Al pie de las estrellas y por encima de la arena. {Priv. Plasma}

La batalla de Lobomon contra Devidramon no podía considerarse de ningún modo que no fuera intensa. El guerrero lobo disparaba consecutivamente su arma esperando dañar las alas de aquella bestia, que simplemente esquivaba todo ataque haciendo maniobras aéreas agiles y veloces. Realmente era un problema el tener que atacar a Devidramon, pero el problema se volvió peor cuando el dragón lanzo una especie de rayo de energía desde sus ojos, un rayo de color rojo carmesí el cual al impactar contra el guerrero lobo; lo hiso retroceder. Lobomon había cubierto su cuerpo usando sus brazos como escudos, pero el precio a pagar fue perder su gran cañón del brazo izquierdo, quitándole tota posibilidad de poder atacar a distancia de forma rápida y precisa. Naturalmente el guerrero no tuvo más opción que mantenerse alejado del blanco de Devidramon, esquivando todos sus ataques a distancia mientras que la bestia no descendía a tierra firme para atacar. Mientras tanto, la batalla de Boogeymon era similar en cierto sentido; solo que Boogeymon estaba mas y mas tentado a atacar cuerpo a cuerpo a su enemiga; después de todo, el podía moverse más rápido pero aun así prefirió mantener su distancia. El tenía que ganar la batalla para regresar con su compañero dragón y quitarle toda posibilidad al Lobomon y por ende no podía permitirse simplemente ir a la ofensiva sin pensar las cosas. El era un Champion, y Lekismon también… había igualdad de condiciones… pero Boogeymon tenía más ventajas… y una de ellas no solo era el vuelo, sino también su as bajo la manga.

Al menos soy la cerecita mas hermosa de todas –comento con sarcasmo el demonio, sonriendo de lado- ¡Y UNA CERECITA QUE NO CAERA EN TUS TRUCOS BARATOS! ¡YO USABA ESOS TRUCOS ANTES DE QUE TU SUPIERAS DECIR “MAMI”! ¡RUBY EYE! –El demonio disparo un rayo laser desde sus ojos, apuntando a la coneja, aunque su especialidad realmente era el ataque cuerpo a cuerpo- jeje… no deberías confiar en ese humano… créeme… el es un criminal… un fugitivo del mundo humano… nos lo dijeron quienes lo buscan… ¡El por si solo destruyo todo un laboratorio humano al liberar a un peligroso digimon! ¡¿Realmente estarás de su lado?! –Boogeymon quería poner a la coneja de su lado, aunque su tono no era tan sarcástico y mentiroso como antes… ¿habría dicho la verdad?- Escucha… somos Nightmare Soldiers… es nuestra Field… somos camaradas en lo más profundo de nuestros datos… ayúdanos a atrapar a ese fugitivo y los humanos te recompensaran como a nosotros o mejor inclusive por ser miembro de los Union Savers

Mientras tanto, en la batalla de Lobomon; no había cambiado prácticamente nada… salvo por el hecho de que un rayo habia impactado contra el guerrero; dejándolo tirado en el suelo prácticamente inmóvil. La bestia descendió para acercarse a su presa, y cuando estuvo lo suficientemente cerca, levanto ambos brazos, juntándolos en un único puño que usaría para asesinar al guerrero… pero antes de eso, Lobomon se volteo rápidamente y fue rodeado por una cadena de digicore, cambiando de forma en un abrir y cerrar de ojos. Ya no más Lobomon, ahora era nuevamente la bestia del relámpago, Raidramon; quien abrió sus fauces rápidamente para morder a Devidramon en el cuello, descargando una poderosa energía eléctrica. Devidramon rugió de furia al sentir tal mordida, y para responder a la misma sujeto a Raidramon de su cintura, clavando sus garras a diestra y siniestra; logrando que el también rugiera de furia y dolor. Tan pronto como Raidramon soltó el cuello de Devidramon, el dragón lanzo al lobo dragonico contra su compañera coneja, esperando derribarla, después se froto el cuello adolorido… al menos era un avance.

Boogeymon bloqueo los ataques que estuvieron por impactar contra él, rechinando los dientes por el enfado que le provocaba el ver que no conseguía la reacción que quería de su rival. De todos modos, el demonio rojo no se rindió y tomo altura, para dejarse caer en picada apuntando con su tridente con la única misión de ensartarlo en el cuerpo de la coneja. Para la mala suerte del demonio, falló el golpe cuando su oponente comenzó a correr por todos lados de forma evasiva. El demonio volvió a usar su laser para detenerla, mientras miraba cuando podía la pelea entre Raidramon y Devidramon. Eran 2 dragones, uno de relámpagos y otro de oscuridad, una batalla bastante difícil, pero no podía simplemente prestar atención a cosas como esas. Cuando finalmente detuvo la corriente de su rayo, escucho la respuesta de la humana transformara en digimon, y el demonio solo pudo mostrar una mueca de disgusto. Si, el no era precisamente una criatura muy honesta, pero sabía que tenía la verdad en sus palabras; solo que no era capaz de demostrar la poca veracidad que demostraba el guerrero de luz que ahora batallaba contra Devidramon.

¡Oh si! Claro, ¿y porque deberías creer tu en él? -Boogeymon mantuvo una posición defensiva, para poder contraatacar cualquier golpe- te salvo hace rato… ¡Hurra! ¡Qué bien! ¡Denle un premio al mejor tipo del año! -Boogeymon escupió en la arena bastante molesto- tu ni siquiera sabes lo que es él en realidad… pero apuesto a que estuvieron hablando, jeje… ¿te lo dijo? ¿Qué no tiene recuerdos? -El diablo sonrió ampliamente y estiro sus alas- apuesto a que no te dijo él PORQUE no tiene su memoria… jeje… ¿Quién es más de fiar? ¿Quién busca ocultar la verdad o quien busca al criminal? -El demonio volvió a disparar su rayo mientras reía- ¡Lo averiguaremos muy pronto, hermanucha!

Mientras tanto, bastante apartados de la pelea entre la coneja y el diablo; el dragón oscuro y el lobo dragonico seguían enfrentándose prácticamente a muerte. Cuando el Devidramon atacaba con sus zarpas, Raidramon lo atrapaba con la boca y azotaba contra el suelo; pero inmediatamente era lanzado por el dragón oscuro al cielo y posteriormente impactado por el rayo del mismo. Raidramon tenía una clara desventaja, una que Boogeymon había marcado al inicio de esa pelea: tanto el diablo como el dragón oscuro eran capaces de volar. Si bien Raidramon tenía una mandíbula más fuerte para poder arrastrar al Devidramon a tierra, nada le garantizaba que podría atraparlo todas las veces; y aunque usara sus relámpagos para forzarlo a bajar o lastimarlo siquiera, el dragón seguía teniendo la facultad de evadir los ataques con facilidad. Fuera como fuera, la bestia no se daría por vencida; derribaría a ese Devidramon de un modo u otro… solo necesitaba mas tiempo para encontrar la solución… pero, ¿Por cuánto tiempo resistiría contra un oponente al que ni siquiera podía atacar con toda su fuerza?