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El descubrimiento de las ruinas del Monasterio Draco, tallado en lo alto de una desolada montaña en el valle de los dragones, ha despertado un gran interés por todo el Digimundo. Principalmente porque según los tallados de la pared exterior dentro de las ruinas se encuentra un obre mágico que contiene en su interior la data y poder del treceavo Royal Kinght, la cual sera dada a quien reclame dicho objeto. Según la historia grabada en los murales, el obre fue dejado allí por el mismo Royal Kinght en caso de que su poder sea necesario para derrotar al mal que se alce en el futuro...por desgracia semejante premio también a llamado la atención de quienes usarían el poder para sus propias metas egoístas. Por lo que esta aventura ahora se a vuelto una carrera por ver quien consigue el gran premio.
6 meses despues de la ultima carrera, un BanchoLeomon reune al viejo equipo de organizacion para dar un nuevo espectaculo, pero en esta carrera, el misterioso patrocinador ha enviado a un "Aspirante a Campeon" con un extraño y unico Digivice. ¿Que es lo que sucedera a lo largo del evento y como funciona este nuevo digivice?.
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-Skin hecho por Hardrock de The Captain Knows Best.
-Imagenes realizadas por Runari Wildy
y Sigrun Vinter
-Imagenes realizadas por Runari Wildy
y Sigrun Vinter
El treceavo perdido [libre]
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El treceavo perdido [libre]
Introduccion:
El descubrimiento de las ruinas del Monasterio Draco, tallado en lo alto de una desolada montaña en el valle de los dragones, ha despertado un gran interés por todo el Digimundo. Según los tallados en la cara externa del monasterio, este fue el hogar del Royal Knight perdido, y donde actualmente reside su alma y poder, manteniendo encerrado al temible Devorador de Bosques, Algomon. Por desgracia nadie a logrado investigar mucho más sobre estas antiguas ruinas, puesto que nadie que haya entrado a logrado salir con vida, según algunos nativos esto se debe a los guardianes del monasterio, que eliminan a cualquiera que ose profanar su templo e intente adquirir el poder de su camarada y de su rival, al absorber el obre que mantiene encerrada el alma de ambos Digimons…por desgracia el descubrimiento del monasterio y la promesa de un enorme poder se ha difundido rápido por el Digimundo, atrayendo a todo tipo de individuos, sin mencionar a los Royal Knight quienes seguro esperara liberar a su camarada perdido.
Dúo Pixelado
Royal Knight, data poderosa, ruinas antiguas, misterio, aventura, peligro, un sin fin de motivos para ir a meter sus narices en ese supuesto templo, así era como percibía Cadejo, esta noticia sobre el monasterio perdido y por fin encontrado. No creo que sea necesario explicar cómo sus ansias y emoción por estas noticias lo llenaron por completo al punto de ya haber preparado un medio de transporte hacia la zona indicada; o lo insoportable que estuvo con su compañero digital para que se apurara y fueran a investigar aquel nuevo y misterioso lugar. Podría decirse que Commandramon no se negaba en lo absoluto a ir, puesto era una zona todavía no catalogada y la necesidad de información sobre la misma era importante, además de que era claro que en este lugar podrían encontrar varias cosas de valor, puesto está relacionado directamente con los Royal Knight y eso siempre era sinónimo de poder…aunque lo que en realidad le preocupaba y le hacía tomar a Commandramon, todo tipo de medidas provisorias para el viaje, era que siempre que iba con Cadejo, a alguna ruina o estructura antigua, su descuidado tamer terminaba activando algún mecanismo de una mortal trampa, la cual ponía la vida del militar o la de ambos en peligro…en muchas ocasiones ser el compañero digital de ese humano era algo muy estresante, aunque por ser soldado le resultaba con algo más de facilidad…eso y que una vez de regreso en su base le castigaría por sus acciones imprudentes, con una montaña de papeles a rellenar y formas que revisar y firmar.
Su transporte, no fue algo muy lujoso, puesto el militar lo consideraría un desperdicio de capital, pero fue con algo de estilo…por asi decirlo. Montado los dos un Elephamon, fue como llegaron a las ruinas, aunque su llegada a tierra no fue la misma para ambos, mientras Commandramon esperaba correctamente a que el elefante volador se detuviera; Cadejo simplemente se había puesto de pie durante el trayecto final, intentado surfear sobre el mamífero mecánico volador, pero terminando por ser derribado por una brisa que le hizo perder el equilibrio a pocos metros del suelo…afortunadamente cayo de cabeza, por lo que no se perdió nada importante.
-¿podrías esperar a entrar al Monasterio antes de lastimarte? – de forma retórica, y algo decepcionado pero no sorprendido por el actual hecho. Afortunadamente la cabeza del joven se había vuelto lo suficientemente dura a lo largo de una vida de golpes y caídas de gran altura, por todo el Digimundo conocido, así que el golpe no termino siendo nada de gravedad, y una vez despegado la cabeza del suelo, simplemente se dispuso a sonreír le a su cámara como respuesta s su comentario – hay menos aventureros de lo que esperábamos – agrega al echar una mirada rápida hacia el monasterio esculpido en la roca de la montaña, una bellísima obra arquitectónica del Digimundo, los detalles de las columnas, paredes y marcos eran increíbles y notorios a la vista, todo demostraba poseer un lugar y orden en aquella edificación. Pero la estructura no era lo único para divisar en aquel lugar, un tumulto de otros máximo veinte tamer, sumado a un grupo algo mayor de Digimons de diversos niveles, también se encontraban presentes en las cercanías del monasterio, probablemente otros aventureros ansioso por demostrar ser dignos de adquirir el poder del Royal Knight faltante.
-No veo ninguna cara conocida…ojala hay algún Royal Knight conocido cerca, sería divertido hacer una competencia a ver quién llega primero al premio jejeje – dice inocentemente, sin medir el peligro y la amenaza que representaría un individuo de aquel grupo, además de la posibilidad de perder una preciosa data por un simple juego – bueno si hay algún conocido cerca, seguro nos divisara mejor cerca de la entrada – mientras se pone de pie y luego, acompañado de su compañero digital, se dirigen, al igual que los demás tamers y Digimons que iban apareciendo por sus costados; hacia la entrada del monasterio, un enorme umbral de piedra con la leyenda tallada en sus columnas, sobre la batalla entre los dos titanes que ahora se encontraba encerrados dentro del obre, peleando uno contra el otro por toda la eternidad.
- Tamer & Digimon
- Prueba de Rol :ADigi Puntos :1579Cuentas :Ficha :Relaciones :Cronologia :NPCs :Nivel On Rol :Super UltimateIcono :Rango y Unidad :Cadejo Shiroi
Rango: Chaos Lord
División: Todo el clan
Unidad/Sub-division: Todo el clan
Commandramon
Rango: Chaos Lord y Líder de la D-Brigade
División: Todo el clan
Unidad/Sub-division: Todo el clanInventario :
cadejo
Re: El treceavo perdido [libre]
A veces no entiendo a mi hermano… primero le digo que no me hable, y aun así me habla… después le digo que no me moleste y aun así lo hace… tsk… ¿en serio tener hermanos es tan irritante?... dios… ¿Qué hice para merecer esto?... aunque no lo llamaría malo… incluso diría que es bueno. Sea como sea; el que Zereck me informara de esa dichosa tumba perdida; templo antiguo o que se yo no fue tan malo… pronto comenzaron a llegar muchos trabajos de digimons que querían los tesoros que ocultaran en ese lugar… pero la propuesta de trabajo que mas me llamo la atención, fue de un digimon desconocido que dijo querer el poder del “Royal Knight perdido”… pfs… se habrá perdido por no tener un mapa para guiarse. En fin, la recompensa por cumplir ese trabajo era bastante tentadora… y aunque los demás no quisieran arriesgarse por las historias absurdas de ese lugar, Labramon y yo teníamos curiosidad, asique optamos por aceptar el trabajo e ir de inmediato; aunque no sin antes prepararme y ponerme mi uniforme de mercenario… pfs… en el fondo no me gusta usar uniforme, pero sé que es completamente necesario, más que nada para que nadie me reconozca… sinceramente lo último que necesito es que alguien conocido me vea ir a un lugar que ni siquiera me importa… por ejemplo mi hermano… quien me pidió que lo acompañara pero bueno… le dije que tenía mejores cosas que hacer y de paso le recordé que el también debería de tenerlas… aunque aun así creo que ira… pero bueno; eso no lo sabré hasta llegar a la zona.
En fin, todo lo que hicimos Labramon y yo antes de avanzar hacia el templo, fue analizar a la competencia… digimons fuertes con algunos tamers… otros débiles… pero nada que muy complicado… supongo que era momento de avanzar hacia el lugar y esperar lo mejor sinceramente.
Muy bien Labramon, ¿listo para investigar un templo antiguo? –comencé a caminar hacia el templo tranquilamente con Labramon a mi lado- ten en cuenta que no es un paseo por diversión, también estamos en medio de un trabajo y no podemos dejar eso de lado, ¿entiendes?
Comprendo, aunque igualmente será divertido ver un lugar como ese… además podríamos encontrarnos con Sigrun en el camino –je… espero que Labramon entienda con el tiempo que para estos trabajos, es mejor que nadie se entere- por cierto, ¿Zereck vendrá?
Lo dudo mucho… seguramente estará ocupado con otras cosas… -observe el cielo esperando que no llegara volando en Grani- seguramente al único miembro de los Royal Knights que veamos, sea a Sigrun… pero no tenemos tiempo para saludar… solo tenemos que cumplir nuestro trabajo e irnos de inmediato… no tenemos que complicarnos más de la cuenta
Labramon asintió levemente… supongo que capto el mensaje… ahora… todo lo que queda es averiguar quién es este Royal Knight perdido… porque siendo honesto, no eh escuchado ninguna historia sobre este digimon… y si la escuche, no le preste la atención porque realmente no me interesan esas cosas.
Fue interesante el hecho de que nos contrataran para buscar tesoros en un templo antiguo perteneciente a un supuesto Royal Knight perdido… pero aun así no me sentía bien teniendo que… robar como un cazador de tesoros… pero bueno, ya nos pagaron asique debemos hacerlo… además, no es algo importante… el dueño del lugar parece que ya no está… y no es como las pirámides que suelo proteger del desierto asique no le veo mucho problema al intentar encontrar tesoros para llevarnos. Aunque en el fondo, espero que aparezca algún conocido… creo que así la cacería de tesoros sería bastante más divertida… aunque si es un Royal Knight el que aparece… seguramente se enojara mucho conmigo y con Scott por llevarnos tesoros antiguos.
…
Las ventajas de tener la capacidad de fusionarse con tu compañero gracias al poder del D-arc me siguen sorprendiendo… viajar como BlackMetalGarurumon no nos tomo más de 30 minutos de viaje; aunque considerando que el templo no se encontraba tan lejos de la base… después de todo, se encontraba en la Zona Prehistórica así como la base; supongo que fue natural que llegáramos rápido; pero aun así el aterrizar fue difícil… no tengo ganas de que alguien vea a BlackMetalGarurumon… yo considero esa forma como un… arma de reserva… después de todo; con sus instintos y armamento de avanzada, no sería bueno que alguien se entere de que esta a mi disposición… aunque no importa; no vi muchos tamers… de hecho, no vi a nadie que se me hiciera conocido, asique estaba a salvo… al menos por ahora… si conozco a los Royal Knights por como los conozco… se que alguno vendrá a investigar… quizás mi hermano o Sigrun… aunque a ella no la veo desde hace tiempo… quizás no sería tan malo verla… pero aun así, no puedo dejar que me vea… al menos no intentando conseguir el dichoso poder del Royal Knight perdido… no quiero ganarme una enemiga.En fin, todo lo que hicimos Labramon y yo antes de avanzar hacia el templo, fue analizar a la competencia… digimons fuertes con algunos tamers… otros débiles… pero nada que muy complicado… supongo que era momento de avanzar hacia el lugar y esperar lo mejor sinceramente.
Muy bien Labramon, ¿listo para investigar un templo antiguo? –comencé a caminar hacia el templo tranquilamente con Labramon a mi lado- ten en cuenta que no es un paseo por diversión, también estamos en medio de un trabajo y no podemos dejar eso de lado, ¿entiendes?
Comprendo, aunque igualmente será divertido ver un lugar como ese… además podríamos encontrarnos con Sigrun en el camino –je… espero que Labramon entienda con el tiempo que para estos trabajos, es mejor que nadie se entere- por cierto, ¿Zereck vendrá?
Lo dudo mucho… seguramente estará ocupado con otras cosas… -observe el cielo esperando que no llegara volando en Grani- seguramente al único miembro de los Royal Knights que veamos, sea a Sigrun… pero no tenemos tiempo para saludar… solo tenemos que cumplir nuestro trabajo e irnos de inmediato… no tenemos que complicarnos más de la cuenta
Labramon asintió levemente… supongo que capto el mensaje… ahora… todo lo que queda es averiguar quién es este Royal Knight perdido… porque siendo honesto, no eh escuchado ninguna historia sobre este digimon… y si la escuche, no le preste la atención porque realmente no me interesan esas cosas.
Desde el punto de vista de Labramon
Fue interesante el hecho de que nos contrataran para buscar tesoros en un templo antiguo perteneciente a un supuesto Royal Knight perdido… pero aun así no me sentía bien teniendo que… robar como un cazador de tesoros… pero bueno, ya nos pagaron asique debemos hacerlo… además, no es algo importante… el dueño del lugar parece que ya no está… y no es como las pirámides que suelo proteger del desierto asique no le veo mucho problema al intentar encontrar tesoros para llevarnos. Aunque en el fondo, espero que aparezca algún conocido… creo que así la cacería de tesoros sería bastante más divertida… aunque si es un Royal Knight el que aparece… seguramente se enojara mucho conmigo y con Scott por llevarnos tesoros antiguos.
- Imagen del traje que usa Scott:
Última edición por Scott-X el Miér Sep 10, 2014 7:16 pm, editado 1 vez
- Tamer & Digimon
- Prueba de Rol :ADigi Puntos :707Cuentas :Ficha :Relaciones :Cronologia :NPCs :Nivel On Rol :DNA Evolution (Super Ultimate)Nivel On Rol de los Digi Aliados :Nova: Mega
BR: MegaIcono :Rango y Unidad :Scott Shadowest Musahrahjy
Rango: Hades Knight
División: Hades Titans
Unidad/Sub-division: Titans
Labramon
Rango: Hades Knight
División: Hades Titans
Unidad/Sub-division: TitansRango y Unidad Digi Aliado :Nova (BlackWarGreymon)
Rango: Hades Knight
División: Hades Titans
Unidad/Sub-division: Titans
BR (Renamon)
Rango: Soldado
División: D-Brigade
Unidad/Sub-division: Shadow LizardInventario :
Scott Desaster
Re: El treceavo perdido [libre]
Una gran noticia había llegado a los oídos de vlad, la aparición de un templo, bueno mas bien unas ruinas de un lugar en el cual se guardaba un gran poder y no era para menos la data de un royal knight caballeros caballeros digimons encargados de mantener el orden en el digimundo, sin duda muchos tamer y digimos se reunirían ansiosos por obtenerlo y eso nos llevaba al motivo porque vlad se encontraba ahí, aunque obtener poder siempre era tentador no era eso lo que hizo viajar tan larga distancia hasta ese lugar, un deseo o mas bien una ilusion: el querer encontrar a su pequeña hermana que otrora siempre estuvo a su lado pero al llegar al digimundo sus caminos fueron separados de forma imprevista.
-"Quizás mi hermana se encuentre aquí"- con esa idea en mente y la esperanza de que fuera una realidad viajo rumbo al valle de los dragones,preparado con su bolso con utensilios y hierbas medicinales avanzo hacia el pueblo mas cercano. El viaje no resultaría nada fácil, primeramente por el tiempo que tardo en conseguir un transporte al cual a pesar de sus esfuerzos no obtuvo resultados favorables ya que el pueblo mas que nada eran unas cuantas chozas y los digimons que las habitaban no superaban la docena, si bien el próximo poblado podía tener transportes la distancia era demasiado amplia y por ende óbito por la mejor opción, sacando su digivice cambio a angemon y usando sus alas emprendió el vuelo hacia el objetivo. Debido a la distancia tanto así como a la velocidad de vuelo al cabo de unas cuantas horas pudo divisar lo que seria el valle además del respectivo monasterio sobre lo alto de una de las montañas ubicadas en ese lugar.
-Lo mas preciso sera ahorrar energía a unos cuantos metros de llegar al lugar-descendió volviendo a su forma humana y determino seguir su viaje a pie, caminando lentamente por el terreno un poco escarpado llego al fin a lo que seria lo mas alto de la montraña y desde la distancia pudo divisar las ruinas del lugar, en ella se hallaban reunidos una gran cantidad de tamer y digimons pero lamentablemente ninguno coincidía con la descripción que recordaba de su hermana aunque claro había pasado un tiempo desde la ultima vez se encontró con esta quizás si se adentraba junto con el grupo tendría la posibilidad de encontrarla, cuando el grupo lentamente comenzó a moverse hacia la entrada vlad los siguió y ahí pudo contemplar un enorme grabado que relataba una gran batalla entre el que debía ser el royal knight y otro ser el cual no conocia, pero según lo que veía debió ser un gran enemigo. Lo contemplo por unos cuantos segundos los suficientes como para que quedara grabados en su mente y decidió observar a aquellos que se encontraban en el umbral del templo. Nadie le resultaba familiar aunque habían algunos que destacaban de forma considerable comparados con el resto de los presentes.
-"Quizás mi hermana se encuentre aquí"- con esa idea en mente y la esperanza de que fuera una realidad viajo rumbo al valle de los dragones,preparado con su bolso con utensilios y hierbas medicinales avanzo hacia el pueblo mas cercano. El viaje no resultaría nada fácil, primeramente por el tiempo que tardo en conseguir un transporte al cual a pesar de sus esfuerzos no obtuvo resultados favorables ya que el pueblo mas que nada eran unas cuantas chozas y los digimons que las habitaban no superaban la docena, si bien el próximo poblado podía tener transportes la distancia era demasiado amplia y por ende óbito por la mejor opción, sacando su digivice cambio a angemon y usando sus alas emprendió el vuelo hacia el objetivo. Debido a la distancia tanto así como a la velocidad de vuelo al cabo de unas cuantas horas pudo divisar lo que seria el valle además del respectivo monasterio sobre lo alto de una de las montañas ubicadas en ese lugar.
-Lo mas preciso sera ahorrar energía a unos cuantos metros de llegar al lugar-descendió volviendo a su forma humana y determino seguir su viaje a pie, caminando lentamente por el terreno un poco escarpado llego al fin a lo que seria lo mas alto de la montraña y desde la distancia pudo divisar las ruinas del lugar, en ella se hallaban reunidos una gran cantidad de tamer y digimons pero lamentablemente ninguno coincidía con la descripción que recordaba de su hermana aunque claro había pasado un tiempo desde la ultima vez se encontró con esta quizás si se adentraba junto con el grupo tendría la posibilidad de encontrarla, cuando el grupo lentamente comenzó a moverse hacia la entrada vlad los siguió y ahí pudo contemplar un enorme grabado que relataba una gran batalla entre el que debía ser el royal knight y otro ser el cual no conocia, pero según lo que veía debió ser un gran enemigo. Lo contemplo por unos cuantos segundos los suficientes como para que quedara grabados en su mente y decidió observar a aquellos que se encontraban en el umbral del templo. Nadie le resultaba familiar aunque habían algunos que destacaban de forma considerable comparados con el resto de los presentes.
- Tamer
- Prueba de Rol :ADigi Puntos :239Cuentas :Ficha :NPCs :Nivel On Rol :Double SpiritNivel On Rol de los Digi Aliados :Rookie
Inventario :
Vlad
Re: El treceavo perdido [libre]
Sigrun
Hace unos días me llegaron rumores de algo que habían encontrado de los Royal Knights, pero al principio parecían ser solo rumores. No es la primera vez que se extiende un rumor similar y luego resulta no ser cierto. Poco a poco, ese rumor iba cogiendo fuerza, ya no se trataba de un simple chisme, había algo más detrás de todo eso. Me enteré de que lo que habían encontrado se hallaba en la Zona Prehistórica, pero esa zona era gigantesca así que decidí ahorrar tiempo usando el Ojo de Odín.
Entré en una gran sala circular acompañada de Uforce, en su forma de Veemon. Las puertas se cerraron tras nosotros por una buena razón. Esa sala era de uso exclusivo para Ralian, aunque al ser su mano derecha, se me permitía hacer uso de ella de ser necesario. Mientras las antorchas de las paredes iluminaban la sala, me acerqué junto con mi compañero a una laguna de cristal que ocupaba el centro de la misma. Ese era el Ojo de Odín.
Hice aparecer una pequeña pantalla holográfica delante de mí e introduje las coordenadas de la Zona Prehistórica. Al instante, el Ojo de Odín me mostró toda la zona incluyendo lo que ocurría en todo el lugar. Al revisar más a fondo, Ulforce y yo nos dimos cuenta de una agrupación de tamers y digimons en lo alto de una montaña. Estaban observando un templo.
- ¿Te suena de algo, Ulforce?- le pregunté a mi compañero- si los rumores son ciertos ese templo tiene que ver con uno de los Antiguos Royal Knights, el que todos llaman “El Royal Knight perdido”
- Omegamon me habló de ello. Cuando nos buscaban para reunirnos a todos por primera vez, hubo uno de nosotros al que nunca pudimos encontrar-me contó mientras seguía con la mirada en las imágenes que nos mostraba aquella laguna de cristal- Sigrun, hay que ir allí inmediatamente, si uno de mis hermanos está allí tengo que encontrarlo antes de que lo haga otro.
Asentí y, una vez que desactivé el Ojo de Odín, nos reunimos con Dracomon y nos pusimos en marcha hacia la Zona Prehistórica. Gracias a los portales llegamos allí enseguida, aunque un poco alejados del templo para no ser vistos. Las noticias se habían extendido por todo el Mundo Digital, ya habían demasiados tamers por los alrededores del templo como para llamar la atención. Por esa razón era mejor ir sin mi uniforme, la discreción era vital para aquella misión.
Ulforce, Dracomon y yo llegamos al templo. Había varios grupos de tamers y digimons comentado sus descubrimientos y estaba segura de que habría otros tantos explorando el interior. Me acerqué hacia los grabados de uno de los laterales del templo, en uno de ellos había dos digimons luchando.
- Mi hermano…- murmuró Ulforce mientras observaba el grabado.
- ¿Y quién es el digimon con quien está luchando?- preguntó Dracomon.
- Es un Algomon- le contesté antes de escuchar de casualidad una conversación entre un Sorcerymon y un Turuiemon.
Ambos digimons hablaban no muy lejos de nosotros.
- Parece que es más peligroso de lo que pensábamos- comentó el mago de hielo.
- Si, hasta ahora todos los que han entrado no han salido- dijo el conejo digimon- Dicen que los guardianes del templo eliminan a todo aquel que ose entrar.
¿Nadie salió con vida? Eso significa que el templo podría no estar del todo vacío, tal vez lo de los guardianes sea verdad o tal vez los que entraron perecieron en alguna de las trampas si es que el templo disponía de trampas ocultas. Ambos digimons se alejaron, parece ser que desistieron de investigar el interior.
- Bien, escuchadme ambos- les dije a mis compañeros- La noticia de este templo se ha extendido rápidamente y habrá muchos que estén deseando hacerse con el poder del Royal Knight perdido. Naturalmente no podemos permitir que caiga en malas manos. Esperemos que el Chaos Empire no se haya enterado aún porque seguro que intentarían algo.
- No dejaré que nadie le ponga las manos encima a uno de mis hermanos- dijo Ulforce completamente decidido- Pienso liberarlo y llevarlo de vuelta a la base.
- Daré lo mejor de mi- dijo Dracomon- No tendré mucho poder pero haré todo lo que pueda.
Tras echar un último vistazo a mi alrededor, los tres nos dirigimos hacia la entrada del templo. Pero cuando iba a girar la esquina para llegar a la entrada me detuve de golpe y retrocedí hasta quedar oculta de nuevo.
- ¿Que pasa, Sigrun?- preguntó Dracomon en voz baja, debió suponer que pasaba algo grave- Casi me pisas al echarte hacia atrás de repente.
- ¿Es que siempre tiene que andar metido donde no le llaman? - murmuré muy molesta.
- ¿A quien has visto?- preguntó Ulforce.
- Cadejo está aquí y también Commandramon- les dije- Y apuesto lo que queráis a que no están aquí solo por hacer turismo, seguro que saben lo del Royal Knight.
Esto iba a complicarme las cosas, Cadejo y su compañero ya estaban por entrar al templo. Odiaba que fuesen un paso por delante de mi. Ahora sólo me quedaba entrar después de ellos y tratar de hacer todo lo posible por encontrar al Royal Knight perdido ante de que lo hicieran ellos. Sobretodo, intentaría pasar desapercibida, no me interesaba que Cadejo supiese que estoy aquí.
