Nuevo mundo, nueva apariencia... [Scott-X]

Luego de un momento caminando, llegamos a lo que parecía una pequeña choza cerca de una gran cantidad de huevos, creo que en el digimundo se llaman “Digitamas”… bueno, no estoy segura, pero de lo que si estoy segura es que cuando Labramon se acerco a la puerta y comenzó a tocar para llamar a quien estuviera dentro, mi estomago se sentía muy feliz, al fin podría comer algo, je, no es como si no hubiera comido en una semana, ciertamente, pero cuando me da hambre, me da hambre extrema, nunca entendí por que, quizás por lo poco que comía de niña, ¿Quién sabe?. Fuera como fuera, apenas vi la puerta abrirse, me sorprendí por ver a una especie de enano barbón con ropa vieja… es más, creo que ni era ropa, parecía mas un saco de papas, además de que tenía un bastón con una zarpa en la punta, ni siquiera podía ver sus ojos, los tenia cubiertos por su cabello blanco… era… sin duda era raro.

Hola Jijimon –Labramon sonrió amistosamente mientras movía la cola- disculpa las molestias pero… ¿no tendrías algo de comida para mí y mis amigas?, es que yo no eh comido en todo el día y creo que ellas también… ¿podrías compartirnos algo de lo que tengas de sobra?
¿AH?... mmm… espera un momento, tu eres el Labramon de aquel chico flojo que puso las vallas alrededor del lugar –“Jijimon” se rio ampliamente y le dio unas palmadas en la cabeza a Labramon- claro, claro, pasen, cualquier amigo de este Labramon está invitado a mi casa, jaja, vamos niñas, no se queden afuera o el sol les freira la cabeza –eso no sonó bien-
Haaa… okey… como usted diga… (Realmente no me esperaba esto cuando pensé en Jijimon) –Entre a la pequeña choza junto con Labramon y Jijimon- ¿usted vive solo aquí?... ¿y también cuida de todos estos Digitamas?... debe ser difícil
Tonterías, los bebes son fáciles de cuidar, además mi esposa viven conmigo –Jijimon se rio levemente y saco unas cuentas manzanas de una canasta- tomen, coman todo lo que gusten, yo siempre puedo comer los pescados que traiga mi esposa
Gracias… -tome una manzana y le di un mordisco- (bueno, al menos estas manzanas con comestibles… solo espero que no exploten o hagan algo raro) están ricas, muchas gracias Jijimon, perdón por las molestias
No te disculpes niña, estabas muerta de hambre y en mi casa nadie muere de hambre, excepto yo cuando mi esposa decidí hacer su estofado sorpresa –se rio tranquilamente- créanme, yo no como nada que no me deje ver preparar

Okey, Jijimon parece un viejo común y corriente, exceptuando porque parece que no sabe lo que es una afeitadora… sea como sea, mientras nos deje comer algo y nos permita quedarnos un momentos, me parece agradable, además, ¿Quién sabe?, quizás su esposa pueda prepararnos algo de comida para el camino.

Pocos momentos después de seguir caminando llegamos a una parte de la villa donde, nuevamente, se encontraban muchos de esos huevos gigantes que vi hace unos minutos regados por el suelo- Otra vez... esos huevos -los miraba con curiosidad, habían demasiados pero no tanto como antes, incluso pude presenciar que uno en particular se encontraba moviendose de su lugar- ¿Se está moviendo o es mi imaginación? -ladeé un poco la cabeza, confundida, hasta que volví a ver hacia al frente y noté que Labramon y Emily ya estaban a varios metros lejos de mi, frente a la puerta de una choza.

- ¡O-Oigan, esperenme...! -corrí hacia ellos hasta posicionarme detrás, me incliné y sujeté mis rodillas jadeando exhausta- Tengo tanta hambre que se me van las energías... ojalá podamos comer pron... -me interrumpí cuando escuché el sonido de la puerta abrirse.

En ese mismo momento me enderecé y fijé mi mirada hacia la puerta que se abría lentamente, sentía que mis ojos temblaban de la curiosidad por saber que digimon era exactamente ese tal ''Jijimon''- ¿Que será? ¿Cómo se verá? ¿Será amable como dijo Labramon?... -estaba, en cierto sentido emocionada, tanto que incluso abría mi boca en una amplia sonrisa pero... lo primero que vi fue- ¿Un pie descalzo y... peludo? -mi emoción se cortó de repente y arqueé la ceja extrañada hasta que la puerta se abrió por completo y se vio a un pequeño anciano sujetando un bastón mas grande que su propia estatura con una garra de gato en la punta- ...¿¡Ese es Jijimon!? -¿Entonces no todos los digimon son animales? ¿¡Tambien hay viejos!?

Solo me quedé callada y algo impactada por lo que acababa de ver mientras Labramon tranquilamente saludaba y mantenía una conversación con ese digimon anciano que, siendo honesta, se veía muy amigable... como un verdadero abuelito, su actitud fue la que me hizo reaccionar y volver a sonreír tranquilamente- Si que es agradable, Labramon tenía razón después de todo -reí leve- Que lastima que no conocí a mis abuelitos, seguro ellos eran igual de simpáticos que este Jijimon -en cuanto el digimon nos invitó a pasar seguí los pasos de Emily y Labramon que entraron primero, yo antes de entrar me detuve a ver el huevo que hace unos momentos se movía pero al parecer había detenido su tambaleo- Creo que si fue mi imaginación después de todo... -entré a la choza y cerré la puerta.

Al entrar y fijar mi mirada hacia al frente, mis ojos se abrieron a la par mostrandose curiosos y asombrados como los de un niño pequeño- Wooow... Es una casa pequeña pero muy cálida y linda~ No sabía que los digimon tuvieran hogares como estos... -me la pasé caminando cerca de los muebles y decorativos que el anciano digimon tenía, eran muy pequeños pero a la vez muy lindos, en realidad no sé como describir un lugar tan rustico como este. Al notar que Emily, Labramon y Jijimon ya se habían alejado rápidamente corrí hacia donde, según yo, estaban ellos, buscandolos- Debo dejar de distraerme tanto, no debo comportarme así en una casa ajena de alguien que tan amablemente nos ha ofrecido comida -por fortuna los encontré rápido, pero cuando los encontré Emily ya estaba comiendo una ¿Manzana?- Si, es una manzana, parece que la comida aquí en este mundo no es muy diferente a la de nuestro planeta... -eso me ponía contenta, pero a decir verdad yo me imaginaba un alimento mas extravagante, como fruta moteada o rayada, de aspecto extraño y poco apetitoso pero que terminaba sabiendo mil veces mejor que cualquier otra cosa... creo que veo mucha televisión.

- ¡Muchas gracias por la comida, señor Jijimon! -tomé una manzana- Itadakimasu~ -le di un mordisco- ¿Hm?... -tragué lo que tenía en la boca- Esta manzana... está deliciosa... -demasiado de hecho... sabía mucho mejor que cualquier manzana que he probado en toda mi vida- ¿Esto es en realidad una manzana? Sabe demasiado bien para ser una simple fruta...

