Digimon Adventure Rol: Quimera Party [Evento/Capitulo]

El día continuo igual de aburrido que siempre, yo totalmente aburrido en el mostrador del puesto, intentando no caer dormido con una mano como soporte para no caer de cara contra la madera que conformaba el mostrador, mientras que con la otra hacía sonar la madera moviendo rápidamente los dedos… que desesperación la mía para llegar a hacer ese típico gesto con los dedos que suelen hacer las personas cuando esperan algo. Como sea, además de estar al borde de caer totalmente dormido, BR se veía cansada, quizás los dos locos de antes le dieron bastante trabajo, y por locos me refiero a dos verdaderos lunáticos… realmente, si no fuera por que parecían saber cuándo parar, diría que estaban tan locos como mi hermano menor, Frederick… digo… ¿Por qué tanta competencia?, primero vi a esos dos chicos correr de puesto en puesto haciéndose extraños retos entre si, después vinieron al nuestro y comenzaron a lanzar las flechas de distintos modos, y las flechas que estuvieran por lastimar a alguien, BR siendo la única con la velocidad apropiada, las detenía, por suerte esos dos se fueron corriendo cuando un Flarelizarmon llego para correrlos, aunque ese digimon tenía ropa encima, ropa con el logo de los Unión Savers… tsk… bueno, no importa, al menos los corrió y eso es lo que me alegra. Finalmente, nadie termino por acercarse al puesto, solo venían digimons que preguntaban por ciertos puestos u atracciones, ¿entonces dejamos de ser un puesto de juegos para volvernos un puesto de información?, que patético… si el trabajo de hoy era muy aburrido, pues ahora lo es mas. En fin, mientras yo sufría por dentro con la semejante aura de aburrimiento a mi alrededor, pude visualizar a lo lejos, a un pequeño digimon con forma canina, orejas y cola rosada de palee blanco y ojos rojizos, llegando casi al rosa supongo… sin duda era Labramon, puedo reconocerlo a él entre un millón… pero… tenía algo raro, ¿acaso estaba llevando algodones de azúcar en su mano?... tsk, ¿acaso hiso su trabajo siquiera?... dios, yo y BR muriendo de aburrimiento, y yo de hambre principalmente, y Labramon… ¿comprando comida?... tsk… si no fuera mi compañero, le gritaría.

¿Qué haces aquí Labramon?, deberías estar patrocinando el lugar y… por el amor al inframundo dime que NO te detuviste a comprar algo de comer porque si es así… te juro que te jalare tan fuerte la cola que desearas no tenerla pegada al cuerpo –realmente no estaba en mi mejor día, aburrimiento, hambre, dos locos, un trabajo que odio, por favor denme un respiro- tsk… como sea… dime que al menos hiciste tu parte del trabajo antes de venir aquí y… ¿de dónde sacaste dinero para esos algodones de azúcar? –arquee levemente la ceja confundido, no le di dinero y no se lo daría hasta que completara su parte-
Estuve ayudando a algunos digimons todo el día, dándoles indicaciones y recomendándoles ciertas atracciones, además de patrocinar el lugar… y en agradecimiento, me dieron algunos bits que les sobraban y con eso les compre estos –Labramon nos entrego a mí y a BR un par de algodones de azúcar con una sonrisa en el rostro, el mío era rojo y el de BR purpura- supuse que tendrían hambre y como no tenía dinero para hamburguesas o algo así, me pareció mejor idea traerles estos
Ah… muchas gracias Labramon –dije en un tono vago y seco, mientras tomaba el algodón de azúcar y le daba una probada, encontrando un sabor a fresa bastante… agradable supongo- rico… y como es lo primero que como desde el desayuno, puedo decir que es lo mejor que eh comido en bastante tiempo… se que exagero pero bueno, soy un exagerado por naturaleza –dije tranquilamente dándole otro mordisco disfrutando del sabor dulce, seguramente no comería nada mas en algunas horas- bueno Labramon, vuelve al trabajo por favor, no hay tiempo que desperdiciar, además de que quiero cobrar la mayor cantidad de tiempo posible antes de que marque nuestra renuncia al trabajo… somos mercenarios, no simples contratistas…
¡Entendido! Tu solo déjame una hora más como mucho y veras que nos iremos pronto –Labramon se fue corriendo alegremente tras hacer un saludo militar depositando su confianza en mi-

Espero que Labramon pueda cumplir, la última vez que estuvo solo y decidido en un lugar como este, terminamos por irnos a las 6 horas, je… realmente es un niño pero bueno, supongo que es el niño que me da una razón para trabajar.


Me gusto mucho ver a Scott comer el algodón de azúcar y que no me dijera algo como “no lo necesito pero muchas gracias”, jeje, se que le aburre estar aquí pero me alegra haber conseguido el trabajo, después de todo, estamos en un gran parte de diversiones, tenemos descuento de empleados en la comida y algunas atracciones y además dirigimos un puesto de juegos, no entiendo como Scott puede quejarse de esto pero… bueno, supongo que así es él y no puedo hacer nada… je, suerte que también vino BR o si no el no aguantaría tanto tiempo. Fuera como fuera, me aleje rápidamente saliendo del parque avisándole a todos que fueran, y con mucha suerte, casi todos los digimons me escucharon y se fueron al parque, jeje, me alegra poder ayudar pero… luego de un momento creo que me metí donde no debía y termine siendo rodeado por varios digimons que estaban haciendo fila para ver el cuartel de los US. No sé bien como termine aquí… primero estaba recorriendo la fila avisándole a la gente que fuera al Great Park una vez que el recorrido terminara pero… una Harpymon pensó que buscaba una forma de entrar antes que nadie por lo que me metió a la fila junto a ella… jeje, a veces me meto en problemas cuando quiero hacer algo en serio. Fuera como fuera, cuando nos toco a mí y Harpymon el ir en un grupo de recorrido, pude captar un olor muy conocido… aunque al principio creí que era mi imaginación, luego de dar una segunda olfateada, no cavia duda, era el aroma común de una humana que me agrada mucho, además de una humana que no solo nos ayudo a mí y a Scott a salvar el mundo, sino que también nos brindo una mercenaria nueva, mejor conocida como Samanta; mejor conocida como: Luna. Jeje, hacia mucho que no la veía, al menos no desde que visito la base MI, me pregunto cómo es que termino en este recorrido… aunque quizás tenia curiosidad y se metió, no me sorprendería, bueno, debería buscarla y pasar un rato con ella antes de irme, supongo que a Scott no le molestara si me retraso un poco por acompañar a Luna.