- Tamer & Digimon
- Prueba de Rol :ADigi Puntos :642Cuentas :Ficha :Relaciones :Cronologia :NPCs :Nivel On Rol :Burst Mode/Future ModeNivel On Rol de los Digi Aliados :Draco: Ultimate [BlackMetalGreymon]
Kara: Rookie [Dorumon]Icono :Rango y Unidad :Sigrun Vinter
Rango: Hand of the King y Holy Knight
Unidad: Todo el clan (Blue Thunder Dragons)
Ulforce
Rango: Hand of the King y Holy Knight
Unidad: Todo el clan (Blue Thunder Dragons)Rango y Unidad Digi Aliado :Draco
Rango: Knight
Unidad: Dragons DestroyersInventario :
Sigrun Vinter
Re: El treceavo perdido [libre]
Una ruina perteneciente a los ancestros de los Royal Knight, era lo que habia escuchado decir a algunos digimons que conversaban en un pueblo, al parecer esa noticia tenia a muchos digimons y humanos emocionados, no le preste la mas minima atencion a ese echo, lo que otros hicieran o dejaran de hacer era lo de menos
- Esta en el valle de los dragones, en una montaña comun y corriente, ¿puedes creerlo? - ecuche decir a un agumon mientras estaba comiendo en un restaurante, quiza no seria tan mala idea ir a echar un vistazo, decian que aquellas eran de las mejores vistas del digimundo, y siendo sincera entre mas lo escuchaba mas curiosidad tenia de ir a investigar
me habia propuesto disfrutar de mis años de "libertad" lo mas que pudiera, y esta era una oportunidad perfecta para ver de lo que era capaz, aunque esperaba que no hubiera mucha gente, pues si no estaria sumamente incomoda en ese lugar, podia soportar a los digimons pero otra cosa era tratar con humanos, eran mucho mas... complicados
- Supongo que por esta vez asistire a ese lugar - segun habia escuchado algunos grupos inclusive habian puesto fechas para ir, el reto debia ser grande ya que estaban divulgando el echo con la esperanza de que la mayoria de personas fueran, como si uno solo no pudiera con esa tarea, me acerque al agumon para pedirle mas indicaciones, claro que de estos echos ya habian pasado 3 dias...
- espero no encontrar a mas gente - dije caminando rumbo a las ruinas, vi a varios digimons voladores dirigirse hacia ese lugar - y yo creia que venia temprano - suspire un tanto incomoda, significaba que habia mas personas en el lugar, aunque ahora mismo no podia retractarme asi que segui avanzando a paso firme
me tomo cerca de una hora mas de camino el llegar a aquel lugar considerado sagrado por muchos, y me sorprendio mucho antes de estar frente a él, decir que era espectacular era poco, majestuoso tambien era una palabra muy simple para describirlo, talladas en algunas de las paredes y estructuras habia batallas de digimons, no habia visto este tipo de decoraciones en ninguna parte del digimundo que habia recorrido, no me percate de la cantidad de personas que habia en el lugar, solo me mantuve recorriendo con la mirada cada figura tallada, cada letra que describia a los digimons que habian participado, aunque no a detalle, pero con eso bastaba para sorprenderme por completo
despues de algunos minutos sali de mi estado de perplejidad y gire a ver a mi alrededor, habia apenas una veintena de personas, algunas con sus digimons acompañantes, otros solos, algunos grupos de 2 o 3 personas conversando amenamente, yo me mantuve al margen alejandome de la multitud, vi llegar a unas cuantas personas mas pero sin hacer la gran diferencia en la cantidad ¿en verdad hay tan poca gente? y es que con aquel rumor era raro que solo unos pocos se interesaran, quiza por la dificultad que los mismos digimons agregaban a sus historias o por los rumores de que aquel que entraba no volvia a ver la luz del dia, pero eso solo hacia mas grande mi curiosidad de poder ser de los primeros en ver ese monasterio en su totalidad, aunque no me interesaba el tesoro, solo necesitaba apreciar su belleza y poder contemplarla como pocos tendrian la oportunidad
nadie habia entrado hasta ahora, asi que si habia algun mecanismo de activacion o si existia alguna entrada secreta ademas de la obvia era un misterio para mi, me sente en unas rocas a unos metros de la entrada para observar a esos pequeños grupos de personas, esperando sus acciones y meditando sobre cual seria mi plan de accion, en mi bolso tenia provisiones para maximo 3 dias y en la mochila que lleve a este evento especial habia un poco mas junto con algunas herramientas que podian ser utiles, me puse a verificar todo lo que traia antes de acercarme a la entrada, pues sabia bien que despues de cruzar aquellas puertas no habria vuelta atras
- Esta en el valle de los dragones, en una montaña comun y corriente, ¿puedes creerlo? - ecuche decir a un agumon mientras estaba comiendo en un restaurante, quiza no seria tan mala idea ir a echar un vistazo, decian que aquellas eran de las mejores vistas del digimundo, y siendo sincera entre mas lo escuchaba mas curiosidad tenia de ir a investigar
me habia propuesto disfrutar de mis años de "libertad" lo mas que pudiera, y esta era una oportunidad perfecta para ver de lo que era capaz, aunque esperaba que no hubiera mucha gente, pues si no estaria sumamente incomoda en ese lugar, podia soportar a los digimons pero otra cosa era tratar con humanos, eran mucho mas... complicados
- Supongo que por esta vez asistire a ese lugar - segun habia escuchado algunos grupos inclusive habian puesto fechas para ir, el reto debia ser grande ya que estaban divulgando el echo con la esperanza de que la mayoria de personas fueran, como si uno solo no pudiera con esa tarea, me acerque al agumon para pedirle mas indicaciones, claro que de estos echos ya habian pasado 3 dias...
- espero no encontrar a mas gente - dije caminando rumbo a las ruinas, vi a varios digimons voladores dirigirse hacia ese lugar - y yo creia que venia temprano - suspire un tanto incomoda, significaba que habia mas personas en el lugar, aunque ahora mismo no podia retractarme asi que segui avanzando a paso firme
me tomo cerca de una hora mas de camino el llegar a aquel lugar considerado sagrado por muchos, y me sorprendio mucho antes de estar frente a él, decir que era espectacular era poco, majestuoso tambien era una palabra muy simple para describirlo, talladas en algunas de las paredes y estructuras habia batallas de digimons, no habia visto este tipo de decoraciones en ninguna parte del digimundo que habia recorrido, no me percate de la cantidad de personas que habia en el lugar, solo me mantuve recorriendo con la mirada cada figura tallada, cada letra que describia a los digimons que habian participado, aunque no a detalle, pero con eso bastaba para sorprenderme por completo
despues de algunos minutos sali de mi estado de perplejidad y gire a ver a mi alrededor, habia apenas una veintena de personas, algunas con sus digimons acompañantes, otros solos, algunos grupos de 2 o 3 personas conversando amenamente, yo me mantuve al margen alejandome de la multitud, vi llegar a unas cuantas personas mas pero sin hacer la gran diferencia en la cantidad ¿en verdad hay tan poca gente? y es que con aquel rumor era raro que solo unos pocos se interesaran, quiza por la dificultad que los mismos digimons agregaban a sus historias o por los rumores de que aquel que entraba no volvia a ver la luz del dia, pero eso solo hacia mas grande mi curiosidad de poder ser de los primeros en ver ese monasterio en su totalidad, aunque no me interesaba el tesoro, solo necesitaba apreciar su belleza y poder contemplarla como pocos tendrian la oportunidad
nadie habia entrado hasta ahora, asi que si habia algun mecanismo de activacion o si existia alguna entrada secreta ademas de la obvia era un misterio para mi, me sente en unas rocas a unos metros de la entrada para observar a esos pequeños grupos de personas, esperando sus acciones y meditando sobre cual seria mi plan de accion, en mi bolso tenia provisiones para maximo 3 dias y en la mochila que lleve a este evento especial habia un poco mas junto con algunas herramientas que podian ser utiles, me puse a verificar todo lo que traia antes de acercarme a la entrada, pues sabia bien que despues de cruzar aquellas puertas no habria vuelta atras
Última edición por Yuuki Kimura el Vie Sep 12, 2014 10:30 pm, editado 2 veces
- Tamer
- Digi Puntos :204Nivel On Rol :Hybrid (Fusion Form) / Doble Spirit
Yuuki Kimura
Re: El treceavo perdido [libre]
-No se tu pero a mí se me asemeja al templo del santo grial de Indiana Jones, la anteúltima película antes de ese pequeño resbalón de la calavera de cristal. Estaba buena pero como que meter los alienes la desbordo demasiado jeje – haciendo un primer juicio sobre la imponente estructura tallada en la cara de la montaña, como si aquella elevación de tierra y rocas, no fuera más que la prolongación del templo, o este fuera la entrada de la montaña.
-pues si tiene semejanza por estar tallada sobre una estructura natural de la naturaleza, pero creo que tiene un estilo más medieval- le responde, mientras se van acercando a los murales a los costados de la estructura, obras de arte talladas con extremo cuidado y a gran detalle, en donde se contaba la vida del Royal o mejor dicho como se volvió uno de ellos hasta que tuvo aquel fatídico enfrentamiento donde debió dar su vida por el bien del Digimundo -…- guardando silencio mientras contemplaba al pasar, los diversos murales, al igual que su compañero quien en realidad andaba más interesado en buscar alguna pista o algo más…algo oculto a la vista de la mayoría, motivo por el cual se había colocado sus gafas especiales, un artefacto diseñado para ver a través de la capa visual del Digimundo – ¿ves algo interesante con esas cosas?
-jeje algo, pero no mucho – soltando una pequeña sonrisa y risa entre dientes, sin detenerse mucho a observar las cosas puesto estaba seguro que lo verdaderamente importante estaba dentro de Monasterio. Al mismo tiempo iban oyendo algunos comentarios de los otros visitantes, los cuales al no percatarse de ellos dos discutían sobre los eventos pasados, como la cantidad de tamers y Digimons que habían entrado antes al monasterio, creyendo tener la clave para pasar, pero al igual que el resto, nunca habían logrado salir, motivo por el cual en la actualidad habían tan poca gente…todo los demás habían renunciado o desaparecido; o de las conjeturas que tenían algunos investigadores, supuestos pasadizos secretos, claves de acceso, etc, asegurando que los “guardianes no eran nada más ni nada menos que sistemas de protección o cosas parecidas”. Aunque aquellos visitantes que habían visto a ese dúo, habían logrado reconocerlos y simplemente se les iban alejando del camino, soltando algún susurro entre ellos, con una notoria expresión de desconfianza, furia y/o temor en sus rostros…algo que creo le agradaba a Cadejo, le hacía sentir realmente importante y posiblemente aumentara su propio ego.
Dejando los murales atrás y dirigiéndose por las únicas, amplias y algo largas, escaleras de piedra, el dúo se dispuso a continuar su rápido reconocimiento de la zona accesible, lugares por los cuales todos parecían poder pasar sin despertar los “Guardianes”. No era mucho espacio que estaba accesible: el exterior del monasterio, donde estaban los murales y alguna que otra columna olvidada, con prácticamente la misma información que los murales; las escaleras con la continuación de las historias de los murales, tallada en su umbral y las pocas paredes que les rodeaban; luego estaba una amplia habitación, pasando el segundo umbral, ya dentro de la montaña, era una zona muy decorada con figuras de exclusivo uso decorativo, no parecía haber mucha información allí, era como una enorme sala de espera, con incluso bancos y mesas; y por último la sección final y más temible de todas, bajando por un pequeño pasadizo, desde la habitación de espera, donde se encontraba una habitación mucho más pequeña capaz de albergar a unas cuantas personas pero no más de 10. La habitación poseía una forma circular y otras 5 puertas de madera, dispersas en la misma, con diversos símbolos tallados en cada una; además de los tres pares de seres que al parecer estaban tratando de deducir como pasar sin sufrir el mismo castigo que los aventureros anteriores.
-es esta puerta…no está! estoy seguro…espera estoy seguro que es esta otra- dice un joven robusto de pelo marrón oscuro y enrulado, con una campera y jeanns azules; al tiempo que va agarrando las perillas de las puertas y soltándolas por la de otra, demostrando su indecisión y miedo.
-¡ya decídete! – le grita un Agumon que obviamente era su compañero digital. Habiendo estallado por la indecisión de su camarada.
-no peleen, debemos tener cuidado no queremos terminar como los demás – dice una joven de pelo largo, oscuro y laceo; con una voz pasiva y sumisa, intentando controlar a sus dos camaradas – aunque creo que deberíamos irnos…no quisiera que resultaran...-dando a entender por su voz, su mirada y su silencio, que a lo que se refería era que no deseaba que por algún motivo sus amigos terminaran muertos, como suponía que había quedado los anteriores aventureros. Ellos había visto como cuando alguno entraba por alguno de esas puertas esta luego se cerraba con fuerza y le seguía un temible grito antes de que alguien pudiera abrir de nueva la puerta y ver que allí adentro no había nada solo el mismo oscuro y misterioso corredor; esa era la supuesta muerte a manos de los Guardianes. Al instante sus camaradas detuvieron su pelea y su compañera, un Toy Agumon, empezó a calmarla con unas caricias.
-no se preocupen, solo necesito tiempo de descifrar el acertijo, sé que hay una conexión en todo eso – dice por ultimo un joven de pelo algo largo para un hombre, rubio, y con gafas; el cual estaba junto a su camarada un Black Agumon, revisando las escrituras en las paredes de aquella habitación, la mayoría solo advertencias de los guardianes, peligros ocultos y la recompensa para aquellos que logren superar los retos…aunque estaba seguro de que en algún lugar oculto estaba la información que buscaban para pasar y continuar su aventura.
-jeje yo que tu no me molestaría, no veo que haya nada de información útil en las paredes jeje- llegando de improvisto ante los tres jóvenes tamers, provocando un sobre salto por su aparición repentina, pero nada comparado al susto que tuvieron una vez reconocieron quienes eran en realidad, cabe decir que mientras la chica solo se cubría la boca protegida por su camarada digital; el dúo que antes se estaba peleando ahora solo miraban con algo de temor pero fiereza, al nuevo para que había entrado; al tiempo que el joven de mayor intelecto y su camarada, también demostrando su temor, solo se quedaban a la espera de ver que era lo que este famoso mal tenía planeado hacer – jeje parece que luego de mi fiesta de quimeras en la ciudad, los Unión lograron repartir anuncios de búsqueda con una foto más moderna de nosotros jejejee- dando unos pasos hacia el centro de la habitación, siendo constantemente vigilado por los 6 ojos, cuyos dueños simplemente se había amontonado a un costado de la habitación, esperando no tener que entrar en batalla – me pregunto si ya aumentaron nuestras recompensas- termina por comentar mientras echa una mirada a las puertas y sus símbolos.
-no creo que tengan más efectivo para eso – comenta su compañero militar, esperando las indicaciones de Cadejo. Para él aquellos jóvenes no eran una amenaza, y no importaba quien entrara por el túnel trasero, con el pequeño tamaño de esta recamara debería ser muy estúpido si intentara atacarles, puesto la montaña entera los aplastaría a todos – ¿ya tienes algo? – le pregunta a su compañero, puesto no era muy reconfortarle para Commandramon, como soldado, el estar tan expuesto en un área tan pequeña.
-dame un minuto jejeje – echando ahora una mirada a toda la habitación, paredes, techo y suelo, donde en los dos últimos encontró unas pistas útiles para su siguiente paso – jeje ya está, tengo una idea de que son estos guardianes, no te preocupes y sigamos con nuestra carrera jejeje –
-¿lograste ver algún amigo con quien competir? – preguntando más que nada por curiosidad, mientras acompaña a su compañero hacia la tercera puerta a la izquierda.
-no, pero estoy seguro que algún Royal Knight llegara y obviamente competiremos contra reloj contra él jejeje – aclara a su camarada, sin perder las esperanzas de que mandaran a algún enemigo fuerte o mejor aún a algún conocido. Sin más que perder solo se dispone a abrir la puerta elegida - …por cierto si siguen esta aventura, supongo que terminaremos siendo rivales jajaja- con un tono algo macabro al igual que la leve risa entre dientes, dejando en claro que aquello había sido una simple advertencia para que reconsideran seguir este viaje, la decisión final dependería de ellos. Y así confiado en su elección el dúo cerró la puerta detrás de ellos y a continuación… un grito de dolor y un estruendo, todo lo mismo que ocurrió en las demás ocasiones, para que luego quien quiera confirmar abriera la puerta y no viera más que el corredor vacío.
-jeje eso fue divertido- tendido en el suelo de un lugar completamente diferente a donde estaba, ya no se hallaba en el interior de la montaña, más bien estaba en algún otro lugar al aire libre, puesto podía ver el cielo sobre sus cabezas. Aunque era un lugar diferente a simple vista, no era ajeno al anterior, puesto por la dureza y superficie plana donde estaba recostado, daba a entender que su cuerpo estaba sobre baldosas, además si se incorporara o se dispusiera a sentarse lograría ver un enorme edificación medieval, el verdadero monasterio, ubicado sobre una cordillera, rodeado de montañas blancas, cuya nieve reflejaba, en un hermoso espectáculo, los rayos del sol.
-al parecer elegiste la puerta correcta, estamos en el jardín de un monasterio en otra área de la zona en la que estábamos antes- dice levantándose para hacer un rápido reconocimiento visual del área. La verdad era un hermoso jardín lleno de bancos, macetas y jardines empedrados que mantenían con vida un gran número de bellas flores de múltiples colores, como si fuera el arcoíris oculto en la montaña…aunque aquello despertaba la inquietud del militar, puesto esto indicaba que alguien debería estar cuidando este jardín ya que era poco probable que hay soportado tantos años y mucho menos les aire frió de esta área.
-jeje no había una puerta correcta, todos llevan a algún lugar del monasterio, en si no ha habido ningún riesgo al pasar aquel reto de fe jejej…al menos que termines en alguna zona destruida del templo donde quedarías atrapado o morirías al instante jejeje – feliz por su buena suerte, al punto que aun tirado en el suelo extiende sus extremidades como festejo antes de incorporarse lentamente para contemplar tanto la vista de las montañas como la estructura en la que estaban actualmente. Estaba claro para ambos que a partir de ahora no sería tan fácil, puesto varios ya habían cruzado en los días anteriores, ya sea en busca de más conocimientos sobre las ruinas o por la data que ellos también codiciaban, lo único certero es que podría ser muy probable un encuentro poco amigable con esos aventureros…o peor aún, que en realidad haya algún guardián de gran poder que ronde este monasterio olvidado por todo el Digimundo, y que haya logrado eliminar a todos sus adversario, lo que explicaría el motivo por el cual todavía nadie había regresado…pero bueno era cosa de investigar y descubrirlo.
-¿Cómo sabias que las puertas eran un portal?- expresando la única duda que le quedaba sobre el conocimiento que adquirió tan rápido su compañero.
-la verdad no tenía idea, no había ningún indicio, pero conociendo a los Royal Knight era lo más probable y la verdad no había indicio en la data del lugar que mostrara sistemas que se activaran bajo ciertas circunstancias o palabras- demostrando su tranquilidad por haberse dejado guiar por la intuición, sabiendo el posible riesgo de estar equivocados – además en el techo de la habitación pequeña decía “Entrada” jejeje.
-preferiría que la próxima consultaras conmigo ante tal nivel de riesgo – dice luego de un suspiro algo molesto – bueno creo que mejor investigamos un poco.
off: Yuuki, esto no es un evento planeado, simplemente se descubrieron las ruinas y bajo esas misteriosas desapariciones y el echo de las leyendas que se cuentan en la la parte exterior del mismo, atrajo la curiosidad de varios.
imagen del monasterio, o al menos de la parte donde esta cade
-pues si tiene semejanza por estar tallada sobre una estructura natural de la naturaleza, pero creo que tiene un estilo más medieval- le responde, mientras se van acercando a los murales a los costados de la estructura, obras de arte talladas con extremo cuidado y a gran detalle, en donde se contaba la vida del Royal o mejor dicho como se volvió uno de ellos hasta que tuvo aquel fatídico enfrentamiento donde debió dar su vida por el bien del Digimundo -…- guardando silencio mientras contemplaba al pasar, los diversos murales, al igual que su compañero quien en realidad andaba más interesado en buscar alguna pista o algo más…algo oculto a la vista de la mayoría, motivo por el cual se había colocado sus gafas especiales, un artefacto diseñado para ver a través de la capa visual del Digimundo – ¿ves algo interesante con esas cosas?
-jeje algo, pero no mucho – soltando una pequeña sonrisa y risa entre dientes, sin detenerse mucho a observar las cosas puesto estaba seguro que lo verdaderamente importante estaba dentro de Monasterio. Al mismo tiempo iban oyendo algunos comentarios de los otros visitantes, los cuales al no percatarse de ellos dos discutían sobre los eventos pasados, como la cantidad de tamers y Digimons que habían entrado antes al monasterio, creyendo tener la clave para pasar, pero al igual que el resto, nunca habían logrado salir, motivo por el cual en la actualidad habían tan poca gente…todo los demás habían renunciado o desaparecido; o de las conjeturas que tenían algunos investigadores, supuestos pasadizos secretos, claves de acceso, etc, asegurando que los “guardianes no eran nada más ni nada menos que sistemas de protección o cosas parecidas”. Aunque aquellos visitantes que habían visto a ese dúo, habían logrado reconocerlos y simplemente se les iban alejando del camino, soltando algún susurro entre ellos, con una notoria expresión de desconfianza, furia y/o temor en sus rostros…algo que creo le agradaba a Cadejo, le hacía sentir realmente importante y posiblemente aumentara su propio ego.
Dejando los murales atrás y dirigiéndose por las únicas, amplias y algo largas, escaleras de piedra, el dúo se dispuso a continuar su rápido reconocimiento de la zona accesible, lugares por los cuales todos parecían poder pasar sin despertar los “Guardianes”. No era mucho espacio que estaba accesible: el exterior del monasterio, donde estaban los murales y alguna que otra columna olvidada, con prácticamente la misma información que los murales; las escaleras con la continuación de las historias de los murales, tallada en su umbral y las pocas paredes que les rodeaban; luego estaba una amplia habitación, pasando el segundo umbral, ya dentro de la montaña, era una zona muy decorada con figuras de exclusivo uso decorativo, no parecía haber mucha información allí, era como una enorme sala de espera, con incluso bancos y mesas; y por último la sección final y más temible de todas, bajando por un pequeño pasadizo, desde la habitación de espera, donde se encontraba una habitación mucho más pequeña capaz de albergar a unas cuantas personas pero no más de 10. La habitación poseía una forma circular y otras 5 puertas de madera, dispersas en la misma, con diversos símbolos tallados en cada una; además de los tres pares de seres que al parecer estaban tratando de deducir como pasar sin sufrir el mismo castigo que los aventureros anteriores.
-es esta puerta…no está! estoy seguro…espera estoy seguro que es esta otra- dice un joven robusto de pelo marrón oscuro y enrulado, con una campera y jeanns azules; al tiempo que va agarrando las perillas de las puertas y soltándolas por la de otra, demostrando su indecisión y miedo.
-¡ya decídete! – le grita un Agumon que obviamente era su compañero digital. Habiendo estallado por la indecisión de su camarada.
-no peleen, debemos tener cuidado no queremos terminar como los demás – dice una joven de pelo largo, oscuro y laceo; con una voz pasiva y sumisa, intentando controlar a sus dos camaradas – aunque creo que deberíamos irnos…no quisiera que resultaran...-dando a entender por su voz, su mirada y su silencio, que a lo que se refería era que no deseaba que por algún motivo sus amigos terminaran muertos, como suponía que había quedado los anteriores aventureros. Ellos había visto como cuando alguno entraba por alguno de esas puertas esta luego se cerraba con fuerza y le seguía un temible grito antes de que alguien pudiera abrir de nueva la puerta y ver que allí adentro no había nada solo el mismo oscuro y misterioso corredor; esa era la supuesta muerte a manos de los Guardianes. Al instante sus camaradas detuvieron su pelea y su compañera, un Toy Agumon, empezó a calmarla con unas caricias.
-no se preocupen, solo necesito tiempo de descifrar el acertijo, sé que hay una conexión en todo eso – dice por ultimo un joven de pelo algo largo para un hombre, rubio, y con gafas; el cual estaba junto a su camarada un Black Agumon, revisando las escrituras en las paredes de aquella habitación, la mayoría solo advertencias de los guardianes, peligros ocultos y la recompensa para aquellos que logren superar los retos…aunque estaba seguro de que en algún lugar oculto estaba la información que buscaban para pasar y continuar su aventura.
-jeje yo que tu no me molestaría, no veo que haya nada de información útil en las paredes jeje- llegando de improvisto ante los tres jóvenes tamers, provocando un sobre salto por su aparición repentina, pero nada comparado al susto que tuvieron una vez reconocieron quienes eran en realidad, cabe decir que mientras la chica solo se cubría la boca protegida por su camarada digital; el dúo que antes se estaba peleando ahora solo miraban con algo de temor pero fiereza, al nuevo para que había entrado; al tiempo que el joven de mayor intelecto y su camarada, también demostrando su temor, solo se quedaban a la espera de ver que era lo que este famoso mal tenía planeado hacer – jeje parece que luego de mi fiesta de quimeras en la ciudad, los Unión lograron repartir anuncios de búsqueda con una foto más moderna de nosotros jejejee- dando unos pasos hacia el centro de la habitación, siendo constantemente vigilado por los 6 ojos, cuyos dueños simplemente se había amontonado a un costado de la habitación, esperando no tener que entrar en batalla – me pregunto si ya aumentaron nuestras recompensas- termina por comentar mientras echa una mirada a las puertas y sus símbolos.
-no creo que tengan más efectivo para eso – comenta su compañero militar, esperando las indicaciones de Cadejo. Para él aquellos jóvenes no eran una amenaza, y no importaba quien entrara por el túnel trasero, con el pequeño tamaño de esta recamara debería ser muy estúpido si intentara atacarles, puesto la montaña entera los aplastaría a todos – ¿ya tienes algo? – le pregunta a su compañero, puesto no era muy reconfortarle para Commandramon, como soldado, el estar tan expuesto en un área tan pequeña.