Juro que nunca había probado una manzana tan deliciosa, je, de hecho no estoy segura de que fuera una manzana pero bueno, comida es comida, asique no le di importancia y continúe comiendo tranquilamente mientras que Jijimon se sentó en una silla mecedora, meciéndose con la ayuda de su bastón, je, fue algo gracioso, después note a Mato mencionar lo de las manzanas, ciertamente no parecían manzanas normales como ella había dicho.

Jaja… son manzanas dulces, y créeme, son las frutas más simples que hay en todo el digimundo –Jijimon observo a mato y se rio- ¿o quieres una manzana de carne?, creo que tengo un par guardadas en el refrigerador, solo es cuestión encender el horno y cocinarlas un poco para que puedas comerlas
(¿Existen… manzanas de carne?) –continúe comiendo mi manzana a gusta mientras exploraba el lugar con la mirada- Jijimon, ¿Qué es este lugar?... me dijeron que se llama “ciudad del inicio” pero… ¿Por qué se llama asi?
Bueno niña, se llama ciudad del inicio porque en este lugar, es donde casi todos los digimons de todo el mundo digital, nacen –Jijimon comenzó a frotar su barba con una mano- veras, en si, los digimons no mueren, nuestros datos forman un nuevo digitama cuando “morimos”, esos Digitamas formados de datos tras la muerte de un digimon, vienen aquí y aquí nacen y son cuidados por mí y mi esposa Babamon, hasta que son grandes y tienen que dejar la ciudad para vivir sus vidas
Oiga… pero yo no nací aquí… yo nací en un templo junto con mis padres, una Sakuyamon y un Anubismon… -observe a Labramon confundida, ¿entonces los digimons también pueden tener hijos?, bueno, eso explicaría por qué tantos Digitamas-
Bueno, cachorrito, tu naciste de un digitama formado, es decir, 2 digimons unieron una pequeña porción de sus propios datos para formar tu digitama, por eso no naciste aquí –Jijimon se rio tranquilamente- pero cuando llegue la hora y vuelvas a ser un digitama, nacerás aquí, ya verás… o no, todos los digimons que renacen lo hacen sin su memoria… en raros casos tienen su memoria al nacer…

Cuando escuche eso, comencé a pensar… ¿y si Samanta esta aquí?... es lo más probable pero… ¿Cómo puedo asegurarme de eso?... si es verdad lo que dijo Jijimon… ella no me reconocerá al verme… pero… yo si podre reconocerla asique… por lo menos quiero saber si esta aquí… tengo que saber eso únicamente.


Vaya… realmente soy un digimon nacido de la unión de otros 2 digimons… je… y muchos me decían torpe por creer eso pero al final tenía razón, ¡Bien! Me siento muy feliz de saber que tenia la razón todo este tiempo. Lo malo es que mi felicidad se me fue… por alguna razón… sentí esa sensación de pelea de los digimons… ese pequeño “radar” que tenemos casi todos los digimons que nos hace sentir nuestras presencias… sé que es normal sentirlo con tantos digimons bebes pero… la presencia que sentí… era bastante fuerte como para ser un simple digimon nivel Bebe II… tsk… ¿ahora qué ocurre?

Siento algo… algo malo se aproxima… -levante mis orejas intentando poder escuchar todo a mi alrededor- … (¿Qué tipo de digimon hay por aquí?) –deje la manzana en la mesa y salí rápidamente de la casa con las orejas en alto, intentando escuchar a quien fuera que estuviera por aquí- GRRRRR… siento un digimon malo…

¿Manzanas dulces? ¿Manzanas de carne? Este mundo parecía tener muchas variaciones de una sola fruta, tanto que.. incluso existen, al parecer, frutas de carne ¿Es enserio? eso fue lo que mas me impresionó, sería buena para hacer trampa en una dieta- Que divertido... -me dije en mis adentros algo divertida pensando en eso mientras le daba otro mordisco a la fruta, pese a ser pequeña como cualquier otra manzana... no quería que se terminara nunca, era deliciosa a mas no poder.

Me había concentrado mucho en el sabor de mi manzana que había casi ignorado lo que sucedía a mi alrededor hasta que escuché una duda de Emily hacia Jijimon, algo que me interesó tambien en saber y, por lo tanto, le presté tambien atención- ¿Así que todos esos huevos no son de ave, si no que de los mismos digimon? -era impresionante, eran millones de huevos los que habían esparcidos por toda la zona de esta villa, ¿Significa que algún día habrán de verdad tantos digimon?- Es impresionante... -decía en mis adentros mientras le daba una ultima mordida a mi manzana, acabandomela.

- Ahhhh~ A pesar de solo ser una manzana era realmente llenadora, si esta era una fruta de las mas simples no puedo esperar para probar las mas complicadas -reí leve- ¿En verdad esta es una villa que cuida a tantos bebés digimon? Usted y su esposa deben tener un duro trabajo -era admirable lo que hacían, a mi me gustan mucho los niños pero no creo poder tener la capacidad y paciencia para tratar a tantos de ellos, además... eso de cambiar pañales nunca me ha llamado la atención en lo absoluto- ¿Tu que dices, Em...? -me interrumpí yo misma cuando vi a Emily algo pensativa, ¿Será por lo que contó Jijimon? No entiendo ahora... ¿Que estará pensando?... Solo esperaba que no fuera algo triste como lo que le hice pensar cuando mencioné a mi mamá.

De pronto algo paso, no supe que era, pero esto hizo que Labramon saltara casi de su asiento en estado de alerta- ¿Algo se acerca?.... ¿¡Que!? ¿Un digimon malo? -¿Cómo es posible? Siendo esta una viilla con tan buenas intenciones y pacíficas... ¿Porque vendría para aca un digimon malo? Miré como el pequeño cachorro salía corriendo por la puerta- ¿Es que está dispuesto a defender la villa? Se le veía muy decidido... -miré a Jijimon y a Emily, no sabía que hacer, pero algo era seguro... no iba a quedarme aquí sin saber que era lo que estaba pasando, por lo que sin decir nada salí de la choza siguiendo al cachorro.

- No veo nada... -dije en voz baja mirando hacia mi alrededor con Labramon a unos metros lejos de mi, el tambien estaba atento a lo que sea que escuchó, olfateó o simplemente detectó. Escuché unos pasos acercarse hacia mi posición, al principio pensé que era Emily pero resultó ser el anciano Jijimon.
- No sé si es verdad lo que Labramon ha dicho pero no pienso dejar que los bebés se metan en problemas que aun no les incumben -tomó un par de huevos entre sus manos
- ¿Necesita algo de ayuda? Yo tambien pue... -me callé cuando el anciano colocó la zarpa de su bastón frente a mi
- Ni se te ocurra, necesito que defiendan en este lugar en lo que yo termino de llevar a los huevos a salvo.
- Pero... nosotros no... -no sabía como decirle ''Nosotros no tenemos la fuerza necesaria para vencer a un digimon''.
- ¡Confía en tu poder! Jojojo~ en varias ocasiones de mi vida he podido ver la fuerza de un humano, tambien de otros que como tu dudan de su poder, solo deja salir tu fuerza escondida, recuerda que no estás sola muchachita -me dio un golpe leve con su bastón y después se marchó.
- ¡Auch!... Mi... ¿Fuerza escondida? -no entendí buen lo que quiso decir, pero no quedaba de otra, debía defender los huevos tal como Jijimon nos pidió, solo me pregunto... ¿Que tipo de digimon será el que venga a atacar esta pacífica villa?

