo ver lo que Cerberusmon está viendo ahora mismo –di un pequeño suspiro y le di un abrazo- te lo debo por vendarme el brazo aun cuando me quite la venda apenas te fuiste de mi casa –al decir eso me di vuelta rápidamente- y es verdad, aprovechaste muy bien estas 3 semanas

Al decir eso me quite la bufanda y mis guantes especiales y estire los brazos, sintiendo el viento helado del desierto, nada como eso, aunque a Rena pareció molestarle el frio, pero se recupero rápidamente cuando el viento dejo de soplar, que extraño, pero bueno, seguramente es mas de ambientes cálidos.
Finalmente después de un largo rato, Cerberusmon volvió de su exploración, y parecía un tanto cansado, debió correr mucho por lo que lo primero que hiso fue volver a ser Labramon y después se recostó junto a Lopmon, je, son buenos amigos para conocerse desde hace tan poco.

Oye Rena… creo saber quien es uno de los lacayos de Eskmon… -la observe fijamente- creo que es un Mummymon… uno que me observo de forma rara e incluso se disculpo por detener a cerberusmon

Me sentía muy halagada con el simple hecho de que tanto a Cerberumon como a Scott les hubiese parecido bien mi investigación, sin embargo, me sentí algo mal cuando ambos a su manera me rechazaron la idea del digivice y de los auriculares que, bueno, había tenido que tomar ‘’prestados’’ de una de las salas de maquinaria- Hmm.. espero no meterme en problemas… sería como meterme en problemas en vano, Tsk… -suspiré, no había que hacer, tampoco iba a obligarlos a usar algo ‘’completamente innecesario e inútil’’ como lo hizo saber Scott.

Con algo de desanimo guardé de nuevo aquellos artefactos en la mochila y me volví a colocarla mientras Cerberumon desaparecía de mi vista- ¿No quisiste acompañarlo, Lopmon? –ella sonrió y negó levemente con la cabeza- No, tranquila, éste era un trabajo que Cerberumon quiso tomar solo, el que hubiese ido con él seguro le hubiese molestado o algo parecido.. –dicho esto se subió sobre mi cabeza- Ademas, estoy bien aquí con ustedes, me mareo rápido.. –dijo en referencia a la enorme velocidad de Cerberumon, algo extraño ya que… ella ya se ha montado sobre mi lomo cuando me vuelvo Kyubimon y mi velocidad es similar a la de él, pero bueno, tampoco voy a estar preguntando datos innecesarios o que le pueden parecer incomodos a mi compañera.

Me parecía bastante conveniente eso de la ‘’energía demoniaca’’ que había mencionado Scott, aunque dudo mucho que haya muchos datos sobre esos en la red del Chaos Empire, me gustaría investigar igual sobre eso mas a fondo… y saber si en algún momento pueda servirnos de algo en nuestras próximas misiones, claro, con el permiso de Scott… a mi me agrada mucho la idea de usar todas nuestras habilidades en nuestro beneficio para poder atrapar al maloso Eksmon pero… a lo mejor el usar ese lado suyo podría incomodarlo, por lo que creo que es mejor guardar ese dato un poco mas de tiempo hasta que en verdad se necesite. Me mostré sorprendida después de sentir como tan sorpresivamente Scott me brindaba un cálido abrazo, mencionando la vez en la que le intenté curar su brazo envolviéndolo en un paño de cortina de la Mansión de Myotismon, realmente hubiese preferido no saber el dato de ‘’me lo quité después de llegar a la base’’ pero bueno… que se le puede hacer, heh… solo le respondí de la misma forma pero igualmente lo solté después para que no se incomodara demasiado, mirándole con una leve y cálida sonrisa.

Poco después Lopmon pareció levantar sus orejas con curiosidad mirando a lo lejos, y exclamó- ¡Veo a Cerberumon a lo lejos! –esperaba con ansias escuchar su análisis después de haber ‘’explorado’’ el lugar como el había dicho. Se veía cansado, pues apenas llegó volvió a su etapa Rookie completamente exhausto- ¿Estas bien, Labramon? –me agaché para poder sentir su respirar al colocar mi mano frente a su nariz, se sentía algo alterada, pero eso significaba cansancio…- Tienes sed, ¿No? –de la mochila que cargaba llevaba varias cantimploras de agua, pues a pesar de que yo puedo soportar fácilmente este tipo de temperaturas altas sin problema, suelo tener sed muy a menudo… y también sabía que, tal vez en algún momento, mis amigos igual tendrían. Claro, que llevaba un ‘’vaso’’ especial para Labramon, que al carecer de manos, ese ‘’vaso’’ era en realidad un pequeño plato hondo perfecto para servir un buen sorbo de agua que refrescaría lo suficiente a Labramon después de todo ese recorrido- Sin miedo, toma todo lo que quieras –le dije después de servirle agua en aquel vaso.

Después, presté atención a Scott mientras guardaba la cantimplora y prestaba atención a sus palabras; al parecer, Cerberumon se había encontrado a un Mummymon que antes ya había sido visto por ambos y el, posiblemente, era uno de los subordinados a cargo en esta expedición… subordinados a cargo…- Oh, ahora que lo dices, creo que yo he visto a alguien con una actitud igual mientras venía para acá, verás estábamos Antylamon y yo……


- Ahhh… que aburrido… Antylamon, ¿Cuánto tardarémos en llegar? –ella no detenía su paso, ni dejaba de mirar hacia al frente- No estoy segura, Hime-sama, no llevamos mucho desde que llegamos al Desierto, y recuerda que el punto de reunión esta casi cerca del centro de toda esta gran área –suspiré, dejándome recostar sobre su cabeza completamente decaída- Ah… pero vamos… ¿Por qué tuve que decirle que justo en medio del desierto?... y con este calor… hace que sea mucho mas aburrido esperar… -Antylamon cerró sus ojos y suspiró- Disculpe de nuevo Hime-sama, me gustaría poder acelerar el paso, pero como la arena es demasiado inestable habría peligro de que resbalara y, más que por mi, me aterraría que a usted le sucediera algo… -la miré algo frustrada- Bah… pero Kyubimon no tiene ese problema de la arena, ¿Por qué no mejor dejás que yo te lleve y vamos a un paso mas rápido? –ella se negó una y otra vez- Lo siento por desafiarle Hime-sama, pero no estoy dispuesta a ser atendida tantas veces por usted mientras yo me siento a descansar, eso no sería propio de una sirviente como yo –la miré algo furiosa- ¡Pero ya te he dicho que no eres mi sirviente, eres mi amiga!... Tsk… bueno, haz lo que quieras… -hice un obvio puchero sintiendo como mi compañera bajaba la mirada algo triste por mi reacción, lo que me hizo sentir algo de tristeza- Ya… no te pongas así, que sabes que no puedo ver tu comúnmente seria carita triste… -le comencé a dar unos cuantos golpesitos leves en la cabeza para que espabilara, lo que hizo que volviera a subir la mirada hacia al frente, algo que según yo, mostraba su nuevamente subido ánimo- Eres muy rara amiga, enserio… -comencé a reírme en mis adentros pero me volví a recargar, escuchando un sonido que hizo que mi atención se viera reflejada en eso- ¿Hm? ¿Escuchaste eso Antylamon?

Mi compañera detuvo su caminar y levantó sus orejas un poco, pero sin llegar a incomodarme o tumbarme- Si… provienen de muy cerca, puedo escucharlo… -cerró sus ojos concentrándose mejor en el sonido- ¿Y sabes de que trata? –ella permaneció en silencio, hasta que de pronto abrió sus ojos- Son disparos –respondió en seco, mi mirada que antes mostraba curiosa se volvió seria y le di unas leves palmadas a la cabeza a mi compañera- Scott esperara, andando –ella asintió- Como ordene, Hime-sama –ella sabía que ahora mi petición no era solo un capricho, así que aceleró su caminar hasta parecer incluso que estaba corriendo, yo me sostenía con fuerza de sus orejas pero sin llegar a lastimarla en ningún momento.