Me gusto el gesto de amabilidad de Labramon, y eh de admitir que el algodón de azúcar sabor a uva estaba delicioso, y como dijo Scott, fue lo mejor que pude haber probado en todo el día… supongo que la locura de aquellos dos humanos que se la pasaron lanzando flechas de maneras tan extrañas me dejo cansada… pero fuera como fuera, el aburrimiento de no hacer nada también ayudaba a que el cansancio se apoderara de mi cuerpo, creo que de no ser porque estaba concentrada en terminar el trabajo, me habría quedado dormida junto a Scott. Bueno, no importa mucho eso… solo sé que después de un rato de que Labramon se fuera a buscar más gente, aparecieron bastantes digimons con ánimos de jugar en nuestro puesto de modo que el trabajo inicio de nuevo y pude mantenerme completamente despierta, aunque no sé si es la misma historia con Scott, el ya estaba a medio dormir antes y después de que Labramon se fuera… no estoy segura de que tanto resista pero espero que lo haga por lo menos una hora más… así podremos irnos y quizás podamos disfrutar del parque un rato.

Dios… realmente dios… no entiendo porque tuvieron que posponer los eventos de atletismo y demás para ver una especie de pelea en el campo de competición… o eso entendí, sea como sea, me aburre ver peleas que no son mías o que no me ayudaran para estudiar a mi oponente y asi darle una buena paliza en una posible pelea… tsk… bueno, al menos el aburrido de mi compañero accedió a irse conmigo a ver que podríamos hacer por el lugar. Lo primero que sugerí fue ir a algún lugar donde pudiera participar en alguna pelea, pero el único lugar posible era el coliseo del cual nos habíamos ido para no ver una pelea que sin duda, terminaría en victoria del equipo local, sé que es así, siempre es así, mas cuando es un Deva el que pelea… pfs, que aburrido, suerte que el Mihiramon que intento matarme no era el verdadero Deva… si no, realmente habría muerto pero eso no importa tanto ahora… fuera como fuera, Zereck sugirió ir a un museo en el distrito de los Nightmare Soldiers, yo por mi parte, me negué profundamente, la idea de venir a este lugar, además de ver que pueden hacer los US, era divertirnos, pero claro, mi compañero tenía que ser un aburrido inigualable que preferiría encontrarse en la base RK llenando papeleo… ¡POR DIOS! ¡SANTO YGGDRASSIL O COMO SE LLAME ESE SUPUESTO DIOS FALSO QUE TENEMOS LOS DIGIMONS! ¡DALE A MI COMPAÑERO ALGO DE EMOCION! ¡A ESTE PASO ME CRECERA LA BARBA DE JIJIMON COMO NO ENCUENTRE ALGO DIVERTIDO QUE HACER!

Dios… a este paso me crecerá la barba de Jijimon… -dije vagamente mientras caminaba con Zereck a mi lado, y claro, el no me escucho en lo absoluto porque estaba concentrado en ese libro suyo, dios… ¿Qué puede ser más interesante que esta celebración?...- (¿Por qué mi compañero no puede encontrar la emoción de una fiesta cuando la tiene frente a él?... pfs… incluso comienzo a arrepentirme de no haberme ido con el perro sin adiestrar… ahora que lo pienso… ¿Qué estará haciendo el torpe ahora?) dios… como me arrepiento de no haberme ido con el perro sin adiestrar… seguro se está divirtiendo más que nosotros…
No seas exagerado Chaos, ya encontraras algo divertido que hacer, mientras tanto solo caminemos por el lugar, ya verás que la emoción llegara pronto –si claro, hablo el que NUNCA sintió la verdadera emoción sin ayuda de nadie-


Me solía bastante la zona posterior de la cadera tras haber caído de las ramas del árbol, aunque claro, seguramente  cualquiera habría sentido lo mismo, después de todo las ramas se quebraron de sorpresa asique no tuve la menor de las preparaciones para intentar aterrizar de una forma decente, pero de igual modo, no soy un gato, asique caer de pie no estaba garantizado, pero al menos con algo de preparación habría podido hacer el intento… je… dios, con lo mucho que me llevo mal con los gatos y ahora los uso de referencia… seria irónico que me caiga un gato encima después de esto. Fuera como fuera, me levante del suelo sacudiendo las partes de mi cuerpo que tenia tierra, usando mis manos para acelerar el proceso, pero me detuve rápidamente al sentir dos presencias conocidas, bueno, más bien eran 4, 2 que me daba gusto de sentir, y otras dos que no… aunque no puedo definir concretamente de quienes eran esas dos presencias que me hacían sentir rabia por dentro… seguramente algún viejo conocido que me hiso pasar problemas alguna vez, no lo sé… mis sentidos ya no son los de MagnaGarurumon asique reconocer a alguien es más que difícil para mí, al menos alguien que no sea de mi agrado. En fin, las otras dos presencias que sentí, podía reconocerlas perfectamente porque solo 5 personas son de mi agrado, y dos de ellas no se encontraban conmigo, naturalmente esas dos personas eran Zereck y Chaos; las otras 3 eran una simpática Floramon que me mostro que no todos pueden causarme daño, otra era una humana bastante… curiosa, pareció hacer lo mismo que su compañera y me mostro que no todos tienen mal en su corazón como yo creía; el último era un Gaomon algo irritante y bruto pero bueno, yo soy igual de bruto asique me termino agradando, el problema es que parece no saber cuándo dejarse llevar por la brutalidad y cuando no… je… saltar a la cola de un Wingdramon en pleno vuelo… no sé si es demencia o valentía, pero ese lobo con guantes de boxeo me cae bastante bien, y por lo que detecto mi nariz canina, él y Flora se encontraban cerca de mi posición actual, solo me quedaba saber por dónde estaban. Al observar por todos lados, logre divisar al Gaomon y a Flora, no se encontraban muy lejos asique decidí acercarme tranquilamente, con ellos si puedo hablar tranquilamente, son mis amigos asique no tengo por qué ocultarme; de modo que rápidamente camine hacia ellos son una sonrisa en mi rostro, algo poso usual cuando me dirigió hacia otras personas, normalmente con otros mantengo una expresión bastante fría e indiferentes.

Flora, Gaomon, es bueno verlos después de tanto tiempo –me reí levemente y me acerque sacudiendo la mano levemente a modo de saludo, para después guárdala en uno de mis bolsillos- ¿Qué hacen aquí?, ¿acaso disfrutan del festival?, je… -pude notar que tenían una copa de helado o algo así, por lo que reí levemente entre dientes- jeje, se ve que si disfrutan del momento, si molesto puedo retirarme, no tengo problema, no entiendo el tema de las parejas pero puedo irme si interrumpo


Me quede haciendo malabares un buen rato hasta que finalmente, llego el digimon que esperaba: Dracomon. Je, realmente esperaba que el pequeño se ofreciera, es el único Dracomon que eh visto en todo el día después de Draco A obviamente, pero igual fue una sorpresa que aceptara tan rápido el querer ayudar en el acto, je… bueno, debo darme prisa si quiero causar alguna masacre, pero antes, ganar dinero, tengo que mantener la comida de Draco A y B, además de mi propia alimentación, jeje, no puedo descuidarme físicamente, si no, ¿Cómo ganaría dinero?, robar bancos no suena algo muy de mi estilo.