-dame un minuto jejeje – echando ahora una mirada a toda la habitación, paredes, techo y suelo, donde en los dos últimos encontró unas pistas útiles para su siguiente paso – jeje ya está, tengo una idea de que son estos guardianes, no te preocupes y sigamos con nuestra carrera jejeje –
-¿lograste ver algún amigo con quien competir? – preguntando más que nada por curiosidad, mientras acompaña a su compañero hacia la tercera puerta a la izquierda.
-no, pero estoy seguro que algún Royal Knight llegara y obviamente competiremos contra reloj contra él jejeje – aclara a su camarada, sin perder las esperanzas de que mandaran a algún enemigo fuerte o mejor aún a algún conocido. Sin más que perder solo se dispone a abrir la puerta elegida - …por cierto si siguen esta aventura, supongo que terminaremos siendo rivales jajaja- con un tono algo macabro al igual que la leve risa entre dientes, dejando en claro que aquello había sido una simple advertencia para que reconsideran seguir este viaje, la decisión final dependería de ellos. Y así confiado en su elección el dúo cerró la puerta detrás de ellos y a continuación… un grito de dolor y un estruendo, todo lo mismo que ocurrió en las demás ocasiones, para que luego quien quiera confirmar abriera la puerta y no viera más que el corredor vacío.
-jeje eso fue divertido- tendido en el suelo de un lugar completamente diferente a donde estaba, ya no se hallaba en el interior de la montaña, más bien estaba en algún otro lugar al aire libre, puesto podía ver el cielo sobre sus cabezas. Aunque era un lugar diferente a simple vista, no era ajeno al anterior, puesto por la dureza y superficie plana donde estaba recostado, daba a entender que su cuerpo estaba sobre baldosas, además si se incorporara o se dispusiera a sentarse lograría ver un enorme edificación medieval, el verdadero monasterio, ubicado sobre una cordillera, rodeado de montañas blancas, cuya nieve reflejaba, en un hermoso espectáculo, los rayos del sol.
-al parecer elegiste la puerta correcta, estamos en el jardín de un monasterio en otra área de la zona en la que estábamos antes- dice levantándose para hacer un rápido reconocimiento visual del área. La verdad era un hermoso jardín lleno de bancos, macetas y jardines empedrados que mantenían con vida un gran número de bellas flores de múltiples colores, como si fuera el arcoíris oculto en la montaña…aunque aquello despertaba la inquietud del militar, puesto esto indicaba que alguien debería estar cuidando este jardín ya que era poco probable que hay soportado tantos años y mucho menos les aire frió de esta área.
-jeje no había una puerta correcta, todos llevan a algún lugar del monasterio, en si no ha habido ningún riesgo al pasar aquel reto de fe jejej…al menos que termines en alguna zona destruida del templo donde quedarías atrapado o morirías al instante jejeje – feliz por su buena suerte, al punto que aun tirado en el suelo extiende sus extremidades como festejo antes de incorporarse lentamente para contemplar tanto la vista de las montañas como la estructura en la que estaban actualmente. Estaba claro para ambos que a partir de ahora no sería tan fácil, puesto varios ya habían cruzado en los días anteriores, ya sea en busca de más conocimientos sobre las ruinas o por la data que ellos también codiciaban, lo único certero es que podría ser muy probable un encuentro poco amigable con esos aventureros…o peor aún, que en realidad haya algún guardián de gran poder que ronde este monasterio olvidado por todo el Digimundo, y que haya logrado eliminar a todos sus adversario, lo que explicaría el motivo por el cual todavía nadie había regresado…pero bueno era cosa de investigar y descubrirlo.
-¿Cómo sabias que las puertas eran un portal?- expresando la única duda que le quedaba sobre el conocimiento que adquirió tan rápido su compañero.
-la verdad no tenía idea, no había ningún indicio, pero conociendo a los Royal Knight era lo más probable y la verdad no había indicio en la data del lugar que mostrara sistemas que se activaran bajo ciertas circunstancias o palabras- demostrando su tranquilidad por haberse dejado guiar por la intuición, sabiendo el posible riesgo de estar equivocados – además en el techo de la habitación pequeña decía “Entrada” jejeje.
-preferiría que la próxima consultaras conmigo ante tal nivel de riesgo – dice luego de un suspiro algo molesto – bueno creo que mejor investigamos un poco.
off: Yuuki, esto no es un evento planeado, simplemente se descubrieron las ruinas y bajo esas misteriosas desapariciones y el echo de las leyendas que se cuentan en la la parte exterior del mismo, atrajo la curiosidad de varios.
imagen del monasterio, o al menos de la parte donde esta cade
- Spoiler:
- Tamer & Digimon
- Prueba de Rol :ADigi Puntos :1579Cuentas :Ficha :Relaciones :Cronologia :NPCs :Nivel On Rol :Super UltimateIcono :Rango y Unidad :Cadejo Shiroi
Rango: Chaos Lord
División: Todo el clan
Unidad/Sub-division: Todo el clan
Commandramon
Rango: Chaos Lord y Líder de la D-Brigade
División: Todo el clan
Unidad/Sub-division: Todo el clanInventario :
cadejo
Re: El treceavo perdido [libre]
Sin duda la noticia de este templo fue bastante grande… pero creo que demasiado grande y peligrosa… después de todo, había un gran número de tamers y digimons que parecían estar interesados en conseguir el poder de dicho Royal Knight… el tema seria superarlos a todos… sin poder recurrir a BlackMetalGarurumon; así como a Cerberusmon Jinrou Mode o simplemente a Cerberusmon por temor a que aprendan de nosotros para así derrotarnos cuando llegue el momento… esto será muy difícil. Fuera como fuera, me adentre junto con Labramon en la gran montaña que parecía ser el templo… aunque no estoy muy seguro… en si parecía que tallaron el templo sobre la montaña misma… algo que sin duda es muy impresionante… pero también era muy extraño. En fin… al adentrarme en la montaña vi a muchos tamers retirarse… a muchos otros entrar y quedarse en lo que parecía ser una extraña “sala de espera”… seguramente planeando algún plan o estrategia para llegar antes que nadie al lugar donde estaría la data de este Royal Knight perdido.
El lugar estaba muy bien decorado… aunque creo que eso era un dato inútil… después de todo, seguramente es una decoración vaga por que al menos así lo veo yo… si esto realmente fuera un templo, debería de haber mayor decorado… más luz… mas zonas talladas y no lo sé… no estoy seguro de cómo era este Royal Knight… pero estoy seguro que algo de vegetación no le vendría mal al lugar. Sea como sea; mientras avanzaba por lo que sería el “templo”, logre ver a alguien conocido… por desgracia. No eran nada más y nada menos que Sigrun, Veemon o ahora bien conocido como “Ulforce” y el pequeño Dracomon… je… sabia que un Royal Knight vendría para encontrar la data de este Royal Knight perdido… y ahora que se que es Sigrun… puedo hacer un plan para pelear aunque… ella ya conoce a BlackMetalGarurumon… así como las demás formas de Labramon… asique enfrentarla de forma directa no sería lo mejor… tsk… quizás lo mejor será mantenerme alejado de ella e intentar conseguir la data por mis propios medios… ¿Qué hare con ella?, pues dársela a quien me pago para conseguirla… ¿y que hará ese sujeto con dicha data?, bueno, tengo una linda frase para eso: ME IMPORTA UN DIABLO.
En fin, regresando al tema del templo… para evitar ir detrás de Sigrun y arriesgarme a que me viera, decidí esperar a que ella tomara un camino… después de todo, luego del tema ese del coleccionista… no estoy seguro de que quiera verme… y aun con mi uniforme; ella ya me vio con el mismo… estoy seguro que lo recordara perfectamente… tsk… esto será un problema muy serio. Igualmente, para mi desgracia había un solo camino y no me quedo más alternativa que tomar el mismo… pero cuando llegamos a lo que parecía una recamara con 5 puertas de madera en 5 direcciones diferentes; me di cuenta de que allí si podría tomar un camino diferente… entonces note que Sigrun como el camino del medio; y yo para evitar encontrármela, tome el camino de la puerta ubicada en la punta derecha de la habitación… el problema fue que al cruzarla; tanto Labramon como yo caímos por una especie de túnel a no sé donde… y al final terminamos por aterrizar en especie de sendero montañoso… sin duda alguna, ya no estábamos en la montaña por donde comenzamos este trabajo.
El sendero estaba conformado por una gran cadena montañosa; la cual estaba unida por un gran puente de piedra estilo medieval y puentes colgantes de madera; las montañas parecían estar cubiertas de nieve… pero el camino que atravesaba los puentes por otro lado no… era bastanate extraño… pero daba a entender que alguien se hacia cargo de mantener en orden las cosas… ¿pero quien precisamente?... el tiempo de pensar no duro mucho ya que al darme la vuelta; pude ver una especie de monasterio en mitad de las montañas… y para mi suerte, el camino por este sendero llevaba al mismo monasterio… je… aunque es posible que las otras puertas lleven al mismo lugar… o mejor dicho; lleven a diferentes caminos que dan al mismo lugar.
Muy bien Labramon, pongamos manos a la obra y comencemos a caminar… volar no parece una opción con un clima gélido… y correr tampoco me parece algo que debamos hacer aun… además, no estamos tan lejos… quizás unos 400 o 600 metros -dicho eso, comencé a caminar tranquilamente con Labramon a mi lado, mientras que con unos binoculares observaba atentamente el lugar- ¿entonces allí se oculta la data de este Royal Knight?... bueno, esta será una aventura más interesante de lo que me imaginaba; ¿no crees Labramon?
En efecto… pero me pregunto qué tipo de Royal Knight será este… no sabemos casi nada de él… quizás debimos haber leído las escrituras en el templo… podríamos habernos informado mejor –en eso le doy la razón a Labramon pero bueno… a veces es más divertido avanzar sin muchos datos- ¿estamos haciendo lo correcto al avanzar de este modo sin tener información relevante?
No tengo idea Labramon pero bueno… ya llegamos hasta aquí, ahora tenemos que seguir… además, si llegamos a toparnos con Sigrun, quizás ella nos comparta algo de la información que tenga… al menos para sobrevivir a este lugar… lo único que escuche de aquí y que realmente me intereso; fue que todo el que entra jamás sale –realmente esto será muy interesante-
¿Todo el que entra jamás sale?... eso no me deja muy tranquilo pero bueno… Scott y yo hemos sobrevivido a cosas peores supongo… como el ejercido del desierto la primera vez que digievolucione a Anubismon… o la vez en que se llevaron la información del Jinrou Mode y tuvimos que pelear contra VictoryGreymon y sus subordinados… sin mencionar la vez en que nos enfrentamos a Gulfmon y a sus demonios. Si… no hay nada que nos detenga… además, tenemos muchas formas de atacar… si no es con Cerberusmon y el Inferno Gate… será con Jinrou y los pocos y casi nulos datos que existen del mismo… y si no es así; será con Ammit de Anubismon, sin mencionar el armamento de BlackMetalGarurumon… si… estamos listos para lo que sea… no importa que digimon venga; nosotros podremos contra él y saldremos adelante. Pero aun así… mi única preocupación es Sigrun, Ulforce y Dracomon… ahora que se que ellos también vinieron… es posible que estamos en problemas si siguen molestos por el tema del coleccionista… tsk… espero que entiendan que tampoco nos gusto hacer ese trabajo… ¿secuestrar a una gran amiga como Sigrun?... eso es algo que no podría hacer por mi cuenta.
El lugar estaba muy bien decorado… aunque creo que eso era un dato inútil… después de todo, seguramente es una decoración vaga por que al menos así lo veo yo… si esto realmente fuera un templo, debería de haber mayor decorado… más luz… mas zonas talladas y no lo sé… no estoy seguro de cómo era este Royal Knight… pero estoy seguro que algo de vegetación no le vendría mal al lugar. Sea como sea; mientras avanzaba por lo que sería el “templo”, logre ver a alguien conocido… por desgracia. No eran nada más y nada menos que Sigrun, Veemon o ahora bien conocido como “Ulforce” y el pequeño Dracomon… je… sabia que un Royal Knight vendría para encontrar la data de este Royal Knight perdido… y ahora que se que es Sigrun… puedo hacer un plan para pelear aunque… ella ya conoce a BlackMetalGarurumon… así como las demás formas de Labramon… asique enfrentarla de forma directa no sería lo mejor… tsk… quizás lo mejor será mantenerme alejado de ella e intentar conseguir la data por mis propios medios… ¿Qué hare con ella?, pues dársela a quien me pago para conseguirla… ¿y que hará ese sujeto con dicha data?, bueno, tengo una linda frase para eso: ME IMPORTA UN DIABLO.
En fin, regresando al tema del templo… para evitar ir detrás de Sigrun y arriesgarme a que me viera, decidí esperar a que ella tomara un camino… después de todo, luego del tema ese del coleccionista… no estoy seguro de que quiera verme… y aun con mi uniforme; ella ya me vio con el mismo… estoy seguro que lo recordara perfectamente… tsk… esto será un problema muy serio. Igualmente, para mi desgracia había un solo camino y no me quedo más alternativa que tomar el mismo… pero cuando llegamos a lo que parecía una recamara con 5 puertas de madera en 5 direcciones diferentes; me di cuenta de que allí si podría tomar un camino diferente… entonces note que Sigrun como el camino del medio; y yo para evitar encontrármela, tome el camino de la puerta ubicada en la punta derecha de la habitación… el problema fue que al cruzarla; tanto Labramon como yo caímos por una especie de túnel a no sé donde… y al final terminamos por aterrizar en especie de sendero montañoso… sin duda alguna, ya no estábamos en la montaña por donde comenzamos este trabajo.
El sendero estaba conformado por una gran cadena montañosa; la cual estaba unida por un gran puente de piedra estilo medieval y puentes colgantes de madera; las montañas parecían estar cubiertas de nieve… pero el camino que atravesaba los puentes por otro lado no… era bastanate extraño… pero daba a entender que alguien se hacia cargo de mantener en orden las cosas… ¿pero quien precisamente?... el tiempo de pensar no duro mucho ya que al darme la vuelta; pude ver una especie de monasterio en mitad de las montañas… y para mi suerte, el camino por este sendero llevaba al mismo monasterio… je… aunque es posible que las otras puertas lleven al mismo lugar… o mejor dicho; lleven a diferentes caminos que dan al mismo lugar.
Muy bien Labramon, pongamos manos a la obra y comencemos a caminar… volar no parece una opción con un clima gélido… y correr tampoco me parece algo que debamos hacer aun… además, no estamos tan lejos… quizás unos 400 o 600 metros -dicho eso, comencé a caminar tranquilamente con Labramon a mi lado, mientras que con unos binoculares observaba atentamente el lugar- ¿entonces allí se oculta la data de este Royal Knight?... bueno, esta será una aventura más interesante de lo que me imaginaba; ¿no crees Labramon?
En efecto… pero me pregunto qué tipo de Royal Knight será este… no sabemos casi nada de él… quizás debimos haber leído las escrituras en el templo… podríamos habernos informado mejor –en eso le doy la razón a Labramon pero bueno… a veces es más divertido avanzar sin muchos datos- ¿estamos haciendo lo correcto al avanzar de este modo sin tener información relevante?
No tengo idea Labramon pero bueno… ya llegamos hasta aquí, ahora tenemos que seguir… además, si llegamos a toparnos con Sigrun, quizás ella nos comparta algo de la información que tenga… al menos para sobrevivir a este lugar… lo único que escuche de aquí y que realmente me intereso; fue que todo el que entra jamás sale –realmente esto será muy interesante-
Desde el punto de vista de Labramon
¿Todo el que entra jamás sale?... eso no me deja muy tranquilo pero bueno… Scott y yo hemos sobrevivido a cosas peores supongo… como el ejercido del desierto la primera vez que digievolucione a Anubismon… o la vez en que se llevaron la información del Jinrou Mode y tuvimos que pelear contra VictoryGreymon y sus subordinados… sin mencionar la vez en que nos enfrentamos a Gulfmon y a sus demonios. Si… no hay nada que nos detenga… además, tenemos muchas formas de atacar… si no es con Cerberusmon y el Inferno Gate… será con Jinrou y los pocos y casi nulos datos que existen del mismo… y si no es así; será con Ammit de Anubismon, sin mencionar el armamento de BlackMetalGarurumon… si… estamos listos para lo que sea… no importa que digimon venga; nosotros podremos contra él y saldremos adelante. Pero aun así… mi única preocupación es Sigrun, Ulforce y Dracomon… ahora que se que ellos también vinieron… es posible que estamos en problemas si siguen molestos por el tema del coleccionista… tsk… espero que entiendan que tampoco nos gusto hacer ese trabajo… ¿secuestrar a una gran amiga como Sigrun?... eso es algo que no podría hacer por mi cuenta.
- Off: imagen de los puentes:
- Puente colgante
puente de piedra (aproximadamente mas grande en el post y mejor cuidado)
- Tamer & Digimon
- Prueba de Rol :ADigi Puntos :707Cuentas :Ficha :Relaciones :Cronologia :NPCs :Nivel On Rol :DNA Evolution (Super Ultimate)Nivel On Rol de los Digi Aliados :Nova: Mega
BR: MegaIcono :Rango y Unidad :Scott Shadowest Musahrahjy
Rango: Hades Knight
División: Hades Titans
Unidad/Sub-division: Titans
Labramon
Rango: Hades Knight
División: Hades Titans
Unidad/Sub-division: TitansRango y Unidad Digi Aliado :Nova (BlackWarGreymon)
Rango: Hades Knight
División: Hades Titans
Unidad/Sub-division: Titans
BR (Renamon)
Rango: Soldado
División: D-Brigade
Unidad/Sub-division: Shadow LizardInventario :
Scott Desaster
Re: El treceavo perdido [libre]
Luna escaló la última peña, jadeando del esfuerzo. Normalmente, habría utilizado la etapa adulta de Leonardo para que la llevase, sin embargo, tras haber renacido sólo había logrado evolucionar una vez, y había sido para salvarlas de unas kimeras. Luna recordó que tuvo pesadillas durante muchas noches por eso Tampoco habían utilizado el transporte de los US porque querían ir medianamente de incógnito: el descubrimiento del monasterio draco había atraído a muchos, no sólo por sus tesoros, sino porque podía haber rastro del último de los RK y de su data. Entre esos había desde simples cazadores de tesoros hasta gente peor intencionada. Travis les había dicho que había una alta posibilidad de que miembros del CE acudieran allí para investigar, e incluso hacerse con el orbe que contenía el alma tanto del RK como del enemigo al que eliminó a cambio de su propia vida, así que alertarles de su llegada sería contraproducente. Estaban seguros de los RK también estarían allí para evitar que los agentes de CE se hicieran con tal poder. “En teoría son ellos quienes deben velar por la seguridad de su propio hermano, pero no podemos permitir que ese poder caiga en malas manos, así que si hay algo que podáis hacer, colaborad. Dejando eso de lado sin duda, es una buena oportunidad para intentar detener a miembros importantes del CE. Lo ocurrido en Ciudad Central demuestra que están en sus mejores tiempos y preparados para el ataque, así que detener a algún alto cargo sería un golpe para que no se sintieran tan seguros” les había dicho Travis. Leonardo protestó mucho al respecto: de esa manera lo único que iban a hacer era ayudar indirectamente a los RK haciéndoles el trabajo sucio. Pero por una razón u otra, Travis alegó que órdenes eran órdenes y que Leonardo aún era un soldado que tenía que obedecer y que estando como estaba, es decir, sin capacidad de digievolucionar tras haber renacido, no era quien debía quejarse porque el peso de la misión iba a recaer en Floramon, que se supondría que en caso de peligro podría llegar a su etapa perfecta. Leonardo se marchó del despacho con un portazo que casi arranca la puerta; por un lado, había tenido un desencuentro muy desafotunado con los RK hacía años, y además, su rival amoroso era uno de ellos. Pensar en hacerles un favor le encogía el estómago; sólo el hecho de pensar que si había algún enemigo Flora sería quien combatiría podía hacer que su estómago se encogiera con más fuerzas. Sin embargo a pesar de todo eso, el objetivo principal de ir hasta allí era rescatar a miembros de los US que se habían aventurado en el lugar y que parecían haberse perdido. Muchos U.S que habían acudido no los había enviado directamente la Unión, sino que habían ido por su cuenta, ya que los efectos del ataque de kimeras en ciudad central les hizo mella; todos estaban conmocionados, y la organización del clan se tambaleaba, así que todo era muy confuso.
-¿Hemos...hemos llegado?-preguntó Luna, jadeando y arqueando una ceja., mientras se sentaba en una roca afilada con cuidado. No podría soportar un segundo más de pie Llevaban cerca de un día de viaje desde el trailmon más cercano, y habían tomado un tiempo milimetrado de descanso. Leonardo ayudaba a Floramon a subir por la mis,a peña, ya que debido a la fisionomía de las piernas de Floramon le resultaba más difícil sujetarse. Aún así, a Floramon le pareció un viaje completamente disfrutable lo cual era lógico teniendo en cuenta que la digimon pasaba mucho tiempo en el apartamento de Luna. La digimon miró hacia delante, sintiendo cómo el viento movía los pétalos de su cuello, y pudo vislumbrar a lo lejos el templo., que se fusionaba con la montaña, como si la propia naturaleza lo hubiera esculpido. Desde allí se podían apreciar la presencia de mil y un detalles, aunque la lejanía no dejaba distinguirlos. Era un lugar hermoso que arrancó tanto a los tres un largo suspiro... Luna había estudiado algo de arte, y aquel le monasterio parecía tan majestuoso como cualquiera de los que había en el mundo humano. Leonardo, como buen filántropo se interesaba por el arte y sabía que aquello era un milagro arrquitectónico fruto de una estudiada y milimetrada disposición de elmentos... Floramon, por su parte, aunque no entendía de arte, no pudo hacer otra cosa que maravillarse ante tal edificación que parecía sacada de una ilustración de libro de fantasía.
-Parece que al fin arrivamos a nuestro destino. El monasterio draco, hogar y tumba del treceavo royal knight-respondió ella, con una mirada de admiración hacia el paisaje.
-Lo has hecho muy bien, Lunita-le dijo Leonardo, dándole palmaditas a la espalda. Luna no pudo evitar sonrojarse por el apodo y sonreír muy contenta por unos instantes. En esos momentos, sentía a Leonardo como un padre cariñoso-Ha sido un largo viaje. Lamento no haber podido ser de ayuda como otras veces.
-Para mí la caminata ha sido un escaparate de hermosos paisajes. Así que no te sientas culpable, Leonardo, está bien-dijo Floramon con una mirada comprensiva hacia su compañero.
-Supongo que caminar de vez en cuando no es tan malo-fue lo que dijo Luna, sacando de su mochila una botella de agua y tomando un largo trago. Le pasó la botella a Leonardo, y mientras se pasaba el dorso de las manos or los labios porque se le habían quedado húmedos, miró hacia el monasterio.
-Desde luego es una edificación muy cuidada. Su ubicación es perfecta, ya que utiliza las montañas como una muralla natural. No me extraña que fuera tan difícil acceder a él o reparar en su presencia siquiera-dijo Leonardo, al ver a Luna mirar el lugar mientras le devolvía el agua.
Tras un breve descanso, siguieron el viaje. No tardaron mucho en llegar hasta el templo. Tal y como habían apreciado antes, los detalles estaban por todas partes. Luna sintió un escalofrío al sentir que todas esas esculturas en relieves parecían mirarla acusadoramente, como si se sintieran molestos por tener tantos intrusos. Mil ojos. Mil ojos había. Luna empezó a repetir una y otra vez esto en su cabeza, y sintió frío repentinamente.
-¿Qué son todas estas esculturas que cubren todo el templo?-preguntó Floramon, que señalaba el marco de lo que parecía haber sido una puerta. Como fuera, ahora sólo quedaba un arco, dentro de otro, en una especie de degradación hasta unirse en un espacio para un relieve.
-¿Te refieres al dintel?-preguntó Luna, sacando de su cabeza los conceptos de arquitectura que recordaba. Se acordó de que técnicamente eso era una puerta en degradación con arquibvoltas degradadas, que daban la sensación de haber introducido un arco dentro de otro repetidas veces. Sin embargo, el esfuerzo de Luna por quitarse el pensamiento de los ojos de la cabeza fue infructuoso. La temática de aquella puerta era una gran lucha entre lo que parecían digimons que ascendían del infierno, más situado cerca del suelo y de digimon que surgían de la parte alta de los dineteles, es decir del marco de los arcos. El lugar al que Floramon señalaba tenía a dos digimon como protagonistas, enzarzados en una lucha. Uno de ellos tenía una cantidad de ojos exagerada.
-Me refería a todos los relieves, en general-respondió Floramon, acercándose al dintel y siguiendo la mirada desde abajo hacia arriba, completamente maravillada por el número de escenas y figuras esculpidas.
-Qué interesante. Al igual que ocurría con los templos románicos humanos, este templo es como un libro abierto a una historia visual, de manera que su mensaje puede llegar incluso a aquellos que no saben leer. El libro que reproducían los templos humanos era La Biblia, pero, parece ser que la historia que reproduce éste es la historia de el terceavo rk.
-¿Quién es el digimon ése de tantos ojos? Me pone nerviosa....-susurró Luna, mordiéndose el pulgar y desviando la mirada.
-No sabría decirte. Apenas sé sobre las leyendas que involucran a los RK-dijo Leonardo, cruzándose de brazos-Y no identifico al digimon. Pero debe ser ese que está encerrado en el orbe junto al RK.