Ambas sabíamos que habíamos llegado, justo cuando al detenernos vimos como un digimon con apariencia de un.. ¿Centauro? Algo así, era como un androide con apariencia de centauro militar, llevaba consigo como 2 o 4 metralletas y se encontraba apuntándole a varios digimon que no podían hacer mas que temblar asustados- ¡Todos en orden! Todos en orden o… ¡No duraré en disparar de nuevo! –dijo con seriedad, yo afilé mi mirada mostrando el disgusto de mi parte a su actitud tan estirada- Antylamon bájame –ella no sabía si hacerme caso o no, pues seguro sabía que era capaz de iniciar una discusión con alguien como el, pero tampoco iba a negarse a una petición mía que en verdad iba enserio. Antylamon me bajó y yo me dirigí hacia él- ¡Oye, tu! –el volteó su mirada y me miró, apuntándome sin dudarlo- ¡ALTO AHÍ, HUMANO! –escuché como cargaba sus balas así que tuve que detenerme- ¡O..Oye, tranquilo! No pienso detener lo que haces o algo por el estilo… -mi apariencia seria se había ido por completo, colocando mis manos detrás de mi espalda y haciendo como si silbara- ¿¡Entonces!? ¿Por qué me detienes? –le miré desafiante- Yo… vengo… ¡A RETARLO A UN DUELO! –el se quedó mirándome extrañado, pero agitó un poco su cabeza para espabilar- ¡Vamos, vamos, no estés bromeando! Odio las bromas… -ladeé la cabeza- ¿Eh? Pero si no estoy bromeando en lo absoluto… vengo a retarlo a un duelo que existe en mi mundo, en mi dimensión… si me deja acercarme se lo enseñaré –el se lo pensó un momento, fijándose a mis lados- Tu no tienes ningún digimon camarada… ¿Verdad? –yo negué- Nop, ni uno solo, así que… ¿Me dejarás enseñarte? ¿o es que le temes a una niñita como yo? –comencé a reírme, los digimon que antes temblaban y que se encontraban detrás de el tambien se rieron, pero detuvieron su risa al momento en que este digimon les apuntó con sus metrallas- ¡A CALLAR! Grrrrr.. –volteó a verme- Esta bien, dejaré que me enseñes, vamos, no me hagas perder el tiempo y acerca de una vez.


- Después de que me dejó acercarme lo reté a un juego de piedra, papel o tijera, obviamente gane porque estaba segura de que el elegiría solamente a la piedra puesto que es la mas ‘’poderosa’’, pero mientras le distraía Antylamon se llevó a los digimon lejos para que no corrieran ningún peligro –comencé a reírme en alto- ¡¿No soy una genio?! Apenas ellos se fueron yo me rendí y me alejé alabándole por su increíble intelecto, habilidad, blah blah blah… ¡Pero el tonto no se la vio venir! –por ese tipo de juegos de niños, alguien como yo, se siente muy muy orgullosa- Probablemente ese androide raro sea otro subordinado, pero en realidad no sé, solo es una suposición.

Luego de que Labramon regresara, Rena le dio un “vaso” de agua, y por vaso me refiero a plato para perros, je, quería reírme pero seguramente mi aura explotaría asique era más seguro quedarme callado, pero sin duda era gracioso, además verlo beber como si fuera un perro, eso era aun más genial, lástima que corrió mucho, pero bueno.
Luego de que Rena escuchara mi teoría de Mummymon, ella me dijo que vio a alguien similar, una especie de centauro mecánico, que extraño, ¿existirá algún digimon así?, como sea, al parecer si, y Rena lo engaño con facilidad en el antiguo juego “piedra, papel o tijeras”. Je, ahora si tenía que reírme, ¡¿Cómo alguien puede ser tan ingenuo para caer un truco tan viejo?! Realmente las ganas estaban ganándome, en serio quería reír pero, no quiero incomodar a nadie.

Pfs… tsk… jeje… dios… (¡No te rías! ¡No te rías! ¡No te rías con el demonio de Lucifer!) –me repetía mentalmente mientras me tapaba la boca con las manos- (¡NO TE RIAS!)
¿Ah?, ¿te sientes bien Scott? –Me pregunto Labramon confundido al ver la expresión en mi rostro- ¿quieres que te traiga alguna medicina?... ¿y por qué te cubres la boca?
Haaa… (no puedo… mas… tengo que… soltarlo y… respirar) –me destape la boca y comencé a reírme como loco mientras mi aura oscura escapaba en grandes cantidades marchitando la palmera en donde me encontraba recostado- ¡JAJAJA! ¡DIOS! ¡EN SERIO HAY QUE SER TONTO PARA CAER EN EL TRUCO DEL PIEDRA, PAPEL O TIJERAS! ¡ERES TODA UNA GENIO RENA! ¡JAJAJA!
Wow… mejor aléjense un poco chicas –Labramon cargo a Lopmon en su espalda y la alejo un poco, el sabia que tan peligrosa es mi aura oscura en este estado- créanme… no quieren que su energía demoniaca las toque estando en ese estado de inestabilidad

Al decir eso, me calme poco a poco, realmente estaba comenzando a pasarme del límite, entonces detuve mi aura completamente y sin decir nada me recosté bajo la palmera ahora seca, después les desee a todos buenas noches y me tape, realmente no tengo ganas de que hablen de mi aura oscura ni de mi energía demoniaca ni nada de eso, no me incomoda, pero cuanto menos sepan mejor para mí.
Luego de recostarme, Labramon se quedo dormido abrazando a Lopmon, Rena no parecía tener ganas de dormir, seguramente porque aun no había dormido, entonces solo comencé a moverme de lado a lado intentando mecerme o algo, y lo único que logre fue que un coco me callera en la cabeza, tsk, no puedo hacer nada bien, ni siquiera dormir.


Primera hora de la mañana, despierto con energías suficientes para acabar con un buen grupo de digimons, ¿y qué encuentro?, a mi mismo apunto de abrazar a Rena dormido, en serio, creo que el universo está en mi contra, aunque juro que me quede dormido junto a la palmera, ¿Cómo llegue ahí?, bueno, sea como sea, Rena no lo sabe asique solo me hare el que se levanto temprano.

Oigan, despierten todos, ya es de dia, hay que movernos mientras el sol no nos derrita las caras –dije observando como todos se despertaban poco a poco- vamos, apresurense

Era cierto que yo misma pensaba que esa broma que había hecho era realmente graciosa, aunque no se compara a otras que he hecho, debo admitir que si me he lucido con el simple hecho de que alguien de la magnitud de ese digimon haya caído en una trampa tan pero tan ingenua e insignificante ¡Ja! Soy una completa genio, pero, lo que no me esperaba ante esta ‘’historia’’ era la reacción de Scott, quien después de escuchar esto parece que comenzó a toser o incluso a murmurar algo que no alcanzaba a escuchar bien- ¿Eh?.. ¿Te encuentras bien, Scott? –ladeé la cabeza, yo no era la única preocupada, Labramon tambien le preguntaba lo mismo… algo me dijo que lo mejor era mantenerme lejos, igual que Lopmon que se veía bastante seria ante el asunto- Hime-sama, tenga cuidado… -dijo mi compañera, yo no entendía el porque… al menos no hasta el momento en que vi como Scott comenzaba a reírse como un completo maniaco, desatando detrás de el varias ondas de energía oscura que, con solo tocar la palmera mas cercana, esta se vio marchitada por el intenso poder negativo- D…Dios… eso es… -me cubrí con mis brazos para poder protegerme un poco por las ondas de energía que el aura desataba tan frenéticamente. Labramon salió corriendo advirtiéndonos y sin dudarlo tomó a Lopmon y se la llevó a la espalda con tal de alejarla de Scott- ¡E…Espera! Hime-sama…! –a pesar de que esa energía no alcanzaba a tocarme, el simple hecho de que estuviese ejerciendo ese poder me afectaba un poco…- ¡Scott, por favor, contrólate!... –grité sin dejar de cubrirme.

Poco después de tanto escandalo, Scott pareció darse cuenta de esto deteniéndose al momento, y sin mas que hacer o decir se recostó en la antigua viva palmera que ahora solo mostraba sus hojas grisáceas y tristes- Ugh… -me dejé caer al suelo algo agitada, mi estado se estaba volviendo a componer- ¿Se encuentra bien, Hime-sama? –yo solo asentí levemente, limpiando el sudor de mi frente de una sola pasada de mano- Si, solo ha sido la presión, pero la energía no logró alcanzarme por suerte... –sonreí tranquila, y volteé a ver a Scott quien parecía estar algo molesto ¿Por qué habrá sido? Pareciera como si le hubiese caído un coco en la cabeza o algo así…- Ya ha oscurecido, Lopmon, Labramon, será mejor que vayan a dormir ya –les dije, mostrando una cálida sonrisa en mi rostro, a lo que mi compañera respondió- ¿Usted tambien dormirá, Hime-sama? –yo asentí leve- Si… pero no ahora, aun tengo algo que hacer, mas no me iré de aquí… así que puedes dormir segura –ella se mostró aliviada ante mis palabras y aceptó sin discutirlo ni un poco, yéndose con Labramon para dormir juntos como los buenos amigos que eran.