Muy bien, entonces el señor Zenit te dirá que debes hacer para que el truco sea 100% eficaz, es el mejor truco del señor asique intenta escuchar atentamente y pregunta si tienes alguna duda, preparare las cosas –observe a Draco A acercarse a la maleta donde tenía guardadas todas las cosas que necesitara para ese día, cuchillos, esferas, globos, explosivos, mi digivice, algunas cartas, detonadores y granadas- ¿Qué saco señor?
Con las vendas estaremos bien, Draco A –dije levemente, después tome en mis brazos al pequeño Dracomon de Sigrun Vinter y lo observe a los ojos sonriendo como una especie de payaso de circo, intentando transmitirle alegría y seguridad- escucha, el truco es simple, te lanzare al aire junto con mi Dracomon, darás un par de vueltas mientras estés en el aire y hare malabares contigo y mi compañero, ¿entiendes? –me reí levemente y lo deje en el suelo- mientras haga malabares contigo y mi compañero, Draco A te dará unas vendas y tendrás que envolverme con dichas vendas mientras en el aire, y así hasta que termine como una momia, el resto del truco puedo hacerlo yo solo, lo principal es que gires y me envuelvas, ¿okey?
Otra cosa, no debes dejar que los espectadores vean que tienes las vendas, por eso el señor tendrá las vendas ocultas en sus manos, debes tomarlas un segundo antes de que nos lance al aire, asi el publico quedara sorprendido y confundido al ver las vendas de la nada –Draco A regreso con vendas de varios colores en sus manos, las cuales tome y oculte bajo mis mangas- ¡Muy bien damas, caballeros, niños y niñas! Prepárense para el acto “Draco-Draco”, y démosle un aplauso a este valiente Dracomon que se ah dispuesto a ayudarnos

Seguí al otro Dracomon hasta estar frente a su tamer, iba a prestar mucha atención a su explicación del truco. Además, Sigrun y Veemon deben de estar mirando desde el banco y seguro que se alegran si me sale bien. El tamer me explicó en qué consistía el truco ¿hacer malabares conmigo? Eso no sería un problema, AeroVeedramon da muchas vueltas en el aire cuando vuelo con él en los entrenamientos así que dudo que me maree. Seguí escuchando con atención, también debía usar unas vendas que Zenit tendría ocultas en las manos y que debía agarrar en el momento justo.

- De acuerdo. Estoy seguro de que podré hacerlo- dije sonriendo.

No pude evitar mantener esa sonrisa cuando todos empezaron a aplaudir después de que Zenit anunciara el espectáculo. Me sentí muy feliz, aunque ahora debía de concentrarme y hacer que el truco saliera bien.


- Parece que Dracomon ya va a participar en ese truco de magia- le dije a mi relajado compañero.
- Como se nota que se está divirtiendo mucho- comento Veemon- A ver si algún día organizamos nosotros alguna fiesta en la base.
- Sería imposible organizar algo como esto en nuestra base, e incluso su localización es secreta y no creo que sea buena idea abrir sus puertas de esta manera.
- Lo sé pero una fiesta entre los miembros del clan no supone ningún problema. Aunque…- Veemon se quedó pensando un momento- me pregunto si con eso Zereck se divertiría.
- Cuesta mucho sacarlo de la biblioteca para otra cosa que no sea entrenar o una misión- le dije sonriendo ligeramente- Ya lo he intentado.

De repente escuchamos alboroto tras nosotros ¿Qué estaría pasando? Ni siquiera nos dio tiempo a girarnos cuando un BigMamemon cayó en nuestro lado de la fuente levantando bastante cantidad de agua que… fue a parar sobre nosotros dos. Aquello había sido tan rápido e inesperado que no nos dio tiempo a ninguno a esquivarlo.

Tanto yo como mi compañero estábamos completamente empapados, como si nos hubiésemos tirado a una piscina. Menos mal que no hacía frío o habría pillado un resfriado.

¿Por qué me pasa esto a mí? Me giré hacia la fuente justo cuando vi a un tamer al otro lado de ella salir con bits en la mano. No… él no… ¡Cualquiera menos ese tipo!  Menos mal que una Boarmon y Pajramon, juraría que se trata de la Deva, acudieron enseguida para detenerlo. Desgraciadamente, ese tipo tiene mucha suerte y acabó por huir en el vehículo de un digimon hasta desaparecer por las calles.

- ¿Quién era ese tamer? – preguntó Sigrun mientras se quitaba el exceso de agua de su cabello.

Al parecer Sigrun no había reconocido a Láncelo, y prefiero que sea así. A ella le cae bien pero a mí no ¡Y no voy a permitir que ese tamer me arruine la tranquilidad!

- Nadie que conozcamos, seguro que solo es uno de esos delincuentes que van a fastidiar un día como este- me apresuré a decir pero tratando de parecer lo más sincero que pude.

Labramon no regreso ni tampoco vi señales de él en mi digivice… sé que es algo exagerado el ver su posición luego de no más de 10 minutos de que se fuera pero tengo que aceptarlo; me preocupa el pequeño cachorro… ciertamente el no es el mejor en cuanto a guiarse; que incluso tuvo problemas siquiera para recordar donde quedaba el parque cuando se lo había dicho cerca de 11 veces estando en la base MI. Fuese como fuese; sentí voces cerca de mi puesto asique asumí que serian clientes; y efectivamente lo eran… pero cuando levante la mirada para dar mi “saludo agradable” antes de poder decir una mísera silaba; vi el rostro de Rena. La verdad me sorprendí de verla en este momento pero tampoco me sorprendí si soy justo… quiero decir; estamos en una de las fiestas/celebraciones más grandes de todo el digimundo… si yo estoy aquí; aun por motivos de trabajo, conociendo tan solo un poco a Rena, debí imaginarme que también vendría aquí para disfrutar de la fiesta y poder jugar los miles de juegos que debe ofrecer el parque. No dije nada, pero si me limite a sonreír levemente al verla; después de todo es una amiga y a los amigos hay que mostrarles respeto, y en el caso de Rena, una sonrisa creo que es la mejor forma de mostrarle respeto ya que las sonrisas son usualmente utilizadas para expresar felicidad y transmitir energía positiva.

Rena saludo con mucho entusiasmo como era de esperarse; luego le dijo a Loppi que saludara, lo cual ella hizo sin el menor problema… pero cuando se lo dijo al chico que tenia detrás de ella; este solo se limito a apartarse… no sé porque pero me agrada esa forma de alejarse de los que no conoce. En fin, Rena me dijo que ese chico llamado “Uzul” era su primo… vaya, curioso; a simple vista no parece pariente de Rena si soy sincero. Como sea; Rena se aparto un momento para saludar a BR con un cálido “buenas tardes”; lo que llamo la atención de BR a tal punto en que ella logro apartar su mirada del trabajo. Naturalmente BR no dijo nada, más que levantar la mano y saludar levemente confundida; quizás no estaba acostumbrada a tal acto de gentileza por parte de los visitantes a saludarla como si nada; usualmente la ven con ojos de bicho raro por el color de su pelaje… je; yo sigo sin ver de malo que una digimon se tiña el color de su pelaje a uno que le guste más.