Luna decidió ponerse en marcha. No le gustaba la sensación de sentirse observada por esos ojos inertes, así que les hizo un gesto para que se pusieran en marcha; si tenían que revisar cada palmo de pared, no saldrían nunca; a decir verdad a Luna le parecía un libro escrito incluso sobre las tapas. Cuando pasaron por un hall con columnas y más arcos, pudieron ver a una veintena de tamer y digimon deambulando por lo que parecía ser el patio.
-Maldita sea, sí que había curiosos-musitó Luna entre dientes-¿Es que no han oído que si entran puede que no salgan?¿En qué demonios piensa la gente? Si me dieran a elegir, me largaría ya. Y en cambio, ellos aquí por gusto.
-Sólo espero que el edificio no se estropee por todo esto-dijo Leonardo, al ver a tantos tamer y digimon. Probablemente, tocarían cada palmo de pared; y el edificio era lo suficientemente antiguo para que eso pudiera hacer graves daños y deformaciones en las esculturas.
Floramon miraba al suelo, lejos de tener una mirada de enojo. Más bien, parecía muy preocupada por aquellos que no habían vuelto aún. Pasaron unos murales llenos de esculturas, e incluso vieron columnas. Por allí había algunos tamers, que preferían investigar una zona no peligrosa, ya que entrar más adelante enfurecería a unos supuestos guardianes. Luna se preguntó si ellos no podían hacer lo mismo...¡había muchas esculturas!¿Es que no habría información relevante en ellas, información que pudieran conseguir sin jugarse la vida? Probablemente no. Pasaron a un umbral dentro de la montaña, pero decorada con tanto ahínco que no lo parecía, ya que había banco y mesas. Muchos tamers estaban sentados, consultando viejos mapas mohosos, y mirando con recelo un pequeño pasadizo. Luna sintió un escalofrío.
-Debe ser ahí-dijo Luna, con cierto temor. Leonardo y Floramon parecían muy tranquilos, más que nada preocupados por los que ya estaban dentro, pero no por la suerte que ellos fueran a correr. Luna se preguntó cómo lo hacían. Recorrieron el pasadizo, y tras quejarse en susurros por tener que entrar allí., llegaron a una sala circular con cinco puertas que tenúan símbolos. Sorprendentemente, había varias personas allí. Había tres tamers,mirando una de las puertas fijamente y con el rostro compugido por una mezcla entre miedo y alerta. Giraron la cabeza al ver a Luna, a la que reconocieron como U.S principalmente por las botas reglamentarias ya que el abrigo largo tapaba el resto de su atuendo. Tras que Leonardo se identificara como US incluyendo la división a la que pertenecían, Parecían muy aliviados por la presencia de agentes allí, a pesar de que el incidente de Ciudad Central no había jugado en su favor para la fiabilidad de la unión. Luna preguntó con tanto miedo como ellos que qué había pasado, y ellos le dijeron que acababan de ver a uno de los responsables del ataque de ciudad central, uno cuya recompensa si no aumentaba más era por el presupuesto limitado que tenían últimamente. Por la descripción que les dieron, Luna estaba bastante segura de que se trataba de Cadejo. Ni más ni menos que el líder de los CE, enemigos jurados tanto de los US como de los RK. Aunque no podía asegurar que fuera malvado como se rumoreaba. Tampoco es que fuera un ángel caído: aunque tras atacar Ciudad Central con sus quimeras la había ayudado a salvar la vida de Leonardo cuando nadie más podía, les había echado a sus kimeras encima y habían estado a punto de morir. A Luna le parecía, mas bien alguien muy caprichoso...y algo demente. Una combinación muy mala-para quienes combatían contra él- para un compañero digimon muy poderoso.
-Debimos suponer que Cadejo vendría-dijo Leonardo con tono de voz frío mirando a Luna, que se había quedado algo congelada. No le apaetecía enfrentarse a él ni a sus kimeras. De hecho quería largarse, y cuanto antes mejor. De eso tenían que encargarse los RK. Probablemente hubiera alguno allí, así que no era asunto suyo.
-Sin duda planea hacer algo con el Royal Knight perdido. Quizás con su data...-susurró Floramon con preocupación. Aunque los RK y US fueran enemigos, Floramon no deseaba que nada malo les ocurriera, entre otras cosas porque tenía un carácter pacífico y tenía amigos de ese clan.
-Si cae en malas manos, será terrible. Pero si cae en especial en manos del CE será difícil recuperarla y a saber qué podrían hacer con ella-Leonardo miró a Luna tras decir esto y asintió. Luna dejó caer los hombros al oír aquello: parecía que les tocaría a ellos impedirlo.
-Flora, ¿estás segura de que podemos encargarnos?-Luna preguntó esto a su digimon, y Leonardo también la miró a los ojos para saber la respuestas, a lo que el digimon añadió que estaban a tiempo de llamar refuerzos si no podían hacerlo solos.
-Los...los refuerzos tardarían demasiado-respondió evasivamente Floramon-Debemos hacerlo nosotros mismos. Es nuestra misión, igual que salvar a esa gente que se ha perdido.
-Sabes porqué te preguntamos a ti, ¿cierto?-le dijo Leonardo con seriedad. Si había alguna lucha, ella tendría que librarla.
-Porque tenéis miedo de que no pueda soportar el peso de esta misión-Floramon asintió, y a pesar de lo que indicaban sus palabras, lo hizo con bastante resolución-Yo lo haré. Me enfrentaré a lo que sea necesario. Pero, ¿me permitís hacer una aclaración? Creo que saber que Cadejo está aquí es motivo suficiente para que vayamos en su busca para intentar detenerle, pero también es muy importante que ayudemos a esos que se han perdido...
-Si queremos hacerlo, habría que dividirse-dijo Luna nerviosamente.
-Yo puedo encargarme de buscar a los civiles-dijo Leonardo, para evitar alargar la conversación-Debemos darnos prisa. No hagáis nada peligroso, nosotros nos encargaremos de ir tras él. También trataremos de traer sanos y salvos a los que entraron-dirigió su mirada hacia a los jóvenes que por el gesto de alivio que pusieron parecían estar agradecidos de poder meditar si querían competir contra Cadejo. Les indicaron la puerta por la que el peligroso criminal se había ido. Luna, por su parte, tenía gesto nervioso: no quería entrar ahí dentro.
Dicho esto, Leonardo comenzó a caminar hacia una de las puertas.
-Ten mucho cuidado, Leonardo-dijo Floramon, antes de apoyar sus estambres en la puerta para abrirla. Leonardo le dirigió una mirada insegura a Flora que claramente le estaba diciendo que quien debía tener cuidado era ella. Hasta el momento la mecánica siempre había sido al revés; él era quien se encargaba de pelear. La idea de dejarle todo el peso de la lucha a Floramon le aterraba, porque incluso al evolucionar la veía tan frágil... si esas brutales kimeras la atrapaban, sólo tendrían que quebrarla como una rama. Leonardo se obligó a dejar de pensar y caminó hasta la puerta del extremo izquierdo.:
Luna, que seguía en el centro de la habitación, se acercó hasta la puerta que le habían indicado y a Floramon, que le sonrió tratando de transmitirle confianza. Aún así cuando llegó hasta la puerta, sus manos temblaban; estaba convencida de que tendrían que pelear contra un digimon descomunal. Justo en el momento en el que aquellos U.S comentaban que aquellos soldados del North Shield Blue eran muy valientes, Luna se acordó de las kimeras y sintió tal punzada de temor que estuvo a punto de dejar de caminar hasta la puerta, pero se obligó a seguir adelante. Desde ese momento, su rechazo hacia las peleas y su miedo hacia los digimon había crecido. Ahora no sabía cómo recuperar de nuevo esa valentía que la llevó a unirse a los US. Y por otro lado, estaba todo lo ocurrido con su padre. Estaba hecha un lío de emociones; miedo, tristeza, angustia, estrés...
-Hagamoslo juntas-dijo Floramon con tranquilidad, mientras comenzaba a abrir la puerta y entrar por ella. Luna emitió un grito al oír un estruendo. Fue como un acto reflejo, ya que no había indicios de un peligro real. Ambas perdieron el equilibrio y una sensación de inestabilidad invadió sus estómagos. Luna se mareó. "¿Eh...?" pensó la tamer, cayendo hacia delante. Puso las manos para evitar darse en la cara, y sintió que tanto sus manos como sus rodillas estaban sobre una superficie dura, una baldosa. Floramon se agachó junto a Luna, poniéndole las gafas bien porque se habían ladeado del viaje, al igual que su pelo, que estaba muy alborotado.
-¿Dónde estamos?-preguntó Luna, aún a cuatro patas encima del suelo-Ugh, que mareo. Lo siento, tengo que...tengo que quedarme quieta un momento...si esta es la casa de ese RK perdido...no creo que dejar un "regalito" aquí vaya a hacer que nos reciban con los brazos abiertos.
-Parece ser que hemos atravesado un portal. Recuerdo haber tenido una sensación similar cuando atravesé uno, la primera vez que retorné al digimundo-respondió Floramon, pasándole la mano por la espalda a su tamer. Solía marearse en viajes en bus o coche, así que aquello había sido demasiado y necesitaba un poco de aliento. Floramon aprovechó los instantes que Luna necesitaba para ponerse en pie y dejar que el mundo diera vueltas para ver el lugar. Al notar el aire sonrió; los rayos de sol lejanos, entre la montaña, le decían que estaban al aire libre. Miró a su alrededor y lo primero que captaron sus ojos fue el hermosísimo jardín; aquellas flores de muchos colores, que levantaron la curiosidad de Floramon. La digimon se acercó a las flores para admirar sus belleza y Luna susurró nerviosamente:
-¡Flora!¡Ten cuidado! Estoy segura de que este sitio podría ser no tan bonito como parece...
-Es justo lo que Leonardo habría dicho-dijo Flora con una sonrisa-Pero llevas razón, debemos estar alerta aunque... no imagino que algo malo en un sitio tan hermoso pudiera ocurrir-Luna añadió con tono cansado que a ella sí que se le ocurrían; de hecho, ya estaba enumerando mentalmente todo lo malo que podía pasar.
Luna se acercó a Floramon, algo más recuperada, y se agachó hacia las flores. Era cierto que eran muy hermosas, y que era casi un pequeño milagro que crecieran en un clima montañoso como ese.
Leonardo, por su parte, no había gritado cuando sintió aquellasensación de ser arrastrado hasta otro lugar. Abrió los ojos lentamente para evitar marearse y se encontró en una sala de mármol, llena de libros. Había arcos y diversos pupitres completamente limpios y relucientes; inclusive las plumas para escribir estaban intactas. Aquel lugar no estaba abandonado.. Leonardo reconoció esa estancia como el scriptorium del monasterio. Ojeó los libros, retirándolos con cuidado para evitar activar algún mecanismo si retiraba uno falso, pero sólo contenían ilustraciones de lo que ya se representaba en las paredes exteriores. Habría pasado mucho tiempo investigando, pero debía rescatar a quien se encontrase allí atrapado, así que se levantó y miró hacia la escalinata. Había dos escaleras, una a la izquierda y otra a la derecha, que parecían ascender. Comenzó a caminar con sumo cuidado y antes de pisar los escalones de la escalera derecha, asomó un poco la cabeza y prestóa tención para ver si podía oír algo además del viento golpeando los ventanales que servían de separación entre ambas escaleras.
-¿Hemos...hemos llegado?-preguntó Luna, jadeando y arqueando una ceja., mientras se sentaba en una roca afilada con cuidado. No podría soportar un segundo más de pie Llevaban cerca de un día de viaje desde el trailmon más cercano, y habían tomado un tiempo milimetrado de descanso. Leonardo ayudaba a Floramon a subir por la mis,a peña, ya que debido a la fisionomía de las piernas de Floramon le resultaba más difícil sujetarse. Aún así, a Floramon le pareció un viaje completamente disfrutable lo cual era lógico teniendo en cuenta que la digimon pasaba mucho tiempo en el apartamento de Luna. La digimon miró hacia delante, sintiendo cómo el viento movía los pétalos de su cuello, y pudo vislumbrar a lo lejos el templo., que se fusionaba con la montaña, como si la propia naturaleza lo hubiera esculpido. Desde allí se podían apreciar la presencia de mil y un detalles, aunque la lejanía no dejaba distinguirlos. Era un lugar hermoso que arrancó tanto a los tres un largo suspiro... Luna había estudiado algo de arte, y aquel le monasterio parecía tan majestuoso como cualquiera de los que había en el mundo humano. Leonardo, como buen filántropo se interesaba por el arte y sabía que aquello era un milagro arrquitectónico fruto de una estudiada y milimetrada disposición de elmentos... Floramon, por su parte, aunque no entendía de arte, no pudo hacer otra cosa que maravillarse ante tal edificación que parecía sacada de una ilustración de libro de fantasía.
-Parece que al fin arrivamos a nuestro destino. El monasterio draco, hogar y tumba del treceavo royal knight-respondió ella, con una mirada de admiración hacia el paisaje.
-Lo has hecho muy bien, Lunita-le dijo Leonardo, dándole palmaditas a la espalda. Luna no pudo evitar sonrojarse por el apodo y sonreír muy contenta por unos instantes. En esos momentos, sentía a Leonardo como un padre cariñoso-Ha sido un largo viaje. Lamento no haber podido ser de ayuda como otras veces.
-Para mí la caminata ha sido un escaparate de hermosos paisajes. Así que no te sientas culpable, Leonardo, está bien-dijo Floramon con una mirada comprensiva hacia su compañero.
-Supongo que caminar de vez en cuando no es tan malo-fue lo que dijo Luna, sacando de su mochila una botella de agua y tomando un largo trago. Le pasó la botella a Leonardo, y mientras se pasaba el dorso de las manos or los labios porque se le habían quedado húmedos, miró hacia el monasterio.
-Desde luego es una edificación muy cuidada. Su ubicación es perfecta, ya que utiliza las montañas como una muralla natural. No me extraña que fuera tan difícil acceder a él o reparar en su presencia siquiera-dijo Leonardo, al ver a Luna mirar el lugar mientras le devolvía el agua.
Tras un breve descanso, siguieron el viaje. No tardaron mucho en llegar hasta el templo. Tal y como habían apreciado antes, los detalles estaban por todas partes. Luna sintió un escalofrío al sentir que todas esas esculturas en relieves parecían mirarla acusadoramente, como si se sintieran molestos por tener tantos intrusos. Mil ojos. Mil ojos había. Luna empezó a repetir una y otra vez esto en su cabeza, y sintió frío repentinamente.
-¿Qué son todas estas esculturas que cubren todo el templo?-preguntó Floramon, que señalaba el marco de lo que parecía haber sido una puerta. Como fuera, ahora sólo quedaba un arco, dentro de otro, en una especie de degradación hasta unirse en un espacio para un relieve.
-¿Te refieres al dintel?-preguntó Luna, sacando de su cabeza los conceptos de arquitectura que recordaba. Se acordó de que técnicamente eso era una puerta en degradación con arquibvoltas degradadas, que daban la sensación de haber introducido un arco dentro de otro repetidas veces. Sin embargo, el esfuerzo de Luna por quitarse el pensamiento de los ojos de la cabeza fue infructuoso. La temática de aquella puerta era una gran lucha entre lo que parecían digimons que ascendían del infierno, más situado cerca del suelo y de digimon que surgían de la parte alta de los dineteles, es decir del marco de los arcos. El lugar al que Floramon señalaba tenía a dos digimon como protagonistas, enzarzados en una lucha. Uno de ellos tenía una cantidad de ojos exagerada.
-Me refería a todos los relieves, en general-respondió Floramon, acercándose al dintel y siguiendo la mirada desde abajo hacia arriba, completamente maravillada por el número de escenas y figuras esculpidas.
-Qué interesante. Al igual que ocurría con los templos románicos humanos, este templo es como un libro abierto a una historia visual, de manera que su mensaje puede llegar incluso a aquellos que no saben leer. El libro que reproducían los templos humanos era La Biblia, pero, parece ser que la historia que reproduce éste es la historia de el terceavo rk.
-¿Quién es el digimon ése de tantos ojos? Me pone nerviosa....-susurró Luna, mordiéndose el pulgar y desviando la mirada.
-No sabría decirte. Apenas sé sobre las leyendas que involucran a los RK-dijo Leonardo, cruzándose de brazos-Y no identifico al digimon. Pero debe ser ese que está encerrado en el orbe junto al RK.
Luna decidió ponerse en marcha. No le gustaba la sensación de sentirse observada por esos ojos inertes, así que les hizo un gesto para que se pusieran en marcha; si tenían que revisar cada palmo de pared, no saldrían nunca; a decir verdad a Luna le parecía un libro escrito incluso sobre las tapas. Cuando pasaron por un hall con columnas y más arcos, pudieron ver a una veintena de tamer y digimon deambulando por lo que parecía ser el patio.
-Maldita sea, sí que había curiosos-musitó Luna entre dientes-¿Es que no han oído que si entran puede que no salgan?¿En qué demonios piensa la gente? Si me dieran a elegir, me largaría ya. Y en cambio, ellos aquí por gusto.
-Sólo espero que el edificio no se estropee por todo esto-dijo Leonardo, al ver a tantos tamer y digimon. Probablemente, tocarían cada palmo de pared; y el edificio era lo suficientemente antiguo para que eso pudiera hacer graves daños y deformaciones en las esculturas.
Floramon miraba al suelo, lejos de tener una mirada de enojo. Más bien, parecía muy preocupada por aquellos que no habían vuelto aún. Pasaron unos murales llenos de esculturas, e incluso vieron columnas. Por allí había algunos tamers, que preferían investigar una zona no peligrosa, ya que entrar más adelante enfurecería a unos supuestos guardianes. Luna se preguntó si ellos no podían hacer lo mismo...¡había muchas esculturas!¿Es que no habría información relevante en ellas, información que pudieran conseguir sin jugarse la vida? Probablemente no. Pasaron a un umbral dentro de la montaña, pero decorada con tanto ahínco que no lo parecía, ya que había banco y mesas. Muchos tamers estaban sentados, consultando viejos mapas mohosos, y mirando con recelo un pequeño pasadizo. Luna sintió un escalofrío.
-Debe ser ahí-dijo Luna, con cierto temor. Leonardo y Floramon parecían muy tranquilos, más que nada preocupados por los que ya estaban dentro, pero no por la suerte que ellos fueran a correr. Luna se preguntó cómo lo hacían. Recorrieron el pasadizo, y tras quejarse en susurros por tener que entrar allí., llegaron a una sala circular con cinco puertas que tenúan símbolos. Sorprendentemente, había varias personas allí. Había tres tamers,mirando una de las puertas fijamente y con el rostro compugido por una mezcla entre miedo y alerta. Giraron la cabeza al ver a Luna, a la que reconocieron como U.S principalmente por las botas reglamentarias ya que el abrigo largo tapaba el resto de su atuendo. Tras que Leonardo se identificara como US incluyendo la división a la que pertenecían, Parecían muy aliviados por la presencia de agentes allí, a pesar de que el incidente de Ciudad Central no había jugado en su favor para la fiabilidad de la unión. Luna preguntó con tanto miedo como ellos que qué había pasado, y ellos le dijeron que acababan de ver a uno de los responsables del ataque de ciudad central, uno cuya recompensa si no aumentaba más era por el presupuesto limitado que tenían últimamente. Por la descripción que les dieron, Luna estaba bastante segura de que se trataba de Cadejo. Ni más ni menos que el líder de los CE, enemigos jurados tanto de los US como de los RK. Aunque no podía asegurar que fuera malvado como se rumoreaba. Tampoco es que fuera un ángel caído: aunque tras atacar Ciudad Central con sus quimeras la había ayudado a salvar la vida de Leonardo cuando nadie más podía, les había echado a sus kimeras encima y habían estado a punto de morir. A Luna le parecía, mas bien alguien muy caprichoso...y algo demente. Una combinación muy mala-para quienes combatían contra él- para un compañero digimon muy poderoso.
-Debimos suponer que Cadejo vendría-dijo Leonardo con tono de voz frío mirando a Luna, que se había quedado algo congelada. No le apaetecía enfrentarse a él ni a sus kimeras. De hecho quería largarse, y cuanto antes mejor. De eso tenían que encargarse los RK. Probablemente hubiera alguno allí, así que no era asunto suyo.
-Sin duda planea hacer algo con el Royal Knight perdido. Quizás con su data...-susurró Floramon con preocupación. Aunque los RK y US fueran enemigos, Floramon no deseaba que nada malo les ocurriera, entre otras cosas porque tenía un carácter pacífico y tenía amigos de ese clan.
-Si cae en malas manos, será terrible. Pero si cae en especial en manos del CE será difícil recuperarla y a saber qué podrían hacer con ella-Leonardo miró a Luna tras decir esto y asintió. Luna dejó caer los hombros al oír aquello: parecía que les tocaría a ellos impedirlo.
-Flora, ¿estás segura de que podemos encargarnos?-Luna preguntó esto a su digimon, y Leonardo también la miró a los ojos para saber la respuestas, a lo que el digimon añadió que estaban a tiempo de llamar refuerzos si no podían hacerlo solos.
-Los...los refuerzos tardarían demasiado-respondió evasivamente Floramon-Debemos hacerlo nosotros mismos. Es nuestra misión, igual que salvar a esa gente que se ha perdido.
-Sabes porqué te preguntamos a ti, ¿cierto?-le dijo Leonardo con seriedad. Si había alguna lucha, ella tendría que librarla.
-Porque tenéis miedo de que no pueda soportar el peso de esta misión-Floramon asintió, y a pesar de lo que indicaban sus palabras, lo hizo con bastante resolución-Yo lo haré. Me enfrentaré a lo que sea necesario. Pero, ¿me permitís hacer una aclaración? Creo que saber que Cadejo está aquí es motivo suficiente para que vayamos en su busca para intentar detenerle, pero también es muy importante que ayudemos a esos que se han perdido...
-Si queremos hacerlo, habría que dividirse-dijo Luna nerviosamente.
-Yo puedo encargarme de buscar a los civiles-dijo Leonardo, para evitar alargar la conversación-Debemos darnos prisa. No hagáis nada peligroso, nosotros nos encargaremos de ir tras él. También trataremos de traer sanos y salvos a los que entraron-dirigió su mirada hacia a los jóvenes que por el gesto de alivio que pusieron parecían estar agradecidos de poder meditar si querían competir contra Cadejo. Les indicaron la puerta por la que el peligroso criminal se había ido. Luna, por su parte, tenía gesto nervioso: no quería entrar ahí dentro.
Dicho esto, Leonardo comenzó a caminar hacia una de las puertas.
-Ten mucho cuidado, Leonardo-dijo Floramon, antes de apoyar sus estambres en la puerta para abrirla. Leonardo le dirigió una mirada insegura a Flora que claramente le estaba diciendo que quien debía tener cuidado era ella. Hasta el momento la mecánica siempre había sido al revés; él era quien se encargaba de pelear. La idea de dejarle todo el peso de la lucha a Floramon le aterraba, porque incluso al evolucionar la veía tan frágil... si esas brutales kimeras la atrapaban, sólo tendrían que quebrarla como una rama. Leonardo se obligó a dejar de pensar y caminó hasta la puerta del extremo izquierdo.:
Luna, que seguía en el centro de la habitación, se acercó hasta la puerta que le habían indicado y a Floramon, que le sonrió tratando de transmitirle confianza. Aún así cuando llegó hasta la puerta, sus manos temblaban; estaba convencida de que tendrían que pelear contra un digimon descomunal. Justo en el momento en el que aquellos U.S comentaban que aquellos soldados del North Shield Blue eran muy valientes, Luna se acordó de las kimeras y sintió tal punzada de temor que estuvo a punto de dejar de caminar hasta la puerta, pero se obligó a seguir adelante. Desde ese momento, su rechazo hacia las peleas y su miedo hacia los digimon había crecido. Ahora no sabía cómo recuperar de nuevo esa valentía que la llevó a unirse a los US. Y por otro lado, estaba todo lo ocurrido con su padre. Estaba hecha un lío de emociones; miedo, tristeza, angustia, estrés...
-Hagamoslo juntas-dijo Floramon con tranquilidad, mientras comenzaba a abrir la puerta y entrar por ella. Luna emitió un grito al oír un estruendo. Fue como un acto reflejo, ya que no había indicios de un peligro real. Ambas perdieron el equilibrio y una sensación de inestabilidad invadió sus estómagos. Luna se mareó. "¿Eh...?" pensó la tamer, cayendo hacia delante. Puso las manos para evitar darse en la cara, y sintió que tanto sus manos como sus rodillas estaban sobre una superficie dura, una baldosa. Floramon se agachó junto a Luna, poniéndole las gafas bien porque se habían ladeado del viaje, al igual que su pelo, que estaba muy alborotado.
-¿Dónde estamos?-preguntó Luna, aún a cuatro patas encima del suelo-Ugh, que mareo. Lo siento, tengo que...tengo que quedarme quieta un momento...si esta es la casa de ese RK perdido...no creo que dejar un "regalito" aquí vaya a hacer que nos reciban con los brazos abiertos.
-Parece ser que hemos atravesado un portal. Recuerdo haber tenido una sensación similar cuando atravesé uno, la primera vez que retorné al digimundo-respondió Floramon, pasándole la mano por la espalda a su tamer. Solía marearse en viajes en bus o coche, así que aquello había sido demasiado y necesitaba un poco de aliento. Floramon aprovechó los instantes que Luna necesitaba para ponerse en pie y dejar que el mundo diera vueltas para ver el lugar. Al notar el aire sonrió; los rayos de sol lejanos, entre la montaña, le decían que estaban al aire libre. Miró a su alrededor y lo primero que captaron sus ojos fue el hermosísimo jardín; aquellas flores de muchos colores, que levantaron la curiosidad de Floramon. La digimon se acercó a las flores para admirar sus belleza y Luna susurró nerviosamente:
-¡Flora!¡Ten cuidado! Estoy segura de que este sitio podría ser no tan bonito como parece...