No pude evitar esbozar una sonrisa en cuanto los vi dormidos, incluso debo admitir que tenía algo de sueño, pero no le hice mucho caso a eso… y proseguí a lo que iba a hacer: Me senté sobre una roca de un tamaño más o menos mediano y con una vara de madera que había cerca comencé a trazar algunos planos bastante sencillos, pues nunca se me ha dado la habilidad de dibujar bien, pero bueno… supongo que puedo entender mis propios garabatos- ¿Qué estás haciendo? –escuché mi propia voz resonar dentro de mi cabeza, aunque sé que se trataba de mi otro yo, quien apareció a un lado de mi observando lo que hacía como si se tratara de una ilusión o imaginación mía, un producto de mi mente- ¿Qué no ves? Estoy haciendo unos planos de la pirámide central –ella se quedó viendo con una expresión bastante aburrida, incluso bostezó un poco- Que aburrido… Tu y tus planes siempre me aburren… ¿Por qué te molestas en hacer todo esto si ni siquiera sabes si van a funcionar? Lo mejor es siempre ir y atacar al mas fuerte, asesinarlo e ir por los mas débiles… -yo me reí un poco por las palabras de mi contraparte, pero dejé que opinara lo que quisiera- ¿No crees que eso es demasiado impulsivo? Lo mejor es siempre estar preparado para lo que nos espera, eso es lo mas entretenido de hacer planes –mientras decía esto, terminaba de trazar lo que dibujaba en la arena- ¡Listo! –ella ladeó la cabeza, intentando hallar forma a lo que había garabateado- ¿Pero que cosa amorfa es eso?... –No podía creer que incluso alguien de mi subconsciente opinara así de mis dibujos, Ku…- ¡Es la pirámide central…! Ahora observa…

Comencé a explicarle a mi contraparte en que consistía la pirámide central, le señalé lo que eran la puerta central, puertas laterales y trasera; antes de venir aquí ya había investigado esto pero no me había detenido a hacer un plan. La puerta central es la única donde se admitiría la entrada y, por lo tanto, habrían guardias; en cambio las otras no solo están cerradas, si no que hay un 80% de probabilidades que tengan trampas ocultas que pueden ser mortales para cualquiera, como cualquier pirámide ancestral como lo era esta, tiene trampas que servían para hacerles la vida imposible a los ladrones que eran capaces de atreverse a juzgar la mano del Dios que brindaba protección a dicha pirámide- Esta explicación es casi igual de aburrida que tu plan –opinó de mal gusto mi otro yo, a lo que yo suspiré- Entonces déjame hacer mi trabajo sola –ella rió un poco y me empujó, haciendo que ahora hubiera una ilusión de mi a un lado de mi cuerpo y ella tuviera el control de éste- Solo mira, te explicaré como sería mas sencillo todo… -con la varita hizo un circulo en la entrada principal- Nos camuflamos de entre todos los digimon que van a estar ahí haciendo fila para entrar, y luego…! –no la dejé terminar, pues la empujé haciendo que me devolviera mi cuerpo y ella cayera como ilusión a un lado de mi- ¡Oye…! –le chité para que se callara, y me quedé pensando un momento- …¡Lo tengo! ¡Rena, eres toda una genio! –ella alzó la ceja confundida- ¿Lo soy? –asentí emocionada, esa simple frase que había dicho fue suficiente para que se me ocurriera el plan que iba a efectuar- Ahora solo hay que esperar a que ellos se despierten para que pueda contarles el… -me estiré y bostecé- …plan… -ella rió en sus adentros y me dio un par de palmadas en la espalda- Aun queda mucha noche, vete a dormir que si sigues despierta significa que yo tambien lo estaré, y quiero dormir –reí un poco en mis adentros, y asentí ante su comentario, alejándome de la roca y dejando la vara en el suelo- Supongo que lo haré… mañana les contaré a Scott y a todos el plan, pero ahora… -bostecé de nuevo, y no solo eso, si no que sentí un terrible escalofrío recorrer mi espalda, producto de que la temperatura ya estaba bajando mucho- Tsk… esto es lo que odio del Desierto… -me dirigí hacia donde todos estaban dormidos; sonreí con ternura al ver a Lopmon y Labramon dormidos juntos, Lopmon llevaba cubierta su cara con una de sus orejas y le cubría parte de la cara igual a Labramon con su otra oreja, tenía ganas incluso de tomarles una foto.

Me acerqué hacia la palmera donde Scott estaba dormido, use la roca de hace unos momentos para poder subir y alcanzar algunas ramas de la palmera seca, y use estas para armar una fogata haciendo usa de la vara de madera de hace unos instantes- Listo, así no tendré que morir de frío por esta noche… -bostecé nuevamente, mis ojos ya se notaban caídos por el sueño; y tomando otros pares de hojas secas de la palmera las usé de cobertor para poder dormir a gusto- Buenas noches a todos… -murmuré.


Sé que podía haber dormido mas, si no fuese porque resonó en mis oídos la voz de Scott ordenandonos a todos que despertaramos. No quería levantarme, pero no tenía otra opción… hoy iba a ser el día en que comenzaríamos el plan que… ¡Ah, cierto, ayer armé un plan antes de irme a dormir! Por supuesto, debía contárselos a todos. Esta idea me dio los animos para levantarme sin quejarme- Buenos días! –exclamé poco después de despertar, haciendo las hojas de palmera a un lado y sorprendiéndome un poco al ver la fogata aun encendida, a decir verdad, pensé que se apagaría en algún momento, no sé por qué- Buenos días… -bostezó mi compañera, quien aun no se recuperaba del sueño- Oh vamos, tu dormiste antes que yo, no puedo creer que te levantes con tan pocos ánimos… ¡Arriba! –se sorprendió un poco por mis palabras, pero por su naturaleza ‘’hacer todo lo que Rena dice’’ exclamó igual- ¡Buenos días! –debo admitir que a veces daba algo de gracia esa actitud suya, aunque no siempre me agrade mucho, la acepto- Tengo un hambre voraz, ¿Qué desayunaremos hoy? –comenté inocentemente, ciertamente no pensé en ese momento en que lugar nos encontrábamos…

Realmente no tenía ganas de levantarme, no sé por qué, bueno, al menos me levante, si no, habría pasado por el momento más incomodo de toda mi vida, ni siquiera sé como considerar a Rena aun, asique abrazarla como lo hubiera hecho de no darme cuenta, habría sido realmente incomodo, no solo para mí, sino que también para ella, claramente es agradable y tierna a su manera, pero un abrazo dormido habría sido pasar una raya que quiero mantener estable, igual que mi aura.
Luego de un momento todos estaban levantados, Labramon tenía sus orejas sobre los ojos, aparentemente le cuesta mucho despertar por las mañanas y eso es realmente cierto, eh tenido que esperar horas y horas para que se levante siquiera a medio día. Después de que se levantara Rena, se levanto Lopmon, quien con solo escuchar a su amiga, cambio su actitud de “quiero quedarme acostada todo el día” a una actitud de “¡si señora!”, fue gracioso en cierto modo. En fin, después de eso, Rena dijo que tenía hambre, y que era un hambre voraz, la verdad no me preocupaba tanto la comida, Labramon y yo trajimos provisiones para un mes, realmente quería traer para una semana pero era mejor ser precavidos.

Tranquila Rena, traje bastante comida para esta misión –saque una bolsa llena de comida al decir eso y la apoye sobre una piedra- lo mejor es que es una bolsa térmica que mantiene la temperatura de la comida perfecta
Je… es genial tener… una bolsa… como esa –dijo Labramon estirándose mientras caía al piso- despiértenme… cuando tengamos que… trabajar –al decir eso bostezo enseñando los colmillos y después agarro a Lopmon y la abrazo mientras comenzaba a roncar-
Je, ten cuidado Lopmon, en este estado podría darte una lamida lo bastante grande para usar como baño –al decir eso serví un poco de comida en un plato algo viejo pero útil- toma Rena, lo necesitaras para quitarte ese hambre

Realmente no soy de ofrecer mi comida, para mí, la comida es lo más importante del mundo, y no la comparto con nadie más que con Labramon y mis jefes, aunque Rena no es mi “Jefa” ahora, ahora es mi… amiga… si, es mi amiga ahora, y debo compartir mis cosas, aunque no puedo exagerar, esto de tener amigos es realmente extraño… es la primera vez que siento que puedo confiar en alguien sin que este me traicione queriendo usar mi poder.


Hemos estado recorriendo el desierto buscando la parte principal de la excavación, realmente es difícil correr sin que los trabajadores te vean, además los Andromons y los Airdramons son más difíciles de burlar, realmente, como vuelan pueden ver mejor a un punto negro corriendo a la velocidad del viento y a una coneja gigante con ropa de combate.
En fin, antes de partir, Rena dijo que había hecho un buen plan para infiltrarnos o algo así, realmente teníamos prisa y tuvimos que salir antes de que pudiera contárnoslo, pero ahora que estamos en movimiento, seria mas difícil que nos escucharan, asique será mejor escuchar el plan ahora y esperar que resulte.

¡Oye Rena! ¡¿Cuál era el plan que mencionaste en el punto de reunión?! –le grite para que pudiera escucharme, aunque estuviéramos junto a Antylamon, el ruido del viento interfería-
¡Oye Antylamon! ¡¿En serio crees que podremos infiltrarnos tan fácil?! ¡Esos digimons pueden ser tontos pero no creo que sea para tanto! –Le grito Cerberusmon a su amiga, seguramente intentando saciar sus dudas sobre los enemigos-

Pocos segundos de haber dicho lo que dije fue cuando me di cuenta de que había dicho algo tonto, en mi opinión, ¿A quien se le ocurre decir eso en una misión en el desierto?- Es imposible que halla comida deliciosa en el des… Espera, ¿Qué? –vaya, al parecer mi grandiosa mente no se había detenido a pensar que tal vez, solo tal vez, Scott no se hubiese olvidado de traer un poco de comida a la misión, Duh…- ¡Wow, que eficaz! –me senté cerca de el observando lo que sacaba de la bolsa, ríendo un poco por la actitud que Labramon había tomado y por el hecho de que halla vuelto a usar a Lopmon como una clase de peluche para dormir- L…Labramon… me asfixias… -se quejaba mi compañera que intentaba zafarse un poco del ‘’abrazo’’ de su amigo, pero no le parecía ir muy bien con eso. Yo, en todo caso, me quedé en trance por el delicioso aroma que emitía la comida, esperando con tranquilidad a que Scott terminara de desenvolver todo- Si que estas preparado, aunque creo que es normal considerando que eres un mercenario cuya ocupación son las misiones, ¿No es así? –a decir verdad no esperaba respuesta alguna suya, pues después de todo no era una pregunta oficial, si no un comentario de lo que mi mente figuraba, pero claro, el podía poner alguna objeción en cualquier momento.