Vaya Rena, la verdad es una pequeña sorpresa el verte aquí… se ve que este mundo es muy pequeño… -sonreí levemente y después observe a Lopmon- hola Loppi, también es un gusto verte… je, lástima que no esté Labramon aquí… le haría demasiada ilusión el verte, aunque ahora está trabajando… o eso quisiera creer –suspire levemente con un aire de preocupación- en fin, ¿querían tirar un poco no?... BR, ¿podrías preparar algunas flechas y blancos por favor?
En un momento –respondió con tranquilidad mientras que se disponía a buscar flechas entre todo el desorden que había tras visitas anteriores- oye Scott, ¿no habrás visto esas flechas muy usadas?, creo que ya hay que tirarlas antes de que se rompan
Descuida; ya las tire yo –le dije volteándome, luego regrese mi mirada hacia Rena- bueno, lamento la demora pero hace rato vinieron 2 chicos que hicieron todo un lio con las flechas… pero bueno, BR ya lo tiene todo solucionado… por cierto, ¿Qué hacen aquí?... quiero decir, entiendo que tu vengas a una fiesta Rena, pero esta es una fiesta de los Union Savers y creo que bueno… conociendo el clan donde estas tu, creí que no vendrías…

La verdad quisiera haber charlado un poco mas; pero entonces BR llego con el arco y las 10 flechas para dar inicio al juego. Ciertamente no me tome mucho tiempo para explicar en qué consistía todo. Solo había que acercar 6 de 10 flechas en los blancos fijados; las flechas que acertaran a los blancos más pequeños valían el doble, es decir que contarían como una flecha más acercada dependiendo del blanco en el que cayera.

¿Y qué cuentas Rena?, hace tiempo que no te veo, aunque lo mismo va para ti Loppi, seguramente Labramon se alegrara de saber cómo has estado en todo este tiempo –les entregue las flechas y el arco- buena suerte con los disparos… la verdad es que muchos digimons lo han intentado todo el día y han fallado… quizás porque no están acostumbrados a usar armas como esta… ah, por cierto, creo que no las presente –me aparte para que pudieran ver a BR- ella es BR, la mejor mercenaria que tengo a mi cargo y algo así como mi hermana por cómo llega a tratarme, discúlpenla si no ah sido muy comunicativa pero es algo tímida


¡¿Tímida?! ¡No soy tímida! Solo… solo no se me da bien las presentaciones… tsk… a veces odio que me digan tímida. Fuese como fuese; Scott ya lo dijo y no puedo decir nada… aunque realmente molesta bastante el que diga esas cosas, mas conmigo presente. Observe a la amiga de Scott un momento; ¿realmente Scott tenía una amiga tan… positiva?, cuesta creerlo… aunque cuando vi a la Lopmon confirme que realmente la humana era amiga de Scott. Quizás no tenga mucho sentido eso pero Labramon me ah contado mucho de su amiga Lopmon y la humana que la acompañaba; quienes también eran amigas de Scott. Admito que en un principio no creía algo así por que… sonaba muy difícil de creer, pero supongo que ahora eh confirmado todas las dudas, supongo.

… es un gusto conocerlos a los 3… -comente levemente antes de apartarme para que pudieran disparar con suma tranquilidad a los 9 blancos que habían- como verán; hay 14 blancos… 6 son naranjas; 2 son amarillos y el último 1 es blanco… los naranjas valen un punto; los amarillos 2 y el blanco 3… el objetivo es llegar mínimo a los 6 puntos con las 10 flechas…


A medida que avanzamos en el recorrido, me di cuenta de varias cosas… como que Floramon y Gaomon, el digimon raro que conocimos en el mundo humano junto con Luna y Scott, eran los guías del recorrido. Fue bastante gracioso el darme cuanta justamente cuando ya estaba por terminar el recorrido, aunque me aparte un poco porque mi objetivo era Luna… ciertamente quisiera ver a Floramon y a Gaomon pero bueno, ellos están ocupados con trabajo asique molestarlos sería muy malo de mi parte. Luego de buscar bastante, logre encontrar el olor de Luna; aunque tuve que esperar porque se la veía algo distraída… pero al final se me acerco y me pregunto qué hacía allí; bueno, la verdad es que yo también me pregunto lo mismo por que debería estar trabajando pero bueno… ¿Qué puedo decir en mi defensa?, si yo disfruto de ver a mis amigos, jeje.

Pues la verdad me gustaría estar jugando pero Scott, BR y yo vinimos por cuestiones de trabajo asique no podemos disfrutar la fiesta a plenitud… aunque me metí aquí por accidente cuando hacia mi trabajo, jeje… ¿no es irónico? –sonreí tranquilamente pero luego note algo raro en el tono y mirada de Luna- oye… ¿te sientes bien amiga?... si tienes problemas puedes contármelos –sonreí con tranquilidad y comencé a mover la cola- somos amigos y los amigos pueden confiarse secretos

Lunamon

¿Cuanto tiempo hemos estado alejadas de este mundo? Unos tres o cuatro meses, tal vez. Louise y yo patrullábamos el área del festival como tarea de cadetes de los Union Saver que somos. La verdad es que han ocurrido un sinfín de cosas. Hace alrededor de medio año Louise quedó atrapada en un área siniestra, el Dark Area: el infierno de los digimon. Un digimon malvado la envió ahí con un movimiento especial. Sus razones para enviar a Louise a dicho lugar siguen siendo desconocidas para nosotras. Entré en pánico. No sabía que hacer por mi cuenta... Recurrí al señor Fuji Raikomaru, un hombre de nuestra confianza. A Louise le gustaba considerarlo su ejemplo a seguir. El señor Fuji hizo hasta lo imposible por recuperar a Louise... Y lo logró, logramos dar con ella. Fuji siempre procuró a Louise como algo más que una alumna, tal vez como una hermana menor. Siempre tendrá mi agradecimiento por eso. El único inconveniente fue... Bueno, Louise ya no era una niña de 15 años de edad. Su cuerpo había cambiado. Miré de reojo a la chica pelirosada que caminaba a mi lado. Había crecido hasta medir 1.60, un gran estirón. Su cabello perdió volumen, aunque se seguía viendo tan sedoso como siempre. Su figura era curvilínea ahora, su busto era bastante grande a comparación de antes, al igual que sus caderas y sus piernas. Pero el cambio más grande fueron sus ojos... Sus bellos y enormes ojos rosados habían cambiado a un tono azul cielo, idéntico al de su digisoul. Además de esto, sus ojos ahora emanaban soledad y seriedad; incluso si mirases fijamente a ellos, notarías cadenas de datos rondando por su iris. La chica había envejecido 3 años en el Dark Area. Pasó tres años de su vida en ese oscuro lugar a pesar de que aquí solo habían transcurrido alrededor de tres semanas. Debió pasar por muchas cosas desde el momento en el que entró al Dark Area. Después de eso, Louise decidió volver un tiempo al mundo humano. Sus recuerdos eran borrosos, según ella. Decía no recordar mucho de lo que vivió en el mundo digital y le creo. Comenzó a trabajar como cantante de bares bajo el nombre de Elluka Clockworker. La verdad es que no lo entiendo, pero ahora le gustaba usar su pseudónimo para presentarse. Así que... Soy la única que la llama Louise.