No sé que estaba ocurriendo, pero Jijimon tuvo que ir a resguardar los Digitamas, bien… si realmente hay un digimon malo por aquí es lo mejor para todos… pero… ¿Qué digimon malo vendría aquí?... estoy seguro de que casi todos los digimons se olvidan de la ciudad del inicio cuando crecen… tsk… ¿Qué estará ocurriendo aquí? Sea lo que sea, no me gusta en lo más mínimo. Estuve alerta un buen rato hasta que salieron Mato y Emily, pero apenas ellas salieron, sentí una especie de zumbido extraño, entonces observe el cielo fijamente esperando encontrar el origen del zumbido, pero antes de poder encontrar el origen, este me encontró a mi y sentí como alguien me tacleaba lanzándome contra un árbol.

¡Ah! Dios… eso dolió… -caí al suelo adolorido y después vi como una especie de digimon insecto pero con brazos de X-Veemon- hack… ¿pe-pero qué demonios?... un digimon de nivel Ultimate… ¿Cómo?
Je… veamos… el viejo seguramente se llevo los Digitamas a algún refugio… bien, entonces será más divertido y tendré que destruir toda la zona para encontrar esos jugosos Digitamas para absorber sus datos… como sea –el digimon pareció hacer un gesto con sus dedos, no sé muy bien, creo que los chasqueo haciendo un leve ritmo- yo soy DinoBeemon… digimon de nivel Ultimate, atributo virus… y también soy su peor pesadilla… jeje… quizás tome un aperitivo con tus datos, pequeño Labramon, después probare los datos de un humano… jeje, tengo 2 pequeñas humanas que se ven jugosas
¡¿Cómo?! ¡¿Jugosa yo?! ¡Insecto inútil! ¡Te voy a pisar con un zapato gigante! –Vi a Emily más que furiosa, incluso sentí lo que siento con Scott enojado- ¡Ya verás! ¡Tengo las garras de una Renamon! ¡Si quiero puedo abrirte el cuello! ¡Incluso recuerdo que en Italia una vez hiso un estofado de insectos para unos mafiosos!
Tu… humana debilucha… ¡¿Cómo te atreves hablarme de esa forma?! ¡Serás la primera en ser devorada por mí! –DinoBeemon comenzó a volar hacia Emily pero yo lo taclee haciendo que se chocara contra un árbol- ¡Agh! ¡Mamíferos insolentes! ¡¿No entienden que los matare a todos de una u otra forma?! ¡Verán que no son rivales para mí!
¡Cállate! –di un salto hacia atrás y después cerro su boca- ¡RETRI BARK! –lance un gran ladrido que formo una gran onda sónica dándole a la cara de DinoBeemon- ¡Vamos insecto! ¡Este mamífero te aplastara!

Rapidamente me dirigí hacia donde se encontraban Labramon y Emily reunidos- Jijimon nos ha encargado proteger esta zona que sigue teniendo algunos huevos mientras el los acarrea poco a poco hacia un escondite, y... -mira hacia sus lados, observando todos los huevos- Hay tantos... ¿Que haremos dos chicas y un perrito para proteger centenares de huevos que, al parecer, guardan bebés digimon dentro? -bajé la mirada, angustiada- No lo entiendo... no... no sé que hacer -cerré los ojos, aterrada. Fue entonces que sentí algo vibrar en el bolsillo de mi uniforme- Mi... ¿Cómo se llamaba?... ¡Mi digivice! -saqué dicho dispositivo del bolsillo y lo observé, nuevamente se había encendido.

Observé la pantalla en la cual se había vuelto a aparecer esa especie de estatuilla de forma que no logro entender bien- Analiza... -escuché una voz distinta resonar en mi cabeza.

- ¿Qué? -miré hacia mis lados- ¿Emily? ¿Labramon? ¿Alguien me habló? -pregunté en voz alta confundida, pero el dispositivo volvió a apagarse- No entiendo... ¿Porque no funcionas bien? -este ''digivice''... está lleno de misterios, no lo entiendo- ¡AH! -solté el digivice para cubrirme los oídos, escuchando un fuerte zumbido acercarse hacia nuestra posición- ¡¿Que es eso?! ¿De donde viene...? -abrí los ojos lentamente y miré frente a nosotros una enorme criatura cuya forma no logro encontrar sentido, era como un reptil o un insecto... o una mezcla de las dos- Qué... ¿¡Qué es eso!? -¿Se trataba de un digimon quizás?

Podía ver que Labramon estaba asustado, eso no ayudaba en nada, al parecer esa cosa era... el digimon malo que él había detectado hace unos momentos, y lo peor de todo, es que parece ser realmente poderoso y peligroso- ¿Que haremos?... No creo que los tres juntos podamos detenerlo... -la criatura estaba viendonos a nosotras dos, a Emily y a mi, como si fueramos una especie de platillo ''jugoso'' lo cual me hizo mirarlo con cierta repulsión.

- No...¡Nosotras no somos comida! -le repliqué, aunque no creo que me haya hecho mucho caso, ni siquiera hizo caso a las amenazas de Emily que enserio se veía furiosa- Emily... -antes había sufrido mucho por el tema de su madre, y ahora ha aparecido este digimon tan extraño diciendo que quiere comernos... no... no quería que ella ni nadie se metiera en problemas, además, le habíamos prometido a Jijimon cuidar a los huevos.

Cerré los ojos, imponente- ¿Que debo hacer?... Labramon está siendo atacado por ese digimon... y nosotras... nosotras... -abrí mis ojos, mirando hacia el suelo, y vi mi digivice...- ¡E-Eso es...! Quizás mi digivice me ayude ene estos momentos -me agaché para tomarlo, pero en cuestión de segundos éste desapareció- ¿Eh?... -me levanté y giré la mirada hacia donde el viento misterioso que sentí hace unos momentos, como si algo hubiese pasado rápidamente frente a mi, se dirigía; obeservando la figura de una especie de lobo o coyote con una apariencia aterradora.

- ¿Que tenemos aquí?... Un dispositivo ''Digivice'' -se rió en sus adentros- ¿Cuanto dinero ganaré vendiendo este artefacto inutil?
- ¡Oye, devuelve eso, es mío! -le grité, aunque aún me sentía aterrada por ver un animal tan... peligroso como ese.
- ¿Tuyo? No veo tu nombre escrito en él... además, todos saben que cuando un Fangmon te roba algo... ¡Puedes irte despidiendote de él! -sus ojos se abrieron terrorificamente- Oh, ¿Pero que ven mis ojos? Si se trata de una niña humana... escuché que son deliciosas jejejeje... -relamió sus labios- Ven aquí, no te haré mucho daño, soy un digimon bueno que quiere solo probar... ehh... jugar contigo...
- No... ¡Alejate de mi! -tomé una piedra y se la lancé a la cara provocando que el animal, digimon, criatura o lo que sea chillara como un perro cuando es herido, después me miró ferozmente.
- Eres una tonta... -se lanzó contra mi.