Sin pensármelo mucho comencé a comer de lo que Scott me había servido, que era una ración de arroz, un poco de pollo, verduras y carne… una buena comida que me puede dar las energías suficientes para durar toda la mañana e incluso toda la tarde… ¡Pero en la noche quiero más!- Esta comida sabe muy bien a pesar de estar guardada en refrigeración… ¿Scott lo habrá preparado? Quizá deba preguntarle después –no tardé mucho en terminar mi alimento. Apenas había acabado Lopmon logró zafarse del abrazo de su amigo y pude darle un poco de ésta comida para que ella tambien tuviera las energías necesarias para la misión que íbamos a efectuar en un par de minutos- Bien, por aquí ya estamos listas, ¡Andando!

Unos minutos después ya nos encontrábamos rumbo a la pirámide central, a pesar de que nuestro punto de reunión no estaba tan lejos de ella, ciertamente es que llevábamos ya kilómetros recorriendo y aun no llegábamos al paradero de esa dichosa pirámide. Scott gritó algo, pero no logré escucharlo bien del todo por la altitud, puesto que ahora mismo me encontraba sobre Antylamon quien corría a un paso muy similar a la asombrosa velocidad de Cerberumon, esta era la velocidad de los Ultimate, o al menos de los Ultimate mas rapidos- ¡Lo siento Scott, no puedo escucharte bien!, ¿que dices? –le grité como respuesta, por lo que al repetirlo de nuevo ya había logrado entender la palabra clave ''plan’’ no sabía como era que el sabía de esto, tal vez logró escuchar un poco de mis palabras cuando me había ido a idearlo y el se encontraba a punto de dormir- Tranquilo Cerberumon, tu no detengas el paso, ahora mismo yo me detendré pero hagas lo que hagas no te detengas y lleva a Scott hacia la pirámide, los alcanzaremos dentro de poco –al parecer Antylamon ya sabía mi próxima orden, no por nada es mi aliada, si que conoce mis ideas tan ocurrentes- Me impresionas Antylamon, debo admitirlo, eres la mejor aliada que pude haber tenido –le brinde una calida sonrisa, ella solo rió leve- Me alegra escuchar eso de sus propias palabras, Hime-sama, entonces… ¿Lo hacemos? –ella detuvo su correr hasta detenerse completamente, yo solo sonreí de lado y asentí- Claro, ¡Maniobra A! –Antylamon me tomó y miró hacia el cielo, viendo a los Andromon montados sobre los Airdramon, entrecerrando sus ojos con intención de mejorar su puntería- ¿Está lista?... ¡Allá va! –con ágil movimiento, Antylamon me lanzó por los aires en dirección hacia el Airdramon- ¡DigiSpirit, digivolves a…! –mediante a un perfil diferente, se podía ver como si Antylamon hubiese lanzado una esfera de datos luminosa que se evaporó hasta dejar a la vista a una chica zorro de pelaje dorado- ¡Voy por ti, Andromon! –el Andromon ni siquiera se inmuto y con solo estirar su brazo logró atraparme agarrándome del cuello- Tsk… -la fuerza que usaba había hecho que mi cuerpo se inmovilizara por completo, pues ni siquiera podía lanzar una patada para defenderme- Admito que tu entrada ha sido muy linda y llamativa, pero a la vez ha sido muy impulsiva… -dijo Andromon que como todo digimon maquina se concentró en analizar mis acciones, heh… buen digimon, debo admitirlo- Cae –me soltó y dejó caer- Ugh… ese apretón había sido innecesario, pero… hizo precisamente lo que quería que hiciera –sonreí e hice un rápido movimiento de manos, una especie de pose o movimiento- ¡Kohenkyo! –mi cuerpo se desvaneció por el aire, cambiando mi posición con la de Andromon- ¿¡EH!? –si, precisamente, ahora el era quien se encontraba cayendo y yo sobre el Airdramon- Grrrr… no había detenidome a analizar tus ataques… pero no moriré sin antes luchar ¡Gatling Missile! –de las compuertas de su pecho lanzó dos misiles que fueron dirigidos justo hacia mi posición- Eso era otra cosa que esperaba que hicieses –sonreí de lado, y salté del Airdramon que no dejaba de revolotear para intentar tumbarme, sin siquiera tener la oportunidad de sorprenderse al ser alcanzado por el ataque de su antiguo domador, explotando en miles de datos- …Me da una lastima tener que ver digimon morir de esa forma… pero no puedo verme sentimental en estos momentos de la batalla… -volteé a ver hacia Andromon, quien estaba justamente siendo cortado a la mitad por las hachas de Antylamon sin oportunidad de defenderse o hacer algo, el tambien había caído- Maniobra A efectuada con éxito.. –me dejé caer cerrando mis ojos, sintiendo como mi cuerpo se recostaba sobre algo, la palma de mi compañera- Veo que logramos detener a dos espías con la Maniobra A, pero aun quedan mas a unos kilómetros persiguiéndonos -comento mi compañera que igual analizaba la situación- Andromon es un robot, seguro tiene la capacidad de comunicarse con sus compañeros y seguro lo hizo antes de morir, así que no podemos arriesgarnos a ir con ellos y efectuar la misma maniobra, mejor volvamos con Scott -dije volviendo a mi forma humana y colocándome sobre la cabeza de Antylamon- Como usted ordene, Hime-sama… entonces, andando –dicho esto volvió a iniciar su rápido correr, intentando alcanzar a Cerberumon y Scott.

Rena aparentemente no me escucho, seguramente era demasiado viento y a la velocidad que íbamos escucharnos entre seria una tarea imposible, y no estábamos dispuestos a detenernos aun, teníamos que llegar a esa pirámide antes de que comenzara la reunión, y teníamos hasta el anochecer, asique era cuestión de darse prisa.
En un momento pude escuchar a Antylamon decir algo de que siguiéramos, realmente no entendí del todo, pero seguramente Cerberusmon si, y parece que entendió a la perfección por que cuando Antylamon comenzó a detenerse, Cerberusmon siguió corriendo como si nada. Me di vuelta preocupado por lo que Antylamon y Rena pudieran hacer, y realmente tenía razón al preocuparme, ya que vi como uno de los exploradores Airdramon y Andromon eran derribados por un objeto amarillo, Rena con su digispirit.
Realmente me pareció una tontería que Rena se decidiera a eliminar a un explorador, además como Andromon es un digimon androide, seguramente ya debió advertirles a sus amigos, por lo que esto complica, las cosas, pero eso lo hace más divertido, después de todo, ¿Qué misión es divertida sin algunas complicaciones?, yo me respondo, ninguna, asique es momento de usar la fuerza para avanzar.

¡Cerberusmon! ¡Adelante, es hora de abrirnos paso! –Grite generando una gran aura que poco a poco era absorbida por Cerberusmon- ¡Styx Killer ahora!
¡Entendido! –Grito mi compañero acelerando la velocidad y preparando sus garras- je… Rena y Antylamon saben de los Andromons y Airdramons en el cielo… pero seguro no les dijiste de los Dokugumons ni de los Datamons, ¿verdad?
Je… una cosa es ayudarlas en la misión y otra es divertirnos un poco –dije riéndome un poco- seguro se enojaran pero bueno, si ellas derriban Andromons y Airdramons, nosotros podemos divertirnos

Luego de un momento, logramos ver a unos cuantos Datamons montados en los tórax de algunos Dokugumons, je, no sabían que nos acercábamos, no hasta que esas grandes arañas sintieron nuestros pasos y se dieron vuelta, aunque no fue por mucho, lo primero que hicimos Cerberusmon y yo fue cortar a los Datamons en pedacitos minúsculos, al menos separando sus cerebros de sus cuerpos mecánicos.
Realmente no me preocupa tanto hacer esto, seguro que a Rena tampoco le molesta, seguro se apresura a evitar que la alcancen los refuerzos, yo debería hacer lo mismo, si no fuera porque ya tengo un blanco localizado, una pirámide especial que hacía tiempo que no veía, antes, Labramon y yo solíamos entrenar allí porque esa pirámide estaba conectada a todas las que estaban a su alrededor, y como supuse, a la pirámide que debíamos encontrar e infiltrarnos.
Esperamos un rato a que Antylamon nos alcanzara, y no fue mucho tiempo, 10 minutos mínimo, lo que si se es que ahora podríamos entrar en la pirámide central sin llamar la atención, sin problemas, sin guardias, solo era cuestión de que recordara los caminos, cosa que apenas recuerdo pero recuerdo, después de todo hace tiempo que no entro, pero si estoy seguro que conozco las direcciones que debemos tomar.