Elluka

El día transcurrió aburrido. Esto no iba nada bien. La misión que se nos encargó como parte Union Saver fue patrullar la zona. De todos los trabajos, el más aburrido. ¿Como es que nuestra suerte es tan buena? Bueno, no puedo culpar a los comandantes. Me mantuve alejada de este mundo por un rato debido a razones personales. Me ajusté la chaqueta del uniforme. Tuve que pedir un uniforme nuevo a los US al regresar a los cuarteles. La verdad es que mis medidas cambiaron mucho en estos últimos tres años ¿O tres semanas? ¡Bah! no lo sé, el punto es que llegué a cambiar. Mi cabello se organizaba en una coleta alta que hacía relucir la forma ovalada de mi rostro. El uniforme aún me apretaba un poco en cuanto a las caderas, pero no me veía nada mal a decir verdad. Me atrevería a decir que me veía bastante bien en pantalón ajustado y chaqueta de cuero. Algo me daba la impresión que no acostumbraba a usar pantalones. Según Lune, vengo de una familia noble, por lo que veo normal que solo haya utilizado faldas en mi vida. Miré los guantes en mis manos y apreté los puños. No debía centrarme tanto en mi pasado y concentrarme en mi futuro y, sobre todo, en el de los digimon de por aquí. Solté un ligero bostezo debido al aburrimiento. "Osea, vamos... ¿Quién en su sano juicio causaría problemas en una reunión llena de Union Saver? Sólo alguien con poca cordura tendría la ocurrencia de cometer una tontería o problema en este festival." Fue lo que pensé, pero no contaba con que justo dos segundos después escucharía un alboroto en el tumulto de gente.
-¿Ahora qué...? -Suspiró mientras miraba volar por los cielos a un par de tamers con la boca entre abierta. -¡¿Q-Qué demonios?! -Exclamé sorprendida mientras corría a la situación seguida por mi compañera, Lune. El dúo salió aparentemente ileso del misterioso vuelo. ¿Es entonces que los pillos nunca faltan? Los seguí a mi propio paso disimulado. Jugaron con un grupo de ToyAgumon y usaron a un BigMamemon como pelota de playa. Me decidí a intervenir, sin embargo, un par de Devas venían en camino a controlar la situación. Suspiré en respuesta y seguí caminando en otro sentido. Ya no tenía ganas de trabajar, a decir verdad. Lunamon suspiró y me siguió, creo que comprendía mi sentir. Y, para mi gran fortuna, los dos chicos cayeron justo en la basura del callejón al que había dado a llegar después de unos minutos.
-¿Es que una chica no puede tener tranquilidad? -Suspiré al cielo. -¡Ambos! No sé quienes son o qué se propongan -Exclamé mostrando mi digivice. -Pero quedan detenidos en nombre de los Union Saver -Continué con cierta monotonía en mi voz. No creo haberlos intimidado.

Durante las rondas de helado, el Alcalde de la ciudad seguía entreteniendo  a los jóvenes con las leyendas, remarcando siempre la moraleja detrás de estas de manera que los jóvenes Digimons aprendieran de estas fabulas digitales y así puedan aplicar la sabiduría de estas en la vida cotidiana, volviéndose ciudadanos más honrados y respetuosos. Su voz y talento nato como locutor había logrado atrapar la atención de todos sus jóvenes oyentes, aun si estos ya conocían de memoria las leyendas…pero aun así sus capacidades no podrían retener la emoción de los jóvenes cuando una rápida sobra que pasa por sus cabezas, lleva sus miradas al máximo héroe de la ciudad, Imperialdramon FM. El líder de los Unión Saver, empieza el recorrido de la ciudad haciendo una parada en su lugar favorito, este enorme y verde parque que honra la memoria de los Digimons cuya grandeza les volvió leyendas, una forma de inmortalidad. Aterrizando junto a su mano derecha, el enorme Digimon se dispone a atender y saludar a los jóvenes Digimons que no tardan en dejar al Alcalde para bombardear al guerrero con miles de preguntas y halagos infantiles. Sorprendido por tanta atención y la energía de los pequeños seres digitales, Impreialdramon empieza algo nervioso las respuestas de algunas de sus dudas, pero no tarda en acostumbrarse a la actitud infantil y admiración de los pequeños, logrando demostrar su lado amable y gentil, al tiempo que toma una pequeña pausa para saludar al Alcalde Arbormon.

-jojojo, no esperaba ver los por aquí jeje – responde al saludo el Digimon encargado de la ciudad.

- …si… yo tampoco esperaba salir de la base hoy – con un tono sin arrepentimientos, puesto en el fondo le agradaba pasar un rato con aquellos a los que protegía. Luego de esas palabras una simple sugerencia tímida de uno de los jóvenes, sobre que el afamado héroe contara alguna de sus aventuras; fue recibida con gran afirmación por el resto de los fans,  obligando de cierta forma, a que Imperialdramon cumplirá con sus demandas – ho! jeje de acuerdo – sorprendido por la seriedad del grupo a que haga aquello, y contento por el aprecio que estaba recibiendo de parte de todos esos pequeños. Sin perder mucho más tiempo y dispuesto a quedar se allí un tiempo, el gran Digimon se sienta sobre el pasto y con todos los pequeños a su alrededor, incluso algunos sobre sus piernas; empieza a contar algunas de sus aventuras como si fueran parte de algún libro infantil de acción.

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Por desgracia aun en un día como este el crimen no descansaba, en este caso dos de los agentes del mal se hallaban saliendo de un contenedor de basura, que les había servido de amortiguador para su larga caída en su escape del largo brazo de la ley…por desgracia aunque escaparon de una mano, otra había logrado alcanzar les y les exigía obediencia y justicia. Esperándolos fuera y a cierta distancia del contenedor, seguramente porque ambos sujetos deberían estar impregnados de algún mal olor contagiado por la basura acumulada; estaba una joven chica de pelo rosa junto  a su compañera Digital. Su vestimenta y su declaración demostraban que ella era una verdadera agente de los afamados policías Digitales Union Saver, lo cual hubiera intimidado a cualquier rufián ordinario…pero a estos dos les faltaba unos cuantos tornillos sino era que todos.

-¿¡he?! – se voltea Cadejo hacia la joven, más que nada por mera sorpresa, no esperaba que hubiera nadie en el callejón, al menos no cuando cayó allí – Bien echo agente, su tiempo de respuesta fue el esperado, aunque su tono le faltó algo más de vigor  – poniéndose firme y hablando con tono serio, de superioridad y algo autoritario – soy el agente Hércules de control de calidad de los U.S. – sacando rápido su billetera para mostrar le su placa…la cual solo arruina su actuación puesto no era más que un pedazo de papel con una placa mal dibujada que decía “Luis el shuper agente secreto de los rábanos marcianos subterrestres comunistas”.

-jejeje- ríe entre dientes su compañero.