-Es justo lo que Leonardo habría dicho-dijo Flora con una sonrisa-Pero llevas razón, debemos estar alerta aunque... no imagino que algo malo en un sitio tan hermoso pudiera ocurrir-Luna añadió con tono cansado que a ella sí que se le ocurrían; de hecho, ya estaba enumerando mentalmente todo lo malo que podía pasar.
Luna se acercó a Floramon, algo más recuperada, y se agachó hacia las flores. Era cierto que eran muy hermosas, y que era casi un pequeño milagro que crecieran en un clima montañoso como ese.
Leonardo, por su parte, no había gritado cuando sintió aquellasensación de ser arrastrado hasta otro lugar. Abrió los ojos lentamente para evitar marearse y se encontró en una sala de mármol, llena de libros. Había arcos y diversos pupitres completamente limpios y relucientes; inclusive las plumas para escribir estaban intactas. Aquel lugar no estaba abandonado.. Leonardo reconoció esa estancia como el scriptorium del monasterio. Ojeó los libros, retirándolos con cuidado para evitar activar algún mecanismo si retiraba uno falso, pero sólo contenían ilustraciones de lo que ya se representaba en las paredes exteriores. Habría pasado mucho tiempo investigando, pero debía rescatar a quien se encontrase allí atrapado, así que se levantó y miró hacia la escalinata. Había dos escaleras, una a la izquierda y otra a la derecha, que parecían ascender. Comenzó a caminar con sumo cuidado y antes de pisar los escalones de la escalera derecha, asomó un poco la cabeza y prestóa tención para ver si podía oír algo además del viento golpeando los ventanales que servían de separación entre ambas escaleras.
- Scriptorium:
- Tamer & Digimon
- Faltas :1Prueba de Rol :ADigi Puntos :402Ficha :Nivel On Rol :RookieNivel On Rol de los Digi Aliados :Leonardo
Champion
Icono :Rango y Unidad :Luna Naitoenjeru
Rango: Soldado
División: Four Holy Beast
Unidad/Sub-division: North Shield Tortule
Flora
Rango: Soldado
División: Four Holy Beast
Unidad/Sub-division: North Shield Tortule
Rango y Unidad Digi Aliado :Leonardo
Rango: Soldado
División: Four Holy Beast
Unidad/Sub-division: North Shield TortuleInventario :
Luna Kobayashi
Re: El treceavo perdido [libre]
Sigrun
Una vez que vimos entrar a Cadejo y Commandramon, le seguimos por el pasillo y nos ocultamos tras unas columnas en cuanto llegamos a la última de las salas. Allí había varias puertas, aquella debía de ser la primera prueba. ¿Cuál sería la verdadera? Cerca de cadejo, pero alejados todo lo que les permitían las paredes, había un pequeño grupo de tamers y sus compañeros. Parecían asustados y no era algo de extrañar, tras el ataque de Cadejo a Ciudad Central casi todo el mundo conocía el aspecto de cadejo y sabía reconocerlo. Eso sin contar que actualizaron las fotos de los carteles de “se busca”.
Aún no podía creer que yo fuese tan estúpida como para caer en sus engaños. Lancelo… debí haberme dado cuenta que lo de su “compañero ausente” era muy sospechoso. Por no hablar del digivice falso. ¿Cómo pude ser tan idiota?
Dejé de pensar en eso porque no conseguiría nada. Observé como Cadejo entró por una de las puertas, pero cuando iba a salir para ir tras él, escuché unos pasos y volví a ocultarme tras las columnas. Ulforce y Dracomon iban conmigo pero guardaron silencio. Entonces vimos entrar a una tamer seguida de sus dos compañeros. ¿Luna? ¿Ella también había venido? ¿Acaso los US también están interesados en la data? A decir verdad, después del ataque de las quimeras es normal que quieran asegurarse que el Chaos Empire no obtiene más poder. Aunque tampoco puedo permitir que ella se lleve la data, nos pertenece a los Royal Knights por derecho. Igualmente, tampoco es que Luna sea una amenaza para mí. Flora solo llega al nivel ultimate y no creo que Gaomon supere ese nivel. Del que debería preocuparme es del Chaos Empire, sé perfectamente que Cadejo puede llegar al SuperUltimate. Igual no creo que sea tan idiota como para usar un poder como el de Ultimate Chaosmon a la ligera, aún así etapas como Chaosmon o incluso Darkdramon también son fuerzas a tener en cuenta.
En cuanto vi a Luna pasar por la puerta elegida me extrañé. ¿Piensa seguir a Cadejo? ¿No se da cuenta que la supera en poder? ¿Qué Flora no podrá hacer nada contra él? Ulforce también parecía preocupado, el haber visto a Flora debió de preocuparle.
- Vamos- les dije a Ulforce y Dracomon.
Los tres llegamos frente a la puerta que habían elegido Cadejo y Luna. Yo también iría por allí, tenía que alcanzar a Cadejo antes de que se hiciese con la data. Miré hacia los tamers y digimons que había allí. ¿Me habrían reconocido? Siendo la mano derecha de Ralian, era una tamer bastante conocida y mis compañeros y mi aspecto físico también pueden ayudar a que me reconozcan. No hay muchas tamers con el pelo rubio y tan largo como lo tengo yo. ¿Debería cortármelo? Ya pensaré en eso en otra ocasión.
- Si yo estuviera en vuestro lugar, me marcharía de aquí- les dije a los tamers- si pensáis en avanzar seguramente no saldréis con vida.
Tras esto, les hice una señal a Ulforce y Dracomon para que me siguieran y los tres atravesamos la puerta. Al instante tuve una sensación familiar. Cuando quise darme cuenta, estábamos en un gran jardín lleno de flores. Miré hacia arriba y vi el cielo ¿Habíamos salido?
- Ha sido como entrar en la base- comentó Dracomon- ¿acaso hemos atravesado un portal?
- Eso parece- dije mirando a mi alrededor.
Al otro lado de ese gran jardín había un monasterio. Ese debía ser el verdadero, lo de antes debió de ser sólo una “puerta” por así decirlo. El autentico estaba allí.
- ¿Qué haremos ahora que Luna y Flora están aquí?- preguntó Ulforce- ¿Seguimos con el plan?
- Si, son nuestras amigas pero tampoco podemos permitir que se lleven la data. De todos modos ellas no suponen una amenaza- volví a mirar hacia el monasterio- Sigamos.
Avanzamos por el jardín en dirección al templo.
- Tamer & Digimon
- Prueba de Rol :ADigi Puntos :642Cuentas :Ficha :Relaciones :Cronologia :NPCs :Nivel On Rol :Burst Mode/Future ModeNivel On Rol de los Digi Aliados :Draco: Ultimate [BlackMetalGreymon]
Kara: Rookie [Dorumon]Icono :Rango y Unidad :Sigrun Vinter
Rango: Hand of the King y Holy Knight
Unidad: Todo el clan (Blue Thunder Dragons)
Ulforce
Rango: Hand of the King y Holy Knight
Unidad: Todo el clan (Blue Thunder Dragons)Rango y Unidad Digi Aliado :Draco
Rango: Knight
Unidad: Dragons DestroyersInventario :
Sigrun Vinter
Re: El treceavo perdido [libre]
despues de haber visto un buen rato desde mi posicion pude notar como llegaban algunas personas de mayor importancia, era bien conocido en el digimundo la existencia de los Royal Knight y de su contraparte Chaos empire, más aun de sus lideres y las intenciones de cada uno
comenzaron a entrar de uno por uno, primero aquel chico cuyo nombre habia escuchado muchas veces "al fin lo veo en persona" pense sin moverme, la verdad no era la mejor primer impresion que habia visto de una persona a cargo de ese tipo de organizacion dedicada a destruir a diestra y siniestra zonas enteras por poder, pero bueno, de algo me serviria , y si estaba al mando debia ser por algo mas que coordinacion
me levante de mi lugar despues de unos minutos en los que me fije en las personas que mas sobresalian de los ahi presentes, pero solo reconocia unos pocos, espere a que se calmara el ambiente despues de que entraron a una de las multiples puertas que habia en aquel templo destruido, lo mas probable es que ese grupo de personas fueran importantes, escuche algunos nombres dichos entre los tamers que aun se preguntaban entre si entrar o no
- Bueno, creo que es tiempo - hable despreocupada para mi misma, me desempolve la falda que llevaba y cargue la mochila pequeña en mi espalda, elegi la misma puerta por la que habian entrado aquellos chicos y chicas, si era la equivocada al menos tendria algo de apoyo para salir, o eso esperaba...
me adentre en aquel corredor que parecia un abismo, a mis espaldas la puerta volvio a cerrarse y tuve que hacer uso de mi fuerza de voluntad para no regresar, di un paso mas en aquella oscuridad profunda, cerre los ojos casi en automatico debido a la sensacion de caida, era como si mi cuerpo hubiera comenzado a flotar por un leve instante
no supe cuanto habia pasado hasta abrirlos nuevamente, ahora me encontraba de pie sobre un extenso terreno lleno de flores y vegetacion variada - ¿un jardin? - no estaba del todo segura si lo que estaba viendo era algun tipo de ilusion asi que tenia que ir con sumo cuidado, aquel lugar se extendia de manera uniforme, con varios caminos de piedra adornados con el estilo que caracterizaba a este mundo, aquellos chicos no se veian cerca de mi posicion
- Quiza estamos en lugares aleatorios - volvi a hablar para mi misma, no me quedaba de otra mas que avanzar, a lo lejos se observaba una montaña majestuosa pero seria un desperdicio de tiempo querer ir hacia alla, comence a caminar a paso lento eligiendo el camino mas ancho, podia observar las flores moviendose con aquel viento ligeramente frio que habia en el lugar, si esta era la primera parte quiza tenia que encontrar un mecanismo en estas baldosas de piedra, o solo seguir hasta encontrar a algun otro tamer o digimon, eran las desventajas de entrar en ese lugar sin tener informacion confiable de las cosas con las que nos topariamos, aunque aquel viento fresco era un verdadero alivio despues de aquella caminata por una zona tan arida
paso un rato antes de darme por vencida, para mi fortuna en aquel jardin habia multiples bancas donde descansar, no lo pense para sentarme en una de ellas a recobrar algo de energia, saque una botella de agua y comence a beberla, mientras seguia girando mi vista en casi todas las direcciones pude ver una silueta a lo lejos, que se dirigia hacia otro lugar alejandose lentamente, eso hizo que me levantara rapido y comenzara a seguirla, muy apenas era visible por la distancia pero al menos tenia mas sentido que caminar sin rumbo, sin apurar el paso me mantuve siguiendo a lo que sea que fuera esa cosa, ya despues habria tiempo para descansar
comenzaron a entrar de uno por uno, primero aquel chico cuyo nombre habia escuchado muchas veces "al fin lo veo en persona" pense sin moverme, la verdad no era la mejor primer impresion que habia visto de una persona a cargo de ese tipo de organizacion dedicada a destruir a diestra y siniestra zonas enteras por poder, pero bueno, de algo me serviria , y si estaba al mando debia ser por algo mas que coordinacion
me levante de mi lugar despues de unos minutos en los que me fije en las personas que mas sobresalian de los ahi presentes, pero solo reconocia unos pocos, espere a que se calmara el ambiente despues de que entraron a una de las multiples puertas que habia en aquel templo destruido, lo mas probable es que ese grupo de personas fueran importantes, escuche algunos nombres dichos entre los tamers que aun se preguntaban entre si entrar o no
- Bueno, creo que es tiempo - hable despreocupada para mi misma, me desempolve la falda que llevaba y cargue la mochila pequeña en mi espalda, elegi la misma puerta por la que habian entrado aquellos chicos y chicas, si era la equivocada al menos tendria algo de apoyo para salir, o eso esperaba...
me adentre en aquel corredor que parecia un abismo, a mis espaldas la puerta volvio a cerrarse y tuve que hacer uso de mi fuerza de voluntad para no regresar, di un paso mas en aquella oscuridad profunda, cerre los ojos casi en automatico debido a la sensacion de caida, era como si mi cuerpo hubiera comenzado a flotar por un leve instante
no supe cuanto habia pasado hasta abrirlos nuevamente, ahora me encontraba de pie sobre un extenso terreno lleno de flores y vegetacion variada - ¿un jardin? - no estaba del todo segura si lo que estaba viendo era algun tipo de ilusion asi que tenia que ir con sumo cuidado, aquel lugar se extendia de manera uniforme, con varios caminos de piedra adornados con el estilo que caracterizaba a este mundo, aquellos chicos no se veian cerca de mi posicion
- Quiza estamos en lugares aleatorios - volvi a hablar para mi misma, no me quedaba de otra mas que avanzar, a lo lejos se observaba una montaña majestuosa pero seria un desperdicio de tiempo querer ir hacia alla, comence a caminar a paso lento eligiendo el camino mas ancho, podia observar las flores moviendose con aquel viento ligeramente frio que habia en el lugar, si esta era la primera parte quiza tenia que encontrar un mecanismo en estas baldosas de piedra, o solo seguir hasta encontrar a algun otro tamer o digimon, eran las desventajas de entrar en ese lugar sin tener informacion confiable de las cosas con las que nos topariamos, aunque aquel viento fresco era un verdadero alivio despues de aquella caminata por una zona tan arida
paso un rato antes de darme por vencida, para mi fortuna en aquel jardin habia multiples bancas donde descansar, no lo pense para sentarme en una de ellas a recobrar algo de energia, saque una botella de agua y comence a beberla, mientras seguia girando mi vista en casi todas las direcciones pude ver una silueta a lo lejos, que se dirigia hacia otro lugar alejandose lentamente, eso hizo que me levantara rapido y comenzara a seguirla, muy apenas era visible por la distancia pero al menos tenia mas sentido que caminar sin rumbo, sin apurar el paso me mantuve siguiendo a lo que sea que fuera esa cosa, ya despues habria tiempo para descansar
- Tamer
- Digi Puntos :204Nivel On Rol :Hybrid (Fusion Form) / Doble Spirit
Yuuki Kimura
Re: El treceavo perdido [libre]
Al parecer al interior del templo un largo camino era la única ruta hacia la siguiente ubicación, para vlad era como revivir el cuento de Teseo y el minotauro, siendo el Teseo y aquel templo el laberinto de creta a pesar de esto al final de aquel camino no encontró al tan renombrado monstruo en su lugar solo pudo ver un gran cuarto con unas cuantas puertas que sin duda darían paso hacia una zona del templo o quizás a una trampa pudiera ser acaso esto un tipo de prueba para dar acceso al verdadero templo, un punto donde los verdaderamente valientes o tal vez demasiado codiciosos se atreverían a pasar.
Vlad fue el ultimo en entrar por aquellas puertas asi que antes de eso pudo contemplar todo lo que sucedió hasta el momento en que cruzo aquel umbral tan misterioso. Pudo ver como un grupo de tamer tenia conversación sobre aquellas puertas a pesar de no conocer a ninguno de ellos había uno que era fácilmente reconocible y como no si su rostro había aparecido en algunos carteles del digimundo -"Entonces ese es el tal cadejo"- pensó vlad mientras observaba aquella situación, aquel chico fue el primero en entrar por una de las puertas para luego desaparecer con lo que se parecio ser un grito aquello aterro a algunos de los presentes, se podía notar en sus rostros el deseo de abandonar el lugar salir huyendo. Otros en cambio les parecio agradar la idea de descubrir que era lo que se ocultaba detrás de las puertas. Ellos los valientes no fueron mas que un grupo el cual no seria mas que un puñado personas, aunque no prestara mucha atención vlad pude notar que algunos siguieron el mismo camino que cadejo, otros decidieron elegir otra de las entradas. Mientras tanto para el resto los cuales por algún motivo decidieron no exponerse al peligro comenzaron a abandonar la habitación poco a poco hasta que solo unas tres personas quedaban ahí.
-Ha llegado el momento de que yo también entre por una de ellas- comento vlad para si mismo mientras comenzaba a avanzar hasta estar cerca de una de aquellas tan extrañas puertas, sin duda y después de meditar decidio elegir la opción mas fiable, él iba a entrar por donde la mayoría lo hizo claro eso hasta que un extraño suceso ocurrio, por unos pocos segundos algo casi tan efímero que el ojo humano apenas lo hubiera notado la imagen de una persona entrando por una puerta, quizás no podría haberlo notado si lo que hubiera visto se tratara de otra cosa, pero no, ahí estaba la imagen de su hermana escogiendo uno de los caminos, a pesar de que ello sin duda no era real vlad por un extraño impulso abandono la idea de seguir al resto y en cambio en su mente surgio del deseo de ser guiado por aquella extraña visión.
Se acerco a aquella extraña puerta y en ella de forma casi imperceptible se podía notar un pequeño tallado como indicando lo que se hallaba detrás de esto pero claro debido al incesante paso del tiempo ya solo se podían distinguir unas pequeñas muescas dejadas sin duda por algún tipo de cincel. Acercándose la abrió lentamente dando paso a lo que debía ser una inmensa oscuridad, vlad sin miedo ni dudas dio en paso al frente hasta encontrarse dentro de aquel cuarto lo que provoco que la puerta se cerrara completamente y la oscuridad lo devorara todo. En ese espacio el tiempo parecio detenerse tal vez fueron unos segundos o a lo mejor unos minutos pasaron en los que nada se podía percibir y de pronto toda la oscuridad dio paso a un sitio completamente diferente.
Vlad ya no se encontraba en el templo había sido transportado a otro lugar -tal parece que aquel lugar era la antesala para el verdadero templo- aunque eso debía ser cierto en ese momento el se encontraba en un lugar gélido, el cual se podía describir como un gran lago rodeado de arboles completamente congelados, el frio que ahí hacia era muy grande podría congelar a cualquiera pero a el simplemente le parecía una agradable brisa, miro en todas las direcciones posibles pero no pudo notar ningún alma entonces se dio cuenta que las puertas deban paso a diferentes lugares. Comenzó a caminar por aquel lugar tan solitario con su digivice de única compañía cuando al cabo de unos minutos de camino pudo notar una silueta que al acercarse se trataba de un gabumon herido.
Apurando su paso se acerco al digimon herido y sin siquiera consultarle comenzó a tratar aquella herida ya cuando esta estuvo parcialmente curada le interrogo -¿Que haces aquí?, ¿ acaso has venido solo?- a pesar de haber realizado algunas cuantas mas solo estas tuvieron una respuesta.
-muchas gracias por tu ayuda- agradeció aquel digimon con una pequeña reverencia -vine aquí con mi compañero en busca de la data del royal knight pero al terminar aquí fuimos separadas y yo vague por la zona- sin duda parecía preocupado por la desaparición de su compañero ya que algunos tamer y digimon llegaban a formar un lazo tan grande que eran casi inseparables.
-No te preocupes de seguro el estará bien- a pesar de querer ayudarlo vlad no podía hacerlo debía seguir su camino persiguiendo la ilusión que era su hermana -Quedate en este lugar sin duda alguien vendrá por ti- sin duda dentro de los que habían entrado se encontraba una chica de los unión saver acompañada de dos digimon y parecían del tipo que ayudarían a los que se perdieran de este lugar. Se quedo con aquel gabumon unos minutos y antes de marcharse le entrego lo que vendría a ser una brazada termia asi como un poco de agua y comida para que aguantara hasta que la ayuda contraria o hasta que el volviera a ayudarlo.
Con paso lento pero seguro se alejo del lugar intentando no mirar atrás para no arrepentirse de la decisión tomada, el paisaje delante de el poco a poco comenzó a cambiar el lago congelado había quedado unos cuantos metros atrás y en su lugar la tierra y el hielo se mezclaban formando una superficie un tanto lodosa, los arboles anteriormente congelados recuperaban su tono natural, las flores aparecían en estos sin duda alguna era un sitio extraño donde el invierno y la primavera coexistían en una especie de simbiosis, lentamente el clima se volvió mas calido en el lugar se podía vislumbrar algunos jardines rodeados de bancas y un poco mas adelante un largo y estrecho camino que daba paso a lo que parecía ser el verdadero templo. Vlad contemplo aquella ruta y a la distancia nuevamente pudo ver la imagen de su hermana que le hacia señas invitándolo a seguirlo -ese debe ser el verdadero templo- dijo mientras comenzaba a moverse rumbo a la ilusión de su hermana y aquella estructura.
Vlad fue el ultimo en entrar por aquellas puertas asi que antes de eso pudo contemplar todo lo que sucedió hasta el momento en que cruzo aquel umbral tan misterioso. Pudo ver como un grupo de tamer tenia conversación sobre aquellas puertas a pesar de no conocer a ninguno de ellos había uno que era fácilmente reconocible y como no si su rostro había aparecido en algunos carteles del digimundo -"Entonces ese es el tal cadejo"- pensó vlad mientras observaba aquella situación, aquel chico fue el primero en entrar por una de las puertas para luego desaparecer con lo que se parecio ser un grito aquello aterro a algunos de los presentes, se podía notar en sus rostros el deseo de abandonar el lugar salir huyendo. Otros en cambio les parecio agradar la idea de descubrir que era lo que se ocultaba detrás de las puertas. Ellos los valientes no fueron mas que un grupo el cual no seria mas que un puñado personas, aunque no prestara mucha atención vlad pude notar que algunos siguieron el mismo camino que cadejo, otros decidieron elegir otra de las entradas. Mientras tanto para el resto los cuales por algún motivo decidieron no exponerse al peligro comenzaron a abandonar la habitación poco a poco hasta que solo unas tres personas quedaban ahí.
-Ha llegado el momento de que yo también entre por una de ellas- comento vlad para si mismo mientras comenzaba a avanzar hasta estar cerca de una de aquellas tan extrañas puertas, sin duda y después de meditar decidio elegir la opción mas fiable, él iba a entrar por donde la mayoría lo hizo claro eso hasta que un extraño suceso ocurrio, por unos pocos segundos algo casi tan efímero que el ojo humano apenas lo hubiera notado la imagen de una persona entrando por una puerta, quizás no podría haberlo notado si lo que hubiera visto se tratara de otra cosa, pero no, ahí estaba la imagen de su hermana escogiendo uno de los caminos, a pesar de que ello sin duda no era real vlad por un extraño impulso abandono la idea de seguir al resto y en cambio en su mente surgio del deseo de ser guiado por aquella extraña visión.
Se acerco a aquella extraña puerta y en ella de forma casi imperceptible se podía notar un pequeño tallado como indicando lo que se hallaba detrás de esto pero claro debido al incesante paso del tiempo ya solo se podían distinguir unas pequeñas muescas dejadas sin duda por algún tipo de cincel. Acercándose la abrió lentamente dando paso a lo que debía ser una inmensa oscuridad, vlad sin miedo ni dudas dio en paso al frente hasta encontrarse dentro de aquel cuarto lo que provoco que la puerta se cerrara completamente y la oscuridad lo devorara todo. En ese espacio el tiempo parecio detenerse tal vez fueron unos segundos o a lo mejor unos minutos pasaron en los que nada se podía percibir y de pronto toda la oscuridad dio paso a un sitio completamente diferente.
Vlad ya no se encontraba en el templo había sido transportado a otro lugar -tal parece que aquel lugar era la antesala para el verdadero templo- aunque eso debía ser cierto en ese momento el se encontraba en un lugar gélido, el cual se podía describir como un gran lago rodeado de arboles completamente congelados, el frio que ahí hacia era muy grande podría congelar a cualquiera pero a el simplemente le parecía una agradable brisa, miro en todas las direcciones posibles pero no pudo notar ningún alma entonces se dio cuenta que las puertas deban paso a diferentes lugares. Comenzó a caminar por aquel lugar tan solitario con su digivice de única compañía cuando al cabo de unos minutos de camino pudo notar una silueta que al acercarse se trataba de un gabumon herido.
Apurando su paso se acerco al digimon herido y sin siquiera consultarle comenzó a tratar aquella herida ya cuando esta estuvo parcialmente curada le interrogo -¿Que haces aquí?, ¿ acaso has venido solo?- a pesar de haber realizado algunas cuantas mas solo estas tuvieron una respuesta.
-muchas gracias por tu ayuda- agradeció aquel digimon con una pequeña reverencia -vine aquí con mi compañero en busca de la data del royal knight pero al terminar aquí fuimos separadas y yo vague por la zona- sin duda parecía preocupado por la desaparición de su compañero ya que algunos tamer y digimon llegaban a formar un lazo tan grande que eran casi inseparables.
-No te preocupes de seguro el estará bien- a pesar de querer ayudarlo vlad no podía hacerlo debía seguir su camino persiguiendo la ilusión que era su hermana -Quedate en este lugar sin duda alguien vendrá por ti- sin duda dentro de los que habían entrado se encontraba una chica de los unión saver acompañada de dos digimon y parecían del tipo que ayudarían a los que se perdieran de este lugar. Se quedo con aquel gabumon unos minutos y antes de marcharse le entrego lo que vendría a ser una brazada termia asi como un poco de agua y comida para que aguantara hasta que la ayuda contraria o hasta que el volviera a ayudarlo.