¡Rena! ¡Antylamon! ¡Conocemos un camino más seguro hacia la pirámide! ¡Solo tenemos que entrar por aquí! –Dije señalando una entrada algo antigua casi cubierta de arena- escuchen, por aquí hay varias trampas ocultas y demás, pero es más seguro que arriesgarnos a que los digimons maquina nos reconozcan
Je, es verdad, solo cuiden donde pisen y traten de no tocar anda en lo absoluto –dijo Cerberusmon sonriendo como siempre pese a su apariencia- vamos, si entramos ahora y nos apresuramos podríamos llegar antes de que la reunión inicie
Buen punto Cerberusmon, vamos Rena –dije comenzando a caminar junto a Cerberusmon dentro de la entrada a lo que era una tumba subterránea oculta-

- Hime-sama, ¿No cree que lo que hemos hecho halla estado mal? –yo me sorprendí ante las palabras de mi compañera, y la miré confundida- ¿Eh? ¿A que te refieres? –pareció bajar un poco la mirada, realmente le disgustaba darme la contraria, o eso demostraba- …Me refiero a que… Le hemos datos importantes a los Andromon que no hemos destruido, ¿No cree que eso nos será de desventaja?... –yo no pude evitar sonreír de lado con cierta picardía- Precisamente –ella se quedó callada, no parecía comprender- Ahora, los Andromon están buscando a una Renamon y una Antylamon… -me sujeté un poco mejor de Antylamon, pues a la velocidad a la que iba lo mejor era estarse bien sujeta- …y estoy segura de que después de habernos visto hacer eso, Scott querrá divertirse un poco con otros guardias que se encuentre en el camino… así que no solo nos buscaran a nosotras, si no tambien a un Cerberumon acompañado de su Tamer –Antylamon seguía teniendo esa expresión en su rostro que mostraba su confusión, se ve que a pesar de que me conozca muy bien sigue sin comprenderme del todo- …¿Es esto parte de su plan, Hime-sama? –yo le sonreí de forma calmada y le acaricié la cabeza para que no se preocupara- Así es Antylamon, ya lo veras, todo saldrá perfecto en esta misión.

Ella solo asintió y se limitó a seguir el camino- Hime-sama, hay restos de vidrio en el suelo –vaya… no se porque me da la sensación de que Scott pasó por aquí y no se molestó en limpiar todo lo que ensució, esto hará que mi plan siga el pie de la letra; sonreí de lado con eficacia. Unos par de minutos después llegamos hacia donde Scott se encontraba escondido junto con Cerberumon, que era en una de las esquinas que no estaban siendo custodiadas de la pirámide central, tal y como había predicho yo en el mapa que tracé ayer en la noche pero… eso significa que esta era una de la entrada con trampas mortales- ¡Scott, Cerberumon, esperen! –exclamé antes de que ambos pudieran abrir siquiera la puerta- No se les ocurra entrar ahí –Lopmon yacía sobre mi cabeza- Como ustedes han dicho, aquí hay muchas trampas ocultas, no importa cuan poderosos seamos, una trampa de esas podría volver a Cerberumon o a mi en mi etapa Ultimate datos en un pestañar –yo solo asentí a las palabras de mi digimon- Y aunque lograramos evadir de milagro las trampas que se activan en un milisegundo, el simple hecho de que la trampa sea activada hará que todos los presentes se den cuenta de nuestra presencia y vengan corriendo hacia nosotros a detenernos, y a partir de ahí… nuestra misión se verá como fallida –dije seriamente, algo muy difícil viniendo de mi parte, pero no veía este un buen momento para iniciar con mis usuales bromas y actitud depistada- Aunque… recuerdo que mientras veníamos en camino tu nombraste algo sobre un plan, ¿Verdad? ¿Hablabas del mío? –yo creía que si, así que me limité a hablar de el- Pues si, precisamente me la pasé en la noche ideando una manera de poder entrar a la pirámide sin ser vistos por nadie, así que… ¿Te parece si efectuamos mi plan? –les sonreí con tranquilidad, necesitaba que ellos cooperaran si quería que todo saliera perfecto- Ahora mismo, las tropas de Eksmon se centraran en encontrar a una Renamon, una Antylamon, y a un Cerberumon que acompaña a un humano. Yo me encargo de la parte difícil, lo que ustedes pueden hacer es esperar a que les de la señal… -me detuve unos momentos al recordar algo- Ah, si, Scott, tu no podrás entrar con nosotros a la pirámide, pero Cerberumon si… mas no podrá usar esa fase suya, ya que como dije, están buscando a un Cerberumon –dejé a Lopmon en el suelo, pues ella no podía ser vista aún- Ahora iré a efectuar el plan, quédense aquí y esperen mi señal para que vayan a la entrada principal de la pirámide, recuerden… actúen casual –dije mirando a Cerberumon y Lopmon, quienes eran los que si podrían entrar conmigo. Lopmon asintió y después miró a su amigo- Cerberumon, ¿Podrías cambiar de etapa? Así no podrán reconocerte y estaremos todos a salvo –dijo con una tranquila sonrisa mi compañera, intentando convencer a su amigo de que confiara un poco en mi.

Sonreí a las acciones de Lopmon, le dejaría a ella el que Cerberumon y Scott cooperaran con mi plan, pues no se si ellos estén acostumbrados a seguir los planes de alguien ajenos a ellos, pero esperaba que si no fuera asi... esta fuera la primera vez- DigiSpirit… -en un momento a otro, había cambiado mi forma nuevamente a la de Renamon, que caminaba tranquilamente hacia donde se encontraban los guardias en la entrada, quedándome viendo hacia ellos mientras estaba oculta en la pared contraria de la pirámide- Bien… debo calmarme… y seguir con el plan al pie de la letra –cerré mis ojos y suspiré, armándome de valor, seguí hacia delante- ¡Koyousetsu! –lancé varios navajas de luz que había generado, y las dirigí hacia los guardias quienes al recibirlas se dieron la vuelta y me localizaron- ¡Ahí está, es la Renamon que atacó a Andromon y a Airdramon! –miré hacia un lado levemente, sin que mis enemigos se percataran de ello, pues quería observar que Scott y los demás siguieran en su posición y no se movieran, solo de esa forma me sentiría a gusto- Bien… hora de huír –sin pensármelo mucho me di la vuelta y comencé a huir, siendo perseguida por la mayoría de los guardias que se habían detenido a descansar, quedando solo los protectores de la puerta.

En cuanto estaba lo suficientemente lejos para no ser vista fue que efectué mi plan, creando un clon mío con mi habilidad ‘’Kohenkyo’’- Sigue huyendo, en el momento en que me vaya quiero que lances un Koyousetsu hacia el cielo, esa será la señal, Lopmon lo sabe, ¿Estas lista? –mi clon solo asintió y se dio la vuelta, viendo como se acercaban los guardias hacia nosotras- Bien, entonces me voy –dicho esto corrí hacia el lado contrario, apenas me alejé mi clon efectuó mi orden tal y como le había dicho y lanzó un Koyousetsu al cielo que mi Lopmon logró ver con claridad- ¡Esa es la señal! Vamos a la entrada, Rena nos esta esperando ahí –Lopmon intentó correr pero cayó al suelo después de tropezar con sus orejas- Auch… odio la arena… -al estar cerca de la pirámide cambié mi forme hacia mi etapa Rookie: Mikemon, pues no podía arriesgarme yendo como Renamon y no me dejarían entrar como Rena. Es en la entrada donde nos reuniríamos, e intentaríamos entrar como subordinados mas de Eksmon.

Estaba por entrar y asegurar el camino cuando Rena me detuvo, sinceramente escucharla pensar que su idea era mejor, me hiso saber que tenía razón, pero en una parte de mi me sentí algo deprimido, por raro que suene, en serio consideraba más seguro el que usáramos esta ruta alternativa, aun con las trampas, Cerberusmon y yo podríamos haberlas destruido con facilidad, no había riesgos, pero bueno, todo sea por el éxito, no tengo por qué molestarme en pensar tanto, solo soy un mercenario después de todo.
Luego de un rato, Lopmon le pidió a Cerberusmon que cambiara de forma, realmente eso no iba a ocurrir, según el plan de Rena, buscaban a una Renamon y a una Antylamon por un lado, y a un Tamer con su compañero Cerberusmon por el otro, ojala fuera así. Los Datamons de antes, ellos no enviaron información, lo sé, eh tratado con ellos antes y siempre que envían información lanzan a un mensajero, y esta vez no ocurrió, asique dudo que se esperen que aparezca Cerberusmon, pero seguiremos a Rena, después de todo ella es la líder aquí, no yo, ni Cerberusmon, solamente ella es la líder y como tal debo respetarla y hacer todo lo que me diga sin excepción.
Luego de un rato, logre visualizar a Rena y parecía observarnos, aunque estaba muy lejos como para que pudiera verla, por lo que simplemente seguí caminando, después vimos la señal, uno de los ataques de Rena, el “Koyousetsu”, la mejor técnica que puede tener a su disposición. En fin, al ver la señal, Lopmon comenzó a moverse como pudo, incluso dijo que odiaba la arena, realmente teníamos que movernos rápido, asique sencillamente tuvimos que tomar las cosas a nuestra manera, solo así lograríamos llegar antes de que los guardias bloquearan la salida y exigiera alguna especie de entrada o identificación.