Estaba por darle una buena patada voladora a DinoBeemon por querer atacarme, pero además de que Labramon se me adelanto y lo ataco antes, pude sentir una especie de chillido de perro adolorido, entonces me voltee y ve a Mato frente a un Fangmon, sé que es un Fangmon por que estudie a casi todos los digimons caninos peligrosos, y sé que los Fangmons son ladrones bastante buenos, pero, eso no supera a una chica que se ah enfrentado a la mafia. Tenía que ayudar a uno de mis 2 nuevos amigos, por un lado quería salvar a Mato por que ella no tenía experiencia con este mundo, pero por el otro no quería revivir la tragedia de hace dos años, donde un Ultimate acabo sin piedad con un Rookie pero… ¡¿Qué hago?! ¡¿A quién ayudo?! En ese momento no sabía qué hacer, solo me agache y me puse mis auriculares, intentando poner alguna canción para relajarme o algo pero no podía, el temblor de mis manos me impedía hacer algo, solo estaba agachada rogando que todo fuera una pesadilla.

Basta… no quiero… basta… cállense… quiero despertar… no quiero mas este sueño… -mis ojos comenzaron a perder la vida, estaba entrando de nuevo a mi trance- Samanta… no… lo lamento… mama… basta… ¡Basta! ¡No quiero volver a ver eso!
¡Una humana menos! ¡En cuanto me deshaga de ti! ¡Perro inútil! ¡Sera fácil comérmela junto con todos los Digitamas que aun puedo ver! –Sentí la voz de DinoBeemon junto con su infernal zumbido moviéndose de un lado a otro- ¡Te voy a aplastar y ni siquiera usare ninguna de mis técnicas! ¡Estás muerto, perro! ¡TOMA! –Sentí como DinoBeemon debió golpear el suelo donde estaría Labramon y luego escuche un sonido de rocas quebrándose con facilidad- ¡DEJA DE MOVERTE! ¡¿NO VEZ QUE INTENTO MATARTE?!
¡No me vas a matar! ¡Digimons más rápidos han intentado atacarme! ¡RETRI BARK! –Sentí a Labramon volver a disparar esa onda sónica- ¡Emily! ¡Ayuda a Mato! ¡Yo me encargo de este insecto! –Labramon… ¿realmente estaba dispuesto a pelear solo contra un Ultimate- ¡Yo puedo! ¡Aunque no lo parezca soy un dios! ¡Y como dios no pienso morir! ¡PETIT PAW! –levante la mirada y vi a Labramon rodeado de un aura dorada mientras comenzaba a correr a una velocidad increíble- ¡RETRI BARK! –Disparo su onda sónica contra DinoBeemon justo a la cara- ¡Vamos! ¡Ayúdala!
S-si… -me levante algo temblorosa del suelo y tome una rama- (Tengo que… tengo que ser fuerte… no puedo dejar que lastimen a mis nuevos amigos)… tsk… ¡Aaaahhhh! ¡Toma esto coyote esquelético! –Corrí hacia Fangmon y le di un golpe a la cabeza, después intente darle una patada directamente a la cara- ¡Aléjate de mi nueva amiga! ¡No quieres enfrentarte a alguien que sabe artes marciales!

No estoy segura de dejar a Labramon solo pero… si él dice que puede solo le creeré… aunque no entendí eso de que es un dios… ¿Qué ocultara ese cachorrito?


¡Adelante insecto! ¡Atrápame si puedes! ¡¿O es que eres un caracol?! –Tengo que alejar a DinoBeemon hasta que Jijimon regrese, no puedo vencerlo siendo nivel Rookie y sin Scott cerca no puedo evolucionar… tsk, solo me queda la opción de aguantar- ¡RETRI BARK! –Di un salto al aire y le dispare a DinoBeemon que estaba frente a mí-
¡Ya verás quien es el caracol! –DinoBeemon apareció frente a mí y me dio un puñetazo lanzándome contra una cuna vacía- ¡Jaja! ¡¿Qué piensas hacer “dios”?! ¡¿Eh?! ¡No tienes forma de evolucionar! ¡Y aun si evoluciones nunca llegarías a nivel Mega antes de que yo te destruya! ¡Dime! –Se acerco a mi lentamente- ¡¿Quién te salvara ahora?!
¡ME SALVARE YO! ¡RETRI BARK! –dispare otra onda sónica dándole justo en medio de la cara, después comencé a correr- ¡Alcánzame!

Por un momento llegue a pensar que...- Estoy perdida... -podía ver los ojos agudos de la bestia frente a mi donde se podían reflejar los míos propios- Se ve que... estoy aterrada, da pena morir así... da pena pensar que no podré volver a la escuela, que no podré volver a jugar un partido de basquetball, que no podré terminarme mi almuerzo y... -fue entonces que abrí mis ojos de golpe y recordé lo que me dije a mi misma cuando salí de casa para dirigirme a la estación de trenes: ''Solo será está vez mamá, en verdad perdoname, pero prometo que regresaré y me disculparé... ¡Es una promesa!''- Es cierto... hice una promesa, que iba a regresar a casa a comer el almuerzo que mamá me preparó con tanto esfuerzo y disculparme por haberle mentido y desobedecido... -fruncí el ceño, mirando como Fangmon se acercaba a mi mas y mas en cuestión de microsegundos. Cuando el digimon se acercó lo suficiente a mi pude ver, tambien en cuestión de microsegundos que pasaban lentamente, como un puño salía de la nada y golpeaba con todas sus fuerzas al coyote de pelaje rojo, notandose incluso como se le deformaba la cara por la fuerza del golpe- ¿Quien...? -giré la mirada y vi a Emily con su mirada llena de determinación e ira.

Finalmente el tiempo volvió a la normalidad y se escuchó el golpe del peso del cuerpo de Fangmon golpear contra el suelo brutalmente, poco después recibió otra patada de parte de Emily que incluso parecía que estaba cegada.

- E-Emily... -no sabía como reaccionar, mi cuerpo no me respondía. Era increíble como... Labramon se encontraba peleando contra ese insecto gigante y Emily se las había arreglado para lanzar volando a Fangmon tan lejos con solo un par de golpes- Yo no puedo hacer nada... -dije en voz baja.

Bajé la mirada- No me gusta lastimar a nadie... ni siquiera tengo el valor para lastimar a esos dos digimon que planean acabar con nuestra vida y la de los digimon... -apreté mis puños con fuerza- ¿Que puedo hacer...? ¿Cómo puedo ayudar a mis amigos sin lastimar?... -quería llorar de la impotencia pero no lo iba a hacer, no me gusta llorar, no me gusta que nadie me vea llorar y que se sienta mal por mi... esa es otra manera de lastimar a alguien, y yo no quiero hacerle daño a ningun ser viviente- Analiza... -volví a escuchar en micabeza, era de nuevo esa voz, no era mía... pero me hablaba por telepatía, lo sé, no era ni Emily ni Labramon, mucho menos Jijimon o esos monstruos.