Con paso lento pero seguro se alejo del lugar intentando no mirar atrás para no arrepentirse de la decisión tomada, el paisaje delante de el poco a poco comenzó a cambiar el lago congelado había quedado unos cuantos metros atrás y en su lugar la tierra y el hielo se mezclaban formando una superficie un tanto lodosa, los arboles anteriormente congelados recuperaban su tono natural, las flores aparecían en estos sin duda alguna era un sitio extraño donde el invierno y la primavera coexistían en una especie de simbiosis, lentamente el clima se volvió mas calido en el lugar se podía vislumbrar algunos jardines rodeados de bancas y un poco mas adelante un largo y estrecho camino que daba paso a lo que parecía ser el verdadero templo. Vlad contemplo aquella ruta y a la distancia nuevamente pudo ver la imagen de su hermana que le hacia señas invitándolo a seguirlo -ese debe ser el verdadero templo- dijo mientras comenzaba a moverse rumbo a la ilusión de su hermana y aquella estructura.
- Tamer
- Prueba de Rol :ADigi Puntos :239Cuentas :Ficha :NPCs :Nivel On Rol :Double SpiritNivel On Rol de los Digi Aliados :Rookie
Inventario :
Vlad
Re: El treceavo perdido [libre]
Su estancia en la posición donde habían aparecido, fue breve, luego del reconocimiento visual de Commnadramon, el dúo se desplazó con relativa cautela, al interior de la edificación, del verdadero Monasterio…o al menos eso daba a entender, puesto por lo que sabían podría ser otra fachada más de los antiguos propietarios del lugar. Optando por el camino de la derecha del corredor exterior, que rodeaba el jardín; emprendieron su caminata, atentos a cualquier indicio de vida posiblemente hostil, en las cercanías. Su sendero elegido les daba una hermosa vista de la vegetación, grandes arbustos con flores de diversos colores, señales de haber llegado justo en la época en que la fauna de esta zona parecía florecer; aunque a Comandaron le preocupaba más que no hubiera ninguna amenaza entre tanta vegetación que ahora no solo los ocultaba de la vista del resto, sino que también les impedía divisar mucho más allá del corredor por el que transitaban o alguna de las montañas que rasgaban el cielo. Claro que aquello no era su único temor, la presencia de posibles enemigos era un hecho real, por el gran número de “desaparecidos” en las ruinas anteriores, que ahora sabían que fueron traídos hasta aquí, pero estos no serán un dilema puesto era muy poco probable que llegaran a ser más que una mera distracción ante su poder… él verdadero enemigo era aquel que había mantenido toda esta flora viva por tanto tiempo, sin contar que por lo limpio y bien mantenido que estaba el lugar, era claro que no solo había un guardián sino varios y de seguro su poder si sería un dilema. Por otra parte mientras su compañero militar se preocupaba de la parte táctica, Cadejo estaba más interesado en una simple curiosidad algo que le había atormentado, dando vueltas en su cerebro, desde que llegaron.
-jejeje, hasta que vemos una puerta – dice con cierta alegría al divisar no muy lejos, un umbral hundido en la pared del corredor, el cual era solo una decoración para la puerta que yacía en su interior. Con movimientos sigilosos y meticulosos, el dinosaurio militar, aseguro la zona circundante a la puerta, para luego proceder a inspeccionar, en una primera medida, con sus sentidos del oído y del olfato, cualquier indicio de vida detrás de la misma, aunque fue la confirmación visual, al abrir la puerta, las que revelaron la verdadera información. Abriendo el accesos a un corredor interno, la puerta, permitió ver a sus visitantes, una encrucijada, que se dividía en tres direcciones, los caminos de la izquierda y la derecha eran muy similares, largos corredores, alumbrados únicamente por linternas, eran tentadores pero el dúo opto por la siguiente opción, que con suerte les daría cierta ventaja de altura; el tercer camino era el que estaba frente a la puerta, unas escaleras en espiral que llevaban a un área superior del monasterio. Era imposible verificar cuál de estos caminos era el correcto o el menos peligroso, pero claramente la opción de estar en una zona de mayor altura siempre es una buena ventaja, si se va de incognito.
EL camino elegido había sido aclarado por el Digimon, pero su tamer le detuvo unos momentos y sacando, sin permiso, cosa que le dio una queja de su camarada digital; de la mochila del lagarto militar, un aerosol, empezó a escribir un grafiti en la pared exterior al lado de la puerta, un mensaje simple que decía:
“Nos fuimos por aquí -->
Cadejo y Comm ”
Apuntando a la puerta y con un extraño dibujo al lado de la firma compartida. El motivo del accionar de su camarada era clara para Commandramon, por mera y simple diversión, aunque también poseía un movimiento estratégico oculto, aunque nada de gran importancia u eficacia si lo que se intentaba era causar daño al enemigo, pero si permitiría brindar cierta información de sus perseguidores. No poseían una completa certeza de quien, cuantos, a que grupo pertenecían, que intereses poseían o si en realidad estaban allí, pero ante sus ojos la posibilidad de estar siendo perseguidos por un Royal Knight, Union Saver y/o un héroe solitario, era algo muy probable. A la vista ese anuncio era inofensivo, pero podría ser de gran utilidad. En caso de que los perseguidores desconfiaran de las indicaciones dejadas allí, supondría que creían que este anuncio no era más que una distracción del camino que en realidad tomo el dúo, o que incluso detrás de la puerta podría haber una trampa esperándoles; mientras que aquellos que siguieran adelante, empezarían a moverse con más cautela en especial en las esquinas o puntos ciegos, puesto el anuncio les alertaba de estar conscientes de su casería, en este caso sus oponentes les darían una buena diversión en una batalla; por otro lado si los que terminaran siguiéndolos confiados en sí mismos y subestimando los, se moverían con más velocidad y valor…pero seguro no durarían mucho en una pelea. De todas formas si sus enemigos no se delataban por su impaciencia, de seguro les darían tiempo suficiente, por los movimientos cautelosos o por tomar otro camino, para que ellos dos pudieran seguir recorriendo sin cuidado el monasterio.
-¿porque dibujaste una… foca?- dudando un poco al elegir el animal más parecido, al extraño dibujo al lado de la firma conjunta puesta por Cadejo.
-¡no es una foca! – Dice con algo de ofensa en su voz – es una carita haciendo un giño y lanzando un beso, un perfecto icono para alterar a mis perseguidores wuajajaja – dice lleno de ánimos y esperanzas en su plan.
-…ahora entiendo porque tus quimeras salen tan deformes – sin prestar más atención al asunto e ingresando por la puerta.
-¡solo tienes envidia de mi capacidades artísticas, jum! Jejeje – defendiéndose ante el comentario con un falso orgullo y sentido de superioridad. Cerrando la puerta detrás de ellos al ingresar.
-…como digas – prestando más atención en su camino, listo para actuar si durante su subida por las escaleras, encontraban algún individuo, ya sea hostil o no. Aunque el acenso hasta el ala superior fue tranquilo, para la mente y los instintos de Commandrmaon también había sido muy perturban te, ya llevaban un tiempo recorriendo buena parte del templo, sin contar de que por los visitantes que llegaron antes que ellos, debería haber más posibilidades de que alguien se topara con ellos…pero nada, era como si todos hubieran desparecido, claramente algo en su interior le advertía de un gran peligro oculto en este monasterio. A pesar de no compartirlo con su camarada, Cadejo también tenía sus motivos para dudar de lo que fuera que pasara en aquel lugar. Dejando de lados sus dudas para continuar con su misión, aunque con un mayor cuidado, el dúo se dispuso a hacer un rápido reconocimiento del ala superior, ingresando a cada habitación que divisaban para inspeccionar la rápidamente, lo cual fue más rápido en cuanto se dividieron para revisar las habitaciones que estaban vecinas, puesto que a para la tercera habitación que revisaron juntos, se percataron de era claro que no había nadie en el monasterio, aunque por seguridad no se alejaron mucho el uno del otro, por ello no revisaban habitaciones que estuviera a una distancia mayor al muro o corredor que las separaba. Por el momento todas las áreas que lograron inspeccionar no poseían mucha información, algunas eran simples armarios con productos de limpieza, otras dormitorios, baños, he incluso una especie de cocina que ahora andaba revisando Cadejo, mientras Commandramon miraba el comedor anexado a la misma. Por el momento solo estaban seguros que no hace más de unos días, el monasterio estaba habitado, y según las fotografías y cuadros en las habitaciones sus habitantes eran en su mayoría Sistersmons… pero el motivo de su actual desaparición era todavía un inquietante misterio.
-Seguro ya lo has pensado, pero creo que entramos a la boca del lobo – le comenta a su compañero mientras revisa el horno, más que nada para robar algo de comida si encontraba.
- También presiento algo, pero no tenemos ninguna prueba aun de que algo malo les haya pasado a las habitantes de este monasterio – Mientras revisa uno de los estantes con platos y bajillas, en el comedor.
-Jejeje no me refiero a eso solo por su desaparición – con un tono algo burlo y misterioso – ¿Acaso no lo notaste? Dime ¿cuantas escrituras o murales viste referentes al Royal Knight o a su épica batalla tan detallada en el otro monasterio? – aquellas palabras despertaron la memoria de Commandramon, Cadejo tenía razón no habían visto siquiera menciones en los muros o cuadros conmemorativos, sobre le Royal Knight o su mítica pelea…definitivamente algo más debería de estar pasando y solo su compañero humano se había percatado en detalle de eso – Además sabemos bien que si uno quiere evitar que el mal salga de su encierro, en especial si alguien de gran poder ha dado su vida para ello, no lo divulgaríamos. Y tampoco parece que esto fuera un trampa de los Royal Knights, hay mejores forma de intentar atraparnos sin poner en riesgo tantas vidas...además esto sería algo que nosotros haríamos para soltar algún virus o mal en el Digimundo, atraer a los incautos a la trampa para que sean los portadores y manejando a todos a nuestro antojo jejeje – Sin usar ningún tono de seriedad en sus palabras como si todo esto fuera un simple juego para él. Su compañero Digital se encontraba algo sorprendido, no por el pensamiento de su camarada, sino por no haber lo descubierto él también, creo que estaba demasiado concentrado en la parte táctica de la misión como para sospechar de lo otro, afortunadamente ellos era un equipo bien equilibrado.
Luego de las últimas palabras de Cadejo, hubo un temporal silencio entre los dos, al tiempo que seguían con su búsqueda de alguna pista que indicara, por momentos, el paradero de los habitantes desaparecidos, no es que se hayan olvidado del obre con las tan preciadas datas…pero con la nueva información de un enemigo oculto, era claro que aquel objeto debería estar comprometido y acercarse a él sería poco cauto sin la información adecuada. Fue entonces cuando el silencio se vio desplazado por dos sucesos que ocurrieron prácticamente al mismo tiempo, en la cocina y el comedor. Ya quedándole solo la despensa más alejada por revisar, y que posiblemente era la más hermética de todas, puesto seguramente allí se encontraba la carne salada, digo esto puesto esa parecía la única forma de mantener la carne en buen estado, dentro del monasterio, ya que no parecía haber sistema eléctrico o un congelador antiguo. Con confianza y sin miedo de esperar alguna sorpresa, Cadejo abrió de golpe la alacena con esperanza de encontrar más que nada algún bocadillo deliciosos, una mimo personal mientras seguían buscando, pero en su lugar recibió una gran sorpresa. Apenas la puerta fue abierta, una sombra negra salto hacia la cara de Cadejo, sujetándose a la misma para efectuar su ataque, pero luego de que por el impulso y el choque con la pared, el joven terminara en el suelo, el atacante logro ver le bien y detener su golpe.
-¿¡Cadejo?! ¿Qué haces aquí? Espera ¿esta Comm contigo? – demostrando una gran sorpresa, tanto en su tono como en su voz. Mirando a su alrededor esperando ver al soldado jurásico.
-¿¡he?! – mientras se recupera de la sorpresa y el golpe. En cuestión de mili segundos logra reconocer a su atacante, una pachoncita bola de pelos negra, conocida mejor como - ¡Oshin! Espera ¿Ya te hiciste monja?– demostrando una gran alegría de encontrar sé con esta vieja amiga, bueno más amiga de Commandramon por sus años juntos pero igual una amiga suya.
-¡No hay tiempo para saludar ni bromas, debemos irnos rápido!- dice con gran impaciencia y desesperación, la Black Gatomon, soltando la cara de Cadejo, y dirigiéndose rápido a la conexión de la cocina con el comedor, esperando encontrar allí a Commandramon.
Mientras unos segundos antes, en el comedor, anexado a la cocina. En realidad no tenía mucho más que revisar además del mantel o las cillas, algo que sería una pérdida de tiempo por lo que el soldado simplemente se acercó un poco al vitral lleno de color que servía de ventana para la entrada de luz, puesto cualquier figura que se pudiera apreciar en el exterior era difuminada por la forma del vidrio que la conformaba, pero no perdía nada intentado. Fue entonces que prácticamente que hoyo el ruido del golpe de Cadejo contra la pared, que también noto que una Sistermon Noir se hallaba de pie en la entrada del comedor, la conexión del mismo con el corredor a las demás áreas del monasterio. Commandramon no tardo en ponerse en posición y alzar su arma contra ella, esperando no tener que empezar un enfrentamiento…pero algo en la mirada de la misma le hacía sentir revolver el estómago…era claro que algo no estaba bien con esa Digimon. Fue entonces, mientras la mirada perdía en el vacío, permanecía en aquella Digimon, que Oshin apareció en el umbral que unía la cocina y el comedor, erizándose le todos los pelos, en cuando vio a la Sistermon Noir parada allí, reconociendo al instante la mirada.
-¡COMM CORRE!- grita prácticamente al instante en que ve la Digimon.
-¿¡He?! – confundidos tanto Commandramon como Cadejo, el cual se había levantado y acercado hasta donde estaba Gatomon, logrando ver la escena. Aunque ninguno comprendía el motivo de la desesperación de Black Gatomon, pronto tendría el panorama del peligro más claro. Acompañado de un fino, terrorífico y monstruoso grito, que ninguna Sistermon podría llegar a ser; el brazo derecho de la Sistermon se desarmo en tres raíces o lianas, las cuales fueron directo hacia Commandramon, afortunadamente el experimentado militar logro esquivarlas, al tiempo que lanzaba dos disparos y luego de escapar de otro intento de ataque similar, lanzo dos bombas una de humo y otra incendiaria, suficiente distracción para permitirle a él y a sus amigos escapar de semejante monstruo. La preocupación de su amiga había sido comprendida a la perfección por el dúo, y ya sabían que obviamente algo malo había pasado a los que estaban en el monasterio, ahora solo es quedaba huir por la puerta trasera y encontrar algún lugar seguro donde entender mejor que estaba pasando y crear un plan de acción. Esto ya parecía una película de terror, incluso el sol se acechaba a su hora de descanso, al parecer el tele transportador los había llevado a una zona del Digimundo con horario diferente al del falso monasterio.
-----------
Off:
A pesar de las advertencias de las Sistermons, el primer arqueólogo, atraído por las escrituras y murales falsas (al menos la parte de obtener el poder del obre) dejadas por los seguidores de Agromon; se escurrió a la sala del obre, donde al tocar lo, libero parte del poder de aquel oscuro Digimon, volviendo la sala del obre en una especie de corazón del bosque, donde miles de gruesas lianas, salientes del obre, rodean la habitación, encapsulando en una especie de capullos a sus víctimas y creando clones zombis plantas, de ellos, con el conocimiento y podres semejantes a los originales. El clon del arqueólogo fue el primero y luego de capturar, en pocos días, un grupo de Sisitermons y de los viajeros que venían en busca del mismo poder, adquirió más fuerza y tomo control de casi todo el monasterio, quedando solo algunos sobrevivientes aun ocultos en algunas cámaras del edificio.
Con cada víctima capturada en los capullos, Algomon va recuperando más fuerza, ganando la batalla contra Jesmon dentro del obre.
Pd: ante esta nueva información les digo que oler flores ya no es tan seguro como antes.
-jejeje, hasta que vemos una puerta – dice con cierta alegría al divisar no muy lejos, un umbral hundido en la pared del corredor, el cual era solo una decoración para la puerta que yacía en su interior. Con movimientos sigilosos y meticulosos, el dinosaurio militar, aseguro la zona circundante a la puerta, para luego proceder a inspeccionar, en una primera medida, con sus sentidos del oído y del olfato, cualquier indicio de vida detrás de la misma, aunque fue la confirmación visual, al abrir la puerta, las que revelaron la verdadera información. Abriendo el accesos a un corredor interno, la puerta, permitió ver a sus visitantes, una encrucijada, que se dividía en tres direcciones, los caminos de la izquierda y la derecha eran muy similares, largos corredores, alumbrados únicamente por linternas, eran tentadores pero el dúo opto por la siguiente opción, que con suerte les daría cierta ventaja de altura; el tercer camino era el que estaba frente a la puerta, unas escaleras en espiral que llevaban a un área superior del monasterio. Era imposible verificar cuál de estos caminos era el correcto o el menos peligroso, pero claramente la opción de estar en una zona de mayor altura siempre es una buena ventaja, si se va de incognito.
EL camino elegido había sido aclarado por el Digimon, pero su tamer le detuvo unos momentos y sacando, sin permiso, cosa que le dio una queja de su camarada digital; de la mochila del lagarto militar, un aerosol, empezó a escribir un grafiti en la pared exterior al lado de la puerta, un mensaje simple que decía:
“Nos fuimos por aquí -->
Cadejo y Comm ”
Apuntando a la puerta y con un extraño dibujo al lado de la firma compartida. El motivo del accionar de su camarada era clara para Commandramon, por mera y simple diversión, aunque también poseía un movimiento estratégico oculto, aunque nada de gran importancia u eficacia si lo que se intentaba era causar daño al enemigo, pero si permitiría brindar cierta información de sus perseguidores. No poseían una completa certeza de quien, cuantos, a que grupo pertenecían, que intereses poseían o si en realidad estaban allí, pero ante sus ojos la posibilidad de estar siendo perseguidos por un Royal Knight, Union Saver y/o un héroe solitario, era algo muy probable. A la vista ese anuncio era inofensivo, pero podría ser de gran utilidad. En caso de que los perseguidores desconfiaran de las indicaciones dejadas allí, supondría que creían que este anuncio no era más que una distracción del camino que en realidad tomo el dúo, o que incluso detrás de la puerta podría haber una trampa esperándoles; mientras que aquellos que siguieran adelante, empezarían a moverse con más cautela en especial en las esquinas o puntos ciegos, puesto el anuncio les alertaba de estar conscientes de su casería, en este caso sus oponentes les darían una buena diversión en una batalla; por otro lado si los que terminaran siguiéndolos confiados en sí mismos y subestimando los, se moverían con más velocidad y valor…pero seguro no durarían mucho en una pelea. De todas formas si sus enemigos no se delataban por su impaciencia, de seguro les darían tiempo suficiente, por los movimientos cautelosos o por tomar otro camino, para que ellos dos pudieran seguir recorriendo sin cuidado el monasterio.
-¿porque dibujaste una… foca?- dudando un poco al elegir el animal más parecido, al extraño dibujo al lado de la firma conjunta puesta por Cadejo.
-¡no es una foca! – Dice con algo de ofensa en su voz – es una carita haciendo un giño y lanzando un beso, un perfecto icono para alterar a mis perseguidores wuajajaja – dice lleno de ánimos y esperanzas en su plan.
-…ahora entiendo porque tus quimeras salen tan deformes – sin prestar más atención al asunto e ingresando por la puerta.
-¡solo tienes envidia de mi capacidades artísticas, jum! Jejeje – defendiéndose ante el comentario con un falso orgullo y sentido de superioridad. Cerrando la puerta detrás de ellos al ingresar.
-…como digas – prestando más atención en su camino, listo para actuar si durante su subida por las escaleras, encontraban algún individuo, ya sea hostil o no. Aunque el acenso hasta el ala superior fue tranquilo, para la mente y los instintos de Commandrmaon también había sido muy perturban te, ya llevaban un tiempo recorriendo buena parte del templo, sin contar de que por los visitantes que llegaron antes que ellos, debería haber más posibilidades de que alguien se topara con ellos…pero nada, era como si todos hubieran desparecido, claramente algo en su interior le advertía de un gran peligro oculto en este monasterio. A pesar de no compartirlo con su camarada, Cadejo también tenía sus motivos para dudar de lo que fuera que pasara en aquel lugar. Dejando de lados sus dudas para continuar con su misión, aunque con un mayor cuidado, el dúo se dispuso a hacer un rápido reconocimiento del ala superior, ingresando a cada habitación que divisaban para inspeccionar la rápidamente, lo cual fue más rápido en cuanto se dividieron para revisar las habitaciones que estaban vecinas, puesto que a para la tercera habitación que revisaron juntos, se percataron de era claro que no había nadie en el monasterio, aunque por seguridad no se alejaron mucho el uno del otro, por ello no revisaban habitaciones que estuviera a una distancia mayor al muro o corredor que las separaba. Por el momento todas las áreas que lograron inspeccionar no poseían mucha información, algunas eran simples armarios con productos de limpieza, otras dormitorios, baños, he incluso una especie de cocina que ahora andaba revisando Cadejo, mientras Commandramon miraba el comedor anexado a la misma. Por el momento solo estaban seguros que no hace más de unos días, el monasterio estaba habitado, y según las fotografías y cuadros en las habitaciones sus habitantes eran en su mayoría Sistersmons… pero el motivo de su actual desaparición era todavía un inquietante misterio.
-Seguro ya lo has pensado, pero creo que entramos a la boca del lobo – le comenta a su compañero mientras revisa el horno, más que nada para robar algo de comida si encontraba.
- También presiento algo, pero no tenemos ninguna prueba aun de que algo malo les haya pasado a las habitantes de este monasterio – Mientras revisa uno de los estantes con platos y bajillas, en el comedor.
-Jejeje no me refiero a eso solo por su desaparición – con un tono algo burlo y misterioso – ¿Acaso no lo notaste? Dime ¿cuantas escrituras o murales viste referentes al Royal Knight o a su épica batalla tan detallada en el otro monasterio? – aquellas palabras despertaron la memoria de Commandramon, Cadejo tenía razón no habían visto siquiera menciones en los muros o cuadros conmemorativos, sobre le Royal Knight o su mítica pelea…definitivamente algo más debería de estar pasando y solo su compañero humano se había percatado en detalle de eso – Además sabemos bien que si uno quiere evitar que el mal salga de su encierro, en especial si alguien de gran poder ha dado su vida para ello, no lo divulgaríamos. Y tampoco parece que esto fuera un trampa de los Royal Knights, hay mejores forma de intentar atraparnos sin poner en riesgo tantas vidas...además esto sería algo que nosotros haríamos para soltar algún virus o mal en el Digimundo, atraer a los incautos a la trampa para que sean los portadores y manejando a todos a nuestro antojo jejeje – Sin usar ningún tono de seriedad en sus palabras como si todo esto fuera un simple juego para él. Su compañero Digital se encontraba algo sorprendido, no por el pensamiento de su camarada, sino por no haber lo descubierto él también, creo que estaba demasiado concentrado en la parte táctica de la misión como para sospechar de lo otro, afortunadamente ellos era un equipo bien equilibrado.
Luego de las últimas palabras de Cadejo, hubo un temporal silencio entre los dos, al tiempo que seguían con su búsqueda de alguna pista que indicara, por momentos, el paradero de los habitantes desaparecidos, no es que se hayan olvidado del obre con las tan preciadas datas…pero con la nueva información de un enemigo oculto, era claro que aquel objeto debería estar comprometido y acercarse a él sería poco cauto sin la información adecuada. Fue entonces cuando el silencio se vio desplazado por dos sucesos que ocurrieron prácticamente al mismo tiempo, en la cocina y el comedor. Ya quedándole solo la despensa más alejada por revisar, y que posiblemente era la más hermética de todas, puesto seguramente allí se encontraba la carne salada, digo esto puesto esa parecía la única forma de mantener la carne en buen estado, dentro del monasterio, ya que no parecía haber sistema eléctrico o un congelador antiguo. Con confianza y sin miedo de esperar alguna sorpresa, Cadejo abrió de golpe la alacena con esperanza de encontrar más que nada algún bocadillo deliciosos, una mimo personal mientras seguían buscando, pero en su lugar recibió una gran sorpresa. Apenas la puerta fue abierta, una sombra negra salto hacia la cara de Cadejo, sujetándose a la misma para efectuar su ataque, pero luego de que por el impulso y el choque con la pared, el joven terminara en el suelo, el atacante logro ver le bien y detener su golpe.
-¿¡Cadejo?! ¿Qué haces aquí? Espera ¿esta Comm contigo? – demostrando una gran sorpresa, tanto en su tono como en su voz. Mirando a su alrededor esperando ver al soldado jurásico.
-¿¡he?! – mientras se recupera de la sorpresa y el golpe. En cuestión de mili segundos logra reconocer a su atacante, una pachoncita bola de pelos negra, conocida mejor como - ¡Oshin! Espera ¿Ya te hiciste monja?– demostrando una gran alegría de encontrar sé con esta vieja amiga, bueno más amiga de Commandramon por sus años juntos pero igual una amiga suya.
-¡No hay tiempo para saludar ni bromas, debemos irnos rápido!- dice con gran impaciencia y desesperación, la Black Gatomon, soltando la cara de Cadejo, y dirigiéndose rápido a la conexión de la cocina con el comedor, esperando encontrar allí a Commandramon.