No tenemos todo el día –dijo Cerberusmon agarrando a Lopmon del cuello con una pequeña mordida y colocándola en su lomo- Lopmon, sujétate muy fuerte, estoy por acelerar y no detenerme
Bien, los veré dentro, díganle a Rena que tomare la ruta “mortal” –al decir eso acaricie la cabeza de Cerberusmon como si fuera una despedida eterna- tranquilo amigo… llegare bien… soy yo después de todo… soy un demonio
Te creo… solo promete regresar en una pieza… no quiero quedarme sin amigos –al decir eso, Cerberusmon comenzó a correr a una velocidad impresionante mientras Lopmon viajaba en su lomo- (amigo… buena suerte)
… la tendré Cerberusmon… -al decir eso me di la media vuelta y camine hasta la entrada de la tumba- bien… veamos que tienes para mí –entre caminando en la tumba mientras la luz comenzaba a escasear por la profundidad-

Al entrar, unas antorchas se entendieron, una tras otra mientras poco a poco iluminaban todos los pasillos antiguos con arena, jarrones antiguos y rotos, e incluso algunos cadáveres. La verdad lo que me preocupaba era dejar a Cerberusmon solo con Lopmon y Rena, se que ellas son de confianza, pero aun así espero que se encuentre bien, aun cuando puedo ver lo que él ve y podemos comunicarnos mentalmente, no quiero arriesgarme a nada, por ahora, solo puedo concentrarme en lo que podría llamar “prueba de velocidad, reflejos y deseos de vivir”.

Muy bien… no tengo mucho tiempo… asique a correr –apenas dije eso comencé a correr por el pasillo, del cual, se abrió una puerta en el piso, para mi suerte, lento por que estaba oxidada- 1 menos… quedan muchas que desconosco…

No podía creer lo que mis ojos veían, Lopmon venía acompañada de… ¿¡Cerberumon!?- ¿¡Que!?... ¿Por qué diablos?... –me quedé impactada, había sido desobedecida, mi plan se había ido a la basura- Scott… estúpido… -sentía que la furia me consumía, acompañada de una gran cantidad de frustración, pero no podía dejar que esta dominara en un momento tan crítico como el que estaba viviendo, aunque ciertamente el que se halla puesto de desobediente en medio de una misión ha hecho que le vea un punto negro bastante malo en su expediente, y que posiblemente haga que no solo el plan, si no que la misma misión se venga abajo- Consideraré mejor la próxima vez que elija un aliado, puede que sea mejor que no tenga ninguno… -me quedé seria para no emitir ninguna vibra negativa que Cerberumon pueda detectar, así como Scott me ha desobedecido con la parte de Cerberumon estoy casi segua de que tambien me desobedeció en el punto de ‘’quedate aquí’’, si fue así realmente me iba a enojar… pero ahora lo mejor será mantener la calma e intentar que la misión no se venga debajo en picada.

Los miré de arriba abajo para analizarlos, supongo que ya no había más que perder, así que sin dirigirles la mirada solo dije- Andando –pude notar que Lopmon se sentía decaída por mi estado ‘’frío’’ que había adoptado en este momento por el choque de emociones, pero no comentó nada, me alegro de ello… no quería que el plan cayera rápido, pues aún había tiempo de frenar el avión antes de que tocara tierra. Los dos guardias que vigilaban la entrada eran un par de Knightmon que nos detuvieron el paso con sus espadas entre cruzadas- ¡Alto! ¡Identifiquense! –alcé la mirada para poder verlos a la cara- Venimos de muy lejos a unirnos al clan que esta formando el nuevo Dios que nos gobernará –dicho esto me arrodillé- Por favor, dejenos aportar con nuestra fuerza al gran y poderoso nuevo Dios –ambos Knightmon se quedaron mirando los unos a los otros, y después posaron la mirada en Cerberumon y Lopmon- ¿¡Y ustedes!? ¡identifiquense! –abrí los ojos al momento en que se refería a ellos, sabía que Lopmon se pondría nerviosa, y ahora estaba tan furiosa con la pareja que me había seguido que no le iba a permitir hablar a Cerberumon- ¡Ellos..! –llamé la atención de los guardianes, que me voltearon a ver- …Ellos son los compañeros que he estado reuniendo en mi travesía, contándoles de las maravillas que nuestro nuevo Dios planea para todos nosotros, y se han vuelto fieles sirvientes al igual que yo de sus mandatos, ¡Por favor, dejenos entrar a este majestuoso imperio! –volví a cerrar los ojos y a inclinarme, una pose de respeto. Los guardianes se miraron los unos a los otros, y después accedieron haciendo a un lado sus espadas- De acuerdo, pueden pasar –volví a mi compostura normal, y sin voltear a ver a quienes me seguían solo les dije- Vamos… -abriendome paso al enorme pasillo que nos esperaba por delante.

Rena está furiosa, realmente está enojada, puedo sentir su enojo, comparado con el de Scott, el suyo es poco para mi, puedo detectar las vibras negativas mejor que nadie, y Rena expulsa muchas de ellas en este instante, realmente no se que planea Scott, pero algo sabe, nunca lo eh visto desobedecer una orden directa de alguno de sus jefes, no, el siempre cumple, nunca duda, nunca habla, a veces parece un robot ante sus jefes, me pregunto si lo que planea funcionara.
Estaba por decir mi identidad cuando Rena interrumpió, diciendo que era un camarada para conocer al nuevo gran dios, realmente me sorprende que esos Knightmons que habían por guardias se la creyeran, aunque la verdad, todos estos digimons son estúpidos, nunca considerarían que sus mayores problemas están entrando en sus pasillos, aunque realmente no se qué hacer ahora, Scott en este punto me daría instrucciones pero, no sé qué hacer, solo puedo esperar y ver que pasara. Mientras íbamos caminando, vi a Mummymon y también a un Armormon, se estaban riendo mientras bebían, esos dos me dan asco, hay que agradecer que sin mi energía demoniaca proporcionada por Scott, no soy el mismo Cerberusmon en sus rastreadores ni por instintos, asique estaré a salvo mientras Scott no me de energía cuando llegue.

Rena… él no lo lamenta… conozco a Scott… el se hará cargo de cualquier error… el jamás desobedece ninguna orden directa… pero tampoco es alguien que permita que algo salga mal –le dije a Rena de cerca para que solo ella me escuchara- tu plan es perfecto… pero algo debe incomodar o preocupara Scott para que haga lo que hace… lamento que él sea así… pero tendrá sus razones…
¡Oijan! ¡Ushtedesh! –Nos grito Mummymon apuntándonos con su metralleta- nunja losh había vishto… pero creo e a ti te i… -dijo observándome de reojo- ¡JA! ¡TEH ACAGO DE VER! ¡JAJAJAJA! ¡VISHTE SUSH CARASH ARMORMON! Hic…
Haaa… s… si… buena broma –dije continuando nuestro camino mientras Mummymon me gritaba “bienvenidos al clan”- demonios… en verdad se emborracharon…

Al decir eso, observe a Rena y frote mi rostro contra su brazo, después la observe fijamente, quería decirle que todo estaría bien, que nada fallaría, aunque no estoy seguro, nunca antes Scott desobedeció una orden directa asique no se que pasara, pero sé que será algo bueno, con Scott, siempre pasan cosas buenas de la forma más inesperada posible.


Trampas, trampas, trampas y mas trampas, en verdad estoy haciendo buen ejercicio, primero la puerta que me había dejado caer al vacío, después miles de dardos, hachas de las paredes, el techo se cae, el piso se desmorona, esta tumba es increíblemente genial, si no fuera porque tengo prisa, me detendría a activar todas las trampas posibles, claro que no tengo tiempo asique será mejor acelerar el paso todo lo posible para evitarnos un buen dolor de cabeza.
Al menos sé que voy en dirección correcta, ya que eh logrado escuchar los gritos de miles de digimons esperando algo grande, asique tenía que estar cerca de donde Eskmon se mostraría para anunciar a sus aliados quien sabe que sobre la eliminación de la raza humana, si es que nos odia tanto, debe querer eliminarnos, si no, ¿para que convocaría tantos digimons en un solo lugar en un mismo día? Bueno, sea como sea, ahora es momento de correr.

(Rena, Cerberusmon, Lopmon… pronto llegare, solo tengo que correr mas) –Pensé mientras corría a toda velocidad la tumba que una vez fue mi gimnasio- (¿ah?... ¿Qué demonios es eso?) –me detuve y camine hasta donde había una presencia- ¡¿pero qué demonios?!