- ¿Cómo que analice?... ¿Que debo analizar? -pregunté en voz alta esperando ser respondida. Fangmon se levantó del suelo y se sacudió la tierra del pelaje, mirando con reojo y mostrando sus feroces fauces a Emily.
- ¿Como se atreve una patetica niña humana en tocarme?... -hizo una macabra sonrisa- Me aseguraré de que lo proximo que toques... ¡Sea el interior de mi estomago después de que te devore! -se levantó sobre sus patas traseras, entonces noté que en su garra seguía sujetando mi digivice.

Observé como dicho dispositivo comenzaba a brillar en una intensa luz celeste- Analiza la situación... piensa... ¿Que es lo que quieres hacer en este momento? -mis ojos se mantenían fijos a ese objeto- ¿Que es... lo que quiero hacer?... -me encontraba en una especie de trance mirando esa bella luz.

- Tch... ¿Que sucede con este aparatejo ridiculo?... -lo miró.
- Lo que quiero hacer... -repetí en voz baja, mi mirada se llenó de confusión- ¿Que es... lo que quiero hacer?...

Juro que estaba invadida por el miedo de tener a un Fangmon frente a mí, aunque sus colmillos eran atemorizantes, prefería mil veces pelear contra el que contra un insecto como DinoBeemon… eso sí, mi destino será el mismo pero al menos con Fangmon moriré como me gusta… en una pelea can contra can… ahora tengo la apariencia de una Renamon… será zorro contra coyote o lo que sea este animal salvaje. Fuera como fuera, cuando vi esa luz rara en Fangmon me preocupe, creí que estaba por evolucionar pero cuando él dijo “aparato”, supuse que le robo su digivice a Mato… bien… eso me quita una preocupación pero aun así tengo que pensar que hacer… aun tengo la rama en mi mano… puedo darle un golpe a la quijada e intentar rompérsela pero… una pequeña ramita no será suficiente… tendría que darle con una roca.

Tsk… ¡No tocare tu estomago desde adentro! ¡Lo tocare cuando te lo arranque! –Salta sobre Fangmon intentando taclearlo y tirarlo al suelo- ¡Te voy a romper la quijada! ¡Perro sucio! –Le mete la rama de forma vertical en la boca para que la mantuviera abierta y no pudiera cerrarla- ¡¿Qué te pareció eso coyote pulguiento?!
¡Agh! ¡Humana tonta! –Con solo usar algo de fuerza rompió la rama cerrando boca- ¡¿crees que algo así me iba a detener?! ¡Quítate de encima! –Me sujeto con una de sus garras y me lanzo lejos, después volvió a levantarse- ¡Definitivamente te comeré! ¡Lenta y dolorosamente!
Haaa… dios… ¡Aléjate de mi! ¡Lobo de cuentos! –me levante con las piernas temblorosas, pero después sentí un zumbido y al darme la vuelta vi a Labramon escapando de DinoBeemon, quien desapareció en unos instantes- ¿q-que demonios? –mis ojos se abrieron como platos cuando vi a DinoBeemon justo frente a mí, abriendo los brazos y volando a velocidad contra mi- ¡Ah! ¡Aléjate de mi insecto miserable! –intente moverme pero el temblor de mis piernas me lo impidió, dejando que DinoBeemon consiguiera sujetarme- ¡Déjame!
¡Cállate! –Voló muy alto y después observo a Fangmon- ¡Escúchame mamífero! ¡Esta humana es mi presa! ¡Si alguien comerá sus datos soy yo! –DinoBeemon me observo con esa mascara horrible suya pero podía sentir como por dentro sonría con maldad- jeje… ahora te daré lo que algunas serpientes llaman “el abrazo de la muerte” ¡Jajaja! ¡Te voy a aplastar! –Comenzó a apretarme con mucha fuerza mientras yo solo podía gritar de dolor- ¡Jajaja! ¡¿Qué ibas a hacerme?! ¡¿Aplastarme como a un insecto?! ¡Creo que ahora los papeles se invirtieron! ¡Jajaja! ¡Te aplastare humana!

Era horriblemente doloroso, sentía como sus brazos estaban aplastando mis huesos, apenas podía moverme y la respiración se me dificultaba… apenas podía escuchar nada que no fuera la risa de DinoBeemon y el zumbido de sus alas… creo que podía escuchar a Labramon atacándolo a distancia pero… creo que no acertó ningún golpe… fuera como fuera… mi visión se estaba poniendo borrosa… como si me hubiera llegado la hora… tsk… ¿morir así?... ¿aplastada por un insecto al que iba a aplastar?... es simplemente… patético.

Me encontraba en un trance del que parecía que no iba a poder salir, una y otra vez me preguntaba... ''¿Que es lo que quiero hacer?'' Había tantas respuestas que pasaban por mi mente: Quiero pasar el año, quiero ganar un nuevo torneo de basquetball, quiero volver a ver a mi...- ...Mamá... -el destello celeste en la zarpa de Fangmon, que se encontraba estupefacto mirando hacia el cielo comenzó a incrementar a cantidades mayores, de tal forma que el mismo digimon se aturdiera.

- AGHH... mucha luz... -cerró sus ojos con fuerza y soltó el dispositivo, que quedó en el suelo brillando.
- ¿Eh?... -aún no lograba recuperarme del todo, pero podía sentir algo resbalar sobre mi mejilla, por lo que sin pensarlo la toqué y me percaté de que era..- ¿Una lagrima?... -miré hacia el cielo en cuanto escuché un grito desgarrador de una voz muy conocida. Mi corazón dio un brinco del susto, y lo peor fue cuando vi a Emily siendo estrujada por ese digimon amorfo- ¡EMILY! -corrí hacia donde se supone que estaban ellos, aunque estando yo en el suelo mirando a Dinobeemon furiosa- ¡Sueltala por favor!
- ¿Hm? ¿Una humana está intentando darme ordenes?
- No son ordenes... pero... ¡Te pido por favor que la sueltes! No le hagas daño, ¡Ella no tiene la culpa de tus pesares!
- ¿De mis...? ¿¡Y TU QUE DIABLOS SABES DE ESO!? ¡Voy a comermelos a todos, devoraré cada uno de sus datos y me haré mas fuerte, MAS FUERTE QUE TODOS USTEDES!
- Por favor... sueltala... -hacía fuerza en mis puños para evitar llorar, mostrando mis dientes- ¡SUELTALA! -grité con fuerza, tanta fuerza que resonó en eco.
- ....¿Así que quieres que la suelte?... -todos se quedaron en silencio un momento, lo miré confundida- Está bien... si me lo pides de esa manera... -dejó de apretarla y la tomó de la cabeza, estirando su brazo- ¡LA SOLTARÉ! -tal como lo dijo, dejó de sujetar la cabeza de Emily e hizo que ella comenzara a caer al suelo.
- ¡NO! ¡Emily! -rápidamente corrí hacia donde su sombra se proyectaba y salte al suelo bocarriba, recibiendo todo el impacto de su cuerpo sobre mi estómago- AGH...
- Jejeje... esta escena no me satisface en lo absoluto... -mostró sus garras- Ya que cumplí tu ultimo deseo... voy a arrancarles su Digicore con estas preciosas... ¡A ambas!
- Ugh... No...
- ¿No? ¿Dijiste que no? -vió como me comencé a levantar, aún con Emily encima, quedando sentada sobre el suelo.
- Eso dije... no voy a dejar que hagas eso... porque ya sé lo que quiero hacer -saqué de mi bolsillo mi digivice que seguía brillando como hace unos momentos.
- ¿¡Qué, cuando lo tomó!? -exclamó incrédulo Fangmon.
- ¡Quiero proteger a mis amigos! -en mi mano apareció un destello que de la nada tomó forma de un montón de hilos cubiertos de datos.