Mientras unos segundos antes, en el comedor, anexado a la cocina. En realidad no tenía mucho más que revisar además del mantel o las cillas, algo que sería una pérdida de tiempo por lo que el soldado simplemente se acercó un poco al vitral lleno de color que servía de ventana para la entrada de luz, puesto cualquier figura que se pudiera apreciar en el exterior era difuminada por la forma del vidrio que la conformaba, pero no perdía nada intentado. Fue entonces que prácticamente que hoyo el ruido del golpe de Cadejo contra la pared, que también noto que una Sistermon Noir se hallaba de pie en la entrada del comedor, la conexión del mismo con el corredor a las demás áreas del monasterio. Commandramon no tardo en ponerse en posición y alzar su arma contra ella, esperando no tener que empezar un enfrentamiento…pero algo en la mirada de la misma le hacía sentir revolver el estómago…era claro que algo no estaba bien con esa Digimon. Fue entonces, mientras la mirada perdía en el vacío, permanecía en aquella Digimon, que Oshin apareció en el umbral que unía la cocina y el comedor, erizándose le todos los pelos, en cuando vio a la Sistermon Noir parada allí, reconociendo al instante la mirada.
-¡COMM CORRE!- grita prácticamente al instante en que ve la Digimon.
-¿¡He?! – confundidos tanto Commandramon como Cadejo, el cual se había levantado y acercado hasta donde estaba Gatomon, logrando ver la escena. Aunque ninguno comprendía el motivo de la desesperación de Black Gatomon, pronto tendría el panorama del peligro más claro. Acompañado de un fino, terrorífico y monstruoso grito, que ninguna Sistermon podría llegar a ser; el brazo derecho de la Sistermon se desarmo en tres raíces o lianas, las cuales fueron directo hacia Commandramon, afortunadamente el experimentado militar logro esquivarlas, al tiempo que lanzaba dos disparos y luego de escapar de otro intento de ataque similar, lanzo dos bombas una de humo y otra incendiaria, suficiente distracción para permitirle a él y a sus amigos escapar de semejante monstruo. La preocupación de su amiga había sido comprendida a la perfección por el dúo, y ya sabían que obviamente algo malo había pasado a los que estaban en el monasterio, ahora solo es quedaba huir por la puerta trasera y encontrar algún lugar seguro donde entender mejor que estaba pasando y crear un plan de acción. Esto ya parecía una película de terror, incluso el sol se acechaba a su hora de descanso, al parecer el tele transportador los había llevado a una zona del Digimundo con horario diferente al del falso monasterio.
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Off:
A pesar de las advertencias de las Sistermons, el primer arqueólogo, atraído por las escrituras y murales falsas (al menos la parte de obtener el poder del obre) dejadas por los seguidores de Agromon; se escurrió a la sala del obre, donde al tocar lo, libero parte del poder de aquel oscuro Digimon, volviendo la sala del obre en una especie de corazón del bosque, donde miles de gruesas lianas, salientes del obre, rodean la habitación, encapsulando en una especie de capullos a sus víctimas y creando clones zombis plantas, de ellos, con el conocimiento y podres semejantes a los originales. El clon del arqueólogo fue el primero y luego de capturar, en pocos días, un grupo de Sisitermons y de los viajeros que venían en busca del mismo poder, adquirió más fuerza y tomo control de casi todo el monasterio, quedando solo algunos sobrevivientes aun ocultos en algunas cámaras del edificio.
Con cada víctima capturada en los capullos, Algomon va recuperando más fuerza, ganando la batalla contra Jesmon dentro del obre.
Pd: ante esta nueva información les digo que oler flores ya no es tan seguro como antes.
- Tamer & Digimon
- Prueba de Rol :ADigi Puntos :1579Cuentas :Ficha :Relaciones :Cronologia :NPCs :Nivel On Rol :Super UltimateIcono :Rango y Unidad :Cadejo Shiroi
Rango: Chaos Lord
División: Todo el clan
Unidad/Sub-division: Todo el clan
Commandramon
Rango: Chaos Lord y Líder de la D-Brigade
División: Todo el clan
Unidad/Sub-division: Todo el clanInventario :
cadejo
Re: El treceavo perdido [libre]
Caminar hacia el templo por aquel sendero bastante viejo y poco cuidado era bastante aburrido, pero no había mucho de qué hablar con Labramon realmente, después de todo, ¿de qué se supone habláramos?, estamos en un trabajo; en un trabajo suicida desde el punto de vista técnico si consideramos toda la información que hemos obtenido del templo… aunque no es mucha información, solo son datos obvios que pueden observarse a simple vista; otros no tan obvios y unos que ni siquiera tienen sentido. Pero aun así era bastante agradable el caminar aun si no decíamos nada… aunque lo que me pareció extraño del lugar era que había demasiadas plantas por todas partes… quiero decir, por los túneles que había entre montaña y montaña me esperaba bastante vegetación interna; ya fueran algunos arbustos o algo de moho creciendo en las paredes pero… incluso en los puentes colgantes había muchas plantas colgando a modo de enredaderas. Aunque la verdad preferí ignorarlas, después de todo, solo eran plantas inofensivas que hacían su deber de decoración… o eso creo… la verdad es que eran un poco incomodas, pero supongo que debería de ignorarlas completamente para olvidarme de esta sensación tan rara.
Pero lo bueno es que mi distracción con las plantas logro acortar el tiempo de viaje, llegando a lo que parecía una entrada trasera al verdadero templo; aunque no había mucho que comentar, solo unos cuantos arboles de fruta; arbustos cortados para que tuvieran formas varias y un piso elegante. El problema principal era la desolación del lugar… quiero decir, para tener un lugar en tan buen estado, debería de haber muchos guardias y/o encargados, pero no había nadie… aunque quizás sería hora del descanso y estarían dentro del templo, cosa que nos dificultaría las cosas bastante pero bueno; supongo que si sabemos guardar silencio y movernos con cautela, podríamos lograr llegar rápido a la sala donde estaría el poder de este Royal Knight. Aunque mis pensamientos cambiaron de forma brusca cuando escuche varios gritos dentro del templo… supongo que alguien más se adelanto a mí y ya entro; ¿pero por que tanto grito?... quiero decir… no escuche gritos de los posibles guardias… quiero decir, no escuche el típico “¡Intruso! ¡Atrápenlo!”, sino mas bien escuche una especie de grito de película de terror… el mismo grito que genera el monstruo de la película justo antes de atacar a los pobres personajes para llevarlos a una muerte dolorosa… jeje, no existe mejor momento que ese de la película, pero en estos momentos debería cambiar el pensamiento, puesto que si esta el grito del monstruo; y acompañado al mismo, los gritos de las victimas… quizás esta “película” sea real y por tanto, estemos en un verdadero peligro.
Lo primero que hice ante los gritos, fue sacar mi digivice y con él, un par de cartas que podrían ser de utilidad; después abrí la puerta lo más rápido y silenciosamente que pude, comenzando a avanzar por los pasillos del lugar; los cuales tenían varias pinturas, y algunas plantas creciendo entre las paredes… ¿Por qué seria eso?... quizás algo realmente malo estaba ocurriendo en el lugar… y ahora que veo estas plantas; creo que las que vimos en el camino hacia aquí, pudieron hacernos lo mismo, ¿pero por qué no lo hicieron?, cabe la posibilidad de que no nos hubieran detectado… pero también está la posibilidad de que sería más gratificante para su jardinero actuar directamente en el templo para tener 2 presas servidas en bandeja de plata… tsk… realmente planeo aumentar la paga por este trabajo si Labramon y yo llegamos a salir vivos de aquí. El único problema es que no había nada… o mejor dicho, no había nadie en el lugar… si pude escuchar el sonido de pequeñas explosiones y disparos; así como el correr de algunas personas en el piso de arriba al que me encontraba yo; pero no pude subir por 2 razones. La primera: no había ninguna escalera cerca, solo puertas hacia habitaciones de los posibles habitantes del lugar; y la segunda… era que teníamos la más remota idea de a donde ir… supongo que ese es un problema bastante predecible… aunque lo mejor será evitar ir a los lugares de los cuales vinieron o vienen gritos… así Labramon y yo evitaremos problemas por ahora… aunque ni bien hay que avanzar rápido antes de que las cosas se tornen mas y mas extrañas… porque lo juro; de todo lo que pude llegar a esperar de este lugar… justamente viene a tocar lo último de la lista que no prepare.
¿Alguna idea de cómo evitar esas plantas Labramon?... porque no estoy seguro de que tan bien podamos escabullirnos con esas cosas por todos lados… -observe las plantas a mi alrededor mientras avanzaba- tsk… en momentos así, desearía haberle pedido a Grademon que me diera un curso de botánica para aprender más sobre plantas y quizás podríamos hacer algo para evitar problemas ahora mismo…
Lo único que se me ocurre es buscar el lugar de donde vienen… si cortamos las raíces, seguramente todas morirán y podremos proseguir… aunque no sé porque pero siento que intentar eso será demasiado arriesgado… lo mejor sería conseguir algún aliado temporal para hacerlo –observe a Labramon y ambos asentimos, comenzando a avanzar más rápido por el lugar- ¿crees que alguien esté aquí?...
¿No escuchaste los gritos de hace rato?, es claro que alguien está aquí… y si llega a sobrevivir y nos encontramos con él, le pediremos ayuda… no importa quién sea; incluso si es Sigrun… en esta situación, no es buena idea andar de enemigos por allí sin razón aparente –dicho eso, abrí una puerta que daba paso a una especie de pasillo a una biblioteca- bueno… veamos que encontramos por aquí
Bueno, no estoy tan al tanto de esto de las plantas… pero si se que deben tener relación con el vacio que hay en el templo… asi como con ese grito de monstruo de hace rato… tsk… ¿en que vinimos a meternos Labramon y yo?... tsk… comienzo a arrepentirme de haber aceptado ese trabajo pero… bueno, ya no queda más remedio que cumplirlo y cobrar 3 o 5 veces más de lo que tenía pensado cobrar.
Off: Lamento si quedo corto
Pero lo bueno es que mi distracción con las plantas logro acortar el tiempo de viaje, llegando a lo que parecía una entrada trasera al verdadero templo; aunque no había mucho que comentar, solo unos cuantos arboles de fruta; arbustos cortados para que tuvieran formas varias y un piso elegante. El problema principal era la desolación del lugar… quiero decir, para tener un lugar en tan buen estado, debería de haber muchos guardias y/o encargados, pero no había nadie… aunque quizás sería hora del descanso y estarían dentro del templo, cosa que nos dificultaría las cosas bastante pero bueno; supongo que si sabemos guardar silencio y movernos con cautela, podríamos lograr llegar rápido a la sala donde estaría el poder de este Royal Knight. Aunque mis pensamientos cambiaron de forma brusca cuando escuche varios gritos dentro del templo… supongo que alguien más se adelanto a mí y ya entro; ¿pero por que tanto grito?... quiero decir… no escuche gritos de los posibles guardias… quiero decir, no escuche el típico “¡Intruso! ¡Atrápenlo!”, sino mas bien escuche una especie de grito de película de terror… el mismo grito que genera el monstruo de la película justo antes de atacar a los pobres personajes para llevarlos a una muerte dolorosa… jeje, no existe mejor momento que ese de la película, pero en estos momentos debería cambiar el pensamiento, puesto que si esta el grito del monstruo; y acompañado al mismo, los gritos de las victimas… quizás esta “película” sea real y por tanto, estemos en un verdadero peligro.
Lo primero que hice ante los gritos, fue sacar mi digivice y con él, un par de cartas que podrían ser de utilidad; después abrí la puerta lo más rápido y silenciosamente que pude, comenzando a avanzar por los pasillos del lugar; los cuales tenían varias pinturas, y algunas plantas creciendo entre las paredes… ¿Por qué seria eso?... quizás algo realmente malo estaba ocurriendo en el lugar… y ahora que veo estas plantas; creo que las que vimos en el camino hacia aquí, pudieron hacernos lo mismo, ¿pero por qué no lo hicieron?, cabe la posibilidad de que no nos hubieran detectado… pero también está la posibilidad de que sería más gratificante para su jardinero actuar directamente en el templo para tener 2 presas servidas en bandeja de plata… tsk… realmente planeo aumentar la paga por este trabajo si Labramon y yo llegamos a salir vivos de aquí. El único problema es que no había nada… o mejor dicho, no había nadie en el lugar… si pude escuchar el sonido de pequeñas explosiones y disparos; así como el correr de algunas personas en el piso de arriba al que me encontraba yo; pero no pude subir por 2 razones. La primera: no había ninguna escalera cerca, solo puertas hacia habitaciones de los posibles habitantes del lugar; y la segunda… era que teníamos la más remota idea de a donde ir… supongo que ese es un problema bastante predecible… aunque lo mejor será evitar ir a los lugares de los cuales vinieron o vienen gritos… así Labramon y yo evitaremos problemas por ahora… aunque ni bien hay que avanzar rápido antes de que las cosas se tornen mas y mas extrañas… porque lo juro; de todo lo que pude llegar a esperar de este lugar… justamente viene a tocar lo último de la lista que no prepare.
¿Alguna idea de cómo evitar esas plantas Labramon?... porque no estoy seguro de que tan bien podamos escabullirnos con esas cosas por todos lados… -observe las plantas a mi alrededor mientras avanzaba- tsk… en momentos así, desearía haberle pedido a Grademon que me diera un curso de botánica para aprender más sobre plantas y quizás podríamos hacer algo para evitar problemas ahora mismo…
Lo único que se me ocurre es buscar el lugar de donde vienen… si cortamos las raíces, seguramente todas morirán y podremos proseguir… aunque no sé porque pero siento que intentar eso será demasiado arriesgado… lo mejor sería conseguir algún aliado temporal para hacerlo –observe a Labramon y ambos asentimos, comenzando a avanzar más rápido por el lugar- ¿crees que alguien esté aquí?...
¿No escuchaste los gritos de hace rato?, es claro que alguien está aquí… y si llega a sobrevivir y nos encontramos con él, le pediremos ayuda… no importa quién sea; incluso si es Sigrun… en esta situación, no es buena idea andar de enemigos por allí sin razón aparente –dicho eso, abrí una puerta que daba paso a una especie de pasillo a una biblioteca- bueno… veamos que encontramos por aquí
Bueno, no estoy tan al tanto de esto de las plantas… pero si se que deben tener relación con el vacio que hay en el templo… asi como con ese grito de monstruo de hace rato… tsk… ¿en que vinimos a meternos Labramon y yo?... tsk… comienzo a arrepentirme de haber aceptado ese trabajo pero… bueno, ya no queda más remedio que cumplirlo y cobrar 3 o 5 veces más de lo que tenía pensado cobrar.
Off: Lamento si quedo corto
- Tamer & Digimon
- Prueba de Rol :ADigi Puntos :707Cuentas :Ficha :Relaciones :Cronologia :NPCs :Nivel On Rol :DNA Evolution (Super Ultimate)Nivel On Rol de los Digi Aliados :Nova: Mega
BR: MegaIcono :Rango y Unidad :Scott Shadowest Musahrahjy
Rango: Hades Knight
División: Hades Titans
Unidad/Sub-division: Titans
Labramon
Rango: Hades Knight
División: Hades Titans
Unidad/Sub-division: TitansRango y Unidad Digi Aliado :Nova (BlackWarGreymon)
Rango: Hades Knight
División: Hades Titans
Unidad/Sub-division: Titans
BR (Renamon)
Rango: Soldado
División: D-Brigade
Unidad/Sub-division: Shadow LizardInventario :
Scott Desaster
Re: El treceavo perdido [libre]
Leonardo subió por las escaleras, con la espalda pegada a la pared. Notó que un escalón estaba algo menos consistente de lo normal, así que se apartó y lo tocó con la mano. Una verja se interpuso al pie de la escalera, obligándolo a seguir ascendiendo. Hizo un gesto de fastidio y procuró no accionar los distintos escalones. Sin embargo, cuando llegó al final de la escalera había otra verja. En la estancia a la que impedía la entrada la verja había más estanterías y libros, aunque vio algo interesante; parecía haber un digimon tirado en mitad de la estancia, con un libro en la mano. Leonardo encarnó una ceja al ver una serie de pequeñas lianas que envolvían al digimon poco a poco... no sabía qué harían esas lianas, pero estaba seguro de que no era nada bueno. Debía llevar hasta allí, aunque fuera contraproducente para él, ya que se había comprometido a ayudar a todos los que se habían perdido. Leonardo había visitado alguna pirámide en el desierto digital y había aprendido que las trampas rara vez eran como en las películas; las pequeñas trampa que activaban mecanismos mortales eran menos eficaces que por medio de trampas, obligar al intruso a hacer algo que lo llevase a una trampa la cual no pudiera esquivar. Si la idea de la trampa era obligarle a seguir ascendiendo, entonces, esa verja debía abrirse de alguna manera, y si pensaba con lógica, debía ir cerrando tramos de escalera a su espalda para que la verja final se abriera. Pisó varios de esos escalones y tal como predijo, ocurrió.
Enseguida corrió hasta el digimon, y comenzó a arrancar las lianas de su pelaje. Las arrojó a un lado.
-¡Eh!¿Estás bien?-zarandeó al digimon. Antes de poder fijarse en qué digimon era, pudo ver que las lianas serpenteaban hacia él para lanzarse como una peligrosa serpiente en agonía. Rápidamente cogió el libro que sujetaba el digimon y lo interpuso entre las lianas y él, que comenzaron a absorver la data del libro. Leonardo arqueó una ceja; se preguntaba qué hacía con los organismos vivos. Las lianas, tras hacer desaparecer el libro en datos, se enrollaron haciendo unos espasmos agónicos antes de desaparecer. “Luna, Flora, debéis tener mucho cuidado. Este lugar es una trampa mortal” pensó, entrecerrando los ojos. Enseguida se acercó al digimon y lo ayudó a levanarse mientras seguía hablándole para hacerle despertar.
Luna suspiró, mirando a su alrededor, aún agachada frente a las flores mientras meditaba. El lugar parecía inmenso...¿por dónde se suponían que iba a empezar? Y lo más importante, ¿dónde estaba Cadejo? Por unos instantes, se quedó preguntándose en qué tipo de lugar estaba Leonardo, pero, repentinamente cualquier interrogante se evaporó, porque Luna sintió que la tiraban al suelo.
Instintivamente se agarró a Floramon. Cuando se percató, vio que tenía una gruesa liana aferrándose a su pierna y subiendo hacia la cintura. El digivice había caído varios metros más allá. Temiéndose lo peor, soltó a Floramon y trató de alcanzar el digivice. En ese momento oyó a Floramon gritar, y cuando giró la cabeza hacia atrás vio que lo mismo que agarraba y la constreñía arrastaba a Flora hacia un pozo cercano. Estiró el brazo todo lo que pudo, pero sus peores temores se hicieron realidad y sintió cómo las raices lla raptaban a ella también. Vio en un miliisegundo el, cielo, también el monasterio, las flores y la hierba. Luego, Luna sintió que una sensación de frío y humedad la rodeaba y la envolvía. Apenas podía mantener la vista en un punto fijo, incluso si se había asegurado de conservar las gafas, por lo que veía como un dfuso círculo se movía intermitentemente, pero que se alejaba. Alzó la mano, porque en el círculo estaba el cielo, y a su alrededor, la oscuridad. Podía ver borrosamente su mano, hacer un amago de tocarlo, pero estaba muy lejos. Intentó respirar, pero aquella oscuridad parecía meterse también dentro de sí como si fuera agua, lo que provocó que Luna tosiera. Un hilito de burbujas ascendió, y Luna acabó tratando de ascender sin saber aún demasiado bien que había caído en un pozo con agua. En cuanto sus pulmones alcanzaron aire, hicieron una sonora y honda inspiración.
Se percató de que el círculo era el borde del pozo, y que la oscuridad era agua. “He tenido suerte... probablemente de no haber agua, me habría matado...” pensó Luna, moviendo las piernas para mantenerse a flote. El nivel del agua era bastante alto, y hacía pie, pero de puntillas. Giró la cabeza, buscando a Floramon, y no la encontró en la superficie; la digimon no era muy buena nadadora, por lo que Luna supo que tenía que sentirse preocupada. El agua, aún removiéndose por la caída de ambas, golpeaba la cara de Luna, dificultando aún más la tarea de buscar en la semipenumbra. Se sumergió, y encontró a Floramon, que sí parecía haberse atontado con el golpe y se hundía en las turbias aguas sin remedio. La agarró con fuerza sacarla a la superficie, y la cargó. Aunque no paraba de preguntarse insistentemente si estaban a salvo de aquello que las había atacado y qué era, Luna sabía que necesitaba ocuparse de otras cosas en ese preciso instante; buscó con urgencia a su alrededor. No aguantaría mucho manteniéndose a flote ya que la temperatura baja del agua hacía que se le agarrotasen los músculos. No podía hacer otra cosa que examinar el lugar a grandes rasgos, y sin mucho detalle. Para empezar, el agua estaba sucia y emitía olor a pudredumbre. Estaban en lo que le pareció a Luna un pozo, con su estructura circular típica, salvo un detalle; una de las paredes de la circunferencia parecía haber caído y llevaba a una especie de gruta natural. Luna nadó hacia allí, cargando a Floramon y se alegró de notar que el nivel del agua se hacía menor gradualmente, hasta el punto que cubría a Floramon por las rodillas. Recostó a la digimon en una pared, y finalmente, consiguió reanimarla con un par de zarandeos suaves y algo de paciencia.
-¿Donde...?-preguntó Floramon, paseando los ojos aguamarina alrededor de Luna. Sin duda estaba buscando a Leonardo, y sin duda estaba extrañada de estar en un sitio tan oscuro.
-Tú quédate tranquila un minutito. Yo revisaré el lugar-dijo Luna a regañadientes. Si había algo más grande que su miedo a aventurarse a revisar el lugar, eran sus ansias de salir de allí, así que volvió hasta el pozo y dejó que Floramon se tomara unos instantes para ubicarse. Luna caminaba mientras intentaba limpiar sus gafas un poco, ya que estaban llenas de suciedad. Al alzar un poco la vista cuando comenzó a caminar por la ruta se percató de que no parecía ser echa con cuidado; de hecho, parecía que se había creado aquella entrada tirando parte de la pared del pozo. Luna trastabilló, y estuvo a punto de caer, con las gafas en la mano.
-¡Luna! Ten cuidado, las raíces que recorren el lugar son muy grandes-advirtió Floramon. Luna apenas podía verlas debido al agua, pero las que recorrían la pared y el techo de la improvisada ruta podían darle una idea; eran tan gruesas como una persona, y atravesaban la pared, levantado parte de ella y creando deformaciones enla piedra. Hacían lo mismo en el suelo, por lo que Luna caminó más lento y con más cuidado.Tras ponerse las gafas y seguir caminando, Luna observó que se extendían hacia la parte derribada del pozo y supuso que habían conseguido crecer tanto gracias a la humedad, tanto que habían derribado aquel trozo de pared que debía cerrar el pozo.
-Seguro que cerca de aquí hay un árbol de grandes proporciones. Quizás un eucalipto, un álamo, un baobab o algún ficus. Sus raíces pueden sobrepasar los cien metros en todas direcciones y son muy gruesas. ¿Sabías que hay humanos que usan las raíces de los baobab para crear sus propios hogares dentro de estos?
-Vivir dentro de un árbol...sería genial-susurró Luna. Era el tipo de lugar alejado y forticficado que quería como casa.
-En cuanto a nuestra localización actual...¿en qué lugar nos encontramos?
-Estamos en lo que parece que funcionó alguna vez como un pozo-Luna no pudo evitar esbozar una expresión de asco al sumergir casi por completo su cuerpo en aquel agua tan oscura, estancada. Al abrir los ojos bajo el agua había visto que estaba muy turbia, pero era mucho peor de lo que parecía ya que incluso emitía cierto olor a descomposición Al observar restos de troncos podridos flotando, Luna añadió con sarcasmo-Pero no ahora, desde luego.
-El jardín estaba muy cuidado. Me pregunto la razón por la que este pozo se haya en tan mal estado en contraste con el resto.
-Bueno-Luna alzó la mirada hacia arriba, mientras se rascaba el pelo. Odiaba pensar que toda esa suciedad del agua también estaba en su pelo. Entonces Luna se percató de un detalle; era curioso, el círculo por el que se les mostraba la superficie debía estar recortado por la silueta de una polea para poder utilizar un cubo y sacar agua, pero no la había. Sin ella era imposible usar el pozo para sacar agua-No hay mecanismo de polea, así que quizás este pozo hace tiempo que fue cerrado. Por no hablar de éste agua estancada...
-¡Qué...qué lista eres, Luna!-exclamó su digimon. Luna se sonrojó. No era algo que cualquier otra persona no hubiera podido sonsacar-Pero, ¿qué razón llevaría a cerrar este pozo? Seguro que era de gran utilidad para el lugar y sus antigüos habitantes.
-Eso quisiera saber...o quizás no. Prefiero salir, de todas maneras-dijo Luna dubitativamente. Siguió observando. No parecía haber nada más de interés, pero su mirada se encontró con lo que parecían unos salientes en la pared. Luna se aproximó a la pared, fijando la vista en una especie de ganchos de hierros anclados a la pared, que parecían servir para subir hacia arriba. Puso la mano en una de ellas, y al quitarla, notó marcas de suciedad y óxido en su mano, por lo que arqueó una ceja. “Quizás debamos buscar otra manera antes de probarla. No quiero que el hierro se deshaga entre mis manos y caer...”. Tras comprobar que no había más que raices provocando bultos en la paredes y agua sucia, volvió hacia el pasadizo donde Floramon preguntó a Luna si había encontrado algo.