-¿¡he?! – Mirando a su compañero – no, claro que no, yo debo ser el agente en jefe, es claro que ese es el trabajo para el más atractivo – perdiendo toda la seriedad de su inútil actuación. Al tiempo que usa su mano para mover algo de su pelo como un gesto narcisista exagerado.

-jejeje-

-¡haa! ¿¡cómo te atreves a insultar me así!? – empezando una escena dramática en medio del callejón…realmente creo que ya se olvidó de la joven miembro de los Union Saver.

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Mientras en la base de los Union Saver una verdadera amenaza estaba por actuar, trayendo consigo no más que dolor y sufrimiento.  Al instante que el Gaomon denominado como Leonardo coloco su mano sobre el hombro del niño perdido, exigiendo respuesta de cómo ingreso a la sala de los generadores de la base; este humano, aun de espaldas al Digimon, simplemente soltó una perturban te sonrisa y luego de un solo y repentino movimiento, apoyo su mano sobre el pecho del peludo ser digital y le mando a volar contra la pared de la habitación.

-¡jejeje!- ríe por la emoción de liberar sus instintos asesinos aunque sean por solo unos minutos. Luego realizando una vuelta carnero para atrás, saltando una distancia imposible para un humano ordinario, logra pararse la valla de seguridad del reactor del escudo. Luego se encorva un poco con los brazos colgando y empieza a reír descontroladamente – jje..jeje. jejejejjejejeje….jaoujouoauogajajougaoigajoiauoiga –  la deformación de su risa, hace contraste a su transformación. Al tiempo que se irgue de golpe, su cuerpo empieza a transformarse de forma monstruosa, digna de una película de terror, mas como si fuera una transformación biológica que una tradicional forma digital de división y acomodación de datos. Para cuando su risa vuelve a la normalidad, su transformación termina revelando su verdadero cuerpo, uno con características conocidas de otros seres digitales pero a la vez un ser completamente desconocido…claramente una Quimera Digital, un soldado de los Chaos Empire- ¡jejeje! – ríe mientras sostiene en su hombro el peso de su enorme masa. Master Jokermon, ese era el nombre de esta abominación Digital. Con el cuerpo y  pigmentación de un Impmon, este ser de dos colas demoniacas, poseía solo tres prendas: una máscara semejante a la de un Dracumon, pero cuya imágenes de ojos ahora eran un corazón blanco y una pica negra, además de que poseía una mitad de la máscara negra y la otra blanca; un pañuelo de color negro semejante al de un Impmon, cubriendo su cuello; y un par de guantes  monocromáticos, que poseían tonalidades invertidas entre sí, con el símbolo de un trébol  o un diamante rodeados por un circulo y una línea que pasaba por el medio. Otro aspecto que le separaba de un Impmon, era el peluche semejante al de Etemon que tenía colgando a un costado de su cuerpo, y que la cara sonriente del pecho de Impmon tenía un gorro de bufón. A los pocos minutos que su cuerpo real se hizo presente una sirena empezó a sonar dentro de la base, acompañada de las clásicas luces rojas.

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-¡esto no puede ser! – dice uno de los miembros de los Union Savers, que estaba monitoreando unas computadoras en el centro de mando, unos pisos más arriba de donde se hallaban Leonardo y la Quimera. Incapaz de creer lo que sus ojos le mostraban, al tiempo que su superior exigía una explicación para la alarma – ¡Señor…se ha detectado una Quimera en la base! – Con un notorio miedo en su voz y una cara de espanto, la misma que invadió a muchos en la habitación, más que nada porque esto indicaba que sus enemigos habían descubierto una manera de pasar sus defensas – esta…¡¡está en el centro de energía del escudo!!.

-¿¡QUE?! – dice su superior sin poder creer aquella situación, mientras su cerebro trataba de acomodar todo para poder reaccionar y evitar una catástrofe…pero ya no había manera de detener la tormenta que se avecinaba.

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Lanzando una última risa hacia el Gaomon herido, Master Jokermon se dispone a terminar su misión. Volteándose hacia los inmensos generadores de energía, levanta su imponente masa y destruye de un golpe todo en su camino. Por suerte la habitación fue hecha para soportar la explosión, haciendo que únicamente se sacudiera la base, dañando en el poseso algún otro sistema de la misma. Exceptuando por aquellos que estuvieran en el parque que rodeaba la base, los cuales pudieron haber escuchado un leve estruendo, el resto de la población de la ciudad solo vería de la nada una especie de aureola volear invadiría el cielo ennegrecido por las nubes de tormenta  que habían cubierto el sol y parte de la ciudad. Para los ojos de la mayoría aquel parecía ser nada más ni nada menos que un espectáculo aéreo, en honor a este dia…pero para otros era una clara señal.

-Espero disfrutes los fuegos artificiales jejej – dice Cadejo con picardía y arrogancia, a la Joven agente de los Union Saver y su Lunamon, mientras mira al cielo con una sonrisa – luces fuera – dice en voz baja y a los pocos segundos todas las luces de la ciudad se apagan, al tiempo que una explosión en el distrito Virus Buster, destruye los generadores de energía principales de la ciudad. Fue por este apagon que las luces que aparecieron misteriosamente en el cielo se hicieron visibles para los ciudadanos, pero solo aquellos que lograron escuchar la explosión de la central electria lograron percatarse que aquellas luces no eran un espectáculo sino todo lo contrario.  Cayendo como una lluvia de meteoritos, miles de capsulas gigantes de metal arrasaron con todo a su paso, destruyendo casas edificios y reduciendo a digitama a las vidas digitales  qye no fueron los suficientemente rapidas como para escapar…pero las capsulas no eran nada con comparación a lo que tenían dentro. Una vez en tierra aquellos silindros de metal  no tardaron en liberar a sus pasajeros. Guiados por sus sed de destrucción y data de inocentes, las abominaciones digitales empezaron su caseria.  En pocos segundos la ciudad mas segura del Digimundo se encontraba ardiendo, infestada de una plaga de miles y diversas Quimeras de los Chaos Empire –jejeje, ahora comienza la verdadera fiesta – dice Cadejo mientras camina hacia la fuente de la plaza central, luego de haber aprovechado la distracción de este ataque para escapar de la miembro de los Union Savers.





Off: es poco y tiene algunos errores pero ando algo complicado, así que perdón.

Pueden pelear contras las quimeras o soldados de los CE que quieran, solo no dioseen. Pueden inventar quimeras con las cuales pelear si desean. Master Jokermon no puede ser matado, ni capturado (lo último por su habilidad de escapar de cualquier sistema que le aprisione), aunque como es una quimera traviesa no pelea mucho sino que hace bromas pesadas y algo mortales.

Todo iba muy tranquilo… muchos visitantes, bastantes ingresos, nada de qué preocuparse… aunque algo en mi interior me decía que estaba por ocurrir algo. No sé qué… pero algo sería algo malo… algo extremadamente malo. Intente ignorar ese sentimiento para continuar con mi trabajo; pero lo cierto es que me fue imposible… más aun cuando llego el momento en que sentí por mis venas la presencia de un enemigo. No estoy segura de cómo lo sentí… simplemente hice caso a mis instintos primarios y comencé a vigilar el lugar… nada de qué preocuparse… al menos por el momento.