Nuevamente la voz resonó en mi cabeza- Libera tu determinación en un haz de luz azúl -cerré los ojos e intensifiqué esos datos en mi mano mientras mi digivice se encendía mostrando de nueva esa estatuilla.

- ¡DigiSpirit Rookie... Shinka! -dije las primeras palabras que escuché decir a mi espiritu mientras pasaba los datos sobre el detector del digivice.

Fui envuelta por todos esos datos que antes habían sido solo acumulados en mi mano- No sé que es lo que está pasando pero... se siente bien -en cuanto los datos cesaron dejaron ver mi nueva forma: la de un pequeño perrito de pelaje blanco con un hermoso collar dorado que brillaba con la luz del sol. Abrí mis ojos, de un color azul intenso.

- ...¡Salamon!

No sé qué ocurrió… me sentía agotada… apenas podía moverme… sentí como algo apretaba mi cabeza… ¿DinoBeemon estaba sujetándome?... si… era lo más probable pero cuando sentí el viento por mi cuerpo, supe que estaba cayendo pero algo detuvo mi caída… entonces pude recobrar parte de la conciencia, y lo primero que vi fue a Mato… ella… me había salvado… tsk… si no fuera tan patética podría haber evitado esto… aunque… cuando escuche lo que ella quería… se me dibujo una pequeña sonrisa pese a mis pocas energías… ella quería protegerme… así como a Labramon… entonces pude ver su digivice con claridad… era un D-Scanner… eso significaba que ella podía transformarse en digimon… genial… dios… aun estoy mareada, pero no tanto como para evitar ver la transformación de Mato… ella… se volvió una Salamon… je… supongo que tenemos oportunidades mas grandes ahora pero… seguimos en problemas por DinoBeemon… hack… contra Fangmon tenemos oportunidades pero con ese bicho… no me imagino cómo le ganaremos… aunque… pude sentir algo raro… eran pasos rápidos.

Hack… ¿q-que es eso?... –vi una extraña silueta salir de entre los arbustos- Mato… haaa… -me sujete los brazos con fuerza, realmente DinoBeemon aplico mucha fuerza- hack…
¿Ah?... ¡¿Pero qué?! –levante la mirada y vi algo… sorprendente, era un humano, se vestía muy extraño… parecía tener un traje de guerrero y además una bufanda y… ¡¿le había dado un puñetazo a DinoBeemon?!- ¡hack! ¡¿Cómo te atreves patético huma…?! –no termino su dialogo por que el humano le dio otro puñetazo, haciendo que DinoBeemon cayera al suelo- ¡YA BASTA! ¡TE APLASTARE COMO A LA OTRA HUMANA! ¡¿Quién te crees que eres?!
¡Te diré quien me creo! –tomo una piedra y se la quebró en la cabeza- ¡Me creo el compañero del Labramon al que atacaste! ¡Y ahora mismo te voy a enseñar el infierno!
¡Scott! –vi a Labramon levantarse mientras se sujetaba el brazo, estaba moviendo la cola como si su salvación hubiera llegado- dios… ¡Gracias amigo! ¡Ahora si es una pelea justa!
¡Tu cállate Labramon! ¡Estoy más que furioso! ¡Abandonar la base sin decirle a nadie! ¡Ni siquiera a mí! ¡Dios! ¡Si no fuera que te quiero mucho! ¡Ahora mismo te pisaría la cola! –“Scott” se ve como mi tipo de persona, enojón y aparentemente con problemas de control de ira- Tsk… ¡Que alguien me diga que ocurre aquí!
¡Yo te lo diré! ¡Tu muerte! –DinoBeemon le dio un puñetazo a Scott lanzándolo directamente contra mi- ¡LOS MATARE A TODOS! ¡SUS DATOS SERAN MIOS!
Tsk… dios… perdón –observe a Scott de frente, aunque fue unos segundos, después se levanto y saco su digivice, era como el mío, pero en blanco y negro- ¡Labramon! ¡Ahora patea a ese bicho! ¡Cambio de carta! –Saco una carta de sus bolsillos y esta se torno de color azul- ¡Carta azul!

Después de eso todo volvió a ser borroso, pero creo que vi a Labramon comenzar a brillar con gran intensidad mientras cambiaba de forma.


Estoy consciente de que ahora que Scott esta aquí, estoy en más de un millón de problemas, pero también estoy consciente de que ya tenemos una ventaja para ganar, desgraciadamente no tengo el poder para evolucionar a nivel Mega, pero al menos Scott me brindara el poder para evolucionar a nivel Ultimate, por primera y espero que única vez en la ciudad del inicio, recurriré a mi lado bestial. Luego de unos momentos me volví la bestia infernal que soy, Cerberusmon.

¡AAAAHHHH! ¡Te mostrare el infierno DinoBeemon! –comencé a gruñir con bastante fuerza y después salte sobre DinoBeemon, clavándole mis garras en sus alas- ¡HELL FIRE! –dispare mi llamarada directamente sobre ese insecto, pero este me dio un puñetazo lanzándome a un costado- hack… GRRRRR…
¡Hack! ¡Mamífero! ¡Te voy a destripar! –Ese insecto comenzó a volar a toda velocidad y después me dio un puñetazo directo a la cara- ¡Te mostrare que no debes meterte conmigo! ¡Cuando te acabe a ti! ¡Al humano con la cicatriz y a todos los demás! ¡Seré tan poderoso que nadie podrá derrotarme!

¿Que había pasado? ¿Porque mi cuerpo se sentía tan extraño?- ¿Porque... todos son tan grandes ahora? ¿Cuando fue que crecieron? -miraba a mi alrededor confundida hasta que bajé la mirada y miré mis... ¿Manos? no... ¡Eran patas! Me levanté a dos patas y sujeté mi rostro con ellas.