Llegue a una cámara que nunca antes había visto, era inmensa, realmente era sorprendente el tamaño de aquella enorme habitación que podría tener el tamaño de un castillo, tal vez el tamaño completo de media Atlántida. Al entrar en aquella cámara, pude ver muchas estatuas de digimons del desierto, era sorprendente ver tantas estatuas pero la que se llevo el premio mayor fue la estatua de un Pharaonmon sentando en su trono, realmente estaba sorprendido, debieron tardar muchos años en construir esa gigantesca estatua.
Cuando me acerque, pise un cable que soltó una gran roca, pero no sobre mí, si no sobre la estatua, realmente me preocupe, si aquí había alguna especie de guardianes estaba en problemas por destruir su preciada estatua, pero en vez de quebrantarse en miles de pedazos, la estatua movió su brazo y se froto la cabeza. Al moverse muchas rocas y tierra cayeron, seguramente ah estado quieta por miles de años para acumular tanto polvo, pero entonces, escuche algunas quejas, entonces observe los ojos de la estatua y estaban brillando, o sea… esa “estatua” no era una estatua, era un Pharaonmon real.

Haaa… lo… lo lamento –dije nervioso haciendo una reverencia ante el gran gobernante del desierto- ¡por favor perdóneme Pharaonmon!
¿Ah?... ¿Qué? –Me observo algo cansado- ¿Quién eres humano?... ¿Por qué has venido a despertarme en medio de mi tormento? –Me pregunto tosiendo mucha arena- por Osiris… ya no puedo vivir así… -me observo confundido- te eh hecho una pregunta… ahora respóndeme o sentirás la furia de los vientos arenosos del desierto…
Yo… no quise molestarte Pharaonmon… pero… ¿a qué te refieres con tu tormento y que no puedes vivir así? –le pregunte confundido, se suponía que los Pharaonmon eran los jefes del desierto-
Bien… te responderé… -dio un gran suspiro y me observo- hace solo 6 semanas… yo solía gobernar esta parte del desierto… era un gran líder… justo… bondadoso y hacia lo mejor por mi pueblo… pero desgraciadamente llego un digimon que los puso en mi contra… todos me atacaron y petrificaron… -bajo la mirada y después dio un gran suspiro- me dejaron hundirme con la arena… mi palacio se hundió y jamás podrá volver a subir… vivo un tormento por qué no puedo hacer nada ahora…
Vaya… debió ser muy duro –dije con algo de desahogo- ¿puedo ayudarte en algo Pharaonmon? Solo pídeme lo que necesites y lo hare…
Bien… aceptare tu oferta… -volvió a toser y se golpeo el pecho, no le quedaba mucho- escúchame… el digimon responsable… no lo vi nunca… pero… -volvió a toser- está en la pirámide central… te diré como llegar sin tropezarte con ninguna trampa… -tosió nuevamente- quiero que… destruyas a ese digimon y a sus seguidores… pero perdona a los que fueron engañados…

Yo asentí con la cabeza y me acerque para darle la mano a Pharaonmon, bueno, realmente el estiro el dedo y yo lo tome como pude para sellar el trato.


Este objeto… ¿realmente podrá ayudarme a vender a Eskmon? Lo que tenía en mis manos era una esfera que me dio Pharaonmon, no me dijo concretamente para que servía o en que me ayudaría, pero dijo que debía tenerla y usarla cuando pudiera, pero no me dijo como usarla, el simplemente me dijo que yo sabría como usarla y cuando, eso me dejo mucho en que pensar, pero hare todo lo posible para averiguar para que sirve. Ahora estoy caminando por los pasillos que me dijo Pharaonmon y no me encontré con ninguna trampa, de hecho, ya llegue, estoy en el centro de reuniones de Eskmon, ¿Cómo lo sé?, estoy en una cámara gigante que está llena de digimons de diferentes tipos.

No sabía que hacer, realmente no sabía que hacer, me encontraba muy confusa por todo lo que estaba sintiendo en este momento; me sentía furiosa pero sabía que no debía actuar mediante actos irracionales como el gritarles a Lopmon y Cerberumon ya que, si de algo puedo estar segura, es que ellos no tienen la culpa de mi furia, y enfadarme con ellos sería más que incorrecto de mi parte… aunque de alguna forma debía desahogar todo este sentimiento que esta atrapado en mi interior, ¿Pero como?... Probablemente en una batalla, pero no puedo librar una batalla, no al menos en estos momentos donde debemos pasar desapercibidos, estoy completamente enjaulada a un plan que ya no se si iba a funcionar, ¿Y si alguien encuentra a Scott? No tiene a Cerberumon consigo, aun así sé que el iría a salvarlo, pero al hacer esto el plan se vendría completamente abajo y no habría manera de salvarlo- ¿¡Porque demonios no me hizo caso!? Tsk… -seguramente hubiera seguido renegando en mi interior, pero las palabras de Cerberumon casi a mi oído hicieron que me calmara un poco en cuanto a esto, pero seguía molesta- Tsk… la nobleza de un can, Cerberumon realmente es un excelente amigo, pero estas palabras no me bastan para perdonarlo -aún si algo le desconcertaba y todo eso, ¿¡Porque no me lo dijo!? Si no pudo decírmelo a tiempo, hubiese hecho algo, mandar a Cerberumon a que me lo dijera antes de que yo saliera a revelarme con los guardias o… siquiera seguir el plan de devolver a Cerberumon a otra etapa que no sea esa, estoy segura de que el que Cerberumon este en esa forma nos traerá problemas de algún tipo, pero realmente… en estos momentos mas bien esperaba a equivocarme en cuanto a eso.

Me detuve al momento en que pude visualizar a dos digimon- No puede ser… -si, mis ojos no me engañaban, se trataban del Mummymon que Scott había mencionado, y de Armormon, el digimon que había burlado tan fácilmente con el juego de Piedra, papel o tijera- E-Eh… ¿Si? -¿Por qué estaba comenzando a ponerme nerviosa?... ¡Oh, claro, seguro Mummymon había visto a Cerberumon antes! ¡¡¡Demonios!!! Scott tonto, Scott tonto, Scott ton…- ¿Huh? –Oh, vaya… parece que ambos están realmente bebidos, pues después de casi sacarnos un buen susto a Cerberumon, Lopmon y a mi, se comenzaron a reír como idiotas por un chiste que Mummymon había contado- …Gracias al cielo… están ebrios… -no pude evitar suspirar de gran alivio, sonriéndoles a ambos algo nerviosa- Si… jaja… buen chiste, realmente nos han tomado el pelo… -Mummymon nos dio la bienvenida, y nos invito a tomar junto con Armormon pero yo me negué- No gracias, no bebo… -recordaba una vez que había bebido y… debo admitir que no soy muy buena resistiendo el increíble poder del alcohol, así que lo evito.

Bajé la mirada, hoy había perdido todos los animos que antes tenía... creo que me había emocionado demasiado con la broma que había formado esta noche anterior- Ah.. -suspiré con desgano, sintiendo como Cerberumon frotaba su cabeza en mi brazo lo que al principio me confundió pero al final.... al final me hizo sonreír con ternura- Eres un gran amigo Cerberumon, gracias... -le acaricié su cabeza, el parecía que quería decirme algo pero se contenía, aun así... sentía como si con su mirada fuese sufciente.. ¿Quería que me sintiera mejor, no? Sus sentimientos son puros y nobles pese a ser un perro del inframundo... su alma aun libera una pureza que me hace apreciar sin dudarlo- Hime-sama, ¿Que hay que hacer? -me quedé callada al instante, mirando hacia los alrededores en un instante. El pasillo era oscuro si no fuese por las antorchas que se encontraban a nuestros lados incrustadas en las paredes, ademas de que el simple hecho de que el Mummymon y el Armormon esten ahora bebiendo como si no hubiese un mañana significaba que la conferencia aun tardaría un tanto en comenzar- Por el momento hay que investigar mas la situación y el lugar... pueden optar por separarse o seguir juntos e investigar, yo me iré por otro lado... nos reuniremos en la sala central que es donde se librará la conferencia... para ese entonces sabremos que ya está por comenzar -me quedé callada unos momentos, pensando si se me había olvidado algo o no- ...ahh... por si no saben, la sala de conferencias se encuentra al final de este gran pasillo y es una habitación enorme y sin salida mas que este mismo pasillo, así no se perderan -asentí y les sonreí- Les deseo suerte camaradas, confío en ustedes -dicho esto me di la vuelta- Oooye... ¿A donde vas? Hic... ¿No se van a quedar a tomar con nosotros? -Oh.. ¿Cómo me escapo de ellos?- Ja..jajaja.. ya les he dicho que no bebo, lo siento, debo... debo ir al baño ¡Si! Eso.. -Yo y mis fantasticos dotes de actuación siempre al margen.