No fue hasta unos 20 minutos que mi presentimiento se volviera una cruda realidad. Se escucho una inmensa explosión por la zona donde parecía ubicarse la base de los Union Savers. Esa explosión causo una gran conmoción… mucha gente se asusto; pero el verdadero pánico no apareció hasta que esas cosas comenzaron a caer desde el cielo; cielo que cambio su color azul a uno rojizo como si fuese el atardecer… pero no un atardecer común y corriente… si no uno que daba a entender que sin el sol; estábamos todos muertos. Tanto como Scott y yo nos mantuvimos más o menos tranquilos… lo cierto es que esas capsulas que parecían caer del cielo no simbolizaban nada bueno, pero perder la calma en un momento como este solo nos mataría mas rápido… además, no creo que la situación pudiera ser peor… digo, hay agentes de los Union Savers desplegados por toda la ciudad… no deberíamos de preocuparnos tanto pero… cuando una de esas capsulas cayó en mitad del parque de atracciones… fue cuando toda la calma que quedaba en los corazones de humanos y digimons, desapareció.

De la capsula emergió una criatura totalmente amorga; que con solo lanzar un rugido, logro que todo el parte se volviese un completo caos. La gente comenzó a huir presa del pánico, los digimons intentaron defenderse pero esa cosa parecía ser rápida; lo bastante como para lanzar a quien se le enfrentara lejos. Y para empeorar la situación; cayeron más capsulas; derribando algunos puestos cercanos a los nuestros. Sin duda, el paisaje de alegría y felicidad que teníamos hace tan solo 5 minutos, se volvió un campo de supervivencia donde… si no prestábamos atención a nuestras acciones; morir era algo tan fácil como respirar.

Creo que lo mejor será que vayas a buscar a Labramon, Scott… aquí no puedes hacer nada sin él y dudo que él tenga mejor suerte… -observe a las criaturas derribar varios de los puestos, buscando seguramente más presas para atacar- yo me quedare y vigilare que no arruinen el lugar…
¿Estás loca verdad? –Scott parecía sereno pero estoy segura de que estaba bastante preocupado- te van a matar si te quedas… tu vienes conmigo
Lo siento pero me quedo… nos están pagando para mantener este sitio… y bueno –me estire un poco y observe a las criaturas que parecían comenzar a darse cuenta de nuestra existencia- no dejare que lo destruyan así como así… yo me quedo; defenderé el lugar y cuando regreses… espero que sea como BlackMetalGarurumon… seguramente vamos a necesitar un cargamento de misiles extra-potentes… además, puedo digievolucionar a nivel Mega sin problema alguno… soy capaz de defenderme por mi cuenta… tu ve –sonreí tranquilamente- yo me ocupo del lugar, jefe
… mas te vale seguir viva cuando regrese… -una vez dicho eso, Scott salió del puesto de tiro con arco y se fue corriendo, aprovechando la conmoción de la gente para que las criaturas no lo atacaran tan rápido-
Jeje… bueno, creo que ahora yo soy quien manda este lugar –sonreí levemente y baje la mirada, crujiéndome los nudillos- esto será muy divertido…


Tan pronto como el tamer mercenario abandono a la Renamon de pelaje teñido de negro; esta se mantuvo calmada, mientras observaba a las bestias amorfa se acercarse a su posición lentamente; seguramente esperando a que ella comenzara a huir como lo hacia el resto de la gente, pero debido a la gran decisión [y a su terquedad insuperable] se mantuvo firme; cruzada de brazos esperando a que aquellos monstruos se acercaran. Los monstruos se mantuvieron quietos por un instante al ver que su objetivo no parecía ceder a la presión del momento; por lo que uno se acerco lentamente, quizás para ser el primero en atacar.

La bestia parecía tener los brazos de un DarkTyrannomon y la cabeza de un MetalGreymon, el cuerpo de un Ogremon y la cola de un Megadramon, una absoluta abominación a simple vista. Pero la kitsune de color negro como la noche, mantuvo la calma ante las bestias que rodearon el puesto de la feria; siendo indiferente ante todo, para después alzar la mirada y sonriera de forma irónica, logrando decir con gran sarcasmo: "¿tienen suficiente dinero para jugar?". Esa pregunta, obviamente incapaz de ser entendida por las criaturas, no sirvió para nada más que darle un toque de emoción al ambiente; dando algo de drama. Hubo silencio por unos instantes; pero finalmente, la criatura pareció dispuesta a atacar; lanzándose contra su objetivo aprovechando el momento de silencio en el que parecía que todo iría con calma, pero la Renamon pareció ser más rápida; logrando dar un paso hacia delante, apoyar uno de sus brazos en la barra del puesto de tiro con arco; logrando extender su pierna lo suficiente para frenar a la bestia, golpeándola en la mandíbula inferior; que al no estar cubierta de metal no causo un gran daño a la kitsune que regreso rápidamente al interior del puesto una vez frenado momentáneamente el ataque de la bestia.

Al ver que su compañero fue frenado, los demás monstruos, similares al que acaba de fracasar, se lanzaron con la misma intención de ataque; pero la canida consiguió ser mas astuta; usando una de sus técnicas consiguió “multiplicarse”, engañando a los monstruos que parecían ser muy torpes; cambiando sus rutas de ataque para que chocaran entre si mismos. Una vez que todos fueron detenidos por unos instantes, la Renamon salió de su puesto, quedándose frente a aquellas criaturas que al recuperar el conocimiento; la observaron con furia. Lo siguiente que hiso la kitsune, fue sonreír unos instantes; mientras que las criaturas aprovecharon para lanzarse sobre ella. Tan pronto como las criaturas se lanzaron, una gran luz ilumino a la kitsune que de un momento a otro; abandono su apariencia de mujer zorro o zorro humanoide, para aparecer con un cuerpo femenino bien marcado; de armadura violenta oscuro y un báculo de plata como arma. Su cabello, aun teñido como Renamon, abandono su tono oscuro para volverse de color plateado brillante.