- ¿¡QUE... QUE ME PASÓ!? -caí de nuevo al suelo porque ya no podía mantenerme mucho tiempo sobre mis pies... o patas traseras- Me... ¿Me convertí en un digimon? -aún no podía creer lo que había sucedido, pero escuché mi nombre ser mencionado y de inmediato pasé mi mirada hacia Emily- ¡Emily! -corrí hacia su lado y la miré preocupada- ¿Te encuentras bien?... Creo que necesitas descansar...

Ahora me encontraba en el cuerpo de un digimon, creo que ya entendí eso, pero... ¿Eso significa que mis habilidades han aumentado?- Escucho algo... -mis orejas se levantaron al igual que las de un perro y mi mirada se giró rapidamente hacia donde se escuchaba ese sonido- Tambien lo huelo... es... ¿Una persona? -de entre los arbustos apareció de repente un... ¡Un chico, si, era un humano... estoy segura! Quien se aproximó brutalmente contra Dinobeemon y lo mandó a volar con un par de puñetazos- Es... increíble... ¿Cómo pudo hacer eso? -de la nada fui levantada del suelo por un potente cabezazo, siendo arrastrada por el suelo varias veces debido a la fuerza del impacto. Quedando tirada en el suelo.

- Due-Duele... -mis ojos se abrieron de repente y me moví involuntariamente, rodando por el suelo, hacia un lado y evitando el zarpazo de Fangmon que incluso había enterrado sus garras al suelo por tanta potencia en su golpe- ¡Fangmon...!
- No sé como me quitaste el objeto que tan justamente robé... incluso te convertiste en un digimon, pero... -rió en sus adentros- Eso no te va a salvar, pequeña cachorra... Te voy a enseñar que nadie se debe meter con el gran ladrón... ¡Fangmon! -me mostró sus fauces, lo cual me hizo temblar.
- No... ¡No me importa quien seas! -me coloqué firmemente en el suelo, mirandole con determinación- No me importa tampoco que me hagas a mi, pero fuiste capaz de herir a mi primera amiga aquí este mundo... ¡Y no pienso dejar que lo hagas de nuevo! -le mostré mis colmillos.
- ¿Quieres apostarlo?... -miró macabramente a Emily mientras relamía sus labios.
- No sé que planeas hacer pero... ¡No te dejaréeeeeeeeeeeee! -en cuanto dije esto ultimo, unas ondas sonoras y visibles comenzaron a dispersarse desde mi boca hacia Fangmon, quien al ser afectado por esto comenzó a retorcerse en el suelo sin poder moverse a voluntad.
- Tsk... Qué... ¿Qué me hiciste?... No puedo moverme...
- ¿Ah..? ni... ni yo lo sé... -¿Se tratará de una de las tecnicas de este digimon? pero aun no sé controlarlas...

DinoBeemon era un enemigo formidable, sin duda me costaría mucho poder derrotarlo pero ahora que tengo el poder de Cerberusmon, yo también puedo ser un oponente formidable, no solo porque mi velocidad es por mucho superior a la que tenia siendo Labramon, si no porque mis estrategias de batalla son muy diferentes, je… ¡Ahora no perderé! Emily y Mato están en peligro, no puedo permitirme el fallar. Mientras intentaba esquivar los zarpazos de DinoBeemon, pude olfatear a una nueva digimon, entonces con mis cabezas extras busque a esa digimon, entonces vi a una Salamon pero… no entiendo nada, ¿de dónde salió?... será que… ¿no será que Mato era una Tamer con digispirit?... debe ser Mato porque es la única que falta aquí y Emily esta medio inconsciente… bien… pero ante Fangmon ella tiene pocas probabilidades… mi única opción será aumentar mi poder y tratar de ayudarla… pero primero necesito unos segundos de tranquilidad para aumentar mi poder.

¡Ah! ¡Ya déjame en paz! ¡Insecto miserable! ¡¿Atacar a una humana indefensa?! ¡Eso es bajo aun para un ser repugnante como tú! ¡Desesperado por datos y cegado por la furia! –esquive los zarpazos de DinoBeemon y después le di un golpe a la cara con mi cola- ¡Me das asco! ¡HELL FIRE! –dispare una llamarada verde a su pecho alejándolo de mi y después me puse en posición- GRRRR ¡Scott! ¡Necesito una buena carga de energía! ¡Asique ayúdame!
¡Bien! ¡Cambio de carta! –Scott saco rápidamente una carta de sus bolsillos y la paso por su digivice mientras este comenzaba a brillar- ¡Beast’s Instincts! ¡Adelante! ¡Jinrou Mode Activado! –Extendió su brazo mientras el digivice brillaba con gran intensidad-
¡Bien! ¡AAAAHHHH! ¡Cerberusmon! –Mi armadura comenzó a brillar con gran intensidad- ¡Cambio de modo!

Con solo decir esas palabras, pude sentir como mi flujo sanguino aumentaba su velocidad increíblemente. En cuestión de momentos, me pare en dos patas, mientras que mis patas delanteras se adaptaban a mis hombros, volviéndose brazos, mis patas traseras se enderezaban y alargaban, las garras de mis nuevos brazos se volvían mis hombreras, mientras que mis hombreras-cabezas se transformaban en 2 grandes cañones unidos a mis manos. Finalmente sentí como bran parte de mi armadura desaparecía o se modificaba, dejando ver mis nuevos brazos al descubierto, así como mi cabeza principal se volvía mas humana, dejando cubierta la parte superior con mi casco de Cerberusmon.


¡CERBERUSMON JINROU MODE! –Abre mis ojos mientras de mis nuevas manos cañón expulsaba una pequeña llamarada verde- je… ¿listo para tu castigo, DinoBeemon? –sonríe levemente con un toque de malicia, sinceramente, cuando soy Jinrou… me siento más destructivo y sádico- porque yo si…
¡¿Qué clase de digimon eres?! ¡No tengo datos de tu especie! –el insecto comenzó a retroceder asustado e incluso creo que quería intentar mantenerse firme- ¡Atrás! ¡El que ahora seas un digimon del tipo humano no hace ninguna diferencia! ¡Sigues siendo un mamífero inferior! ¡ATRÁS!
Je… oblígame –me impulse hacia adelante y antes de que siquiera pudiera mover un musculo, DinoBeemon recibió directamente un golpe con mi mano-cañón cerrada justamente al pecho- ¿sigo siendo inferior?... je… Hell Fire –abrí el cañón y le dispare directamente mi fuego infernal impulsándolo hacia arriba mientras se quemaba- jaja… mírate insecto… te estás quemando… y… este mamífero fue quien te quemo… ahora… déjame bajarte para que aprendas la lección de todo esto… -sonrei macabramente y me prepare para saltar- nunca te metas con mis amigos si no quieres una lesión permanente –di un gran salto hacia arriba mientras mis piernas eran rodeadas por energía oscura- ¡KILLER KICKS! –cuando llegue un poco más alto que DinoBeemon comencé a darle cientos de patadas a tal velocidad que era imposible de ver, y después de unas 50 o 70 patadas, lance a DinoBeemon directamente contra el suelo, completamente herido y sin capacidad de volar- jaja… -aterrice justo frente a él y sonríe con gran malicia- y bien… ¿seguirás esforzándote para ganar una pelea que no puedes ganar o te rendirás de una vez?
Hack… ¿q-que clase de monstruo eres? –DinoBeemon se paro temblando de dolor, no me sorprende-
Je… soy el monstruo de tus pesadillas… -realmente… por alguna razón me gusta mucho esta forma… me siento… renovado… seguro y confiado de mi propia fuerza-