Luna dejó caer los hombros y con tono cansado, comenzó a constestar:
-Parec...-sus palabras se interrumpieron ya que notó una presión alrededor del tobillo, tras lo que inmediatamente volvió a ser arrastrada por aquello que las había llevado hasta allí. Luna no pudo evitar comenzar a gritar y llorar. Debido al poco nivel del agua, prácticamente sentía que la arrastraban por el suelo; la zona de los codos y las rodillas en su ropa se rajó y se tiñó levemente de rojo. Cuando por unos segundos era capaz de alzar la cabeza sobre el agua, podía oírse que pedía ayuda, sin embargo no paraba de tragar ese agua asquerosa. Luna sintió que vomitaría de no estar tan ocupada buscando una bocanada de aire pasajera, bocanada que sólo servía para darle más aliento a gritar y seguir tragando agua. Sentía que se desmayaría de un momento a otro, y realmente pensaba que era lo mejor, pero su cuerpo no le dio ese lujo, así que sintió el tortuoso viaje durante varios segundos, los suficientes para sentir que era una eternidad.
Finalmente, acabó. El horrible y tortuoso viaje la había dejado lejos de Floramon, echada hacia arriba, con la pierna aún sujeta por unas ramas que le hacían sentir dolor por la fuerza con la que la sujetaba, además de las pequeñas espinas. Ante ella, había lo que parecía un digimon flor; por supuesto, era todo lo contrario a cualquier evolución de Floramon, ya que este digimon flor tenía un aspecto más savaje. Luna estaba ante una Blossomon, si bien la tamer no podía saberlo porque su digivice estaba fuera del pozo. La tamer no estaba pensando en ese último detalle sino que más bien en su mente sólo cabía el miedo al ver cómo la digimon la miraba fija y amenazadoramente. A pesar de que la asustada tamer había intentado huir corriendo, sólo consiguió que su huida se viera frustrada sin que apenas pudiera avanzar dos metros.
-Déjame...-susurró Luna, presa de un temblor que la hacía estremecerse y con apenas un hilo de voz entre sollozos. Estaba tirada en el suelo, debido a que la Blossomon había hecho que la enredadera enrrollada en torno al pie de Luna la hiciera caer, por lo que la única salida que encontró la tamer fue retroceder hasta chocarse con una pared.
Floramon fue incapaz de hacer nada cuando su tamer fue súbitamente arrastrada de nuevo. Sólo podía guiarse por los ahogados sollozos de Luna y el sonido del agua rompiéndose, además de la estela de burbujas que dejaba la tamer al intentar respirar, ya que ver a través del agua era imposible debido a la suciedad que había, por lo que la digimon, terriblemente proecupada por Luna, comenzó a deambular por las grutas, acompañada sólo por los sollozos de Luna y el sonido del agua estremecerse cada vez que Floramon daba un paso.
-¿Luna? ¿Luna?-comenzó a llamar.
En esos momentos, Floramon sintió que todo el túnel reverberaba unas palabras que la Blossomon había pronunciado. Era como si el propio lugar también pronunciara aquellas palabras, formando una horrible eco que sólo Floramon pudo oír. “Dos pequeños pajaritos más han caído en mi trampa. Sólo es cuestión de tiempo”. Al ver a la Blossomon articular estas palabras Luna no pudo evitar intentar comenzar a retroceder, sin embargo su espalda se encontró con una pared. Floramon esaba segura de que no era una mera cuestión de eco; algo más grande, como si aquello fuera la boca de un gran monstruo lo pronunciaba, y Floramon supo que Luna y ella tenían el riesgo de correr la misma suerte que quienes habían entrado anteriormente. Su intuición le decía que era una suerte funesta y oscura. Así que comenzó a pronunciar en alto el nombre de Luna, mientras corría, provocando que sus apresurados pasos crearan un sonido de agua siendo removida. Luna se sintió aliviada al oírlos y ver a Floramon doblar una esquina. La tamer gateó hacia Flora, agarrándola de la cintura mientras sollozaba y escupía agua. Floramon envolvió a Luna entre sus brazos para tranquilizarla, pero tenía una expresión de seriedad en el rostro. No era sólo aquel digimon. “Tengo que luchar” pensó Floramon “El digivice...” pensó, girando la cabeza y mirando a Luna:
-¡Luna, escapa!
-¡Pero...!
-¡Tu digivice, lo necesitamos!¡Se te cayó arriba!¡Debes ir!-exclamó, zarandeando a su tamer, que al ver la mirada de urgencia en su normalmente tranquila digimon salió corriendo sin demora, aunque completamente aterrada. No tuvo más remedio que tras adentrarse de nuevo en las cenagosas aguas del pozo, utilizar las oxidadas piezas metálicas para subir. Emitieron una especie de crujido cuando comenzó a subir, y a medida que veía cómo el fondo del pozo desaparecía y el cielo se encontraba más cerca, el crujido se alargaba como una larga queja del viejo lugar. Luna no podía evitar ir girando de vez en cuando la cabeza y emitir unos gemidos de miedo.
-¿Flora?-Luna bajó la mirada, en busca de su compañera digimon, pero no podía ver nada. Se oían algunos sonidos de chapoteantes en el agua, probablemente era Floramon moviéndose por el pozo y las grutas. Luna abrió los ojos de miedo, y sintió que por poco se caía debido a que sus manos habían empezado a temblar, sin embargo, algo dentro de ella la obligó a seguir escalando lo más rápido posible; aunque no era una escaladora profesional y su condición física dejaba que desear consiguió llegar en relativamente poco tiempo a costa de sonoros jadeos, así que tras mirar hacia el cielo, que quedaba tan cerca y a la vez tan lejos, volvió a mirar hacia abajo y trató de decir con un tono optimista que, al ser tan extraño en Luna, sonó muy desesperanzador-¡Flora! ¡Ya casi estoy! ¿Vale? ¡Estoy a punto...! ¿Me oyes?
No recibió respuesta alguna. Luna no pudo evitar encarnar las cejas de preocupación y preguntar en un leve susurro: ¿Flo...Flora...?. Su labio inferior temblaba a causa de la presión, y de la presión que le provocó el creer oír al lugar gritar de frustración, cosa que achacó a la creciente presión. Negó con la cabeza, aupándose para salir del pozo...
-Si tan sólo pudiera alcanzar mi digvice-susurró.
Como temió, la argolla en la que tenía apoyado el pie derecho se desprendió, para luego caer la izquierda. Notaba como su cuerpo estaba colgado encima de la oscuridad, que parecía un monstruo. Y quién sabe qué estaba ocurriendo con Floramon. No oía ruidos.
-¡Necesito mi digivice!-gritó, presa de la importencia.
Enseguida corrió hasta el digimon, y comenzó a arrancar las lianas de su pelaje. Las arrojó a un lado.
-¡Eh!¿Estás bien?-zarandeó al digimon. Antes de poder fijarse en qué digimon era, pudo ver que las lianas serpenteaban hacia él para lanzarse como una peligrosa serpiente en agonía. Rápidamente cogió el libro que sujetaba el digimon y lo interpuso entre las lianas y él, que comenzaron a absorver la data del libro. Leonardo arqueó una ceja; se preguntaba qué hacía con los organismos vivos. Las lianas, tras hacer desaparecer el libro en datos, se enrollaron haciendo unos espasmos agónicos antes de desaparecer. “Luna, Flora, debéis tener mucho cuidado. Este lugar es una trampa mortal” pensó, entrecerrando los ojos. Enseguida se acercó al digimon y lo ayudó a levanarse mientras seguía hablándole para hacerle despertar.
Luna suspiró, mirando a su alrededor, aún agachada frente a las flores mientras meditaba. El lugar parecía inmenso...¿por dónde se suponían que iba a empezar? Y lo más importante, ¿dónde estaba Cadejo? Por unos instantes, se quedó preguntándose en qué tipo de lugar estaba Leonardo, pero, repentinamente cualquier interrogante se evaporó, porque Luna sintió que la tiraban al suelo.
Instintivamente se agarró a Floramon. Cuando se percató, vio que tenía una gruesa liana aferrándose a su pierna y subiendo hacia la cintura. El digivice había caído varios metros más allá. Temiéndose lo peor, soltó a Floramon y trató de alcanzar el digivice. En ese momento oyó a Floramon gritar, y cuando giró la cabeza hacia atrás vio que lo mismo que agarraba y la constreñía arrastaba a Flora hacia un pozo cercano. Estiró el brazo todo lo que pudo, pero sus peores temores se hicieron realidad y sintió cómo las raices lla raptaban a ella también. Vio en un miliisegundo el, cielo, también el monasterio, las flores y la hierba. Luego, Luna sintió que una sensación de frío y humedad la rodeaba y la envolvía. Apenas podía mantener la vista en un punto fijo, incluso si se había asegurado de conservar las gafas, por lo que veía como un dfuso círculo se movía intermitentemente, pero que se alejaba. Alzó la mano, porque en el círculo estaba el cielo, y a su alrededor, la oscuridad. Podía ver borrosamente su mano, hacer un amago de tocarlo, pero estaba muy lejos. Intentó respirar, pero aquella oscuridad parecía meterse también dentro de sí como si fuera agua, lo que provocó que Luna tosiera. Un hilito de burbujas ascendió, y Luna acabó tratando de ascender sin saber aún demasiado bien que había caído en un pozo con agua. En cuanto sus pulmones alcanzaron aire, hicieron una sonora y honda inspiración.
Se percató de que el círculo era el borde del pozo, y que la oscuridad era agua. “He tenido suerte... probablemente de no haber agua, me habría matado...” pensó Luna, moviendo las piernas para mantenerse a flote. El nivel del agua era bastante alto, y hacía pie, pero de puntillas. Giró la cabeza, buscando a Floramon, y no la encontró en la superficie; la digimon no era muy buena nadadora, por lo que Luna supo que tenía que sentirse preocupada. El agua, aún removiéndose por la caída de ambas, golpeaba la cara de Luna, dificultando aún más la tarea de buscar en la semipenumbra. Se sumergió, y encontró a Floramon, que sí parecía haberse atontado con el golpe y se hundía en las turbias aguas sin remedio. La agarró con fuerza sacarla a la superficie, y la cargó. Aunque no paraba de preguntarse insistentemente si estaban a salvo de aquello que las había atacado y qué era, Luna sabía que necesitaba ocuparse de otras cosas en ese preciso instante; buscó con urgencia a su alrededor. No aguantaría mucho manteniéndose a flote ya que la temperatura baja del agua hacía que se le agarrotasen los músculos. No podía hacer otra cosa que examinar el lugar a grandes rasgos, y sin mucho detalle. Para empezar, el agua estaba sucia y emitía olor a pudredumbre. Estaban en lo que le pareció a Luna un pozo, con su estructura circular típica, salvo un detalle; una de las paredes de la circunferencia parecía haber caído y llevaba a una especie de gruta natural. Luna nadó hacia allí, cargando a Floramon y se alegró de notar que el nivel del agua se hacía menor gradualmente, hasta el punto que cubría a Floramon por las rodillas. Recostó a la digimon en una pared, y finalmente, consiguió reanimarla con un par de zarandeos suaves y algo de paciencia.
-¿Donde...?-preguntó Floramon, paseando los ojos aguamarina alrededor de Luna. Sin duda estaba buscando a Leonardo, y sin duda estaba extrañada de estar en un sitio tan oscuro.
-Tú quédate tranquila un minutito. Yo revisaré el lugar-dijo Luna a regañadientes. Si había algo más grande que su miedo a aventurarse a revisar el lugar, eran sus ansias de salir de allí, así que volvió hasta el pozo y dejó que Floramon se tomara unos instantes para ubicarse. Luna caminaba mientras intentaba limpiar sus gafas un poco, ya que estaban llenas de suciedad. Al alzar un poco la vista cuando comenzó a caminar por la ruta se percató de que no parecía ser echa con cuidado; de hecho, parecía que se había creado aquella entrada tirando parte de la pared del pozo. Luna trastabilló, y estuvo a punto de caer, con las gafas en la mano.
-¡Luna! Ten cuidado, las raíces que recorren el lugar son muy grandes-advirtió Floramon. Luna apenas podía verlas debido al agua, pero las que recorrían la pared y el techo de la improvisada ruta podían darle una idea; eran tan gruesas como una persona, y atravesaban la pared, levantado parte de ella y creando deformaciones enla piedra. Hacían lo mismo en el suelo, por lo que Luna caminó más lento y con más cuidado.Tras ponerse las gafas y seguir caminando, Luna observó que se extendían hacia la parte derribada del pozo y supuso que habían conseguido crecer tanto gracias a la humedad, tanto que habían derribado aquel trozo de pared que debía cerrar el pozo.
-Seguro que cerca de aquí hay un árbol de grandes proporciones. Quizás un eucalipto, un álamo, un baobab o algún ficus. Sus raíces pueden sobrepasar los cien metros en todas direcciones y son muy gruesas. ¿Sabías que hay humanos que usan las raíces de los baobab para crear sus propios hogares dentro de estos?
-Vivir dentro de un árbol...sería genial-susurró Luna. Era el tipo de lugar alejado y forticficado que quería como casa.
-En cuanto a nuestra localización actual...¿en qué lugar nos encontramos?
-Estamos en lo que parece que funcionó alguna vez como un pozo-Luna no pudo evitar esbozar una expresión de asco al sumergir casi por completo su cuerpo en aquel agua tan oscura, estancada. Al abrir los ojos bajo el agua había visto que estaba muy turbia, pero era mucho peor de lo que parecía ya que incluso emitía cierto olor a descomposición Al observar restos de troncos podridos flotando, Luna añadió con sarcasmo-Pero no ahora, desde luego.
-El jardín estaba muy cuidado. Me pregunto la razón por la que este pozo se haya en tan mal estado en contraste con el resto.
-Bueno-Luna alzó la mirada hacia arriba, mientras se rascaba el pelo. Odiaba pensar que toda esa suciedad del agua también estaba en su pelo. Entonces Luna se percató de un detalle; era curioso, el círculo por el que se les mostraba la superficie debía estar recortado por la silueta de una polea para poder utilizar un cubo y sacar agua, pero no la había. Sin ella era imposible usar el pozo para sacar agua-No hay mecanismo de polea, así que quizás este pozo hace tiempo que fue cerrado. Por no hablar de éste agua estancada...
-¡Qué...qué lista eres, Luna!-exclamó su digimon. Luna se sonrojó. No era algo que cualquier otra persona no hubiera podido sonsacar-Pero, ¿qué razón llevaría a cerrar este pozo? Seguro que era de gran utilidad para el lugar y sus antigüos habitantes.
-Eso quisiera saber...o quizás no. Prefiero salir, de todas maneras-dijo Luna dubitativamente. Siguió observando. No parecía haber nada más de interés, pero su mirada se encontró con lo que parecían unos salientes en la pared. Luna se aproximó a la pared, fijando la vista en una especie de ganchos de hierros anclados a la pared, que parecían servir para subir hacia arriba. Puso la mano en una de ellas, y al quitarla, notó marcas de suciedad y óxido en su mano, por lo que arqueó una ceja. “Quizás debamos buscar otra manera antes de probarla. No quiero que el hierro se deshaga entre mis manos y caer...”. Tras comprobar que no había más que raices provocando bultos en la paredes y agua sucia, volvió hacia el pasadizo donde Floramon preguntó a Luna si había encontrado algo.
Luna dejó caer los hombros y con tono cansado, comenzó a constestar:
-Parec...-sus palabras se interrumpieron ya que notó una presión alrededor del tobillo, tras lo que inmediatamente volvió a ser arrastrada por aquello que las había llevado hasta allí. Luna no pudo evitar comenzar a gritar y llorar. Debido al poco nivel del agua, prácticamente sentía que la arrastraban por el suelo; la zona de los codos y las rodillas en su ropa se rajó y se tiñó levemente de rojo. Cuando por unos segundos era capaz de alzar la cabeza sobre el agua, podía oírse que pedía ayuda, sin embargo no paraba de tragar ese agua asquerosa. Luna sintió que vomitaría de no estar tan ocupada buscando una bocanada de aire pasajera, bocanada que sólo servía para darle más aliento a gritar y seguir tragando agua. Sentía que se desmayaría de un momento a otro, y realmente pensaba que era lo mejor, pero su cuerpo no le dio ese lujo, así que sintió el tortuoso viaje durante varios segundos, los suficientes para sentir que era una eternidad.
Finalmente, acabó. El horrible y tortuoso viaje la había dejado lejos de Floramon, echada hacia arriba, con la pierna aún sujeta por unas ramas que le hacían sentir dolor por la fuerza con la que la sujetaba, además de las pequeñas espinas. Ante ella, había lo que parecía un digimon flor; por supuesto, era todo lo contrario a cualquier evolución de Floramon, ya que este digimon flor tenía un aspecto más savaje. Luna estaba ante una Blossomon, si bien la tamer no podía saberlo porque su digivice estaba fuera del pozo. La tamer no estaba pensando en ese último detalle sino que más bien en su mente sólo cabía el miedo al ver cómo la digimon la miraba fija y amenazadoramente. A pesar de que la asustada tamer había intentado huir corriendo, sólo consiguió que su huida se viera frustrada sin que apenas pudiera avanzar dos metros.
-Déjame...-susurró Luna, presa de un temblor que la hacía estremecerse y con apenas un hilo de voz entre sollozos. Estaba tirada en el suelo, debido a que la Blossomon había hecho que la enredadera enrrollada en torno al pie de Luna la hiciera caer, por lo que la única salida que encontró la tamer fue retroceder hasta chocarse con una pared.
Floramon fue incapaz de hacer nada cuando su tamer fue súbitamente arrastrada de nuevo. Sólo podía guiarse por los ahogados sollozos de Luna y el sonido del agua rompiéndose, además de la estela de burbujas que dejaba la tamer al intentar respirar, ya que ver a través del agua era imposible debido a la suciedad que había, por lo que la digimon, terriblemente proecupada por Luna, comenzó a deambular por las grutas, acompañada sólo por los sollozos de Luna y el sonido del agua estremecerse cada vez que Floramon daba un paso.
-¿Luna? ¿Luna?-comenzó a llamar.
En esos momentos, Floramon sintió que todo el túnel reverberaba unas palabras que la Blossomon había pronunciado. Era como si el propio lugar también pronunciara aquellas palabras, formando una horrible eco que sólo Floramon pudo oír. “Dos pequeños pajaritos más han caído en mi trampa. Sólo es cuestión de tiempo”. Al ver a la Blossomon articular estas palabras Luna no pudo evitar intentar comenzar a retroceder, sin embargo su espalda se encontró con una pared. Floramon esaba segura de que no era una mera cuestión de eco; algo más grande, como si aquello fuera la boca de un gran monstruo lo pronunciaba, y Floramon supo que Luna y ella tenían el riesgo de correr la misma suerte que quienes habían entrado anteriormente. Su intuición le decía que era una suerte funesta y oscura. Así que comenzó a pronunciar en alto el nombre de Luna, mientras corría, provocando que sus apresurados pasos crearan un sonido de agua siendo removida. Luna se sintió aliviada al oírlos y ver a Floramon doblar una esquina. La tamer gateó hacia Flora, agarrándola de la cintura mientras sollozaba y escupía agua. Floramon envolvió a Luna entre sus brazos para tranquilizarla, pero tenía una expresión de seriedad en el rostro. No era sólo aquel digimon. “Tengo que luchar” pensó Floramon “El digivice...” pensó, girando la cabeza y mirando a Luna:
-¡Luna, escapa!
-¡Pero...!
-¡Tu digivice, lo necesitamos!¡Se te cayó arriba!¡Debes ir!-exclamó, zarandeando a su tamer, que al ver la mirada de urgencia en su normalmente tranquila digimon salió corriendo sin demora, aunque completamente aterrada. No tuvo más remedio que tras adentrarse de nuevo en las cenagosas aguas del pozo, utilizar las oxidadas piezas metálicas para subir. Emitieron una especie de crujido cuando comenzó a subir, y a medida que veía cómo el fondo del pozo desaparecía y el cielo se encontraba más cerca, el crujido se alargaba como una larga queja del viejo lugar. Luna no podía evitar ir girando de vez en cuando la cabeza y emitir unos gemidos de miedo.
-¿Flora?-Luna bajó la mirada, en busca de su compañera digimon, pero no podía ver nada. Se oían algunos sonidos de chapoteantes en el agua, probablemente era Floramon moviéndose por el pozo y las grutas. Luna abrió los ojos de miedo, y sintió que por poco se caía debido a que sus manos habían empezado a temblar, sin embargo, algo dentro de ella la obligó a seguir escalando lo más rápido posible; aunque no era una escaladora profesional y su condición física dejaba que desear consiguió llegar en relativamente poco tiempo a costa de sonoros jadeos, así que tras mirar hacia el cielo, que quedaba tan cerca y a la vez tan lejos, volvió a mirar hacia abajo y trató de decir con un tono optimista que, al ser tan extraño en Luna, sonó muy desesperanzador-¡Flora! ¡Ya casi estoy! ¿Vale? ¡Estoy a punto...! ¿Me oyes?
No recibió respuesta alguna. Luna no pudo evitar encarnar las cejas de preocupación y preguntar en un leve susurro: ¿Flo...Flora...?. Su labio inferior temblaba a causa de la presión, y de la presión que le provocó el creer oír al lugar gritar de frustración, cosa que achacó a la creciente presión. Negó con la cabeza, aupándose para salir del pozo...
-Si tan sólo pudiera alcanzar mi digvice-susurró.
Como temió, la argolla en la que tenía apoyado el pie derecho se desprendió, para luego caer la izquierda. Notaba como su cuerpo estaba colgado encima de la oscuridad, que parecía un monstruo. Y quién sabe qué estaba ocurriendo con Floramon. No oía ruidos.
-¡Necesito mi digivice!-gritó, presa de la importencia.
- Off:
Algo así, pero con enredaderas en la paredes y agua susia (?)
- Tamer & Digimon
- Faltas :1Prueba de Rol :ADigi Puntos :402Ficha :Nivel On Rol :RookieNivel On Rol de los Digi Aliados :Leonardo
Champion
Icono :Rango y Unidad :Luna Naitoenjeru
Rango: Soldado
División: Four Holy Beast
Unidad/Sub-division: North Shield Tortule
Flora
Rango: Soldado
División: Four Holy Beast
Unidad/Sub-division: North Shield Tortule
Rango y Unidad Digi Aliado :Leonardo
Rango: Soldado
División: Four Holy Beast
Unidad/Sub-division: North Shield TortuleInventario :
Luna Kobayashi
Re: El treceavo perdido [libre]
Sigrun
Aquel jardín era inmenso, pero poco a poco el templo parecía más cercano. Debíamos darnos prisa y llegar hasta el treceavo Royal Knight antes que Cadejo. No soportaría la idea de que su data se encuentre en manos del Chaos Empire. A saber la clase de uso que podrían darle. Mejor no pienso en el tema.
- No os preocupéis- dijo Dracomon que también vio que Ulforce parecía preocupado- Seguro que llegaremos antes y lograremos proteger al Royal Knight.
- Gracias por intentar animar, Dracomon- le agradeció Ulforce.
Caminamos un rato más hasta que Dracomon se detuvo.
- ¿Qué pasa?- le pregunté.
- Hay algo allí- dijo antes de acercarse hasta lo que había visto- Es un D-Arc.
¿Un D-Arc? ¿Qué hacía un digivice tirado en el suelo? No había ningún otro tamer por los alrededores. Ulforce y yo nos acercamos a Dracomon que llevaba el D-arc en las manos. Me quedé de piedra cuando lo reconocí.
- Es el digivice de Luna- dije preocupada.
- Pero no veo a…- comenzó a decir Ulforce antes de que le interrumpiera un grito.
Temiéndonos lo peor, corrimos hacia el lugar donde provenía el grito, que resultó ser un pozo que apestaba a putrefacción. Lo peor de todo, vimos a Luna agarrada a unos hierros que parecían resquebrajarse por el óxido.
- ¡Luna!- la llamé mientras me tumbaba al borde del pozo y extendía mi mano para tratar de llegar hasta ella- ¡Dame la mano, deprisa!
Ulforce
Mientras Sigrun ayudaba a Luna a subir yo miraba el fondo del pozo, Flora siempre está con su tamer. ¿Acaso está allí abajo?
- Ulforce- me llamó Dracomon aún con el digivice de Luna en las manos- Me cuesta olerlo por el mal olor del pozo, pero creo que Flora está allí abajo. Lo que no sé es a qué distancia.
- ¿Está allí abajo?- me preguntó volviendo a mirar al fondo.
Luego miré al templo, esto me entretendría bastante, pero no puedo dejar a Flora en esta situación.
- Lo siento, hermano- murmuré- Tendrás que esperar un poco más.
Sin dudarlo, salté al interior del pozo hasta caer en el agua del fondo. Allí el olor era aún más intenso, pero no pensaba echarme atrás. Flora podría estar en problemas y su tamer no podrá ayudarla mientras no tenga el digivice.
Encontré una abertura en la pared del pozo y nadé hasta allí. El nivel del agua bajaba y pronto hice pie y pude caminar. Si Flora estaba allí la encontraría, aunque si el peligro resulta ser mayor del que pienso es probable que necesite que Sigrun me siga para poder evolucionar. De todos modos se que ella no tendrá ningún inconveniente en saltar también.
- Tamer & Digimon
- Prueba de Rol :ADigi Puntos :642Cuentas :Ficha :Relaciones :Cronologia :NPCs :Nivel On Rol :Burst Mode/Future ModeNivel On Rol de los Digi Aliados :Draco: Ultimate [BlackMetalGreymon]
Kara: Rookie [Dorumon]Icono :Rango y Unidad :Sigrun Vinter
Rango: Hand of the King y Holy Knight
Unidad: Todo el clan (Blue Thunder Dragons)
Ulforce
Rango: Hand of the King y Holy Knight
Unidad: Todo el clan (Blue Thunder Dragons)Rango y Unidad Digi Aliado :Draco
Rango: Knight
Unidad: Dragons DestroyersInventario :
Sigrun Vinter
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