Corrí antes de que me hicieran otra pregunta yendome por el pasillo que estaba conectado al que antes nos encontrabamos- Hmm... ¿A donde me llevará este camino? -movía mi cola con curiosidad mientras caminaba, esta vez, a un paso calmado como si me encontrara solo de visita- Vaya, hace tiempo que no volvía a ser Mikemon... desde que conseguí mi DigiSpirit humano era raro verme en esta forma... -sonreí- Extrañaba sentirme mas adorable de lo que soy -agité mi cola ante este comentario con elegancia hasta que escuché una especie de grito raro... mas bien era como un ''Kyaaaaaaahh~!''- ¿Eh? -en cuanto quise darme la vuelta para ver que era lo que se acercaba a mi me sorprendí al sentirme envuelta en los brazos de algo o alguien quien me apretaba fuertemente con un abrazo y me agitaba- ¡Una Mikemon! ¡Que cosa mas linda me he encontrado, Nya~! Me hace sentir nostalgia, si, cuando yo era una.. ¡Kyaaaahh! ¡Que linduraaaa! -alcé mi mirada con dificultad pues estaba siendo completamente paralizada por tan potente y asfixiante abrazo, se trataba de una chica gato de aspecto arabe... yo ya conocía una de ellas- Eres.. ¿Persiamon? -finalmente me dejó respirar soltando el abrazo pero seguía cargandome debajo de mis brazos como si en verdad fuera una especie de gato doméstico- ¡Si, así me llamo, es un placer conocerte~! -movió su par de colas, volviendome de nuevo contra su cuerpo para acariciar mi cabeza de una forma un tanto ansiosa que me hacía sentir dolor por su fuerza y sus garras- Es muy raro ver a alguien tan lindo como tu en éste oscuro y feo lugar~ ¿Que sucede? ¿Te perdiste o...? -su expresión pasó a ser una de sorpresa- ¿¡No me digas que vienes a alistarte a las tropas del gran jefe!? -...¿El gran jefe? ¿Así se referirá ella a ''Eksmon''?- ¿Ah?... Bue..bueno, pues si... -me sentía algo nerviosa, pues no sabía como reaccionaría- ...¡Genial! ¡Alguien mas se ha unido al bando! Ven, tienes que acompañarme, te presentaré a otros cuantos digimon que igual se han unido~ -dicho esto me llevo, practicamente, a rastras lejos de mis objetivos- ¡E-Espera...!

Me alegro saber que Rena capto mi mensaje de calma para tranquilizarla y quitarle algo de presión de encima, je, si Scott me hiciera pasar algo así también me enojaría mucho con él y me estresaría, pero por ahora es mejor no perder a una buena amiga, menos cuando Scott tiene la posibilidad de conseguirse a alguien a quien molestar a demás a mi o a los demás, jeje, si me escuchara ahora, seguro me haría a vida un infierno, menos mal que nuestro “enlace mental” no es tan fuerte cuando estamos separados y lejos. Bueno, Rena dijo que nos separáramos para cubrir más terreno y así obtener más información, también nos dijo la ubicación de la cámara principal para poder reunirnos. Je, no entiendo que le incomoda a Scott de este plan si Rena es tan inteligente para idear algo así, a bueno, nunca lo entenderé, el siempre tiene que dudar de todo, en especial de los planes, ya sean suyos o no… tsk… creo que comienzo a entender por qué Rena se enojo con él.
Bueno, ahora estoy con Lopmon en mi espalda y buscamos a alguien más o menos confiable para poder preguntarle de Eskmon, de sus planes, y todo lo que pudiera ser importante para localizar, derrotar y acabar con Eskmon, aunque… ahora que lo noto veo bastantes digimons del tipo demonio… ¿en dónde me metí mientras estaba pensando?

Oye Lopmon, ¿tienes idea alguna de donde estamos ahora?... me sumergí en mis pensamientos y… me perdí de todo el camino y todo lo que pudieses haberme dicho… perdón, soy un perro algo raro y con problemas de concentración sin Scott cerca –me rasque la cabeza con la cola mientras daba un pequeño suspiro- perdóname, supongo que también me dificulta las cosas el que Scott no esté aquí… aunque conociéndolo, no debe tardar mucho en llegar… ese chico es un verdadero demonio… asique no hay que preocuparnos tanto… solo… -suspire- no sé qué hacer, perdóname… creo que no soy tan buen perro…
¡Oye! ¡Tú, el Cerberusmon! –me preocupe y mire hacia otro lado, ¿para qué?, para ver a mas Cerberusmon- ven aquí compañero, es más grato estar con los mismos de tu especie que estar con tantos digimons raros y demás, ¿no crees?
Haaa… si… claro… esto… gracias por… em… la invitación –me acerque sonriendo algo forzado, nunca me eh llevado… esto… “muy bien” que digamos con los de mi especie- esto… ¿ustedes conocen al líder?... ¿el gran jefe?... ¿el señor aquí?... esto…
No, ninguno de nosotros lo conoce, solo sus “guardias” de elite –otro Cerberusmon se rio abiertamente- pero ese Mummymon y ese Armormon son un completo chiste si se hacen llamar guardias de elite, no saben hacer nada más que beber y embriagarse hasta el punto en que no sepan ni siquiera donde están
¡Oigan! ¡Miren lo que trajo nuestro nuevo amigo! ¡Un bocadillo antes de que el gran jefe de su anuncio! –otro Cerberusmon sujeto a Lopmon con la cola y la levanto- jeje, una Lopmon, genial, hace mucho tiempo que no devoro los datos de una
Yo nunca los probé, escuche que son deliciosos, mas cuando están bien cocinados, y con este calor, seguro sus datos deben ser exquisitos –el mismo Cerberusmon que me “invito” a venir comenzó a babear-
Haaa… GRRRR… ¡NO! –los golpee a todos en la cabeza con la cola y después cargue a Lopmon en mi cabeza- ¡ESCUCHENME BIEN MALDITOS SACOS DE HUESOS CON ARMADURAS BARATAS TRATANDO DE IMITAR A UN GRUPO DECENTE DE CERBERUSMON! ¡SI LLEGAN A TRATAR DE COMERSE A MI AMIGA! ¡PERSONALMENTE USARE MI STYX KILLER PARA ABRIRLES LOS CRANEOS! ¡SACARLES LAS TRIPAS Y LES ARRANCARE LAS COLAS QUE TIENEN DE UNA SOLA MORDIDA! ¡AHORA LARGO DE MI PRESENCIA ANTES DE QUE ME ARREPIENTA DE NO MATARLOS! –Observe como todos se fueron corriendo- tsk… malditas basuras… menos mal que Scott me enseño a calmarme…

Luego de eso continúe caminando, esta vez tratando de prestar atención a camino y a todo lo demás, sinceramente, dudo que pueda hacerlo, con el pensamiento de que reaccione como un salvaje, no creo que sea posible que me mantenga tan concentrado, tsk, apresúrate a llegar Scott, no quiero tener que recurrir a tus métodos por siempre.


Esto es más que sorprendente… ver a tantos digimons reunidos por uno solo con el único propósito de conseguir destruir este mundo, y posiblemente el mundo humano, o lo que sea, pero siendo franco, esto es genial e increíblemente impresionante, je, lástima que no estoy de su lado, si no, haría todo lo posible para detener a Rena y a Lopmon en esta misión de detener a Eskmon y acabar con sus planes.
Luego de un rato comencé a bajar las paredes, aunque como no tengo a Cerberusmon ni garras ni ganchos y ni siquiera alguna cuerda de la cual poder sujetarme, solo logre bajar un nivel de profundidad llegando a otro pasadizo de conexión, aunque fue de mucha ayuda, ya que en ese pasadizo encontré algo que podría serme de mucha ayuda. Aunque… primero tendría que encontrar la forma de bajar sin que nadie sospechara de que soy yo… pero… me voy a degradar mucho teniendo que ponerme lo que estoy viendo.

Dios… esto es… esto es realmente ridículo pero… es por el bien de esta misión… asique… es hora de que el carma reflejado en mis acciones desobedientes… sea pagado justamente… asique… hora de humillarme… -levante una túnica, casco, guantes y demás ropa egipcia- bueno… yo me busque esto asique será mejor hacerlo…

Luego de quitarme la ropa y ponerme toda esa ropa egipcia, no solo me sentí como una especie de guardián de esa época y lugar… hay dios… me gusta la mitología y las cosas tanto egipcias como infernales y demás… pero ahora mismo… me siento un completo idiota, hecho para eso. Bueno, finalmente encontré un camino para llegar al primer piso, y una vez que estuve allí, me quede parado firme contra la pared para simular ser una estatua, sé que es ridículo, pero nadie se dio cuenta, creo que solo Cerberusmon y Rena podrían darse cuenta, después de todo, este disfraz y mis rasgos físicos son muy obvios como para que ellos no los diferencien de una estatua.

(En serio… esto no puede ser o más raro o más humillante… ¿pero qué demonios infernales?) –vi como una Persiamon se llevaba arrastrando a una Mikemon contra su voluntad- (pobre… me compadezco de ella… seguro debería tenerle piedad… bueno… primero tengo que saber quiénes son los súbditos de Pharaonmon)