No sabía como lo había hecho... pero al parecer había logrado hacer que este digimon quedara paralizado, el problema es que no sabía cuanto tiempo duraría dicha parálisis. Me quedé atónita viendo como Fangmon hacía demasiado esfuerzo por volver a moverse, lo lograba, pero eran pasos muy pesados y rígidos que definitivamente le impedirían moverse o efectuar un ataque a gusto- ¿La batalla terminó? ¿Gané? -me dije en mis adentros, ya que la voz no podía salir de mi garganta- No -escuché de nuevo esa voz en mi cabeza, miré hacia mis lados exhaltada- Esto aún no termina, Mato... -intenté no asustarme y permanecí en mi lugar mirando hacia el vacío- ¿Quien eres...? ¿Porque afirmas eso?... -antes de que esa voz me pudiera responder se sintió una extraña energía de grandes cantidades aparecer en el lugar.

- ¿¡Que es eso!? -comencé a girar intentando hallar la fuente de esa cantidad de energía que me hacía tener ''piel de gallina'' ¿Se tratará de un sentido de estas criaturas? Es casi como un ''mal presentimiento'' pero mucho mas potente ya que mi cuerpo y consciencia se veía afectada tambien minusculamente.

Pronto vi a una especie de persona cubierta por una armadura y un casco similar al de un perro, es tan extraño verlo que incluso se me dificulta describirlo, pero puedo jurar que esas cabezas gigantes que tenía en sus manos resultaban ser unas armas... si no lo son, entonces es un gran peso que le dificultará moverse- ¿Quien es ese sujeto...? ¿Es otro digimon?... -ahora el problema es que no sabía si era bueno o malo, pero mi duda se contestó cuando vi como el digimon atacaba a Dinobeemon- ¿Ah? ¡Es un aliado! -me había invadido un sentimiento de alegría, incluso estoy segura de que si esta forma tuviera cola se estaría moviendo, ¿Que clase de perro no tiene cola? Estos digimon son muy curiosos...- Mato, ten cuidado -escuché en mi cabeza, pero antes de que pudiera preguntar...

- ¿Cuidado de q...? -fui brutalmente callada por que una especie de rayo oscuro cubrió todo mi cuerpo, comenzando a quemarme- ¡¡AHHHHH!! -era lo unico que podía hacer, aunque no quisiera, en este momento. Gritar de dolor. Mi cuerpo se había entumesido completamente por ese terrible dolor que recorría cada musculo, hasta que el ataque cesó y me dejó en el suelo con varias marcas de heridas.
- ¿Enserio creíste que ese insignificante tecnica me detendría por tanto tiempo? Debiste aprovechar tu tiempo, tonta... -se rió en sus adentros Fangmon, quien aparentemente ya se había recuperado de la parálisis.

No podía dejar de temblar- ...Esto duele.... duele mucho... -tenía que conseguir las fuerzas necesarias para volver a pararme, pero era muy dificil...- Si no hago algo... ese Fangmon me eliminará... -yo no quería morir aquí... ¡No podía morir aquí!

DinoBeemon ciertamente era un enemigo patético… por como temblaba de miedo me hacia darme cuenta fácilmente que nunca tuvo la seguridad de atacar este lugar… jeje… ¿acaso pensaba atacar y huir?... no… eso sería muy inteligente… je… ya veo… el solo quería atacar y esperar conseguir los Digitamas suficientes para evolucionar a nivel mega y destruirlo todo… pfs… necesaria por lo menos todos los Digitamas de la ciudad… con que uno faltara este plan habría sido inútil… y ahora… le hare pagar por todo lo que ah hecho… nadie lastima a mis amigos y vive para contarlo… jeje… planeo absorber a ese insecto junto con el lobo de caricatura con el que pelea Mato… los matare a ambos y absorberé sus datos… no me importa que… ¡Los matare a ambos por ser unos miserables!

Je… muy bien DinoBeemon… ¿ya te rendirás y me harás las cosas fáciles?... –avance lentamente hacia el insecto mientras mis manos-cañón se preparaban para lo que sea- vamos… morir no es tan malo… al menos… eso fue lo que escuche… jeje… ahora… ¿listo? –Levante mi mano-cañón derecho y le apunte mientras preparaba mi llamarada- ¡Ahora muere!
¡Tú muere! ¡Mamífero inferior! ¡MASCARADA! –en ese mismo instante, antes de disparar mi llamarada, sentí como era tacleado y pude ver que fue por DinoBeemon, que apareció repentinamente a mi lado- ¡Jaja! ¡Ahora si será una pelea más justa! ¡Al ataque mis copias! -¿copias?... je, que cobarde… crear ilusiones de sí mismo, dios, cayó más bajo de lo que creí posible- ¡Muere! –realmente sus copias eran veloces, podía sentir cada golpe en un lugar completamente diferente al anterior, pero ciertamente, ningún ataque me afecto en lo absoluto, de hecho, aumentaron mis ganas de matar- ¡¿Y quién debe rendirse ahora?! ¡¿Eh?! ¡Habla sucio mamífero! –el DinoBeemon original me dio un puñetazo directo al rostro- jeje… ¡¿Ah?!
¿Qué?, ¿eso es todo? –reí levemente en un tono de burla y después sujete el brazo de DinoBeemon con mi mano-cañón derecha y la cerré, cortándole el brazo- ups… y también… auch –le di un puñetazo con mi brazo libre lanzando a DinoBeemon contra el Fangmon que atacaba a Mato- no importa cuántas copias crees… una copia barata nunca tendrá la fuerza del original… y ahora no tengo la fuerza de un Ultimate… ningún golpe que tú me des me afectara tan fácil… ahora… -corrí hacia DinoBeemon y di un bran salto al aire- ¡HELL TORNADO! –Comencé a girar en el aire mientras usaba mi Hell Fire, consiguiendo crear un pequeño tornado que aplasto sin problemas a DinoBeemon-
¡Aaaahhhh! ¡Mamífero desgraciado! –Intento frenarme con su mano restante pero fue inútil, simplemente rompí su armadura poco a poco hasta que finalmente lo atravesé quemándolo por dentro- ¡Me vengare! ¡Aaaahhhh!

Como si pudieras hacer eso… tus datos solo servirán para llenar uno de mis 3 estómagos… jeje, fuera como fuera, al absorber los datos de DinoBeemon, observe a Fangmon con desprecio, ciertamente con DinoBeemon me parecía suficiente por un día, pero con un digimon del tipo ladrón como el… je… creo que hoy comeré muchos datos… y es raro… es la primera vez que me importa absorber datos realmente… quizás sea por la parte de Andruh en mi… pero no importa… ahora mi objetivo es derrotar a todo digimon que se interponga en mi camino.