En ese mismo instante; la nueva digimon, clavo su báculo en el suelo, creando desde el una bran barrera de color verde claro opaco; la cual se extendió a su alrededor y consiguió hacer desaparecer a las bestias [Taizoukai Mandara] que estaban por alcanzarla. Al momento en que aquellos monstruos desaparecieron en un mar de datos; la mujer sacerdotisa alzo la mirada con una sonrisa en el rostro, para luego decir:

Lo lamento… no tiene bastante dinero para jugar


Luna no se veía nada bien… y la verdad es que por más que ella me dijera que no era nada, algo me decía lo contrario. Quizás sea un perro, pero se cuando los humanos no se sienten bien… es casi como un sexto sentido que nos indica lo que ocurre… pero bueno; si Luna no quiere hablar del asunto, no debería interferir… eso podría empeorarlo todo. Fuese como fuese, me dispuse a seguir la corriente… al menos para que no se preocupara del asunto; que yo creyera que ella estaba bien y esperar a que nada malo ocurriera pero… me equivoque enormemente. De un momento a otro; el edificio se sacudió como si hubiera sido un terremoto, pero también se escucho una especie de explosión; algo que realmente casi me saca un infarto, pero no fue hasta que la voz de un humano o digimon hablo para intentar calmar a todos los visitantes. No sé que quería lograr con eso; por lógica de películas, series, caricaturas, comics y videojuegos; cuando le dices a alguien que se calme, solo lo ínsitas mas a que se altere y pierda mas el control. Fuese como fuese; el lugar fue cubierto por una luz roja de emergencia; y por si fuera poco, en el exterior del edificio comenzaron a caer cosas extrañas del suelo, de las cuales salieron unos grandes monstruos amorfos que, si no fuera porque estaban lejos, podrían atemorizar a cualquiera. Sinceramente el ver esas cosas a lo lejos no es que me dejara totalmente tranquilo… porque, aun estando lejos, se acercarían y terminarían causando problemas grandes.

Observe a Luna preocupado, quien pareció ser invadida por el pánico; y a ese pánico se le debió sumar preocupación y tristeza cuando una de las puertas del lugar se abrió de golpe; mostrando a un digimon muy maltratado que resulto ser Leonardo.

El solo verlo en ese estado me hiso sentir mucha pena por él; pero el ver que la situación empeoraba a cada instante, me impedía sentir nada que no fuera preocupación. Scott y BR estaban en el parque de atracciones, y seguramente esas cosas también terminarían llegando a ese lugar y… sin Scott soy incapaz de digievolucionar así como el es incapaz de luchar… tsk… esto ya era bastante preocupante; y el hecho de que fueran a encerrarnos a todos no me alentaba demasiado a quedarme quieto. Afortunadamente, Luna me dijo como abandonar el edificio aunque… ¿debía dejarla?... ella solía tener ataques de pánico y Leonardo es un guerrero mejor entrenador que Flora… pero también tenía que ayudar a Scott… supongo que la situación era demasiado complicada. Observe a Luna, intentando convencerme a mí mismo de que ella estaría bien… pero el ver su rostro con algo más de seguridad… hiso que no tuviera que convencerme a mí mismo; ella lo hiso por mí.

Tan pronto como Luna fue a atender su deber como miembro de los Union Savers, yo me dispuse a salir del lugar, corriendo hacia las escaleras de emergencia; usando el petit paw para correr más deprisa. Ciertamente no me resultaba muy conveniente usar esa técnica, ya que mis patas brillaban bastante; pero necesitaba usar la velocidad para salir rápido del edificio y encontrarme con Scott. Una vez que llegue a las escaleras, comencé a bajarlas rápidamente, mientras que por todo el lugar se escuchaban explosiones y se producían estruendos… seguramente Luna ya estaría dando batalla junto con Flora, pero mi principal preocupación en esos momentos era salir, y al momento en que lo hice; observe todo el lugar. El paisaje lleno de alegría con el que entre a la base de los Union Savers se había vuelto un escenario perfecto para una película post-apocalíptica… quizás también para alguna película de zombis o de guerra. La verdad es que no me quede demasiado tiempo apreciando el paisaje, ya que además de tener que encontrarme con Scott; note que una especie de Numemon amorfo… bueno, MAS amorfo de lo usual, me vio y comenzó a perseguirme.

¡Ah! ¡Aléjate de mi cosa babosa! –comencé a correr en círculos mientras que esa cosa me seguía- ¡Fuera! ¡Shu! ¡A tu casa! ¡AAAAHHHH! –esa cosa solo se dedicaba a gruñirme; o intentarlo… ya que al abrir su boca, esta parecía llenarse de baba, algo asqueroso pero bueno… creo que sería mejor que escuchar un rugido aterrador… bueno, la verdad no se que sería mejor, el rugido o esto que hace esa cosa- ¡Ah! ¡Que te vayas! –Me di la vuelta rápidamente y tome mucho oxigeno- ¡RETRI BARK! –dispare una onda sónica contra esa cosa extraña que me hacia recordar a un Agumon, logrando derribarlo- egh… ¡Y quédate ahí!

Una vez que esa cosa quedo tendida en el suelo, aproveche para escapar rápidamente; la verdad es que no quería estar cerca de eso mucho tiempo… principalmente por lo asqueroso que se veía.

Finalmente, logre entrar llegar a las cercanías del parque de atracciones; pero no veía nada más que caos… muchos humanos y digimons huyendo de esas criaturas extrañas que invadían la ciudad. Comencé a olfatear intentando encontrar a Scott, pero la verdad es que con tantos humanos, el aire estaba lleno de sudor, y además con el tema de tantos dulces, comida y celebración de antes; intentar localizarlo por medio del olfato era algo casi imposible… y tratar de usar los oídos no serviría; demasiados gritos me impedirían escuchar atentamente la voz de Scott. Luego de un momento intentando encontrarlo con la mirada, pude ver algo. Entre tanta gente no pude confirmarlo a primera vista; pero creí ver a Scott intentando avanzar entre todos los humanos, y yo tendría que intentar llegar hasta él pero… ¿Cómo exactamente?, no es como si esta multitud me permitiera avanzar en dirección contraria a la suya.

La solución vino a mi cabeza muy rápido. Junte mucho aire en mis pulmones y volví a usar el Retri Bark, logrando alejar a la gente de mi el tiempo suficiente para avanzar hacia Scott, quien pareció escuchar mi Retri Bark y también se acerco. Tan pronto como me acerque; Scott me levanto y me observo, primero con furia, después con algo de compasión y finalmente con seriedad… aunque su expresión de furia duro bastante más tiempo del que estoy acostumbrado.

Te gritaría Labramon, pero ahora tenemos problemas bastantes serios por aquí… -Scott me observo bastante serio- ¿listo para pelear contra estas cosas?... tenemos que regresar rápido a apoyar a BR
¡Claro que si! ¡Adelante! –sonreí bastante emocionado y me aleje un poco de Scott, moviendo la cola- ¡Que comience la verdadera pelea! ¡Que comience la fiesta!
Tu y esos comentarios de películas… no tienes remedio… -Scott sonrió levemente y saco una carta Azul- ¡Card Slash! ¡Blue Card! –Tan pronto como paso la carta por su digivice, este comenzó a brillar al igual que yo-
¡Labramon Warp Shinka…! –De un momento a otro, me transforme en un hombre chacal con alas de ángel y ropa egipcia- ¡Anubismon! –Extendí mis alas y observe a Scott, quien se subió a mi espalda- muy bien… es momento de pelear… -sonreí de lado y di un leve salto al aire; para después agitar mis alas, tomando vuelo rápidamente- ¿BR se quedo en el puesto de la feria? –Observe a Scott unos instantes esperando a que me respondiera, y me asintió respondiendo mi duda- bueno… tendremos que apoyarla hasta que las cosas se calmen… las cosas en los cuarteles de los Union Savers no van nada bien… lo mejor será darles apoyo desde las zonas alejadas para que esas criaturas no dañen a mas personas…